Está en la página 1de 12

LUIS ARMANDO TOLOSA VILLABONA

Magistrado ponente

STC1314-2017
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01
(Aprobado en sesión de primero de febrero de dos mil diecisiete)

Bogotá, D. C., siete (7) de febrero de dos mil diecisiete


(2017).

Decídese la impugnación interpuesta frente a la


sentencia de 13 de diciembre de 2016, dictada por la Sala
Civil Familia del Tribunal Superior del Distrito Judicial de
Ibagué, dentro de la tutela instaurada por María Mercedes
Gallego Osorio en contra del Juzgado Segundo de Familia
de esa capital, con ocasión del juicio declarativo de
alimentos de mayor de edad iniciado por la aquí gestora
respecto de Jesús Emilio Cárdenas Guzmán.

1. ANTECEDENTES

1. La promotora suplica la protección de las


prerrogativas al debido proceso, vida y mínimo vital,
presuntamente vulneradas por la autoridad accionada.

1
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

2. María Mercedes Gallego Osorio sostiene, como base


de su reclamo, en síntesis, lo siguiente (fls. 1 y 2):

El litigio objeto de esta salvaguarda fue admitido por


el juez acusado mediante providencia de 30 de septiembre
de 2016, en la cual se decretaron, entre otras cosas,
alimentos provisionales a favor de la tutelante y a cargo de
su excónyuge por la suma de $400.000 mensuales.

A través de su apoderado, la ahora actora requirió al


despacho oficiar “al FOPEP para que efect[uara] el
descuento” del citado valor de la pensión devengada por el
obligado.

El anterior pedimento fue denegado el 28 de octubre


de 2016, determinación confirmada el 17 de noviembre del
mismo año, tras resolver la reposición impetrada por la hoy
quejosa.

Según Gallego Osorio, las decisiones precedentes no


tienen en cuenta su apremiante situación económica y de
salud, precisando además que se le ordenó emplazar a su
demandado, de quien desconoce su domicilio y, por lo
tanto, “(…) [¿] cuándo se podrá enterar el señor que [le] tiene
que consignar $400.000? (…)”.

3. Implora acceder a su súplica.

2
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

1.1. Respuesta del accionado

Se opuso al ruego realzando la legalidad de sus


pronunciamientos, explicando sobre el cuestionamiento
elevado en este ruego:

“(…) En escrito presentado el día 27 de octubre del 2016, por la


parte actora, solicitó que el monto de la cuota provisional de
alimentos, fijada a cargo del demandado, se le descontara de la
pensión de jubilación que percibe el señor Jesús Emilio
Cárdenas Guzmán en FOPEP, habiendo sido despachado
desfavorablemente en auto de octubre 28 de 2016, por tratarse
de alimentos para mayores y no del trámite especial de
alimentos para menores, previsto en el Código de la Infancia y
Adolescencia. Esta decisión fue recurrida en reposición y
resuelta desfavorablemente mediante providencia de noviembre
17 de 2016, con los argumentos allí planteados, ya que en el
evento que la parte obligada no se allane a cumplir con el pago
de la cuota provisional de alimentos, la parte actora tiene la
acción ejecutiva a continuación de éste proceso, con fundamento
en el art. 397 numeral 2º del C. General del Proceso, hecho este
que enmarca la inconformidad de la acción de tutela”.

“Es de advertir que a esta altura del proceso y a pesar de estar


ordenado en auto admisorio, a la fecha no se ha realizado el
emplazamiento del demandado Jesús Emilio Cárdenas Guzmán
(…)” (fls. 23 a 28).

1.2. La sentencia impugnada

Desestimó la protección tras inferir que “(…) las


providencias no fueron producto de una actitud antojadiza o
caprichosa del funcionario a cargo del despacho (…)” (fls. 37
a 43).

3
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

1.3. La impugnación

La formuló la promotora reiterando lo dicho en el


escrito inicial, haciendo énfasis en la necesidad de recibir
los aludidos alimentos, atendiendo a su avanzada edad y a
su estado de indefensión (fls. 47 y 48).

2. CONSIDERACIONES

1. María Mercedes Gallego Osorio critica que dentro


del comentado subexámine se haya denegado su petición de
oficiar “(…) al FOPEP para que efect[uara] el descuento de
los alimentos provisionales (…)” decretados a su favor, de la
pensión de jubilación percibida por su exesposo.

