Está en la página 1de 13

República Bolivariana de Venezuela.

Ministerio del Poder Popular para la Educación.


Punta de Mata – Edo. Monagas.
U.E: “Cayetano Farías Villarroel”.
4to Año, Sección “A”.

Díaz, Wilmer. Torres, Alejandra.


Márquez, Carmen Reina, Carmen.
Vegas, Peter. Aponte, Giulia.
Bello, Yurgina.
Ramírez, Renatha.
Fernández, Melany.
Acevedo, Francielvi.
Abril, 2016.
El alcohol.

En química, se denomina alcohol a aquellos compuestos químicos orgánicos que


contienen un grupo de hidroxilo (-OH) en sustitución de un átomo de hidrógeno, de un
alcano, enlazado de forma covalente a un átomo de carbono.
Además este carbono debe estar saturado, es decir, debe tener solo enlaces sencillos a
sendos átomos; (átomos adyacentes), esto diferencia a los alcoholes de los fenoles.
Si contienen varios grupos hidroxilos se denominan polialcoholes. Los alcoholes pueden
ser primarios (grupo hidróxido ubicado en un carbono que a su vez está enlazado a un
solo carbono), alcoholes secundarios (grupo hidróxido ubicado en un carbono que a su vez
está enlazado a dos carbonos) o alcohol terciarios (grupo hidróxido ubicado en un carbono
que a su vez está enlazado a tres carbonos).

El alcohol es un depresor del Sistema nervioso central, que pertenece al grupo de


sedantes junto con los barbitúricos y las benzodiacepinas.
El alcohol etílico o etanol es la droga que se encuentra en las bebidas alcohólicas, aunque
existen otros tipos de alcoholes como el metílico, que se utiliza principalmente en la
industria.

El alcohol es un tóxico que, circulando por la sangre, alcanza todos los órganos y sistemas
del organismo, por lo que se pueden producir importantes y múltiples problemas
relacionados con su consumo: afecta a la respiración intracelular, la producción de
neurotransmisores y el metabolismo.

El consumo excesivo de alcohol (grandes cantidades) en un corto período de tiempo


puede producir la muerte.
En el bebedor habitual aparece el síndrome de abstinencia tras una privación de bebida de
uno a cinco días. En este síndrome de abstinencia se dan síntomas orgánicos,
neurovegetativos.

Dependencia del alcoholismo.

La dependencia del alcoholismo consta de cuatro síntomas:

 Ansiedad: una fuerte necesidad o compulsión de beber.


 Pérdida de control: la incapacidad propia para limitar el consumo de alcohol en
cualquier situación.
 Dependencia física: síntomas de abstinencia como náuseas, sudores, temblores y
ansiedad, se presenta cuando se interrumpe el consumo de alcohol después de un
período en que se bebió en exceso.

Una dependencia grave puede llevar a la persona a presentar síntomas de abstinencia


que ponen en peligro su vida, entre los cuales se encuentran las convulsiones, que
empiezan entre ocho y doce horas después de la última bebida. El Delirium tremens
(D.T´s) comienza de tres a cuatro días después cuando la persona presenta una
agitación extrema, tiembla, alucina y pierde contacto con la realidad.

 Tolerancia: la necesidad de beber grandes cantidades de alcohol para sentirse


bien.

Historia del alcohol.

Los cereales fermentados, el jugo de frutas y la miel, se han utilizado durante miles de
años para fabricar alcohol (alcohol etílico o etanol).
Las bebidas fermentadas existen desde los albores de la civilización egipcia, y existe
evidencia de una bebida alcohólica primitiva en China alrededor del año 7000 A.C. En la
India, una bebida alcohólica llamada sura, destilada del arroz, fue utilizada entre los años
3000 y 2000 A.C.

Los babilónicos adoraban a una diosa del vino tan antigua que data aproximadamente del
año 2700 A.C. En Grecia, una de las principales bebidas alcohólicas que ganó popularidad
fue el aguamiel, una bebida fermentada hecha de miel y agua. La literatura griega está
llena de advertencias contra los excesos de la bebida.
Diferentes civilizaciones nativas americanas desarrollaron bebidas alcohólicas durante la
época precolombina. Una variedad de bebidas fermentadas de la región de Los Andes, en
Sudamérica, se hacían a base de maíz, uvas o manzanas y se les dio el nombre de
“chichas”.

