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EJE 3

OBLIGACIONES DE LA CONTRATACION EN SALUD

GUSTAVO ADOLFO REYES SAENZ

DOCENTE

DEISY LISETTE RODRIGUEZ ARAUJO

ESPECIALIZACION AUDITORIA EN SALUD

FUNDACION UNIVERSITARIA DEL AREA ANDINA

2020
Para empezar hablar o discernir acerca de las obligaciones que implica un
contrato hay que decir que un contrato es aquel vínculo jurídico en el cual las
partes adquieren una obligación de dar, prestar o hacer alguna cosa y recibir una
remuneración por la labor ejecutada. En la actualidad las relaciones contractuales
entre las entidades promotoras de servicios de salud y las instituciones
prestadoras de servicios de salud se pueden evidenciar por medio de los
contratos para la prestación de servicios de acuerdo con la necesidad que las EPS
tengan, para esto se debe tener en cuenta que ambas partes (tanto ips como eps)
en un contrato tienen unas obligaciones las cuales tienen inmersos unos
elementos, los cuales son: SUJETO ACTIVO el cual tiene la facultad de solicitar o
exigir la prestación de un servicio; SUJETO PASIVO es aquel que de acuerdo a la
normatividad y habilitado se clasifica como deudor y brinda el servicio; VINCULO
JURIDICO es el que une a los mismos, lo cual el acreedor tiene derecho a exigirle
al deudor una determinada prestación y este tiene el deber jurídico de cumplirla;
OBJETO es el servicio que presta el deudor al acreedor.

Amén de lo anterior las obligaciones contractuales se clasifican según


sujetos, objetos y vínculos jurídicos, las clasificaciones según sujetos a su vez se
dividen en dos, la primera que son los unitarios donde el acreedor es uno y el
deudor otro ya sea persona natural o jurídica y los plurales donde el acreedor y el
deudor pueden ser la misma persona; el objeto donde las obligaciones pueden ser
de distinto carácter, positivas, negativas, alternativas, facultativas etc. El vínculo
jurídico en el cual dentro de este las obligaciones civiles o naturales. Hay que
tener en cuenta que las obligaciones cuentan con unas fuentes, dentro de estas se
encuentran: los contratos los cuales son acuerdos que van encaminados a
plantear el cumplimiento de algo que se ofreció anteriormente, estos a su vez,
están divididos en unilaterales, plurilaterales, onerosos, gratuitos. Los prestadores
y responsables en la prestación de salud en nuestro país tienen responsabilidad
extracontractual la cual es definida como la obligación que se tiene de indemnizar
a una persona a la que se le causa daño, sin que esa responsabilidad surja por el
incumplimiento de un contrato (hecho jurídico), esta responsabilidad se clasifica
en objetiva, subjetiva, directa o indirecta. Esta responsabilidad es como un seguro
en la contratación por si en algún momento existe un daño y no hay soporte en el
contrato, siempre y cuando la víctima demuestre el daño causado. Para el
acreedor, él puede utilizar los medios legales para que el deudor cumpla con lo
estipulado en el contrato. El acreedor tiene obligaciones principales las cuales son:

 El cumplimiento directo sin que el acreedor los solicite, para entender esto
lo podemos ver en la prestación de un servicio por parte de una IPS, esta
última después de que se haya firmado el contrato tiene el deber de iniciar
cuando está pactado con la atención, no esperar a que el acreedor le diga
cuándo iniciar.
 La ejecución indirecta la cual se da cuando el deudor no cumple con la
obligación y el acreedor se ve afectado, esto último se puede ver cuando el
incumplimiento por parte de las IPS contratadas por las EPS para la
entrega de medicamentos, las cuales en ciertos casos no los entregan
completos, esto genera una insatisfacción y un factor de riesgo para la
salud del usuario lo cual genera inconvenientes a la EPS porque no están
cumpliendo con lo contratado.
 Una ejecución forzada es cuando el acreedor tiene que dirigirse al deudor
a exigirle sobre el cumplimiento de lo estipulado en el contrato y esta solo
se puede forzar mientras la responsabilidad sea de dar por ejemplo el pago
de un canon de arriendo cuando la persona no lo paga en el tiempo
pactado.
 Las obligaciones contractuales auxiliares son medidas que el acreedor
toma para que el deudor cumpla, como las indemnizaciones, embargos
revocatorias esto es un procedimiento preventivo que no solo realizan los
entes de salud si no cualquiera y puede ser llamado como una retaliación
para que lo firmado en un contrato sea de total cumplimiento. Para el
deudor las obligaciones pueden ser libradas o modificadas siempre y
cuando sean legales.

