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Introducción

Una aproximación histórica al Trabajo Social individualizado

Introducción

Las personas construyen el mundo siguiendo distintos caminos, a veces de manera


consciente, otras sin darse cuenta, siempre interactuando con otros seres humanos, o
con las instituciones que contribuyen a crear y mantener, ofreciendo distintas
modalidades de ayuda a los considerados estigmatizadamente pobres, mendigos,
vagabundos , indigentes, desamparados, marginados, necesitados o excluidos sociales.

1. El nacimiento de la Sociedad para la Organización de la Caridad (COS)

Junto con la Ley de pobres y la filantropía, nace la Sociedad para la Organización la


Caridad – Charity Organization Society (COS, Londres 1869), que se implantó en
Inglaterra (El TS hunde sus raíces en el largo reinado de Victoria de Inglaterra [1837-
1901]), y posteriormente en Estados Unidos (ubicado su nacimiento durante la crisis
económica de 1873 y la caída de la Bolsa de Viena). La COS tuvo un impacto profundo
en el nacimiento moderno del Trabajo Social y fue el primer intento científico al
denunciar que la caridad no erradicaba la pobreza, sino que creaba personas
dependientes de las instituciones y de la burguesía que ofrecía las limosnas.

2. Las precursoras del Trabajo Social individualizado

Los precursores del Trabajo Social de Casos –casework - ofrecieron modelos de


intervención basados en la atención individual a las personas, con el objeto de
desarrollar su personalidad, y como un medio para alcanzar su autosuficiencia y su
participación en el logro de los objetivos fijados.

 Octavia Hill: precursora del TS individualizado y una de las fundadoras de la


COS londinense. Se podría decir que Hill fue una pionera en la reforma de la
política social de la vivienda. Aunque centrada en la compra, alquiler y reforma
de las viviendas, sus mayores esfuerzos estuvieron también dirigidos a
preservar y asegurar los espacios abiertos de uso público, como los parques
para las personas mayores o los juegos recreativos para niños.

 Mary Ellen Richmond: el contexto donde se desarrolló su obra se caracterizó


por la preocupación de sentar las bases del conocimiento científico, frente al
denominado conocimiento vulgar, planteando que a cada problema social le
correspondía unas causas que deberían ser tratadas sin ceñirse exclusivamente
a los efectos de los problemas individuales, sino abordándolos desde las causas
que los generaban.
Fue una figura central de la Charity Organization Society (C.O.S.), de la que fue
tesorera y, más tarde, secretaria general y directora. No preocupada por el TS
como disciplina cuanto su transformación como profesión bien fundamentada.
Autora del libro “¿Qué es el trabajo social con casos?”, su principal legado es la
metodología en la relación social de ayuda (RSA), se convertirá en la gran
aportación del TS a las Ciencias Sociales. Su método se basaba en la atención
individualizada, su modelo en el análisis detallado de los hechos, y sus ideas en
la teoría social, pero con un gran componente psicológico.

 Amy Gordon Hamilton: autora del libro “Teoría y práctica del trabajo social de
casos”, Profesora de la Escuela de Trabajo Social en Nueva York, y cercana a la
corriente psicoanalítica de Freud. Para Hamilton todos los casos sociales se
componen de una persona, la situación que sufre, una realidad objetiva y el
significado que esa realidad tiene para la persona que la experimenta. De ahí
que se hable por primera vez del caso psicosocial. El caso social, para esta
autora, se compone de factores internos del sujeto (personalidad, emociones,
pensamientos, etc.) y externos (los relativos al medio ambiente), estudiándolo
en su relación con sus experiencias sociales, así como con sus sentimientos
sobre esas experiencias.
La metodología para el caso social individual la describe a través de los
siguientes pasos: estudio, diagnóstico o valoración <<juicio diagnóstico>>y,
finalmente, tratamiento. También describe como existen tres niveles en el
diagnóstico social: descriptivo, causal y evaluativo.

 Charlotte Towle: Directora de la Dirección del Menor en N.Y. y,


posteriormente, profesora de la Facultad de Servicios Sociales de la
Universidad de Chicago. Definió el trabajo social como “ El propósito de hacer
que un individuo obtuviera una vida más productiva de acuerdo con sus
potencialidades”. Para esta autora el trabajo social de casos nace del vínculo
que se produce entre el comportamiento humano y la administración de los
programas de bienestar social.

 Helen Harris Perlman: profesora de trabajo social en la universidad de Chicago.


Define el trabajo social individualizado como “Un proceso empleado por
algunas instituciones consagradas a fomentar el bienestar público”.
3. El trabajo social individualizado: definición

3.1. Definición de trabajo social

Tomás Fernández (1992) define Trabajo Social como “una disciplina científica,
metódicamente ordenada y formada que constituye una rama del saber de las ciencias
sociales, porque contribuye a incrementar el funcionamiento individual y social de las
personas y a potenciar sus conocimientos y habilidades para alcanzar su bienestar
social”.

3.2. Definición de trabajo social individualizado

No existe una unanimidad entre los numerosos autores a la hora de definir el concepto
de TSI.

Porter (1911) lo describe como “el método para la comprensión de las necesidades, los
recursos y las necesidades de las personas”.

Biestek (1957) “es un método para fomentar la autodeterminación de los individuos,


frente a sus problemas, a través del uso de los servicios sociales”.

Friedlander (1961) sostuvo que “es la ayuda que se le brinda al individuo para que
mejore sus relaciones sociales y efectúe una adaptación social que le permita llevar una
vida más útil y satisfactoria”.

4. El trabajo social individualizado en Europa

Las influencias del trabajo social individualizado que vinieron de EEUU a Europa
pusieron su énfasis en los modelos psicosociales, fundamentándose en que la
conducta es producto de una serie de interacciones que se producen en la mente, e
influyéndose recíprocamente con el ambiente social, y este influyendo a su vez en la
propia conducta.

En Europa Occidental, hasta los años sesenta la labor de las trabajadoras sociales
estuvo muy dispersa por la cantidad de modalidades que se establecieron en su
intervención.

A partir de los años sesenta, en Europa se produjeron relevantes cambios ideológicos y


conceptuales que plantearon la importancia de los factores sociales en la explicación
de los problemas individuales. Durante estos años también se crearon las condiciones
para que se produjeran los movimientos migratorios internacionales de trabajadores a
gran escala dentro del continente europeo.

Ya en los años setenta, los importantes cambios políticos, económicos y sociales que
se produjeron en Europa facilitaron que las trabajadoras sociales se cuestionaran sus
métodos, basados en los aspectos más psicológicos de la persona, dando más
relevancia a los factores sociales, porque, según las teorías dominantes de la época,
eran los que generaban las necesidades y los problemas. Así el casework recibió
numerosas críticas desde posiciones ideológicas y conceptuales.

En España la influencia que el TS había recibido de otras ciencias sociales no tuvo el


mismo eco, no siendo hasta el proceso de democratización cuando el TS inició un
camino de replanteamiento doctrinal.

5. El trabajo social individualizado en Lationoamérica

En Latinoamérica, los TS en el contexto de subdesarrollo, opresión, dominación y


marginación de los años sesenta, comenzaron a denunciar la inoperancia del Trabajo
Social tradicional.