En el siglo XVI, las bebidas alcohólicas (conocidas como “espíritus”) se utilizaban


ampliamente con propósitos curativos. A principios del siglo XVIII, el parlamento inglés
aprobó una ley que fomentaba el uso de cereales para la destilación de “espíritus”.
Estas bebidas alcohólicas, sumamente baratas, inundaron el mercado y llegaron a su
punto más alto a mediados del siglo XVIII. En Reino Unido, el consumo de ginebra alcanzó
los 68 millones de litros y el alcoholismo se generalizó.

El siglo XIX trajo un cambio de actitud y una campaña antialcohólica empezó a promover
el uso moderado de alcohol, algo que a la larga se convirtió en una prohibición total.

Componentes del alcohol.

El principal componente de cualquier bebida alcohólica es el etanol o alcohol etílico (en


química simbolizado como CH3CH2OH). El origen del etanol tuvo lugar hace ya muchos
años gracias a la fermentación anaeróbica, sin oxígeno, en una disolución de azúcares con
levaduras.
Es importante recalcar que el etanol no es un estimulante sino un depresor del sistema
nervioso central. Los efectos inmediatos de su consumo son la euforia y la desinhibición
de conducta dado que la sustancia afecta a los centros cerebrales responsables del
autocontrol.
Básicamente: el alcohol adormece las funciones cerebrales y sensoriales.
Existe un sinfín de bebidas alcohólicas diferentes y cada una de ellas integra unos
elementos químicos u otros que consiguen teñir la bebida de un color determinado, darle
sabor y olor específico y otra serie de características variadas.

Tipos de bebidas alcohólicas y su composición.

Las bebidas alcohólicas pueden clasificarse atendiendo al origen de su composición. Así,


tenemos bebidas fermentadas o bebidas destiladas:
 Las bebidas fermentadas como la cerveza, el vino o la sidra proceden de la
fermentación natural de azúcares de frutas de distinto tipo como son las uvas o las
manzanas. En el caso de la cerveza natural, la concentración de alcohol no supera
al 6% pero en el caso de los vinos y otros similares el contenido en alcohol puede
llegar al 20%.
 Las bebidas destiladas como el ron, el tequila, el whisky o el vodka no proceden
directamente de un proceso de producción en base a los azúcares de una fruta
determinada.
En este caso, hablamos de depuración y destilación de bebidas fermentadas que da
como resultado un contenido de etanol de un 30-60%, dependiendo de la bebida.

Contenido habitual de alcohol en las bebidas.

Cerveza de 2% a 6% de alcohol.
Sidra de 4% a 8% de alcohol.
Vino de 8% a 20% de alcohol.
Tequila 40% de alcohol.
Ron 40% o más de alcohol.
Brandy 40% o más de alcohol.
Ginebra del 40% al 47% de alcohol.
Whisky de 40% a 50% de alcohol.
Vodka de 40% a 50% de alcohol.
Licores de 15% a 60% de alcohol.

Beneficios de consumir alcohol.


 El consumo moderado de vino y cerveza aporta virtudes cardiosaludables,
protectoras del corazón, a la par que son beneficiosos tanto para la salud neuronal
como ósea.
 En el vino encontramos polifenoles con propiedades y virtudes claramente
anticancerígenas. Además, los polifenoles cuentan con beneficios
antiinflamatorios, antienvejecimiento y ayudan a prevenir problemas gástricos.
 Mejoran la respuesta inmune contra determinadas enfermedades infecciosas, a la
par que pueden ayudar a aumentar las defensas.
 No tienen un aporte calórico excesivo, por lo que son útiles incluso dentro de una
alimentación sana y equilibrada y en dietas de adelgazamiento.

Efectos que causa el alcohol en el organismo.

El consumo prolongado de alcohol puede hacer que las células del hígado pierdan su
capacidad de regeneración, pudiendo desembocar en uno cirrosis.
Los efectos dañinos que causa el alcohol en el cuerpo son innumerables, principalmente el
etanol que es una droga psicoactiva que provoca muchos efectos secundarios alterando
gravemente el organismo. En este caso juegan un papel muy importante la cantidad de
alcohol ingerido, como también las circunstancias.
Si se consume licor con el estómago lleno son menores los efectos de este en el
organismo.
En cambio, si se toma con el estómago vacío los efectos son mucho mayores.