2. Mediante determinación de 17 de noviembre de


2016 (fls. 11 a 13), el despacho acusado zanjó la reposición
elevada por la tutelante respecto del auto nugatorio de su
solicitud, luego de inferir que “(…) no es procedente (…)
embargar dichos dineros al demandado, pues la ley es clara
en establecer que la medida solicitada procede únicamente
para los alimentos que se deben a los menores de edad (…)”.

Seguidamente, aclaró que en caso de impago de la


citada cautela, la interesada podría reclamar su cancelación
por la vía ejecutiva. En palabras del juzgador:

“(…) [L]a ley es clara en establecer que la medida solicita


procede únicamente para los alimentos que se deben a menores
de edad”.

4
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

“Ahora bien, lo anterior no significa que los alimentos


provisionales fijados mediante auto admisorio de la demanda y
los que se llegaren a establecer en el transcurso del proceso
queden en “letra muerta” como manifiesta el recurrente, pues la
actora cuenta con diferentes medios de defensa para reclamar
el pago de las cuotas que el demandado no cancele en la forma
ordenada, como lo es el proceso ejecutivo o los demás que
considere pertinentes y efectivos para satisfacer sus
pretensiones (…)”.

3. Para el funcionario judicial no era viable acceder a


lo pretendido por la querellante, por cuanto, en su opinión,
el Estatuto Procesal Civil vigente, en su artículo 397 1, no
consigna esa posibilidad, aclarando además que tal medida
solamente está expresamente permitida para los alimentos
de menores, de conformidad con el precepto 129 del Código
de la Infancia y la Adolescencia 2.

4. La conclusión adoptada por el acusado contraviene


los derechos fundamentales al debido proceso y, en
conexidad, al mínimo vital de la tutelante, mayormente
cuando se encuentra, al igual que los menores en una
situación de debilidad manifiesta, por la delicada condición
de salud aducida, pues afirmó padecer “esquemia cerebral

1
“(…) Art. 397. (…) 1. Desde la presentación de la demanda el juez ordenará que se den
alimentos provisionales siempre que el demandante acompañe prueba siquiera sumaria de la
capacidad económica de demandado (…)”.
“(…) 2. El cobro de los alimentos provisionales se adelantará en el mismo expediente. De
promoverse proceso ejecutivo, no será admisible la intervención de terceros acreedores (…)”.
2
“(…) Art. 129. En el auto que corre traslado de la demanda o del informe del Defensor de
Familia, el juez fijará cuota provisional de alimentos, siempre que haya prueba del vínculo que
origina la obligación alimentaria. Si no tiene la prueba sobre la solvencia económica del
alimentante, el juez podrá establecerlo tomando en cuenta su patrimonio, posición social,
costumbres y en general todos los antecedentes y circunstancias que sirvan para evaluar su
capacidad económica. En todo caso se presumirá que devenga al menos el salario mínimo legal
(…)”.
“(…) El juez deberá adoptar las medidas necesarias para que el obligado cumpla lo dispuesto
en el auto que fije la cuota provisional de alimentos, en la conciliación o en la sentencia que los
señale. Con dicho fin decretará embargo, secuestro, avalúo y remate de los bienes o derechos
de aquél, los cuales se practicarán con sujeción a las reglas del proceso ejecutivo (…)”.

5
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

transitoria” (sic), “parálisis de la mano derecha” y “artrosis


generativa en la columna” (sic).

La circunstancia de no mencionar el legislador en el


Código General del Proceso la medida invocada por la
tutelante, en juicios de alimentos entre mayores de edad,
como sí lo hace respecto de menores en el Código de la
Infancia y la Adolescencia, no significa que no pueda
adoptarse la misma, por cuanto, en los procesos
declarativos, como el aquí revisado, el juez se encuentra
facultado para decretar cualquier cautela “(…) que (…)
encuentre razonable para la protección del derecho objeto del
litigio, impedir su infracción o evitar las consecuencias
derivadas de la misma, prevenir daños, hacer cesar los que
se hubieren causado o asegurar la efectividad de la
pretensión (…)”, en virtud del literal c del canon 590 del
Estatuto Procesal vigente.

Es importante reseñar que según la regla en cita, el


funcionario judicial deberá tener en cuenta al momento de
definir sobre la pertinencia de una disposición preliminar
“(…) la legitimación o interés para actuar de las partes y la
existencia de la amenaza o la vulneración del derecho (…)”,
situación acreditada en este caso, por tratarse de alimentos
reconocidos a la solicitante, cuya relevancia se explicará en
lo sucesivo.

