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DESARROLLO DEL TEMA
ROMPEHIELO:
Que los integrantes compartan el Salmos 23 de memoria, la
persona que lo realiza de manera eficaz, es reconocido por todo el
grupo.
PRÁCTICO:
Que dos integrantes del grupo compartan cómo han aplicado la
lección anterior en su vida cotidiana. Es posible que algunos
hayan pasado por una dificultad en esta semana.
EXTENSIÓN:
Continuando con el estudio de Salmos 23, vamos a comprender
en mayor amplitud el versículo 5
EXTENSIÓN:
En medio de toda situación que enfrentamos, tenemos que recordar
que Dios es quien prepara la mesa en presencia de nuestros enemigos.
Unges mi cabeza con aceite. Era costumbre de los orientales ungir con
aceite a sus convidados. Así el Señor promete ungir nuestras vidas con
el Espíritu Santo cada día, un verdadero refresco para el alma de todo
creyente, siendo renovados y revestidos y así seguir nuestro camino
hacia la patria celestial. 2 Corintios 1:21-22; 1 Juan 2:27.
CONCLUSIÓN:
Dios, en este versículo, se muestra como el anfitrión de la mesa, quien
nos ha preparado un banquete para que lo disfrutemos en este tiempo,
no sólo en el cielo. Y además, nos unge con Su espíritu Santo,
constantemente, llenándonos así de gozo y alegría, aún en medio de las
aflicciones o problemas que enfrentamos en la vida, porque es Su
gracia y misericordia la que nos sostiene. Lam 3:22 y 1 Cor. 15:10.
NOTA:
Aconsejamos que se brinde el espacio de interacción a los integrantes del
grupo en medio de la extensión, para conocer sus perspectivas acerca del
pasaje bíblico en estudio.