Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Definición de salud elaborada por la OMS (1948): estado de completo bienestar físico, psíquico y social, no sólo
ausencia de enfermedad. Esta definición desplazó a la definición predominante en ese entonces, que la consideraba
como ausencia de enfermedad.
A pesar de la contribución de esta definición, la misma se plantea en términos absolutos sin considerar la relatividad de
la noción de bienestar subjetivo o el rol del contexto sociocultural en la concepción predominante acerca de lo sano y lo
enfermo. Esto último resulta evidente en diverso tipo de circunstancias: personas “enfermas” en una cultura que son
“sanas” en otras; manifestaciones consideradas “patológicas” en un momento histórico o en una situación, que dejan de
serlo en otra. Estas ligazones dependen, entre otros aspectos, de los criterios valorativos que se adoptan en cada
sociedad y de las definiciones operativas que en cada caso se efectúen para evaluar la salud.
La expresión Salud Pública: refiere tanto a una concepción, una disciplina como también a un ámbito institucional. En
este último caso de modo directo a áreas de gobierno (ministerios, secretarías y subsecretarías de salud pública) y, de
modo indirecto, a las instituciones estatales de salud (hospitales, centros periféricos de salud).
UNIDAD I
Concepto de salud que propone éste documento: como un derecho fundamental del ser humano, como un derecho.
universal. Denuncia ya en aquel entonces, una grave desigualdad en el acceso a la salud de la población, que respondía a
una plena instalación de los estados capitalistas en el mundo, imponiéndose en América Latina a través de las
dictaduras.
Habla de promoción de la salud en términos de mejorar la calidad de vida. Plantea que el pueblo tiene el derecho de
participar en las planificaciones del sector salud y hay una obligación gubernamental respecto del cuidado de la salud.
APS: representa el primer contacto del sistema de salud con los individuos, la familia, la comunidad, a partir de planes,
programas y proyectos. Alma Ata plantea que la APS debería formar parte del sistema nacional de salud. Debería
garantizar la cooperación y la participación activa de la comunidad en planes, programas y proyectos que se generen.
La APS configura una estrategia y una metodología de trabajo en pos del acercamiento del sistema de salud a la
población y no el camino inverso. Tiene que generar estrategias donde el sistema de salud se acerque a la población y
responda de la manera más asertiva a las necesidades de la comunidad.
Diferentes interpretaciones de la definición de APS:
Superficial: su aplicación es prioritaria solo para países subdesarrollados ya q en los demás países se cumplen todo o
la mayor parte de los requisitos de APS.
Restrictiva: considerarla equivalente a la medicina general o familiar o a la asistencia primaria, entendida como el
primer contacto que prestan a la población los médicos y otros profesionales sanitarios.
Como una asistencia sanitaria de baja calidad: medicina pobre y rudimentaria para pueblos y ciudadanos pobres.
Los equipos multidisciplinarios son el pilar organizativo de APS. El profesional medico tiene un papel primordial, pero no
es el único protagonista sino que comparte sus responsabilidades y tareas con el equipo. Es necesario que asuman
objetivos comunes y que se establezcan entre ellos vínculos funcionales que posibiliten un desarrollo armónico y
conjunto de sus tareas, basado en la división de funciones del trabajo y de las responsabilidades según la capacitación de
cada profesional.
Concepto de salud que propone éste documento: como un estado adecuado de bienestar físico, mental y social. Se
trata de un concepto de salud positivo que acentúa los recursos sociales y personales así como las aptitudes físicas. Es un
concepto que transciende la idea de formas de vida sanas. Los factores políticos, económicos, sociales, culturales, de
medio ambiente, de conducta y biológicos pueden intervenir en favor o en detrimento de la salud. Por lo tanto la
promoción de la salud no concierne exclusivamente al sector sanitario. La salud se crea y se vive en el marco de la vida
cotidiana.
Prerrequisitos para la salud: Se empieza a plantear la salud como un concepto preventivo. Los pre-requisitos para
promover la salud son: paz, educación, vivienda, alimentación, renta, ecosistema estable, justicia y equidad. Para que
exista salud tienen que estar estos pre-requisitos. La terapéutica va por el lado de la convivencia, lo común con otros. La
vida en comunidad es la terapia.
La salud no está reducida al sector sanitario, podemos encontrar producción de salud en la vida de comunidad. La
persona va a recuperar su salud viviendo y compartiendo con los suyos, no en el hospital.
Para llegar a la promoción de la salud, la carta de Otawa propone que exista una equidad sanitaria, esto es, que todos
tengan acceso al sistema de salud o a los servicios de salud. También remite a la igualdad de oportunidades que sería un
medio para la promoción de la salud y promover la accesibilidad a la salud potencial y al control comunitario de la
población sobre su estado de salud.
El rol del sistema de salud es el de mediador. La planificación de salud debe tener una acción coordinada entre los
grupos sociales, los profesionales y el personal sanitario.
Promoción de la salud: consiste en asegurar la igualdad de oportunidades y proporcionar a los pueblos los medios
necesarios para mejorar su salud y ejercer un mayor control sobre la misma. Implica una participación efectiva y
concreta de la comunidad fijando prioridades, tomando decisiones y elaborando estrategias de planificación para
alcanzar un mejor nivel de salud. Esto requiere un total y constante acceso a la información, a la instrucción sanitaria y a
la ayuda financiera.
El psicoanálisis no recubre con su intervención la totalidad de problemas de Salud Mental, y no debe ser visto como una
respuesta totalizante que supla a la de la psiquiatría, sino que aparece como una herramienta critica fundamental para el
análisis interno del dispositivo teórico y practico de la psiquiatría y de las nuevas políticas en Salud Mental.
El psicoanálisis, después de la psiquiatría, fue el que más fuertemente pudo insertarse y replantear fuertemente el
campo de la salud mental en relación a la medicalización de las prácticas, a los profesionales habilitados para tratar las
enfermedades mentales. Legalmente los habilitados son médicos y psicólogos, pero hay otras disciplinas que pueden
intervenir, sino se cambia una hegemonía por otra. A partir de los 60, la diferencia comienza a ser bienvenida.
El autor sostiene que el psicoanálisis y las políticas de Salud Mental no se proponen los mismos objetivos. Entiende por
políticas a los modos orgánicos en que se responde desde una disciplina a un requerimiento social, en su comprensión
para abordarlo. El dispositivo mental esta dispuesto para responder y estabilizar las demandas de la sociedad y el estado
respecto del sufrimiento psicológico.
PARADIGMA ECOLÓGICO CONTEXTUAL: ecológico, etimológicamente del griego oikós que significa casa, hábitat.
Significa cuidado hacia el entorno, la naturaleza, las personas, las comunidades, para conquistar o preservar la calidad de
vida deseable en forma sustentable y solidaria.
Este enfoque plantea una dinámica que tiene que ver con la interdependencia entre personas, que también implica una
interdependencia entre ambientes. Esta relación de interdependencia produce modificaciones en el resto de los
sistemas.
La unidad de análisis del ámbito comunitario seria la relación persona-comunidad.
Pensar una estructura ecológico sistémica me lleva a dibujar una especie de subsistemas entrelazados y conteniéndose
unos con otros.
Principales fundamentos:
- Plantea una dinámica que tiene que ver con la interdependencia entre personas y entre ambientes.
