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Universidad abierta para adultos upa

Tema:
Memoria largo plazo y cortó plazo
Asignatura:
Procesos cognitivos
Participante:
Indhira meran mora
Matricula:
201808356
Facilitadora:
Tomasina vasquez

Fecha:
12-2-2020

1. Elabora un mapa mental en el que resumas los puntos que se


presentan a continuación:
a. Funciones del conocimiento en la cognición, representaciones y su
formato.
b. Codificación y la recuperación de la memoria.

En dichos procesos intervienen


varias funciones cognitivas: la
percepción, la atención, la
memoria, el razonamiento… Todas
funciones del conocimiento en estas funciones el lemguaje pensamiento
la cognicion cognitivas trabajan
conjuntamente para integrar
el conocimiento y crear una
interpretación del mundo que nos
rodea.
Codificación es la capacidad para
almacenar y recuperar información,
proceso que comporta la acción
aceptada de cognición es la de codificar. Los recuerdos confieren
capacidad que tenemos los seres a un organismo la capacidad de
vivos de procesar la información a aprender y adaptarse a partir de las
experiencias previas, así como Una de las primeras figuras
partir de la percepción (estímulos representativas del estudio del proceso
que nos llegan del mundo exterior establecer relaciones significativas.
de codificación memorística
a través de los sentidos), el La codificación permite convertir los es Hermann Ebbinghaus (1850–1909).
conocimiento adquirido con la elementos percibidos en constructos Ebbinghaus fue un pionero en el campo
experiencia y nuestras que pueden ser almacenados en el de la investigación de la memoria
características subjetivas que nos cerebro y evocados posteriormente
permiten integrar toda esta desde la memoria a corto plazo o
información para valorar e la memoria a largo plazo. Por su
interpretar el mundo.  parte, la memoria de
trabajo almacena información con
vistas a su uso o manipulación
inmediata.

La idea de que el cerebro se


encuentra dividido en dos redes
de procesamiento
complementarias (tareas positivas
y tareas negativas) se ha
convertido en los últimos tiempos
en un área de interés creciente.

2. Investiga respecto a la memoria a largo plazo y a corto plazo y


redacta un ejemplo de lo que el ser humano almacena en cada una de
ellas
La memoria a corto plazo (MCP) se puede definir como el mecanismo de memoria que nos
permite retener una cantidad limitada de información durante un periodo corto de tiempo. La
memoria a corto plazo retiene temporalmente la información procesada, tanto si luego se
desvanece, como si después pasa a la memoria a largo plazo. Así, la memoria a corto plazo
tiene dos propiedades principales: una capacidad limitada y una duración finita.

Capacidad de la memoria a corto plazo: Si se te pide que recuerdes una serie de 10 dígitos, lo
más probable es que recuerdes entre 5 y 9 números. Esto es porque la cantidad de
información que puede retener la memoria a corto plazo es de 7 elementos con una variación
de 2, por exceso o defecto. Naturalmente, la capacidad de la MCP es ligeramente variable, por
lo que hay personas con una capacidad aún mayor o menor. También puede variar en función
del material que se ha de recordar (se ve afectada por la longitud de las palabras, la relevancia
emocional de los estímulos y otras diferencias individuales). Además, si se elabora o agrupa la
información (chunking), la cantidad de elementos que podemos recordar aumenta. Por
ejemplo, a la hora de recordar un número de teléfono, podemos agrupar los dígitos en parejas
o tríos de dígitos.

Duración de la memoria a corto plazo: La cantidad de tiempo que podemos retener los dígitos
o la información no es infinita. Nuestra memoria a corto plazo puede mantener la información
hasta 30 segundos. No obstante, podemos ampliar el tiempo que permanece la información en
nuestra MCP si la repetimos constantemente o la dotamos de significado (por ejemplo,
identificar como el número pi el conjunto de dígitos “3 – 1 – 4 – 1 – 5 – 9...”).