Actuación del alcohol en el organismo.

La ruta metabólica que sigue el alcohol cuando se consume no tiene nada que ver con el
proceso digestivo normal. Éste pasa por el estómago al duodeno, donde se absorbe;
posteriormente al torrente sanguíneo, lo que produce irritación y estimula la secreción de
jugos gástricos así como procesos inflamatorios de esófago y estómago, gastritis y úlceras.
En unos pocos minutos llega el alcohol al cerebro donde actúa y donde se aprecian los
mayores efectos.

El alcohol puede tener un doble efecto en el organismo, ya que en su comienzo produce


una gran sensación de satisfacción y alegría, pero más adelante se comienza a presentar
visión borrosa y graves problemas de coordinación. Las membranas de las células no
pueden detener el paso del alcohol, y ya estando en la sangre se riega por la mayor parte
de tejidos que componen el cuerpo.

Con el consumo excesivo se pierde fácilmente la consciencia, pero si el consumo es


extremadamente alto puede provocar envenenamiento por alcohol y hasta producir la
muerte, ya que un alto porcentaje de alcohol en la sangre provoca paro
cardiorrespiratorio, o se puede producir la muerte por asfixia ocasionada por el vómito, ya
que cuando una persona está totalmente enajenada por causa del alcohol puede ahogarse
con su propio vomito al no poder responder a esta necesidad.

El alcohol después de ser ingerido puede tardar unos treinta o noventa minutos en llegar a
la sangre, en ese momento se reducen los azúcares que se encuentran en la sangre,
provocando una absoluta debilidad y agotamiento, esto sucede porqué el alcohol acelera
la transformación de glucógeno en glucosa, y esta se elimina más rápido.

Las fases de intoxicación etílica.

Luego de haber bebido alcohol aparecen los efectos, estos dependen de la cantidad que
se haya ingerido:

 La primera es euforia, excitación, desinhibición y se adquiere una conducta


impulsiva.
 La segunda es la intoxicación, cuando el organismo no está acostumbrado al
alcohol se afecta el sistema nervioso, se pierde la capacidad de coordinar los
movimientos y se pierde el equilibrio provocando algunas caídas, el alcohol
provoca depresión y pérdida de calor del organismo.
 La tercera es la fase hipnótica, de mucha confusión, se produce irritabilidad,
agitación, sueño, náuseas, vómitos y cefalea.
 La cuarta fase es la anestésica y de estupor, se dicen palabras incoherentes,
disminuye notablemente la consciencia, se pierde la fuerza muscular, no se
controlan los deseos de orinar, se dificulta la respiración.
 La quinta fase es la bulbar o de muerte, se entra en shock cardiovascular, se
produce paro respiratorio y llega la muerte.

Los efectos del consumo de alcohol en el cuerpo.

Los efectos del alcohol en el cuerpo muchos a mediano y a largo plazo, afectando
muchos órganos.

El cerebro y el sistema nervioso:

