Está en la página 1de 4

Misión profética del laico

La parroquia es el lugar de privilegiado de la catequesis. Son los adultos aquellos


destinatarios de la catequesis en las parroquias. Son los laicos los agentes del trabajo de la
catequesis.
Los laicos son en gran medida el número de personas más extenso dentro de la iglesia,
estos tienen la responsabilidad de continuar la misión comenzada por el concilio vaticano
II. Todos los laicos son responsables de asumir las funciones que como bautizados están
llamados. Sin la ayuda de los laicos, será imposible para los ministros abarcar con toda la
misión de la Iglesia.
Consideraciones fundamentales
Laicos es aquel que nace por el bautismo, y forma parte del pueblo de Dios. Los últimos
papas quieren rescatar la figura del laico, que con el paso del tiene a perdido su sentido.
Hay tres maneras de definir al laico:
Elemento genérico: por medio del bautismo todos los laicos son miembros activos del
pueblo de Dios y de las responsabilidades eclesiales.
Elemento funcional: el laico no es un clérigo, pero éste debe cumplir una misión. El
sacramento del orden no aleja del Pueblo a quien lo recibe, al contrario lo coloca al servicio
de los otros.
Elemento específico: dónde y cómo vive el laico su existencia cristiana. El laicos debe
implantar el Reino de Dios en todos los lugares donde se encuentre.

