Está en la página 1de 11

Presentación

 Walkiry R. Guzmán Pérez


12-MPSS-6-012
Materia
 Psicología Experimental I

Tema

 El Problema

Profesora
 Deyanira M. Carrasco

Fecha
 28 de mayo de 2021
Introducción

El planteamiento de un problema, podemos decir que este existe cuando sabemos


lo suficiente para ver que hay algo que no sabemos. Tomando en cuenta las tres formas
en que se manifiesta un problema, la primera es: hay laguna en nuestro conocimiento, la
segunda es, los resultados de diversos experimentos son contradictorios, y tercera, existen
un hecho aislado que hay que explicar.

La ciencia sólo enfoca problemas solubles. A. Un problema es soluble si es posible


plantear una hipótesis apropiada como solución tentativa. Una hipótesis apropiada es la
que es pertinente al problema y es empíricamente comprobable.

.
Tema II: El Problema
¿Qué es un problema?

Una investigación científica comienza cuando ya hemos adquirido cierto


conocimiento y éste nos indica que hay algo que no sabemos aún. Puede ser, tan sólo, que
no tengamos la información suficiente para responder a una pregunta, o bien, que el
conocimiento que ya tenemos se encuentre en un grado tal de desorden que no se le pueda
relacionar adecuadamente con la pregunta. En uno u otros casos, tenemos un problema.
La formulación de un problema es de especial importancia, pues nos guiará en el resto de
nuestra investigación.

Modos En Que Se Manifiesta Un Problema

Primero, estudiar las investigaciones ya realizadas obviamente le ayudará a cobrar


conciencia de los problemas, de modo que pueda formular los que le interesen. Para tener
una visión general de todo el campo de la psicología, y aun de la investigación en campos
relacionados con ella, podrá usted estudiar muchas de las condensaciones que aparecen
periódicamente en la revista Psychological Abstracts.

Una Laguna En Nuestro Conocimiento

El modo más evidente en que se manifiesta un problema probablemente sea


cuando hay una clara falta de información. Sabemos lo que sabemos, pero sencillamente
hay algo que aún no sabemos. Sin un grupo comunitario plantea la siguiente pregunta: ´´
¿qué tipo de terapia es el más eficaz´´? Ahora bien, la pregunta es de extrema importancia,
pero hay pocos estudios científicamente aceptables que ofrezcan una respuesta. He aquí
una evidente lengua en nuestro conocimiento.

Los resultados contradictorios

Para comprender como pueden diferir los resultados de distintos intentos por
resolver un mismo problema, considérense tres experimentos distintos, que fueron
publicados en revistas de psicología. El problema común era: ´´si una persona está
aprendiendo una tarea, ¿son más benéficos los descansos cuando se concentra durante la
primera parte de la sesión total de practica o cuando se concentra en la última parte?

Los resultados del primer experimento indicaron que resultaba mejor repartir los
descansos al final del periodo de aprendizaje; el segundo experimento mostró que repartir
los periodos de descanso al principio producía un mejor aprendizaje; mientras que el
tercer experimento mostró que ambos grupos aprendían casi por igual. ¿Por qué nos dan
resultados contradictorios estos tres estudios? Una posible causa es que uno o más de los
experimentos fue mal efectuado: acaso se violaron ciertos principios de la buena
experimentación. La falta de control de variables extrañas importantes es un error común
que puede producir resultados contradictorios, por ejemplo, las variables extrañas en dos
experimentos individuales sobre el mismo problema presuponían dos valores diferentes,
de modo que causaron diferentes resultados de la variable dependiente.

Explicación De Un Hecho

¿Cobramos conciencia de un problema i cuando preguntamos por qué un “hecho”


de determinada manera? Un hecho que existe aislado del resto del conocimiento, exige
una explicación. Una ciencia no sólo consiste en conocimiento, sino en conocimiento
sistematizado. Cuanto mayor sea la sistematización, mayor será la compresión de
naturaleza que tenga el científico.

