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Mente Absorbente

Definición

Es la gran capacidad que solo tiene el niño para absorber todo el medio ambiente.

Introducción

El embrión espiritual se encarna en la mente absorbente sirve para guardar, encarnar


todo lo que está en el ambiente.

La mente absorbente se va a expresar en 2 formas:

De 0 a 3 años y de 3 a 6 años.

En los primeros años de vida el cerebro funciona de manera diferente a como lo hará
después. Todo lo que viene del ambiente ser recibe, se procesa y se almacena en las
células cerebrales, usando una forma de absorción inconsciente. La mente del niño
también absorbe información de las actividades que ocurren el ambiente donde vive.

El movimiento es una de las grandes maravillas en el niño. Recién nacido permanece


tranquilo en su cama durante meses. Pero después de algún tiempo camina, se mueve en
el ambiente, hace algunas cosas, es feliz, vive cada día un poco más. El lenguaje penetra
en su mente con toda su complejidad. Aprende muchas cosas con sorprendente rapidez.
Todo lo que se halla a su alrededor, lo hace suyo.

De 0 a 3 años hace las cosas de forma inconsciente. A partir de los 3 años ya resuelve
algunas necesidades, ya puede vestirse, puede ir al baño, le da la posibilidad de
demostrar su inteligencia. A partir de esta edad hace lo que un adulto hace.

Si se observa a un niño de 3 años se ve que siempre juega con algo. A través de esta
experiencia con el ambiente, con apariencia de juego, examina las cosas y las
impresiones que ha recibido en su mente inconsciente. Por medio del trabajo se hace
consciente y construye al hombre. Empieza su misterioso trabajo, poco a poco va
formando su personalidad adaptada a su época y a su ambiente. Paulatinamente llega a
construir la memoria, la facultad de comprender y razonar.

De 3 a 6 años el niño demuestra lo que ha encarnado. Hay consciencia, lo hace porque


quiere hacer todo. Está grabando todo lo que está viendo. Entonces, de pronto,
descubrimos que este individuo comprende, sabe escuchar, mientras que antes no
podíamos llegar a él.
Nuestra mente, tal como es no llegaría a alcanzar lo que alcanza el niño; para una
conquista como la del lenguaje es necesaria una forma de mente distinta y esta forma es
la que posee precisamente el niño, un tipo de inteligencia distinta a la nuestra.

Nosotros adquirimos los conocimientos con nuestra inteligencia, el niño las absorbe con
su vida síquica. El niño experimenta una transformación, las impresiones no solo penetran
en su mente, sino que la forman. Estas se encarnan en él. A este tipo de mente la hemos
llamado mente absorbente.

Teniendo en cuenta los horrores que se vivieron en la segunda Guerra Mundial, la


destrucción de tantas vidas humanas y hogares en diferentes países, se anunciaron el
comienzo de una nueva era. Una era donde resolveríamos nuestras diferencias, no con
violencia, sino usando nuestras capacidades humanas, pensando en los demás,
respetándolos y comprendiéndolos.

Conclusión

La capacidad de aprender que tiene el niño es increíble, él absorbe todo lo que se


encuentra en el ambiente mientras juega. Nuestro trabajo como adultos no consiste en
enseñar, sino en ayudar a la mente infantil a potenciar al máximo todas sus habilidades y
capacidades. Como padres debemos ser el mejor ejemplo de nuestros niños, ya que ellos
aprenderán todo lo que hagamos, lo bueno y lo malo. En nuestras manos está formar
mentes brillantes, con principios y valores, con la capacidad suficiente de cambiar el
mundo.

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