 El frecuente consumo de alcohol afecta gravemente las funciones cerebrales, en


primer lugar a las emociones, provocando cambios súbitos de humor, se altera el
control de la motricidad, provocando mala pronunciación, reacciones muy lentas y
pérdida del equilibrio.
 Puede alterar la acción de los neurotransmisores, modificando su estructura y
función. Lo cual produce una serie de efectos, como la capacidad de reacción, los
reflejos son retardados, se pierde la capacidad de coordinar movimientos, se
producen temblores y alucinaciones, se pierde el autocontrol, la memoria, la
capacidad de concentración y las funciones motoras se alteran gravemente.
 Todos estos efectos juntos son los causantes de una gran cantidad de accidentes
laborales y de tránsito los cuales han terminado con la vida de un considerable
número de personas en todo el mundo.
 El alcohol causa graves daños en las células cerebrales, como también a los nervios
periféricos, estos daños pueden ser permanentes.
 El alcohol también ocasiona la disminución de la vitamina B1, lo cual causa la
enfermedad de Wernicke-Korsakoff, la cual provoca la alteración de sentimientos,
pensamientos y la memoria.
 Produce trastornos del sueño en la gran mayoría de las personas que consumen
alcohol con mucha frecuencia.
 Además estas personas con frecuencia se aíslan de su entorno social, laboral y
familiar, lo cual provoca el abandono de las familias, divorcios y la pérdida de
empleo lo que puede provocar una profunda depresión y en la mayoría de los
casos termina en suicidios.
 La mayor parte de estos efectos se producen dependiendo de la cantidad y de la
frecuencia con la que se consume el alcohol.
 En dosis muy altas se puede llegar al estado de coma, en casos muy avanzados
provoca alteraciones mentales muy serias y daños cerebrales permanentes.
 Se presentan períodos de anemia, con alteraciones en la memoria condición que
puede durar algunos minutos, horas o incluso algunos días.

En el corazón y el aparato respiratorio:

 Aumenta la actividad cardiaca.


 El consumo de dosis muy elevadas puede aumentar la presión sanguínea o presión
arterial, ocasionando daños en el musculo cardíaco debido al efecto tóxico del
alcohol.
 Se debilita el musculo cardíaco y por lo tanto la capacidad para bombear se ve
disminuida.
 Produce vasodilatación periférica, lo que ocasiona enrojecimiento de la piel y
aumento de la temperatura de la piel.

En el aparato digestivo: estómago, páncreas, hígado y esófago.

Todas las molestias gástricas se deben a que el etanol erosiona e irrita la mucosa
gástrica, provocando ardor estomacal, el cual se puede ver incrementado si se toman
diferentes clases de licores a la vez.

 El alcohol aumenta la producción de ácido gástrico, provocando irritación e


inflamación en las paredes del estómago, lo que puede provocar úlceras y
hemorragias internas que pueden ser fatales.
 El alto consumo de alcohol puede ocasionar cáncer de estómago, de laringe, de
esófago y de páncreas.
 Puede provocar esofagitis, o sea la inflamación del esófago, además varices
esofágicas sangrantes.
 Se produce pancreatitis aguda, que es la inflamación severa del páncreas, lo cual
puede llevar a la muerte.
 La pancreatitis también puede ser crónica provocando un intenso dolor
permanente.
 El consumo de alcohol puede llevar a la persona a sufrir diabetes tipo II, con las
graves consecuencias que esta enfermedad provoca en las personas que la
padecen.
 El órgano que se encarga de metabolizar el alcohol es el hígado, las enzimas del
hígado transforman el alcohol primero en acetaldehído y luego en acetato y otros
compuestos. El proceso es muy lento, por lo tanto produce daños en los tejidos del
hígado.
 Por la irritación y la inflamación celular hepática es probable que se desarrolle una
hepatitis alcohólica, de esta manera el hígado se puede afectar transformándose
primero en hígado graso, luego puede llegar a la hepatitis y luego a la cirrosis,
terminando por desarrollar cáncer de hígado produciendo la muerte.
 Otras alteraciones de este órgano pueden ser la ictericia, o sea el color amarillo de
la piel, la esclerótica y la acumulación de líquidos en las extremidades.
 La función renal se ve alterada ya que la hormona antidiurética reduce sus niveles,
lo cual provoca deshidratación.
 El alcohol aporta una gran cantidad de calorías con muy poco valor nutritivo,
impide la absorción de algunos minerales y vitaminas, elimina el apetito
provocando desnutrición.

En la sangre:

 Impide la producción de glóbulos blancos y rojos.


 Cuando no hay suficiente cantidad de glóbulos rojos para transportar el oxígeno se
produce la anemia magaloblástica.

En el sistema inmunitario y reproductor:

 La falta de glóbulos blancos produce la falla del sistema inmunológico, lo cual


aumenta el riesgo de adquirir infecciones bacterianas y virales.
 Disminuye el deseo sexual.
 Puede ser causante de infertilidad y disfunción eréctil.
En el embarazo y en el feto:

 El consumo de alcohol durante el embarazo puede provocar en el freto el


síndrome alcohólico fetal, los síntomas de esta condición se manifiestan en el
retardo de crecimiento, alteración en los rasgos cráneo-faciales, malformaciones
cardíacas, hepáticas, renales y oculares.
 El daño más grave se produce en el sistema nervioso central del feto, el cual se
puede producir un marcado retraso mental.