Definición De Un Problema Soluble

Una hipótesis es la solución tentativa a un problema. Sin embargo, para resolver


en realidad el problema, la hipótesis debe poder someterse a prueba, tiene que ser
pertinente al problema y debe quedar empíricamente establecida como cierta.

La Solución Propuesta Puede Ponerse A Prueba

La ciencia no puede dar respuesta a todas las preguntas que hace la gente. Como
ya se observó en el capítulo L, un problema sólo puede ser digno de estudio científico si
tiene solución. Pero, ¿cómo determinamos si un problema es soluble o insoluble? En
pocas palabras, un problema es soluble si se le puede dar como respuesta empírica un sí
o un no. De manera más precisa, un problema soluble es aquel para el que se puede
plantear una hipótesis comprobable, como solución tentativa. Un problema es soluble si,
y sólo si, se puede poner a prueba empírica su solución tentativa (que se ofrece en forma
de hipótesis). Por ello, debemos analizar la naturaleza de las hipótesis pertinentes que
puedan someterse a prueba. Sin embargo, antes de empezar, el lector debe reconocer que
esta cuestión es sumamente compleja, con una tempestuosa historia filosófica que no
vamos a analizar aquí. Dado que, como empiristas, tenemos que seguir adelante con
nuestra investigación, consideraremos la naturaleza de la pertinencia y de la
comprobabilidad sólo en la medida en que afectan la labor cotidiana del psicólogo
investigador.

La Solución Propuesta Es Pertinente Al Problema

Una hipótesis pertinente a un problema es la que puede resolver el problema de


ser cierta. La hipótesis de Becquerel fue pertinente porque explicó que la película
fotográfica se había velado debido a la radiación emitida por el uranio. Este punto puede
parecer obvio, pero muchas veces se ha dado la respuesta correcta al problema erróneo.
Una hipótesis improcedente (pero probablemente cierta) al problema de ¿por qué muchos
fuman mariguana? Sería: “si una persona fuma opio, entonces, esa persona sufrirá
alucinaciones”. ¿Qué es una hipótesis comprobable? Una hipótesis es comprobable si, y
sólo si, es posible ', determinar su veracidad o falsedad.1Las hipótesis toman la forma de
proposiciones (o, asimismo, declaraciones o frases). Si es posible; determinar que una
hipótesis, planteada como proposición, es verdadera o falsa, entonces la hipótesis es
comprobable. Si no es posible determinar que la proposición es verdadera o falsa,
entonces la hipótesis no es comprobable y se la debe descartar, considerándola sin valor
para la ciencia. De este modo, un problema (planteado como pregunta) es soluble si es
posible plantear una hipótesis pertinente como respuesta potencial al problema, y también
debe ser posible determinar que la hipótesis es verdadera o falsa. En suma, el problema
soluble es aquel para el que se puede plantear una hipótesis comprobable.

La Solución Propuesta Es Pertinente Al Problema

Una hipótesis pertinente a un problema es la que puede resolver el problema de


ser cierta. La hipótesis de Becquerel fue pertinente porque explicó que la película
fotográfica se había velado debido a la radiación emitida por pintura, no son
conocimientos; tales cosas no son verdaderas ni falsas, ni nuestra percepción de ellas es
verdadera o falsa, pues no son proposiciones. De manera similar, una sensación de dolor
en el estómago o una experiencia estética al contemplar un cuadro no son, en sí mismas,
ejemplos de conocimiento.

En cambio, las declaraciones acerca de conocimientos y objetos sí son candidatas


al conocimiento. Por ejemplo, las afirmaciones “él tiene dolor de estómago” y “yo tengo
dolor de estómago” pueden ser declaraciones de conocimiento, dependiendo de si son
ciertas. En pocas palabras, el requisito de que el conocimiento sólo puede ocurrir en forma
de una declaración es verdaderamente crítico para el proceso de comprobabilidad. Si
determinamos que la declaración de una hipótesis es cierta, entonces dicha declaración es
ejemplo de lo que definimos como conocimiento.

