Está en la página 1de 9

+Model

OTORRI-700; No. of Pages 9 ARTICLE IN PRESS


Acta Otorrinolaringol Esp. 2016;xxx(xx):xxx---xxx

www.elsevier.es/otorrino

ARTÍCULO ORIGINAL

Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en


lactantes y su comparación con otoemisiones
acústicas, otomicroscopia y timpanometría de 226 Hz
Eduardo A. Mena-Domínguez a , José I. Benito-Orejas a,∗ , Beatriz Ramírez-Cano a ,
Darío Morais-Pérez a y M. Fe Muñoz-Moreno b

a
Servicio ORL y PCF, Hospital Clínico Universitario de Valladolid, Valladolid, España
b
Unidad de Apoyo a la Investigación, Hospital Clínico Universitario de Valladolid, Valladolid, España

Recibido el 24 de septiembre de 2015; aceptado el 7 de enero de 2016

PALABRAS CLAVE Resumen


Niño; Introducción y objetivo: La timpanometría de baja frecuencia (226 Hz) se considera un proce-
Pérdida auditiva; dimiento ineficaz para el diagnóstico de la otitis media serosa en los primeros 6 meses de la
Otitis media; vida. Con la implantación del cribado auditivo universal, se recomienda la utilización de la
Pruebas de timpanometría de alta frecuencia de 1.000 Hz. A fin de optimizar el diagnóstico de la hipoacu-
impedancia acústica; sia neonatal presentamos este trabajo donde comparamos, desde el punto de vista clínico, los
Otoscopia; resultados timpanométricos de 226 Hz y de 1 kHz.
Microscopia Material y método: Estudio prospectivo de 100 niños menores de 9 meses procedentes del cri-
bado auditivo. Comparamos el resultado de la timpanometría con la otomicroscopia y con las
otoemisiones acústicas transitorias.
Resultados: La aplicación de las otoemisiones acústicas transitorias, la otomicroscopia y la
timpanometría de 226 Hz y de 1 kHz ha mostrado su utilidad en el manejo de la otitis media
serosa del lactante, con una validez similar entre las 4 pruebas.
Conclusión: El uso conjunto de la otomicroscopia, las otoemisiones acústicas transitorias y la
timpanometría de 226 Hz y de 1 kHz nos ha permitido diagnosticar la otitis media serosa del
lactante con mayor precisión que si aplicáramos estas pruebas de forma aislada. Se aconseja
utilizar inicialmente la timpanometría de 1 kHz, al menos en niños menores de 7 meses, pero
en presencia de hipoacusia o de un resultado confuso, la timpanometría de 226 Hz es un buen
complemento diagnóstico.
© 2016 Elsevier España, S.L.U. y Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza
y Cuello. Todos los derechos reservados.

∗ Autor para correspondencia.


Correo electrónico: jibenito@ono.com (J.I. Benito-Orejas).

http://dx.doi.org/10.1016/j.otorri.2016.01.001
0001-6519/© 2016 Elsevier España, S.L.U. y Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello. Todos los derechos
reservados.

Cómo citar este artículo: Mena-Domínguez EA, et al. Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes y su
comparación con otoemisiones acústicas, otomicroscopia y timpanometría de 226 Hz. Acta Otorrinolaringol Esp. 2016.
http://dx.doi.org/10.1016/j.otorri.2016.01.001
+Model
OTORRI-700; No. of Pages 9 ARTICLE IN PRESS
2 E.A. Mena-Domínguez et al.

KEYWORDS High frequency tympanometry (1000 Hz) in young infants and its comparison with
Child; otoacoustic emissions, otomicroscopy and 226 Hz tympanometry
Hearing loss;
Otitis media; Abstract
Acoustic impedance Introduction and objective: In the first 6 months of life, 226 Hz tympanometry is considered an
tests; ineffective procedure for the diagnosis of otitis media with effusion. With the introduction of
Otoscopy; universal hearing screening, the use of high frequency 1000 Hz (1 kHz) tympanometry has been
Microscopy recommended. To optimise the diagnosis of neonatal hearing loss, we present this comparison,
from the clinical point of view, of the results of 226 Hz and 1 kHz tympanometry in infants.
Materials and methods: We designed a prospective study of 100 children under 9 months of age
proceeding from our hearing screening program. We compare the result of tympanometry with
binocular microscopy and transient evoked otoacoustic emissions.
Results: The application of transient otoacoustic emissions, otomicroscopy and 226 Hz and 1 kHz
tympanometry has shown its usefulness in the management of otitis media with effusion of young
infants, with a similar effectiveness between the 4 tests.
Conclusion: The joint use of otomicroscopy, transient otoacoustic emissions and 226 Hz and
1 kHz tympanometry, has allowed us to diagnose otitis media with effusion in young infants
more accurately than each test separately. We recommend initial use of 1 kHz tympanometry,
at least in children younger than 7 months, but in the presence of hearing loss or an unclear
result, 226 Hz tympanometry is a good diagnostic complement.
© 2016 Elsevier España, S.L.U. y Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza
y Cuello. All rights reserved.

