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Realizar un análisis del sector debe ser una de las piedras angulares en torno a las que gire todo
proyecto de nueva creación que pretenda el éxito.
En las próximas líneas te explicaré qué es un análisis del sector, qué razones impulsan a las
empresas y a los emprendedores a realizarlos y te daré algunos motivos por los que merece la
pena que realices uno.
¡Presta atención!
Volviendo al análisis, cuanta más calidad tenga este, más coherente y exitosa será la estrategia
que se implemente después y, por tanto, el número de amenazas que se logren evitar y el de
oportunidades que se consigan aprovechar será mayor.
1. El macroentorno.
2. El microentorno.
1.- El macroentorno
Realizar un análisis del macroentorno implica estudiar todos aquellos fenómenos que afectan a la
empresa y que no pueden ser controlados por ésta.
Para abordar esto se suele emplear el modelo PESTEL, que atiende a los siguientes factores:
Políticos
Realizando un análisis político podrás comprobar si la estabilidad del país o la región será
positiva durante los próximos años, si existe la posibilidad de que se dé un cambio de tendencia
que afecte a tu mercado, etcétera.
Económicos
Realizar el análisis económico te permitirá conocer el estado de la economía del país o de la zona
respecto a tu sector.
Sociales
Este análisis te permitirá conocer los hábitos de consumo de los potenciales clientes, por ello es
uno de los más determinantes.
Tecnológicos
Actualmente, hasta en el sector más tradicional la tecnología tiene un papel destacado, por lo que
conocer por dónde van las tendencias al respecto se convierte en obligación.
Medioambientales (Environment)
Si es así, con un buen análisis medioambiental podrás conocer sus posibles efectos en ella.
Legales
2.- El microentorno
Para abordar esta fase del análisis del sector son de gran utilidad las 5 fuerzas de Porter, un
modelo estratégico que elaboró en 1979 Michael Eugene Porter, ingeniero y profesor de la
Escuela de Negocios Harvard:
Conoce a tus clientes
La primera de las cinco fuerzas de Porter hace referencia a la fuerza de los consumidores, a su
grado de organización.
¿Podrían llegar a ponerse de acuerdo respecto a los precios que están dispuestos a pagar y
convertirse así en una amenaza?
El modelo de Porter también se preocupa por analizar el poder de negociación que tienen los
proveedores a la hora de “enfrentarse” a las empresas.
La ventaja suele tenerla el lado que cuenta con más opciones donde elegir y el que menos pierde
si la relación empresa-proveedor termina.
Barreras de entrada
La tercera de las fuerzas de Porter también es clave a la hora de realizar un análisis del sector.
Atiende al grado de dificultad que supone entrar en un nicho de mercado para nuevos
competidores o productos.
Cuanto más complicado sea comenzar a operar en el sector de una empresa, más “protegida”
estará.
Productos sustitutivos
Este análisis prosigue prestando atención a los productos o servicios que podrían sustituirte y
desplazarte en el mercado.
Prácticamente, casi todos los productos/servicios son sustituibles, así que conviene conocer qué
oferta la competencia y sus características.
En este punto confluyen las cuatro fuerzas anteriores, ya que de ellas dependen en buena medida
el grado de competencia de determinado nicho.
Para el autor, la rivalidad era un cruce entre la guerra activa y la diplomacia pacífica.
Pese a su utilidad, es cierto que las 5 fuerzas competitivas de Porter no son infalibles y que
cuentan con algunas lagunas, como el hecho de obviar el poder del gobierno, motivo por el que
han recibido algunas críticas.
No obstante, y pese a las críticas, la utilidad de este modelo para proponer un marco de reflexión
estratégica sistemática que permita determinar la rentabilidad de determinado sector está fuera de
toda duda.
Este aforismo latino, que traducido al castellano significa “El conocimiento es poder”, refleja a la
perfección el motivo por el que hacer un análisis de mercado.
Algunos de los motivos por los que hacer un análisis del sector son:
4. Redescubrir a la competencia.
8. Conocer al consumidor.
Al compararlo con otros análisis que se hayan realizado anteriormente, podrás saber la evolución
que ha tenido durante los últimos años, su estado de salud actual y las perspectivas de futuro.
Hacer un estudio del mercado es una gran oportunidad para poner tu atención sobre aquellos
competidores con los que lidias día tras día.
Fijarte en lo que hacen los demás siempre es una estrategia inteligente para identificar
oportunidades de negocio y amenazas.
Hacer un análisis del sector te permitirá ver a tu compañía desde otra perspectiva, pudiendo
descubrir de esta manera qué haces bien y qué haces mal.
De igual forma, a través de un análisis del sector podemos saber si nuestro producto se adecúa al
mercado objetivo y si será capaz de satisfacer la demanda de los consumidores.
Como consecuencia de los dos puntos anteriores, un análisis del sector servirá también como
herramienta de control.
Gracias a él podrás subsanar los posibles fallos o carencias que tenga tu empresa, tu producto o
tu servicio.
Otro motivo fundamental para tomar la decisión de hacer un estudio de mercado es que te
permitirá conocer el perfil de tus consumidores potenciales, así como nichos de demandas y
necesidades no cubiertas por la competencia.
6 métodos sencillos para realizar un análisis del sector
Como habrás podido deducir hasta ahora, realizar un estudio de mercado de calidad puede llegar
a tener unos costes de tiempo y capital que no todos los emprendedores pueden asumir.
Tanto si quieres ahorrarte los costes de contratar una empresa especializada en estos servicios
como si quieres hacerlo tú mismo, pero no cuentas con el tiempo necesario, estos accesibles
métodos se adecúan a la perfección a ti.
Evidentemente, la información recogida será menor que la que obtendrías de realizar un análisis
exhaustivo y concienzudo, pero te será suficiente para hacerte una primera idea en tu mente.
¡Toma nota!
1. Observación directa.
2. Pseudocompra.
3. Registro mercantil.
4. Censos empresariales.
5. Estudios sectoriales.
6. Opiniones de expertos.
Un método muy sencillo y muy barato de conocer a tus competidores es verlo con tus propios
ojos.
Y ya que te has puesto a investigar sobre tus competidores, ¿por qué no aprovechar para obtener
información también sobre la conducta de los compradores y los distribuidores?
Hacerte con este producto te permitirá extraer información de gran valor para tu futuro negocio:
características del producto, actitudes y argumentos de venta, promociones, opciones de pago,
etcétera.
Te serán de gran utilidad para identificar productos o servicios similares al que pretendes lanzar
al mercado.
Algunos son publicados por las organizaciones empresariales, por la Dirección General de la
Política de la PYME o por las Cámaras de Comercio.
Quizás estés muy interesado en realizar un estudio sobre determinado sector, pero ¿te has parado
a pensar que quizá ese estudio que pretendes ya esté hecho?
Al menos sobre el papel, resulta una idea más que interesante someter tu idea de negocio al
juicio de un experto en el sector en el que planeas emprender.
Eso sí, hazlo con precaución, pues quizá tu idea le guste más de lo debido...
En conclusión, un análisis del sector de calidad tendrá que atender tanto a los elementos que la
empresa no puede controlar (macroentorno) como a los que sí (microentorno).
Ser consciente de la situación de uno mismo es una ventaja competitiva que hay que saber
aprovechar.
De esta manera, evitarás invertir capital en proyectos que están abocados al fracaso.