- Hay una relación de congruencia y adaptación, vinculada a una tendencia a encontrar un equilibrio.
- Hay evolución y sucesión, en relación a la perspectiva temporal.
- Hay una circularidad de los recursos, intercambio de recursos.
Idea de sujeto: Sujeto comunitario, en relación. No puede pensarse aislado del contexto.
Idea de comunidad: Tiene una estructura que va desde los microsistemas hasta los macrosistemas.
Autor más representativo: Kurt Lewin
EL ENFOQUE ECOLÓGICO SISTÉMICO: Saforcada propone analizar el sistema total del salud. Este sistema total de salud
está compuesto por un componente intersubjetivo general. A este componente intersubjetivo general lo divide en:
Componente formal: integrado por todos los profesionales de la salud. Éste componente prescinde totalmente del
saber del componente informal.
Componente informal: integrado por la población o los usuarios del sistema de salud.
Componente cuasi-formal: integrado por todos los otros efectores de la salud que no corresponden al componente
de lo formal, sino que son todo el componente de lo administrativo, maestranza y demás que no integran el
componente formal pero sí que hacen al componente total de salud y también se convierten en efectores de salud.
Cuando decimos que el componente formal prescinde totalmente de los saberes de la comunidad acerca de salud,
tenemos que incluir el concepto de subjetividad. La subjetividad involucra el modo de pensar y sentir de cada sujeto, de
significar y valorar el mundo. Cuando analiza el componente formal, no está esta concepción de subjetividad, sino que
es imposible pensarla en este componente, porque hay posiciones autocráticas, el saber esta solo acá, encontramos en
este mercado de la enfermedad una cosificación, de ese otro que es el destinatario de nuestras prácticas, entonces es
imposible poder pensar que estamos ante un sujeto capaz de sentir de pensar de significar el mundo.
Entonces lo que se va generando del componente formal e informal es lo que él llama espacio virtual, una barrera
psicosociocultural, espacio virtual que está cargado de un contenido, afectivo y emocional negativo, y este contenido se
va reforzando y retroalimentando por la conminaciones que operan negativamente sobre el otro. Como el componente
formal con ciertas posiciones autocráticas con ciertas prácticas de cosificación del otro, operan de manera negativa en
ese otro, entonces observamos procesos de cosificación de los pacientes, formas de autoritarismo donde no hay un
pensar, una estrategia terapéutica incluyendo al otro, sino que impone “tiene que hacer esto, debe hacer esto” una de
responsabilización, no se piensa en el sentir del otro.
Dentro de los efectos negativos en el marco de esta barrera psicosociocultural, lo que encontramos en términos de
prácticas en salud es un incremento de la ineficacia en el accionar del componente formal, profesionales y técnicos,
también encontramos incremento de la ineficacia en el gasto de salud.
Saforcada plantea que este componente tiene una historia que responde a una línea de desarrollo individual
restrictiva. Comienza a finales del siglo XVI comienzos del siglo XVII, y esa línea nos plantea un saber fundamentalmente
mono disciplinar, en donde el objeto de conocimiento no tiene que ver con la producción de salud, sino que el objeto de
conocimiento es la enfermedad, y la hipótesis acerca de cómo se produce esa enfermedad responde a toda la línea de
las hipótesis etiológicas o etiopatogenicas. Las categorías de análisis en este saber mono disciplinar, van a ser
individuales, no vamos a pensar a la persona con el contexto, sino un individuo descontextualizado. El objetivo será la
remisión del síntoma o del problema y la posición ante la demanda de este componente formal va a ser pasiva, eso
significa esperar a que el otro venga y me consulte. A la comunidad no se le otorga en esta producción de salud, no se le
otorga participación alguna
Otra línea de desarrollo, que nos invita a pensar el autor, es la línea de desarrollo social expansiva, tiene sus orígenes
entre el siglo XVII y siglo XVIII es un saber multidisciplinario, en donde ya no tenemos una hipótesis etiológica, sino que
la hipótesis acerca de la producción es una producción de no de salud-enfermedad sino de proceso salud enfermedad.
En donde no pensamos hipótesis etiopatogénicas sino que responden a la integralidad. El saber profesional no es el
único sino que hay una complementariedad de saberes. Entre el componente formal y el informal. O sea que acá el
saber hacer de la población no responde a lo individual sino a la naturaleza colectiva del proceso de salud enfermedad.
Desde esta línea, vamos a intervenir en el entorno social en términos de protección y promoción de la salud. Donde la
comunidad tiene un rol activo.
Desde la línea de desarrollo restrictiva nos estaríamos ocupando de lo dañado. Estaríamos en el segundo nivel de la
atención de APS. Si nos ocupamos de lo dañado tenemos poco que hacer más que incrementar la probabilidad de
enfermar porque si nos ocupamos de lo enfermado nos ocupamos solo de la enfermedad como objeto de conocimiento.
Entonces las estrategias de promoción y prevención no van a tener lugar.
Objetivos de intervención:
Transformación social. El que las comunidades puedan tener el poder y el control sobre lo que les sucede, no
solamente les permite solucionar problemas sino transformar esa realidad en la que viven.
Desarrollo de la cc de los sujetos concebidos como históricos y como comunitarios. Esto es tomado de la teoría
marxista. Los sujetos son concebidos como históricos y comunitarios, no existen a partir de nuestra intervención.
Las comunidades tienen un devenir histórico que nos preexiste. Es importante conocer esa historia, conocer la
organización comunitaria que se ha venido construyendo allí o la organización de esa institución para resolver sus
problemas. Es importante ir sin apriorismo, a conocer a ese otro. La forma de trabajo de esta psicología, es
interdisciplinaria y busca facilitar ese fortalecimiento del desarrollo de personas, de grupos o de comunidades.
Empoderamiento o empowerment. El rol del psicólogo es acompañar este empoderamiento de las personas o de
las comunidades para resolver problemas y para transformar su realidad, sin tener que depender de otro para
poder efectivizar sus derechos. Empoderar es devolverle u otorgarle el poder al otro. O pensar que el otro tiene la
misma legitimidad ante el conocimiento de la realidad, que tiene un saber diferente al mío pero también es un
saber legítimo acerca de esa realidad en la que vive.
Investigar las formas de integración del ser humano en sociedad y las formas que esta integración se ha alterado
o se puede alterar (ej.: una persona, que por diferentes razones ha llegado a una internación ¿Qué paso en el
marco de estas relaciones que esta persona necesito llegar a una internación? ¿Qué pasó que estas relaciones no
pudieron contener/producir salud? Con esas relaciones nosotros vamos a tener que trabajar para que estas
personas vuelvan a vivir una vida comunitaria, una vida en común.
Si ya se alteraron hay un segundo nivel, donde hay una persona internada. Si se trabaja con la persona sola, voy a
estar pensando que esta internación es solo por esa persona, la “falla” está en la persona, si podemos pensar que
esta persona llego acá después de una historia, y de tal vez alguna alteración en esta red de relaciones, vamos a
poder reinsertarla con un poquito más de eficacia.
Integración colectiva o comunitaria o la inclusión social.