Introducción timpanometría convencional en niños de meses. Pero ade-


más, el uso de la timpanometría de 226 Hz a esta edad
El estudio de la hipoacusia conlleva la valoración del oído produce una elevada proporción de curvas con múltiples
medio. Esta evaluación es aún más importante en la edad picos, que son inclasificables dentro del esquema de Liden9
infantil por la elevada prevalencia de otitis media serosa y Jerger10 .
(OMS) y especialmente durante el primer año de vida, donde Con la rápida implementación de los programas univer-
más del 50% de los lactantes la padecen1 . La timpanometría sales de cribado auditivo neonatal surge la necesidad de
es el procedimiento estándar para conocer las característi- evaluar la audición en los primeros meses de vida. De 4 a 5
cas dinámicas del oído medio. Se fundamenta en la medición niños por cada 1.000 recién nacidos presentan umbrales de
de la admitancia acústica (resultante de sus 2 componen- potenciales evocados auditivos del tronco cerebral (PEATC)
tes: la susceptancia y la conductividad) del oído medio, en de 50 a 70 db·nHL, comprobándose en el 77% que se trata de
función de los cambios de presión de aire en el conducto una hipoacusia conductiva temporal11 . Para poderla diferen-
auditivo externo2 . El gráfico resultante se denomina timpa- ciar de la hipoacusia neurosensorial precisamos realizar una
nograma. La susceptancia acústica depende de la masa y evaluación neonatal efectiva del componente conductivo de
de la rigidez del sistema. El uso de la frecuencia de 226 Hz la audición.
como tono prueba ha demostrado ser efectiva para iden- Entre los años setenta y ochenta se inicia el desarrollo
tificar la OMS y otras patologías de oído medio en niños de la llamada «timpanometría de alta frecuencia» (TAF),
de edad preescolar y escolar (especificidad del 82-89% y de 1.000 Hz (1 kHz)12 , que pasa a la clínica tras la comer-
sensibilidad del 95-100%), por lo que hoy en día se ha con- cialización de los primeros equipos en el año 200013 . Las
vertido en una prueba clínica rutinaria3,4 . Sin embargo, su investigaciones realizadas parecen demostrar una mayor
fiabilidad disminuye en edades inferiores a 7-9 meses. El validez que la de baja frecuencia (226 Hz) en el diagnóstico
grupo de Paradise et al.5 fue, en 1976, de los primeros de OMS en lactantes menores de 7-9 meses13-15 . En base a
en dudar de la eficacia de la timpanometría convencio- estos y otros estudios, el Joint Committee on Infant Hearing
nal al encontrar que una importante proporción de oídos (JCIH, 2007)16 y en España la Comisión para la Detección Pre-
en lactantes menores de 7 meses y OMS confirmada (por coz de la Hipoacusia (CODEPEH, 2010)17 recomiendan usar
otoscopia neumática y miringotomía) presentaban timpa- la TAF (1 kHz) para evaluar el oído medio del lactante.
nogramas normales, corroborándose posteriormente estos La incapacidad resolutiva de la timpanometría de 226 Hz
hallazgos por otros investigadores6,7 . También se comprobó en el lactante se atribuye a diferencias anatómicas de su
que en este rango de edad un tono de prueba de 226 Hz oído externo y medio con relación al adulto18 y a la frecuen-
puede producir timpanogramas planos (tipo B, falsos positi- cia específica de resonancia de la membrana timpánica19 .
vos) en niños con oídos normales, en un porcentaje variable Para poder validar los resultados de la TAF necesitamos
entre el 40 y el 90%8 . Estos descubrimientos parecían lo sufi- compararlos con un patrón de referencia (gold standard). La
cientemente elocuentes para demostrar la ineficacia de la miringotomía sería el procedimiento idóneo, pero se trata de

Cómo citar este artículo: Mena-Domínguez EA, et al. Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes y su
comparación con otoemisiones acústicas, otomicroscopia y timpanometría de 226 Hz. Acta Otorrinolaringol Esp. 2016.
http://dx.doi.org/10.1016/j.otorri.2016.01.001
+Model
OTORRI-700; No. of Pages 9 ARTICLE IN PRESS
Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes 3