6. El trabajo social individualizado en la actualidad

En la actualidad, el TS individual se ha vuelto a convertir en un instrumento


fundamental de respuesta a los graves problemas por los que atraviesan las personas,
porque se ha fortalecido a través de su larga experiencia científica y práctica, que se
asienta en sus valores y principios éticos.
Tema 1

La persona: sus necesidades y problemas

Todas las personas pueden atravesar a lo largo de su vida por diferentes circunstancias
y tensiones que les hagan caer en situaciones de vulnerabilidad y riesgo social. Por lo
general, cuando atraviesan estas importantes dificultades, solicitan el apoyo del
trabajo social de casos para reajustar su propio <<Yo>>, en relación con las exigencias y
expectativas de la función social que desempeña en cada momento de su vida:
esposo/a, padre, madre, estudiante, trabajador, o para reajustar algunos aspectos con
el fin de mantener el equilibrio necesario para conseguir sus objetivos cotidianos. Pero
cuando no les es posible lograrlo, necesitan el apoyo denominado <<casework>>, para
superar las necesidades o problemas sobrevenidos, con el objeto desarrollar
habilidades y destrezas que les permitan proseguir de forma autónoma su proyecto de
vida en la dirección marcada por su propia existencia. Para ello, el trabajador social con
casos necesita tener unos conocimientos básicos de algunos aspectos de la psicología:

 El apego: según Bowlby, el apego es un sentimiento que une a los padres con su
hijo a través del vínculo emocional que se crea entre ellos. La teoría del apego
establece que, según cómo nos relacionamos con nuestros cuidadores etapas
iniciales de nuestras vidas, así nos vincularemos posteriormente con nuestros
semejantes en la etapa adulta. Tal es la importancia del apego que diversos
trabajos han confirmado la relación directa entre la clase de apego y un alto
nivel de bienestar subjetivo. Un apego seguro fomenta la felicidad porque
facilita las relaciones donde la persona puede satisfacer necesidades de
autonomía, competencia y afiliación.

 La personalidad: La personalidad puede sintetizarse como el conjunto de


características de sentimientos, emociones, actitudes y hábitos (RM: SEAH)
ligados a la conducta de cada persona que persiste a lo largo del tiempo.

 Las emociones: alteración del ánimo intensa y pasajera, agradable o penosa,


que aparece junto a cierta conmoción somática. Las seis y emociones más
importantes de la persona (universales) son el miedo, el asco, la tristeza, la ira,
la alegría y la sorpresa. Las emociones tienen una clara función adaptativa pero
también se consideran a importantes para la conducta que la persona en tanto
en cuanto cumplen una función social (permite predecir el comportamiento
recíproco de las personas) y motivacional (favorece la aparición de una
conducta motivada dirigida hacia una determinada meta).

 Los sentimientos: surgen como resultado de una emoción que permite que la
persona sea consciente de su estado anímico y que influyen en la
determinación de su conducta. Dicho de otra forma, los sentimientos son la
interpretación que hacemos de las emociones y se pueden regular mediante
nuestros pensamientos.

 Los pensamientos y los trastornos del mismo (preocupaciones, ideas obsesivas,


ideas fóbicas, etc.).

 Los delirios: creencias basadas en experiencias psíquicas complejas por lo


general extrañas, intensas y poco habituales. La persona está convencida de su
veracidad a pesar de que nadie las comparta. Existen diferentes tipos de
delirios (de tipo depresivo, de persecución, de posesión mística o diabóica,
megalómanos o de grandeza, de celos o celotípico, de tipo somático, delirios de
control, de autorreferencia y erotomaníacos).

 Trastornos del estado de ánimo: grupo de trastornos afectivos que engloba los
estados en los que la persona se siente triste o deprimida. Los más importantes
son la depresión, trastorno bipolar o maniaco-depresivo, ciclotímico, etc.).

 Trastornos de personalidad: patrones de comportamiento típicamente


asociados con alteraciones sustanciales en algunas tendencias de
comportamiento de una persona, afectando a varias áreas de su personalidad.
Se distinguen tres grupos: a) Grupo A. Personalidad extraña/excéntrica
(paranoide, esquizoide, esquizotípico; b) Grupo B. personalidad
dramática/errática (antisocial, límite, histriónico, narcisista); c) Grupo C.
Personalidad ansiosa/inhibida (obsesivo, dependiente, evitativo).

 El autoconcepto (conjunto de bienes, creencias, sentimientos , percepciones y


valoraciones que una persona tiene sobre sí misma por la percepción que la
persona quiere saber sobre ella misma , o en relación con las demás, y también
de los valores , metas, ideales percibidos positiva o negativamente) y
autoestima (sentimiento de aceptación y aprecio hacia una mismo, que va
unido al sentimiento de competencia y valía personal).
 La motivación: implica estados internos que dirigen el organismo hacia metas o
fines determinados. Son los deseos o intereses que vuelven a una persona a
realizar determinadas regiones y resistir en ellas para satisfacer una necesidad.

 El afrontamiento: Lazarus y Folkman definieron el afrontamiento como


<<Aquellos esfuerzos cognitivos y conductuales constantemente cambiantes
que se desarrollan para manejar las demandas específicas, externas y/o
internas, que son evaluadas como excedentes o o desbordantes de los recursos
del individuo>>.

Todo ello porque su interiorización intelectual es fundamental para entender y


comprender a la persona objeto de intervención, ya que en su trabajo se encontrará
con múltiples necesidades y problemas a los que tendrá que enfrentarse desde su
labor educativa social y de intervención, para que los usuarios puedan resolver sus
conflictos de forma autónoma y puedan volver a encontrar de nuevo un proyecto de
vida que se ofrezca más seguridad, bienestar y felicidad.
Tema 2

La ética en el Trabajo Social individualizado


1. Las profesiones

Las profesiones relacionadas con la intervención social se han consolidado tratando de


satisfacer necesidades o resolviendo problemas sociales de una ciudadanía a la vez
más consciente de sus ilusiones y de sus derechos, pero también de sus barreras y
limitaciones.

El trabajador social es un profesional vinculado a la acción social cuya formación


académica se manifiesta en la adquisición de un conjunto de competencias, tales
como:

 competencias técnicas (conocimientos),


 metodológicas (habilidades), RM: TEME PERE
 de relación (participativas)
 personales (cualidades y actitudes),

La formación y competencias adquiridas le permiten acceder a una organización


concreta, ocupándose en su cometido profesional de:

 fomentar el bienestar,
 Prevenir y/o atender las dificultades y/o carencias sociales de las personas,
familias, grupos y del medio social en el que viven

1.1. Competencias genéricas (RM: IPC)

 Intervenir en las situaciones (problemas) sociales (de malestar) que viven las
personas, familias, Grupos, organizaciones y comunidades, asistiendo,
manejando conflictos y ejerciendo mediación.
 Participar en la planificación de las políticas sociales
 Contribuir a la ciudadanía activa mediante el empoderamiento y la garantía de
los derechos sociales.

1.2. Competencias específicas


1. Capacidad para trabajar y valorar conjuntamente con personas, familias,
grupos, organizaciones y comunidades su necesidad y circunstancias.
2. Capacidad para planificar, implementar, revisar y evaluar la práctica de trabajo
social en con personas, familias, grupos, organizaciones, comunidades y los
profesionales.
3. Capacidad de apoyar a las personas para que sean capaces de manifestar sus
necesidades, puntos de vista y circunstancias.
4. Capacidad para actuar en la resolución de la situación de riesgo con los
usuarios así como para las propias y las de los colegas de la profesión.
5. Capacidad para administrar y ser responsable con supervisión y apoyo de la
propia práctica dentro de la organización.
6. Capacidad para demostrar competencia profesional en el ejercicio de TS.

2. Ética y deontología

Todos los profesionales que intervienen en la acción social tienen su propia conciencia
ética individual (reglas o principios que rigen la conducta en la práctica del bien),
requiriendo del más alto grado de integridad moral. Se podría decir que la ética
individual es interpersonal, ya que rige el comportamiento en su relación con otras
personas.

