Está en la página 1de 6

1.

AUTO COMPRENSIÓN

El concepto de comprensión está relacionado con el verbo comprender, que refiere a


entender, justificar o contener algo. La comprensión, por lo tanto, es la aptitud o astucia
para alcanzar un entendimiento de las cosas. Por ejemplo Los alumnos tienen serios
problemas en la comprensión de textos, Estoy aprendiendo alemán, pero todavía me
cuesta la comprensión de algunos conceptos, Sin la comprensión de las reglas, nunca
podrás jugar a este deporte.

La comprensión es, por otra parte, la tolerancia o paciencia frente a determinada


situación. Las personas comprensivas, de este modo, logran justificar o entender como
naturales las acciones o las emociones de otras Comprendo que tengas miedo, pero tienes
que hablar con ella, Si quieres hablar conmigo, ya sabes que contarás con mi
comprensión.

Para entender lo que se conoce como auto comprensión, es necesario realizar la


definición de la base de esta condición conductual, la cual es ampliamente conocida nos
referimos a la Autoestima.

2. EL AUTO CONOCIMIENTO

Es el paso previo y fundamental para lograr la autoestima, el auto respeto y el


autocontrol. No se puede amar, respetar ni controlar lo que no se conoce. No puede
haber, autoestima sin autoconocimiento. El autoconocimiento es el propio conocimiento,
profundo y sincero, sin disculpas. Es conocer tanto los aspectos positivos como negativos.
Es un proceso lento que lleva a una persona a ser consciente de sus necesidades,
limitaciones, temores, alegrías. Este es un proceso lento, que no se logra de la noche a la
mañana. Se inicia cuando se toma conciencia de las propias fortalezas y debilidades y se
prolonga durante toda la vida. Muchas personas, a lo largo de la vida, acumulan gran
cantidad de conocimientos, saben de literatura, historia, informática, recorren varios
países, pero pocos se detienen un momento para profundizar en su conocimiento.
3. LA AUTOESTIMA

La autoestima es la percepción que tenemos de nosotros mismos. Abarca todos los


aspectos de la vida, desde el físico hasta el interior, pasando por la valía o la competencia.
Se trata de la valoración que hacemos de nosotros mismos que no siempre se ajusta a la
realidad y esa valoración se forma a lo largo de toda la vida y bajo la influencia de los
demás.

Lo que los demás ven en nosotros o, más bien lo que nosotros pensamos que los demás
ven, es crucial para determinar nuestro grado de autoestima. Entramos en el terreno de la
seguridad y la confianza en uno mismo, minado por las influencias del exterior. Pero si hay
algo que determina el estado de salud de nuestra autoestima es la infancia. El refuerzo
positivo o negativo con el que nos hayamos contado desde los primeros pasos de nuestra
vida va a ser fundamental para nuestra seguridad emocional en el futuro. Es la fe que cada
persona tiene de sí misma. Es la percepción del propio valor, habilidades y logros, la visión
positiva o negativa que se tiene de uno mismo.

¿Cuál es la importancia?

 Cuando uno se conoce, es decir, cuando sabe lo que puede hacer con mayor o
menor facilidad, cuando se acepta a sí mismo con sus defectos y virtudes, puede
aceptar a los demás, tal como son.
 Hay personas que constantemente tratan de demostrar que son fuertes, que no
tienen mucho miedo, que no les importa lo que opinan los demás, se muestran
como muy atrevidas. Estas personas probablemente tienen en realidad, una baja
autoestima y tratan así de ocultarlo.
 La autoestima positiva produce seguridad en uno mismo y esto influye en el
comportamiento.
 Lograr una autoestima positiva implica un proceso de crecimiento personal.
¿Cómo se forma este sentimiento?

El sentimiento de la propia estima, de auto concepto, que puede ser positivo o negativo,
real o irreal, comienza a formarse a través de los demás, de lo que las otras personas
piensan, sienten y expresan de uno.

Por ejemplo. Cuando una madre ama a su hijo, este percibe ese amor en la sonrisa, en los
cuidados, en la palabra de la madre. Este niño entonces se siente amado y cree que es
merecedor de amor. Cuando va a la escuela al realizar una tarea se lo felicita y sabe que lo
hizo bien, que es capaz de hacer bien las cosas. Puede darse también el caso contrario, el
niño o la niña no recibe toda la atención que necesita, su esfuerzo no se valora, entonces
poco a poco siente y cree que vale poco, que no es digno de amor. Debe entenderse
entonces que el punto de referencia del niño para formar su propio concepto y su estima
es la opinión y los valores de los adultos (padres, profesores, hermanos).

En la pubertad y la adolescencia se produce la revisión y actualización del concepto que se


formó en la niñez. Los cambios físicos que se producen en esta etapa lo llevan a
preocuparse por su apariencia. A veces crece más rápido o más lento de lo que desearía;
es muy flaco o muy gordo. Sentirse bien o mal con su físico influye mucho en su
autoestima y tiene mucha importancia lo que la sociedad.