un método invasivo que solo podría justificarse en indicacio- siguiendo el protocolo del Programa de Hipoacusia de la
nes concretas20,21 , por lo que se utilizan otras exploraciones. Comunidad de Castilla y León35 . A los que «no pasan» PEATC-A
La obtención de otoemisiones acústicas (OEA)22-25 , al reque- se les efectúa PEATC estándar para comprobar la presencia
rir una transmisión sonora eficaz hacia y desde la cóclea, de hipoacusia. A todos los niños se les intentó cumplimentar
podría ofrecer la seguridad de que el oído medio es nor- en la misma sesión OEAT, otomicroscopia, timpanometría de
mal. Se ha comprobado que si «pasa» OEA, el 93% tiene 226 Hz y timpanometría de 1 kHz de cada uno de los oídos.
un timpanograma normal25 , y si «no pasa», el 74% lo tie-
nen patológico25 , con niveles de sensibilidad y especificidad
variables del 57-91% y del 50-95%, respectivamente22,23,26 . Procedimiento
La otomicroscopia es otro procedimiento ratificado hace
años en el diagnóstico de OMS, con tasas de precisión total Generalmente en los brazos de la madre y en una habitación
del 95%27-29 , superando a la timpanometría y a la otosco- silenciosa se comenzaba la exploración timpanométrica, por
pia neumática y siendo también un patrón de referencia uno u otro oído, aplicando secuencialmente y de forma
actual21,30,31 . Hay quien considera que la TAF, las otoemi- aleatoria el tono de prueba de 226 Hz o de 1 kHz. Dicha
siones acústicas transitorias (OEAT) y el reflejo del estribo exploración era llevada a cabo por personal experto en
sería una buena asociación para detectar disfunción de impedanciometría, generalmente de enfermería. En caso de
oído medio19 , e incluso se ha utilizado la tomografía com- artefactos o inadecuado sellado de la sonda, se repetía el
putarizada, que demuestra una buena correlación con la examen. Antes o después, según los casos, se efectuaba una
timpanometría de 1 kHz (98%), muy superior a la encontrada prueba automatizada de OEAT, en cada oído, por el mismo
con la de 226 Hz32 . personal.
Por medio de la otomicroscopia y las OEAT pretendemos A continuación se transportaba al lactante a otra habita-
conocer la validez de la timpanometría de 1 kHz en relación ción donde, tumbado en una camilla y sujeto por sus padres o
con la de 226 Hz en niños menores de 9 meses. tutores, un otorrinolaringólogo experto en otología infantil,
Finalmente, para que la TAF pueda ser utilizada como tras limpiar el CAE de cera y restos epiteliales, examinaba
herramienta clínica es necesario que sus resultados sean con microscopio binocular ambos oídos.
reproducibles, y aunque escasas, las pocas investigaciones El timpanómetro utilizado fue el AT235 h de
sobre reproductibilidad33,34 así lo demuestran. Interacoustic® Pty Ltd en Dinamarca y las OEAT se reali-
zaron con un aparato de cribado portátil de Otometrics® ,
Material y métodos MADSEN AccuScreen. Ambos equipos estaban calibrados
según las especificaciones de cada manufactura. Las pre-
A lo largo de un año se realizó un estudio prospectivo siones aplicadas con el timpanómetro variaron de +300 a
de 100 niños (200 oídos) con edades inferiores a 9 meses −300 daPa.
procedentes del cribado universal por diferentes motivos La otomicroscopia la clasificamos como normal, OMS y
(tabla 1). otra (otitis media aguda, retracción timpánica, miringoes-
Los padres o tutores fueron informados y consintieron en clerosis, perforación. . . o indefinida).
los procedimientos que se llevaron a cabo. La timpanometría de 226 Hz se describió según los patro-
Como criterios de inclusión consideramos ser menor de nes de Liden9 y Jerger10 , en curvas tipo A, B y C. La curva A
9 meses (corregido por prematuridad) y haberse realizado la (con un pico claro entre +100 y −100 daPa) es normal, la B
prueba de cribado auditivo neonatal con potenciales evoca- plana (sin un pico claro) sería de OMS. La curva C negativa
dos auditivos del tronco cerebral automatizados (PEATC-A) (con un pico negativo entre −100 y −300 daPa) también la
en nuestro hospital, donde se aplica de forma universal consideramos normal.

Tabla 1 Características de los niños y de las exploraciones realizadas


Participantes (n = 59 varones 41 hembras
100)
Edad (< 9 meses) 38 (0 a 3 45 (3 a 6 meses) 17 (6 a 9 meses)
meses)
Motivo de consulta 65 por factores 22 por ser «no pasa» 13 otras (hospital
de riesgo de cribado auditivo privado, alta fin
hipoacusia de semana. . .)
Número de Otomicroscopia OEAT (190/200: Timpanometría Timpanometría No valorables
exploraciones (178/200: 89%) 95%) 226 Hz (193/200: 1 kHz (195/200: (29/200: 15%)
realizadas 96,5%) 97,5%)
Oídos normales y Porcentaje de Porcentaje de
patológicos oídos normales oídos patológicos
(157/171): 92% (OMS) (14/171):
8%
OEAT: otoemisiones acústicas transitorias; OMS: otitis media serosa.

Cómo citar este artículo: Mena-Domínguez EA, et al. Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes y su
comparación con otoemisiones acústicas, otomicroscopia y timpanometría de 226 Hz. Acta Otorrinolaringol Esp. 2016.
http://dx.doi.org/10.1016/j.otorri.2016.01.001
+Model
OTORRI-700; No. of Pages 9 ARTICLE IN PRESS
4 E.A. Mena-Domínguez et al.

Figura 1 Distintas imágenes de timpanogramas de 226 Hz y de 1 kHz. 1. Trazados normales tanto a 226 Hz como a 1 kHz. 2. El
timpanograma de 226 Hz presenta un doble pico. 3. Curva B a 226 Hz y pico negativo a 1 kHz. 4. Falso positivo de 226 Hz, con curva
indefinida o plana, siendo normal a 1 kHz. 5. Falso negativo (repetido) a 226 Hz, con curvas móviles, siendo negativas a 1 kHz.

El timpanograma obtenido con 1 kHz se clasificó basán- Si el timpanograma de 226 Hz es de tipo A o C y el de


donos en las modificaciones establecidas por Baldwin20 del 1 kHz muestra pico positivo (ambas normales), la normalidad
método de Marchant et al.36 . Trazamos una línea basal de la otomicroscopia, de las OEAT o de ambas, es suficiente
uniendo los puntos de la curva de +300 a −300 daPa. Si la para calificar como normal el oído medio. Si la curva de
curva presenta un pico, independientemente de su tamaño, 226 Hz es de tipo B y la de 1 kHz muestra pico negativo o es
hacemos otra vertical desde la basal al pico. Si el pico plana (ambas patológicas), la presencia de OMS en otomicro-
es positivo (hacia arriba de la basal), el timpanograma se scopia, el «no pasa» de las OEAT (siendo «pasa» el cribado) o
supone normal; si es negativo (hacia abajo) o plano, patoló- ambos resultados, sirven para diagnosticar al niño de OMS.
gico. Si hay 2 picos (uno positivo y otro negativo), el trazado Cuando hay disparidad en el resultado de las timpanome-
se considera positivo (fig. 1). trías de 226 Hz y de 1 kHz o una de ellas es inclasificable, el
Para comprobar la fiabilidad de la interpretación, parte criterio de la otomicroscopia y de las OEAT prevalece.
de los timpanogramas fueron reevaluados por un segundo Efectuamos un estudio comparativo de fiabilidad entre
ORL que desconocía el resultado del resto de exploraciones. otomicroscopia, OEAT, timpanometría de 226 Hz y de 1 kHz,