Grado De Probabilidad En Lugar De Verdadero Y Falso

Empleamos los términos “verdadero” y “falso” como aproximaciones, pues es


imposible determinar fuera de toda duda que una hipótesis (o cualquier otra proposición
empírica) es absolutamente verdadera o falsa. La clase de mundo que se nos ha dado para
estudiar sencillamente no es de verdades o falsedades de 100 por ciento. Lo mejor que
podemos hacer es decir que una proposición tiene un grado determinable de probabilidad.
No podemos decir, pues, en sentido estricto, que una proposición es cierta. Sino que, es
probable o muy probable. Asimismo, decimos que otra proposición es sumamente
improbable. Por ello, sustituimos “verdadero” y “falso” por la frase “grado de
probabilidad”; de otra manera, ninguna proposición empírica podría someterse a prueba,
ya que ninguna proposición empírica puede ser (absolutamente) verdadera o falsa. Por
consiguiente, el principio que nos interesará es que una hipótesis es comprobable si, y
sólo si, es posible determinar para ella un grado de probabilidad.

Tipos De Posibilidades

Enfoquemos ahora el término posible de la declaración anterior. ¿Significa


“posible” que podemos poner a prueba la hipótesis ahora o en algún momento futuro?
Consideremos la pregunta siguiente: ¿podemos volar a Urano?” Si por “posible”
entendemos que podemos subir hoy a una nave espacial y emprender una jornada feliz,
entonces y claramente, semejante aventura no es posible. Pero si queremos decir que tal
viaje probablemente sí será posible en algún momento futuro, entonces la respuesta es
afirmativa. Consideremos entonces dos interpretaciones de lo “posible”. A la primera
interpretación la llamaremos actualmente alcanzable y a la segunda potencialmente
alcanzable.

Actualmente Alcanzable

La interpretación de lo “posible” indica que la posibilidad está a nuestro alcance


en el momento actual. Si se puede hacer cierta tarea con el equipo y con otros medios de
los que ya disponemos, lograr la tarea es hoy alcanzable. Si no se puede realizar la tarea
con los recursos de que hoy se dispone, la solución al problema planteado no es
actual mente alcanzable. Por ejemplo, construir un puente sobre el Río Suwannee (o
incluso24 El problema un túnel bajo el Canal de la Mancha) es actualmente alcanzable,
pero vivir bien en Venus no es actualmente alcanzable.

Potencialmente Alcanzable

Esta interpretación concierne a las posibilidades que podrían estar al alcance de


las personas en algún momento futuro, pero que no lo están en la actualidad. Hoy, podría
ser difícil decidir si en realidad tendrán esos recursos en el futuro. Si los avances
tecnológicos logran ser lo suficientemente exitosos como para que lleguemos a poseer
esos poderes, entonces lo potencialmente alcanzable se vuelve actualmente alcanzable.
Por ejemplo, un viaje a Urano no es actualmente alcanzable, pero sí esperamos
plenamente que ese viaje sea técnicamente factible en el futuro. La triunfal realización de
tal empresa es prueba de que la tarea debe ser asignada a la categoría de lo actualmente
alcanzable. Menos estrictamente, cuando podemos especificar los procedimientos para
resolver un problema y cuando se ha demostrado que esos procedimientos pueden
emplearse en realidad, entonces podemos pasar el problema de la categoría de lo
potencialmente a lo actualmente alcanzable.

Clases De Comprobabilidad

Estas dos interpretaciones de lo “posible” nos conducen a dos clases


correspondientes de comprobabilidad.

