Está en la página 1de 2

Oración después de la comunión (LOC pág.

Misión San Romero, Carrizal


Confesión de pecado (LOC pág.. 282): 288): Domingo 02 de Octubre
Confesemos nuestros pecados contra Dios y
contra nuestro prójimo. Propio 22 después de Pentecostés
Eterno Dios, Padre celestial, en tu bondad nos
has aceptado como miembros vivos
Dios de misericordia, confesamos que hemos de tu Hijo, nuestro Salvador Jesucristo;
pecado contra ti por pensamiento, palabra y nos has nutrido con alimento espiritual
obra, por lo que hemos hecho en el Sacramento de su Cuerpo y de su San-
y lo que hemos dejado de hacer. No te hemos gre. Envíanos ahora en paz al mundo;
amado con todo el corazón; no hemos amado revístenos de fuerza y de valor para amarte y
a nuestro prójimo como a nosotros mismos. servirte con alegría y sencillez de corazón;
Sincera y humildemente nos arrepentimos. por Cristo nuestro Señor. Amén.
Por amor de tu Hijo Jesucristo, ten piedad de
nosotros y perdónanos; así tu voluntad será
nuestra alegría y andaremos por tus caminos,
para gloria de tu Nombre. Amén.

La paz (LOC pág. 283). Celebrante: Bendito sea Dios: Padre, Hijo y
Espíritu Santo.
Celebrante: La paz del Señor sea siempre Pueblo: Y bendito sea su reino, ahora y por
con ustedes. siempre. Amén. (LOC pág. 277).
Pueblo: Y con tu espíritu.
Dios omnipotente, para quien todos los corazo-
Canto de las ofrendas. nes están manifiestos, todos los deseos son co-
nocidos y ningún secreto se halla encubierto:
Celebrante (LOC pág. 286): Oremos como Purifica los pensamientos de nuestros corazones
nuestro Salvador Cristo nos enseñó. por la inspiración de tu Santo Espíritu, para que
perfectamente te amemos y dignamente procla-
Pueblo y Celebrante: Padre nuestro que memos la grandeza de tu santo Nombre; por
estás en los cielos, santificado sea tu Nom- Cristo nuestro Señor. Amén. (LOC pág. 278).
bre, venga tu Reino, hágase tu voluntad, así
en la tierra como en los cielos. El pan nuestro Gloria….
de cada día, dánosle hoy. Y perdónanos
nuestras deudas, así como nosotros perdona- Celebrante: El señor este siempre con uste-
mos a nuestros deudores. Y no nos dejes des.
caer en la tentación mas líbranos de mal. Por- Pueblo: Y con tu espíritu.
que tuyo es el reino, y el poder,
y la gloria, por siempre jamás. Amén. Celebrante: Oremos. Oraciones especiales…
Celebrante: [¡Aleluya!] Cristo, nuestra Pas-
cua, se ha sacrificado por nosotros.
Pueblo: ¡Celebremos la fiesta! [¡Aleluya!].

Celebrante: Los dones de Dios para el


Pueblo de Dios.