Cómo citar este artículo: Mena-Domínguez EA, et al. Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes y su
comparación con otoemisiones acústicas, otomicroscopia y timpanometría de 226 Hz. Acta Otorrinolaringol Esp. 2016.
http://dx.doi.org/10.1016/j.otorri.2016.01.001
+Model
OTORRI-700; No. of Pages 9 ARTICLE IN PRESS
Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes 5

Tabla 2 Resultados obtenidos con cada una de las 4 pruebas utilizadas


Verdadero positivo Falso positivo Falso negativo Verdadero negativo
OEAT (n = 132) 6 2 4 120
Otomicroscopia (n = 142) 9 3 0 130
Timpanometría 226 Hz (n = 162) 23 11 1 127
Timpanometría 1 kHz (n = 179) 16 6 1 156
n: número de oídos; OEAT: otoemisiones acústicas transitorias.

Tabla 3 Comparación de los resultados positivos y negativos obtenidos con cada prueba
OEAT Otomicroscopia Timpanograma 226 Hz Timpanograma Total
1 kHz
Falso positivo OEAT no pasa Normal AoC Positiva 2/132 1,5%
Falso negativo OEAT pasa OMS B Negativa o 4/132 3%
plana
Falso positivo otomicroscopia pasa OMS AoC Positiva 3/142 2,1%
Falso negativo otomicroscopia no pasa Normal B Negativa o 0/142 0%
plana
Falso positivo 226 Hz pasa Normal B Positiva 11/162 6,8%
Falso negativo 226 Hz no pasa OMS A Negativa o 1/162 0,6%
plana
Falso positivo 1 kHz pasa Normal AoC Negativa o 6/179 3,4%
plana
Falso negativo 1 kHz no pasa OMS B Positiva 1/179 0,6%
OEAT: otoemisiones acústicas transitorias.

determinando los criterios de sensibilidad, especificidad, Epidat 3.1. Los valores de p < 0,05 han sido considerados
valor predictivo positivo (VPP), valor predictivo negativo estadísticamente significativos.
(VPN) y precisión total (verdaderos positivos + verdaderos
negativos/número total) (tablas 2-4). El valor positivo o
negativo de cada una de las 4 pruebas se obtiene al com- Resultados
pararla con las otras 3. En la tabla 3 se muestran los falsos
positivos y negativos. Si el resultado de una prueba indicaba La población de estudio comprende 100 niños (200 oídos),
patología (no pasa OEAT, OMS en otomicroscopia, curva B en 59 varones y 41 hembras, con edades comprendidas entre 0
timpanograma de 226 Hz o curva negativa/plana en 1 kHz) y y 9 meses de vida (83% menores de 6 meses). En la tabla 1 se
el de las otras 3 ofrecía un resultado normal, se clasifica de especifican las características, la procedencia y las explora-
falso positivo; por el contrario, si el resultado de una de las ciones realizadas.
pruebas es normal (negativa) y el de las otras 3 patológico, Evaluamos la validez de las 4 pruebas utilizadas en el
se juzga de falso negativo. En los casos de hipoacusia, al estudio (OEAT, otomicroscopia, timpanometría de 226 Hz y
no poder estimar el resultado de las OEAT solo tuvimos en de 1 kHz), calculando los valores de sensibilidad, especi-
cuenta la coincidencia de las otras 3 pruebas. ficidad, VPP, VPN y precisión (tabla 4). Para obtener los
A fin de buscar diferencias, se compararon por separado resultados positivos y negativos de cada prueba (tabla 2)
los datos timpanométricos de los niños menores de 3 meses se tienen en cuenta las otras 3, según queda expresado en
(tabla 5). la tabla 3. La concordancia en 3 de las 4 pruebas realizadas
Las pruebas de PEATC-A y OEAT, al ser automatizadas, da como resultado un total de 157 oídos normales (92%) y
responden al criterio de «pasa» o «no pasa», que ofrece el de 14 con OMS (8%). Un total de 29 oídos (15%) no pudie-
equipo. ron valorarse o por faltar alguna exploración, ausencia de
Los datos fueron recogidos en una base Microsoft Access concordancia entre pruebas o resultado indefinido.
específica para el estudio, cumpliendo la ley de protección La timpanometría de 226 Hz es la prueba con mayor
de datos. porcentaje de falsos positivos y las OEAT con el menor
En el análisis estadístico hemos aplicado el test exacto de (tabla 3). Sin embargo, las OEAT dan el número más alto
Fisher para evaluar la asociación de las variables cualitati- de falsos negativos, que en la otomicroscopia es insignifi-
vas. La valoración de la concordancia entre observadores de cante. El porcentaje de falsos negativos es similar en ambas
los resultados timpanométricos se ha realizado mediante el timpanometrías (226 Hz y 1 kHz). Las pruebas más precisas
índice kappa. Los cálculos se han efectuado con el programa para diferenciar un oído normal de otro con OMS serían la

Cómo citar este artículo: Mena-Domínguez EA, et al. Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes y su
comparación con otoemisiones acústicas, otomicroscopia y timpanometría de 226 Hz. Acta Otorrinolaringol Esp. 2016.
http://dx.doi.org/10.1016/j.otorri.2016.01.001
+Model
OTORRI-700; No. of Pages 9 ARTICLE IN PRESS
6 E.A. Mena-Domínguez et al.