Promover las relaciones igualitarias y emancipadoras a través de las relaciones dialógicas. Una relación dialógica
es pensar al otro como un semejante que tiene un saber diferente al mío, pero tan legítimo como el mío a cerca de
una realidad determinada, de lo que nos sucede en ese momento.
Producción de conocimiento en la psicología social comunitaria: Es poder pensar en un dialogo entre los saberes
popular y académico. Los saberes que se producen lo hacen en la vida cotidiana, en tres dimensiones:
1- Primera dimensión: significado. Poder significar esta realidad que vivimos y que nos acontece.
2- Segunda dimensión: comunitaria. Para esta psicología las relaciones son en la comunidad.
3- Tercera dimensión: cultural. Hablamos acá de modos de vida que representan a una cultura.
La metodología trabajo es: acción, reflexión, acción. A partir de una práctica territorial, de una intervención,
necesitamos poder darnos un espacio de reflexión para revisar esas prácticas y poder nuevamente planificar acciones,
ya sea diferentes a esta o revisando esta.
PSICOLOGÍA DE LA LIBERACIÓN.
Surge con Ignacio Martín Baró, religioso jesuita, que llego al Salvador en la dictadura salvadoreña y comenzó a pensar
que, si bien la teología le permitía pensar algunas cuestiones no le permitía pensar otras. Estudió psicología,
psicoanálisis, sociología y la teoría marxista. La psicología de la liberación esta atravesada por presupuestos básicos de la
educación popular de Freire y la sociología critica de Fals Borda. Presupuestos básicos:
Reconoce la libertad del otro. Ya no se puede hablar de un sujeto sujetado, sino que hay que empezar a pensar otro
lugar para este sujeto sujetado, un lugar de igualdad, de sujeto activo.
Las prácticas están centradas en la transformación social; la acción transformadora debe ejercerse sobre la realidad.
Redefine del papel de los investigdores. Se definen como agentes de cambio social y no como poseedores del saber;
Relación dialógica entre agentes externos e internos del cambio social;
Valoración del saber popular;
Concientización o desideologización, pensando a esta ideología, en términos marxista, que vela una realidad, que
fetichiza una realidad, y esa fetichización no permite la concientización, que lo único que hace es reproducir
prácticas de dominación y de opresión.
recuperación critica de la historia. Los procesos históricos no lo podemos pensar como lineales, son un poco más
complejos. En este devenir de este sujeto activo producto y productor de una realidad y también en el marco de un
proceso histórico en términos de una complejidad no lineal.
Las bases de la psicología de la liberación son científicas y religiosas. Las prácticas están vinculadas a la evangelización,
concientización y movilización contra la opresión de las personas. El psicólogo de la liberación debe:
1. Propiciar en las masas populares la búsqueda de la verdad.
2. Crear una nueva praxis psicológica para transformar a las personas y a las comunidades, reconociendo las
posibilidades negadas.
APS SELECTIVA: se refiere a una APS que responde a las políticas de ajuste propias del modelo neoliberal, orientadas a
recortar, a precarizar la atención en el sector salud. Plantea una serie de prestaciones básicas para garantizar ciertos
derechos pero no todos.
APS INTEGRAL O AMPLIADA: Contenida en Alma Ata. Su eje de trabajo es la desinsitucionalización, diferente de la
desmanicomialización. La desinsitucionalización implica generar dispositivos intermedios desde el manicomio a la
comunidad, que respondan a las prácticas en términos de producción de subjetividad y no a las prácticas objetivantes o
disciplinarias, donde el saber está en un solo lado -en este caso el componente formal de la Salud-, y el saber de la
población queda desestimado, en donde la persona no puede participar activamente en la producción de salud. En este
caso hablaríamos de la disciplinarización, en donde hay una hegemonía de las prácticas de Salud, que son las que
delinean los programas y planes, sin tener en cuenta al otro como persona activa que puede participar.
La APS integral está en actuar antes de que ésta persona tenga algún tipo de sufrimiento. Entonces, antes de que esta
persona llegue a una junta médica, podemos pensar que hubo instancias que tal vez no se agotaron para que esta
persona termine como sufriente de una junta médica que va a decidir por ella.
Si en Salud Comunitaria tenemos como objetivo la inserción social, la internación es el lado opuesto. Entonces, cada vez
que internemos a alguien, tenemos que pensar qué pasó en las instancias anteriores,. Hay muchas instancias, porque
hay recursos en la comunidad que tal vez no pudimos ver. Hay recursos intermedios que tampoco pudimos activar. Por
eso la internación está planteada como última instancia, porque no podemos pasar por alto los recursos que podemos
llegar a encontrar en la comunidad. Entonces, cuando hablamos de APS y Salud Mental, es teniendo como objetivo la
inserción social.
UNIDAD II
El estado benefactor establece una relación entre aportes según el ingreso real y cobertura de riesgos igualitaria
garantizada por la condición y los derechos de ciudadano.
El estado benefactor plantea como piso una integración social minima: empleo, vivienda, educación en donde la
protección social debe ser una prioridad del estado.
En el siglo XVII hubo dos pilares en relación a la vida en sociedad:
1. Contrato social: garantiza la política y el mercado.
2. Mercado: asegura la libertad de los intercambios económicos y el desarrollo.
La seguridad social esta dada en que ciertos riesgos de la vida sean asumidos solidariamente a través de instituciones
colectivas organizadas. (Mutuales, socorros mutuos, gremios obreros, etc.)
En la segunda mitad del siglo XVII los riesgos son asumidos por el Estado.
La primera legislación social se da en Alemania con Bismarck (1883 – 1888)
Se crea la primera ley de seguro de enfermedad obligatorio (1883) en donde la cotización es compartida entre obreros y
patrones). Plantea una gestión tripartita entre obreros, patrones y Estado. En 1884 se crea la primera ley de accidentes
de trabajo. En 1889 se crea la primera ley de jubilaciones e invalidez. Estas tres leyes conforman el primer código de
seguridad social de 1911.
Había una concepción de vida y salud como capital social.
Con Beveridge en Inglaterra se crea el primer instituto de salud mental.
En 1959 en Inglaterra se firma la primer acta de salud mental que promueve: los derechos del paciente; disminuir los
cuidados institucionales; disminución progresiva de las instalaciones psiquiátricas; prevenir las internaciones
psiquiátricas; no separar al paciente de su familia y su comunidad; tratamientos del paciente en su comunidad.
En 1962 en Inglaterra como política nacional el ministerio de salud promueve el cierre de los hospitales psiquiátricos
grandes y la creación de pequeñas unidades psiquiátricas en hospitales generales. Se plantea la creación de equipos de
salud mental ambulatorios de dispositivos como hospitales de día y centros de salud y también un sistema de atención
domiciliaria. Se promueve la planificación local de acciones y la participación de organismos de la comunidad como los
representantes de los usuarios de salud mental.
Con el derrumbe del Estado de Bienestar (1976 aprox.), rol del estado cambia, instalándose una política neoliberalista en
la cual el Estado debía dejar de intervenir en la economía y sus gastos debían de ser reducidos. El estado se retira de la
cobertura de los riesgos (enfermedad, incapacidad, vejez, desempleo, etc.) y transfiere estas funciones a la esfera
privada.
