Está en la página 1de 11

Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Título: Regulación del derecho-deber de alimentos entre parientes


Autor: Ales Uría, Mercedes
Publicado en: RCCyC 2015 (agosto), 17/08/2015, 115
Cita Online: AR/DOC/2438/2015

Sumario: I. Introducción.— II. Extensión de la obligación de alimentos.— III. Disposiciones procesales.—


IV. Medidas cautelares y prueba.— V. Conclusiones

Los alimentos comprenden los gastos ordinarios y extraordinarios para que el alimentado pueda subsistir y,
cuando corresponda, educarse e instruirse. El CCyCN establece claramente los obligados por el deber de
alimentos a la vez que fija pautas de prelación entre ellos. Incluyendo disposiciones de tipo procesal, se fija en
cabeza del obligado la prueba de que existen otros parientes en mejor condición para hacer efectiva la
prestación. Asimismo, se introducen otras pautas netamente procesales al estipular los efectos de la sentencia y
eventual recurso por fijación de alimentos.
I. Introducción
La obligación de dar alimentos es una de las que mayor contenido ético poseen dentro del ordenamiento
jurídico, plasmando el mandato constitucional del artículo 14 bis en materia de protección de la familia. Si bien
originalmente el derecho a percibir alimentos se reconoció a los hijos con respecto a los padres, una amplia
evolución jurisprudencial y doctrinaria ha extendido este derecho de asistencia a los grados ulteriores de
parentesco, tanto de afinidad como de consanguinidad. En términos legales, el concepto de "alimentos" abarca a
todos los medios materiales que son necesarios para la existencia física de las personas e, inclusive, su
instrucción y educación, conforme el artículo 540 del nuevo Código Civil y Comercial de la Nación (en
adelante, CCyCN) estipula. Los extremos de la relación son denominados alimentante y alimentado según cuál
provee estos elementos y cuál los recibe.
El nuevo cuerpo legal que comienza a regir las relaciones entre particulares a partir del próximo 1 de agosto,
regula en la sección primera del título cuarto, libro segundo el derecho deber de alimentos entre parientes. Se
trata de un tema siempre vigente en la práctica del Derecho de Familia y cuya gravitación práctica no puede ser
soslayada. Las disposiciones contenidas en los artículos 537 a 554 recogen, en gran medida, los avances que la
jurisprudencia ha desarrollado en las últimas décadas de práctica tribunalicia. Se trata de incorporaciones
tendientes a efectivizar de manera más urgente y eficaz el derecho del alimentado. A su vez se incluyen
regulaciones de corte procesal que deberán ser armonizadas con los códigos de rito locales.
El presente trabajo pretende ofrecer una somera glosa de los artículos que entrarán a regir este aspecto de las
relaciones de familia, poniendo de resalto las novedades introducidas por el legislador. En este sentido son
particularmente destacables las disposiciones de corte procesal y las referidas a medidas cautelares que
acompañan a la pretensión principal de alimentos.
I.1.Los obligados por el derecho deber de alimentos entre parientes
Tradicionalmente la obligación de alimentos puede tener su causa en la ley, la convención o el testamento.
La ley origina esta obligación como consecuencia del matrimonio (artículo 432, CCyCN), la patria potestad
(artículo 537, inc. a], CCyCN) y el parentesco (artículos 537 y 538, CCyCN). En este último supuesto no debe
olvidarse que, conforme al artículo 529, CCyCN, el parentesco existe en razón de la naturaleza, la afinidad, la
adopción y las técnicas de reproducción humana asistida. La obligación alimentaria entre cónyuges deriva de lo
expresamente indicado en los artículos 432, CCyCN y siguientes. En el derecho de los contratos existe la
posibilidad para el donante de imponer al donatario una prestación alimenticia en su favor (artículo 1562).
También puede el testador disponer un legado de alimentos o la carga al legatario de brindar una renta
alimentaria a determinado beneficiario, según el artículo 2496, CCyCN, in fine.
  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 1


Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

El artículo 537 del nuevo CCyCN enumera a los parientes entre los que rige la mutua obligación de
alimentos. En esta enumeración no se ha innovado con respecto a la regulación anterior, como tampoco se han
introducido cambios en lo que respecta a los obligados vinculados por parentesco afín (art. 538 del CCyCN).
Entre ascendientes y descendientes la obligación de prestar alimentos resulta de modo inmediato del hecho
de la generación y es uno de los contenidos ineludibles de la patria potestad (ahora responsabilidad parental).
Los alimentos se deben en virtud de que quien ha dado la vida a otro ha contraído la necesidad de conservársela,
proporcionándole recursos convenientes hasta que se halle en estado de manejarse por sí mismo: los alimentos
son el resultado inmediato de la procreación, considerada como el acto por el cual hemos puesto en el mundo a
una persona sin su consentimiento, de una manera completamente arbitraria por nuestra parte. Su origen no está
en la patria potestad dado que aún quién ha sido privado de ella está obligado a brindarlos, sino en la necesidad
y en la responsabilidad por la procreación. Es la primera obligación nacida de engendrar a un hijo y el primer
paso para evitar su abandono. Pesa sobre ambos progenitores (los dos han contribuido de igual manera a la
existencia del hijo) y siempre de manera proporcional a las posibilidades relativas de cada uno y a sus aportes no
dinerarios al bienestar y desarrollo de la criatura. En la actualidad, el deber de alimentos pesa no sólo sobre el
progenitor sino sobre toda su familia independientemente de la clase de filiación de que se trate como expresión
concreta de la posesión de un status familiae por parte del hijo no matrimonial. Todos los hijos sin distinción
tienen el derecho de alimentos con la misma extensión y contenido. (1)
Los alimentos entre hermanos, que regula el artículo 537, b, CCyCN tienen origen en el vínculo de sangre,
adoptivo o que se origina a partir de la voluntad procreacional de los padres en el supuesto de personas habidas
mediante TRHA heterólogas con recurso a distintos donantes de gametos. Esta obligación no tiene su razón de
ser en la responsabilidad por la existencia del otro, sino en los lazos de solidaridad familiar y convivencia. El
mismo justificativo encuentra la obligación de alimentos entre parientes afines del artículo 538, CCyCN.
Siguiendo lo consagrado por una larga línea jurisprudencial, el nuevo texto ha establecido una serie de reglas en
materia de prelación entre obligados y extensión de la cuantía de la cuota alimentaria.
La nueva redacción el art. 537 in fine establece ciertas reglas o principios en la determinación de los
obligados. Así se indica que el principio general es que aquél que se encuentra en mejores condiciones, dentro
del universo de potenciales alimentantes, es el que está en mejores condiciones para proporcionarlos. En
condiciones de paridad la obligación se repartirá en partes iguales aunque el juez interviniente deberá establecer
la cuantía de las respectivas cuotas de forma acorde con el patrimonio y circunstancias de cada alimentante.
A diferencia de lo consagrado por la jurisprudencia (2), el texto in fine del artículo 537, CCyCN no establece
que son los parientes más próximos en grado los primeros obligados, sino que el baremo del orden de obligados
está dado por la capacidad económica de los distintos parientes que la ley marca. (3) Es decir que puede
establecerse que un hermano presta alimentos aun existiendo progenitores con vida pero en peores condiciones
económicas. En otras palabras, no hay indicación de subsidiariedad entre un obligado y otro más allá de la
concreta capacidad de cada obligado. Si bien este criterio es consagrado en aras de la mayor protección el
alimentado, debe considerarse que puede permitir que los progenitores, en tanto principales obligados con
respecto a un menor por las cargas propias de la responsabilidad parental, puedan sustraerse al cumplimiento de
las mismas y descargar en otros parientes de mejor fortuna su tarea.
Es criticable la omisión de otros criterios consagrados por la jurisprudencia tales como la menor extensión
de la obligación alimentaria que pesa sobre los parientes cuanto más lejanos en el grado (4) y la demostración de
la efectiva imposibilidad de los obligados más cercanos —especialmente los progenitores— para proveer lo
necesario para la subsistencia. (5) Como última observación, vale destacar que en el texto consagrado por el
legislador se omite contemplar expresamente el nuevo obligado a la prestación alimentaria, de conformidad a
normas constitucionales. En efecto, el artículo 27 de la Convención sobre los Derechos del Niño determina la
  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 2


Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

obligación del Estado en forma subsidiaria, la que debió contemplarse expresamente entre los obligados a la
prestación alimentaria, tal como fue resuelto en sede judicial por varios fallos. (6)
II. Extensión de la obligación de alimentos
La obligación de alimentos es determinada judicialmente y se mantiene en tanto no se den ninguna de las
causales de cese que la ley determina. El nuevo art. 554, CCyCN enumera estas causales, agregando
disposiciones procesales para el cese, aumento o reducción de la cuota alimenticia. Las tres causas por las que la
obligación de alimentos desaparece son: (i) que el alimentado incurra en indignidad; (ii) que alguno de los dos
extremos de la relación —alimentado o alimentante— muera; y (iii) desaparición de los presupuestos de la
obligación.
En torno a la tercera causa enumerada, vale aclarar que los presupuestos son aquellos que se refieren tanto al
alimentado como al alimentante. Es decir que puede desaparecer el estado de necesidad del alimentado o bien
disminuir la solvencia del alimentante o conocerse un potencial obligado en grado más cercano o que goza de
mejor fortuna. En cualquiera de estos casos la aparición de una variante debe plantearse en sede judicial.
También en el caso en que el alimentante alegue la existencia de otro obligado en mejores condiciones de
prestación de la obligación conforme el artículo 546, CCyCN. En materia de modificación de la cuota
alimentaria, no debe olvidarse jamás que la pensión alimentaria fijada por sentencia judicial tiene validez
esencialmente provisional, de modo que puede ser modificada a pedido de cualquiera de los interesados. Esto
puede suceder cuando haya tenido lugar una sustancial variación de las circunstancias existentes al momento en
que la cuota fue establecida. (7) Tanto la modificación como el cese de la cuota alimentaria debe tramitar por la
vía incidental dentro del mismo expediente en que fueron originalmente fijados conforme lo estipula el artículo
650 del Código Procesal Civil y Comercial que indica que
"...toda petición de aumento, disminución, cesación o coparticipación en los alimentos, se sustanciará por las
normas de los incidentes en el proceso en que fueron solicitados. Este trámite no interrumpirá la percepción de
las cuotas ya fijadas. En el incidente de aumento de la cuota alimentaria, la nueva cantidad fijada rige desde la
notificación del pedido".
No obstante, existen casos en los que el cese se produce ipso iure dado el carácter personal e intransferible
de la obligación, y correlativo derecho. Tal es el supuesto que marca el artículo 554, inc. b, CCyCN de
fallecimiento de cualquiera de las dos partes obligadas. También en algunos escenarios del inc. c) del mismo
artículo, como ser la llegada a la mayor edad del hijo (8) o la disolución del vínculo matrimonial que conlleva el
cese de la obligación de alimentos del artículo 539, CCyCN, para los parientes afines.
Cuando se trata de supuesto que deben tramitar por cauce judicial, la sentencia que fija el cese de la cuota
tiene efectos retroactivos sobre las cuotas devengadas pero no percibidas al momento de quedar firme la
sentencia, mientras que las que ya fueron abonadas son irrepetibles. Estos supuestos incluyen, principalmente,
los casos del inc. a) del artículo 554, CCyCN, y los supuestos de desaparición de las condiciones de necesidad
del alimentado —o capacidad del alimentante— que no se verifiquen de manera automática con la compulsa de
la realidad. (9)
II.1.Contenido de la obligación
De conformidad con el nuevo artículo 541, CCyCN, la cuantía de los alimentos será proporcional al caudal o
medios de quien los da y las necesidades de quien los recibe. La necesidad de valorar la capacidad económica
del alimentante constituye una exigencia puesto que la deuda alimenticia tiene, como ha destacado la doctrina,
una naturaleza relativa y variable, como evidencian el que la misma tan sólo exista mientras se den la necesidad
de la persona del acreedor y la posibilidad patrimonial de satisfacerla por parte del deudor, extinguiéndose tal
obligación al desaparecer esas situaciones según el artículo 554, inc. c CCyCN.
  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 3


Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

Los alimentos comprenden los gastos ordinarios y extraordinarios para que el alimentado pueda subsistir y,
cuando corresponda, educarse e instruirse. (10) En ello comprende los gastos de alimentación, cobertura médica
habitual, habitación y vestuario. Las erogaciones extraordinarias en razón de asistencia médica especial,
medicamentos no crónicos, intervenciones quirúrgicas e internación, así como provisión de elementos de estudio
no habituales y gastos vinculados con la educación también están comprendidas en la cuota alimentaria. Con
relación a esta segunda categoría, puede estipularse una única cuota anual extraordinaria o enfrentarse cada
gasto a medida que surja. No quedan comprendidos en la cuota alimentaria los gastos suntuarios ni las deudas
del alimentado. (11)
La fijación de la cuota de alimentos se hará en sede judicial, ya sea luego de un proceso iniciado de
conformidad con lo estipulado por el artículo 543, CCyCN, o bien en el marco de otra acción en la que se
presente un acuerdo de regulación de alimentos. En este segundo caso deberá homologarse dicho acuerdo y
contar con la conformidad del Asesor de Menores e Incapaces de ser necesario según la condición del
alimentado. El juez cuenta con amplias facultades para establecer el monto y el número de las cuotas por
alimentos: la ley le manda tener en consideración, por una parte, el caudal de ingresos del alimentante y el
monto de la cuota ordinaria, como así también la circunstancia de que no debe desnaturalizarse el propósito de
resarcir al alimentista el efectivo costo de vida. (12) La determinación del quantum de la cuota de alimentos
debe contemplar la edad del alimentado, necesidades de desarrollo físico y socio-cultural, así como otros
aspectos tales como vivienda, vestimenta, enseres personales, salud y los recursos con que cuente el alimentante.
(13)
Los alimentos deben fijarse en dinero; esta regla consagrada en el artículo 542, CCyCN, es práctica
inveterada de los tribunales. En algunos casos, sin embargo, se ha admitido la prestación en especie atendiendo
a las particularidades del caso en cuestión. (14) La elección entre una y otra modalidad corresponde al juez que
conozca en el proceso, no siendo, en principio, admisible variar la regla legal. Sigue generando controversias el
efecto de la inflación sobre la cuota alimentaria y la necesidad de adecuar la misma a las rápidas fluctuaciones
de precios. (15) En principio, y en ausencia de acuerdo del alimentante para una readecuación del monto de la
cuota a los cambios en índices de precios, deberá solicitarse una modificación del monto de lo que percibe el
alimentado mediante el procedimiento de incidente del artículo 650 del Código Procesal Civil y Comercial, o
disposición análoga que rija en las diversas jurisdicciones provinciales. Frente a la disposición que prohíbe la
indexación de la ley 23.928 de convertibilidad (artículo 8), cada vez es mayor la jurisprudencia que admite que
las partes pacten un sistema de actualización de la cuota al momento de establecerse el monto de ésta. (16)
Alternativamente, en los casos en que el alimentante posee "ingresos fijos" resulta conveniente fijar la cuota
alimentaria en un porcentaje sobre sus ingresos a partir de una cuota fija. (17)
En este sentido, se señala lo establecido por la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el precedente
"Sejean c/ Saks de Sejean" donde se lee que "...el control judicial de constitucionalidad no puede desentenderse
de las transformaciones históricas y sociales. La realidad viviente de cada época perfecciona el espíritu de las
instituciones de cada país, o descubre nuevos aspectos no contemplados antes, sin que pueda oponérsele el
concepto medio de una época en que la sociedad actuaba de distinta manera". (18) Ello por cuanto la no
adecuación de la cuota al costo de vida equivale, en términos reales, a disminuir la misma sin verificar la
correlativa disminución en la necesidad del alimentado o la reducción en las posibilidades del alimentante.
II.2.Principios rectores
El derecho de alimentos es consecuencia del status familiae y, por lo tanto, reviste carácter de orden público.
Es por ello que no puede ser objeto de transacción o negocio que lo introduzca en el comercio y revista las
característica de inalienabilidad, irrenunciabilidad, imprescriptibilidad e inherencia personal que le confieren los
artículos 539 y 540, CCyCN. Ésta es también una forma de velar por el auténtico mejor interés de los menores y
  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 4


Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

personas sometidas a guarda ya que la prohibición absoluta del artículo 540, CCyCN, sirve como valla para
acuerdos que el responsable, tutor o curador pudiera llegar a alcanzar con el obligado a prestar los alimentos no
teniendo en consideración la prevalencia de las mejores condiciones de vida del alimentado. Es preciso entender
que estas notas se predican del derecho a alimentos que consagra el artículo 538, CCyCN, y no de los alimentos
en tanto cuotas ya devengadas.
La obligación de alimentos es inherente tanto a la persona del alimentado como a la del alimentante. Esto
significa que las acciones para solicitarlos no se transmiten a los herederos del alimentado ni a sus acreedores.
(19) No hay transmisibilidad hereditaria ni posibilidad de acción subrogatoria de los acreedores, lo cual significa
que el potencial derecho a reclamar alimentos no podrá ser computado dentro del patrimonio de una persona.
Tampoco podrá considerarse la obligación alimentaria que pesa sobre un individuo como una carga que integre
el acervo sucesorio; si el beneficiario de una obligación alimentaria desea perseguir este derecho frente a los
sucesores del alimentante fallecido deberá probar que estos se encuentran obligados hacia su persona conforme
lo estipulan los artículos 537 y 538, CCyCN. No obstante, debe considerarse que, una vez devengadas las cuotas
alimentarias, éstas ya integran el patrimonio del alimentado incluso si el alimentante fallece antes de haberlas
efectivamente erogado.
La inalienabilidad de los alimentos hace que no puedan ser objeto de transmisión por acto entre vivos (en el
párrafo anterior se indicó que se encuentran excluíos de la transmisión mortis causa). Ello en tanto no puede ser
objeto de cesión el derecho a reclamarlos pero sí las cuotas ya devengadas que constituyen una parte integrante
del patrimonio del alimentado como cualquier otro crédito. (20) Este carácter pone a salvo el derecho de
alimentos de la traba de cualquier embargo por deudas del alimentado. Sin embargo, los créditos por alimentos
ya cobrados y que estén, por ejemplo, depositados en una cuenta bancaria, podrán ser embargados si se traba
cualquier medida sobre dicha cuenta.
El derecho de alimentos es irrenunciable a futuro, siendo el alimentado libre de nunca iniciar las respectivas
acciones para la determinación del derecho o bien manteniendo una inactividad frente al no pago de las cuotas
judicialmente determinadas a su favor. Esto hace que sea legalmente inoperable la compensación entre el crédito
del alimentado y cualquier acreencia que el alimentante pudiere tener a su favor contra este. Aunque el derecho
de alimentos no puede ser objeto de transacción ni renuncia, no hay impedimento legal alguno para que las
partes de la obligación pacten un aumento o disminución de la misma. No obstante, debe tenerse en cuenta que
cualquier pacto de disminución no implica renuncia a solicitar con posterioridad el incremento de la cuota.
III. Disposiciones procesales
A partir del artículo 543 el CCyCN establece algunas normas de índole procesal relativas al reclamo de
alimentos en sede judicial. Estas normas habrán de complementarse con los códigos de procedimiento locales,
en razón de corresponder su dictado a cada provincia, con la salvedad de que en la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires rige el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación.
III.1.Principio de celeridad procesal
En este contexto, el artículo 543 establece que dentro de los procesos previstos en cada código de
procedimiento, será el proceso "más breve" el que habrá de imprimirse a los reclamos de alimentos. Así, en el
caso de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la petición de alimentos tramitará por el procedimiento
sumarísimo conforme al artículo 498 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación. Con carácter previo a
la sustanciación del proceso, deberá recurrirse al procedimiento de mediación obligatoria que, en el orden
nacional, establece la ley 24.573. Se ha sorteado, en este aspecto, la inconveniencia que significaba el requisito
de la mediación previa frente al momento en que comenzaba a computarse la acreencia de alimentos; el artículo
548 estipula que el crédito comienza a devengarse desde la notificación fehaciente. (21)
En otro orden de ideas, el artículo 543, CCyCN, establece que la petición de alimentos "no se acumulará a
  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 5


Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

otra pretensión". Tanto esta disposición, como la prescripción de que al reclamo se le dé curso con el
procedimiento más breve previsto en el código de forma aplicable, son decisiones del legislador cuya finalidad
es imprimir la mayor celeridad posible a un reclamo que persigue algo tan esencial y urgente como la provisión
de alimentos y hacer frente a necesidades básicas e impostergables de la parte reclamante. Debe tenerse en
consideración que, atento la jerarquía constitucional de la Convención de Derechos del Niño de 1989, deberá
regir en la tramitación procesal del pedido el principio guía del mejor interés del niño. (22)
III.2.Finalidad tuitiva del proceso. Carácter no suspensivo del recurso
El artículo 544, CCyCN, habilita al juez de la causa a fijar la prestación alimenticia en forma provisoria no
sólo durante la tramitación de la causa sino también desde el inicio de la misma. Resulta ilustrativo sobre el
particular traer a colación lo resuelto al respecto por la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil: "Debe
confirmarse el decisorio del magistrado de primera instancia que determinó la fijación de alimentos provisorios
pues cabe señalar que el fundamento de los mismos reside en que deben cubrir las necesidades imprescindibles
de los beneficiarios y su cuantía depende de la valoración de los elementos de juicio, incorporados al momento
de su determinación, hasta tanto se llegue a la sentencia definitiva, oportunidad en que cesan —o se transforman
en definitivos— por haberse cumplido la condición a la que estaban subordinados ...". (23)
Finalmente, es dable destacar que si se justifica la falta de medios de quien solicita la prestación de
alimentos, el juez no sólo podrá fijar una prestación alimentaria provisional, sino también el pago de las
expensas del pleito (artículo 544). La fijación de estos alimentos provisorios no constituye prejuzgamiento sobre
el objeto del reclamo, y pueden ser fijados en una cuantía o frecuencia menor que los definitivos si se diere lugar
a la solicitud. (24)
El artículo 547, CCyCN, muestra una clara finalidad protectora para con quien acreditó la necesidad
alimentaria. Ello se refleja en la asignación de un efecto no suspensivo a los recursos interpuestos contra las
sentencias que decretan la prestación de alimentos, y a la eximición del beneficiario de dicha prestación de
prestar fianza o caución por la devolución de lo recibido, en el supuesto en que la sentencia sea revocada.
El artículo 547, CCyCN, prescribe que si la sentencia que establece la prestación de alimentos fuera
recurrida, la admisibilidad del recurso no tendrá efecto suspensivo. Esto es un claro apartamiento legislativo de
lo dispuesto en el derogado artículo 376 del Código Civil. Por lo tanto, mientras el mismo trámite, el demandado
deberá continuar cumpliendo con la cuota alimentaria que se hubiera fijado en la sentencia. Se evita de esta
manera que la mera interposición de un recurso procesal afecte la percepción de alimentos por parte del
reclamante. Bajo la misma línea de razonamiento, el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación prescribe
en su artículo 647 que si la sentencia que admitiere los alimentos, el recurso de apelación "se concederá en
efecto devolutivo", y que en ese supuesto, "una vez deducida la apelación, se expedirá testimonio de la
sentencia, el que se reservará en el juzgado para su ejecución, remitiéndose inmediatamente las actuaciones a la
cámara". En cambio, si tratara de una sentencia que denegara los alimentos, la misma norma establece que la
misma será apelable en ambos efectos.
En segundo lugar, el artículo 547, CCyCN, exime al peticionante de los alimentos de la obligación de
garantizar mediante fianza o caución la devolución de lo recibido si la sentencia fuera revocada al resolverse el
recurso. Cabe no obstante aclarar que si la sentencia fuera revocada, el peticionante deberá devolver cuanto
hubiera recibido. Dicho en otras palabras, la eximición de prestar una fianza o caución para garantizar la
devolución de las prestaciones recibidas no importa la eximición de restituirlas si con motivo del recurso
interpuesto por el demandado la sentencia fuera revocada.
III.3.Retroactividad de la sentencia
El artículo 548, CCyCN, tiene por finalidad establecer la fecha a partir de la cual los alimentos son debidos.
La norma deja en claro que la prestación alimentaria no se debe desde el dictado y notificación de la sentencia
  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 6


Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

que los confiere, sino desde la fecha en que se interpuso la demanda, o desde la fecha en que el actor hubiera
interpelado al demandado por medio fehaciente a efectuar la prestación, en cuyo caso los alimentos serán
debidos desde una fecha aún anterior a la de la interposición de la demanda. No obstante, para que se considere
esa fecha, serpa necesario que el peticionante interponga la demanda dentro del plazo de seis meses de haber
cursado esa intimación fehaciente.
Nótese que al habilitar el artículo 548 que los alimentos sean debidos desde la fecha en que se hubiera
interpelado en forma fehaciente al obligado, modifica lo previsto en el artículo 644 del Código Procesal Civil y
Comercial de la Nación, que considera que los mismos son debidos "desde la fecha de interposición de la
mediación". En efecto, ocurre de ordinario que la parte peticionante efectúa una intimación extrajudicial de pago
antes de promover el proceso de mediación. Incluso, siguiendo una aplicación literal del artículo 548, bastará la
solicitud por medio de carta documento o requerimiento notarial para que comience a correr el plazo de
retroactividad de la sentencia, siempre que el proceso sea iniciado dentro de los seis meses de efectuada la
intimación fehaciente.
Considerando lo señalado, una vez emitida la sentencia que ordena el pago de la prestación alimentaria, el
demandado deberá abonar: (i) la prestación establecida con periodicidad mensual a partir de la fecha de la
sentencia; y (ii) una suma retroactiva o cuota suplementaria, integrada por las prestaciones mensuales
correspondientes a los meses transcurridos desde la fecha de interposición de la demanda, o desde la
interpelación fehaciente al obligado, según corresponda, y de conformidad a lo indicado precedentemente.
Finalmente, cabe traer a colación lo previsto en la primera parte del artículo 645 del Código Procesal Civil y
Comercial de la Nación. Dicha norma establece: "Respecto de los alimentos que se devengaren durante la
tramitación del juicio, el juez fijará una cuota suplementaria, de acuerdo con las disposiciones sobre
inembargabilidad de sueldos, jubilaciones y pensiones, la que se abonará en forma independiente".
III.4.Posibilidad de repetición
Ya el artículo 546 del Código Civil y Comercial prevé la posibilidad de que exista más de un obligado al
pago, en caso de tratarse a parientes con igual grado de parentesco que se encuentren en condiciones de afrontar
la prestación. Esa norma deja en claro que la intención del legislador es que en caso de existir más de un
obligado, éstos "concurran" en la prestación alimentaria.
Reforzando el carácter extenso de la obligación alimentaria, el artículo 549, CCyCN, estipula que existiendo
más de un obligado, si alguno de ellos hubiera pagado la prestación alimentaria en su totalidad, o por un importe
superior al que le correspondía, éste podrá reembolsarse de los restantes obligados los importes proporcionales
cuyos pagos correspondían a ellos. A fin de recuperar esos importes, el obligado que hizo los pagos podrá
interponer una acción de repetición contra los restantes obligados.
III.5.Tutela efectiva del cumplimiento de la obligación
Las disposiciones de los artículos 552 y 553, CCyCN, se enmarcan dentro de la tendencia que busca
asegurar el cumplimiento efectivo de la prestación alimentaria y evitar que quien se encuentra en situación de
alimentante se sustraiga a sus deberes. Si bien existe una grave sanción de naturaleza penal —según la ley
13.944 y complementarias— las sanciones que disponen estos dos artículos pretenden actuar como astreintes
para compelir el cumplimiento de las prestaciones dinerarias. El artículo 553 otorga amplias facultades al juez
para disponer las medidas que razonablemente tiendan a lograr el cumplimiento. La amplitud de la norma se
presta a interesantes elaboraciones jurisprudenciales futuras.
Penalmente, quien se sustrae a los deberes de asistencia familiar se hace pasible de prisión que puede llegar
a una pena de hasta dos años de prisión más multa. Pueden incurrir en estas penas, en caso de sustraerse a
prestar los medios indispensables para la subsistencia, según el artículo 2 de la ley 13.944: (a) el hijo, con
  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 7


Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

respecto a los padres impedidos; (b) el adoptante, con respecto al adoptado menor de dieciocho años, o de más si
estuviere impedido; y el adoptado con respecto al adoptante impedido; (c) el tutor, guardador o curador, con
respecto al menor de dieciocho años o de más si estuviere impedido, o al incapaz, que se hallaren bajo su tutela,
guarda o curatela; y (d) el cónyuge, con respecto al otro no separado legalmente por su culpa.
IV. Medidas cautelares y prueba
Las disposiciones de los artículos 550 y 551, CCyCN, tienen por objeto asegurar el cumplimiento de la
prestación alimentaria. De esta manera, se habilita al beneficiario de la prestación a solicitar la traba de medidas
cautelares con la finalidad de asegurar el pago de alimentos futuros, provisionales, definitivos o convenidos (art.
550). Estas medidas pueden ser solicitadas al interponer la demanda, durante la tramitación del proceso, o una
vez dictada la sentencia con la finalidad de asegurar su cumplimiento. Frente a ello, el obligado a la prestación
cuenta con la facultad de ofrecer alguna garantía en sustitución de la medida cautelar eventualmente trabada por
el beneficiario, que deberá ser suficiente para asegurar el pago de las prestaciones en cuestión.
Por su parte, el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación establece en su artículo 648: "Si dentro de
quinto día de intimado el pago, la parte vencida no lo hubiere hecho efectivo, sin otra sustanciación se procederá
al embargo y se decretará la venta de los bienes necesarios para cubrir el importe de la deuda". No obstante,
cabe aclarar que esta norma tiene como presupuesto una sentencia condenatoria por cuanto refiere a la
existencia de una parte "vencida".
Finalmente, cabe destacar que el artículo 551 del Código Civil y Comercial establece la responsabilidad
solidaria del empleador del responsable al pago de la prestación en caso de incumplir la orden judicial de
depositar sumas que "debía descontar a su dependiente o a cualquier otro acreedor". En efecto, una de la
medidas cautelares más comunes es el embargo de los haberes del obligado, medida cautelar que se efectiviza
mediante el libramiento de un oficio a su empleador mediante el cual se le exige la retención de sumas de sus
haberes, dentro de los límites permitidos, y su depósito en la cuenta judicial correspondiente al expediente en el
que tramita la causa. De conformidad a lo prescripto en el artículo 551, si un empleador incumpliera con dicha
orden judicial, será solidariamente responsable frente al beneficiario por las sumas que debió retener a su
dependiente.
La mera existencia de un vínculo de parentesco no confiere por sí sola la legitimación para reclamar
alimentos. Es necesario que quien pretenda esa prestación no cuente con medios económicos suficientes para
procurarse por sí sólo los mismos y que sea asimismo imposible que pueda hacerse de éstos con su trabajo. La
norma del artículo 545 impone la carga de la prueba de esos extremos al reclamante, en una solución
concordante con el principio procesal en materia de cargas probatorias en virtud del cual incumbe a cada parte la
carga de la prueba de los hechos que afirma. (25)
Por su parte, el Código Procesal Civil y Comercial de la Nación establece en su artículo 538 determinadas
cargas a quien promoviere juicio de alimentos. Así, se le exige a la parte actora que acredite el título en cuya
virtud solicita los alimentos, que denuncia el caudal aproximado de quien deba suministrarlos, que presente toda
la documentación que tuviere en su poder y que haga a su derecho, y que ofrezca las medidas de prueba que
estime necesarias al efecto de acreditar y fundamentar su derecho.
La obligación de prestar alimentos a los hijos menores de edad tiene unas características peculiares que le
distinguen de las restantes deudas alimentarias legales para con los parientes e incluso los hijos mayores de
edad. Se entiende que la obligación de alimentos entre parientes es diferente a la obligación de los padres para
con los hijos menores de edad; mientras el hijo sea menor de edad, la obligación alimentaria existe
incondicionalmente y no puede decretarse su cesación, aún en supuestos en los que el padre o la madre han sido
privados de la patria potestad. Esto es en virtud de que el deber de alimentos de los padres hacia los hijos
menores de edad se incardina en la responsabilidad parental, derivando básicamente de la relación paterno-filial,
  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 8


Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

no ha de verse afectado por limitaciones propias del régimen legal de los alimentos entre parientes. Por su parte,
en lo que respecta a la cuantificación de la cuota debida por los progenitores a los hijos menores, no se requiere
probar su necesidad, sin perjuicio de que la cuota se establecerá en relación con las posibilidades del demandado
y a la necesaria contribución del otro progenitor.
Así como a partir del artículo 545 se advierte que el Código Civil y Comercial impone al actor la carga de la
prueba del vínculo de parentesco, la ausencia de medios económicos y la imposibilidad de procurarse los
alimentos con su trabajo, el artículo 546 impone al demandado la carga probatoria de la existencia de otro
pariente de grado más próximo o igual. Ahora bien, esta carga probatoria no se limita a probar la existencia de
otro pariente y del grado de parentesco señalado, sino también a que aquel se encuentre en condiciones de
prestar los alimentos necesarios al actor. En caso de tener éxito en la producción de la prueba señalada, el
demandado será desplazado por ese pariente, si éste tiene un grado de parentesco de mayor proximidad, y bien
concurrirá con éste en la prestación de alimentos, si ambos tuvieran el mismo grado. Con la misma finalidad, la
norma permite también al demandado citar al juicio a todos o parte de los restantes obligados, si éstos también
hubieran recibido un reclamo.
V. Conclusiones
La regulación del derecho deber de alimentos entre parientes sigue, en líneas generales, lo dispuesto en el
derogado Código Civil. No obstante, en una acertada decisión legislativa, se introducen en el texto que
comenzará a regir a partir de agosto del 2015, ciertos principios desarrollados por la jurisprudencia. La
consagración escrita supone una efectividad mayor en la implementación y otorga carácter formal a las
directrices que habrán de regir la conducta de los tribunales al momento de sortear eventuales lagunas.
Los alimentos comprenden los gastos ordinarios y extraordinarios para que el alimentado pueda subsistir y,
cuando corresponda, educarse e instruirse. El CCyCN establece claramente los obligados por el deber de
alimentos a la vez que fija pautas de prelación entre ellos. Incluyendo disposiciones de tipo procesal, se fija en
cabeza del obligado la prueba de que existen otros parientes en mejor condición para hacer efectiva la
prestación. Asimismo, se introducen otras pautas netamente procesales al estipular los efectos de la sentencia y
eventual recurso por fijación de alimentos.
Resulta clara la finalidad tuitiva consagrada por el legislador en materia de alimentos. Ello surge claramente
del desiderátum de imprimir celeridad al proceso indicando la vía más veloz para resolver la pretensión y la
posibilidad de fijar alimentos provisorios. Esta finalidad se ve reforzada, complementariamente, con la
responsabilidad penal de quien intenta sustraerse al cumplimiento de la obligación y la responsabilidad solidaria
de quien incumple una orden judicial de tutela efectiva la obligación.
No obstante, resulta criticable la omisión de incluir ciertos parámetros consagrados en la jurisprudencia y
soslayar la cercanía en el parentesco al hacer primar la capacidad económica. También la ausencia de referencias
a la obligación que, en virtud de la Convención de Derechos del Niño de 1989, pesa sobre el Estado como
obligado hacia los menores de edad. Resulta problemático, a su vez, la falta de previsión de mecanismos
idóneos para una actualización de las cuotas alimentarias en base a las variaciones de precios que presenta la
actualidad.
 (1) Cfr. De La Cámara, M., Comentarios al Código Civil y Compilaciones Forales, t. III, vol. 1º, 2ª ed.,
Editorial Revista de Derecho Privado, Madrid, 2000, ps. 163/166. En principio, este derecho no puede ejercerse
sino a partir de que la filiación queda determinada. Sin embargo, De la Cámara es de la idea de que existe una
posibilidad de ejercicio con alcance retroactivo. En contra, Rivero considera que los alimentos, dada la
naturaleza de la obligación alimenticia, carecen de efecto retroactivo. Pero en realidad, la limitación es tan sólo
legal, pero no derivada de la naturaleza de la institución alimentaria. Puesto que ésta se basa en el vínculo de
parentesco o estado de familia, el estado de necesidad del alimentante y la posibilidad económica de satisfacer
  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 9


Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

los alimentos por parte del alimentante. Si el progenitor, con anterioridad a la demanda de filiación, ha
satisfecho voluntariamente alimentos al hijo, no podrá repetir las cantidades ni imputarlas como donación,
puesto que se trata de la satisfacción de una deuda natural. Cfr. RIVERO HERNÁNDEZ, F., "La investigación
de la mera relación biológica en la filiación", II Congreso Mundial Vasco: "La filiación a finales del siglo XX",
Vitoria, septiembre de 1987, p. 141
 (2) Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala E, "A., G. y otro c/ G., S.". sentencia del 12/8/2009,
DJ del 20/1/2010, p. 115.
 (3) Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala F, "G. de W., A. c/ W. E. J. y otro", sentencia del
22/4/1998, LL 1998-F, p. 610.
 (4) Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala C, "B., V. E. y otros c/ V., E. A.", sentencia del
26/2/2013, La Ley Online: AR/JUR/3305/2013.
 (5) Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala E, "A., G. y otro c/ G., S.", sentencia del 12/8/2009,
DJ del 20/1/2010, p. 115; y Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala K, "M., S. N. y otros c/ F., R.",
sentencia del 4/3/2005, La Ley Online: AR/JUR/8943/2005.
 (6) Juzg. de Menores y Familia nro. 2 de Paraná, 28/6/2002, Zeus, t. 89, secc. Jurisprudencia, p. 614, y LL
2002-E, p. 267; Sup. Trib. Just. de Entre Ríos, 9/4/2003, Derecho de Familia. Revista Interdisciplinaria de
Doctrina y Jurisprudencia, nro. 25, LexisNexis - Abeledo-Perrot, Buenos Aires, 2003, p. 179; Juzg. Cont. Adm.
y Trib. nro. 3 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, 11/3/2003, LL 2003-F, p. 311; Juzg. Nac. 1ª Inst.
Seguridad Social nro. 6, 15/11/2004, causa nro. 27.051/2004, elDial.com, del 24/11/2004; Juzg. nro. 1 Cont.
Adm. La Plata, 11/10/2005, Derecho de Familia. Revista Interdisciplinaria de Doctrina y Jurisprudencia, nro.
2006-II, LexisNexis - Abeledo-Perrot, Buenos Aires, 2006, p. 81; C. Cont. Adm. La Plata, 25/4/2006, LL 2006-
D, p. 235; Corte Suprema de Justicia de la Nación, 19/9/2002, LLNOA 2002-1298; ídem, 7/3/2006, LL 2006-D,
p. 230, y DJ 2006-2-1026.
 (7) Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala K, "G., S. G. c/ T., J. L.", sentencia del 20/2/2007, La
Ley Online.
 (8) Juzgado de 1a Instancia en lo Civil y Comercial nro. 1 de Jujuy, "Z., D. A. c/ Z., J. A.", sentencia del
10/3/2009. En contra, Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de 2a Nominación de Santiago del Estero,
"Loiseau, María de los Ángeles c/ Murillo, Jorge Eduardo", sentencia del 10/4/2008, LLNOA, 2008-801.
 (9) Cfr. Borda, G. A., Tratado de Derecho Civil, Familia, t. I, 9ª ed., Perrot, Buenos Aires, 1993, ps.
371/372.
 (10) Cfr. Borda, G. A., Tratado..., t. II, ps. 347/348.
 (11) Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala D, sentencia del 15/2/1984, LL 1984-B, p. 124.
 (12) Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala E, "O. M. L. y otros c/ G. A. G. s/ alimentos",
sentencia del 9/6/2014, LL 2014-E, p. 175.
 (13) Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala M, "L. c/ R.", sentencia del 17/2/1997, LL 1997-C,
p. 499.
 (14) Cfr. Borda, G. A., Tratado..., t. II, ps. 347/348.
 (15) ídem, ps. 350/351.
 (16) Véase en jurisprudencia reciente Juzg. Familia n. 6 de Mar del Plata, "G. V. M. c/ P. C. G. s/
homologación de convenio", sentencia del 10/9/2013; C. Civ. y Com. Azul, sala 1ª, "G., E. M. c/ D. S. R., J. s/
alimentos", sentencia del 13/7/2010, en la causa 54.400; y Juzg. Familia n. 5 de Mar del Plata, "M. R. A. c/ L. S.
J. s/ materia a categorizar", sentencia del 29/4/2014.
  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 10


Documento

________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

 (17) Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala B, "F., C. A. c/ M., G. M. s/ alimentos", sentencia del
2/10/2013, La Ley Online.
 (18) Fallos 211:162, considerando 16.
 (19) Cfr. Belluscio, C. A., Manual..., cit., p. 951.
 (20) ídem, p. 952.
 (21) Cfr. Kielmanovich, J. L., Código Procesal Civil y Comercial de la Nación. Comentado y anotado, t. II,
3ª ed., LexisNexis, Buenos Aires, 2006, p. 1091.
 (22) Ídem, p. 1086.
 (23) Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, sala C, "P., G. y otro c/ L. O., L ,", sentencia de 7/6/2007,
La Ley Online.
 (24) Cfr. Kielmanovich, J. L., Código..., cit., p 1097.
 (25) El Código Procesal Civil y Comercial de la Nación establece al respecto lo siguiente en los dos
primeros apartados de su artículo 377: "Incumbirá la carga de la prueba a la parte que afirme la existencia de un
hecho controvertido o de un precepto jurídico que el juez o el tribunal no tenga el deber de conocer. Cada una de
las partes deberá probar el presupuesto de hecho de la norma o normas que invocare como fundamento de su
pretensión, defensa o excepción".

  ______________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________

© Thomson Reuters Información Legal 11

También podría gustarte