Tabla 4 Cuadro comparativo de los criterios de validez de cada prueba


OEAT Otomicroscopia Timpanometría Timpanometría
226 Hz 1 kHz
Sensibilidad
Verdaderos 6/10 (60%) 9/9 (100%) 23/24 (96%) 16/17 (94%)
positivos/(verdaderos (IC 31,3 a (IC 70,1 a (IC 79,8 a (IC 73 a
positivos + falsos 83,2) 100) 99,3) 98,9)
negativos)
Especificidad
Verdaderos 120/122 130/133 127/138 156/162
negativos/(verdaderos (98%) (IC (98%) (IC (92%) (IC (96%) (IC
negativos + falsos 94,2 a 99,6) 93,6 a 99,2) 86,3 a 95,5) 92,2 a 98,3)
positivos)
Valor predictivo positivo (VPP)
Verdaderos 6/8 (75%) 9/12 (75%) 23/34 (68%) 16/22 (73%)
positivos/pruebas
positivas
Valor predictivo negativo (VPN)
Verdaderos 120/124 130/130 127/128 156/157
negativos/pruebas (97%) (100%) (99%) (99%)
negativas
Precisión
(Verdaderos 126/132 139/142 150/162 172/179
positivos + verdaderos (95,5%) (98%) (93%) (96%)
negativos)/Total
Timpanogramas dudosos
Inclasificables o 4/193 (2%) 6/193 (3%)
indefinidos
IC: intervalo de confianza; OEAT: otoemisiones acústicas transitorias.

Tabla 5 Resultados positivos, negativos y dudosos de la timpanometría de 226 Hz y de 1 kHz, en función de la edad
Edad (número de niños) Falsos Falsos Falsos Falsos Dudosos
positivos positivos negativos negativos
226 Hz 1 kHz 226 Hz 1 kHz
0 a 9 meses (n = 193) 6,8% 3,4% 0,6% 0,6% 5,2%
0 a 3 meses (n = 72) 8,3% 1,4% 0% 0% 2,8%
3 a 9 meses (n = 121) 3,3% 2,5% 0,8% 0,8% 5%
n: número de oídos.

otomicroscopia (98%) y la timpanometría de 1 kHz (96%) ha sido de 0,95 (IC 95%: 0,86-1,00), indicando una buena
(tabla 4), aunque siendo los valores tan aproximados, no concordancia estadísticamente significativa (p < 0,001).
destaca ninguna exploración en particular.
El 5% de los trazados timpanométricos son inclasificables
(tabla 4). Discusión
Realizamos un estudio aislado de los niños con
menos de 3 meses (76 oídos) a fin de valorar si las caracte- En niños y adultos, la timpanometría convencional con un
rísticas del oído medio a esta temprana edad modificaban tono de sonda de 226 Hz ofrece resultados precisos sobre la
nuestros resultados generales (tabla 5). Obtuvimos un función del oído medio. Sin embargo, se considera que en
aumento de los falsos positivos con 226 Hz (de 3,3 a 8,3%) lactantes menores de 7 meses la TAF con un tono de 1.000 Hz
y una reducción de los falsos positivos con 1 kHz (de 2,5 a tiene mayor precisión5-8,19 , como ha quedado corroborado
1,4%), que en ninguno de los casos constituyó una diferencia en nuestros resultados (tabla 4), comprendidos en el rango
estadísticamente significativa. superior de los publicados19-22,24 .
El grado de acuerdo para los 2 examinadores que clasi- No obstante, y a pesar de la evidencia, sigue sin aplicarse
ficaron los trazados timpanométricos de 226 Hz y de 1 kHz clínicamente de forma general la timpanometría de 1 kHz,

Cómo citar este artículo: Mena-Domínguez EA, et al. Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes y su
comparación con otoemisiones acústicas, otomicroscopia y timpanometría de 226 Hz. Acta Otorrinolaringol Esp. 2016.
http://dx.doi.org/10.1016/j.otorri.2016.01.001
+Model
OTORRI-700; No. of Pages 9 ARTICLE IN PRESS
Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes 7