El estado economicista rompe con los valores de solidaridad de la integración social y de la acción de lo público. Lo que
propone es que la política se acomode en relación al gasto-ingreso. Entonces, se rompe con la idea de protección social y
de solidaridad o de asunción colectiva de riesgos.
En el caso de la salud, el estado economicista transfiere a la competencia privada muchas funciones de las cuales antes
se ocupaba el sistema público, por ejemplo: los servicios complementarios, la tecnología diagnóstica, los equipamientos,
etc. Donde el estado termina pagando a las clínicas privadas por ciertos estudios.
Entones, el estado economicista promueve el abandono de lo público como una ilusión de realización personal. La
función de los riesgos de existencia es individual. Eso significa que uno va a hacer con su salud de acuerdo a lo que pueda
pagar.
Entonces, se pierden los valores de solidaridad y también los derechos sociales.
En el contexto del estado economicista habla del riesgo de desciudadanización, que se refiere a la pérdida progresiva de
los derechos ciudadanos hasta llegar el momento de perder todos sus derechos.
Se pierden los valores de solidaridad y derechos sociales y en lo que refiere a la asistencia pública numerosos sectores
quedan excluidos de los bienes económicos y simbólicos.
mental. Sin embargo, la dispersión de teorías y el hecho de que diferentes profesionales siguen en su práctica de
atención los parámetros de su disciplina de origen, hace complejo contar con un discurso teórico que haga coincidir este
conjunto de enunciados. Esto ha favorecido la supervivencia del discurso psiquiátrico sobre la enfermedad mental.
Lazo social y relación terapéutica: El orden disciplinario ha reforzado las jerarquías profesionales, los saberes de las
ciencias sociales y ha generado relaciones entre cientistas e individuos, donde se ha impuesto un dominio sobre la
significación, una defensa del poder simbólico de la palabra de autoridad del “experto”.
LEY 2440 DE PROMOCIÓN SANITARIA Y SOCIAL DE LAS PERSONAS QUE PADECEN SUFRIMIENTO MENTAL
GOBIERNO DE LA PROVINCIA DE RÍO NEGRO. PROMULGADA EL 01 DE SEPTIEMBRE DE 1991.
El fin de la ley es tender a la recuperación de la identidad, dignidad, y respeto de las persona humana con sufrimiento
mental. La provincia promueve un sistema de salud que garantice el tratamiento y rehabilitación de las personas con
sufrimiento mental. Queda prohibida la habilitación y funcionamiento de manicomios u otro equivalente. La internación
es el último recurso terapéutico. En caso de internación, se debe lograr la más pronta recuperación y resocialización de
la persona. Se debe tender a la externación y tratamiento ambulatorio.
Se debe asegurar y procurar el mantenimiento de los vínculos, contactos y comunicación de las personas con sufrimiento
mental con sus familiares directos y amistades. Se deben implementar medios adecuados para el acceso al trabajo y para
asegurar el acceso a la vivienda, educación, y capacitación laboral, salud y medicamentos.
La provincia debe garantizar el acceso gratuito a las alternativas terapéuticas que en cada caso corresponda. Los recursos
terapéuticos se deberán proveer en el lugar habitual de residencia de la persona o en el más cercano.
La concepción del sujeto que sostiene la psiquiatría supone una continuidad y permanencia en su objeto de estudio, el
sujeto enfermo. Por esta suposición es aislado de su tiempo, de su época, de su territorio físico y social y de su cultura.
Pero debemos reconocer que este sujeto aislado no existe. El individuo con sufrimiento es siempre sujeto de un lugar
físico y de una sociedad determinada, de una época y una cultura, las cuales modelan su subjetividad, su relación con lo
otros y su sufrimiento. Se trata siempre de un sujeto concreto, que vive bajo ciertas condiciones que le impone el
territorio que habita, la vida social y el lugar que ocupa en la jerarquía de su sociedad. Por lo tanto, este sujeto no puede
ser comprendido ni su sufrimiento interpretado si no es en el conjunto de las múltiples determinaciones que lo
atraviesan.
La patologización del conflicto: es algo que utiliza mucho el control el aparato de Estado. Implica que diferentes
sectores que son caracterizados como grupos de riesgo (pobres, locos, adictos, extranjeros) y esta caracterización
siempre es de tipo patológica. Esta patologización tiene como fin el establecimiento de un control permanente. La
respuesta siempre es la represión de la expresión de la subjetividad y encierro de los cuerpos para que no molesten. El
concepto de grupo de riesgo no ha servido más q para legitimar acciones de control y de exclusión social sobre diversos
sectores de la población.
Desmanicomialización y la gestión de los riesgos: Los saberes de una perspectiva manicomializadora tienden a
desarrollarse tratando de detectar quienes son los locos y cómo dotar al Estado de los instrumentos de este saber. Aquí
entra en juego un nuevo saber hegemonizado por la medicina mental o la psiquiatría que guía las acciones a encarar en
relación a la locura y a sus diversas manifestaciones.
La sociedad a través de sus instituciones debería hacerse cargo de la segregación de la locura que ella misma produjo y
ofrecer instrumentos de integración a la marginalización en que quedo el sujeto. Esto lleva a la idea que antes de
plantear el fin del manicomio hay que desarrollar y garantizar los mecanismos administrativos que se hagan cargo de
esta problemática. Muchos de esos mecanismos administrativos tienen que ver con las leyes de salud mental. También
tenemos que prevenirnos del fin del manicomio, de no caer en soluciones que son más economicistas que
desmanicomializadoras, por el menor costo vamos a demanicomializar cuando en realidad no hay una decisión política
de implementar la ley. Las soluciones economicistas plantean en general la desresponsabilización del Estado acerca de
su función social, la salud empieza a cobrar una asunción de la responsabilidad individual.
Se trata de llevar a la práctica una afirmación de lo singular, de lo múltiple, de las diferencias a que nos obliga la
producción de un pensamiento. Se trata de afirmar una micropolítica y enfrentar los riesgos de la demolición que estas
propuestas desmanicomializadoras arrastran, y hay que empezar a asociarse con grupos que puedan hacer frente a las
nuevas situaciones vitales que son los grupúsculos de resistencia, los dispositivos o los espacios de contrefectuación de
este poder. Entonces, es el propio cierre del manicomio el que va a forzar la producción de nuevas formas de enfrentar
la problemática que estos pacientes le plantean a la sociedad.
La ley plantea también que el enfermo es peligroso para si mismo o para terceros. Este debe ser hospitalizado con o sin
su consentimiento. El director decide sobre la capacidad legal del internado (régimen de visitas, desplazamientos dentro
del establecimiento, imposición de tratamientos o medidas de seguridad). Asume las funciones de guardia y custodia del
enfermo. Si la policía o juez deciden la internación de oficio, el directo no puede negarse.
La experiencia moderna de la locura se constituye y ordena bajo los criterios de la ley Esquirol. El loco debe ser
internado, aislado, y custodiado. El médico psiquiatra cumple la función de juez y policía. Su saber establece criterios de
peligrosidad e incapacidad del loco. La ley legitima la existencia del manicomio y del encierro en base a la peligrosidad.