Las obligaciones contractuales en cuanto a lo que enmarca la salud como


tal, en Colombia hoy día, hacen parte de una de las problemáticas más grandes
de la administración pública a diario y es muy común ver como se afecta la
población por el incumplimiento o el cumplimiento parcial de los contratos,
problema que no solo es por parte del acreedor que este momento que son las
EPS sino también por parte del deudor IPS las cuales están salpicadas por la
corrupción y la falta de sentido humano hacia los pacientes. Cuando se plantea lo
de la “problemática más grande de la administración” se hace referencia a que son
las EPS las que buscan las atenciones de sus usuarios, es donde se nota el poco
compromiso que asumen al establecer una relación contractual ya que estas son
las primeras en incumplir con el pago de honorarios de los usuarios que se les
atienden o en otras modalidades de pago, por estos muchos servicios prestados
son pagados per cápita o pagos globales prospectivos para mitigar esta
problemática que aún nos afecta porque esto solo es para ciertos servicios, por
este motivo también se han creado decretos y leyes que garantizan obtener una
buena relación contractual.
El decreto 4747 de 2007 que es el que regula algunos aspectos de la
relación de los prestadores de servicios de salud las entidades responsables del
pago de los servicios de salud de la población a su cargo por medio del cual se
permite mitigar barreras de atención de los usuarios afiliados al régimen de salud.
La ley 1122 de 2007 la cual se ajusta el sistema general de seguridad social en
salud teniendo como prioridad la mejora en la prestación de servicios de salud a
los usuarios, en su artículo 5 hace énfasis en el análisis y aseguramiento de la
parte financiera con el objetivo de garantizar una buena prestación del servicio, en
el artículo 16 hace énfasis en la eliminación de barreras en la atención del usuario
al cual se le debe atender en las IPS habilitadas en el territorio donde este reside.
Leyes y decretos que regulan de una u otra forma la prestación del servicio por
medio de obligaciones contractuales que adquieren las EPS con las IPS.

Las Instituciones Prestadoras de Salud (IPS) son organizaciones complejas


que por estar dedicadas a la prestación de un servicio tan especial deben cumplir
con estrictos y especiales sistemas de control de sus actividades, personal,
materiales y demás recursos necesarios en su normal desenvolvimiento. Su
responsabilidad es unas ocasiones por el cumplimiento de unas obligaciones de
resultado, como cuando presta sus servicios de hospital o en lo atinente a la
obligación de seguridad, y en otras de medio si está a cargo del tratamiento
médico. La actividad por ellas desarrollada, les impone la obligación legal de
brindar sus servicios a quien lo requiera en caso de urgencia sin que ello
disminuya en nada sus responsabilidades y aun cuando exista la probabilidad de
que nadie asuma el valor de los mismos esta garantía debe ir incluida en las
obligaciones que estos adquieren al momento de contratar servicios para los
afiliados. Los servicios de salud se prestan hoy en día, gracias a la expedición de
la Ley 100 de reforma a la seguridad social, más a través de las IPS y de las
diversas modalidades de atención analizadas que por medio de los profesionales
actuando individualmente, de modo que se establecen relaciones de
subordinación respecto de ellas que les imponen obligaciones y
responsabilidades.