probablemente por las dificultades que a priori representa la morfología (técnica de Baldwin20 , modificada de Marchant
interpretación de estos timpanogramas y por la controversia et al.36 , que identifica picos positivos o negativos alrede-
que existe con relación a la edad de aplicación18,20 . dor de una línea basal, sin considerar su altura o el número
Hasta la fecha no disponemos de un acuerdo general pro- de picos), que es el procedimiento elegido por nosotros.
tocolizado para el análisis de los resultados13 , y aunque la Un segundo método analizaría la forma y el pico obteni-
timpanometría de 1 kHz es utilizada en clínicas audiológicas dos tras compensar la admitancia estática de la línea basal
de todo el mundo18 , su aplicación muestra variaciones cuan- (compensa la magnitud)22,24 . Y finalmente un tercero, que
titativas entre los diferentes estudios18,19,21,22,37 . En primer además de la configuración estudia el componente compen-
lugar, no existe un procedimiento estándar de calibración de sado de la admitancia estática18,33,37 . Para realizar este tipo
la sonda de 1.000 Hz, y si la calibración no es válida, todas de compensaciones se precisan equipos específicos de tim-
las medidas serán imprecisas13,15 . Pero además, la varia- panometría, pero hasta el momento no se ha demostrado
bilidad es también función de las características de cada que ningún procedimiento sea mejor que otro en el diag-
equipo (similares al nuestro son los de Resende et al.38 y nóstico de la OMS del lactante13 . El método morfológico de
Sood et al.39 ), de la población objeto de estudio y de la Baldwin20 tiene la peculiaridad de no ser exclusivamente
metodología utilizada13 . subjetivo (como los de Liden9 y Jerger10 ), basándose en la
Se supone que las diferencias anatómicas entre el oído experiencia de quien lo interpreta, sino que introduce una
de un lactante y el de un adulto serían responsables de regla, donde por ejemplo cualquier pico positivo implica
las variaciones acústicas que determinarían la diferente res- normalidad, independientemente de su tamaño20 . Aplicando
puesta timpanométrica19 . Estas desigualdades van a influir esta metodología, Baldwin20 establece para la TAF una sen-
en la impedancia y en la frecuencia de resonancia del oído. sibilidad y una especificidad en el diagnóstico de la OMS del
La compliancia acústica del oído medio del lactante es 99 y del 89%, respectivamente (siendo en este estudio del 94
menor y la resistencia es mayor que en el oído adulto. Por y del 96%). Un 5% de trazos son difíciles de clasificar en oídos
estos motivos, el oído medio evoluciona desde un sistema normales y un 0,6% en oídos con OMS (siendo en estos casos
donde domina el efecto masa a otro en el que preva- cuando las otras pruebas que evalúan el estado del oído
lece la rigidez18 . El momento de transición entre el efecto medio resultan definitivas). Mediante estos procedimientos,
masa-dominante al de rigidez-dominante en el oído medio el grado de concordancia que hemos obtenido entre 2 exa-
del lactante no está establecido con precisión, aunque se minadores, en el análisis de los trazados timpanométricos,
supone completo hacia los 7-8 meses18 . Hoffman et al.21 con- ha sido muy alto (95%).
sideran la conveniencia de utilizar la timpanometría de 1 kHz Utilizar en nuestro estudio niños sanos y con OMS, esco-
hasta los 9 meses de edad. Alaerts et al.18 concluyen que gidos al azar, nos ha permitido determinar la sensibilidad
en < 3 meses se use 1 kHz; en > 9 meses, 226 Hz, y entre 3 y la especificidad de las pruebas. Los valores de sensibili-
y 9 meses, ambos (empezando por 1 kHz y, si la curva es dad son muy parecidos entre la timpanometría de 226 Hz y
indeterminada, aplicando 226 Hz). de 1 kHz, probablemente porque el número de casos patoló-
En nuestros resultados observamos que en los niños gicos ha sido escaso (de 14 oídos con OMS solo se detecta
menores de 3 meses se incrementan los falsos positivos con un falso negativo tanto con 226 Hz como con 1 kHz). Sin
la timpanometría de 226 Hz (del 3,3 al 8,3%), y se redu- embargo, la diferencia de falsos positivos queda reflejada
cen al aplicar 1 kHz (del 2,5 al 1,4%) (tabla 5). Aunque en la especificidad, que es mayor con la TAF (96%) que con
esta desigualdad no llega a ser estadísticamente signifi- la timpanometría convencional (92%).
cativa, muestra una clara tendencia. Bien es cierto que El descenso del VPP, tanto para 226 Hz (68%) como para
el porcentaje de falsos positivos que obtenemos con la 1 kHz (73%), coincide con el de otros autores21 , justificán-
timpanometría de baja frecuencia es muy inferior a la refe- dose porque no todas las alteraciones timpanométricas se
rida en otros trabajos (8,3% de falsos positivos frente a deben a OMS, y otras patologías de oído medio (adherencias,
un 40 e incluso un 90%)5,8 . Como hemos explicado, estas fibrosis. . .) pueden alterar la timpanometría.
diferencias pueden depender de la población de estudio El porcentaje de timpanometrías de 1 kHz completas
(niños sanos/enfermos)18,21,24 y seguramente de la analo- (restando las no realizadas e inclasificables) obtenidas en
gía de resultados con un estándar adecuado para juzgar la un medio clínico en lactantes hasta 9 meses de edad ha sido
presencia de OMS20 . Coincidiendo con otros autores30,31,38 , del 95% (variable entre el 87 y el 99%)24 .
encontramos una buena correlación entre la timpanometría Resumiendo nuestra experiencia, la timpanometría de
de 1 kHz y la aplicación de la otomicroscopia y las OEAT, cuya 1 kHz es un complemento eficaz en la evaluación del oído
fiabilidad global aumenta al emplearlas conjuntamente. medio del lactante, junto a las OEAT y la otomicrosco-
Hemos registrado OEAT en oídos donde la otomicroscopia pia. Cuando la timpanometría de 1 kHz no ofrezca un
demostraba la presencia de fluido en oído medio, y a la claro resultado, además de intentar repetirla, nos parece
inversa, la ausencia de OEA no excluye la posibilidad de OMS, adecuado, de acuerdo con Alaerts et al.18 , la obtención
porque una defectuosa colocación de la sonda, las malas de un timpanograma a 226 Hz porque puede resultar de
condiciones de la prueba o una hipoacusia neurosensorial ayuda, dada la precisión que hemos obtenido en nuestros
podrían ser la causa. pacientes.
Otro de los problemas en el uso de la TAF ha consistido
en encontrar una técnica propia de clasificación, pues la
aplicación del sistema clásico de Liden9 y Jerger10 ofrecía Conclusión
una elevada tasa de falsos positivos24 y un gran porcentaje
de timpanogramas inclasificables19,33 . Para la interpretación Recomendamos el uso de 1 kHz en la timpanometría de niños
del TAF hay 3 procedimientos13 . Primero, examinar solo la menores de 9 meses, junto con la otomiscroscopia y las OEAT,