Dimensiones epistemológicas: entre el siglo XIX y muy entrado el siglo XX hay dos posiciones respecto a la enfermedad
mental: la organogénesis y la psicogénesis. Para que la enfermedad mental pueda ser un conocimiento objetivo: el
comportamiento, la cc y la moral ingresan al conocimiento científico como objeto de investigación neurobiológica. Se
trata de mostrar que toda actividad humana tiene su correlato en la función cerebral. De esto se pasa de inmediato y sin
muchas razones científicas a que en el funcionamiento del cerebro está la causa de la enfermedad mental,.
COMUNIDAD: se define por las relaciones, se constituye de personas = relaciones. Comunidad, implica una concepción
de ser humano como persona = relación y sugiere un tipo de lazo social que se coloca en un punto intermedio entre un
social que no es nada más que una suma de individuos, y un social cosificado, totalitario con vida propia y autosuficiente.
En una comunidad, a diferencia de una sociedad, no se ponen en común solamente relaciones secundarias (relaciones
funcionales, burocráticas), en la comunidad son compartidas también relaciones primarias (relaciones de afecto, amor,
comunión). Los seres humanos necesitan vivir esa dimensión afectiva para su plena realización.
En una comunidad tal como la entendemos, se constituye un tipo de vida en sociedad donde todos son llamados por su
nombre, donde todos son autónomos y con ello tienen la posibilidad de expresarse. Las personas son reconocidas como
sujetos que participan, con subjetividad propia, como seres singulares.
PSICOLOGÍA COMUNITARIA: es una psicología de relaciones creada para un mundo relacional. Su objeto versa sobre
formas específicas de relación entre personas unidas por lazos identitarios construidos en relaciones históricamente
establecidas, que a su vez construyen y delimitan un campo: la comunidad. No es posible entonces llevar a cabo acciones
comunitarias a partir de una concepción fragmentaria de la comunidad, construida a partir de la sumatoria de individuos
aislados. El ser, como entidad individual, es una noción incompleta que omite, mediante un ejercicio intelectual, una
parte de sí mismo: el Otro, con el cual se relaciona y para el cual es un alter.
Historia de la IAP: Kurt Lewin rompe con la tradición positivista (ciencia independiente de lo practico) y propone que la
investigación se integre a la acción social para promover cambios en la estructura social y las relaciones intergrupales.
Esto trajo un poderoso impacto en las cs sociales.
En 1970, la IAP se vinculo con el activismo militante (principalmente Latinoamérica) donde la situación social y política
estaba atravesada por dictaduras militares. En este contexto, Brasil dio a conocer la propuesta de Paulo Freire de
investigación participante.
La marca fundamental del cambio en este año fue la introducción al concepto de “participante”.
La diferencia entre “investigación acción” y “investigación Participante” es que la primera no asegura la participaron de
los sujetos de estudio, la segunda no conduce a un cambio social deseado y planeado, aunque algún cambio siempre
ocurre.
Aspectos conceptuales: La IAP es un proceso de investigación, producción de conocimiento e intervención social que
parte de problemas sociales específicos buscando transformarlos y concretas un proceso colectivo de producción de un
saber. El punto de partida de la IAP es la incorporación del saber popular como un elemento que compone el
conocimiento científico, del cual parten principales motivaciones para la realización de IAP (en la identificación del
problema y sus soluciones). Ambos conocimientos interactúan y producen continuas reflexiones.
En la IAP se plantea una complementariedad de saberes entre:
Investigadores externos: detectan un problema de una realidad dada. Son los que pertenecen al ámbito académico.
Investigadores internos: viven los fenómenos que estudian. Son las personas de la institucin, grupo o comunidad.
En contra de esta posición esta la clásica que postula que la separación es necesaria para garantizar neutralidad y
objetividad del conocimiento producido.
Momentos de la IAP:
1. Familiarización: es el primer momento de conocer a la comunidad, sus costumbres, espacios físicos. Es un proceso
de aproximación y diálogo, de mutuo aprendizaje y de respeto. A medida que se va construyendo ese vínculo,
permite al investigador realizar alguna intervención, opinar, proponer una actividad. Es un momento necesario para
alcanzar la realización de la tarea inicial, dentro de la IAP, el relevamiento y posterior análisis de las necesidades.
2. identificación del problema conjunto: una necesidad existe para un grupo, cuando sus miembros sienten que les
falta alguna cosa, o cuando ciertas situaciones en sus vidas producen efectos que los perturban. La identificación de
las mismas sirve a la tarea que atraviesa durante todo el proceso de acción comunitaria buscando transformar las
necesidades, percibidas (cognitivamente) en necesidades sentidas (cognitiva y afectivamente, o concienciadas).
3. Análisis de datos: se trata de preparar el material: transformar números, estadísticas y reportes en un conjunto
articulado de información de los de la comunidad en cuestiones técnicas de análisis científicos.
4. Planificación: el análisis de datos, que va a permitir definir y organizar un plan de acción, que consiste en la
búsqueda de soluciones para las necesidades que el investigador ha encontrado.
El proceso de IAP se trata de un espiral: la acción puede encontrar nuevos problemas o reflexiones sobre el problema
inicial. Los autores de IAP conciben el avance del conocimiento según el modelo del espiral: acción-reflexión- acción van
conformando nuevos niveles; un conocimiento que avanza retomando aspectos y puntos anteriores reconstruyéndolos
en otros niveles de comprensión. La IAP no es solo un método de investigación sino una forma de vida.
Necesidades:
Inferidas: son aquellas compresiones a priori que lleva el investigador externo.
Cognitivamente percibidas: todo lo explícito a lo que se hace mención.
Sentidas: son las que guían la investigación, no se perciben a simple vista cognitivamente, se construyen
conjuntamente entre saberes académicos y populares. En función de estas se generan programas.
Organizaciones:
Permanentes: trabajan no solo con problemas inmediatos sino con problemas a mediano y largo plazo. En ellas hay
un intercambio comunitario que podría colocarse a nivel del mesosistema. Se vive en comunidad y no queda la persona
aislada en su propia familia.
Transitorias o espontáneas: aquellas que se reúnen para hacer frente a un problema emergente y que luego se
dispersan en la medida en que sus objetivos se han concretado. De ellas se pueden sacar pocos beneficios, la gente las
considera tiempo perdido y que es mejor dedicarse al propio trabajo, la culpa no la tiene la organización en si, sino la
manera, sin coordinación, ni buen conocimiento, de lo que sucede, se trabaja desorganizadamente.
Democráticas: Para que una organización sea considerada democrática hay dos cuestiones que deben estar
garantizadas: el acceso de todos a la información y la participación en la toma de decisiones, fundamentalmente en las
decisiones más importantes. Es fundamental para el desarrollo de una organización, que la información sea compartida
por todos los miembros, que todos sepan que esta pasando, que se enteren del manejo de las cuentas, de las actividades
que se realizan, lo que puede suceder, pero ningún medio es suficiente cuando falta la base principal de un proceso de
comunicación: el conocimiento del tema tratado.
Autoritarias: cuando la mayoría de sus integrantes desconoce que esta pasando en su propia realidad y que esta
pasando con los problemas a los que se dedica tal organización. La democratización no se logra y el poder queda en
manos de aquellos con mayores recursos para comunicarse. En las relaciones autoritarias otros toman decisiones por
nosotros, no somos dueños de nuestro actos, somos dominados por otros. La dominación grupal y social también se
basan en la concentración de información, los que dominan saben mas que los otros y toman las decisiones por otros. Si
uno no maneja información o no la recibe en forma adecuada, no puede tomar libremente una decisión. Si esa
organización no puede democratizar las relaciones es imposible arribar a un autodiagnóstico.