Las obligaciones de las instituciones de salud comprenden una serie de


responsabilidades para con la sociedad en general por el correcto manejo de sus
actividades de modo que no vayan a producirse efectos nocivos para ella por
errores en esos manejos. Las IPS son responsables de los actos dañinos de los
subordinados que por efecto o con ocasión del trabajo con ellas se puedan
cometer y por ello debe ejercer un adecuado y permanente control sobre sus
actividades. tratándose de obligaciones de medio debe estar en capacidad de
probar el cuidado y diligencia, lo cual será posible organizacionalmente al
demostrar la existencia de un trabajo de mejoramiento continuo a través de
procesos evaluativos periódicos, planes permanentes de capacitación y
actualización al personal, programas de mantenimiento preventivo y de control de
calidad a los materiales, en fin, procesos como bien los han propuesto las normas
sobre implantación de sistemas de calidad, siempre y cuando no se conviertan en
formularios de cumplimiento de requisitos teóricos. Las IPS son responsables de
la organización de su propio trabajo para poder obtener un determinado resultado
y ello les impone unas claras responsabilidades, de modo que ese aspecto, junto
con el de la calidad es lo que debe primar por sobre todo, pues al momento de
presentarse algún problema solo se evaluará ello, independientemente de
aspectos económicos, como las bajas tarifas que presionan a los prestadores y no
justificaría en un momento determinado una falla al prestar un servicio. Las
obligaciones de las instituciones se deben enmarcar en su nivel de complejidad y
del estado de la técnica en un determinado momento, de modo que no se les
puede obligar más allá de lo que realmente son, como tampoco deben exceder
sus capacidades, ya que en nuestro país las EPS están mal acostumbradas a
exigir excelentes atenciones calidad y calidez y el cumplimiento de ellos como
acreedores es totalmente nula.

Ahora bien y cambiando un poco de tercio y sumergiéndose en el tema


covid-19 y como esta pandemia de alguna manera tuvo impacto en las
obligaciones contractuales en cuanto a salud se refiere (EPS IPS) han surgido
ciertos temas que a continuación se van a describir:

Dentro de la evolución estructural del Sistema de Salud Colombiano, se han


incorporado figuras contractuales diversas, que velan por la optimización de los
recursos y la eficiencia en la prestación de los servicios, en este sentido, el
ordenamiento colombiano ha regulado a través de varias normas (Ley 1122 del
2007, Decreto 4747 del 2007 hoy compilado en el Decreto 780 de 2016 y la Ley
1438 de 2011) la forma en la cual los prestadores y las EAPB dirigen su
relacionamiento y determinan la metodología de sus pagos.

Estas figuras van desde el pago por evento o servicio específico, hasta
modelos más complejos que implican la distribución de riesgos en la prestación de
servicios con pagos fijos, tales como los Contratos por Capitación, por Grupo de
Riesgo y por Presupuesto Global Prospectivo.

ALCANCES DEL COVID-19 EN CONTRATOS DE RIESGO


COMPARTIDO:
Antes de la llegada de la Pandemia, la administración y manejo de estos
contratos, para las IPS de mediana y alta complejidad, implicaba la atención
general de afiliados según lo establecido conjuntamente en las notas técnicas y
bajo los criterios de atención definidos.

Cuando se decretó la Emergencia Sanitaria en el país, la dinámica de la


prestación de servicios de salud tuvo un cambio en cuanto a la atención prioritaria
en la contención de la pandemia se refiere, lo cual produjo que se redujera
drásticamente los servicios originados por diagnósticos, patologías u otros
diferentes al Covid-19, situación que día a día crece de forma directamente
proporcional al pico de contagios.

Ante la falta de regulación tanto legal como contractual, los actores del
Sistema comenzaron a cuestionarse sobre la inclusión o exclusión de la atención
de pacientes con Covid-19 dentro de los modelos contractuales de riesgo
compartido, pues algunos consideran que dichas atenciones pueden enmarcarse
dentro de los códigos tradicionales de UCI y Hospitalización. y por lo tanto,
pertenecer al conjunto de atenciones establecidas en dichos modelos, mientras
que por otro lado, se considera que los CUPS y Tarifas definidas por el Gobierno
Nacional a través de las Resoluciones 537 de 2020 que modifica la 3495 de 2019,
la Resolución 914 del 11 de junio y la Resolución 1068 de 2020, expedidas por el
Ministerio de Salud y la Protección social para las tecnologías relacionadas con la
contención del virus, no se encontraban previamente pactados en los modelos por
no ser patologías reconocidas en el PBS y por lo tanto, deben excluirse.

Si bien ambas posiciones pueden variar respecto de cada regulación


contractual en particular, lo cierto es que asumir una u otra tiene implicaciones
asistenciales y jurídicas importantes de cara a la ejecución de las relaciones
comerciales, teniendo especial consideración a que la normalidad de los servicios
se encuentra temporalmente restringida y la mayoría de las atenciones se
encuentra circunscrita, en mayor medida, a la atención de la pandemia.

