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Capítulo 1

Sé mi visión: St.
Patricio y la forma celta de hacer
discípulos
"Al convertirse en irlandés, Patricio casó su mundo con el de
ellos, su fe con su vida".
-Thomas Cahill

W uando la mayoría de nosotros piensa en Irlanda, nos vienen a la mente verdes colinas y

campos cubiertos de hierba. Lo que no está tan extendido


Lo que se sabe es que hace más de mil años, en esta pequeña isla, nació uno de los movimientos más
influyentes de la historia de la iglesia cristiana. De hecho, algunos estudiosos sostienen que los
cristianos celtas contribuyeron a la preservación de la civilización occidental. El cristianismo celta
destaca como una de las tradiciones cristianas más vibrantes y coloridas que el mundo ha conocido.
En este capítulo veremos que la Gran Comisión no es una operación en solitario, sino una aventura
de fe en colaboración.
Como veremos, el cristianismo celta fue un modelo que aunó la evangelización y el discipulado en
comunidad. En las próximas páginas aprenderemos lecciones del movimiento misionero celta.

La vida de San Patricio


Antes de poder comprender plenamente el cristianismo celta, es importante examinar la vida y el
ministerio de San Patricio. Su vida está rodeada de misterio, superstición y mitos. Todos hemos oído
hablar de él, pero pocos sabemos mucho sobre él. Hay una fiesta que lleva su nombre y se le conoce
como el hombre que expulsó a las serpientes de Irlanda y utilizó el trébol para explicar la Trinidad.
¿Quién era San Patricio? Patricio fue el líder fundador de la iglesia cristiana celta y fue personalmente
responsable de bautizar a más de 100.000 personas, ordenar a cientos de sacerdotes, plantar cientos
de iglesias y monasterios, expulsar el paganismo de las costas de Irlanda y comenzar un movimiento
en Irlanda que ayudó a preservar el cristianismo durante la Edad Media.1 Como veremos, la vida y el
ministerio de San Patricio revelan la gran influencia que ejerció sobre el cristianismo y el mundo.
Se cree que Patricio, más conocido como Patricio, nació en el año 389 d.C. en un hogar cristiano
de Gran Bretaña durante una época en la que Inglaterra no estaba defendida por el Imperio
Romano. Los asaltantes irlandeses capturaban gente en Gran Bretaña y la llevaban a Irlanda como
esclavos. A la edad de dieciséis años, los bárbaros irlandeses demolieron el pueblo de Patricio y lo