Para Etkin “La conciencia ética individual debe ser considerada como una constante
disciplina para la vida, que obliga a la persona a realizar las labores con eficiencia”.

Todos los profesionales del TS disponen de su propia conciencia ética individual, pero
también disponen de una ética profesional que debe ser analizada desde tres
perspectivas:

 Teleológica, análisis de los principios, valores, fines, objetivos o metas de la


profesión.
 Deontológica, código de normas y reglas que regula y orienta la acción
profesional.
 Pragmática, modos de adoptar decisiones y acciones concretas apartado

La deontología, sin embargo, hace referencia al <<conjunto de normas, principios y


reglas éticas que definen los deberes y obligaciones del profesional en el desempeño de
sus funciones>>. Surge como una disciplina que se ocupa de concretar normas en el
ámbito profesional para alcanzar unos fines.

3. Filosofía de la ética profesional


En la dimensión de la axiología (rama de la filosofía que estudia la naturaleza de los
valores y juicios valorativos) de la profesión, es importante conocer los valores que
deben ser considerados como fundamentales en la intervención profesional de los
trabajadores sociales. Ideales democráticos y humanitarios han sido los ejes centrales
de la profesión.

El trabajo social se compromete con las personas y organiza su acción profesional en la


erradicación de la pobreza y en todo tipo de discriminación, encuadrando la
intervención en un compromiso ético-político sobre los distintos tipos de opresión.

El propósito que debe orientar la intervención del trabajador social debe ir dirigido a
mejorar la calidad de vida de sus participantes en un contexto de confidencialidad y de
respeto a la dignidad de todas las personas, apoyando el derecho de elección del
camino que crea más conveniente para su vida y facilitando su crecimiento individual
dentro de su entorno social.

4. Valores y principios

4.1. Valores

Convicciones profundas de las personas que determinan su manera de ser y orientan su


conducta.

Los valores fundamentales del ejercicio profesional en el ámbito del trabajo social
individualizado son, entre otros:

 Libertad
 Justicia social
 Dignidad
 Vida
 Servicio
 Solidaridad
 Integridad
 Paz
 Preservación del medio ambiente
 Formación
 Respeto institucional
 Acción
4.2. Principios

Actitudes consecuentes de un conjunto de valores asumidos que orientan y normalizan


la conducta de una sociedad concreta.

 Consideración individualizada: reconocimiento y compresión de las cualidades


únicas de cada usuario y la utilización diferencial de principios y métodos para
ayudar a cada uno de ellos a conseguir una mejor adaptación social.

 Aceptación del usuario: aceptación de la persona, independientemente de su


condición y tras las valoraciones objetivas institucionales. Implica respeto,
afabilidad, cordialidad, entendimiento, atención, interés, cortesía e interacción

 Autodeterminación: reconocimiento práctico del derecho y la necesidad de elegir


por si mismo y adoptar sus propias decisiones.

 Expresión y combinación de sentimientos

 No enjuiciamiento: hay que tener cuidado con el lenguaje verbal y analógico, las
comparaciones, evitar culpabilizaciones, actitudes fiscalizadoras, etc.

 Confidencialidad

5. Los dilemas éticos y las fases de su discusión

A lo largo de su trayectoria profesional el trabajador social se encontrará con dilemas


éticos que tendrá que resolver a través de una serie de valores y principios,
establecidos en el código deontológico de la profesión que guiará su resolución.

Pero, en otras ocasiones, puede que no sea posible tomar una decisión debido a la
complejidad del dilema ético planteado; en ese caso se recomienda la utilización de un
modelo basado en el análisis y la decisión consensuada de un equipo multidisciplinar,
dentro del cual realiza labor el trabajador social.

Este modelo suele ser beneficioso, ya que ofrece la posibilidad de aunar varias
disciplinas, enriqueciéndose los distintos profesionales de los conocimientos y
experiencias de los demás, abordar entonces el conflicto de la forma más efectiva
posible.
Las diferentes fases de la discusión de dilemas éticos son:

 Afrontar el dilema moral: presentación del dilema con la historia de vida del
usuario.

 Tomar una postura: toma de posesión individual y profesional frente al dilema.

 Discusión del grupo: expresión de la propia opinión y escucha de las diferentes


posiciones. Producir y examinar razones que justifiquen cada una de las
posiciones. Búsqueda de posibles alternativas al dilema.

 Debate general: puesta en común del trabajo en grupo. Calcular las


consecuencias de cada opción.

 Toma de posición individual: reflejar por escrito la situación individual,


señalando los argumentos que la justifiquen, y haciendo constar si la postura
final que se ha adoptado, después del debate, ha cambiado respecto a la que se
tenía al principio.
Tema 3

Procedimiento metodológico del Trabajo Social Individualizado

Introducción

El paradigma actual del conocimiento por excelencia es el método científico, utilizado


con frecuencia por los trabajadores sociales para entender, estudiar y comprender las
realidades sociales a las que se enfrenta cada día.

Su aplicación ha permitido reunir el conocimiento de los hechos sociales en dos


bloques axiológicos fundamentales:

1. Objetivo: intenta generar leyes capaces de predecir los fenómenos sociales


basándose en el estudio de las regularidades → funcionalismo y marxismo.

2. Subjetivo: centrada en el estudio de la subjetividad de la construcción social


que cada persona realiza por sí misma para entender la realidad en la que vive
y se desarrolla → interaccionismo simbólico, fenomenología, existencialismo y
humanismo.

En este sentido, y teniendo en cuenta los dos bloques axiológicos, se podría decir que
el trabajo social orienta de intervención desde tres perspectivas diferentes:

1. Positivista, representada por el rigor y la eficacia objetiva.

2. Crítica, intenta analizar las situaciones de desigualdad e injusticia social.

3. Hermenéutica, acentuando su interés en las interpretaciones de los fenómenos


sociales.

El trabajo social se puede considerar una ciencia porque aglutina una serie de
conocimientos sistematizados mediante un pensamiento reflexivo sobre una materia
concreta: la intervención social.

La aplicación de un procedimiento metodológico, entendido como una secuencia


ordena el da de acciones, ha permitido que la actividad profesional se convierta en una
acción reflexiva y racional, enfocada hacia la consecución de objetivos concretos que
exigen a su vez planificación y seguimiento.
1. Principales características del método en el Trabajo Social individualizado

El método en trabajo social individualizado es:


RM: FIAR ES DE REUPA
 flexible,
 interdependiente,
 adaptable a cada caso,
 racional,
 estructurado,
 dinámico y recursivo,
 estratégico,
 participativo
 reutilizable. También permite conocer la realidad social y transformarla.
 Sencillo

Durante el proceso de cambio, el usuario y trabajador social colaboran activamente en


él, el por este motivo, el método en trabajo social está fundamentado en los aportes
del método científico y del procedimiento de investigación-acción con criterio
temporal. Este modelo evidencia la característica de recursividad propia del
procedimiento metodológico porque permite incorporar tantos ciclos temporales
como variaciones sustanciales se produzcan en la situación problema del caso, e
implementar así la actuación profesional.

La intervención del caso individual se constituye como un proceso complejo de


actuaciones interrelaciones entre sí, con diferentes etapas, ubicadas dentro de
estructuras general del método científico.

2. Fases del método en el Trabajo Social individualizado

Las fases del método en trabajo social individualizado generalmente suele ser cuatro:

1. Diagnóstico social, consiste en recopilar información de un caso, siendo


solamente un elenco de datos.