Lo Actualmente Comprobable

Si hoy se puede lograr la determinación de un grado de probabilidad de una


hipótesis, entonces la proposición es actualmente comprobable. Esta afirmación nos deja
considerable espacio, que tendremos que justificar trabajando con problemas con baja
probabilidad de ser satisfactoriamente resueltos, así como con problemas claros y bien
definidos. Si alguien puede efectuar un experimento mediante el cual es posible calcular
la probabilidad de una hipótesis con los recursos de que hoy disponemos, entonces, sin
duda, la hipótesis es actualmente comprobable. Si no podemos efectuar semejante
experimento, la hipótesis no es actualmente comprobable.
Potencialmente Comprobable

Una hipótesis es potencialmente compro- I bable si puede ser posible determinar


un grade probabilidad para ella en algún momento futuro, si el grado de probabilidad es
potencialmente alcanzable. Aunque, en la actualidad, no sea posible someter a prueba
dicha hipótesis, los avances de nuestras técnicas y la invención de otras nuevas podrán
hacer posible esa comprobación. Dentro de esta categoría, también deseamos tener cierto
espacio. Puede haber declaraciones de las que sepamos con alto grado de certidumbre
cómo las pondremos a prueba con el tiempo, aunque sencillamente no podamos hacerlo
de momento. Por otro lado, están las declaraciones con las que tenemos dificultad para
imaginar si quiera los procedimientos mediante los que, con el tiempo, se las someterá
a prueba, pero por ahora no podemos decir que alguien no llegará un día e inventará los
medios apropiados.

Principio De Trabajo Para El Experimentador

Con base en las consideraciones anteriores, podemos formular ahora nuestros


principios de acción para las hipótesis. Primero, dado que los psicólogos que efectúan
experimentos sólo deben trabajar en problemas que tengan cierta posibilidad de ser
resueltos con los medios de que hoy se dispone, deberemos aplicar la norma de
comprobabilidad actual a nuestro trabajo cotidiano. Por tanto, sólo se deberá considerar
una hipótesis para experimentación si dicha hipótesis es actualmente sometible a prueba.

Problemas Insoluble

El Problema no estructurado

El estudiante que empieza a aprender a desarrollar, planear y efectuar estudios


experimentales suele tener dificultades para separar los seudoproblemas de los problemas
solubles. Por tanto, con este análisis de los problemas insolubles se pretende mejorar la
perspectiva del estudiante para que alcance mayor eficiencia al reconocer y plantear
problemas solubles. Sin embargo, el instructor de psicología, con años de experiencia,
debe reconocer que el problema será vago y mal formulado por estudiantes principiantes
durante muchas generaciones venideras. Por ejemplo, cómo responder a estas preguntas:
“¿qué me pasa (le pasa, a mí, a usted, a ella) por la cabeza?”, “¿cómo funciona la mente
humana?”, o “¿es posible modificar la naturaleza humana?” Estos problemas no tienen
solución porque su intención no es clara y el do minio al que se remiten es tan amorfo
que resulta imposible especificar cuáles serían las observaciones pertinentes, y mucho
menos relacionar las observaciones con tan vagas formulaciones. Sin embargo, después
de una amplia discusión con el que hizo la pregunta, podría ser posible determinar lo que
estaba tratando de preguntar y, con ello, reformular la pregunta, de modo que sí pudiera
tener respuesta. Por ejemplo, tal vez un apropiado análisis de la pregunta “¿qué me pasa
por la cabeza?” podría conducir a una reformulación como “¿por qué me siento obligado
a contar el número de las perillas de las puertas de toda habitación en la que entro?”
Incluso, semejante pregunta resulta difícil de responder, pero al menos han aumentado
las probabilidades de éxito porque ahora la pregunta ha sido planteada con mayor
precisión y se refiere a hechos más fácilmente observables. Otra cosa es si la investigación
valdrá o no la pena.