No podemos producir salud y SM en una organización autoritaria, al menos en el marco de la APS, Carta de Ottawa,
Declaración de Caracas, porque todo esto está pensado en un espacio de democratización de las relaciones, en donde
exista la equidad, la igualdad y la solidaridad. Si la organización no tiene una relación con sus miembros democrática,
muy poco vamos a producir salud. Una organización autoritaria, sería la que trabaja en el marco de una APS selectiva,
desde el marco monodisciplinar o en su defecto un enfoque totalmente objetivante, y disciplinador.
Diagnóstico
Pasivos: Todo se hace desde afuera de nosotros, alguien recoge datos que nos pertenecen, los evalúa y saca
conclusiones sin nuestra participación. En los diagnósticos pasivos sociales uno proporciona datos cuyos resultados
quedan en manos de quienes vinieron a obtenerlos, nunca saben para que son, y donde van a parar, en ciertas
poblaciones, los entrevistadores son rechazados, se produce una justa reacción a este ejercicio del poder. Se trata de un
diagnóstico autoritario porque restringe el poder de decisión de la comunidad y permite concentrar poder en quienes
reciben y procesan los datos. El resto de la comunidad no tiene ninguna participación en la toma de decisiones.
Participativos: implica que las personas puedan empoderarse con el acceso a la información y con el acceso a la
toma de decisiones. Son aquellos en los que las personas dan cuenta de las necesidades sentidas, cuando la gente
reconoce su situación y saca conclusiones, ejerciendo en todo momento su poder de decisión, su esfuerzo y experiencia
para llevar adelante un plan de acción, una búsqueda de soluciones a esos problemas o necesidades. Poniendo, de esta
manera, el conocimiento al alcance de todos, constituyendo un proceso de aprendizaje, a mayor participación mayor
educación, y a menor educación menos posibilidades de ejercer la autodeterminación comunitaria, de tener algún poder
social de decisión. Entonces, el diagnóstico se inscribe para Prieto Castillo en una labor de redistribución de poder en una
comunidad.
Dentro del diagnóstico participativo se encuentra el autodiagnóstico comunitario. Un autodiagnóstico comunitario
consiste en el conocimiento que desarrolla la propia población sobre un tema o problema, a partir de actividades
organizadas o mediante el aprovechamiento del saber y de las experiencias de cada participante.
En el autodiagnóstico, jamás se parte de cero porque una comunidad nunca es totalmente ignorante de lo que sucede.
No solo se dirige a identificar problemas de la comunidad, sino también a reconocer elementos positivos que pueden ser
útiles para solucionarlos, aparece como critica y como una búsqueda.
UNIDAD IV
Lo que hace la red es cambiar la direccionalidad, no empieza a ver cómo incluir a la gente en lo que yo traigo sino cómo
hacemos nosotros incluimos en lo que la gente ya está haciendo.
Los investigadores no deberían ir a la comunidad a llevar ideas, sino a trabajar con las ideas de la propia comunidad.
Entonces, el psicólogo al visitar al poblador en su vida cotidiana tiene que necesariamente operar en espacios
interculturales, ya no puede operar en espacios clásicos de consultoría, donde se ubica como único portador de cultura.
Hay que comenzar a pensar desde el arraigo, desde el compromiso afectivo que tenemos con nuestro lugar.
Generalmente se trabaja con las debilidades de la población, con la patologización del conflicto (Saidón). Pero nosotros
estamos ahí para fortalecer todo el potencial de salud que existe en la comunidad. El trabajo en red es partir de la
capacidad terapéutica disponible en la población.
La utilización de mapas: se utilizan mapas donde se dibujan los domicilios de los vecinos y las redes que los van uniendo
dando cuenta del antes, durante y el después para evaluar el trabajo comunitario. Se trata de ir dibujando, con la ayuda
de la gente de la comunidad cómo se van desplegando las redes comunitarias a lo largo de todo el trabajo comunitario.
En la evaluación final se tiene en cuenta no sólo el haber alcanzado o no la solución al problema que se quería resolver
sino también el fortalecimiento y ampliación de las redes comunitarias. Si hay un objetivo es el potenciar las acciones
saludables que hay en la población y fortalecer las redes que han podido abordar ciertas problemáticas, además
ampliarlas. Las redes se entienden como un factor protector en términos de salud.
El aporte de la perspectiva sistémica al “pensar en redes”: Bertucelli a la red desde una perspectiva sistémica (el
enfoque ecológico contextual es un acercamiento a esta perspectiva). Se trata de una apuesta por ir más allá del análisis
individualista. Se centra la atención no en los individuos sino en sus relaciones, en sus pautas de interacción y en los
intercambios que realizan. Es una técnica que permite visualizar tanto las relaciones formales como las no formales. Las
relaciones formales serían las institucionales, las no formales las de compadrazgo. Se puede pensar como relaciones
entre personas y también entre grupos, instituciones, etc. teniendo en cuenta que dichas relaciones pueden ser infinitas.
Cuando se aborda la problemática esa red puede incluso permitir abordar otra.
En un trabajo comunitario se utiliza tanto en la fase de diagnóstico, como de ejecución y evaluación de una intervención.
Tipos de redes:
Según los actores involucrados:
- Interpersonales: entre diferentes miembros de la comunidad que no pertenecen a ningún grupo organizado.
- Intergrupales: formadas por diferentes grupos de la comunidad o externos a la misma.
- Interinstitucionales
- Combinadas: formada por actores sociales de cualquiera de las entidades mencionadas.
- Intercomunitarias
Según su funcionamiento:
- Circunstanciales: se activan por una situación específica y desaparecen una vez resuelta esa situación.
- Estables: mantienen los mecanismos de relación e intercambio de manera permanente.
Según su reconocimiento:
- Visibles: reconocidas por sus miembros, por el resto de la comunidad e identificada por actores externos.
- Invisibles: cuando funcionan en red sin ser cc de ello.
Según su estructura:
- Espontáneas: las relaciones se establecen de manera natural y espontánea.
- Estructuradas o institucionalizadas: su estructura y organización están establecidas.
NÚÑEZ, RODOLFO ALBERTO. (2008). REDES COMUNITARIAS. AFLUENCIAS TEÓRICO METODOLÓGICAS Y CRÓNICAS DE
INTERVENCIÓN PROFESIONAL. CAP. II Y III
Para pensar en red el marco de referencia teórico más relevante es el socio-ecológico de Urie Bronfrenbrenner, quien
presenta una descripción del proceso de desarrollo del niño visto desde una perspectiva sistémica. Su modelo muestra al
individuo y su medio como partes de un sistema de red, cuyas influencias son mutuas y circulares. Cada persona se halla
en una realidad que consiste en un número de sistemas de diferentes niveles:
Microsistema: constituido por las personas del entorno inmediato.
Microsistema: A medida que el niño crece va perteneciendo a diversos microsistemas (escuela, grupo de amigos,
equipo de fútbol).
Mesosistema: La relación entre esos microsistemas conforman mesosistema, que es un sistema en sí mismo.