1 . Thomas Cahill, Cómo los irlandeses salvaron la civilización. New York: Doubleday Press, 1995. Véase la introducción.
capturaron. Lo llevaron a la costa este de Irlanda y lo vendieron como esclavo. Durante este tiempo,
Patricio pasaba muchas horas en oración hablando con Dios.
Seis años después, recibió un mensaje del Señor que decía: "Pronto volverás a tu tierra. . . Ven, y
verás que tu barco te está esperando". 2 Escapó de su amo, huyó 200 millas y se embarcó en un barco
de comerciantes que zarpó hacia Francia y, finalmente, llegó a Gran Bretaña. Fue entonces cuando
recibió su llamada para evangelizar Irlanda.
Explicó su llamada de la siguiente manera:
"Tuve una visión en mis sueños de un hombre que parecía venir de Irlanda. Su nombre era
Victoricius, y llevaba innumerables cartas, una de las cuales me entregó. Leí en voz alta donde
comenzaba: 'La voz de los irlandeses...'. Te pedimos, santo siervo, que vengas a casa y camines entre
nosotros'. Me conmovió profundamente el corazón y no pude leer más, así que me desperté". 3
Esta visión tuvo un profundo efecto en Patricio y de inmediato hizo planes para regresar a
Irlanda, la tierra de su anterior cautiverio.
Según la tradición, Patricio fue nombrado obispo y apóstol de los irlandeses en el año 432.
Patricio recorrió el país irlandés predicando el evangelio. El paganismo era la religión dominante
cuando Patricio llegó. Se enfrentó a la mayor parte de la oposición de los druidas, que eran muy
educados y también practicaban la magia. Constantemente intentaban matar a Patricio. Escribe:
"Diariamente espero el asesinato, el fraude o el cautiverio, pero no temo ninguna de estas cosas por
la promesa del cielo". 4
Los propios escritos de Patricio dicen mucho sobre el hombre, su ministerio y su amor por
Irlanda.5 Menciona varias veces que su educación se vio interrumpida cuando fue llevado cautivo a la
edad de dieciséis años. Sus escritos nos dicen que era muy consciente de su falta de educación.
Aunque no recibió la misma educación que otros obispos, recibió su llamada directamente del Señor.
Quizás fue su falta de educación lo que le hizo tener tanto éxito en la pagana Irlanda. Su gran éxito
demuestra que era capaz de relacionarse con la gente común de forma real y relativa. Tenía un gran
amor por la gente y por el Señor, que se manifestaba en todos los ámbitos de su vida y de su
ministerio.
Parte de la estrategia ministerial de Patricio se centró en los reyes tribales de Irlanda. Patricio
sabía que si un rey se convertía, su pueblo lo seguiría. Cuando los reyes se convertían, solían entregar
a sus hijos a Patricio para que los educara y formara en los caminos del Señor. Así, persuadió a
muchos de ellos para que entraran en el ministerio.
Gracias a su ministerio, el cristianismo se extendió por Irlanda y otras partes de las Islas
Británicas. La misión de Patricio fue responsable de la plantación de cientos de iglesias y
monasterios en toda Irlanda. Las iglesias y monasterios que estableció se convirtieron en algunos de
los centros misioneros más influyentes de toda Europa. Los misioneros salieron de Irlanda para
difundir el evangelio por todo el mundo. Fueron los monasterios irlandeses los que ayudaron a
preservar la fe cristiana durante la Edad Media.

2 . Liam de Paor, Saint Patrick's World: The Christian Culture of Ireland's Apostolic Age, Dublín: Four Courts. 1993. 99-100.

3 . Ibid, 100.

4 . Ibid, 97.

5 . Ver Confesiones de San Patricio.


El legado misionero de San Patricio continuó mucho después de su muerte a través del
movimiento monástico cristiano celta. En los siglos VI y VII, el cristianismo celta se extendió por
las Islas Británicas como un fuego salvaje bajo el talentoso liderazgo de hombres como Columba,
que estableció comunidades monásticas en Iona y Aidan en Lindsfarne. Estos monasterios no eran
lugares de reclusión monástica, sino que se convirtieron en centros espirituales y de formación de
discípulos que enviaron misioneros a toda Europa occidental. 6
Lo que hizo que la forma de discipulado de los celtas fuera especialmente exitosa fue su
compromiso de hacer discípulos, no sólo conversos, infundiendo el evangelismo y el discipulado.
Esta es una lección importante. Hoy en día, muchas iglesias se centran en la evangelización a
expensas del discipulado, buscando ganar conversos en lugar de hacer discípulos. La meta del
evangelismo es hacer discípulos. La Gran Comisión en el capítulo 28 de Mateo es hacer discípulos
que sigan a Cristo en lugar de simplemente ganar conversos. Cuando Jesús dijo "haced discípulos",
los discípulos entendieron que significaba algo más que simplemente conseguir que alguien creyera
en Jesús y lo interpretaron como que debían hacer de los demás lo que Jesús hizo de ellos. Hay
varias lecciones que podemos aprender de la forma celta de responder a la Gran Comisión, que
veremos en las siguientes páginas. 7

Hacer ministerio en equipo


Los cristianos celtas hacían la evangelización y el discipulado como un equipo en lugar de
individualmente. Esto significa que no salían a intentar ganar el mundo por sí solos, sino que salían
en equipo porque entendían el poder de los números. Cada miembro del equipo misionero celta
jugaba un papel importante en el conjunto de alcanzar la comunidad. Autor John
Finney observa que el Celta creía en "la importancia del equipo".
"Un grupo de personas puede rezar y pensar juntas", escribió. "Se inspiran y animan
mutuamente. El empresario solo es presa demasiado fácil de la duda y la pérdida de visión". 8
El enfoque del equipo celta para el ministerio y el discipulado es una alternativa importante al
enfoque moderno de mentalidad de "llanero solitario" que es típico en tantas iglesias occidentales y
que necesita desesperadamente ser recuperado. El profesor emérito de Asbury George Hunter
escribe:
"En contraste con los conocidos enfoques de evangelización del cristianismo contemporáneo
del "Llanero Solitario", el evangelismo uno a uno, o el evangelismo de confrontación, o la cruzada
de predicación pública, (¡y en marcado contraste con el enfoque más dominante del cristianismo
contemporáneo de no llegar a nada!), los cristianos celtas generalmente evangelizaban como un
equipo relacionándose con la gente de un asentamiento; identificándose con la gente;

