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Sífilis
M. Janier, E. Caumes

La sífilis, una enfermedad bacteriana de transmisión sexual provocada por Treponema


pallidum, apareció al final del siglo XV y todavía despierta un gran interés después de más
de cinco siglos. Tras haber desaparecido casi por completo en los países occidentales en la
década de 1990 debido a la prevención de la infección por el virus de la inmunodeficiencia
humana (VIH), ahora presenta un fuerte recrudecimiento en la comunidad homosexual,
tal vez por una disminución de la prevención. La historia natural de la enfermedad es
típica y evoluciona en tres fases: primaria (chancro), secundaria (septicemia treponémica)
y terciaria (complicaciones neurológicas y cardiovasculares). El treponema no siempre es
cultivable, pero su genoma está secuenciado. Las pruebas serológicas posibilitan una
aproximación indirecta y su interpretación no siempre es fácil. Las relaciones entre la
infección por el VIH y la sífilis son estrechas y complejas. La conducta terapéutica está
bien codificada en términos generales (penicilina G de liberación sostenida), tanto en la
persona no inmunodeprimida como en el paciente infectado por el VIH.
© 2012 Elsevier Masson SAS. Todos los derechos reservados.

Palabras clave: Sífilis; Treponema pálido; VIH; TPHA; VDRL

Plan  Introducción
■ Introducción 1 La sífilis es una enfermedad de transmisión sexual.
■ Reseña histórica 1 También es posible la transmisión transplacentaria. La

expresión de la sífilis no se ha modificado en los últimos
Epidemiología 2
años, ni siquiera en los pacientes infectados por el virus
■ Agente patógeno 3 de la inmunodeficiencia humana (VIH). La terminología
■ Historia natural, inmunidad y clasificación 3 anglosajona de sífilis reciente y tardía ha sido sustituida de
Historia natural 3 forma progresiva por la terminología francesa clásica de
Inmunidad 3 sífilis primaria, secundaria, latente y terciaria. Esta distin-
Clasificación 4 ción está justificada por un enfoque terapéutico distinto.
■ Semiología 4 El diagnóstico serológico ha avanzado mucho en términos
Sífilis primaria 4 de simplicidad y fiabilidad. En ausencia de neurosífilis, la
Sífilis secundaria 4 mayoría de los autores acepta el tratamiento con penici-
Sífilis latente 6 lina de liberación sostenida.
Sífilis terciaria 6
Neurosífilis 7
Sífilis congénita 8  Reseña histórica
Sífilis e infección por el virus de la inmunodeficiencia
humana 9 La enfermedad fue descrita a finales de 1494 y comien-
■ Diagnóstico de laboratorio 10 zos de 1495 en España, donde habría sido introducida
Métodos diagnósticos 10 por Cristóbal Colón en 1493 o por Antonio de Torres en
Diagnóstico positivo 12 1494 al regresar del Nuevo Mundo. En 1494, las tropas
de Carlos VIII, rey de Francia, se dirigieron a Italia para
■ Diagnóstico diferencial 14
luchar contra el rey de Nápoles, sostenido por el ejército
■ Tratamiento 14 español, al que acompañaban un cortejo de mercenarios
Tratamientos posibles 15 y prostitutas. La epidemia de sífilis se produjo en 1495,
Estrategia terapéutica 16 después de la conquista de Nápoles por el ejército fran-
■ Conclusión 18 cés, y luego se diseminó con rapidez por toda Europa
debido a la dispersión de los mercenarios de los ejércitos

EMC - Dermatología 1
Volume 46 > n◦ 3 > septiembre 2012
http://dx.doi.org/10.1016/S1761-2896(12)62718-6
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franceses y españoles. Así, la sífilis fue denominada mal de En los países en desarrollo, sobre todo de África, la
Nápoles por los franceses y mal francés (Morbus gallicus) incidencia de la sífilis es desconocida, pues los estudios
por los italianos. A finales del siglo XV, la sífilis era una disponibles son encuestas de seroprevalencia condu-
enfermedad grave cuya forma clínica más frecuente equi- cidos en poblaciones escogidas (mujeres embarazadas,
valía a la sífilis maligna actual. Con el paso de los siglos, la donantes de sangre, enfermos hospitalizados) o de riesgo
expresión semiológica de la sífilis y su evolución natural (prostitutas). En una revisión de las publicaciones reali-
se han modificado, para terminar en un estado de equi- zada en 1990 se recopilaron unos 50 estudios. Los índices
librio entre el huésped y la bacteria. En los siglos XVI y de prevalencia de la seropositividad de una prueba trepo-
XVII se la llegó a denominar viruela mayor (great pox), por némica (análisis de absorción de anticuerpos fluorescentes
oposición a la viruela o pequeña viruela (small pox). La de treponema [FTA-Abs], análisis de hemaglutinación de
denominación de sífilis se impuso al final del siglo XVIII Treponema pallidum [TPHA]) varían entre el 2-33% y los
por analogía con el pastor Syphilus, protagonista de un de una prueba no treponémica (prueba de reagina plas-
poema de Jerónimo Fracastoro, médico y filósofo italiano mática rápida [RPR], venereal disease research laboratory
(Syphilus sive Morbus gallicus, 1530) [1] . [VDRL]), entre el 0-37%. No se ha podido extraer ninguna
Hasta el principio del siglo XX, la sífilis dominó la pato- conclusión de estos estudios en países en los que las trepo-
logía y las preocupaciones médicas y sociales de la época, nematosis no venéreas han existido en estado endémico.
con su cortejo moralizador y culpabilizador [2] . Los gran- Se supone que las encuestas de seroprevalencia efectua-
des nombres de la sifiligrafía fueron Ricord (1800-1889) y das en los últimos años son más fiables, sobre todo en
Fournier (1832-1914). El mercurio, usado desde el siglo medio urbano, debido a las campañas de erradicación de
XVI, se empleó hasta mediados del siglo XX [2] . El tre- las treponematosis no sifilíticas. Los índices de seropreva-
ponema pálido fue descubierto en Berlín en 1905 por lencia (TPHA+ y VDRL+) en África Central se estiman en
Schaudinn y Hoffmann y los anticuerpos anticardioli- el 4,45% en Brazzaville (Congo), el 13,3% en zona rural y
pina, por Wassermann y Neisser en 1907, gracias a la el 19,4% en la zona urbana de Gabón. Se estima en cerca
técnica de desviación del complemento de Bordet. En de 4 millones el número de casos de sífilis en África subsa-
1910, Ehrlich elaboró en Fráncfort un derivado arseni- hariana y en casi 6 millones en el Sudeste Asiático [6] . Se
cal orgánico trivalente (arsenobenzol), que se usó con observa, en particular, un fuerte aumento de los casos en
éxito por vía parenteral en asociación a las sales de bis- China, tanto en los heterosexuales como en los homose-
muto. Hubo que esperar hasta 1943 para que Mahoney, xuales [7] . Estas sorprendentes cifras contrastan con una
Arnold y Harris demostraran la eficacia y la inocuidad de preponderancia creciente del herpes genital, en la huella
la penicilina en el tratamiento de la sífilis. Desde su efi- de la extensión del VIH, como causa de ulceración genital
cacia nunca ha sido desmentida y hasta hoy no se ha en la mayoría de los países africanos, incluso en los que la
demostrado ninguna resistencia del treponema pálido a la sífilis y/o el chancro blando solían ocupar el primer lugar
penicilina [3] . entre las causas [8] .
En Rusia y en el conjunto de los países del antiguo
bloque comunista, la incidencia ha experimentado un
 Epidemiología aumento explosivo (280 casos por cada 100.000 en Rusia
en 1997, es decir, un aumento en un factor 43 desde 1989).
La epidemiología de la sífilis es más o menos bien Desde finales de la década de 1990, la disminución ha sido
conocida según los países. La eficacia de las encuestas muy clara, aunque con alguna duda sobre el menor rigor
epidemiológicas prospectivas o retrospectivas es variable. actual en los controles que bajo los regímenes comunis-
Incluso en Estados Unidos, en donde los casos se comuni- tas. Los casos afectarían sobre todo a los heterosexuales,
can de forma correcta y la incidencia anual se sigue desde con un fuerte nexo con la toxicomanía intravenosa [4] .
hace muchos años, se estima que la denuncia obligatoria En Francia, la incidencia es desconocida. Desde junio de
se cumple en realidad en menos del 50% de los casos. 2000, la sífilis ha dejado de formar parte de las enferme-
Se calcula en 12 millones el número anual de nue- dades de denuncia obligatoria. La detección sistemática
vos casos de sífilis en todo el mundo, de los cuales sólo de una seropositividad treponémica no es obligatoria
140.000 se producen en Europa Occidental. Los datos desde 1992, pero sigue siendo obligatoria al 3.er mes del
europeos son registrados por la European Surveillance of embarazo. En cuanto a la detección sistemática en medio
Sexually Transmitted Infections (ESSTI) y por el Centro hospitalario, se la considera inútil, salvo en poblaciones
para el Control de Enfermedades Europeo (ECDC) de Esto- de riesgo (servicios de dermatología, de neurología, de
colmo [4] . enfermedades de transmisión sexual).
En Estados Unidos, la incidencia de la sífilis pre- La sífilis precoz prácticamente había desaparecido en
coz (primaria y secundaria) disminuyó con regularidad Francia en el período 1990-1997. Desde 1998 se veri-
desde 1947 (66,4 casos/100.000 habitantes) hasta 1956 fica un recrudecimiento indiscutible. De enero de 2000
(3,9/100.000), debido probablemente en gran parte al uso a diciembre de 2009, en la red ResIST (red de vigilan-
de la penicilina. A partir de 1956, la incidencia sufrió cia y de declaración voluntarias, desplegada en todo el
variaciones al alza y a la baja (aunque con una tendencia territorio francés por el Institut National de Veille Sani-
global al alza). Desde 1991, la incidencia volvió a bajar, taire [InVS]) se registraron 4.016 casos de sífilis precoz
con una cifra histórica de 3,2/100.000 en 1997. La inci- (primaria, secundaria y latente de menos de 1 año de evo-
dencia actual está en alza, sobre todo entre homosexuales. lución). No hay tendencia al alza, pero la sífilis parece
Existen grandes diferencias según las poblaciones (el 80% estar bien instalada y en meseta desde hace 10 años. En
de los casos en la raza negra en 1990, es decir, una inciden- la última década ha habido pocas modificaciones epide-
cia 50 veces mayor que en la raza blanca), el sexo (más en miológicas: presentación masiva en los varones (94%), en
varones) y la región geográfica (sobre todo las ciudades del especial homosexuales (el 82% del total), edad promedio
Sur, de la costa Oeste y del Nordeste). La sífilis congénita de unos 36 años, seroprevalencia VIH muy elevada (42%),
aumentó hasta 1988 (357 casos/100.000) y luego descen- influencia del sexo oral como fuente supuesta de la con-
dió (30/100.000 en 1996), con un muy claro predominio taminación (50%). Estas características epidemiológicas
en la raza negra (350/100.000 frente a 6/100.000 en la raza se encuentran en todos los países desarrollados, salvo en
blanca). La sífilis neurológica ha descendido con regula- Estados Unidos, en donde la situación está más diversifi-
ridad desde 1945 (menos de 10/100.000 desde principios cada (predominio de casos en homosexuales varones en
de la década de 1980). De forma global, la sífilis está fuer- las costas Este y Oeste, predominio de casos en heterose-
temente vinculada a la homosexualidad, la prostitución, xuales en el Sur y el Centro del país) [9, 10] . La extensión de
el consumo de drogas (prostitución para aprovisionarse la epidemia a la población general heterosexual es posible,
en crack) y la pobreza [5] . a semejanza de lo observado en la isla de la Martinica [11] .

