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El para qué planear, asegura el logro de los objetivos y trazar los caminos posibles que
nos harán cumplirlos. Esta fase está relacionada con el objetivo de la materia, programa,
del centro educativo y su impacto en el perfil de egreso, dotando a los alumnos de
competividad en el campo que se les imparte.
A quién enseñar está relacionado con las características y peculiaridades de los alumnos
a quienes va dirigido el curso, el éxito del proceso de enseñanza para el aprendizaje gira
alrededor de ésta consideración y de las actividades que se establezcan dentro y fuera
del salón de clase.
¿Por qué es necesario evaluar los tres tipos de contenidos? Si consideramos que evaluar
es parte importante de un proceso educativo debemos tener en cuenta su complejidad,
su utilidad y las funciones que la evaluación debe cumplir para lograr un objetivo de
enseñanza-aprendizaje. Como a través de este curso hemos venido realizando toda una
comprensión y visión de una nueva forma de enseñanza- aprendizaje, considerando
aspectos importantes dentro del proceso educativo en nuestras aulas e instituciones,
mediante la aplicación y consideración de temas importantes como por ejemplo : una
mejor comprensión en la concepción del estudiante y docente; la importancia de
diferentes estrategias y dinámicas de clase, la interacción y retroalimentación entre
estudiante y docente, el aprendizaje significativo, un pensamiento complejo, técnicas
meta cognitivas etc. Ahora, como parte final de toda esta enseñanza en educación
cuando se llega a una reflexión sobre la evaluación , comprendemos que esta debe
cerrar y conjuntar todos los puntos mencionados anteriormente de manera que se logre
realmente la verdadera aplicación de lo aprendido y por tanto este “ultimo” aspecto ( la
evaluación) permita verificar si realmente todo lo realizado en un determinado proceso
de enseñanza- aprendizaje a tenido el resultado esperado por el docente y la institución
educativa según un Plan Global de objetivos o competencias y al final se ha conseguido
que el estudiante aprenda significativamente. Por tanto, podemos decir que si la
evaluación no se debe considerar como “acto final” de una situación que mide el grado
de inteligencia y comprensión del estudiante ante un determinado tema o
procedimiento, entonces se debe considerar como un acto donde el estudiante
compruebe por sí mismo sus conocimientos, logros y debilidades respecto a un
procedimiento u conocimiento a través de una evaluación que le permita seguir
mejorando sus propios conocimientos con una guía del docente. Una evaluación debe
considerar todo el acto de aprendizaje desde como comienza y como termina y un poco
más allá cuando sale del conocimiento y procedimiento teórico o práctico, por tanto un
evaluación debería poder evaluar conocimientos conceptuales, procedimentales y
latitudinales. La importancia de que toda evaluación y la evaluación basada en
competencias es considerar los tres tipos de contenidos, ya que estos permiten al
docente y al estudiante a tener claro el proceso de construcción de aprendizajes
significativos, por otro lado, le permite al estudiante adquirir un conocimiento completo
y bien aplicado comprendiendo diferentes aspectos que integren mejor dicho
conocimiento y logren un total desenvolvimiento del actuar profesional en diversas
situación y ante diferentes problemáticas. Considerar estos tres conceptos significa una
pertinencia profesional donde existe una mayor implicación del estudiante y determinar
la calidad del desempeño adquirido. Cuando evaluamos la dimensión cognoscitiva
estamos tomando en cuenta los