Está en la página 1de 4

Yeiron Alzate Quintero

I Filosofía
Antropología Filosófica

¿SON REALMENTE HOMBRES?

El hombre es el único ser viviente que tiene la conciencia de ser tal cosa. Gracias
a la capacidad intelectiva y de reflexión innata del ser humano, cada uno es capaz
de reconocerse como ello, un individuo de la especie humana con ciertas
características y particularidades que lo hacen sobresalir por encima de los demás
seres. Si bien es claro que el hombre en virtud de ser hombre posee ya una
dignidad connatural a su ser, la identidad que tiene este de sí mismo en cuanto a
ser humano, a ser hombre, es la que lo ayuda a realizarse plenamente. “Identidad
es, de una manera general, el conjunto de datos que definen a un individuo de
manera que lo singularizan y lo limitan de tal forma que no puede ser confundido
con ningún otro”1. Es necesario que cada persona y la comunidad de la cual
participa dicha persona identifiquen al sujeto como tal, reconociéndolo y
haciéndolo acreedor de lo que le corresponde a su naturaleza, puesto que, en el
mundo de hoy, lo que antes eran características inherentes de cada ser humano,
ahora se relativizan la existencia de estas según diversos factores socio-
culturales. Es esta precisamente la temática que aborda el escritor austrohúngaro
Franz Kafka en su obra La metamorfosis, en la situación extraordinaria en que se
ve envuelto el protagonista Gregorio Samsa.

En la historia se presenta a un joven aparentemente promedio que un día se


despierta siendo un monstruoso insecto. Poco a poco el joven empieza a perder
su identidad de hombre para incluso auto-identificarse como un insecto. En primer
lugar, Gregorio al despertar siendo un insecto, empezó a comportarse como tal.
Aunque tenía aún su capacidad de razonar, su actuación se hacía cada vez más
animal, es decir que él mismo se convenció de que era un bicho. “Somos algo,
pero queremos ser más y ser distintos y ese es el camino que recorremos gracias
a la libertad”2. Claramente el hombre en virtud de su libertad es un ser inacabado
que, poco a poco, se va haciendo a sí mismo, para ello es fundamental que este
tenga conciencia de lo que es y de las potencialidades que tiene para proyectarse

1
MOLINA, Esperanza. Identidad y cultura. España: Marsiega. 1975. p. 19.
2
BURGOS, Juan. Antropología: una guía para la existencia. España: Palabra. 2013. p. 182.
Yeiron Alzate Quintero
I Filosofía
Antropología Filosófica

en lo que quiere ser. Sin embargo, cuando el hombre no tiene conciencia de lo


que en realidad es, termina por convertirse en lo que le dicen que es. El hombre
que no tiene una identidad definida es fácilmente manipulable, puesto que asumirá
cualquier idea o camino que le propongan, aun si este no es lo que quiere.

En este sentido es fundamental también la dimensión social del hombre. “El


individuo siente que el grupo es como una prolongación de sí mismo, y (…) se
siente gratificado por la gran seguridad y bienestar que le produce la pertenencia
al grupo”3. El entorno influye activamente en las personas, y de la misma forma los
iguales con los que convive, ya que estos ejercen un punto de referencia sobre la
identidad que terceros le atribuyen a la persona, proporcionándole seguridad a sí
mismo, al sentirse miembro de una comunidad donde todos comparten
determinadas características. En el caso del protagonista, la misma familia
empieza a tratarlo como un simple insecto, únicamente llevándole el alimento
necesario pero sin considerarlo siquiera un miembro de la familia, como lo era
antes de su metamorfosis. “No hay más remedio. Basta que trates de desechar la
idea que él es Gregorio. Haberlo creído así durante tanto tiempo es, en realidad, la
causa de nuestra tristeza”4. Sería normal esperarse que cualquier hombre común
y corriente asumiese la identidad que las personas de entorno le atribuyen, incluso
aunque en un principio el sujeto no se reconozca de tal manera. Es esta
precisamente la problemática en el ser de Gregorio, que tuvo una progresiva
implementación de la identidad que le demandaba su nuevo cuerpo. Poco a poco,
a lo largo del relato, el protagonista va asumiendo el actuar que le corresponde a
un insecto, desde comer alimentos en estado de descomposición hasta trepar por
las paredes y esconderse bajo los muebles. El notorio desprecio de la familia para
con el nuevo Gregorio se explica en términos utilidades, donde para lo único que
era importante Gregorio en medio de su familia era para aportar económicamente
en ella, siendo la principal fuente de ingresos. Al día de hoy, y en la llamada
cultura del descarte, es común que el valor que se le dé a una persona sea en
virtud de los beneficios o ganancias, de cualquier tipo, que genera este, quedando
3
MOLINA, Op. cit., p. 40.
4
KAFKA, Franz. La metamorfosis. Colombia: Atenea. 2007. p. 53.
Yeiron Alzate Quintero
I Filosofía
Antropología Filosófica

así subyugada la dignidad del sujeto a su rol activo en el entorno en que se


mueve.

Es de recalcar que a lo largo de la historia Gregorio nunca se pregunta el por qué


le está sucediendo tal cosa. Pero no es algo nuevo que haya aparecido a la par
con su nueva corporalidad, sino que es evidente que antes de todo ello, ya era así.
Lo que identifica al hombre como lo que es y lo separa abismalmente de los
animales es precisamente su conciencia de sí y su capacidad reflexiva. “La
reflexión (…) es sin duda una cierta manera para la vida de pasar a un nivel a
otro”5. La gran problemática del hombre actual es que no dedica absolutamente
ningún momento para la reflexión. El hombre promedio no se detiene a
preguntarse por sí mismo, su vida, su futuro, su entorno, su situación social ni
familiar. Por consiguiente, si es esto lo que caracteriza al hombre, no como animal
sino como hombre, y el hombre moderno no hace uso de esta capacidad,
entonces podría afirmarse que, a la fecha, se vive el fenómeno de un mundo lleno
de hombres que en realidad no lo son. Cabe aclarar que de ninguna manera se
está eliminando la dignidad de hombre que le corresponde a esta clase de
personas, pues esta es inherente a su ser, sino que su identidad de hombres, está
algo incompleta, puesto que tampoco sería correcto afirma que la han perdido por
completo. Así pues, el hombre moderno promedio podría plenificar más su
identidad de hombre si dicha capacidad reflexiva fuese puesta en práctica.

Para finalizar, lo que el autor Franz Kafka quiso manifestar de una forma artística
es en realidad la horrenda problemática en que se puede llegar a ver envuelto el
hombre si este no se reconoce como lo que es. Situación inverosímil si se toma de
manera literal a como la plantea el autor, pero que en realidad es completamente
aplicable al hombre de hoy, y también real, en cuanto al sentido alegórico que
presenta el texto. De esta manera, lo que se puede considerar una obra de ficción,
puede ser a la vez una exposición aterrizada de una de las tantas complejas
situaciones que se pueden presentar en medio de la intrincada vida del hombre.

REFERENCIAS
5
MARCEL, Gabriel. Obras selectas de Gabriel Marcel. España: BAC. 2002. p. 84.
Yeiron Alzate Quintero
I Filosofía
Antropología Filosófica

BURGOS, Juan. Antropología: una guía para la existencia. España: Palabra. 2013.

KAFKA, Franz. La metamorfosis. Colombia: Atenea. 2007.

MARCEL, Gabriel. Obras selectas de Gabriel Marcel. España: BAC. 2002.

MOLINA, Esperanza. Identidad y cultura. España: Marsiega. 1975.

También podría gustarte