Los Términos Inadecuadamente Definidos Y La Definición Operacional

Los problemas vagamente planteados, como los anteriores, suelen contener


términos que han sido inadecuadamente definidos, lo que aumenta su vaguedad. Sin
embargo, puede haber problemas que serían solubles si sólo supiéramos lo que significa
uno de los términos contenidos en su planteamiento. Consideremos, por ejemplo, la
pregunta de actualidad, `` ¿pueden pensar las máquinas? Ésta es una analogía
contemporánea a la pregunta que Thorndike abordó con gran detalle a principios del siglo:
“¿razonan los gatos?” Que estos problemas sean solubles o no dependerá de cómo se
definan “pensar” y “razonar”. Por desgracia, se ha derrochado mucha energía en discutir
sobre tales cuestiones a falta de una especificación clara de lo que significan estos
términos cruciales. En los análisis históricos, los des acuerdos entre los discípulos, Jung
y Adler, y el maestro, Freud constituyen un ejemplo importante. ¿Cuál es la fuerza
impulsora básica de los seres humanos? ¿Es la libido, con su énfasis primordial en las
necesidades sexuales? ¿O es el concepto más generalizado de Jung de la libido como
“cualquier energía psíquica?” ¿O es, como sostuvo Adler, una energía compensatoria,
una “voluntad de poder”? Este problema, fácil es decirlo, continuará sin solución hasta
que estos conceptos hipotetizados hayan sido adecuadamente definidos, si en realidad
algún día pueden serlo.

La Imposibilidad De Recabar Datos Pertinente

Problemas que son insolubles por falta de datos. A veces tenemos un problema
que es bastante preciso y cuyos términos son operacionalmente definibles, pero no
sabemos especificar cómo recabaríamos los datos necesarios. Por ejemplo, consideremos
el posible efecto de la psicoterapia sobre la inteligencia de un paciente clínico que no
puede hablar. Obsérvese que podemos definir adecuadamente términos cruciales como
“inteligencia” y “terapia”. Vemos que el paciente obtiene baja calificación en una prueba
de inteligencia. Después de un considerable trabajo clínico, ha mejorado el habla del
paciente; en una ulterior prueba de inteligencia, el paciente obtiene una calificación
considerablemente mejor. ¿Aumentó en realidad la inteligencia del paciente como
resultado del trabajo clínico? Es posible que haya varias alter nativas: ¿fue inválida la
primera calificación de inteligencia por las dificultades de aplicar la prueba a un paciente
que no hablaba? ¿Mejoró luego la calificación simplemente por haber “puesto atención”
al paciente? ¿Estaba el paciente pasando por una especie de periodo de transición de modo
que el simple paso del tiempo (con varias experiencias) le ofreció la oportunidad de
mejorar su calificación? Sin duda, es imposible decidir entre estas posibilidades y el
problema no es soluble tal como se planteó.
La Circularidad Viciosa

La circularidad viciosa hace insolubles los problemas. Antes de concluir esta


sección, consideremos un tipo de razonamiento que, cuando ocurre, resulta positivamente
desastroso para la empresa científica. El razona miento falaz, llamado circularidad
viciosa, ocurre cuando una respuesta se basa en una pregunta y la pregunta en la respuesta,
sin apelar a otra información fuera de este círculo vicioso. A principios de nuestro siglo,
“nombrar un instinto” era un juego muy popular, que dio por resultado una muy extensa
lista de instintos como el gregario, de agresividad, etc. Su objetivo era explicar la
aparición de cierto tipo de conducta, llamémosla X, postulando la existencia de un
instinto, digamos al instinto Y. Sólo con el tiempo se hizo obvio que este esfuerzo no
llevaba a ninguna parte y, entonces, perdió importancia. El juego, para reconstruir su
circularidad viciosa, era así. Pregunta: “¿por qué muestran los organismos la conducta
X?” Respuesta: “porque tienen el instinto Y”. Pero la segunda pregunta: “¿cómo
sabemos que los organismos tienen el instinto Y?” Respuesta: “porque muestran la
conducta X". El razona miento va de X a Y y de Y a. X, no explicando, así, nada. Los
problemas que se enfocan de esta manera constituyen una clase especial de problemas
insolubles y debemos tener cui dado de evitar la invención de nuevos juegos como el de
nombrar pulsiones o motivos. Para mostrar el peligro desde un punto de vista más
contemporáneo, consideremos la pregunta de por qué no ocurrió una respuesta dada. Una
posible respuesta es que un impulso neural inhibidor impidió que el impulso excita torio
produjera una respuesta.