Ecosistema: el niño es influido por lo que sucede en su entorno, sin necesidad de formar parte directamente de él.
por ejemplo, la cuidadora del niño (microsistema) es a su vez parte de los servicios sociales de la municipalidad
(ecosistema).
Macrosistema: es el nivel abarcativo en el cual todos los otros sistemas depende unos de otros y cooperan entre sí.
Incluye valores culturales condicionantes expresados en la religión, las leyes y el poder económico y político.
SAFORCADA, ENRIQUE; CASTELLÁ SARRIERA, JORGE. (2008). ENFOQUES CONCEPTUALES Y TÉCNICOS EN PSICOLOGÍA
COMUNITARIA. PARTE II.
Según Montero, el análisis de las necesidades tiene dos protagonistas:
Los investigadores externos
Los investigadores internos (los miembros de la comunidad).
Para esta autora es la actividad inicial en la IAP, que ayuda a especificar los problemas que afligen a la comunidad y
verifica las condiciones sentidas por sus miembros. Esta actividad de análisis seguirá durante todo el proceso de acción
comunitaria, buscando transformar las necesidades percibidas en necesidades sentidas.
Necesidades
Percibidas: las que percibe la comunidad.
Inferidas: pertenecen a un orden objetivo, como las necesidades normativas y comparativas que son extraídas de
fuentes documentales y de estudios epidemiológicos.
Sentidas: una necesidad existe para un grupo, cuando sus miembros sienten que les falta alguna cosa, o cuando
ciertas situaciones en sus vidas producen efectos que los perturban. Son más subjetivas e incluyen sentimientos,
preocupaciones y percepciones.
UNIDAD V
4. Mortalidad
5. Mortalidad infantil
A estas tres derrotas en el campo de los derechos humanos Brehil les llama la triple inequidad cultural y sobre todo en
Latinoamérica. Dice que deberemos intentar resolver esta triple inequidad. Esto se inscribe dentro del replanteo del
concepto de necesidad en salud donde si queremos hacer una epidemiología dinámica que responda a los modos de
vida nos debemos replantear el concepto de necesidad, que ya no responde a lo fenotípico, y realizar un trabajo en lo
social, lo étnico y la perspectiva de género que recupere el planteo colectivo.
Dentro de las diferentes propuestas el autor propone un modelo de desarrollo humano que contemple lo contra-
hegemónico y lo intercultural. Deberemos no solo repensar el concepto de necesidad en salud sino poder recuperar lo
local y regional y trabajar en la triple inequidad.
Para transcender este sujeto de la modernidad no solo hay que trascenderlo trabajando en una disciplina sino que hay
transcenderlo en muchos ámbitos, académico, filosófico, científico y para eso nuestra responsabilidad en formarnos no
para exiliarnos sino para dar respuesta a las necesidades más sentida de nuestras comunidades pero en el marco de un
proyecto de desarrollo humano que contemple con contra hegemónico, lo intercultural y lo emancipador en el sentido
del transformación social.
aunque sea histéricamente. En el campo institucional el deseo histérico es esta fantasía de que estamos haciendo lo que
supuestamente está planteado como objetivo, finalidad, pero en realidad no lo estamos haciendo. Tomando a Freud
que dice que es el sostener la ilusión es importante y es eficaz hasta en el fracaso, es lo que rescata Ocampo. El sostener
un espacio de producción de subjetividad puede ser eficaz hasta en el fracaso. Porque el fracaso, tomando a “mas allá
del principio de placer” tiene que ver con que el principio de placer no rija, y rija otro proceso que tiene que ver con el
proceso secundario. El fracaso acá lo podemos tomar como que puede ser eficaz.
La otra autora que toma es a Doltó, quien plantea respecto de los padres de los niños, que si estos conocieran algunos
conceptos psicoanalíticos podrían prevenir ciertas conductas en los niños. Tomando este concepto de prevención,
Ocampo dice que si nosotros conociéramos acerca de la producción de subjetividad, podríamos planificar en torno a la
consecución de una producción de finalidad ligada al placer, al deseo. Un camino que no sea unidireccional, donde
también se implique la producción de subjetividad, en tanto y en cuanto el sujeto efector pueda encontrarse con la
tarea de llevar a cabo una planificación más ligada al deseo. De Doltó toma el concepto de prevención desde el
psicoanálisis.
Respecto de lo que toma de Winnicott (realidad y juego), la autora cita a Castoriadis, quien hace una crítica a los
psicoanalistas lacanianos quienes dicen que lo real de lo social no existe. Castoriadis dice que los lacanianos tienen
razón, para ellos, lo real de lo social no existe para ellos. Tomando a Winnicott, este plantea que el proceso de
constitución subjetiva y de identidad es permanente, dice que también respecto de la resolución del complejo de Edipo,
mós no a pesar de él. Dice que también con lo biológico, más no a pesar de él. Para él la resolución del complejo de
Edipo, lo biológico, no son determinantes de la constitución psíquica, sino que este es un proceso permanente.
Entonces Winnicott nos aproxima más a que la producción de subjetividad pueda construirse en cualquier momento de
la vida psíquica. Acá Ocampo piensa que pasa con el sujeto, donde plantea varios ejemplos y comienza a ver una
necesidad de los sujetos, de narrar. Por eso se apoya en el psicoanálisis, porque narrando, historizando me encuentro
con la verdad de ese sujeto. La verdad en la planificación analítica institucional es qué hacer con este malestar en el
marco de lo instituido, como sujeto, como grupo humano, como equipo de trabajo, que no sea posicionarme en la
queja, sino al menos en la protesta, como dice Ulloa y no caer en una encerrona trágica. El concepto de encerrona
trágica esta tomado del síndrome de Estocolmo, donde un torturado de alguna manera establece una relación de
dependencia para sobrevivir psíquica y físicamente, donde en esta encerrona no hay un tercero de apelación que venga
a representar la ley y que la relación no sea tortuosa, trágica. Nosotros seriamos el tercero de apelación, que con una
pregunta podemos instalar hacer circular la palabra en torno a la narrativa, a la historización del equipo de trabajo.
Entonces tomando al concepto de objetos transicionales (Winnicott), aquellos que se encuentran en una zona
intermedia entre el mundo interno y el externo, donde para el niño jugar con un objeto, lo quiere destruir y el objeto se
resiste. Se puede pensar como que el niño es agresivo al querer romper el juguete, pero Winnicott dice que no, que es
la resistencia y persistencia del objeto externo lo que construye psíquicamente al niño y hace que diferencie su yo de su
No-yo. Y ahí mete Winnicott el concepto de juego. Como juego que construye cada sujeto en particular, donde los
psicólogos tenemos una función de maternaje en tanto soporte. Soporte de ese otro que necesita un espacio de soporte
narcisistico.
La autora tomando a Winnicott dice que el trabajo con los equipos de salud mental o con cualquier equipo de trabajo,
debe apuntar, además de hacer circular la narración, a la construcción de espacios transicionales, de soporte narcisistico
que permitan la producción de subjetividad y que acerquen a este grupo humano en una ligazón de deseo, de tarea y
placer. Nuestra función de maternaje es resistir como ese juguete del niño, los embates de ese otro que nos va a poner
en una posición a veces incomoda, pero sostenernos ahí va a permitir que ese otro empiece a diferenciar un yo de no-
yo. Empiece a generarse un espacio a partir de la narrativa, de producción de subjetividad en tanto soporte narcisistico
transicional, que va a permitir la consecución de la planificación más ligada al deseo, el placer, haciendo otra cosa con el
malestar.