PARA EL MANEJO DEL COVID-19

Los modelos de riesgo compartido no son tendidos en cuenta: En este


caso, se debe considerar que todos las servicios médicos derivados a pacientes
con covid-19 confirmado, deben ser prestadas y facturadas bajo figuras
contractuales de evento o servicio específico, o en su defecto, bajo las tarifas
fijadas por el Ministerio, en el entendido que las mismas no fueron previstas en la
Nota Técnica. Esta idea le permitiría a las IPS recibir dichos pagos y a su vez
mantuvieran los pagos fijos derivados del modelo, aun cuando las frecuencias en
los servicios se han visto reducidas drásticamente.

Los modelos de riesgo compartido son tenidos en cuenta: Bajo esta


idea, se parte de la premisa que todas las internaciones en hospitalización, UCE y
UCI, independientemente del diagnóstico del paciente, hacen parte del modelo y la
Nota Técnica y, por ende, su valor se encuentra comprendido en los pagos fijos
pactados entre EPS e IPS para la atención de la población adscrita. Asumir esta
postura, implica también una dificultad, pero esta vez para los prestadores, pues
se verían avocados a asumir un riesgo desproporcional en la atención de
pacientes con diagnostico confirmado de COVID-19, pues podrían ser
insuficientes los recursos y tarifas destinadas originalmente en los modelos, de
cara al crecimiento exponencial en la demanda de servicios especialmente de
hospitalización y UCI.

Quien escribe o presenta este ensayo se toma la libertad de concluir 6


aspectos en cuanto a obligaciones contractuales se refiere:

 En el logro de acuerdos, el conocimiento que el negociador tenga del


SGSSS y del proceso de contratación es fundamental.
 Es necesario evolucionar de la contratación con manuales tarifarios a una
contratación basada en estudios de costos propios de cada prestador, en
los que se reflejen las condiciones reales de cada institución.
 El personal de área de la salud debe tener un mayor conocimiento del
manejo administrativo del Sistema de Salud, para lograr mejores resultados
financieros y mejor calidad de vida en los pacientes/usuarios.
 Las EPS están con toda la disponibilidad en cuanto a la atención al usuario
se refiere, a lo que surge inmediatamente la pregunta ¿entonces por que en
algunos casos la atención es tan regular y en otras tan mala?, a título
personal se puede decir que no es la EPS per se sino las instalaciones,
personal y cobertura (por no decir que hay algunas IPS que no cuentan con
lo anteriormente dicho).
 El sistema de salud colombiano no estaba preparado para una pandemia, lo
cual quedó en evidencia por las desavenencias producidas en cuanto
obligaciones contractuales se refiere porque las EPS en su afán de afiliar
pacientes no les interesó cuantas IPS estaban aptas (cobertura, personal
médico general y especializados, equipos, programas de bioseguridad y
capacitación, instalaciones etc.) para atender Pacientes positivos a covid-19
 Cualquiera que sea la posición que se asuma, lo cierto es que ambas
implican una carga desproporcionada y no prevista para los contratantes
(Para las EAPB en la exclusión y para las IPS en la inclusión), lo cual,
vinculado al impacto y magnitud de las atenciones derivadas de la
Emergencia Sanitaria, es indudable que originan una novedad contractual
en cuanto al manejo, categorización y facturación de aquellos eventos y
procedimientos relacionados con la atención del COVID-19.

Referencias bibliográficas

Teoría de la contratación. Perilla, Diana. Fundación universitaria del área


andina. Eje 3

Responsabilidad extracontractual tomado de:

https://www.notaria19bogota.com/responsabilidad-extracontractual/

decreto 4747 de 2007 tomado de:

http://www.saludcapital.gov.co/Documents/Decreto-4747-de-2007.pdf

Ley 1122 de 2007 tomado de:

https://www.minsalud.gov.co/sites/rid/Lists/BibliotecaDigital/RIDE/DE/DIJ/ley-1122-
de-2007.pdf

Molano, M. (2010). Los sujetos de la contratación estatal y su régimen de


inhabilidades, incompatibilidades y conflictos de interés. Bogotá, Colombia.
Ediciones Nueva Jurídica.

Canastero I, Zuleta M. Contratación en el Sistema General de Seguridad


Social Colombiano. Medellín: Instituto de Ciencias de la Salud; 2001.

El covid-19 en los contratos de riesgo tomado de

https://consultorsalud.com/el-covid-19-en-los-contratos-de-riesgo/

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