La memoria a corto plazo actúa como una de las puertas de acceso a la memoria a largo
plazo, o como un “almacén” que nos permite retener información que no necesitaremos en un
futuro, pero que necesitamos en el momento. Esto implica que un daño en la MCP puede
dificultar la adquisición de nuevos recuerdos en la memoria a largo plazo.

Si se daña exclusivamente la memoria a corto plazo, perderemos la capacidad de retener


información durante el corto periodo de tiempo en el que trabaja. Así, no podríamos
comprender las frases de una longitud determinada y, por supuesto, nos perderíamos en el
transcurso de la conversación.

Ejemplo de memoria a corto plazo

Para comprender una frase larga en una conversación, necesitamos recordar el inicio de la
frase para entender el final de la misma. Lo que nos permite retener temporalmente el inicio
de una frase es la memoria a corto plazo. Una vez hayamos comprendido la información, no
necesitamos retener el inicio de la frase, por lo que olvidamos las palabras concretas.

Cuando leemos, nuestra memoria a corto plazo actúa de manera semejante al ejemplo
anterior. Necesitamos retener el inicio de una frase escrita para comprender el final. Una frase
larga y compleja será mucho más difícil de comprender que una corta y simple. De modo que,
en ámbitos escolares, es muy importante disponer de una memoria a corto plazo en buena
forma, ya que está relacionada con la correcta comprensión de la lectura, que es fundamental
para el éxito académico.

Cuando alguien nos dice un número de teléfono, en el tiempo que transcurre desde que lo
escuchamos hasta que lo conseguimos apuntar, está actuando nuestra memoria a corto plazo.

Por lo general, los procesos de creación de recuerdos a largo plazo requieren la actuación
previa de la memoria a corto plazo. Así, cuando intentamos aprendernos una lección de un
libro, memorizar una contraseña o unas líneas de un poema, está trabajando nuestra memoria
a corto plazo

Patologías y trastornos asociados a una pérdida de memoria a corto plazo

Si los distintos tipos de memoria no fuesen independientes, al fallar uno, fallarían todos.
Afortunadamente, el cerebro dedica diferentes áreas a cada uno de los tipos de memoria, de
modo que la alteración de la MLP, por ejemplo, no tiene por qué afectar a la MCP. Por lo
general, todos los tipos de memoria trabajan de manera conjunta y sería muy difícil descifrar
en qué punto comienza uno y acaba otro. En cambio, cuando uno de ellos se daña, nuestro
cerebro no puede llevar a cabo su función, con consecuencias fatales en nuestro día a día.

La alteración de la memoria a corto plazo puede reducir tanto el tiempo,


como la cantidad de elementos que maneja. Así, en una alteración leve, tal vez
podamos retener menos cantidad de información durante menos tiempo, por lo que sería un
daño “poco visible”. En cambio, una alteración grave podría inutilizar prácticamente la función
de la MCP, con consecuencias muy importantes.

La memoria a corto plazo puede ser dañada de diversas formas. Se ha visto que la MCP se
altera en fases moderadas de la enfermedad de Alzheimer, aunque el daño en la MLP es
mucho más saliente en esta enfermedad. También se ha señalado la importancia de la
memoria a corto plazo en la dislexia, pues la dificultad de almacenar información fonológica
puede provocar desembocar en problemas en la adquisición de la lectura. Además, el consumo
de marihuana es otro factor que puede afectar a la integridad de la MCP. El daño cerebral
derivado de un ictus o de un traumatismo craneoencefálico también podría alterar la
memoria a corto plazo.

Como medir y evaluar la memoria a corto plazo?

