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CONCEPTO DE SENSACIÓN
La sensación es la impresión que las cosas producen por medio de los sentidos.
La sensación es un hecho psíquico elemental, resultante de la acción de un estimulo externo sobre los
órganos receptores sensoriales (sentidos), que se encargan de transmitir la información recibida a un
centro nervioso.
El proceso sensorial: un estimulo físico procedente del mundo externo excita o pone en actividad el
órgano del sentido adecuado, está constituido por un conjunto de células nerviosas (receptores) que se
hallan conectadas a la corteza cerebral. Mediante esta transmisión lega a la corteza cerebral
produciéndose la sensación.
CONCEPTO DE PERCEPCIÓN
La percepción es “cualquier proceso mediante el cual nos damos cuenta de inmediato de aquello
que está sucediendo fuera de nosotros”.
Entendemos percepción como el “proceso mediante el cual la conciencia integra los estímulos
sensoriales sobre objetos, hechos o situaciones y los transforma en experiencia útil”.
La sensación se produce, cuando alguno de los sentidos detecta un estímulo concreto, y traslada la
información al cerebro, mientras que la percepción tiene lugar cuando el individuo es consciente
del estímulo, es decir, cuando conoce las cualidades y relaciones del mismo.
Las personas percibamos de diferente manera los sabores, los olores, la temperatura la sensación
sería el resultado de la actividad de los órganos receptores y sus vías asociadas a las áreas corticales
correspondientes, la percepción sería el resultado de las células de la corteza cerebral que elaboran y
estructuran la información recibida en la sensación.
TEORÍA DE LA GESTALT.
El todo es más que la suma de las partes" es el lema que hicieron famoso los teóricos de la Gestalt y
sintetiza esta teoría: "los objetos y los acontecimientos se perciben como un todo organizado". La
organización básica comprende una "figura" (en la que nos concentramos) sobre un "fondo".
Principio de simplicidad.
Asienta que el individuo organiza sus campos perceptuales con rasgos simples, regulares, estables y
equilibrados.
Principio de cierre
Se refiere a la tendencia a percibir formas “completas”. Nuestra mente añade los elementos
faltantes para completar una figura. Si una figura está incompleta el perceptor la completa en su
mente. Éste se manifiesta al activarse patrones cognitivos de figuras previamente conocidas.
LOS SENTIDOS.
EL GUSTO: el gusto sirve para distinguir lo que es bueno para comer (y sobrevivir) de lo que no lo es.
El ser humano tiene alrededor de 10.000 papilas gustativas distribuidas de forma desigual en la cara
superior de la lengua, donde forman manchas sensibles a determinadas clases de compuestos químicos,
que inducen las sensaciones del gusto.
Además existe una comunicación entre la boca y las fosas nasales, cuando tomamos un alimento
recibimos también sensaciones olfativas y las mezclamos con las gustativas.
Transducción gustativa, el impulso nervioso que se envía al cerebro cuando queremos determinar el
gusto de determinados alimentos.
El gusto lo percibimos a través de la lengua, y ahí podemos encontrar:
Las papilas gustativas, donde se encuentran las células receptoras del gusto y los poros
gustativos.
La membrana basal, conecta con la papila gustativa para enviar impulsos nerviosos al cerebro.
EL OLFATO: es el sentido a través del cual percibimos los olores, junto con el gusto el olfato es
importante para diferenciar los sabores de algunas sustancias.
La nariz, es el órgano sensorial del olfato y la estructura anatómica por la cual el aire se calienta y se
filtra antes de llegar a los pulmones.
La sensación olfativa se establece a través del epitelio olfatorio.
LA VISTA: es el sentido por el cual el cerebro recibe imágenes e informa de lo que ocurre en el mundo
exterior.
La función del ojo es traducir las ondas electromagnéticas de la luz en impulsos nerviosos que se
transmiten al cerebro a través del nervio óptico.
La capa más externa es la esclerótica, que comúnmente conocemos como el “blanco de los ojos”;
un tejido de cualidad resistente, opaca y fibrosa cuya función principal es la de sostener, proteger e
impedir que la luz penetre en el ojo.
LA AUDICIÓN: es el sentido por el cual el órgano auditivo percibe las ondas del sonido. El odio es el
órgano sensorial responsable de la audición y del equilibrio.
El oído externo: El oído externo consta del pabellón auricular, el conducto auditivo externo y
el tímpano. El pabellón auricular u oreja funciona recogiendo las vibraciones del aire y las
conduce, como por un embudo, hacia el conducto auditivo externo.
Una vez que las ondas sonoras han superado el pabellón auditivo, se desplazan de dos a tres
centímetros dentro del conducto auditivo antes de golpear el tímpano. El tímpano es una
membrana extremadamente sensible que vibra como respuesta a las ondas sonoras.
El oído medio: Contiene tres huesecillos: martillo, yunque y estribo, que vibran mecánicamente
por los rápidos movimientos del tímpano y conducen las vibraciones al oído interno, repleto de
líquido. Los tres huesos están firmemente unidos mediante ligamentos y vibran al unísono. El
martillo está conectado al tímpano y el estribo se ajusta a la ventana oval del oído interno, el cual
está lleno de líquido y permanece fijado en su sitio por una membrana.
La trompa de Eustaquio, se encuentra también en el oído medio, y conecta el oído con la última
parte de la cavidad oral (boca). Es la encargada de igualar la presión del aire a ambos lados del
tímpano, garantizando que la presión no se acumule en el oído.
El oído interno: La puerta de entrada al oído interno es un agujero llamado ventana oval y
tapado por el último huesecillo del oído medio: el estribo. De la ventana oval hacia dentro se
encuentra el oído interno o laberinto. El laberinto consta de dos sistemas bien diferenciados
funcionalmente, aunque interrelacionados: el caracol y los canales semicirculares junto con el
vestíbulo.
En el caracol, las ondas sonoras se transforman en impulsos nerviosos que se envían al cerebro.
EL TACTO: a través de la piel percibimos una gran variedad de sensaciones como son el dolor y la
temperatura.
Las glándulas sudoríparas están distribuidas por todo el cuerpo.
La epidermis: Es la capa celular externa que forma la cubierta protectora del organismo.
Está compuesta por una capa de células en constante renovación, en la superficie de la
piel.
La dermis: La dermis es la capa celular interna de la piel. Está formada por una red de
colágeno y de fibras elásticas, capilares sanguíneos, nervios y lóbulos grasos; y una base
de los folículos pilosos y de las glándulas sudoríparas.