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MRI (Mental Research Institute) y Terapia Estratégica

Terapia para resolver problemas de Jay Haley. Amorrortu (1990)


Resumen del capítulo 3, «La comunicación como bits y metáfora», del citado libro:
En la terapia, las 2 cuestiones más importantes son:
1) Si tras el tratamiento una persona ha cambiado más de lo que hubiese cambiado sin él.
2) Si un enfoque terapéutico es más eficaz que otro.

Cuando un terapeuta escucha lo que aflige al cliente (tras la 1ª entrevista o al terminar la terapia)
debe clasificar los hechos en un lenguaje determinado. Las formas en que describa lo que oye y
observa estarán determinadas por su punto de vista y su formación. Los mensajes no pueden
clasificarse en categorías sin tener en cuenta el contexto de mensajes distintos dentro del cual
surge.
Uno de los aspectos más interesantes que tienen los intentos de cambiar a la gente es que el
empleo de analogías o metáforas parece ocupar un lugar central en los procedimientos
terapéuticos. No es raro que un terapeuta ofrezca analogías sobre la vida en general bajo la
forma de ejemplos extraídos de su propia experiencia o de informes sobre experiencias del
paciente.
 ¿De qué habláis con los clientes en terapia en relación a vuestra propia vida?
 ¿Contáis alguna anécdota?
 ¿Cuándo fue la última vez que os visteis contando algo personal? ¿Cuál era el objetivo?
(…) En una entrevista, ya sea individual o colectiva, cada acto del terapeuta es asimismo una
analogía sobre la manera de comportarse. Esta analogía o metáfora de relación es
metaanalógica respecto del contenido de la discusión. Si la terapia consistiera simplemente en
ofrecer «bits» dígitos de información a los pacientes para que comprendan, la relación no sería
muy importante. Empero, el cambio de conducta del paciente se produce como parte de los
cambios analógicos ocurridos en la relación con el terapeuta.
La clase de analogías que interesen al terapeuta dependerá de su teoría particular sobre la
«causa» de los problemas que se presenten al paciente.
Hay personas capaces de decir: “Usted me hace doler la cabeza” sin sentir dolor alguno; otras
necesitan sufrir una verdadera cefalea utilizándose a sí mismas como herramienta analógica
para expresar algo sobre su sistema.
En resumen: los síntomas pueden describirse como actos comunicativos que ejercen una
función dentro de una red de relaciones interpersonales; no son “bits” de información sino
analogías que tienen como referentes a múltiples aspectos de la situación del individuo, incluso
su relación con el terapeuta.
Una de las frases de Milton Erickson fue: «En un campo hay que contemplar las flores y pasar
por alto las malas hierbas».

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