Cómo citar este artículo: Mena-Domínguez EA, et al. Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes y su
comparación con otoemisiones acústicas, otomicroscopia y timpanometría de 226 Hz. Acta Otorrinolaringol Esp. 2016.
http://dx.doi.org/10.1016/j.otorri.2016.01.001
+Model
OTORRI-700; No. of Pages 9 ARTICLE IN PRESS
8 E.A. Mena-Domínguez et al.

para el diagnóstico de OMS. En el diagnóstico diferencial de 18. Alaerts J, Lutz H, Woulters J. Evaluation of middle ear
la hipoacusia infantil o cuando el timpanograma de 1 kHz sea function in young children: Clinical guidelines for the use
dudoso o imposible de obtener, la timpanometría de 226 Hz of 226 and 1000 Hz tympanometry. Otol Neurotol. 2007;28:
puede resultar de utilidad. 727---32.
19. Mazlan R, Kei J. Measuring Middle Ear Function in Young
Infants: An Overview. En: Kei J, Zhao F, editores. Assessing
Conflicto de intereses Middle Ear Function Infants. San Diego: Plural Publishing; 2012.
p. 17---37.
Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses. 20. Baldwin M. Choice of probe tone and classification of trace pat-
terns in tympanometry undertaken in early infancy. Int J Audiol.
2006;45:417---27.
Bibliografía 21. Hoffmann A, Deuster D, Rosslau K, Knief A, Zehnhoff-
Dinnesen A, Schmidt CM. Feasibility of 1000 Hz tympanometry
1. Rosenfeld RM, Culpepper L, Doyle KJ, Grundfast KM, Hoberman in infants: Tympanometric trace classification and choice of
A, Kenna MA, et al. Subcommittee on Otitis Media with Effusion; probe tone in relation to age. Int J Pediatr Otorhinolaryngol.
American Academy of Family Physicians; American Academy of 2013;77:1198---203.
Otolaryngology----Head and Neck Surgery. Clinical practice gui- 22. Margolis RH, Bass-Ringdahl S, Hanks WD, Holte L, Zapala DA.
deline: Otitis media with effusion. Otolaryngol Head Neck Surg. Tympanometry in newborn infants. 1 kHz norms. J Am Acad
2004;130 5 Suppl:S95---118. Audiol. 2003;14:383---92.
2. Hunter L, Shahnaz N. Acoustic Immittance Measures. Basic 23. Swanepoel de W, Werner S, Hugo R, Louw B, Owen R, Swanepoel
and Advanced Practice. 1st ed. San Diego: Plural Publishing; A. High frequency immittance for neonates: A normative study.
2014. Acta Otolaryngol. 2007;127:49---56.
3. Nozza RJ, Bluestone CD, Kardatzke D, Bachman R. Towards 24. Kei J, Allison-Levick J, Dockray J, Harrys R, Kirkegard C, Wong
the validation of aural acoustic immittance measures for dia- J, et al. High-frequency (1000 Hz) tympanometry in normal neo-
gnosis of middle ear effusion in children. Ear Hear. 1992;13: nates. J Am Acad Audiol. 2003;14:20---8.
442---53. 25. Shahnaz N, Miranda T, Polka L. Multifrequency tympanometry in
4. Bluestone CD, Beery QC, Paradise JL. Audiometry and tym- neonatal intensive care unit and well babies. J Am Acad Audiol.
panometry in relation to middle ear effusions in children. 2008;19:392---418.
Laryngoscope. 1973;83:594---604. 26. Driscoll C, Kei J, McPherson B. Transient evoked otoacous-
5. Paradise JL, Smith CG, Bluestone CD. Tympanometric detection tic emissions in 6-year-old school children: A normative study.
of middle ear effusion in infants and young children. Pediatrics. Scand Audiol. 2000;29:103---10.
1976;58:198---210. 27. Rogers DJ, Boseley ME, Adams MT, Makowski RL, Hohman
6. Pestalozza G, Cusmano G. Evaluation of tympanometry in dia- MH. Prospective comparison of handheld pneumatic otos-
gnosis and treatment of otitis media of the newborn and of the copy, binocular microscopy, and tympanometry in identifying
infant. Int J Pediatr Otorhinolaryngol. 1980;2:73---82. middle ear effusions in children. Int J Pediatr Otorhinolaryngol.
7. Schwartz DM, Schwartz RH. Acoustic immittance finding in acute 2010;74:1140---3.
otitis media. Ann Otol Rhinol Laryngol. 1980;68:211---3. 28. Lee DH. How to improve the accuracy of diagnosing otitis media
8. Wright PF, McConnell KB, Thompson JM, Vaughn WK, Sell with effusion in a pediatric population. Int J Pediatr Otorhino-
SH. A longitudinal study of the detection of otitis media in laryngol. 2010;74:151---3.
the first two years of life. Int J Pediatr Otorhinolaryngol. 29. Young DE, Ten Cate WJ, Ahmad Z, Morton RP. The accuracy of
1985;10:245---52. otomicroscopy for the diagnosis of paediatric middle ear effu-
9. Liden G. The scope and application of current audiometric tests. sions. Int J Pediatr Otorhinolaryngol. 2009;73:825---8.
J Laryngol Otol. 1969;83:507---20. 30. Kilic A, Baysal E, Karatas E, Baglam T, Durucu C, Deniz M,
10. Jerger J. Clinical experience with impedance audiometry. Arch et al. The role of high frequency tympanometry in newborn
Otolaryngol. 1970;92:311---24. hearing screening programme. Eur Rev Med Pharmacol Sci.
11. Watkin PM, Baldwin M. Confirmation of deafness in infancy. Arch 2012;16:220---3.
Dis Child. 1999;81:380---9. 31. Garcia MV, Azevedo MF, Testa JR. Accoustic immitance measu-
12. Lechuga R, Frade C, Soto A, Labella T. Parámetros de normalidad res in infants with 226 and 1000 Hz probes: Correlation with
en la timpanometría de multifrecuencia. Acta Otorrinolaringol otoacoustic emissions and otoscopy examination. Braz J Otor-
Esp. 2000;51:207---10. hinolaryngol. 2009;75:80---9.
13. Kei J, Mazlan R. High-Frequency (1000 Hz) Tympanometry: Clini- 32. Zhiqi L, Kun Y, Zhiwu H. Tympanometry in infants with middle
cal Applications. En: Kei J, Zhao F, editores. Assessing Middle Ear ear effusion having been identified using spiral computerized
Function Infants. San Diego: Plural Publishing; 2012. p. 39---67. tomography. Am J Otolaryngol. 2010;31:96---103.
14. Hirsch JE, Margolis RH, Rykken JR. A comparison of acoustic 33. Kei J, Mazlan R, Hickson L, Gavranich J, Linning R. Measuring
reflex and auditory brain stem response screening of high-risk middle ear admittance in newborns using 1000 Hz tympano-
infants. Ear Hear. 1992;13:181---6. metry: A comparison of methodologies. J Am Acad Audiol.
15. Rhodes MC, Margolis RH, Hirsch JE, Napp AP. Hearing screening 2007;18:739---48.
in the newborn intensive care nursery: comparison of methods. 34. Mazlan R, Kei J, Hickson L, Gavranich J, Linning R. Test-retest
Otolaryngol Head Neck Surg. 1999;120:799---808. reproducibility of the 1000 Hz tympanometry test in new-
16. American Academy of Pediatrics, Joint Committee on Infant born and six-week-old healthy infants. Int J Audiol. 2010;49:
Hearing. Year 2007 position statement: Principles and guide- 815---22.
lines for early hearing detection and intervention programs. 35. Junta de Castilla y León. Consejería de Sanidad. Programa de
Pediatrics. 2007;120:898---921. detección precoz y atención integral de la hipoacusia infantil.
17. Trinidad-Ramos G, de Aguilar VA, Jaudenes-Casaubón C, Núñez- 2004.
Batalla F, Sequí-Canet JM. Comisión para la Detección Precoz 36. Marchant CD, McMillan PM, Shurin PA, Johnson CE, Turczyk VA,
de la Hipoacusia (CODEPEH). Detección e intervención precoz: Feinstein JC, et al. Objective diagnosis of otitis media in early
Recomendaciones de la CODEPEH para 2010. Acta Otorrinola- infancy by tympanometry and ipsilateral acoustic reflex thres-
ringol Esp. 2010;61:69---77. holds. J Pediatr. 1986;109:590---5.