2. Programación / Diseño de intervención, el elemento clave de esta etapa lo


constituyen los objetivos de trabajo –generales, específicos y operativos- ya
que, en función de estos, se determinan las tareas a llevar a cabo y su
temporalidad.

3. Ejecución: Aplicación del diseño de intervención,

4. Evaluación, es la fase que nutre de recursividad al método y que mayormente


incide en la implementación de la práctica profesional.
La aplicación de los pasos no es única y lineal, sino todo lo contrario, es recursiva y en
forma de espirales dialécticas repetidas entre praxis y teoría , capaces de aunar praxis
y teoría simultáneamente para revisar la efectividad de la intervención y generar
nuevos conocimientos.

El método es el marco en el que se desgajan los procedimientos de sistematización de


la práctica, ordenando sus componentes prácticos y agrupando progresivamente los
principios teóricos derivados de la misma, convirtiéndose así en una fuente fluida de
conocimientos para la profesión.

Tema 4
Diagnóstico social

1. Introducción y definición del concepto de diagnóstico

El diagnóstico social es la primera fase del método en el trabajo social individualizado.


Se define como un “proceso sistemático, flexible y continuo que permite al profesional
establecer un estudio pormenorizado de la situación problema, así como determinar la
línea de intervención futura” (Laura Ponce de León y Tomás Fernández, 2011: 144).

Harris distingue entre 3 tipos de diagnósticos, en función de las características de cada


caso, pudiéndose utilizar los siguientes:

1. Diagnóstico dinámico, determina en qué consiste el problema y qué efectos


provoca, su posible solución, medios y alternativas. Abarca lo que se suele
denominar diagnóstico social y el diagnóstico actual de la funcionalidad del
usuario.

2. Diagnóstico clínico, que suele utilizarse cuando se detecta que el problema


radica en la estructura de la personalidad.

3. Diagnóstico etiológico o genético, estudia las causas y el desarrollo de las


dificultades planteadas.

2. Elementos principales del diagnóstico

Para Helen Harris (1070) el DS comprende un esquema triangular formado por está
tres elementos fundamentales:

2.1. La persona, no debe interpretarse desde la unidimensional de la vida personal


sino desde la complejidad de las influencias que ejercen distintos aspectos
sociales, culturales, económicos y políticos.

2.2. El problema y su naturaleza. Cabe distinguir entre necesidad (carencia de algo),


problema (incapacidad de la persona para reunir los medios suficientes para
cambiar la situación) y demanda (expresión explícita de la necesidad). Estos
tres elementos no tienen por qué coincidir. El análisis de la problemática y el
esclarecimiento de la demanda serán dos aspectos decisivos en la elaboración
de un diagnóstico.
2.3. La institución en la que el trabajador social ejerce sus funciones el mundo.

3. Contenidos del diagnóstico

Se puede dividir en cinco apartados:

3.1. Datos personales (identificación del usuario; fuentes de ingresos;


competencias realidades sociales; aspectos psicológicos/ motivacionales/
existenciales; convivencial personal-familiar; ajustes psicoafectivo; aceptación
social; vida laboral; motivación al empleo; formación académica; capacitación
profesional; vivienda; gastos de la vivienda; otros gastos; salud/ discapacidad/
dependencia; nivel de escolarización; ocio y tiempo libre, etc.).

3.2. Demanda – problema

3.3. Recursos institucionales disponibles

3.4. Datos de la comunidad (ubicación; datos sociodemográficos; servicios sociales;


sensibilización y participación ciudadana; espacio urbano disponible;
adecuación de las viviendas; barreras arquitectónicas; degradación del medio
físico; salubridad del medio físico, etc.).

3.5. Pronóstico – valoración técnica (implica una reflexión profesional sobre toda
información recopilada con anterioridad).

4. El protocolo para la elaboración del diagnóstico en la intervención individual

Comprende los siguientes pasos:

4.1. Recepción de la problemática: primera toma de contacto con la problemática


de la persona. Desde ese momento en el trabajo social puede comenzar a
establecer las primeras hipótesis de trabajo que, a lo largo de intervención, se
podrán verificar o refutar.

4.2. Recopilación de información: en esta fase, por su singularidad, hay cuatro


momentos de especial importancia:

- Selección de las fuentes de información: la principal fuente es la propia


persona pero también pueden ser útiles el grupo familiar, parientes
cercanos, profesionales relacionados con el caso, instituciones de acción
social, fuentes médicas, la escuela, el trabajo, fuentes documentales, etc.
- Primera entrevista: es decisiva porque supone el primer contacto y sirve de
base para la construcción de los cimientos de una comprensión mutua. Es
importante que el trabajo social sea cauteloso al elaborar las conclusiones
iniciales dado que en la primera entrevista el comportamiento del usuario
suele ser confuso.
- Visita a domicilio: ocasión única para poder corroborar parte de
información reunida durante la propia entrevista. La principal ventaja con
respecto a la primera entrevista que la persona se encuentran sobrenatural,
con lo cual su tranquilidad su mayor.
- Entrevista de confirmación de datos.

5. Diagnóstico profesional o valoración técnica: el diagnóstico concluye cuando


interpretan los datos recabados. Es importante que durante todo el proceso de
diagnóstico el usuario tenga una actitud colaboradora y participativa para
esclarecer la situación social, así como intentar encontrar las causas de las
necesidades.

Tema 5

Diseño de intervención
Introducción

El diseño de intervención es la segunda fase del procedimiento metodológico del


Trabajo Social individualizado, después del diagnóstico. Consiste en desarrollar un
documento escrito del plan de trabajo, orientando las acciones hace unos objetivos
concretos, con expectativas de obtener unos resultados.

Las características principales de esta segunda fase del método son:

 Finalidad delimitada por unos objetivos concretos


 Dispone de una estructura, que dota de rigor a la intervención
 Ofrece una orientación

El diseño de intervención individualizada comprende dos tipos de contenidos:

1. Contenido general del DI: alude a una dimensión global que permite al
profesional ir más allá de los compromisos, incorporando los adquiridos con la
organización en la que ejerce sus funciones. El diseño contiene una
programación general que dispone de cuatro niveles de planificación:

 Plan (unidad inicial): formas de ordenamiento superior, que disponen de


menor operatividad. Reúnen una serie de programas que tratan de lograr
unos objetivos comunes.
 Programa (unidad intermedia): conjunto de proyectos relacionados entre
sí, como partes de las acciones encaminadas a alcanzar las metas y
objetivos del plan, dentro de un plazo determinado.
 Proyecto (unidad final): conjunto de actividades concatenadas que
constituye la unidad más pequeña de un programa.
 Actividades

Cuadro 1. Ejemplo de la relación jerárquica Plan > Programa > Proyecto

PLAN PROGRAMAS PROYECTOS


 Encuentros intergeneracionales
Integración
 Voluntarios a domicilios

 Curso de habilidades sociales


Plan gerontológico de la Formación para
URF profesionales  Curso de tratamiento psicosocial en la
enfermedad de Alzheimer

 Grupo de autoayuda
Apoyo al cuidador
 Cuidador online

2. Contenido específico del DI: se incluyen los elementos necesarios para la


realización de la intervención individualizada:
 Necesidad / demanda
 Objetivos
- Realistas
- Factibles
- Pertinentes
- Claros
 Puntos de apoyo
 Intervención profesional
- Acciones a cumplir o tareas
- Técnicas
- Modelos de intervención
- Coordinación de la intervención interprofesional
- Calendario de actuaciones
 Compromisos (acuerdos, negociaciones, contrato)
 Recursos a utilizar
 Indicadores de valoración para revisiones periódicas y evaluación final

Tema 6
Ejecución / Aplicación del diseño de intervención
Introducción

La ejecución de el diseño es la tercera fase del procedimiento metodológico del trabajo


social individualizada, también denominada acción o intervención, en la cual se pone
en práctica la planificación del trabajo que se ha definido en la fase anterior, mediante
la creación de una relación de apoyo profesional, caracterizada por el respeto, la
confianza, la comprensión, la empatía y la cordialidad. La persona tiene que sentirse
escuchada, pero no juzgada, con la finalidad de aliviar sus tristezas, penas, angustias y
resolver sus problemas.