6 . Neil, Historia de las misiones, 49.

7. En esta sección, me he basado en la Vía Celta de Evangelización de George Hunter, que, como veremos, era un
modelo que reunía la evangelización y el discipulado en comunidad.

8 . Ibid, 53.
comprometiéndose con la amistad, la conversación, el ministerio y el testimonio con el objetivo de
levantar una iglesia en un tiempo medible." 9
Los cristianos celtas comprendieron que la misión se desarrolla en el contexto de la comunidad
cristiana. Entraban en la comunidad a la que intentaban llegar con el evangelio, viviendo, trabajando
y comiendo entre la gente a la que intentaban llegar. Creo que estarás de acuerdo conmigo en que,
por lo general, esto es contrario a la forma en que la mayoría de los cristianos modernos tratan de
llegar a la gente. Ellos iban a donde estaba la gente; nosotros normalmente esperamos que la gente
venga a nosotros. Sabían que Dios creó al hombre para vivir en comunidad con otros. En el
contexto de la comunidad cristiana, los buscadores espirituales podían explorar la fe en entornos
reales. Podían ver el mensaje del Evangelio vivido ante ellos. En este sentido, la comunidad cristiana
es un sacramento vivo que demuestra las verdades eternas de la Palabra de Dios.

Una fe holística
Los cristianos celtas desarrollaron un enfoque holístico del discipulado que preparaba a las
personas para vivir su fe mediante un sentido de profundidad, compasión y poder en la misión.
Estaban inmersos en una espiritualidad holística que tenía profundidad y significado y les permitía
soportar las dificultades y las penurias en su vida cotidiana. En otras palabras, su fe no era sólo
teórica, sino práctica y relevante para la vida cotidiana. Los cristianos celtas no se limitaban a estar
en las aulas, sino que vivían su fe en el mundo real.
Uno de los principales problemas de gran parte del discipulado norteamericano es que es
unidimensional. Muchos cristianos se ven a sí mismos como evangélicos, sacramentales,
carismáticos, etc. Sin embargo, como un diamante, la fe cristiana tiene múltiples dimensiones. Los
cristianos celtas comprendieron la naturaleza compleja de la fe y trataron de reunir un encuentro de
fe que fomentara el crecimiento espiritual en muchos niveles. George Hunter dice que tenían una
estructura cuádruple de experiencias que profundizaban en su fe.

1. Experimentaste periodos voluntarios de aislamiento solitario en un entorno natural remoto, es


decir, una arboleda cerca de un arroyo donde poder estar a solas con Dios.
2. Pasaste tiempo con tu "amigo del alma", un compañero con el que fuiste vulnerable y te hiciste
responsable; con el que te confesaste; del que recibiste la absolución y la penitencia; que te apoyó
y te desafió.
3. Has pasado tiempo con un grupo pequeño.
4. Participabas en la vida común, las comidas, el trabajo, el aprendizaje, la recitación bíblica, las
oraciones y el culto de toda la comunidad cristiana. 10

A través de un grupo pequeño, de la vida comunitaria y del amigo del alma, los creyentes
observaban y adquirían experiencia en el ministerio y en el testimonio a las personas precristianas. A
través de esta estructura quíntuple, los propósitos de la comunidad para los individuos eran arraigar
su conciencia en el evangelio y las Escrituras; ayudarles a experimentar la presencia del Dios Trino y
una vida empoderada; y darles experiencia en el ministerio con otros buscadores.

9 . George Hunter III, The Celtic Way of Evangelism. 47. Esta sección se basa en gran medida en la obra clásica de Hunter.