Canto de comunión…
Lecciones de este domingo… Segunda lectura: 2 Timoteo 1: 1-14
Primera lectura: Habacuc: 1:1-4; 2: 1-4. Pablo, apóstol de Cristo Jesús, enviado por vo- Santo Evangelio de nuestro Señor Je-
luntad de Dios de acuerdo con la promesa de sucristo según San Lucas 12: 49-56
Éste es el mensaje que el Señor reveló vida que se obtiene por medio de Cristo Jesús,
al profeta Habacuc. Señor, ¿hasta saluda al querido hijo Timoteo. Que Dios Padre Pueblo: Gloria a ti Señor
cuándo gritaré pidiendo ayuda sin que y Cristo Jesús nuestro Señor derramen su gra-
tú me escuches? ¿Hasta cuándo clama- cia, su misericordia y su paz sobre ti. Al recor- Los apóstoles pidieron al Señor: —Danos
ré a causa de la violencia sin que ven- darte siempre en mis oraciones de día y de no- más fe. El Señor les contestó: —Si uste-
gas a librarnos? ¿Por qué me haces ver che, doy gracias a Dios, a quien sirvo con una des tuvieran fe, aunque sólo fuera del ta-
tanta angustia y maldad? Estoy rodeado conciencia limpia, como sirvieron también mis maño de una semilla de mostaza, podrían
de violencia y destrucción; por todas antepasados. Me acuerdo siempre de tus lágri- decirle a este árbol: “Arráncate de aquí y
partes hay pleitos y luchas. No se aplica mas, y quisiera verte para llenarme de alegría. plántate en el mar”, y les haría caso. »Si
la ley, se pisotea el derecho, el malo Porque me acuerdo de la fe sincera que tienes. uno de ustedes tiene un criado que regre-
persigue al bueno y se tuerce la justicia. Primero la tuvieron tu abuela Loida y tu madre sa del campo después de haber estado
Estaré atento y vigilante, como lo está Eunice, y estoy seguro de que también tú la tie- arando o cuidando el ganado, ¿acaso le
el centinela en su puesto, para ver qué nes. Por eso te recomiendo que avives el fuego dice: “Pasa y siéntate a comer”? No, sino
me dice el Señor y qué respuesta da a del don que Dios te dio cuando te impuse las que le dice: “Prepárame la cena, y dispón-
mis quejas. El Señor me contestó: manos. Pues Dios no nos ha dado un espíritu de te a atenderme mientras yo como y bebo.
«Escribe en tablas de barro lo que te temor, sino un espíritu de poder, de amor y de Después podrás tú comer y beber.” Y
voy a mostrar, de modo que pueda leer- buen juicio. No te avergüences, pues, de dar tes- tampoco le da las gracias al criado por
se de corrido. Aún no ha llegado el mo- timonio a favor de nuestro Señor; ni tampoco te haber hecho lo que le mandó. Así tam-
mento de que esta visión se cumpla; avergüences de mí, preso por causa suya. Antes bién ustedes, cuando ya hayan cumplido
pero no dejará de cumplirse. Tú espera, bien, con las fuerzas que Dios te da, acepta tu todo lo que Dios les manda, deberán de-
aunque parezca tardar, pues llegará en parte en los sufrimientos que vienen por causa cir: “Somos servidores inútiles, porque no
el momento preciso. Escribe que los del evangelio. Dios nos salvó y nos ha llamado a hemos hecho más que cumplir con nues-
malvados son orgullosos, pero los jus- formar un pueblo santo, no por lo que nosotros tra obligación.”
tos vivirán por su fidelidad a Dios. hayamos hecho, sino porque ése fue su propó-
sito y por la bondad que ha tenido con nosotros
Lector: Palabra del Señor. desde la eternidad, por Cristo Jesús. Esa bon- Celebrante: El Evangelio del Señor
Pueblo: Demos gracias a Dios. dad se ha mostrado gloriosamente ahora en Pueblo: Te alabamos Señor
Cristo Jesús nuestro Salvador, que destruyó el
poder de la muerte y que, por el evangelio, sacó Credo Niceno (LOC pág. 280)
Salmo 37: 1-10. R: Confía en El Se- a la luz la vida inmortal. Dios me ha encargado
ñor y has el bien… de anunciar este mensaje, y me ha enviado co- Oración de los fieles: formula IV- (LOC
mo apóstol y maestro. Precisamente por eso pág. 310-311).
sufro todas estas cosas. Pero no me avergüenzo
de ello, porque yo sé en quién he puesto mi con-
fianza; y estoy seguro de que él tiene poder para
guardar hasta aquel día lo que me ha encomen-
dado. Sigue el modelo de la sana enseñanza que
de mí has recibido, y vive en la fe y el amor que
tenemos gracias a Cristo Jesús. Con la ayuda
del Espíritu Santo que vive en nosotros, cuida
de la buena doctrina que se te ha encomendado.

Lector: Palabra del Señor.


Pueblo: Demos gracias a Dios.

También podría gustarte