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La sífilis congénita seguía siendo en 2011 un problema El genoma completo de Treponema pallidum (1.140.000
de salud pública no resuelto: se estima en 2 millones el pares de bases) fue secuenciado en 1998 por un equipo de
número anual de mujeres embarazadas con serología sifi- Rockville (Maryland) [15] .
lítica positiva (prueba no treponémica), es decir, alrededor
del 1,5% de todos los embarazos. La Organización Mun-
dial de la Salud (OMS) considera que la sífilis congénita  Historia natural,
provoca 650.000 muertes perinatales por año (frente a
300.000 debidas al VIH, 200.000 al tétanos y 200.000 al inmunidad y clasificación
paludismo). La sífilis es la causa del 25% de las muertes
fetales y del 11% de las muertes perinatales, la mayoría Historia natural
de las veces en África. La sífilis congénita aumentó el 23%
La historia natural es bien conocida gracias a dos gran-
en Estados Unidos entre 2003 y 2008 (de 8,2/100.000 a
des estudios de sífilis no tratada: el estudio de Oslo
10,1/100.000) y el 72% anual en China entre 1997 y 2008
(Noruega) y el estudio Tuskegee (Alabama) [16, 17] . Ésta con-
(de 0,01/100.000 a 21/100.000) [12, 13] . La sífilis congénita
diciona las clasificaciones que se usan según se adopte
es excepcional en Francia [14] .
un punto de vista clínico, epidemiológico o pronóstico.
El estudio de Oslo analiza 1.404 casos de una serie pros-
pectiva de 2.181 pacientes afectados por una sífilis precoz
 Agente patógeno sintomática no tratada entre 1890 y 1910 [16] . En el 23%
de los pacientes con sífilis precoz se advierten recurrencias
Se trata de Treponema pallidum subsp. pallidum, bacte- cutaneomucosas, que son lesiones potencialmente con-
ria cosmopolita, espiralada, móvil, perteneciente al orden tagiosas observadas en el 86-92% de los casos en 1 año,
Spirochaetales con las bacterias de los géneros Borrelia y en el 93-96% en 2 años y en el 100% en 5 años. Como
Leptospira. Treponema pallidum no es cultivable in vitro. consecuencia de estos datos, los Centros para el Control
Por tanto, su metabolismo se conoce poco y es impo- de Enfermedades (CDC) definen como sífilis latente pre-
sible establecer un antibiograma, así como tampoco es coz (contagiosa) a la de menos de 1 año de evolución y
posible, al contrario que para otras bacterias, evaluar la como sífilis latente tardía (no contagiosa), a la de más de
sensibilidad a los antibióticos in vitro. Hasta ahora no 1 año de evolución. En cambio, la OMS sitúa la línea de
se ha informado ninguna resistencia a la penicilina. Tre- división a los 2 años. En el estudio de Oslo, el 72% de los
ponema pallidum es sensible a todos los betalactámicos, casos evolucionó sin complicación tardía. Entre el 14-16%
a las ciclinas y, en menor grado, a los macrólidos. El evoluciona hacia una sífilis terciaria benigna tras un lapso
tiempo de división de Treponema pallidum es prolongado, promedio de 15 años (1-46 años) con un 70% de lesiones
de 33 horas en la sífilis precoz a varios días en la sífilis cutáneas, un 11% de lesiones mucosas y un 5% de lesiones
tardía. óseas. El 7-13% evoluciona hacia una sífilis cardiovascu-
Treponema pallidum subsp. pallidum es indistinguible lar tras un lapso superior a 15 años, con un promedio de
por análisis molecular de las otras subespecies de Tre- 30-40 años. El 5-9% evoluciona hacia la neurosífilis: sífilis
ponema pallidum: Treponema pallidum subsp. endemicum meningovascular en 15-18 años, parálisis general en 20-25
(agente del bejel), Treponema pallidum subsp. pertenue años y tabes después de 30 años. Por último, la mortalidad
(agente del pian) y, en menor grado, Treponema carateum, por sífilis se calculaba en el 17,1% en los varones y en el
agente de la pinta o carate. El bejel (o sífilis endémica) 8% en las mujeres [16] .
y el pian son treponematosis no venéreas que existen en Treponema pallidum se transmite a partir del contacto
con lesiones contagiosas. Penetra a través de un epite-
África y, en menor grado, en Latinoamérica y Asia con
lio genital con microlesiones por traumatismos menores
relación al pian. La pinta está confinada a focos excep-
producidos durante el acto sexual. La contagiosidad es
cionales en Latinoamérica. En el laboratorio no es posible
variable. El estudio de las parejas sexuales de pacientes
distinguir los treponemas causantes de estas enfermeda-
sifilíticos revela un riesgo que varía, en los heterosexuales,
des por su morfología, por la inoculación al animal ni
entre el 18,1% en zona rural en Gabón y el 58% en zona
con las técnicas de inmunofluorescencia, pues estos tre-
urbana en el Reino Unido [18] . En la práctica, el riesgo de
ponemas tienen en común una gran homología de su
transmisión se estima en un tercio de las personas expues-
ácido desoxirribonucleico (ADN). Además, hay trepone-
tas a una sífilis precoz. Este riesgo es más elevado si el
mas saprofitos de las mucosas digestivas en el ser humano
contacto se produce con pacientes afectados por la sífilis
y en el medio ambiente. Las cuatro treponematosis son
primaria más que por la sífilis latente. Otro modo de trans-
positivas de forma idéntica en el serodiagnóstico de las
misión potencial es parenteral. La transmisión sanguínea
treponematosis. Así, una serología «sifilítica» positiva en
es excepcional desde la detección treponémica sistemá-
una persona originaria de un país tropical no es sinónimo
tica en los donantes de sangre. Un modo de transmisión
de sífilis venérea.
hipotética sigue siendo el uso compartido de las jeringui-
Treponema pallidum es un germen de forma alargada,
llas por los toxicómanos intravenosos. La sífilis se puede
espiralada, de 0,10-0,18 ␮m de ancho por 6-20 ␮m de
transmitir también por vía transplacentaria, lo que explica
largo, con 6-12 vueltas de espiras. En el microscopio
los casos de sífilis congénita.
óptico sólo puede verse sobre un fondo negro y las tin-
El período de incubación varía, según el tamaño de
ciones son difíciles. La exploración en el microscopio con
inóculo, entre 10-90 días. Un estudio de 1953 (hoy
fondo negro revela un germen móvil (se desplaza por el
éticamente imposible) efectuado con prisioneros esta-
campo del microscopio) y rígido (no se pliega sobre sí).
dounidenses demostró que los inoculados con diez
El microscopio electrónico revela que sobre la cubierta
espiroquetas desarrollaban un chancro en 28,7 días de
existen fibrillas, fijadas en cada extremo del germen, que
promedio, frente a 18,6 días en los inoculados con 104
subtienden las espiras de la bacteria. El germen es ino-
espiroquetas [19] . Un tratamiento antibiótico previo pro-
culable en el testículo del conejo que, en un término
longaba el período de incubación.
medio de 8 días después de la inoculación (con extre-
mos de 2 días a 6 meses, según el tamaño del inóculo),
desarrolla una orquitis aguda en la cual pululan los tre- Inmunidad
ponemas. Se extirpan los testículos, se trituran y luego
pueden estudiarse los treponemas, extraídos en solu- La inmunidad de la sífilis se conoce mal y es, sobre todo,
ción fisiológica, pero esta técnica es demasiado costosa de origen celular [20] . En la sífilis primaria se observa una
y de larga duración como para emplearse en la práctica disminución del número y de la concentración de lin-
corriente. focitos CD4 y en la sífilis secundaria, una disminución