4. LA EMPATÍA

Es la capacidad para ponerse en el lugar del otro y saber lo que siente o incluso lo que
puede estar pensando. Las personas con una mayor capacidad de empatía son las que
mejor saben "leer" a los demás. Son capaces de captar una gran cantidad de información
sobre la otra persona a partir de su lenguaje no verbal, sus palabras, el tono de su voz, su
postura, su expresión facial, etc. Y en base a esa información, pueden saber lo que está
pasando dentro de ellas, lo que están sintiendo. Además, dado que los sentimientos y
emociones son a menudo un reflejo del pensamiento, son capaces de deducir también lo
que esa persona puede estar pensando.
La empatía es una capacidad que nos ayuda a comprender los sentimientos de los otros,
facilitando también la comprensión de los motivos de su comportamiento, y que permite
así prevenir importantes conflictos. Sin embargo, muchas personas presentan unos niveles
excesivamente bajos (en casos patológicos pueden llegar a ser inexistentes) de esta
habilidad. La palabra empatía deriva del término griego Empháteia (sentir dentro afecto),
pero no será hasta finales del S. XVIII cuando, a partir del término alemán EinFülung
(sentirse dentro de), se hace una verdadera aproximación etimológica a lo que hoy en día
entendemos por empatía.

Cómo se adquiere la empatía

No nacemos siendo empáticos, sino que esta habilidad interpersonal forma parte de
nuestro correcto desarrollo emocional y social comenzando a desarrollarse desde la más
tierna infancia. Desde la psicología básica, la base de la empatía reside en las neuronas
espejo, un tipo de neuronas que humanos y primates tenemos en el cerebro, y que
permiten la captación e imitación de los estados emocionales de nuestros semejantes.
Este regalo que nos hace nuestra biología posteriormente debe combinarse con la
socialización para poder alcanzar unos niveles de empatía adecuados.

La empatía primitiva, que aparece ya desde los tres meses de edad, se desarrolla gracias a
las situaciones de interacción con los adultos, facilitando la creación de vínculos afectivos
intensos y privilegiados. En este sentido, la actitud y la educación emocional de los padres
es fundamental para que un niño desarrolle empatía. Por ejemplo, un niño cuyos
sentimientos son ignorados por sus padres, que le dicen frases como “deja de llorar”, “no
te pongas así”…, aprenderá a ignorar sus sentimientos y los de los demás. Del mismo
modo, un niño al que se le atiende emocionalmente (se le escucha cuando se queja, se le
dan besos, caricias, etcétera) aprenderá a escuchar sus propias emociones y las de los
otros, abriendo paso a los primeros pasos del desarrollo de la empatía.
Perfil de una persona empática

Las personas empáticas obtienen grandes beneficios de carácter social gracias a su


habilidad, porque consiguen que los demás se sientan comprendidos, escuchados, y
emocionalmente recogidos.

El perfil de las personas empáticas se caracteriza por:

 Presentar una elevada sensibilidad social: les preocupan los problemas de los
demás, los sentimientos de los otros, etcétera.
 Captar la comunicación no verbal de los otros: saben leer en los gestos, en el tono
de voz, etcétera los estados emocionales de sus semejantes.
 Saber dar feedback social: Son capaces de mostrar a los demás que han captado
sus sentimientos.
 Ser respetuosas: saben aceptar los sentimientos y conductas de los otros con
independencia de que no las aprueben.
 Les gusta escuchar (no oír), y son buenos conversadores.
 Respetar o comprenden los motivos de las conductas de los demás.

5. EL EGO

Para la psicología, la instancia psíquica a través de la cual el individuo se reconoce como


yo y es consciente de su propia identidad. El ego, por lo tanto, es el punto de referencia de
los fenómenos físicos y media entre la realidad del mundo exterior, los ideales del superyó
y los instintos del ello.

El ego, que evoluciona con la edad, intenta cumplir con los deseos del ello de manera
realista y conciliándolos con las exigencias del superyó. El yo, por lo tanto, cambia con el
paso del tiempo y de acuerdo al mundo externo.
Otro de los muchos autores que han trabajado y estudiado acerca del yo y del ego es el
psicoanalista francés Jacques Lacan, que llegó a establecer que, bajo su punto de vista,
aquel venía a ser una alienación para el propio ser humano. Y es que el individuo se ve en
todo momento en su ego, sin olvidar tampoco que la formación del ego se produce en un
primer momento dentro de lo que sería un triángulo formado por su madre, el propio
individuo y el objeto.

Además de todo lo expuesto no podemos pasar por alto el hecho de que existen dos
palabras muy utilizadas en nuestro idioma que precisamente se sustentan en la palabra
ego. Por un lado, nos encontramos con el término ególatra, que procede del griego, y que
viene a definir a aquella persona que practica la egolatría, es decir, que tiene un amor
exagerado de sí misma.

Por otro lado, se halla la palabra egoísta que, de la misma manera, es un adjetivo que se
emplea para hacer referencia a todo individuo que no sólo tiene un amor excesivo por su
propia persona sino que además esto le hace estar en todo momento pendiente de su
propio interés sin tener en cuenta el de las demás personas que le rodean.

También podría gustarte