1. Metafísica: El término "metafísica" se desarrolló después de Aristóteles principalmente
para referirse a sus notas de conferencia que discuten la naturaleza del ser y la sustancia (ousia). La ciencia de la metafísica estudia los principios y constituyentes últimos de la realidad, no sólo lo que es real, sino también lo que es necesario, posible e imposible. La metafísica es un término utilizado por Husserl principalmente para referirse a la ciencia del ser "en el sentido absoluto y final" (IP Hua II 32); las "cogniciones últimas del ser" (CM § 60); la "doctrina universal del ser" (Hua VII 186). En general, Husserl está de acuerdo con Kant en que la metafísica debe abordarse desde una perspectiva crítica (véase IP Lecture One) y que el racionalismo en particular desarrolló una metafísica especulativa infundada, lo que Husserl llama una "metafísica históricamente degenerada" (CM § 60) que estaba llena de "exceso especulativo". Husserl incluso incluye la discusión de Kant sobre las cosas en sí mismas como parte de esta excesiva especulación metafísica. En la Primera Filosofía, Husserl dice que las cuestiones de hecho y de facticidad, de muerte y de destino, son cuestiones para la metafísica (VII 182). En Meditaciones Cartesianas, Husserl intenta un nuevo tipo de metafísica que se fundamenta y supera la ingenuidad de la metafísica tradicional (CM § 64). Según esta metafísica, es imposible concebir mónadas que no estén en comunión unas con otras. Cada mónada "predetermina" un universo cerrado de posibles mónadas (CM § 60). El ser absolutamente primero es "trascendental intersubjetividad'. 2. ONTOLOGÍA MATERIAL. Una ontología material es aquella cuyo alcance se restringe a un tipo de cosa en particular. La limitación se basa en un contenido material determinado y esencial. En el nivel más alto y general, este núcleo material determinado es una región; en los niveles inferiores es un género y luego una especie. 3. ONTOLOGÍA FORMAL. La ontología formal es la ciencia formal de los objetos. Surgió, en opinión de Husserl, de la lógica matemática, específicamente del desarrollo de Franciscus Vieta, sobre la base de su comprensión de la formalización algebraica, de una noción de la forma como aplicable a cualquier objetividad en absoluto, cualquier cosa. Desde este punto de vista, la noción de forma implica una universalidad completamente vacía que deja cada determinación material indeterminadamente arbitraria. 4. INTUICIÓN. Una intuición es un acto caracterizado por la plenitud intuitiva, que es, por la presencia de presentar contenidos o representar contenidos en el actuar. Mientras que Husserl abandonó la temprana doctrina de representar el contenido, sigue siendo el caso para él que las intuiciones se caracterizan por la presencia de contenido sensual, es decir, que los actos intuitivos son percepciones o modificaciones de la percepción. Es en este sentido que las intuiciones presentan un objeto en su "entrega corporal" y que sirven como evidencia. Por ejemplo, un nombre que expresa la intención vacía de un objeto se cumple en la intuición perceptiva del objeto nombrado precisamente como se ha nombrado. De manera análoga, una frase declarativa que expresa un juicio se cumple en una intuición que es la modificación de una percepción, a saber, una intuición categorial, que "corporalmente" presenta el estado de cosas tal como se juzga. 5. Eidos = esencia a. La esencia es una categoría ontológica que se refiere a las estructuras necesarias y universales, es decir, las estructuras a priori, que hacen de una cosa una instancia del tipo de cosa que es. Husserl también se refiere a una esencia como un eidos. Las esencias pueden ser esencias morfológicas o esencias exactas. 6. Intuición eidética: es la intuición de un Eidos o esencia. 