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de los linfocitos CD8 [21] . Los determinantes antigénicos induración, localización, número) y de la adenopatía saté-
(proteínas) de la membrana de Treponema pallidum o pro- lite (presencia o no, tamaño, dolor), en comparación con
teínas de membrana externa raras de Treponema pallidum los signos del herpes genital y del chancro blando, no
(TROMP) son escasos: 70 para Treponema pallidum, 700 ha demostrado ninguna correlación entre la clínica y el
para Treponema phagedenis reiteri y 8.000 para Borrelia burg- diagnóstico [22] . Así, una ulceración indurada, conside-
dorferi. Sin embargo, estos antígenos están estrechamente rada como el signo más típico de la sífilis primaria, se
unidos a los lípidos de la membrana interna (proteí- observó en París en el 58% de las sífilis, el 42% de los chan-
nas de 15, 17, 23, 33, 35, 38, 47 y 57 kDa). Por lo cros blandos y el 26% de los herpes. La adenopatía satélite
tanto, son inaccesibles a los anticuerpos y muy difíciles se detectó en el 95% de las sífilis, el 63% de los chancros
de clonar. En cambio, los antígenos de la subsuperficie blandos y el 74% de los herpes, diferencias que no se consi-
(proteínas de 37, 31, 33 y 34 kDa del endoflagelo) son deran significativas. En un estudio reciente a partir de 278
exteriorizados e inducen la aparición de anticuerpos tre- casos consecutivos a ulceraciones genitales (excluidos los
ponemicidas. Sólo los pacientes vírgenes de infección o típicos herpes vesiculosos) del Hospital Saint-Louis entre
con una sífilis anterior tratada precozmente (chancro) son 1995 y 2005 se confirman estos datos. En análisis uni-
receptivos a Treponema pallidum, pero los demás no lo variante no son predictivos de una causa herpética, en
son [19] . comparación con una causa sifilítica, la localización, la
profundidad, la presencia de una induración, la duración
ni el número de ulceraciones, así como tampoco la exis-
Clasificación tencia de adenopatías. El dolor es un poco más frecuente
en el herpes (el 66% frente al 51%), p = 0,06. En análi-
Hay varias clasificaciones que en parte se superponen.
sis multivariante, sólo un diámetro superior a 10 mm se
La clasificación clínica distingue varias fases sucesivas: sífi-
asocia de manera significativa a la sífilis [23] . La frecuencia
lis primaria, sífilis secundaria (y sus recidivas hasta el 5.◦
de las infecciones microbianas añadidas (Neisseria gonorr-
año), sífilis latente asintomática y sífilis terciaria (cuta-
hoeae, Haemophilus parainfluenzae, Staphylococcus aureus y
neomucosa, neurológica, cardiovascular). La clasificación
estreptococo) en más de un tercio de los pacientes induce
terapéutica distingue la sífilis reciente (o precoz), la sífilis
a considerar su participación en las modificaciones de los
tardía y la neurosífilis. La sífilis reciente incluye la sífilis
signos clínicos.
primaria, la sífilis secundaria y la sífilis latente, de menos
La localización de chancro suele ser genital. En el varón
de 1 año para el CDC y de menos de 2 años para la OMS.
se localiza en el surco balanoprepucial, el frenillo del
La sífilis tardía incluye la sífilis terciaria y la sífilis latente
prepucio, el meato uretral y el glande. En 1934, Foll-
de más de 1 año o 2 años.
mann describió una forma excepcional con el aspecto de
una balanitis erosiva que precede al chancro. El chancro
subprepucial puede asociarse a una fimosis inflamatoria
 Semiología o a una linfangitis dorsal del pene. Más raramente, se
observa un chancro de la base del pene, del pubis o del
La semiología de la sífilis reciente no se ha modificado escroto. En la mujer, el chancro suele pasar inadvertido,
en los últimos años. Los últimos estudios no ponen en salvo cuando se localiza en los órganos genitales exter-
tela de juicio las descripciones clásicas. nos: labios mayores, labios menores, clítoris y comisura
posterior y horquilla vulvares. El chancro de la vagina es
infrecuente y el del cuello del útero, frecuente y a menudo
Sífilis primaria (Fig. 1) inadvertido. La localización anorrectal es frecuente en la
La sífilis reciente, que es la fase más precoz, se carac- persona homosexual y suele pasar inadvertido. El chancro
teriza por la aparición del chancro en el sitio de la anal se presenta como una fisura anal y el chancro rectal
inoculación, acompañado por una adenopatía satélite. puede ser asintomático o producir una rectitis dolorosa. La
El chancro aparece 10-90 días después del contagio (3 localización bucofaríngea (labial, bucal, amigdalina) no
semanas de promedio). Clásicamente, se trata de una exul- es rara y con frecuencia pasa inadvertida. Las otras locali-
ceración de 5-10 mm de diámetro, única, limpia, indolora zaciones (dedo, pezón, otras localizaciones cutáneas) son
e indurada a la palpación (con la mano protegida). La excepcionales.
induración se expresa por la imposibilidad de plegar entre La adenopatía satélite aparece 4-7 días después del
dos dedos la superficie de la ulceración, que forma un blo- chancro y la mayoría de las veces es unilateral. La constitu-
que con la induración subyacente. El chancro cicatriza yen numerosos ganglios pequeños y duros, en ocasiones
en 10-14 días con tratamiento y en 3-6 semanas sin tra- con un ganglio central más voluminoso (el «prefecto de
tamiento, al precio de una pigmentación residual en un la ingle» en la fosa inguinal), móviles, indoloros y sin
tercio de los casos. En realidad, el aspecto del chancro rara periadenitis. Sin tratamiento la adenopatía persiste varios
vez es tan característico. Se describen chancros múltiples, meses y con tratamiento desaparece después del chancro.
pequeños (<5 mm de diámetro), gigantes (>20 mm de diá- La localización de las adenopatías depende de la del chan-
metro), dolorosos e inflamatorios (en caso de infección cro: inguinal (órganos genitales externos masculinos y
añadida), mixtos (con chancro blando). El análisis de los femeninos), pélvica profunda (órganos genitales internos
signos clínicos clásicos de la ulceración sifilítica (tamaño, femeninos), inguinocrural (anal), submentoniana (labial),
submaxilar (amigdalina).
La sífilis primaria puede asociarse a otras enfermedades
de transmisión sexual: infección gonocócica (uretritis o
infección del chancro) en el 2-10% de los casos y uretritis
por Chlamydia trachomatis en el 11% de las ulceraciones
genitales [24] .

Sífilis secundaria (Figs. 2 a 7)


La sífilis secundaria, fase de diseminación septicémica
de Treponema pallidum, aparece unas 6 semanas después
del chancro, es decir, más o menos 2 meses después del
contagio. A veces coexiste con el chancro de inoculación
Figura 1. Chancro sifilítico balanoprepucial.
(entonces se habla de sífilis primosecundaria). Puede per-

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Figura 2. Sifílides papulosas. Figura 5. Condiloma plano.

Figura 3. Sifílides palmares.


Figura 6. Sifílides de la cara y boquera.

Figura 7. Sifílides erosivas del paladar.

lo que puede asociarse al chancro, y dura 1-2 meses. La


erupción consiste en máculas eritematosas de 5-15 mm de
diámetro, diseminadas por el tronco y la raíz de los miem-
bros, no confluyentes ni pruriginosas. El color rosa pálido
(flor de melocotonero), la ausencia de signos funcionales
y la regresión espontánea explican por qué la erupción
pasa inadvertida en la mayoría de los casos. Las sifílides
aparecen entre el 2.◦ -4.◦ mes, por lo que pueden coexistir
Figura 4. Sífilis secundaria maligna. con la roséola. Persisten entre 1-6 meses y las recurren-
cias son posibles. Las sifílides son pápulas de color rojo
sistir hasta 6 meses y las recurrencias cutaneomucosas se cobrizo, no pruriginosas, indoloras, de pocos milímetros
producen en el año siguiente (cf supra). Es más frecuente de diámetro, no confluyentes y dispuestas de forma simé-
en las mujeres y los varones homosexuales (chancros ocul- trica en el tronco, los miembros y la cara, a veces cubiertas
tos). Se caracteriza por una erupción cutánea polimorfa por una fina escama o rodeadas por una descamación cir-
(«la gran simuladora») casi constante (90%) y signos gene- cular perilesional (inconstante e inespecífica): el collar de
rales y locales. Biett. La localización palmoplantar, la más característica,
La erupción cutánea evoluciona en dos fases más o es inconstante. Las sifílides palmoplantares no son papu-
menos intrincadas: roséola (primera floración) y sifílides losas sino infiltradas y se apoyan en los pliegues palmares
(segunda floración). La roséola sifilítica marca el comienzo o plantares, lo que permite distinguirlas de las manchas
de la fase secundaria, aparece entre la 7.a -10.a semana, por hiperpigmentadas fisiológicas en las persona no caucási-

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cas. En la cara, las pápulas pueden agruparse a modo de Sífilis latente


corimbos, anillos o trazos en S, en especial sobre las meji-
llas y el mentón: se trata de las sifílides elegantes de Brocq. A continuación de la fase secundaria se presenta una
La lesión de los surcos nasogenianos se asemeja a una der- fase latente asintomática de larga duración. En el estu-
matitis seborreica y la del mentón, a un acné. La lesión dio de Oslo, el 23% de los pacientes con sífilis precoz
de los pliegues suele ser erosiva; las sifílides perineales y desarrolló recurrencias cutaneomucosas y lesiones poten-
genitales son múltiples, papuloerosivas, a menudo mace- cialmente contagiosas, el 90% de las cuales sobrevino en el
radas y con un aspecto vegetante (condiloma plano). El primer año (cf supra). Como consecuencia de estos datos,
polimorfismo clínico es considerable y la lesión puede pre- el CDC definió a la sífilis latente precoz (contagiosa) como
sentarse como escamas, costras, ulceraciones o necrosis, la de menos de 1 año de evolución y a la sífilis latente
pero debajo siempre se encuentra la pápula y nunca vesí- como la de más de 1 año. En cambio, la OMS sitúa la
culas. El acúmulo perifolicular y el aspecto circinado de línea de división a los 2 años.
las lesiones se observa con más frecuencia en las personas El CDC clasifica a la sífilis latente como latente precoz
de raza negra. si en los 12 meses precedentes se observó algunos de los
La lesión de las mucosas constituye las placas muco- criterios siguientes:
sas. Se trata de lesiones maculopapulosas redondeadas, de • una seroconversión o un aumento de 4 veces del título
límites nítidos e indoloras, que pueden volverse erosivas o de VDRL;
vegetantes según la localización. Coexisten con la roséola • un antecedente de sífilis primaria o secundaria no tra-
y las sifílides papulosas; son muy contagiosas y pueden tada;
persistir varios meses. Afectan a la lengua (se habla de • contacto sexual con una persona afectada por una sífilis
«placa segada», ya que las papilas tienen un aspecto abra- precoz confirmada o sospechada.
sivo como si se hubiera pasado una guadaña), la faringe Si ninguno de estos criterios está presente, la sífilis
y la laringe (ronquera), la comisura labial (falsa boquera latente se clasifica como sífilis latente tardía o de evolu-
con pápula paracomisural partida en dos y no una sim- ción indeterminada.
ple fisura sin relieve del fondo del pliegue) y los órganos En la práctica, esta distinción tiene poca importancia
genitales externos. porque, en ausencia de serodiagnóstico treponémico en
La lesión de las faneras es típica pero infrecuente. La el último año o en los 2 años precedentes, no es posi-
alopecia en claros se produce entre el 3.◦ -6.◦ mes, pro- ble distinguir el carácter reciente o tardío de una sífilis
voca caída del cabello a modo de placas incompletamente latente. En este sentido, en la mayoría de los casos se
lampiñas y circunscritas de 2-4 cm en la región tempo- desconoce la fecha de contaminación, los pacientes no
rooccipital sobre un cuero cabelludo intacto. La alopecia recuerdan síntomas que hagan presumir una sífilis pri-
difusa es muy infrecuente. Las cejas, las pestañas y la maria o secundaria y el título de anticuerpos no permite
barba también pueden estar afectadas y es posible obser- determinar la antigüedad de la infección. En la sífilis
var una perionixis o paroniquia con lesión del borde latente, los errores de clasificación son, por tanto, muy
ungueal. comunes.
Estos signos son el indicio de la diseminación de la El 25% de las sífilis latentes no tratadas avanza hacia la
infección y, por tanto, pueden acompañarse de poliade- sífilis terciaria, riesgo que es más frecuente tras 1 año de
nopatías y signos generales, a veces graves: fiebre, cefalea, evolución. Sin embargo, en la sífilis latente tardía, la indi-
síndrome meníngeo, poliartralgias, dolores óseos lanci- cación de la punción lumbar es discutida en ausencia de
nantes y alteración profunda del estado general. Los manifestaciones neurológicas [27] . En un estudio en el que
ganglios, duros e indoloros, son pequeños; se afectan se evaluó la práctica sistemática de la punción lumbar en
todas las áreas ganglionares, con predilección por las áreas la sífilis terciaria tardía, se demostró que esta conducta per-
occipitales, cervicales posteriores y epitrocleares. Persisten mitía obtener un índice de curación algo mayor (0,2%),
durante varios meses. La hepatoesplenomegalia es infre- pero la frecuencia de complicaciones (0,3%) excedía el
cuente, pero la hepatitis sifilítica no lo es. En un estudio de beneficio potencial [28] . Los autores llegaron a la conclu-
70 sífilis secundarias se encontraron seis casos de hepatitis, sión de que la punción lumbar de rutina, aun en caso de
es decir, el 8,6% [25] . La lesión hepática se caracteriza por sífilis latente tardía, no estaba justificada; esta conclusión
colestasis con aumento de ␥-glutamiltransferasas (GGT) ha sido compartida por otros [29] . El CDC sólo recomienda
y de fosfatasas alcalinas; la citólisis es más infrecuente y la punción lumbar en la sífilis tardía en presencia de signos
menos intensa; se asocia a un síndrome inflamatorio evi- neurológicos u oftálmicos, en caso de sífilis terciaria y ante
dente y a una serología treponémica positiva, que avanza el fracaso terapéutico (clínico y/o serológico) [30] . Estas
rápidamente hacia la curación con tratamiento específico recomendaciones que limitan la indicación de la punción
[25] lumbar son también las de la sección de enfermedades de
.
La lesión osteoarticular, infrecuente, consiste en una transmisión sexual de la Société Française de Dermatolo-
periostitis de los huesos largos y en una osteólisis loca- gie [31, 32] y de la rama europea de la Unión Internacional
lizada (geoda radiológica), con preferencia en el esternón contra las Infecciones de Transmisión Sexual (IUSTI) [33] .
y el cráneo. Sinovitis, bursitis, tenosinovitis y miositis
pueden ser causa de artralgias y de mialgias. Las manifesta-
ciones articulares de la sífilis secundaria también pueden Sífilis terciaria (Fig. 8)
adoptar el aspecto de una monoartritis inflamatoria o
de una poliartritis inflamatoria subaguda. El diagnóstico La sífilis terciaria agrupa en diversos grados lesiones
puede evocarse si se asocian una lesión inflamatoria obje- cutaneomucosas, óseas, cardiovasculares y neurológicas
tiva (con presencia de líquido o sinovia palpable) de una (cf infra); las dos últimas representan la gravedad de la
o varias articulaciones, una sífilis reciente, la ausencia de enfermedad. Estas lesiones, que asocian destrucción y
otras causas de artritis y la eficacia rápida y total del trata- esclerosis, hacen pensar más en una reacción de hiper-
miento con penicilina [26] . sensibilidad tardía y no son contagiosas. La mayoría
También pueden observarse: orquiepididimitis, glome- corresponde a lesiones granulomatosas con endarteritis,
rulonefritis, gastritis y hemoglobinuria paroxística por necrosis caseosa, destrucción y fibrosis. El paso de la sífi-
frío. lis secundaria precoz a la sífilis secundaria tardía y luego
La lesión del sistema nervioso central es frecuente es a la sífilis terciaria se caracteriza por la disminución del
esta fase. Es casi asintomática y no pone en tela de juicio número de lesiones (que se vuelven anulares), la apari-
los esquemas terapéuticos clásicos (cf infra). Se incluyen ción de un infiltrado granulomatoso, la disminución del
aquí lesiones oculares tales como uveítis, iridociclitis y número de Treponema pallidum y una contagiosidad cada
coriorretinitis. vez menor.