Misión del laico


Con la misión de Cristo y del espíritu
La Iglesia es misionera, es decir, es enviada para anunciar aquello que Cristo anunció en la
misión que recibió del Padre. Para poder cumplir esa misión, necesita la gracia del Espíritu.
La misión de Cristo es hacer que conozcamos al Padre para que así podamos vivir como sus
hijos. La Misión del espíritu Santo es la misma de Jesús. El E.s es aquel que nos enriquece
y el que aviva en nosotros el deseo de santidad.
La misión de Jesús y del E.s se prolongará hasta el fin de los tiempos.
La misión del Laico debe ser la continuación de la misión de Cristo y del Espíritu santo; es
por eso que los sacramentos de iniciación Cristiana ayudan al laico y lo fortalecen, al
mismo tiempo lo capacitan para continuar la obra de Cristo.
Por medio del bautismo el laico se une a Cristo y empiezan a generar frutos, es por eso que
deben mantener unidos a su tronco que es Cristo Jesús.
Por medio de la confirmación, el laico el laico es enviado a proclamar la salvación del
Señor Jesús.
El sacramento de la Eucaristía anunciamos la muerte de Jesús y proclamamos la
resurrección del mismo.
El laico recibe la ayuda del Espíritu Santo, sus dones y carismas, los capacita para
prolongar el misterio del Señor.
Con la misión de la Iglesia
La misión del laico debe ser vivida en la Iglesia, es decir, el laico no se puede llamar
misionera, cuando está desligado de la Iglesia.
La misión de todo laico se vive en relación con los otros; se debe cumplir la misión dentro
del Pueblo de Dios, que se realiza en la Iglesia. La Iglesia es familia y es por eso que se
espera una unión entre sus miembros.
Otro principio de cómo entender la misión del laico es: principio de subsidiaridad, el cual
regula las relaciones entre la autoridad de unos y la iniciativa de otros; es el respeto por los
valores y la condición de cada uno.
El laico debe trabajar en comunión con sus hermanos y con la Jerarquía. Hablar, pues, de
misión del laico es decir que este, por su bautismo, por su condición cristiana participa de la
responsabilidad apostólica de toda la iglesia.
Profeta
Mensajero e intérprete de la Palara de divina
El Señor toma la persona del Profeta y éste, con sus palabras, acciones, su vida entera, se
convierte en mensajero e intérprete de la Palabra divina. El profeta es el hombre que tiene
una experiencia inmediata de Dios, que ha recibido la revelación de su santidad, de sus
voluntades, que juzga el presente y ve el futuro a la luz de Dios, que es enviado por Dios
para recordar a los hombres sus exigencias y conducirlos por el camino de la obediencia y
del amor de Dios (Cfr. Biblia de Jerusalem).
El Señor es el gran profeta que todos debemos seguir e imitar si queremos ser realmente
profetas. El laico al ser bautizado, recibe la condición de profeta, la cual debe realizar
imitando a Dios.
Sentido de la fe
Es un sentido que el Señor da al laico para que éste permanezca firme a la Palabra de Dios.
la fe nos permite permanecer en la vida de oración y así también en el servicio a los demás
de manera que seamos leales.
Difundir el testimonio de la fe
El servicio de laico como profeta es: conocer a Dios y ser fiel a su fe, para que así pueda
dar testimonio en su trabajo de evangelizar. El laico debe ser testimonio vivo, de manera
que cuando vean sus acciones, los demás también sientan el deseo de servir a los demás con
miras a Cristo.
Ámbitos de la acción profética del laico
El mundo: campo propio del laico
La acción profética y evangelizadora del laico es el mundo. La laico debe consagrar el
mundo, por medio de su evangelización y ejemplo de vida.
Comunidades: tres tipos de comunidades a las cuales el laico debe prestar atención en su
misión: la familia, la comunidad educativa, las pequeñas comunidades.
Esta misión que el laico debe realizar, no puede estar fuera de su diócesis.
Esferas de la actividad humana
Una de las esferas es el mundo de la cultura, pues es por medio de la cultura, donde los
hombres cultivan su relación con la naturaleza y con Dios. La cultura es un medio por
medio del cual la misión del laico se debe realizar.
La misión también se extiende en el campo político, social y económico, es decir, en todos
los campos de la sociedad.
Grupos humanos especiales
Los grupos especiales de los cuales habla el documento son: el ambiente campesino, el
obrero, el estudiantil y profesional.
El laico debe lograr una comunión con Dios, en cada uno de estos grupos, de manera que
estos lo puedan conocer.
Preparación del laico para su formación profética
Formación humana.
Se trata de una formación humana integral. Es necesario preparar al laico con una buena
educación fundamental, con una capacitación técnica; enseñarle a relacionarse con su
ambiente, enseñarle el conocimiento de su medio para que pueda vivir un apostolado con la
suficiente adaptación.
Formación espiritual
La formación espiritual ejercita la fe de cada uno de nosotros. La formación espiritual
busca la unión de la comunidad. Finalmente, la espiritualidad laical pide seguir el modelo
de compromiso, humildad y entrega de la Virgen María.
Formación doctrinal
El laico debe saber qué significa ser cristiano. Es por eso que debe aprender los contenidos
del anuncio de Dios. Un aspecto muy importante de la preparación doctrinal es la
capacitación en el conocimiento y la práctica de la "Enseñanza Social de la
Iglesia", esto es, aquel conjunto de orientaciones doctrinales y criterios de acción
que concretan el aporte de la Iglesia a la liberación y promoción humana.
Preparación metodológica
El laico debe conocer el proceso evangelizador, el cual es: testimonio, anuncio
claro, nacimiento de la fe, ingreso en la comunidad, acción misionera como
compromiso evangelizador de aquellos que han sido evangelizados.

Formación progresiva
La formación del laico debe ser progresiva, es por esto que ésta debe empezar con la
formación de los niños. Es la familia el primer núcleo de aprendizaje de los niños, pues allí
aprende los valores básicos y el amor a Dios.
El adolescente aprenderá a conocer a Dios y entregarse a él, y el joven aprenderá a servir
mediante el apostolado; y el adulto debe actualizarse cada día para aprender para poder
educar y dar a conocer a Dios.
Conclusión
La condición de todo laico es hacer misión de acuerdo a la experiencia que ha podido tener
de Dios, así mismo debe difundir el mensaje de Dios, de acuerdo a su formación.

También podría gustarte