La memoria a corto plazo interviene en la mayoría de las actividades de nuestro día a día. Que
podamos interactuar correctamente con nuestro entorno y con las personas que nos rodean,
depende directamente de nuestra memoria a corto plazo. De este modo, evaluar nuestra
memoria a corto plazo y conocer su estado puede ser de gran ayuda en diferentes ámbitos de
la vida: en ámbitos escolares (nos permitirá saber si un niño tendrá dificultades para aprender
a leer o para comprender frases largas o complejas), en ámbitos médicos (para saber si hay
que dar las indicaciones de manera más simple a los pacientes, o si van a tener problemas para
establecer nuevos recuerdos) o en ámbitos profesionales (la memoria a corto plazo puede
servir como indicador de la facilidad con la que se van a interiorizar y a trabajar con órdenes
complejas).

Es posible valorar las diferentes funciones cognitivas, como la MCP, de una manera fiable y
eficaz mediante una evaluación neuropsicológica completa. Los tests que ofrece CogniFit para
evaluar la memoria a corto plazo están inspirados en las pruebas de Dígitos directos y Dígitos
indirectos de la WMS (Wechsler Memory Scale), en el CPT (Continuous Performance Test), en
el TOMM (Memory Malingering) y en el TOL (Torre de Londres). Además de la memoria a corto
plazo, estos tests también miden percepción espacial, planificación, velocidad de
procesamiento y memoria de trabajo (operativa).

Test Secuencial WOM-ASM: En la pantalla aparecen una serie de bolas con diferentes
números. Se tendrán que memorizar la serie de números para poder repetirlos
posteriormente. En primer lugar, la serie estará compuesta por un solo número, pero irá
incrementando progresivamente hasta que se cometa algún error. Habrá que reproducir cada
serie de números tras cada presentación.

Test de Concentración VISMEN-PLAN: Aparecerán estímulos posicionados en la


pantalla y distribuidos de manera alternativa. Siguiendo un orden, los estímulos se irán
iluminando junto con la aparición de un sonido hasta completar la serie. Durante la
presentación, hay que prestar atención tanto a los sonidos como a las imágenes
iluminadas. En el turno del usuario, habrá que recordar el orden de la presentación de
los estímulos en el momento oportuno para reproducirlos en el mismo orden que
hayan sido presentados.

como rehabilitar o mejorar la memoria a corto plazo?

La memoria a corto plazo puede ser entrenada y mejorada, al igual que las demás
habilidades cognitivas. En CogniFit ofrecemos la posibilidad de hacerlo de manera
profesional.

La Rehabilitación de la memoria a corto plazo se basa en la plasticidad


cerebral. CogniFit ofrece una batería de ejercicios clínicos diseñados para
Rehabilitar los problemas en la MCP y otras funciones cognitivas. El cerebro y sus
conexiones neuronales se fortalecen al usar las funciones que dependen de éstos. Por
tanto, si entrenamos frecuentemente la memoria a corto plazo, las conexiones
cerebrales de las estructuras implicadas se fortalecerán. Así, cuando necesitemos
hacer uso de la memoria a corto plazo, las conexiones serán más rápidas y eficientes,
mejorando nuestra capacidad.

El equipo de CogniFit está formado por un completo equipo de profesionales


especializados en el estudio de la plasticidad sináptica y procesos de neurogénesis.
Esto ha permitido la creación de un

 Programa de estimulación cognitiva personalizado para las necesidades de


cada usuario. Este programa da comienzo por una precisa evaluación de la memoria a
corto plazo y otras funciones cognitivas fundamentales. En base a los resultados de la
evaluación, el programa de estimulación cognitiva de CogniFit ofrece de forma
automatizada un entrenamiento cognitivo personalizado para fortalecer la memoria a
corto plazo y otras funciones cognitivas que se consideren necesarias según la
evaluación.

La constancia y un entrenamiento adecuado son imprescindibles para mejorar la


memoria a corto plazo. CogniFit dispone de herramientas de evaluación y de
rehabilitación para optimizar esta función cognitiva. Para una correcta
estimulación son necesarios 15 minutos al día, dos o tres días a la semana.

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