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aórtica, aneurisma de la aorta torácica calcificado y coro-


naritis. Desde el punto de vista histológico, se trata de una
panarteritis con una adventicia fibrosa con gomas milia-
res, fragmentación elástica de la media con endarteritis de
vasa vasorum y calcificación en «cáscara de huevo» de la
íntima.

Neurosífilis
El hecho de que la contaminación del sistema nervioso
central esté presente en realidad en todos los estadios de
la enfermedad justifica el tratamiento de la neurosífilis
aparte de la sífilis terciaria, con la cual está típicamente
relacionada. La neurosífilis despierta interrogantes rela-
tivos al significado de la neurosífilis asintomática, al
diagnóstico y al tratamiento de la neurosífilis, preguntas
que hasta hoy no tienen respuestas.

Figura 8. Sífilis terciaria del paladar. Neurosífilis asintomática


La necesidad de definir la neurosífilis asintomática sería
discutible si este diagnóstico no implicara un riesgo más
Sífilis terciaria benigna elevado de evolución hacia la neurosífilis sintomática o
Las lesiones cutaneomucosas y óseas de la sífilis tercia- la necesidad de un tratamiento distinto. Ahora bien, los
ria benigna afectan al 14% de los varones y al 16% de las criterios biológicos de neurosífilis no permiten definir un
mujeres, en promedio tras 11-12 años de evolución, con mayor riesgo de evolución hacia la neurosífilis. Para otros,
extremos de 1-46 años [16] . Las lesiones cutáneas se obser- la presencia de anomalías en el líquido cefalorraquídeo
van en el 70% de los pacientes, las lesiones mucosas en (LCR) es un factor de riesgo de aparición posterior de una
el 10% y las lesiones óseas, en el 9%. Los tubérculos cutá- neurosífilis sintomática.
neos son nódulos dérmicos indoloros, no pruriginosos, de Antes del tratamiento antibiótico, las alteraciones del
color rojo cobrizo, de 5-30 mm de diámetro y dispuestos LCR a modo de hipercelularidad, hiperproteinorraquia
en sacabocados en la espalda, la cara y los brazos. Con el (con aumento de las inmunoglobulinas [Ig] de clase IgG)
tiempo se atenúan o terminan en una ulceración seguida y positividad de las pruebas treponémicas se observa-
de atrofia central. Las lesiones cutáneas pueden agruparse ban con frecuencia en la sífilis reciente: el 10-20% de
y adoptar una configuración arciforme, circinada o serpi- los pacientes afectados por una sífilis primaria y el 30-
ginosa. Los gomas cutáneos son nódulos hipodérmicos, 70% de los afectados por una sífilis secundaria presentan
indoloros, no pruriginosos, de color rojo cobrizo, de 2-10 hipercelularidad e hiperproteinorraquia. Treponema palli-
cm de diámetro y únicos o poco numerosos. Evolucio- dum podía aislarse en el LCR en el 15-30% de los pacientes
nan hacia una ulceración granulomatosa con eliminación sin alteración del LCR. Estos hechos han sido confirmados
de un material caseoso y la formación de una cicatriz recientemente por Lukehart et al, quienes aislaron Tre-
retráctil. Los gomas mucosos se localizan en la boca, la ponema pallidum en el LCR en 12 (30%) de 40 pacientes
faringe, la laringe y las mucosas genitales. La lesión lin- con una sífilis precoz (2/7 sífilis primarias y 10/33 sífilis
gual puede complicarse con un infiltrado gomoso difuso, secundarias) y en ninguno de los que tenían una sífi-
borramiento de las papilas, atrofia mucosa, fisuras profun- lis latente. El LCR era normal en un tercio de los casos.
das y leucoplasias. La lesión mucosa bucal puede terminar, En 16 (41%) de 39 pacientes con una sífilis primaria y
asociada a las lesiones de osteocondritis nasal, en el hundi- secundaria se observó pleiocitosis (>5 leucocitos/mm3 );
miento de las estructuras nasales con una nariz en «pata de ocho (24%) de 33 pacientes con sífilis secundaria tenían
marmita». El goma genital puede provocar una ulceración una VDRL positiva en el LCR, frente a ninguno de los
denominada chancro redux. siete pacientes con una sífilis primaria [35] . La presencia
Las lesiones óseas consisten en una osteocondritis de los de treponemas en el LCR no es predictiva del fracaso
huesos largos (tibia en «hoja de sable», lesión clavicular), terapéutico [36] . Recientemente, Marra et al han estable-
una osteítis gomosa de los huesos planos (bóveda craneal) cido que la concentración en el LCR del ligando 13 de
y una osteítis esclerosa (hueso de marfil). Se han descrito la quimiocina CXC (CXCL13) correlacionaba con una
también artritis, bursitis, sinovitis y nódulos fibrosos yux- neurosífilis sintomática o asintomática en los pacientes
taarticulares. VIH+ [37] .
Los gomas y la fibrosis se pueden observar en diversos En la sífilis latente, las anomalías del LCR son más
órganos: hígado, páncreas, estómago, intestino, corazón, infrecuentes. Graman et al han analizado el LCR de 47
pulmones, parótidas, testículos, etc. pacientes asintomáticos, de los cuales 20 tenían una sífilis
de más de 1 año de evolución y 27, una sífilis de duración
desconocida; el 32% de los pacientes tenía una anoma-
Sífilis cardiovascular lía del LCR, nueve (19%) una proteinorraquia, seis (13%)
La sífilis cardiovascular se ha vuelto infrecuente desde una pleiocitosis y tres (6%) una VDRL positiva en el LCR.
la aparición del tratamiento antibiótico [34] . En el estu- De los ocho pacientes con títulos de la prueba RPR supe-
dio de Oslo, es una complicación del 13% de la sífilis riores a 1/128, tres (38%) tenían una VDRL positiva en
en el varón y del 7% en la mujer. Se descubre tras una el LCR [38] . Estos resultados condujeron a los autores a
evolución muy prolongada de al menos 20 años y el diag- recomendar una punción lumbar en la sífilis tardía o de
nóstico suele formularse después de 40 años de evolución duración desconocida, pero no se ha demostrado nin-
[16]
. Estudios posteriores han demostrado que esta lesión gún beneficio clínico de la punción lumbar sistemática.
se observa más a menudo en los varones, en los pacien- En cuanto a las anomalías del LCR en la sífilis precoz,
tes de raza negra y en las autopsias. Afecta a la aorta no ponen en tela de juicio los esquemas terapéuticos
y se complica, por orden decreciente, con insuficiencia corrientes.