7. Fenomenología eidética: Una ciencia eidética es aquella que aprehende las esencias a priori de las cosas. La aprehensión de una esencia implica una reducción (un retroceso) de los hechos a la esencia, una reducción que Husserl llama "reducción eidética". El método por el cual se logra la reducción eidética es la variación eidética. La fenomenología, que Husserl considera una ciencia eidética, capta las esencias a priori de nuestras experiencias del mundo (tal como se experimentan). Mientras que una ciencia eidética no requiere la reducción fenomenológica, la fenomenología como ciencia eidética sí requiere la reducción fenomenológica porque sólo mediante esa reducción se centra adecuadamente la atención en la correlación intencionada de la conciencia y el mundo. Aunque toda la fenomenología es eidética, el término "fenomenología eidética" se asocia a veces especialmente con los primeros estudiantes de Husserl en el Círculo de Munich y la Sociedad Filosófica de Göttingen, que también se denominan fenomenólogos realistas. Aunque insisten en la intencionalidad de la experiencia, es característico de su pensamiento el rechazo de la reducción fenomenológica y el giro trascendental. Por lo tanto, no "ponen entre paréntesis" ni dejan de lado la postura del mundo que pertenece a la actitud natural, y su fenomenología se centra en la revelación de las esencias del mundo "real", realmente existente. 8. REDUCCIÓN DE LA EIDÉTICA. La reducción eidética es un dispositivo metodológico que lleva la atención de una multiplicidad de detalles a una esencia a priori. El método para lograr la reducción es la variación eidética. 9. Variación eidética: El método de la variación eidética requiere la variación imaginativa y sistemática de los ejemplos del tipo que se estudia. Husserl también se refiere a este método como "variación imaginativa" o "fantasía libre". Al variar sistemáticamente la idea de un árbol, por ejemplo, reconocemos que hay características, como la capacidad de autoalimentación, sin las cuales ya no podríamos tomar algo como un árbol. De este modo, tomamos conciencia de los momentos necesarios de la cosa, es decir, de sus rasgos esenciales, que en sus relaciones definidas forman la esencia del objeto independientemente existente, esencia que Husserl identifica como un concretum. Del mismo modo, al variar sistemáticamente la idea del verde, reconocemos que hay ciertos aclaramientos y oscurecimientos de la sombra que nos impedirían seguir llamando "verde" al color. En este reconocimiento, aprehendemos la esencia de un momento no independiente, una esencia que Husserl identifica como un abstracto. En el curso de tales variaciones, descubrimos qué características pertenecen necesariamente a cualquier posible objeto del tipo considerado o a cualquier posible objeto calificado por la propiedad o atributo considerado. 10. PSICOLOGÍA EMPÍRICA. El psicologismo empírico es la versión del psicologismo que reduce las leyes lógicas ideales, a priori, a las generalizaciones empíricas a posteriori de la psicología. 11. SUJETO EMPÍRICO. El sujeto empírico es el sujeto psicológico. No se distingue ontológicamente del sujeto trascendental, y las actividades y logros del sujeto trascendental se realizan y manifiestan en las actividades y logros del sujeto empírico. El sujeto empírico, a diferencia del sujeto trascendental, se aprehende en una reflexión psicológica como el sujeto en el mundo, que está atrapado en el nexo causal que caracteriza al mundo. El sujeto trascendental, en cambio, se aprehende en una reflexión fenomenológica como el sujeto o sujeto del mundo. 12. MÉTODO FENOMENOLÓGICO. El método fenomenológico tiene cuatro componentes principales: la reducción fenomenológica, mediante la cual se adopta la actitud fenomenológica y se tematiza la correlación intencional entre la noesis y el noema, mientras que las cuestiones relativas a la existencia real (real) o real se "ponen entre corchetes" o se dejan fuera de juego; la limitación, sin presuponer ni pretender una explicación causal, a la descripción de la intencionalidad que actúa en la experiencia; la reducción eidética, que procede por variación eidética y revela la esencia, las estructuras esenciales, de la experiencia; y la intuición eidética, en la que evidentemente se dan las estructuras reveladas por la reducción eidética.