Para nosotros eso son los proyectos. El espacio de soporte narcisistico transicional que puede hacerse permanente y
puede persistir. Esos son los proyectos. El plan se puede caer, los programas se pueden caer, pero los proyectos si son
trabajados en, para, con y desde, son los soportes narcisisticos de un grupo humano, de un servicio, de una institución.
La transformación es generar un espacio de producción de subjetividad que implique un proyecto que hace de soporte
para que el grupo humano haga otra cosa con el malestar. No es la adaptación del sujeto al sistema, sino que fundamos
prácticas instituyentes, haciendo otra cosa con el malestar. Un sujeto que tiene su verdad, se cuestiona la realidad y
puede hacer otra cosa con el malestar. Esa otra cosa para Ocampo, en el marco de la planificación analítica institucional
es la producción de subjetividad, proyecto como soporte narcisistico transicional.
El desafío de la interdisciplinaridad esta instaurado, y es en los bordes del propio campo disciplinar que puede ser
construida. Esta tarea se torna posible a partir de que sale de las propias fronteras. Al tener objetos de trabajo mixtos,
solo podemos trabajar en el medio, en las fronteras, en el espacio intermedio entre las diversas disciplinas.
Se trabaja en planificación en salud con grupos empíricos. Pero si estos grupos no crearan un mínimo de espacio
psíquico común, es decir, si no se modificase también el grupo interno no se lograrían formular proyectos y accionar en
pro de éstos.
De la forma como trabajamos, las etapas clásicas de la planificación dejan de ser taxativas. En los moldes tradicionales,
la secuencia seria: diagnostico, relevamiento de problemas, elección de propiedades, evaluación de viabilidad,
gobernabilidad, formulación del plan, evaluación permanente y corrección del plan.
La propuesta que hacemos esta basada nen la relativización de estas etapas, resultante de otra concepción de lo que
significa entrar como soporte de un proceso de formulación – ya no mas planes-, sino de proyectos, con todo lo que
esto implica desde el punto de vista de la subjetividad del grupo. Así, estamos proponiendo un cambio en el énfasis de
la planificación como disciplina, estimulándola a ocuparse de subsidiar grupos humanos para formular proyectos, y no
más, simplemente para elaborar planes de acción.
Para entrar en el laberinto fue necesario salir del triangulo: En la mayor parte de los casos, cuando un asesor o soporte
de planificación es solicitado por un equipo, el principal problema es no tener un proyecto; cuando un grupo llega a
tener un proyecto claro es porque ya alcanzo a un grado de subjetivación, de región intermediaria conjunta, que le
permite embarcarse en un sueño común. Hay un para qué del grupo. Pero la mayoría de las veces cuando llegamos a
esta función de asesor o soporte, no existe un para qué del grupo. Están en juego varios posibles proyectos.
En la otra punta del triángulo, está la capacidad relacionada con los saberes, las capacidades técnicas y organizativas del
grupo. Cuando se trata de saberes clínicos, existe una gran variedad, que también se encuentra en la base de la
dificultad de operar con las diferencias. Organizarse es siempre “para”, es imposible dar cuanta de esta discusión sin
tener claridad previa a cerca de las finalidades deseadas y sin una minima estructuración de espacio intersubjetivo en el
grupo. El “ser-conjunto” necesita existir antes.
La propuesta del autor es alejarnos de los vértices del triángulo, alargar el campo. La discusión sobre cual es la clínica
que se desea, de cuales saberes estará constituida, con cual forma de organización del trabajo será estimada, es central
en nuestro papel y no hay como escapar a esto, la planificación en salud tiene que ver con la clínica y debe poder
discutir saberes y valores instalados en los trabajadores de salud.
El tercer vértice del triangulo esta relacionado con el control de recursos. Saberes, poder, tiempo, todo puede ser
entendido como un recurso. Este vértice guarda relaciones con la posibilidad de ser ejecutable. Para nosotros, la
capacidad de realización está relacionada, además de los recursos, con la osadía y la pasión con la que el grupo consiga
embarcarse en el proyecto. Así, el soporte y el manejo harían parte de éste. Esto nos saca del triangulo y nos sitúa en un
laberinto del cual no es necesario salir, pues la producción ocurre en el camino.
Malentendidos históricos
El principal malentendido es trasladar la planificación gestada en países socialistas a países capitalistas. Comenzó a
ocurrir que la planificación se alejaba cada vez más de los intereses de la población, sobre todo el modelo de
planificación tradicional de la época. Este modelo planificación normativa.
Planificación normativa: hay un gobierno que planifica sus decisiones en base a conceptos económicos. Se planifica con
necesidades normalizadas, o sea con necesidades que se supone que toda la población tiene. No son confrontadas con
la comunidad. La realiza un técnico que trabaja para el gobierno, por lo tanto su práctica va a estar determinada por los
propósitos del gobierno y no contempla la participación de los destinatarios. El técnico infiere y como mucho lo más
participativo que se hace son las encuestas que siguen dejando en una posición pasiva al otro, allí se pregunta pero no
se deja opinar, no se puede narrar ni historizar. Se toma una encuesta y a partir de ahí infiere lo que el otro necesita, y a
partir de ahí genera una planificación.
Es el modelo más usado en todos los sectores de las políticas sociales y en salud en particular. Concibe que todos
tenemos las mismas necesidades, por lo tanto normatiza, no contempla lo intercultural, las necesidades sentidas.
Se planifica unidireccionalmente, desde los estamentos gubernamentales, verticalmente hacia los destinatarios. Ese
plan puede estar ajustado a las necesidades sentidas de la población o no. No se toman en cuenta a los actores sociales
a quienes está destinado el plan. Estos plantes, al estar muy determinados por los propósitos del gobierno, cuando cae
el gobierno caen los programas.
Si se trabaja en el marco de una participación activa, con el otro, con complementariedad de saberes, toma de
decisiones compartidas, este proyecto que va de lo micro a lo macro, ese plan perdura, mas allá de los gobiernos. Si se
trabaja en, con, para y desde la comunidad, el proyecto puede permanecer.
Planificación estratégica: No intenta establecer normas sino desencadenar un proceso permanente de discusión y
análisis de los problemas sociales q lleva a proponer metas mas conflictivas, x los intereses en pugna. El planificador es
parte de una fuerza social.
A diferencia de la planificación normativa, en la estratégica planifican los mismos actores, todas las organizaciones que
participan del escenario. Diagnostican todos, evalúan todos, y se evalúa en cualquier momento del proceso de
planificación. Ejecutan todos. Hay saberes que se complementan. Por lo tanto la planificación implica una negociación
permanente y un contrato que hace que podamos acordar quien va a hacer cada cosa.
Es un modelo que nos permite pensar con ese otro en un escenario complejo, tomando el concepto de crisis como
contradicción entre los distintos sectores dominantes o hegemónicos. Esta crisis es tomada por la planificación
estratégica como algo positivo, en tanto y en cuanto, nos permite desencadenar un proceso de planificación