Asimismo, corresponderá observarse “(…) la


apariencia de buen derecho, como también la necesidad,
efectividad y proporcionalidad de la [misma] y (…)

6
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

establecerá su alcance, determinará su duración y podrá


disponer de oficio o a petición de parte [su] modificación,
sustitución o cese (…)”.

5. En el caso en concreto se ven involucradas


prerrogativas iusfundamentales que debieron advertirse
para brindar una respuesta acorde a las necesidades de la
ahora gestora, tales como el debido proceso, salud, dignidad
humana y mínimo vital, estatuidas, entre otros
instrumentos, en los artículos 1°, 11, 29 y 49 de la
Constitución Política de Colombia y 4, 5, 8, 11 y 25 de la
Convención Americana de Derechos Humanos.

Lo antelado, teniendo en cuenta que a todo juez le


atañe analizar sus decisiones a fin de determinar si las
mismas son respetuosas de las normas constitucionales y
convencionales de derechos humanos.

6. Por tanto, correspondía al accionado estudiar la


petición de la tutelante a la luz de las disposiciones atrás
mencionadas, y así comprobar si era necesario acceder al
requerimiento de la ahora quejosa.

Es necesario aclarar que la figura de los alimentos,


sean de mayores o menores, tiene como sustento el
principio de la solidaridad y busca salvaguardar el mínimo
vital, la dignidad y la integridad física y emocional de
aquella persona en condición de vulnerabilidad, a través de
la concesión de unos ingresos periódicos para su
manutención a cargo del obligado por la ley a cumplir con

7
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

esa erogación, una vez acreditada la capacidad económica


para proveerla.

Por ende, al constatarse la necesidad de otorgar ese


mecanismo de protección a favor de un sujeto, así sea de
manera provisional, es decir, “(…) mientras se ventila la
obligación de prestar alimentos (…)” (Art. 417 del Código
Civil), es imperativo del juez desplegar todas aquellas
acciones para lograr que tal herramienta sea eficaz, pues en
esos casos está evidenciada la urgencia del alimentante de
percibir esos ingresos a fin de conjurar una eventual
situación de calamidad.

Al respecto, la Corte Constitucional ha conceptuado:

“(…) El derecho de alimentos puede entenderse como el poder


de voluntad de una persona (alimentario), otorgado por el
ordenamiento jurídico positivo, de exigir a otra (alimentante) los
medios para su subsistencia cuando carece de ellos (…)”.

“(…) El fundamento constitucional del derecho de alimentos es


el principio de solidaridad social (Arts. 1º y 95, Num. 2) en el
interior de la familia, por ser ésta la institución básica de la
sociedad (Art. 5º) o el núcleo fundamental de la misma (Art. 42),
por lo cual, por regla general, una de sus condiciones es el
parentesco de consanguinidad o civil entre alimentario y
alimentante, en los grados señalados en la ley, o la calidad de
cónyuge o divorciado sin su culpa (…)”.

“(…) Los requisitos o condiciones para adquirir el derecho de


alimentos son el vínculo jurídico anteriormente enunciado, la
necesidad del alimentario y la capacidad económica del
alimentante. Cuando termina o varía alguno de ellos, el
derecho de alimentos así mismo se extingue o modifica (…)”3.

3
Corte Constitucional, sentencia C-994 de 2004.

8
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

7. La obligación alimentaria tiene algunos preceptos


sustantivos que sirven de venero para las declaraciones
judiciales correspondientes. En efecto, el Código Civil
centenariamente enuncia a quienes se debe alimentos, a
saber:

“(…) Al cónyuge; a los descendientes; a los ascendientes; (…) al


cónyuge divorciado o separado de cuerpo sin su culpa; a los
hijos naturales, su posteridad y a los nietos naturales; a los
ascendientes naturales; a los hijos adoptivos; a los padres
adoptantes; a los hermanos legítimos; [y] [a]l que hizo una
donación cuantiosa si no hubiere sido rescindida o revocada
(…)” (Art. 411 Código Civil).

A renglón seguido, en la regla 412 se define que las


pautas previstas en el Título XXI de esa preceptiva se
aplican genéricamente para la prestación alimentaria sin
distingos de ninguna índole, como el mismo texto enseña:
“(…) sin perjuicio de las disposiciones especiales que
contiene este Código respecto de ciertas personas (…)”.