Tomar y conducir.

El riesgo de que un conductor que se encuentra bajo los efectos del alcohol muera en
un accidente automovilístico, es al menos once veces mayor que el riesgo de los
conductores que no tienen alcohol en su organismo.
Para la mayoría de las personas, estas son sólo estadísticas, espantosas quizá, pero
sólo estadísticas. Pero para las familias y los amigos de quienes murieron como
resultado de que un adolescente tomará alcohol y condujera, cada cifra representa
una pérdida trágica.
El alcohol distorsiona las percepciones y el buen juicio de la persona. Las personas que
se encuentran bajo los efectos del alcohol admiten fácilmente que su tiempo de
reacción es menor que cuando no han bebido. Además, corren muchos riesgos que
nunca tendrían si estuvieran sobrios. A menudo, esos son riesgos fatales.

El daño producido por el alcohol es más grande en jóvenes que en adultos.

Una persona joven no tolera el alcohol de la misma forma en que puede hacerlo un
adulto.
La bebida es más dañina para los adolescentes que para los adultos, ya que durante la
adolescencia y la juventud, el cerebro aún se encuentra en desarrollo. El tomar
durante este período crítico de crecimiento puede causar un daño permanente en la
función cerebral, principalmente en lo relacionado con la memoria, las habilidades
motoras (habilidades para moverse) y la coordinación.
De acuerdo con una investigación, los jóvenes que empezaron a beber antes de los 15
años tienen cuatro veces más posibilidades de desarrollar una dependencia al alcohol
que aquellos que comenzaron a beber a los 21 años.

El alcohol en Venezuela.

América Latina es la segunda región en el mundo con mayor consumo per cápita de
alcohol, y Venezuela es el tercer país con el índice de ingesta más elevado en la región.
Así lo aseguro un informe publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los venezolanos, hombres y mujeres, están entre quienes más beben en
Latinoamérica, después de chilenos y argentinos. Quizás esto no parezca tan
alarmante hasta que se adereza con otros datos como que Venezuela es el país con la
tasa más alta por muertes atribuidas al alcohol de toda la región.

Así se plantea dentro del informe Situación regional del consumo de alcohol y la salud
en las Américas, publicado por las organizaciones Mundial de la Salud y Panamericana
de la Salud. En el documento, con cifras globales del 2012, se específica que el
consumo promedio de alcohol puro (calculado a partir del porcentaje de alcohol en las
bebidas consumidas) en Latinoamérica es de 8.4 litros, mientras que en el resto del
mundo es de 6.2 litros.

Latinoamérica es, además, la segunda región que más bebe en el mundo, por debajo
de Europa, y su ingesta va en ascenso.
Según la OMS y la OPS, las personas con “consumos episódicos fuertes”, es decir que
beben más de cuatro bebidas en una misma ocasión, pasaron de 18% a 30% en el caso
de los hombres y de 4.6% a 13% en las mujeres en los años 2005 y 2010.

Y, dentro de esta Latinoamérica con un alto consumo de alcohol, Venezuela se apunta


entre los países que más beben, que más episodios de “alcohol nocivo” tiene y con
más muertes por esta causa.

Los países con hombres más bebedores son Chile, Argentina y Venezuela con un
consumo respectivo de 9.6, 9.3 y 8.9 litros de alcohol per cápita. La bebida preferida es
la cerveza, con 55%.
Los destilados, sobre todo vodka y whisky, siguen con 30% y el vino – de alto consumo
en Chile y Argentina – con un 12%.

Resulta paradójico que, al brindar con alcohol, se diga “¡salud!”, frase muy extendida
en Latinoamérica y el resto del mundo. Es todo lo contrario: el consumo de alcohol,
según la OMS, está vinculado a más de 100 enfermedades, incluido el cáncer, y es
causal de accidentes de tránsito y de agresiones. Otro problema es que no sólo afecta
a la persona ebria, sino a quienes los rodean o, simplemente, se cruzan en su camino.