Se considera la fase más activa y operativa del método, porque está caracterizada por
la pericia, la improvisación, la paciencia y la creatividad del profesional que se utiliza
para resolver los imprevistos, dificultades e inconvenientes que siempre pueden surgir
durante todo el proceso.

1. Elementos fundamentales en la aplicación del diseño

El elemento primordial de esta fase lo constituyen los acuerdos adquiridos, mediante


los cuales se llevarán a cabo las acciones planificadas. Los acuerdos son la
manifestación de la convergencia de voluntades con la finalidad de producir efectos
positivos en los problemas planteados. Estos acuerdos reflejados en el contrato
pueden realizarse por escrito o verbalmente (la más habitual), incorporando las
decisiones consensuadas dentro de la historia social para tener constancia de los
compromisos verbales. Existen diferentes tipos de acuerdos:

 Rígidos, como los contratos de unas prestaciones en las que el usuario debe
cumplir los mínimos establecidos.

 Abiertos, supervisados por el trabajo social cuando evalúa los cambios


experimentados durante la intervención.

La utilización del acuerdo del contrato durante la intervención suele traer múltiples
beneficios:

 Aumentar la posibilidad de éxito


 Comprometerse en la solución de sus problemas
 Dotarle de seguridad
 Confianza

Ambos tipos de contrato, escrito o verbal, deberían contener los siguientes elementos:
 Partes vinculantes
 Fecha de inicio y duración
 Objetivos y acciones a cumplir
 Conjunto de necesidades o problemas a tratar
 Metas
 Beneficios y costes de su ejecución
 Estructuración en el tiempo para delimitar citas y seguimientos

2. La comunicación durante la intervención

La comunicación durante la fase permite el intercambio de ideas, hechos y opiniones,


que puede ser:

Verbal Analógica
Oral Paralingüística
Expresión verbal (qué decir, cómo decirlo, la El material relativo a la entonación, la
vocalización, la entonación, el timbre). vocalización, el timbre de voz, la modulación, el
ritmo y la fluidez.
Comunicación oral no directiva (posición + de
escucha activa) vs comunicación oral directiva
(posición + activa y dinámica para la
consecución de objetivos)

Escrita Quinésica
No está sometida a los conceptos de espacio y Hace alusión al lenguaje corporal, explicando
tiempo. Aumenta las posibilidades expresivas y los gestos, y las expresiones faciales, la sonrisa,
la complejidad gramatical, sintáctica y léxica. el contacto ocular, la postura…

Proxémica
Contenido relacionado con la distancia
personal social pudiendo distinguir entre zona
íntima, personal, social y pública

3. Los subprocesos de la aplicación del diseño de intervención

La intervención, además del uso de la comunicación, dispone de una serie de


subprocesos, que pueden ser ordenados linealmente, pero que, en la práctica, pueden
estar superpuestos, como también ocurre con las fases del método:

Información → Orientación / Asesoramiento → Apoyo profesional → Asistencia técnica → Seguimiento /


Evaluaciones periódicas → Derivación (complementaria, puntual o indefinida) → Coordinación (interna o
externa) → Proceso educativo para el cambio

Tema 7
Evaluación de la intervención individualizada

Introducción

La evaluación, también llamada revisión o control, es la última fase del método en


trabajo social individualizado y consiste en el análisis de los resultados obtenidos en la
ejecución de un diseño de intervención, teniendo como parámetros de referencia los
objetivos y metas planificadas con antelación.

Para seleccionar el procedimiento evaluativo, se deben tener en cuenta las siguientes


características:

 Validez. Valorar la capacidad del instrumento de medición para calcular de


forma significativa y adecuada el elemento seleccionado.
 Fiabilidad. Valorar la probabilidad del funcionamiento del procedimiento de
evaluación utilizado.
 Fácil de aplicar. Debe contener elementos sencillos de aplicación para
rentabilizar el tiempo del trabajador social.
 Sensibilidad. Debe detectar las variaciones más sutiles.
 No debe ser reactivo a variables que puedan alterar sus resultados.

La evaluación en TS individualizado deberá estar compuesta por tres contenidos


fundamentales:

 Un marco de referencia que corresponda a la planificación de la institución


 La preparación previa de cómo y de qué manera se llevará a cabo la evaluación
 La aplicación de esta en las acciones individuales.

3. Un marco General que corresponde a la planificación de la institución

El trabajador social desarrolla su labor dentro de un marco general formado por la


programación anual de la institución, donde todos los profesionales que trabajan en la
organización deberán incorporar los datos obtenidos en sus intervenciones a una base
general para estudiar la funcionalidad de la institución y el funcionamiento de los
diferentes equipos que lideran los proyectos.

4. La preparación previa de cómo y de qué manera se llevará a cabo la


evaluación (su diseño)

 Determinar un protocolo seguir para realizar la evaluación


 Los actores que van para participar en la misma

 Los que solicitan la evaluación


 Los responsables de la evaluación
 Los suministradores de datos
 Los beneficiarios o destinatarios

 El tipo de evaluación (4)

 Atendiendo al momento (ex ante / durante / ex post, final o de impacto)


 Según las funciones (formativas / sumativa)
 Según la procedencia de los evaluadores (externa / interna / mixta o
coevaluación)
 Según el aspecto objetivo de la evaluación (necesidades / cobertura /
implementación / contexto institucional / rendimiento personal)
 Según el aspecto económico.
 Según los resultados obtenidos.

 Los modelos generales de evaluación e intervención

 Modelo de preguntas (el TS dispone de autoridad y control de la


evaluación siendo su participación activa)
 Modelo de intercambio (la responsabilidad del análisis de los problemas
o las necesidades es compartida entre el TS, los usuarios y otros
profesionales)
 Modelo procedimental (el más protocolario e institucional)

 Selección de los indicadores de evaluación. son la parte central,


permitiendo comparar los resultados obtenidos entre dos o más situaciones
concretas, generalmente antes de la intervención, o durante la misma, o
cuando se finalice; describiendo la realidad evaluada a partir de los
beneficios obtenidos en la práctica.

 Indicadores relativos al desarrollo del caso social (ambientales, de


situación económica, de la relación convivencial, de relaciones sociales,
de vida cotidiana, escolares, laborales, de salud/dependencia,
habilidades y competencias, de formación, de recursos)
 Indicadores relativos a la evaluación del esfuerzo profesional (número
de casos atendidos, antigüedad de casos)
 Indicadores de resultados
5. Evaluación específica de las acciones profesionales: aplicación de la
evaluación al caso práctico

 Evaluación formativa: revisiones periódicas

 Evaluación sumativa: análisis de resultados. Se llevará a cabo una vez


finalizada la intervención. Para realizarla se deberá tener en cuenta el
marco en el que se desarrolla la intervención, formado por dos partes
fundamentales: el diagnóstico y la metodología empleada. .

 Reflexión final y despedida del usuario

Los indicadores de evaluación Los indicadores pueden ser dos tipos:

 Cuantitativos, sus valores son diferentes y pueden ser ordenados de menor a


mayor, se pueden expresar numéricamente, pueden ser ordinales, de intervalo
lineal o de razón, y sola objetivos.