En consecuencia, los alimentos, sean congruos o


necesarios (art. 413 ejúsdem), provisionales o definitivos
(art. 417 ibídem), pueden ser reconocidos con las medidas
correspondientes a que haya lugar, no sólo para menores
sino también para los mayores de edad; en general, para
todos los enlistados en el canon 411 reseñado; pues, se
enfatiza, esa normativa no establece trato diferente en razón
a la edad, sexo, etnia, ni a ningún otro factor
discriminatorio. Se otorgan, cuando se acreditan los
elementos axiológicos de la obligación alimentaria: i) la
necesidad del alimentario; ii) la existencia de un vínculo
jurídico, ya de afinidad, ora de consanguinidad o de

9
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

naturaleza civil, para el caso de los adoptivos, o en las


hipótesis del donante; y iii) capacidad del alimentante.

El precepto 417 ya aludido en el presente texto,


autoriza

“(…) [m]ientras se ventila la obligación de prestar alimentos,


podrá el juez o prefecto ordenar que se den provisionalmente,
desde que en la secuela del juicio se le ofrezca fundamento
plausible; sin perjuicio de la restitución, si la persona a quien se
demandan obtiene sentencia absolutoria”.

“Cesa este derecho a la restitución, contra el que de buena fe y


con algún fundamento plausible, haya intentado la demanda
(…)”.

Del canon en cuestión fulge clara la primera


conclusión ya advertida, los alimentos pueden ser
provisionales y; la segunda, cuando se conceden
transitoriamente, otorga el derecho de repetición a favor del
obligado, esto es, a pedir la restitución por el deudor en
caso de fallo desfavorable a la pretensión declarativa de
alimentos del eventual acreedor.

Sin embargo, la aludida indemnización no procede


contra quien inició el juicio con “fundamento plausible”, en
términos de la misma norma de Bello.

De conformidad con lo anterior y en cuanto viene


para la presente acción, se infiere que si el obligado a pagar
los alimentos provisionales puede exigir la restitución, a
fortiori, el beneficiario con los mismos, en forma indiscutida,
está habilitado legalmente para pedir su reconocimiento y
pago desde el comienzo, dada la modalidad alimentaria en

10
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

cuestión, por cuanto, de otra manera no habría establecido


la dogmática civil la posibilidad al demandado absuelto de
requerir la devolución de las mensualidades dadas
preliminarmente.

8. Se revocará el fallo constitucional de primer grado,


para otorgar el amparo deprecado; en consecuencia, se le
ordenará a la autoridad accionada que en el término de
cuarenta y ocho (48) horas contado a partir del
conocimiento de esta providencia, deje sin efecto el proveído
de 28 de octubre de 2016 y las actuaciones que de él
pendan, y proceda a emitir nuevo pronunciamiento,
teniendo en cuenta las precedentes reflexiones.

3. DECISIÓN

En mérito de lo expuesto, la Corte Suprema de


Justicia, en Sala de Casación Civil, administrando justicia
en nombre de la República y por autoridad de la
Constitución y la Ley,

RESUELVE:

PRIMERO: REVOCAR la sentencia de fecha y lugar


de procedencia anotada conforme a lo expuesto en
precedencia y CONCEDER el amparo deprecado.

En consecuencia, se ORDENA al Juzgado Segundo de


Familia de Ibagué que dentro de las 48 horas siguientes a la
notificación de este fallo, deje sin valor y efecto el auto 28

11
Radicación n.° 73001-22-13-000-2016-00695-01

de octubre de 2016 y las actuaciones que de él pendan, y


proceda a emitir nuevo pronunciamiento, teniendo en
cuenta las precedentes reflexiones.

SEGUNDO: Comuníquese telegráficamente lo resuelto


en esta providencia a los interesados y oportunamente
envíese el expediente a la Corte Constitucional para su
eventual revisión.

NOTIFÍQUESE Y CÚMPLASE

LUIS ALONSO RICO PUERTA


Presidente de Sala

MARGARITA CABELLO BLANCO

ÁLVARO FERNANDO GARCÍA RESTREPO

AROLDO WILSON QUIROZ MONSALVO

ARIEL SALAZAR RAMÍREZ

LUIS ARMANDO TOLOSA VILLABONA

12

También podría gustarte