Cómo citar este artículo: Mena-Domínguez EA, et al. Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes y su
comparación con otoemisiones acústicas, otomicroscopia y timpanometría de 226 Hz. Acta Otorrinolaringol Esp. 2016.
http://dx.doi.org/10.1016/j.otorri.2016.01.001
+Model
OTORRI-700; No. of Pages 9 ARTICLE IN PRESS
Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes 9

37. Calandruccio L, Fitzgerald TS, Prieve BA. Normative multi- 39. Sood AS, Bons CS, Narang GS. High frequency tympanometry
frequency tympanometry in infants and toddlers. J Am Acad in neonates with normal otoacoustic emissions: Measurements
Audiol. 2006;17:470---80. and interpretations. Indian J Otolaryngol Head Neck Surg.
38. Resende LM, Ferreira J dos S, Carvalho SA, Oliveira IS, Bassi IB. 2013;65:237---43.
Tympanometry with 226 and 1000 Hertz tone probes in infants.
Braz J Otorhinolaryngol. 2012;78:95---102.

Cómo citar este artículo: Mena-Domínguez EA, et al. Timpanometría de alta frecuencia (1.000 Hz) en lactantes y su
comparación con otoemisiones acústicas, otomicroscopia y timpanometría de 226 Hz. Acta Otorrinolaringol Esp. 2016.
http://dx.doi.org/10.1016/j.otorri.2016.01.001

También podría gustarte