 Cualitativos, son subjetivos, tienen mayor riqueza informativa, basados en


opiniones y percepciones

Tema 8
Modelos de intervención en Trabajo Social individualizado

Introducción

Si bien existen diferentes modelos de intervención individual que puede utilizar el


trabajador social en su ejercicio diario, pudiéndose establecer una diferenciación y
clasificación de los mismos, en la práctica suelen estar entremezclados, siendo a veces
difícil discernir cuál de ellos es el que prevalece.

La postura ecléctica durante la intervención o la utilización de diferentes modelos


conjuntamente suelen ser la alternativa elegida por los trabajadores sociales para
afrontar las problemáticas individuales.

1. Definición de modelo

El modelo, para algunos autores como Payne (2005) <<es lo que describe (1)qué ocurre
durante la práctica profesional, (2) la forma de ver y de actuar ante un caso, (3) la
elaboración de hipótesis, objetivos y estrategias para superar una problemática
concreta>>. Otros autores proponen que el modelo es <<la elaboración de hipótesis,
objetivos y estrategias para superar una problemática concreta>> (Du Ranquet, 1996).

Para diseñar y construir un modelo de intervención es importante tomar en cuenta los


siguientes elementos:

 esquema teórico: elemento esencial del modelo para guiar la intervención en


base a unas teorías.
 realidad social: donde la problemática es una parte significativa de la realidad.
 teorías sociales: intentan explicar los asuntos sociales.
 actor social: persona, grupo o colectividad que tiene una necesidad o se
enfrenta a situaciones problemáticas.
 Metodología: métodos, técnicas e instrumentos que se utilizan para conocer o
indagar sobre el problema.
 Interrelaciones: entre los diferentes elementos que integran el esquema
metodológico.

2. Modelos de Intervención
2.1. Modelo de gestión de casos

El modelo más utilizados por los trabajadores sociales es el denominado modelo de


gestión de casos (casework), cuyas raíces hay que buscarlas en el binomio necesidad –
recurso.

El modelo permite entender los problemas y gestionar recursos externos, pero también
las fortalezas internas (potenciando las capacidades de la persona) en un proceso
basado en el asesoramiento y mediación profesional.

2.2. Modelo centrado en la tarea

El modelo anima a la persona a consensuar objetivos usando cuidadosamente la


negociación de las tareas para lograrlos.

La práctica centrada en la tarea está relacionada con la teoría del aprendizaje y con los
modelos de solución de problemas.

Este modelo tiene cinco fases bien definidas: 1) entrada; 2) exploración de los
problemas; 3) acuerdo de objetivos y metas; 4) planificación e implementación de
tareas; 5) finalización.

El modelo está directamente conectado con la búsqueda del empoderamiento del


usuario, Ia creencia de que por si mismo puede afrontar sus dificultades, utilizando sus
fortalezas, habilidades y aprendiendo nuevas formas de superar la adversidad.

Según Du Ranquet (1996) en el modelo centrado en la tarea, uno elementos básicos es


la limitación temporal.

2.3. Modelo sistémico-ecológico

Basado en el concepto de sistema entendido como <<el conjunto de elementos que


conforman una estructura donde cada miembro tiene asignada una función para
satisfacer las necesidades>>.

Sus raíces hay que buscarlas en las teorías biológicas.

Dentro de este modelo se pueden distinguir dos apartados teóricos:

 La teoría general de sistemas (modelo sistémico): Describe los sistemas como


un conjunto de elementos en constante interacción. La persona está inserta en
sistema interdependiente en el que todas las partes dependen unas de otras,
teniendo cada integrante un rol de acuerdo a la jerarquía establecida. Destacan
la obra de Bertalanffy, la teoría de juegos de Neumann, la cibernética de
Wiener, la terapia familiar de Bateson, Haley, Virginia Satir, Watzlawick,
Ackerman, entre otros.
 La teoría ecológica (modelo ecológico): el modelo ecológico de Bronfenbrenner
defiende la existencia de una serie de sistemas que se extienden más allá del
núcleo familiar de convivencia básico, distinguiendo 5 niveles (microsistema
[familia, amigos, cuidadores, etc.], mesosistema [escuela, entorno laboral,
clubs, etc.], exosistema [leyes, planes de estudio, etc.], macrosistema
[ideologías, reglas, tradiciones, costumbres, etc. ] y cronosistema [eventos
históricos y desastres naturales].

El rol del trabajador social en este modelo estará dirigido a reformar los apoyos
sociales disponibles, con la finalidad de mejorar la autoestima, autoconfianza,
autonomía y, en definitiva, la calidad de vida del usuario.

2.4. Modelo psicodinámico

Los autores psicoanalistas como Sigmund Freud, Adler y Jung, contribuyeron al


desarrollo de la profesión ya que sus estudios permitieron entender que detrás de
muchos problemas sociales existían también carencias psicológicas.

Para la teoría psicoanalítica la influencia del inconsciente en el comportamiento


humano es relevante. Asume que los comportamientos están motivados por procesos
mentales de los cuales muchas veces no somos conscientes.

El modelo ofrece al usuario la oportunidad de pensar y conectar con sus


preocupaciones emocionales en un contexto profesional seguro. Es lo que se
denomina insight.

Las dos ideas sobre las que se sustenta el modelo son:

 Determinismo psíquico. Las acciones surgen de los procesos mentales de las


personas, no ocurren porque sí.
 Inconsciente. parte de nuestro conocimiento se escapa a nuestra comprensión
consciente.

En la práctica del trabajo social se debe reforzar la habilidad de la persona para que
pueda entender y equilibrar estos impulsos internos. Sin embargo, estas
contradicciones también pueden aparecer cuando las estructuras mentales
interactúan con las de otras personas El análisis transaccional permite determinar
cómo se realizan estás interacciones.
La finalidad de intervención será facilitar el desarrollo de la personalidad del usuario
favoreciendo el autoconocimiento de sus experiencias traumáticas del pasado.

La tarea del trabajo social será analizar la historia psicogénica, traumas, vivencias
dolorosas, defensas y tendencias y propiciar su ajuste social.

Principales referentes teóricos del modelo

 Terapia psicosocial (M. Richmond, G. Hamilton)


 La resolución de problemas (H. Perlman)
 El Trabajo Social centrado en el yo (J. Parad, R. Miller y E.G. Goldstein)
 Teorías funcionales (Ruth Smalley; Jessie Taft)
 Teoría del análisis transaccional (Eric Berne)
2.5. Modelo cognitivo-conductual

Las conductas se aprenden pero también pueden desaprenderse y además las


personas disponen de habilidad para incorporar otras nuevas. Basándose en esta
premisa se desarrollaron las teorías del aprendizaje.

El enfoque conductual básicamente trata de estudiar cómo se aprenden la conducta


cómo se mantiene y cómo podría eliminarse.

 Condicionamiento respondiente o clásico de Watson y Pavlov


 Condicionamiento operante de Skinner
 Aprendizaje vicario de A. Bandura

El enfoque cognitivo defiende que también se pueden estudiar los pensamientos,


<<somos lo que hacemos pero también lo que pensamos>>.

 Terapia cognitiva (Beck), con aplicaciones terapéuticas en problemas de


depresión, ansiedad, ira, soledad o disfunciones matrimoniales.
 Terapia racional emotiva de Ellis, donde las emociones como las conductas son
producto de las creencias y de la interpretación de su realidad.
 Terapia de la Realidad de Glasser, que procede del tratamiento residencial con
chicas adolescentes.
 Terapia cognitivo-estructural de Guidano y Liotti
 Entrenamiento autoinstruccional de Meichenbaum

2.6. Modelo humanista, fenomenológico y existencialista


Desde el modelo humanista destacan las aportaciones de Carl Rogers y su psicoterapia
centrada en el cliente (plasmado en su obra El proceso de convertirse en persona
[1961]). . Parte de la premisa que la persona tiene capacidad suficiente como para
manejar de forma constructiva todos los aspectos de su vida.