Algunas Consideraciones Adicionales De Problemas

Un problema debe tener valor

Aun después de haber determinado que un problema es actualmente soluble, se


deberán satisfacer otros criterios antes de dedicar considerables esfuerzos a efectuar un
experimento. Una característica deseable es que el problema sea de suficiente
importancia. Surgen muchos problemas a los cuales el psicólogo no dará respuestas
inmediatamente, y ni si quiera en el futuro, aunque en realidad sean solubles. Algunos
problemas sencillamente no tienen importancia suficiente como para justificar la
investigación: son demasiado triviales o demasiado costosos (en cuestión de tiempo,
dinero y esfuerzo) de responder. Es pro bable que durante siglos no se tenga la
res puesta al problema de si las ratas prefieren el queso suizo o el americano. De manera
similar “por qué luchan las naciones” probable mente no tenga respuesta: no porque
carezca de importancia, sino porque su respuesta exigiría mucho más esfuerzo del que la
sociedad parece dispuesta a dedicarle.

Evite El Problema Del Callejón Sin Salida

A veces, el psicólogo cobra conciencia de un problema que es soluble,


adecuadamente redactado e importante, pero una acumulación de experimentos sobre el
problema muestra resultados contradictorios y, a menudo, no parece haber razón para
tales discrepancias. Esto es lo que podría llamarse problema del callejón sin salida. Ante
esta situación, parece no valer la pena efectuar “sólo otro experimentó más” sobre el
problema, porque tal vez se ganará poco, resulte como resulte el experimento. El
problema del callejón sin salida existe cuando hay numerosos experimentos
contradictorios, de modo que se gana poco añadiendo más datos a uno y otro bando. A
menos que un experimentador pueda ser imaginativo y crear un nuevo enfoque que tenga
cierta oportunidad de sistematizar el conocimiento en esta área, probablemente lo mejor
sea mantenerse apartado de esa área y dedicar sus limitadas energías a investigaciones de
un problema que tenga mayor oportunidad de aportar algún conocimiento nuevo.

Reacciones Psicológicas A Los Problemas

Por desgracia, la existencia de los problemas que conducen a avances científicos


puede ser causa de angustia para algunas personas. Cuando se logra un descubrimiento
nuevo, las personas suelen reaccionar de una de dos maneras. Una persona curiosa y
creativa, por una parte, intentará valerosamente explicarlo. Una persona sin curiosidad ni
imaginación, en cambio, tratará de pasar por alto el problema, esperando que desaparezca
por sí solo. Un buen ejemplo de este último tipo de reacción ocurrió alrededor del siglo
XV, cuando los matemáticos presentaron un número “nuevo” al que llamaron cero. La
idea de que el cero pudiese ser un número era perturba dora y algunos cuerpos
legislativos de ciudades aprobaron leyes que prohibían su uso. La creación de números
imaginarios produjo reacciones similares; en algunos casos, se proscribió todo el sistema
numérico arábigo. Las reacciones negativas a descubrimientos científicos no se han
limitado a los legos y en realidad han provocado respuestas muy emotivas por parte de
ciertos científicos. La amplitud de criterio de los científicos no es universal. Por ejemplo,
los científicos-astrónomos necesitaron demasiado tiempo para aceptar la teoría de
Copérnico sobre el movimiento planetario, en parte porque parecía “simplemente
absurdo” pensar que la Tierra se mueve.
Conclusión

La Fuentes principal de los problemas, es las propias actividades práctica transformada


del hombre, que constantemente produce nuevas situaciones problemica que reclama su
solución. Por otra parte, a veces el investigador descubre que, en la teoría, sobre todos
de las más reciente, existen laguna en su construcción que es necesario completar o que
las repuestas teóricas a ciertos problemas

También podría gustarte