10 . Hunter, 48.
Hospitalidad bíblica
Los cristianos celtas entendían y practicaban la hospitalidad bíblica. El papel de la hospitalidad era
fundamental en su ministerio con los buscadores, visitantes, refugiados y otros huéspedes que
entraban en su esfera de influencia. La hospitalidad era una parte importante de la vida y el
ministerio de la comunidad monástica. Invitaban a buscadores, peregrinos, refugiados y otros a ser
huéspedes de la comunidad monástica. Seguían la regla benedictina que decía: "Todos los
huéspedes que se presenten deben ser acogidos como
Cristo, pues Él mismo dirá: 'Fui forastero y me acogisteis'".
A su llegada, el invitado recibirá un amigo del alma, un grupo pequeño y un lugar para la
soledad. El invitado también aprendería algo de las Escrituras y adoraría con la comunidad. Uno o
más miembros de la comunidad compartirían el ministerio de la conversación y orarían con y por el
invitado diariamente. Después de algunos días, semanas o meses, el invitado se encontraría creyendo
en lo que los cristianos de la comunidad creen. Entonces, invitarían al buscador a comprometer su
vida con Cristo y con Su voluntad para su vida, lo que llevaría al nuevo discípulo a continuar con el
ministerio de alcance a otros buscadores.
Muchos cristianos e iglesias contemporáneos han perdido el contacto con la hospitalidad bíblica.
Es imperativo que volvamos a aprender el don de la hospitalidad, especialmente a la luz de su
importante lugar en las Escrituras. La palabra "hospitalidad" significa literalmente "amor a los
extranjeros" y se encuentra varias veces en el Nuevo Testamento (Rom. 12:13; 1 Tim. 3:2; Tito 1:8; 1
Ped. 4:9). Todos estamos llamados a ofrecer el amor de Cristo a nuestros huéspedes y a acogerlos de
tal manera que se transformen de extraños en amigos.

Evangelización en comunidad
El último principio del cristianismo celta se refiere a la experiencia del buscador de la comunidad
cristiana en el proceso de conversión. Para entender su enfoque único de la evangelización, es
importante contrastar la forma romana de hacer misión y evangelización y la forma celta. La página
web
El modelo romano para llegar a la gente dice: 1) presentar el mensaje cristiano; 2) invitarles a que
decidan creer en Cristo y hacerse cristianos; y 3) si se deciden positivamente, darles la bienvenida a la
iglesia y a su comunión. El modelo romano nos parece muy lógico porque la mayoría de los
evangélicos estadounidenses se rigen por él. George Hunter escribe: "Explicamos el evangelio,
aceptan a Cristo, ¡les damos la bienvenida a la iglesia! Presentación, decisión, asimilación. ¿Qué
puede ser más lógico que eso?" 11
Por el contrario, el modelo celta para llegar a la gente dice: 1) primero estableces una
comunidad con las personas, o las traes a la hermandad de tu comunidad de fe; 2) dentro de la
hermandad, te involucras en la conversación, el ministerio, la oración y el culto; y 3) con el
tiempo, cuando descubren que ahora creen, los invitas al bautismo y al discipulado.
Comparar y contrastar el evangelismo romano con el celta:

11 . Ibid, 53.
Modelo romano Modelo celta
(Modelo evangélico americano) (Modelo de comunidad celular)
Presentación. Compañerismo
Decisión. Ministerio y conversación
Compañerismo Creencia; invitación al discipulado y
al bautismo