El principal aporte de este modelo es el concepto de empatía y aceptación


incondicional, la proposición de una relación terapéutica basada en la horizontalidad,
planteándose una intervención desde la igualdad y cooperación por el cambio.

El existencialismo se centra en indagar en el sentido de la vida de los usuarios, en


cómo estos tienen enfocada su existencia, qué esperan de ella y cuáles son sus
motivaciones.

Por otra parte, la fenomenología se centra en explorar cuáles han sido los fenómenos
más importantes en las vidas de las personas, y cómo estos han podido marcar su
existencia, enlazando con el interaccionismo simbólico de Mead y Blumer.

2.7. Modelo de intervención en crisis

Se centra en el <<aquí y el ahora>>, y exige una respuesta rápida al trabajador social.


Este modelo Incorpora elemento de otros modelos como el centrado en la tarea, el
cognitivo - conductual e incluso la perspectiva psicodinámica, pero estos tienen unas
connotaciones metodológicas distintas.

El modelo de intervención de crisis pretende actuar para frenar la conmoción que sufre
una persona ante una situación especialmente crítica y apoyarle a reorganizar su
capacidad adaptativa y de respuesta. La pretensión es actuar de forma inmediata,
rápida y breve, sobre todo en el momento en que la persona se ve afectada por una
situación personal crítica y desestructurada.

Según James y Gilliland (2001) existen dos tipos de crisis: de maduración y


accidentales.

Fases de la crisis:

a. La de impacto, que comienza cuando un suceso desencadena


la crisis
b. La de tensión y la puesta en marcha de competencias de
emergencia para solucionar la crisis
c. La de desesperación cuando los mecanismo utilizados no
ofrecen resultados
d. La de desenlace cuando aparece el estado de homeostasis
inicial
2.8. Modelo crítico-radical

Las perspectivas Radicales en trabajo social derivan de las teorías marxistas qué
tuvieran su influencia especialmente en tiempo de dificultad económica.

Originariamente, las ideas del modelo estuvieron basadas en el socialismo y


colectivismo, pero, en la actualidad, devienen otras tendencias enlazadas con el
feminismo, los procesos antiopresivos, la defensa del medio ambiente, los derechos
humanos o el empoderamiento de la población entre otras.

Este modelo asume que la desigualdad existe por una mala redistribución de la
riqueza, lo que limita estructuralmente las posibilidades de desarrollo de
determinados ciudadanos o comunidades que no tienen las mismas oportunidades,
por motivos económicos sociales raciales o sexistas.

Pueden destacar dentro del modelo crítico racional:

 El enfoque marxista: Trataría de entender a la persona y a la estructura social


que la rodea, desde el análisis de las contradicciones derivadas de la desigual
distribución de los medios de producción y de los recursos. Rojek (1986)
distingue tres posturas marxistas: la progresiva, donde el Trabajo Social es un
agente positivo de cambio, concienciando a la población y promocionando
acciones colectivas para lograrlo; la reproductiva, basada en el control social
ayudando a las personas a solucionar sus problemas, pero conservando el
sistema establecido, y la contradictoria, donde los/as trabajadores/as sociales
se convierten en agentes de control social, pero también debilitan la sociedad
de clases capacitando a las personas más desfavorecidas.

 El enfoque problematizador de Paulo Freire: está basado en un modelo


educativo que trata de estudiar la realidad social con un análisis crítico para
favorecer procesos de transformación social. Este planteamiento tiene como
objetivos tomar conciencia de la situación y diseñar el proceso que permita
superarla. No pretende buscar la adaptación de las personas a una estructura,
sino cambiarla desde la crítica y reflexión social.

 Perspectiva feminista: Intenta explicar y responder a la opresión que padecen


las mujeres en el mundo. Indaga en la configuración de los roles sociales en
relación con las políticas sociales y los sistemas de bienestar.

 Perspectiva Antidiscriminatoria y sensibilidad cultural y étnica: Surge a raíz de


los conflictos étnicos que comienzan en los años ochenta, pero actualmente los
conflictos globales y movimientos sociales han ampliado el campo profesional
para ofrecer respuesta a la diversidad cultural y étnica que caracterizan a las
poblaciones. Esta perspectiva combate la discriminación institucional
representando los intereses de los distintos colectivos, promueve respuestas
que den solución a la diversidad cultural e intenta erradicar los procesos
discriminatorios.

 Perspectiva de empoderamiento de la población. Está basada env la eficacia de


la movilización grupal para promover la solidaridad y la concienciación de la
situación para solucionar por sí mismos sus problemáticas.

La aplicación de este modelo ha supuesto la superación de la corriente más clásica de


la profesión, orientada al abordaje de los problemas sociales desde una perspectiva
individualista y psicoanalítica.

3. Modelos generales de evaluación en intervención

Smale, Tuson y Statham, distinguen entre:

1. Modelo de preguntas, defiende la idea de que los problemas se solucionan a


partir del intervención en clave individual.
2. Modelo procedimental,
3. Modelo de intercambio, requiere no sólo habilidad metodológica en los
procesos de intervención también una cierta renuncia al estatus profesional.
Tema 9

Principales técnicas y documentos en Trabajo Social


individualizado

Introducción

Las técnicas pueden definirse como el conjunto de habilidades, destrezas y recursos


adquiridos mediante aprendizaje y práctica profesional, que permite al trabajador
social realizar la intervenciòn para obtener el resultado deseado.

1. Técnicas de diagnóstico

1.1. Genograma: árbol genealógico especifico que representa la posición que ocupa
el usuario en su estructura de parentesco, explorando las diferentes relaciones
establecidas entre sus miembros en el momento de la evaluación diagnóstica.

1.2. Mapa de relaciones: técnica propia del modelo sistémico que se utiliza en
terapia familiar. Representa gráficamente las relaciones y la comunicación
entre los miembros de la familia. Se usa para diagnosticar la situación familiar
pero también puede convertirse en un indicador específico de evaluación,
porque permite analizar la situación antes, durante o después de la
intervención familiar sistémica.

1.3. Ecomapa: Es considerada una técnica diagnóstica que pertenece al modelo


ecológico, porque representa el suprasistema familiar, es decir, microsistema,
mesosistema, exosistema y macrosistema.
1.4. Mapa de redes: estudia individualmentre las redes sociales de cada miembro
de la familia. En el círculo central, y más pequeño, se coloca el nombre y la
edad de la persona a partir de él, se irán dibujando círculos concéntricos
divididos en varias secciones: núcleo familiar, otros miembros de la familia,
trabajo/escuela, clubs/organizaciones, amigos y vecinos. Los elementos
ecológicos se irán distribuyendo y colocando más cerca o más lejos del centro,
en función del mayor o menor apoyo y proximidad social hacia la persona. Se
condidera una técnica perteneciente al modelo ecológico, que puede servir
para complementar la información facilitada por el ecomapa.

1.5. Culturograma: es una de las técnicas incorporadas al repertorio del diagnóstico


junto con el genograma y el ecomapa, con los que está estrechamente
vinculado. Como su propio nombre indica, el culturograma ayuda al trabajador
social a entender el significado y el impacto de la cultura sobre la vida de los
integrantes de la familia. Es una importante herramienta para descubrir las
posibilidades, potencialidades y sensibilidades culturales de los usuarios.