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Neurosífilis sintomática El tabes o ataxia locomotora progresiva sobreviene por


término medio entre 15-20 años después de la sífilis pri-
Históricamente, el 9,4% de los varones y el 5% de las maria [39] . Es la consecuencia de una esclerosis de los
mujeres con una sífilis no tratada evolucionan hacia una cordones posteriores de la médula. Se manifiesta por los
neurosífilis [16] . La neurosífilis sintomática puede dividirse signos siguientes: anomalías pupilares, pérdida de los
en varios síndromes, los cuales pueden aparecen en cual- reflejos del tendón de Aquiles y rotuliano, dolores ful-
quier momento después de una sífilis primaria e incluso gurantes, signo de Romberg, signo de Argyll Robertson,
superponerse parcialmente. De forma clásica, se distingue trastornos de la sensibilidad profunda (diapasón, sentido
la meningitis, la sífilis vascular cerebral y la neurosífilis de la posición de los dedos del pie), ataxia, trastornos
parenquimatosa, la cual incluye parálisis general, tabes y vesicales, incontinencia fecal, trastornos de la sensibili-
gomas cerebrales. dad superficial (dolor, tacto), trastornos neurotróficos con
La meningitis aguda coexiste en la fase secundaria. Es artropatías de Charcot y males perforantes plantares.
infrecuente y se produce, por término medio, durante el Los gomas del sistema nervioso central son infrecuentes
primer año de evolución [39] . Asocia signos meníngeos y se manifiestan por un síndrome tumoral.
(cefaleas, náuseas, vómitos, rigidez de la nuca) y, en la Las manifestaciones oftalmológicas de la sífilis precoz
mayoría de los casos, signos basilares que indican una también han vuelto a ocupar el primer plano con la epide-
lesión del tronco cerebral. Los pares craneales que se afec- mia de sífilis en las personas homosexuales occidentales.
tan con más frecuencia son el VII (23%), el VIII (23%), el II No es más frecuente en los pacientes infectados por el VIH.
(15%), el III (12%) y el VI (12%) [39] . Son menos frecuentes Pueden afectarse todas las estructuras del ojo; las uveítis
la meningoencefalitis, las convulsiones y la hipertensión son las más frecuentes y las retinitis las más graves, con
intracraneal [40] . La meningitis crónica sobreviene 3-10 riesgo de necrosis de la retina. Los signos son tan multi-
años después de la infección. Se caracteriza por signos de formes que cualquier anomalía visual en un paciente de
lesión de los nervios craneales y de hipertensión intracra- riesgo debe conducir a la búsqueda de la sífilis. La uveítis,
neal. la retinitis y la neuritis óptica pueden aparecer de forma
La sífilis cerebrovascular se produce, por término aislada o asociada a una meningitis aguda o crónica, mien-
medio, entre 1-5 años después de la sífilis primaria [39] . tras que la atrofia óptica suele aparecer en los pacientes
Se trata de una endarteritis obliterante de los vasos cere- afectados por el tabes. En una serie de 20 casos de uveí-
brales. Se manifiesta por accidentes cerebrovasculares tis posterior sifilítica (coriorretinitis, vasculitis retiniana,
isquémicos: hemiplejía, afasia, convulsiones y alteración panuveítis, retinitis necrosante, neurorretinitis), el 50%
de los reflejos pupilares. Se incluye aquí la lesión medular: de los pacientes tenía una meningitis sifilítica [43] . Alre-
meningomielitis sifilítica (paraplejía espástica progresiva) dedor de un tercio de los pacientes queda con secuelas
y la sífilis vascular espinal (paraplejía repentina). oftálmicas.
La neurosífilis precoz sintomática se conoce desde hace Antes de que apareciera el tratamiento antibiótico, la
muchos años, pero volvió al primer plano hace 10 años parálisis general y el tabes eran las formas más frecuen-
debido a la gravedad y las dificultades diagnósticas ocasio- tes. Algunos autores han observado, desde la aparición de
nadas por la epidemia de sífilis precoz en homosexuales la antibioticoterapia, una mayor frecuencia de las formas
occidentales. Incluye parálisis de los pares craneales (en incompletas y de la sífilis vascular cerebral y meníngea,
particular, trastornos visuales y auditivos), meningitis aunque el tabes y la parálisis general seguirían siendo fre-
aguda, accidentes cerebrovasculares, alteraciones de la cuentes [44] . En 1972, Hooshmand et al publicaron 241
marcha y del equilibrio, cefaleas y trastornos de las funcio- casos de neurosífilis diagnosticados en Virginia (Estados
nes superiores. Podrían añadirse los accidentes medulares. Unidos) entre 1965 y 1970; la exploración neurológica era
Algunos son muy graves y potencialmente mortales. El anómala en el 75% de los pacientes, pero estas anomalías
boletín Morbidity and Mortality Weekly Report (MMWR) no eran, en su mayoría, características: arreflexia osteo-
de junio de 2007 comunicó 40 casos de neurosífilis pre- tendinosa rotuliana (66%), anomalías pupilares (44%),
coz en pacientes homosexuales con seropositividad para trastornos sensitivos profundos (33%) y retinopatía (12%)
el VIH en cuatro grandes ciudades estadounidenses en el [44]
. Los autores llegaron a la conclusión de que estas for-
período 2002-2004. Alrededor del 50% de estos pacientes mas atípicas eran producto de una exposición anterior a
no tenía ningún otro signo clínico de sífilis en el momento un tratamiento antibiótico inadecuado.
del accidente neurológico, de donde surge la necesidad En el LCR se observa hipercelularidad variable, en gene-
de pensar de manera sistemática en el diagnóstico de ral moderada (a menudo inferior a 10 elementos/mm3 ),
sífilis ante una persona joven que sufre un accidente con predominio de linfocitos (el 60% de los casos) o de
neurológico. El 40% tenía anomalías en la tomografía neutrófilos (el 40% de los casos); la presencia de muchos
computarizada (TC) o en la resonancia magnética (RM) plasmocitos es típica pero infrecuente y la eosinofilia es
cerebrales. Un tercio de los pacientes controlados seguía excepcional [40] . La hiperproteinorraquia, observada en el
teniendo síntomas 6 meses después del tratamiento con 40-45% de los casos, varía entre 0,45-1 g/l; la hipergamma-
penicilina intravenosa. Este informe no permite establecer globulinemia de distribución oligoclonal es más común
un riesgo especial en los pacientes VIH+ [41] , como tam- (alrededor de dos tercios de los casos) y la hipoglucorra-
poco lo permite el estudio retrospectivo de 27 casos de quia es muy infrecuente [40] .
neurosífilis en pacientes VIH+ de Sao Paulo (Brasil) [42] .
La parálisis general suele producirse, por término Sífilis congénita
medio, 10-15 años después de la sífilis primaria [39] .
Predominan los trastornos de las funciones superio- El aumento de la sífilis en las mujeres, sobre todo toxi-
res, de aparición progresiva y gravedad creciente: falta cómanas, explica el aumento de la sífilis congénita en
de concentración, trastornos de la memoria, insomnio, Estados Unidos. La sífilis congénita es la consecuencia
irritabilidad y alteración de las capacidades intelectua- del paso transplacentario de Treponema pallidum, posible
les. Evoluciona hacia la demencia. Al cuadro se suman en los dos últimos trimestres del embarazo. El riesgo de
manifestaciones psiquiátricas (agitación, alucinaciones, contaminación fetal es mayor cuando la sífilis materna
depresión, delirio megalomaníaco, brotes paranoicos) y es reciente y el parto se aproxima. El riesgo se considera
neurológicas (abolición de los reflejos osteotendinosos, nulo antes de la 9.a semana de gestación (11 semanas de
signo de Argyll Robertson con anisocoria, miosis, aboli- amenorrea) y en caso de sífilis tardía de más de 8 años
ción de los reflejos fotomotores, disartria, trastornos de de evolución. En caso de sífilis materna sintomática y
la pronunciación y de la escritura, temblores, convulsio- reciente, la mortalidad (in utero, neonatal) es del 50%
nes). Evoluciona de forma espontánea hacia la muerte en y, entre los recién nacidos, el 50% desarrolla una sífilis
5 años en el 90% de los pacientes. congénita sintomática y el 25% se negativiza en el plano

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serológico. En caso de sífilis materna latente y reciente, la Estigmas


mortalidad es del 20%; entre los recién nacidos se observa
Los estigmas son las secuelas de las lesiones de la sífilis
un 40% de sífilis congénita y un 20% de prematuridad. En
congénita. Las más típicas son las rágades y las anomalías
caso de sífilis materna tardía la mortalidad es nula, pero
dentales. La rinitis destructiva se complica con rágades,
de todos modos se observa un 10% de prematuridad y un
nariz en «silla de montar», maxilar corto y paladar ojival.
10% de sífilis congénita, riesgo que disminuye de manera
Las complicaciones de la periostitis son la protuberancia
progresiva y es desdeñable después del 8.◦ año de evo-
frontal de Parrot, el ensanchamiento clavicular paraester-
lución. Se distinguen la sífilis congénita precoz, la sífilis
nal de Higoumenakis y la deformación tibial en «hoja de
congénita tardía, la sífilis fetal y los estigmas o lesiones
sable». Los gomas mucosos pueden provocar una perfora-
secuelares [45] . En un estudio de 694 recién nacidos con
ción palatina. Las anomalías dentales son los dientes de
sífilis congénita, se determinó que el 87% se encontraba
Hutchinson (incisivos cortos con borde libre ranurado)
asintomático en el momento del nacimiento [46] .
y de Fournier (molares cupuliformes). La tríada de Hut-
chinson se compone de alteraciones dentales, queratitis
Sífilis congénita precoz intersticial y sordera.
La sífilis congénita precoz se revela desde el nacimiento
hasta los 2 años de vida, pero el 80% de los casos se diag-
nostica antes del primer año. Es el equivalente congénito Sífilis e infección por el virus de la
de la sífilis secundaria. Como ésta, asocia signos cutaneo-
mucosos, óseos, meníngeos y diversas lesiones viscerales. inmunodeficiencia humana
La lesión cutaneomucosa, la más frecuente, se parece a La sífilis, como las otras ulceraciones genitales (chancro
la de la sífilis secundaria: roséola, sifílides papulosas, pla- blando y herpes), facilita la infección por el VIH a través de
cas mucosas y paroniquia. Más singulares son el pénfigo las brechas mucosas y la afluencia de células inflamatorias
palmoplantar, las ampollas subcórneas palmoplantares infectables por el VIH. En el metaanálisis de Röttingen, el
(ricas en treponemas) y la rinitis costrosa, intensa, bila- riesgo relativo fue de 2,5 (2,1-3,1) para la sífilis, frente a
teral, previa a la aparición de la erupción cutánea, rica 2,7 para el herpes y 2,1 para el chancro blando [47] .
en treponemas y muy destructiva, lo que genera secuelas La epidemia de sífilis en homosexuales de países des-
considerables. arrollados no se acompañó en todas partes de un aumento
La lesión ósea asocia osteocondritis de los huesos lar- repentino de las infecciones por el VIH, probablemente
gos, la mayoría de las veces latente, frecuente desde el debido a que muchos de estos pacientes ya estaban
nacimiento y de hallazgo radiológico, y periostitis, más infectados por el VIH y eran poco contagiosos con el trata-
infrecuente y tardía. La imagen radiológica de la osteo- miento antirretroviral, pero también a raíz de numerosos
condritis epifisaria es típica: engrosamiento y esclerosis casos de sífilis causada por el sexo oral, menos expuesto a
de la línea epifisaria e hipodensidad de la zona subya- causar una contaminación por el VIH. Sin embargo, por
cente (aspecto de banda oscura y banda clara). La imagen ejemplo en Francia, los homosexuales masculinos son la
radiológica de la periostitis consiste en un engrosamiento única población en la que no han disminuido los nuevos
perióstico, a veces multiestratificado, visible en las tibias, casos de infección por el VIH [48] . En París, los índices de
las clavículas y los huesos del cráneo. Estas anomalías seroprevalencia del VIH entre los jóvenes homosexuales
óseas se resuelven de manera espontánea antes de 1 año. son especialmente elevados, mientras que en un estudio
La hepatoesplenomegalia es frecuente y precoz como alemán se sugiere un nexo posible entre una nueva infec-
las adenopatías; puede asociarse a una hepatitis, más bien ción por el VIH y una sífilis reciente [49] .
colestática, y a pancitopenia. En la sífilis, el número de linfocitos CD4+ y la carga
La lesión meníngea es frecuente y rara vez sintomá- viral VIH aumenta de forma transitoria en los pacientes
tica, por lo que se puede detectarse a partir de la punción coinfectados por el VIH [50] . En un caso, esta positivación
lumbar sistemática. de la carga viral VIH se acompañó incluso de la aparición
Las lesiones renal (glomerulopatía), pulmonar, ocular o de mutaciones de resistencia a los antirretrovirales [51] .
genital son menos comunes. Estos casos son excepcionales y la reactivación viral no
suele tener consecuencias.
Sífilis congénita tardía Los dermatólogos han señalado atipias clínicas: sífilis
La sífilis congénita tardía se manifiesta después de los primaria con chancro de inoculación gigante nodular o
2 años de edad. Es el equivalente congénito de la sífi- a modo de ulceración muy profunda, sífilis secundaria
lis terciaria; el 40% de las formas son sintomáticas y el «maligna», queratodermia palmoplantar aislada, orquitis
60% asintomáticas, detectadas mediante serodiagnóstico sifilítica crónica, sifílides ulceradas, sífilis terciaria benigna
de las treponematosis. Las lesiones oculares son frecuen- gomosa [52, 53] . La publicación de casos dispersos no per-
tes y se presentan a modo de queratitis, iridociclitis y mite inferir que la sífilis cutánea sea más atípica en
coriorretinitis; sin tratamiento, pueden progresar hacia la la infección por el VIH que fuera de ésta. En realidad,
ceguera. Entre las manifestaciones neurológicas prevalece dos estudios comparativos prospectivos efectuados en
la meningitis de diagnóstico biológico, mientras que la Baltimore y Nueva York con 341 y 51 pacientes, respec-
meningitis sintomática es más rara; la parálisis general, el tivamente, sugieren que las manifestaciones clínicas de
tabes, la sífilis cerebral vascular y la mielitis son excepcio- la sífilis cutánea en los pacientes infectados por el VIH
nales. La lesión del oído interno, poco común y tardía, se son semejantes a las de los pacientes seronegativos para
expresa por vértigos y puede complicarse con sordera. Más el VIH [26] . A lo sumo, se comprueba una tendencia hacia
raramente se observan gomas cutaneomucosos, hidrartro- el aumento de la frecuencia de chancros múltiples en los
sis de la rodilla, hepatoesplenomegalia, nefritis subaguda, pacientes seropositivos [36, 54] y de los chancros persisten-
aortitis, neumonía intersticial y hemoglobinuria paroxís- tes en la fase secundaria [54, 55] , una mayor frecuencia de la
tica por frío. reacción de Herxheimer [54] y un predominio de la sífilis
secundaria [55] . Todas las formas «atípicas» en los pacien-
tes VIH+ ya habían sido descritas hace mucho tiempo por
Sífilis fetal otros autores.
La sífilis fetal se revela desde el nacimiento y Se han publicado algunos casos de neurosífilis precoz
corresponde a una forma septicémica. Asocia hepa- durante la infección por el VIH, pero son excepciona-
toesplenomegalia, osteocodritis, hidrocefalia, neumonía les. Lukehart et al [35] , así como Rolfs et al en un estudio
intersticial, pancitopenia e hiperplasia medular. La evolu- prospectivo aleatorizado, han demostrado claramente que
ción suele ser mortal. en la sífilis precoz, según el estado VIH, no variaba la