El modelo celta refleja el adagio de que, para la mayoría de la gente: "El cristianismo se coge más
que se enseña". 12 Hunter señala que muchos nuevos creyentes informan que la experiencia de la
hermandad les permitió creer y comprometer sus vidas con Cristo y su iglesia. Para muchas
personas, la fe se capta en tres cuartas partes y se enseña en una cuarta parte. En su libro, Finding
Faith Today: How Does It Happen?, John Finney informa que la mayoría de las personas
experimentan la fe a través de las relaciones que encuentran con el Evangelio a través de una
comunidad de fe. Convertirse en cristiano, dice, implica un proceso que lleva tiempo. Podemos
resumirlo diciendo que para la mayoría de la gente "pertenecer viene antes que creer". 13Finney
sostiene que la vía celta es más eficaz con las poblaciones occidentales postmodernas que el modelo
romano evangélico estadounidense. Sus datos muestran que hay más gente que llega a la fe de forma
gradual (a la manera de la comunidad celular celta) que de forma repentina (a la manera evangélica
romana americana). La vida común continua de la congregación ayuda a las personas a descubrir la
fe por sí mismas, conectadas con los demás, a su propio ritmo. Parece ser mucho más influyente que
el evangelismo de eventos especiales. 14
Finney esboza el típico camino de la fe que la mayoría de la gente experimenta hoy en día: Una
persona se introduce en la comunidad de fe a través de un miembro de su familia, de la amistad con
un cristiano o del contacto con un ministro en el mercado;

1. Empiezan a hacer preguntas;


2. Se les invita a profundizar y llegar a un conocimiento y práctica de la fe a través de un pequeño
grupo comunitario;
3. Con el tiempo descubren que han llegado a abrazar la fe a través de estas relaciones, y llegan a
Cristo a través del bautismo;

Siguiendo el modelo celta, continúan creciendo en el discipulado, trayendo a su vez a otros a la


comunidad donde el ciclo de nuevo crecimiento continúa. Hunter predice que la iglesia observará un
cambio continuo y generalizado del modo de evangelización romano (evangélico americano) a un
modelo celular celta más centrado en la comunidad.

12 . Ibid, 54.

13 . Ibid, 54.

14 . Ibid, 55.
Lecciones para hoy
Hay mucho que podemos aprender de los movimientos cristianos celtas. En primer lugar, podemos
aprender mucho del hombre, San Patricio. Es un ejemplo de cómo un individuo puede superar
tremendos obstáculos con la ayuda del Señor. Patricio volvió a la misma tierra donde había sido
esclavo para evangelizar. Es como la historia de José, que acabó salvando a sus hermanos que le
habían vendido como esclavo. Qué poderoso ejemplo de cómo Dios puede usar nuestro pasado
para ministrar a otros. Muchas veces, el Señor te dará una carga para ayudar a traer salvación y
sanación a personas de tu pasado.
Aunque Patricio no tenía una buena educación, no dejó que eso le impidiera dejar que Dios lo
usara. Fue capaz de hacer grandes cosas para Dios a pesar de su falta de educación mundana. Su
llamado vino de Dios, y eso es todo lo que realmente importaba. Cuando el Señor está en tu vida,
Él hará un camino para ti. Dios usó poderosamente a Patricio para liberar al pueblo de Irlanda del
paganismo, la esclavitud y el pecado. Ayudó a revivir una nación y un continente. Es uno de los
grandes hombres de la fe cristiana.
El movimiento de los cristianos celtas ofrece varias ideas extraordinarias sobre la multiplicación
colaborativa para la iglesia del siglo XXI. En primer lugar,
y quizás lo más importante, estas ideas nos recuerdan el poder de la comunidad misionera. Los
discípulos se hacen en la comunidad cristiana en misión, no en el aislamiento. Quizá la razón por
la que muchas iglesias tienen dificultades para hacer discípulos es que no saben cómo vivir en
comunidad. La iglesia del futuro debe redescubrir el poder de la comunidad bíblica si queremos
hacer discípulos para Cristo en el siglo XXI. Debemos tratar de desarrollar vías para que las
personas construyan una auténtica comunidad centrada en Cristo en nuestras iglesias, porque el
discipulado tiene lugar en el contexto de la comunidad cristiana que vive junta en la misión.
Los cristianos celtas también nos enseñan que debemos desarrollar un proceso de discipulado
que sea único para nuestro propio entorno eclesiástico, ciudad y comunidad. El Dios que adoramos
no hace robots; no es un Dios cocinero. Recuerde que debe descubrir lo que funciona en su propia
cultura y contexto. Esto puede ocurrir de mil maneras diferentes. Dependiendo de tu entorno,
puedes desarrollar tus propias estrategias para las diferentes edades dentro del contexto de tu iglesia
o grupos pequeños. Puedes encontrar formas nuevas e innovadoras de vivir como misionero en tu
comunidad o barrio.

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