1.6. Diagrama de flujo: permite visualizar rápidamente la evolucion de la familia,


analizando sus acciones.

1.7. Cronograma o línea del tiempo

2. Técnicas para el diseño de intervención

2.1. Gráfico de Gantt: técnica gráfica y sencilla que se puede utilizar para visualizar
las partes de la programación diseñada , y controlar su ejecución, adaptándola
a un calendario prefijado. Es una tabla específica. En las filas se anotan las
actividades y en las columnas el tiempo estimado de duración.

2.2. Pantograma: técnica gráfica de programación más elaborada que la anterior.


Permite visualizar rápidamente todas las tareas específicas del proyecto de
intervención que se desean ejecutar en un perido de tiempo determinado,
junto con la información relevante a considerar durante el desarrollo de las
fases programadas.

3. Técnicas de intervención: ejecución o aplicación del diseño

3.1. Entrevista: es uno de los principales instrumentos al servicio de la investigación


social. Encuentro hablado entre dos personas que conforman interacciones
tanto verbales como no verbales. Es la técnica más importante en el TS
individualizado. Connstituye una fuente inagotable de intercambio de
información y se erige como un motor y motivador de cambio.

La primera entrevista suele iniciarse de forma abierta, intentando crear un


clima de cordialidas que facilite la comunicación, recomendándose los
formatoss de entrevista más cerrados según avance la intervención.

Durante el desarrollo de las entrevistas, el TS siempre deberá prestar atención


a dos elementos psicodinámico: 1) trnsferencia (usuario) y contratransferencia
(profesional), que explica los procesos mediante los cuales las personas
pueden volver a vivir en el presente las emociones asociadas a hechos del
pasado; 2) insight, darse cuenta, percepción diferente de la problemática.

Existen diferentes tipos de entrevistas según:

finalidad  Orientación
 Motivación
 Información
 Asesoramiento
 Terapéutica
 Evaluación o seguimiento
Modalidad  Formal o libre
 Estandarizada
 Planificada
Número de personas  Indivuales
 Colectivas
Momento de la fase del método  Primer contacto
 Estudio o valoración diagnóstica
 Temáticas
 Intervención de la problemática
 Finalización

3.2. Observación:

3.3. Contrato: en la mayoría de los casos los acuerdos suelen hacerse verbalmente,
anotándose en la hhistoria social los compromisos acordados a modo de
recordatorio. Pero en otras ocasiones el profesional suele utilizar contratos por
escrito para registrar los compromisos consensuados. Es recomendable, en
estos casos, utilizar los modelos prefijados por la institución y respetar las
condiciones de estos.

4. En la fase de evaluación

4.1. Entrevista final de evaluación

4.2. Observación sistematizada: Registros. Existen diferentes tipos de registros,


cualitativos y cuantitativos. También existen diferentes modalidades para
registrar los datos de la observación, pudiéndose destacar los registros
narrativos (informes, periódicos, registros anecdóticos, plantillas, etc.) y
registros conductuales (hojas de registro de conducta, matrices de interacción
o análisis de los logros conductuales).

4.3. Gráficos de programación:

4.4. Cuestionarios, tests, escalas de valoración


 Escala de actividades básicas de la vida diaria (índice de Barthel)
 Escala de sobrecarga del cuidador o test de Zarit
 MMSE de Folstein o su adaptación el Miniexamen cognoscitivo de Lobo
 Escala de depresión de Yesavage (GDS)
 Escala de Recursos Sociales OARS (Duke University Centers)
 Escala de satisfacción de Filadelfia (Lawton)

4.5. Documentación biográfica

4.6. Reuniones de expertos : técnice eminentemente cualitativa en la que un grupo


de expertos profesionales se reúne para evaluar la información relativa a un
caso social tratado o a una temática concreta. Pueden ser profesionales de una
misma disciplina o pueden ser multiprofesionales.

5. Documentos principales

5.1. Ficha social:

El Consejo General de Colegios Profesionales de Diplomados de Trabajo Social y


Asistentes Sociales define la ficha como <<el soporte documental o instrumento de
trabajo en el que se registra la información susceptible de ser ordenada, entresacada o
almacenada, o como la parte de la historia social susceptible de ser sistematizada>>-
Documento básico de trabajo, con estructura sistematizada de almacenamiento de
datos, que permita ordenar y recuperar la información básica y esencial de un caso
incorporada en un fichero General.

Coincide en esencia con la estructura de la historia social, pero de esta última


únicamente se extraen aquellos datos que puedan ser relevantes, cuantificables y
sistematizables.

La ficha social tiene un formato uniforme con respuestas codificadas.

Contenidos básicos: datos personales; datos sociodemográficos; datos de hábitat;


datos de Intervención

5.2. Historia social

El Consejo General de Colegios Profesionales de Diplomados de Trabajo Social y


Asistentes Sociales define la ficha como <<un documento en el que se registran los
datos personales, familiares, sanitarios, de vivienda, económicos, laborales, educativos
y cualquier dato significativo de la situación sociofamiliar de una persona usuaria, la
demanda, el diagnóstico, la subsiguiente intervención y la evolución de la situación>>.

Documento básico que consiste en una narración descriptiva y explicativa del


desarrollo experimentado por la unidad de análisis. El documento más importante del
expediente y facilita la comprensión de la evolución y trayectoria de la persona o
familia en el pasado, presente y futuro.

Por lo general, los datos de la historia social se reúnen y ordenan cronológicamente, es


decir, se podría considerar como un diario de intervención, pueden contener los
siguientes contenidos:

i. Identificación de la información
ii. La familia como sistema (estructura, funcionamiento y desarrollo)
iii. Las inquietudes, necesidades, problemas
iv. Recursos y limitaciones para responder a las necesidades

5.3. Informe social

Dictamen técnico que sirve de instrumento documental que elabora y firma el/la
trabajador/a social. Su contenido se deriva del estudio del caso.

Cada informe suele ser distinto, adaptado a la finalidad que persigue.

A diferencia de la historia social, los informes son ilimitados, existen tantos como
gestiones o acciones se quieran llevar a cabo.

Los formatos varían en función de dos variables: 1) los objetivos profesionales; 2) la


institución a la que se dirija.

En cualquier caso, el informe social podría tener la siguiente estructura:

Institución de referencia:
Informe emitido por:
Fecha:
Solicitado por:
Dirigido a:
Motivo del informe:

0. Datos de identificación de la persona


1. Metodología utilizada para la realización del informe social
2. Estructura familiar
3. Dinámica familiar
4. Situación de salud
5. Situación de la vivienda y el entorno
6. Relaciones sociales
7. Situación económica
8. Valoración y dictamen
Existen diferentes tipos de informe social:

 Según el nivel de intervención (individuales, grupales, comunitarios,


institucionales)
 Según el diseño previo (con modelo determinado, abiertos con estructura
preestablecida, sin modelo previo)
 Según la finalidad (de información, de solicitud, de cierre o transferencia de
casos, por obligatoriedad [preceptivos, facultativos, informes periciales,
informes de inspección y gestión]).
5.4. Hoja de derivación

Documento de coordinación interprofesional que facilita la derivación de un caso hacia


el recurso o profesional de referencia más adecuado.

5.5. Sistema de Indformación de Usuarios de Servisoso Sociales (SIUSS)

Herramienta informática que posibilita la incorporación de las nuevas tecnologías a los


Servicios Sociales mejorando la gestión de los centros de atención primaria y permite
un mejor conocimiento de las características de los usuarios y de sus problemáticas,
para que los programas sociales puedan adaptarse mejor a las nuevas realidades de los
ciudadanos.

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