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E – 98-445-A-10  Sífilis

prevalencia de anomalías neurológicas clínicas, hiperpro-  Diagnóstico de laboratorio


teinorraquia, positividad de la VDRL en el LCR (uno de los
criterios clásicos suficientes para definir una neurosífilis) Métodos diagnósticos
y la positividad de la reacción en cadena de la polimerasa
(PCR) del Treponema pallidum en el LCR [36] . Sólo la hiper- Estudio directo
celularidad del LCR es más frecuente en los pacientes VIH El estudio directo se hace en el microscopio con fondo
positivos, algo típico en estos pacientes, aun en ausencia negro. El material es la serosidad obtenida por el raspado
de sífilis [35, 36] . Después, el estudio de Marra et al produjo del fondo del chancro o de sifílides papulosas erosivas,
cierta confusión. Este estudio incluyó en ocho centros, de como las de los pliegues y la región perineogenital y, a
forma prospectiva, 326 pacientes (290 evaluables) afecta- veces, de la piel. En cambio, la presencia de espiroque-
dos por sífilis (con positividad de las pruebas treponémicas tas saprofitas de la cavidad bucal hace que sea inútil una
y no treponémicas) y que respondían a las indicaciones recogida bucal, aun cuando las espiroquetas saprofitas se
de la punción lumbar que recomendó el CDC en 1993, es pueden distinguir, en teoría, de Treponema pallidum por-
decir: signos neurológicos u oculares, sífilis tardía (sobre que sus espiras son más irregulares, a veces más largas y
todo en caso de RPR superior a 32), fracaso terapéutico, tienen menor movilidad que Treponema pallidum. El tre-
infección por el VIH (en particular, en caso de sífilis tardía) ponema también se puede observar en microscopia con
y, por último, la intención de instaurar un tratamiento sin contraste de fase. El hecho de repetir este estudio tres veces
penicilina. Se compararon 65 casos de neurosífilis en los con 3 días de intervalo es inútil si un bioquímico con
que ésta fue definida por una VDRL positiva en el LCR o experiencia efectúa minuciosamente la lectura del frotis.
por más de 20 leucocitos/mm3 en el LCR. Los autores esta- El estudio directo en el microscopio con fondo negro es
blecieron como factores predictivos de neurosífilis una el único argumento del diagnóstico en las circunstancias
RPR superior o igual a 32 (cociente de posibilidades [OR]: en que la serología no es contributiva: chancro de la sífilis
10,85 [2,69–43,8] p < 0,001 en los pacientes VIH negativos primaria, secreciones nasales y lesiones cutáneas erosivas
y 5,98 [2,43–14,73] p < 0,001 en los pacientes VIH positi- de la sífilis congénita precoz.
vos). Además, en los pacientes VIH positivos, una concen- La inmunofluorescencia con ayuda de anticuerpos
tración de CD4 inferior a 350/mm3 aumentaría el riesgo monoclonales sobre la serosidad del chancro es una alter-
de neurosífilis (OR: 3,10 [1,40–6,86] p < 0,005). A raíz de nativa útil cuando no se dispone de los microscopios
sus criterios de inclusión, este estudio en ningún caso es de fondo negro. En un estudio comparativo entre 128
representativo de la sífilis precoz: sólo cinco casos de sífilis pacientes, los anticuerpos monoclonales permitieron el
primaria y 59 de sífilis secundaria; en su mayoría se trataba diagnóstico de sífilis primaria en el 73% de los casos, frente
de sífilis latentes esencialmente tardías. La sobreexpresión al 79% para el estudio con microscopio de fondo negro y
de pacientes VIH+ es considerable: 206 VIH+ y 84 VIH−, al 92% para la FTA-Abs [60] .
entre los cuales sólo había cinco casos de sífilis precoz.
La práctica de la punción lumbar no fue aleatorizada y se
hizo sobre todo en los pacientes VIH+, según el criterio Serodiagnósticos
del clínico. Varias conclusiones de este estudio son poco El serodiagnóstico treponémico está bien estandari-
razonables y paradójicas: ninguna correlación entre neu- zado, es simple, de bajo coste y fiable; se basa en la
rosífilis y signos neurológicos u oculares, un mayor riesgo asociación de una prueba no treponémica (inespecífica)
de neurosífilis en la sífilis precoz y un mayor riesgo si la y una prueba treponémica (específica). También hay otras
VDRL es elevada (estos dos criterios están relacionados). técnicas en desarrollo.
Además, los criterios únicamente biológicos de definición
de la neurosífilis eran discutibles. Al respecto, la leuco- Pruebas no treponémicas
citosis del LCR es más frecuente en los pacientes VIH+ Las pruebas no treponémicas, inespecíficas o anticar-
inmunodeprimidos indemnes de sífilis y es probable que diolipinas usan un antígeno que detecta anticuerpos
la positividad de las RPR en el LCR no tenga valor en la sífi- anticardiolipina ubicuos, presentes en numerosas célu-
lis precoz si los títulos séricos están elevados [35] . Los auto- las animales o vegetales. Los anticuerpos anticardiolipina
res tienden a recomendar la realización de una punción (o reaginas) se dirigen contra un fosfolípido liberado
lumbar en la sífilis secundaria, cualquiera que sea el estado por el endotelio vascular en la vasculitis sifilítica (y en
VIH, una indicación cuya inutilidad está validada desde las vasculitis de otro origen) y no contra un antígeno
hace décadas [56] . A lo sumo, esta exploración se puede treponémico. Las pruebas actuales son reacciones de aglu-
recomendar con prudencia a los pacientes VIH+ con sífilis tinación (o microfloculación): VDRL y RPR. Las antiguas
tardía, si la VDRL es alta y los CD4 están bajos. Otro estu- pruebas no estandarizadas (Kahn, Kline, Meinicke) y las
dio publicado poco después también es discutible: a partir pruebas de desviación del complemento (Kolmer, Bordet-
de 112 casos retrospectivos de pacientes VIH+ a los que se Wassermann) ya no se usan. Las ventajas de la VDRL y la
hizo una punción lumbar por sífilis, 26 diagnósticos de RPR son su simplicidad, bajo coste, rapidez y positividad
neurosífilis fueron establecidos a partir de los mismos cri- precoz (a partir de la 4.a semana, es decir, entre los 5-10
terios ya señalados; de ellos, 11 tenían una TPHA negativa días siguientes al chancro). Otra ventaja es la obtención
en el LCR, lo que sería incompatible con todos los datos de de un título de anticuerpos al diluir el suero del paciente;
las publicaciones. La neurosífilis sería más frecuente con el título es lo contrario de la última dilución considerada
la RPR elevada, pero no con los CD4 bajos [57] . positiva y recibe una puntuación de 1-1.024 unidades con
Estas comprobaciones no han sido confirmadas por los razón 2. Refleja con bastante fidelidad la evolución de
estudios más recientes. Así, en la serie de 279 casos de sífi- la enfermedad (que alcanza un título máximo en la fase
lis publicada por Farhi et al, no hay ninguna diferencia secundaria o latente precoz) y la antigüedad de la conta-
significativa entre los pacientes seropositivos y seronega- minación (que disminuye de forma progresiva, incluso sin
tivos para el VIH con relación al aspecto de las lesiones tratamiento, hasta la fase de latencia tardía). Sobre todo,
cutáneas, la presencia de lesiones mucosas y la frecuencia la disminución del título de la VDRL (o de la RPR) cuan-
de una lesión neurológica u ocular [58] . Muchos autores titativa es el criterio principal de la vigilancia serológica
tienen la convicción de que los pacientes infectados por posterapéutica. Dado que la negatividad espontánea de la
el VIH sufren más a menudo una lesión ocular [59] . Esto no VDRL es muy infrecuente, hoy en día es el mejor crite-
se basa en ningún estudio controlado. Aunque no existe rio serológico de curación de la sífilis. La positividad de
ninguna recomendación especial respecto a la práctica sis- la VDRL puede ser tan elevada que, con diluciones están-
temática de un fondo de ojo en la sífilis, se aconseja la dar, la prueba serológica es negativa y sólo las diluciones
exploración minuciosa de la visión, cualquiera que sea el sucesivas del suero hacen aparecer la positividad: es el
estado VIH. fenómeno de zona, que atañe al 2% de las sífilis secun-

