Tema: Biografía de Frederick W.

Taylor
Aportes y contribuciones a la administración de operaciones.
Por: GIQ. Karla Gabriela Orbea Izurieta
Frederick Taylor Frederick fue un ingeniero industrial estadounidense que buscó mejorar la
eficiencia industrial. También fue conocido como el padre de la gestión científica. Nació el 20
de marzo de 1856 en una familia adinerada en Germantown, Filadelfia. Debido al deterioro de
su vista, Taylor dejó la facultad de derecho y comenzó su aprendizaje como marcador de
patrones con Enterprise Hydraulic Works en 1874. Su experiencia laboral temprana dio forma a
sus puntos de vista de la administración. Se dio cuenta de las “malas condiciones industriales”
en las que los trabajadores restringían su producción y la mala gestión generaba ineficiencia
industrial.

Imagen 1: Frederick Winslow Taylor “Padre de la

Administración Científica”

Inició como obrero en un taller mecánico en Midvale Steel Company. En 1881, Taylor inició el
“sistema de gestión de tareas”, donde desarrolló una forma única de supervisión llamada
“capataces de funciones” con habilidades especializadas y ningún subordinado debe reportar a
más de un supervisor. Esto fue publicado en su libro “Shop Management” en 1903. Taylor
identificó que la baja producción se debía al “trabajo militar” en el que los trabajadores
trabajaban deliberadamente. Desarrolló un estudio de tiempo y movimiento sobre cómo se
podría hacer un trabajo específico de manera más eficiente. Su principal propósito para el
estudio era demostrar que “la mejor gestión es una ciencia verdadera” con “una mejor manera”
de realizar una tarea, que luego se conoció como Scientific Management. En Midvale, Taylor
comenzó a establecer un estándar de producción con un sistema de tasa diferencial de trabajo a
destajo. Empezó a pagar a los hombres y no a la posición.

En 1893, Taylor decidió concentrarse en promover su teoría de la gestión científica a través de

publicaciones y consultoría de gestión. En 1898, Taylor se unió a Bethlehem Steel, donde
realizó sus famosos experimentos con arrabio. Su estudio del manejo del arrabio ha contribuido
en gran medida al análisis del diseño del trabajo y dio lugar al estudio de métodos y
movimientos. Taylor se dio cuenta de la necesidad de adaptar la capacidad de las personas a los
requisitos de su trabajo.

Los conceptos de sus estudios fueron:

 El desarrollo de un método científico para reemplazar el método de la regla empírica

  Selección y desarrollo
de trabajadores
 La cooperación entre el superior y sus subordinados
 División equitativa del trabajo y la responsabilidad entre la dirección y los trabajadores

Aportes y contribuciones a la administración de operaciones:

1. Factor social

La sociedad trabajadora en el pasado constituye un soldado natural y sistemático y hay una

fuerte tendencia a que los gerentes recurran al poder jerárquico en lugar de confiar en los
trabajadores.

Taylor fue pionero en un método que se conoce como estudio de tiempo que implica dividir una
tarea de trabajo en sus diversos movimientos, eliminar los movimientos innecesarios,
determinar la mejor manera de hacer el trabajo y luego cronometrar cada movimiento para
determinar la cantidad de producción que se podría esperar por día. Para resolver el problema de
los sistemas salariales que fomenta el trabajo militar.

2. Factor político

Según Taylor, se suponía que los trabajadores eran incapaces de comprender lo que estaban
haciendo, incluso para tareas simples. Los trabajadores no aceptaron la introducción de su
sistema “la mejora continua” y esto dio lugar a varias huelgas. Taylor era un ferviente oponente
de los sindicatos (Gabor, 2000). Taylor no vio la necesidad de sindicatos y esto provocó una
vigorosa resistencia de los sindicatos en el uso de su sistema. Taylor creía firmemente que el
salario estaba vinculado a la productividad. 

3. Factor intelectual

Taylor identificó formas de mejorar la eficiencia, aparte de ser el padre del método de estudio
de tiempos y movimientos, Taylor implementó el sistema diferencial de pago a destajo que
recompensaba a los trabajadores que producían más productos. Esperaba mejorar los medios de
vida de los trabajadores y aumentar la productividad. El resultado inmediato de la gestión
científica de Taylor fue la drástica reducción de los precios de los bienes y el aumento de los
salarios. Esto requeriría más trabajadores y una mayor escala de producción, lo que promete una
mejora económica para las personas.

Hoy en día la gestión científica demuestra ser un remedio eficaz para satisfacer los deseos y
necesidades de los individuos a cambio de poder y máxima producción. Taylor se centró en la
gestión del trabajo y los trabajadores, pero llamó la atención sobre la importancia de la
selección, la formación, la compensación y la motivación, las áreas directamente relevantes para
la gestión de personas en el entorno actual.

La “mejor manera” de Taylor de realizar una tarea no siempre es el mejor método para el
trabajador actual, pero es importante establecer el hábito de saber cuál es la mejor manera y la
razón por la que es la mejor, y luego practicar el método hasta que uno se vuelve físicamente
diestro en ello, Taylor ha dejado a la gestión moderna el legado de prácticas como el estudio del
trabajo, la organización y métodos, el pago por resultados, la gestión por excepción y el control
de la producción.
 Bibliografía:

Münch, Administración: Escuelas, proceso

administrativo, áreas funcionales y desarrollo emprendedor. Editorial Pearson, Primera
edición, 2007, pp. 75-76.