Venezuela lidera el oscuro ranking de muertes masculinas asociadas al alto consumo


de alcohol con la escandalosa cifra de 96,6 fallecimientos por cada 100 mil habitantes,
según el informe. Después está Guyana, con 80,7 y Brasil, con 73,9. En el caso de las
mujeres, la línea es al revés: Venezuela ocupa uno de los puestos más bajos con una
tasa de 6,2 fallecimientos asociados al alcohol por cada 100 mil habitantes. En ese
ranking lideran las argentinas con 21,1 muertes.
Síndrome de dependencia alcohólica, o alcoholismo.

Este es uno de los problemas más graves que conlleva el consumo desaforado e
incontrolable de alcohol debido a la gran cantidad de síntomas y patologías que se
asocian al alcoholismo.

Un rastro de tragedia.

El alcohol se ha cobrado la vida de muchos artistas con talento, músicos y escritores en


las décadas pasadas.
Estos son sólo algunos:

John Bonham (1948-1980): el exceso de alcohol llevó a la trágica muerte de John


“Bonzo” Bonham, baterista de Led Zeppelin, más conocido por su solo de batería en la
pieza “Moby Dick”. Se le encontró muerto, asfixiado por su propio vómito después de
una noche de excesos con la bebida, cuando estaba ensayando para su próxima gira.

Steve Clark (1960-1991): guitarrista de Def Leppard. Bebía en exceso, murió en su


casa de Londres debido a una combinación letal de drogas y alcohol.

Oliver Reed (1938-1999): actor británico conocido por sus papeles en ¡Oliver!,
Mujeres enamoradas, Los Tres Mosqueteros y Gladiador. Falleció de un repentino
ataque al corazón durante un descanso en la filmación de: Gladiador. Se encontraba
muy intoxicado tras haber consumido 3 botellas de ron, 8 botellas de cerveza y una
gran cantidad de whiskys dobles.

Brian Connolly (1945-1997): vocalista de rock escocés y cantante de Sweet. Su


problema con el alcohol provocó que dejara la banda en 1978, años después se
reintegró nuevamente pero su problema con la bebida había dañado su salud y murió
a causa de un trastorno hepático en 1997.

Michael Clarke (1946-1993): músico estadounidense y baterista de los Byrds. Falleció


de un problema hepático después de tres décadas de consumo habitual de alcohol.

Esperamos que esta ilustración sobre todos los graves problemas y quebrantos de
salud que el alcohol puede ocasionar a quienes no controlan los impulsos de beber sea
una verdadera ayuda para que tomen conciencia, y por lo menos traten de buscar
ayuda profesional, ya que el alcoholismo más que un “vicio” como es nombrado por
muchos, es más bien un grave problema de salud al que se le debe prestar atención
inmediata tan pronto se empiecen a sentir los deseos de estar bebiendo con
frecuencia.
Si tienes un amigo, familiar o conocido que presente este problema trata de lograr que
se deje ayudar y acuda a un centro de rehabilitación para personas alcohólicas, te
aseguro que más adelante te lo va a agradecer, porque de esta manera se le ahorrarán
innumerables cantidades de problemas, tanto familiares como personales y lo más
importante evitará graves problemas de salud que conllevan a consecuencias muchas
veces fatales.
Bibliografía.

Karina Malpica, Unión Internacional de Química pura y aplicada, Diccionario


enciclopédico popular ilustrado Salvat. El Alcohol. México. Última edición: 01/04/2016.
Wikipedia. 04/04/2016. [https://es.m.wikipedia.org/wiki/Alcohol].

Fundación por un Mundo Libre de Drogas. La verdad sobre el alcohol. Chile. 2012.
Vidas sin drogas org. 26/03/2016. [mx.drugfreeworld.org/drugfacts/alcohol.html].

C.A Últimas Noticias / Emen. Venezuela es el tercer país con mayor consumo de
alcohol en la región. Venezuela. 12/05/2014, 16:00 PM. Economía y negocios –
elmundo. 26/03/2016.
[www.elmundo.com.ve/noticias/negocios/consumo/Venezuela-es-el-tercer-país-con-
mayor-consumo-de-a.aspx].

También podría gustarte