10 EMC - Dermatología
Sífilis  E – 98-445-A-10

Cuadro 1.
Causas de falsos positivos de las pruebas treponémicas y no treponémicas (según Hook N. Engl J Med 1992;326:1060-9).
Causas infecciosas Causas no infecciosas
Pruebas no treponémicas o Neumopatía por neumococo, escarlatina, lepra, Embarazo
reagínicas (VDRL, RPR) donovanosis, fiebres recurrentes, endocarditis
lenta, rickettsiosis, psitacosis, leptospirosis, chancro
blando, tuberculosis, infecciones por micoplasmas
Tripanosomiasis, paludismo Hepatopatía crónica
Viruela del ganado vacuno, varicela, sarampión, Cáncer en fase terminal
paperas, mononucleosis infecciosa, hepatitis viral,
infección por VIH
Toxicomanía intravenosa
Mieloma
Edad avanzada
Enfermedad del tejido conjuntivo
Transfusiones múltiples
Pruebas treponémicas (FTA, TPHA) Enfermedad de Lyme, leptospirosis, fiebres Lupus eritematoso sistémico
recurrentes, lepra
Paludismo
Mononucleosis infecciosa

VDRL: venereal disease research laboratory; RPR: prueba de reagina plasmática rápida; VIH: virus de la inmunodeficiencia humana; FTA: anticuerpos
fluorescentes de treponema; TPHA: análisis de hemaglutinación de Treponema pallidum.

darias y sería más frecuente en caso de embarazo y en la Ig humana marcado con fluoresceína. La lectura se efectúa
infección por VIH. Si el clínico sospecha una falsa nega- con microscopio ultravioleta, por lo que es necesario con-
tividad de la VDRL (o de la RPR), debe comunicarla al tar con un laboratorio bien equipado. La fluorescencia
laboratorio. El inconveniente de estas pruebas es su falta de los treponemas confirma la presencia en el suero del
de especificidad; las causas de falsos positivos (aunque enfermo de anticuerpos específicos, aunque la FTA simple
el título de la VDRL rara vez es superior a 8 unidades) se considera poco específico. Para aumentar la especifici-
son numerosas (Cuadro 1). Debido a su sensibilidad y dad de esta técnica, se ha elaborado la FTA-Abs. En un
bajo coste, las pruebas no treponémicas se usan para la primer momento, el suero del enfermo es absorbido por
detección y, si son positivas, se confirman con las prue- treponemas saprofitos sonicados de Reiter, lo que neu-
bas treponémicas. La lectura de estas pruebas es visual, traliza los anticuerpos no treponémicos que originan los
está sometida a cierta subjetividad cuando los títulos son falsos positivos. Las ventajas de la FTA-Abs son su precoci-
bajos y no son automatizables. dad (a partir de la 3.a semana, es decir, casi contemporánea
con el chancro), su gran sensibilidad, su especificidad y
Pruebas treponémicas
la posibilidad de detectar anticuerpos de clase IgM (inte-
En las pruebas treponémicas o específicas se usa un antí- rés en el lactante nacido con una serología positiva). Los
geno treponémico. Son más sensibles y más específicas inconvenientes son una técnica compleja, así como su
que las pruebas reagínicas. La TPHA no es costosa y se falta de utilidad para el seguimiento de la evolución pos-
emplea de rutina, salvo en los países en desarrollo; en terapéutica y el diagnóstico de la neurosífilis, ya que la
cambio, la FTA es cara. La positivación se produce un poco especificidad y sensibilidad de la FTA-Abs-LCR son meno-
antes que en las pruebas reagínicas. res que las de la FTA-LCR. Al respecto, aunque un título
TPHA. Es una reacción de aglutinación que se obtiene elevado es ciertamente el indicio de una infección reciente
confrontando el suero del paciente con treponemas páli- y, por tanto, de una enfermedad activa, el descenso del
dos sonicados y previamente fijados a eritrocitos de título de los anticuerpos no permite, sin embargo, eva-
animales. La presencia de anticuerpos séricos antitrepo- luar el éxito o el fracaso del tratamiento. La complejidad
némicos forma un complejo que aglutina los eritrocitos. de la prueba y la subjetividad de la lectura han dado lugar
Las ventajas de esta técnica son su simplicidad (kit), su a su abandono progresivo.
sensibilidad y su muy buena especificidad. Salvo en los La FTA-IgM podría ser un marcador de sífilis evolu-
primeros 5 días del chancro, una TPHA negativa per- tiva pero no de sífilis reciente [61] . Es poco sensible y
mite descartar una sífilis (mientras no se trate de un error poco específico; puede ser positivo en caso de sífilis
técnico). Una TPHA positiva indica, excepto en algunos terciaria y negativo en caso de sífilis reciente. Su utili-
fasos positivos excepcionales (Cuadro 1), una treponema- dad en la sífilis congénita ya no es reconocida por el
tosis reciente o de larga data, pero no existe correlación CDC [30] .
entre el título de los anticuerpos y la progresión de la Prueba de inmovilización del treponema (TPI) o
enfermedad. Las variantes de la TPHA son: prueba de prueba de Nelson. Ha sido abandonada, pues necesita
microhemaglutinación (MHA-TP) y hemadsorción de fase la manipulación de treponemas vivos, la positivación se
sólida de IgM (IgM-SPHA), la cual permite detectar las produce al final de la fase primaria y no permite evaluar
IgM séricas. Estas pruebas se usan poco. Otra prueba, el fracaso o la eficacia del tratamiento.
la TPPA (aglutinación de partículas para Treponema palli-
dum), utiliza la aglutinación de partículas inertes cubiertas
por antígenos treponémicos y tiene mejor rendimiento
que la TPHA. La TPHA y la TPPA son pruebas de lectura Otros serodiagnósticos
visual, es decir, no automatizables. Los falsos positi- Enzimoinmunoanálisis (EIA). Las pruebas EIA, de
vos con títulos bajos son posibles en función de los las que existen muchas formas con diversos antígenos
lotes. treponémicos (TP N15, 17, 47 o lisado de treponemas),
FTA. Es una prueba de inmunofluorescencia indirecta. tienen una excelente sensibilidad (positivación precoz
Confronta el suero diluido del paciente con una suspen- a los 7-10 días del chancro), una excelente especifici-
sión de treponemas pálidos muertos, cepa Nichols; la dad (salvo algunos falsos positivos excepcionales) y, sobre
reacción se manifiesta con la adición de suero animal anti- todo, son automatizables. Su coste es mayor que el de la

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E – 98-445-A-10  Sífilis

TPHA/VDRL. La mayoría de las veces no son cuantitativas Cuadro 2.


