UNA EDUCACIÓN FORMADA EN VALORES DE IDENTIDAD NACIONAL Y

CULTURAL
La educación en valores de la identidad nacional y cultural tiene
gran importancia para el desarrollo de la personalidad de los
futuros educadores peruanos. Del resultado de ese proceso
depende que los jóvenes que hoy estudian en las universidades
sean capaces de asumir una participación activa en la etapa actual
de construcción de la sociedad peruana, no tan utópica, pero si una
buena.
En un mundo de acelerados cambios, ya sea por la globalización u
otro factor, la educación peruana tiene que defender y favorecer valores como la
identidad nacional y cultural para preservar lo logrado y capacitar a los futuros
maestros, mediante el desarrollo de su conciencia crítica y su creatividad con el objetivo
de perfeccionar este proyecto social desde su protagonismo; los valores fundamentales
del proyecto social peruano, de identidad, soberanía y justicia social, solo serán
elementos distintivos si pasan a formar parte de la subjetividad de cada peruano. Los
futuros maestros en formación han de prepararse desde las aulas de las universidades
cumplir con su encargo social. Aquí radica el “quid” de la educación en valores de la
identidad nacional y cultural, con vistas a un objetivo que va más allá de cualquier
currículo: la educación en su sentido más amplio.
Al abordar la problemática de los valores, es necesario partir de la premisa de que
constituyen un contenido de la Educación y, a su vez, un proceso básico para elevar la
Al hombre hay que
calidad de esta. comprenderlo en su
1.- La educación del hombre para la vida social: es estrecha unidad entre
la
lo racional y lo
tarea más ardua e importante del maestro; por ello, se emocional.
debe priorizar la educación en un proceso de
formación a un profesional que tenga como centro al
hombre, sus intereses, su desarrollo. La finalidad del
proceso educativo está dada por la unidad dialéctica
entre lo instructivo (el conocimiento) y lo educativo
(el sentimiento).
2.- Identidad nacional: se define como un sistema de rasgos comunes que definen un
grupo social, comunidad o pueblo, devenido determinación fundamental de su
ser esencial y fuente auténtica de creación social. “Es una unidad que,
fijando la comunidad, presupone la diversidad, la diferencia y sus
vínculos recíprocos, como modo dinámico de constante enriquecimiento
y proyección hacia la universalidad”.1

La importancia estratégica de educar la identidad nacional y cultural peruanas en la

personalidad de los educadores en formación radica en la correspondencia entre las
formas de vida de una sociedad y su sistema de valores morales

Uno de los objetivos más importantes y a la vez más complejos, de toda actividad
educativa, es contribuir en la formación de la identidad nacional, toda vez que nos
encontramos en un país con amplias diferencias sociales y culturales. No obstante, todos
los que estamos comprometidos en la forja de una nueva educación, científica,
democrática y nacional; no dudamos que la forja de la identidad nacional es la piedra
angular que orienta toda nuestra actividad educativa, de allí la relevancia del asunto.
Nunca consideres el
3.- La educación en valores de la identidad nacional y cultural: estudio como una
obligación, sino como
una oportunidad para
Ante todo, debe evitar la pobreza espiritual del ser humano; ello
penetrar en el bello y
maravilloso mundo del
actuaría como un antídoto contra la pérdida de la memoria saber

histórica de la nación poderosa ante el poderoso aliento de

las transnacionales imperialistas de la información, cuyos
aires ya llegan hasta acá, y para lo cual la educación peruana
debe prepararse a fin de defender sus logros y perpetuarlos
puntualmente. Dada la importancia de la formación
profesional en esta etapa de la vida, la enseñanza universitaria
puede contribuir en una gran medida a desarrollar, en los
jóvenes que hoy se forman como profesores en las aulas de
las universidades, una personalidad madura. Ello constituye una condición del sujeto
autorregulado, que posee una identidad personal estructurada y es capaz de proyectarse
al futuro mediante la elaboración de un proyecto de vida, apoyado en su concepción del
mundo.

1
PUPO R. Identidad, emancipación y nación. La Habana: Editora Política; 2005. p.20.