(detección) [30] . Interpretación esquemática de la serología estándar del análi-
Pruebas rápidas. Se hacen con partículas de poliesti- sis de hemaglutinación de Treponema pallidum (TPHA)-venereal
reno o de látex, recubiertas por antígenos treponémicos disease research laboratory (VDRL).
recombinantes TP 47, TP 15, TP 17 (card test, syphi- Reacciones Interpretación
lis fast) y una técnica de inmunocromatografía de flujo
lateral. Hay un gran número de ellas y sus rendimien- TPHA − Ausencia de treponematosis
tos son muy variables, pero en general mediocres. Sin VDRL − Sífilis en incubación
Sífilis primaria en los primeros 5-10 días del
embargo, pueden ser útiles sobre todo en las mujeres
chancro
embarazadas sin posibilidades de acceder a centros espe-
Sífilis curada tratada precozmente
cializados [62] . Una nueva prueba que detecta de forma
simultánea anticuerpos treponémicos y no treponémicos TPHA − Falso positivo (cf Cuadro 1)
parece producir mejores resultados (Point of care [POC] VDRL + Sífilis primaria
dual test) [63] . TPHA+ Secuela serológica de una treponematosis no
Western blot. La técnica de inmunoblot ha sido apli- VDRL − venérea
cada a la de la sífilis. En un estudio comparativo, la Sífilis a priori curada
sensibilidad del western blot alcanzó el 93,8% y la especifi- Sífilis primaria
cidad, el 100%, frente al 91,7% y el 92%, respectivamente,
de la FTA-Abs. La prueba se consideraba positiva en pre- TPHA + Treponematosis no venérea (zona de endemia)
VDRL + o venérea, tratada o no, curada o no
sencia de una reacción a tres de cuatro antígenos mayores
de Treponema pallidum de 15, 17, 44 y 47 kDa. El antígeno
TpN15 sería el más sensible y específico [64] . El fraccio- Figura 9. En el Cuadro 2 se expone la interpretación esque-
namiento de los anticuerpos IgM e IgG es posible. Esta mática de las pruebas serológicas estándar.
técnica se ha aplicado a la sangre fetal para el diagnóstico El diagnóstico de la sífilis primaria se basa en el estudio
de la sífilis congénita: la reactividad de las IgM al antígeno directo. La FTA es la primera en positivarse; la FTA-IgM
de 47 kDa se revela como un nuevo marcador biológico sérico es mucho menos sensible que la FTA. La VDRL suele
de la sífilis congénita [65] . positivarse después de la TPHA, pero no siempre. Sin tra-
tamiento, el título de anticuerpos aumenta con rapidez y
Reacción de amplificación genómica estas reacciones son positivas en todo el período secun-
Dado que el genoma de Treponema pallidum es cono- dario. En la sífilis latente precoz, TPHA, FTA y VDRL se
cido, para demostrar la bacteria se pueden usar dianas de mantienen positivos; los dos primeros son positivos en la
amplificación: la más empleada es el gen de la proteína sífilis latente tardía y en la sífilis terciaria, mientras que
de membrana externa básica (OMP 47 kDa), con menos la VDRL se negativiza de forma espontánea en alrede-
frecuencia el gen de la polimerasa A (pol A) o de la poli- dor del 25% de los casos. La positividad persistente de
merasa I (pol I) e incluso el ácido ribonucleico (ARN) 16S la TPHA y la FTA contrastan con la tendencia espontánea
ribosomal. La sensibilidad de la PCR es mejor en los frotis a la negativización de la VDRL.
de lesiones cutáneas y mucosas (primarias o secundarias) La negativización de la VDRL depende de la precoci-
que en la sangre. La sensibilidad es superior a la del fondo dad del tratamiento; en la sífilis precoz puede obtenerse
negro, pero la diferencia no siempre es significativa y la la negativización; ésta es más aleatoria en la sífilis tardía;
PCR tiene la desventaja de no dar una respuesta inmediata la vigilancia terapéutica se apoya en el descenso del título
[66, 67]
. En la sangre, la sensibilidad es mejor en las células de la VDRL, pero la persistencia de la serología positiva
mononucleares de sangre periférica que en el suero y el no debe interpretarse como fracaso. La TPHA rara vez se
plasma. Además, la PCR permite identificar mutaciones negativiza, ni siquiera en el caso de un tratamiento muy
de resistencia a los antibióticos si son conocidas; es el caso precoz.
de la mutación de resistencia a los macrólidos en el gen
que codifica la subunidad 23S del ribosoma bacteriano Neurosífilis
(mutación 2058 A-G) [3] . También permite la vigilancia
El diagnóstico de la neurosífilis se basa en la clínica,
epidemiológica de los subtipos de Treponema pallidum,
así como en los resultados de la punción lumbar y de los
algunos de los cuales (14d/f) podrían tener un tropismo
serodiagnósticos en la sangre y el LCR.
singular en el sistema nervioso [68, 69] .
Antes de los antibióticos, la neurosífilis asintomática,
Cada vez se usan más las PCR multiplex, que permiten
diagnosticada por la positividad de la VDRL en el LCR,
la detección de Treponema pallidum, Haemophilus ducreyi y
está presente en el 6-10% de los pacientes afectados por
virus del herpes simple de tipo 2 en una sola muestra [70] .
una sífilis latente tardía [38] .
En la neurosífilis, la TPHA y la FTA casi siempre son posi-
Histología tivos en la sangre, mientras que, de forma excepcional, la
El aspecto histológico de la sífilis es poco específico. La VDRL podría ser negativa en las sífilis de muy larga data.
imagen más característica de la sífilis secundaria consiste En el LCR, la VDRL se considera muy específica pero poco
en un infiltrado inflamatorio más o menos denso de la sensible: la sensibilidad varía entre el 27-70% según el
dermis, en el que predominan los linfocitos y los plas- estudio de que se trate [35, 72] . Se admite que la VDRL-LCR
mocitos con lesión de los vasos; la lesión epidérmica más es negativa en el 30-50% de los pacientes con neurosífilis
frecuente es la exocitosis [71] . La técnica de Whartin-Starry activa sintomática y siempre es negativa si la VDRL en la
o la hibridación in situ pueden demostrar espiroquetas en sangre también es negativa [73] . Una VDRL positiva en el
la lesión cutánea (tinción argéntica). LCR es el criterio más aplicado para confirmar una neuro-
sífilis. Es probable que esto sea así en la sífilis tardía. Sin
embargo, su título en el LCR sería más bien paralelo al
Diagnóstico positivo título de la VDRL sérica en la sífilis secundaria [30] , lo que
podría ser el punto de partida de un razonamiento circular
Sífilis común que conduciría a algunos autores a recomendar una pun-
En la gran mayoría de los casos, la combinación de ción lumbar a todos los pacientes con sífilis secundaria.
una prueba treponémica (TPHA o FTA) y no treponémica La falta de sensibilidad de la VDRL en el LCR en caso de
(VDRL) es suficiente para confirmar o invalidar el diag- neurosífilis ha conducido a estudiar otras técnicas sero-
nóstico de sífilis. La cronología de la seroconversión y lógicas [74] . La FTA se considera como más sensible que
la seropositividad en las diversas fases se ilustran en la la VDRL. En cambio, ante la positividad de la FTA en el

12 EMC - Dermatología
Sífilis  E – 98-445-A-10

TPHA

Serodiagnósticos
FTA
Nelson

Contagio
VDRL
j0 j30 j60 3e mes 6e mes 1 año 2 años 10 años
j5 j10 j15 ΣIIf2 ΣIII
ΣIIf1
Frecuencia de las
manifestaciones Σp Σt
clínicas 50 ΣI Σ latente (o serológica)

Lesión
meníngea
100
%
Figura 9. Evolución de las sífilis no tratadas. : sífilis; I: primaria; II: secundaria; IIf1 : secundaria de primera floración; IIf2 : secundaria de
segunda floración; III: terciaria; p: precoz; t: tardía; d0: primer día del chancro; TPHA: análisis de hemaglutinación de Treponema pallidum;
FTA: anticuerpos fluorescentes de treponema; VDRL: venereal disease research laboratory.

suero, el LCR puede revelarse falsamente positivo al ser basan en estudios de larga data [71] . Según el estudio de
contaminado por una cantidad de sangre ínfima y no Marra, la proteinorraquia y la celularidad del LCR se nor-
detectable a simple vista. Se considera que la sensibilidad y malizarían más lentamente en los pacientes VIH positivos
[77]
la especificidad de la TPHA-LCR, el MHA-LCR y la FTA-LCR , aunque en este caso las anomalías del LCR pueden
son iguales; su negatividad permitiría, por tanto, descar- deberse también a la propia infección por el VIH. Un
tar una neurosífilis. En cambio, la positividad de estas nuevo aumento es un criterio de fracaso terapéutico, salvo
pruebas en el LCR de un paciente sifilítico sin evidencia al principio del tratamiento, en cuyo caso se puede con-
clínica de neurosífilis sigue siendo hasta hoy ininterpre- siderar como una reacción de Herxheimer bioquímica, de
table. Así mismo, el cálculo de los índices de IgG y TPHA, lo cual se desprende el interés de no controlar demasiado
que supuestamente reflejan la producción local de anti- pronto el LCR (una punción lumbar a las 6 semanas sería
cuerpos más que la simple trasudación de la sangre hacia razonable).
el LCR, es complejo y debe ponerse en tela de juicio [33] .
La presencia de Treponema pallidum en el LCR (por
inoculación en el conejo) no es forzosamente un mejor Sífilis congénita
criterio, pues la invasión del sistema nervioso central por El CDC clasifica la sífilis congénita en tres categorías:
Treponema pallidum no significa necesariamente neurosí- confirmada, compatible e incompatible [5] .
filis. Para Lukehart, el diagnóstico de neurosífilis se basa En la última versión de las directrices del CDC se aclara
en la presencia de dos de las tres anomalías siguientes en que las pruebas treponémicas no son necesarias en el
el LCR: hiperproteinorraquia (>0,4 g/l), pleiocitosis (>5 recién nacido y que no puede recomendarse ninguna
células/mm3 o, en caso de infección por el VIH, hasta prueba relativa a la IgM [30] .
más de 20 células/mm3 ) y positividad de la VDRL [35] . La confirmación de la sífilis congénita se basa en la
Sin embargo, en cuatro de 12 pacientes con Treponema identificación de Treponema pallidum en el estudio con
pallidum en el LCR, éste fue normal con relación a otras microscopio de fondo negro o bien con anticuerpos
anomalías. monoclonales por inmunofluorescencia a partir de las
Para Rolfs [36] , el 24% de los pacientes (32/131) afec- lesiones cutáneas, del cordón umbilical, de la placenta o
tados por sífilis precoz (primaria o secundaria) presenta de material procedente de la autopsia.
Treponema pallidum en el LCR, detectable por PCR o por La compatibilidad con el diagnóstico de sífilis congénita
inoculación en el conejo, sin ninguna diferencia signi- es real si existe una de las anomalías siguientes:
ficativa entre los pacientes VIH+ y VIH− y sin que esta • positividad de la serología sifilítica (pruebas treponémi-
detección correlacione con una mayor frecuencia de fra- cas y no treponémicas) en el recién nacido;
caso terapéutico. Además, la persistencia posterapéutica • positividad de las pruebas treponémicas y no tre-
de Treponema pallidum tampoco es indicio de una mala ponémicas en un niño cuya madre tuvo una sífilis
respuesta al tratamiento. insuficientemente tratada durante el embarazo;
La actividad de la neurosífilis suele evaluarse a partir • positividad de la VDRL en el LCR;
de la proteinorraquia y la celularidad del LCR, que son • positividad de la serología sifilítica en un niño que, ade-
inconstantes. El 49% de 241 pacientes con neurosífilis más, presenta alguno de los signos siguientes: rinitis,
estudiados por Hooshmand tenía hiperproteinorraquia y condiloma plano, osteítis, periostitis u osteocondritis,
el 31%, sólo hipercelularidad [44] . Seis (46%) de los 13 ascitis, lesiones cutaneomucosas, hepatitis, hepatome-
pacientes con neurosífilis estudiados por Luger tenían más galia, esplenomegalia, síndrome nefrótico, síndrome
de 10 células/mm3 en el LCR, frente a un 22% de pacien- nefrítico, anemia hemolítica;
tes con sífilis sin signos clínicos o biológicos de neurosífilis • aumento de al menos 4 veces del título de la VDRL o la
[75]
. RPR con 3 meses de intervalo;
Con tratamiento se observa una normalización progre- • falta de negativización de las pruebas treponémicas y
siva y lenta de la pleiocitosis y la hiperalbuminorraquia. no treponémicas al 6.◦ mes.
La primera desaparece con mayor rapidez que la segunda: El diagnóstico de sífilis congénita se considera impro-
el 80% de los pacientes normalizan la celularidad del bable en las siguientes circunstancias:
LCR a los 6 meses y el 90%, a los 12 meses [76] . La • negatividad de la serología sifilítica;
falta de normalización en 2 años es un criterio de fra- • negativización de las pruebas treponémicas en 6 meses;
caso terapéutico. La albuminorraquia debe normalizarse • ningún síntoma en un niño cuya madre, tratada por
por completo también en 2 años [74] . Estos esquemas se sífilis durante el embarazo, presentó una disminución

EMC - Dermatología 13
E – 98-445-A-10  Sífilis

de al menos 4 veces del título de la serología no trepo- tres causas principales de ulceraciones genitales explica la
némica y cuyo título serológico es también al menos 4 imposibilidad de hacer un diagnóstico preciso de éstas sin
veces inferior al de la madre. la contribución de las pruebas complementarias [22] . Sólo
El diagnóstico de la sífilis congénita es facilitado por la una adenopatía inguinal a modo de bubón es muy orien-
PCR aplicada al suero, al LCR y al líquido amniótico [45, 65] . tadora de un chancro blando, ya que el bubón no suele
asociarse a una ulceración sifilítica o herpética. En el estu-
Sífilis en la infección por el VIH dio de Hope-Rapp, sólo una ulceración de más de 10 mm
se asociaba de manera significativa con más frecuencia a
En la infección por el VIH, algunos pacientes con sífilis
la sífilis que al herpes genital [23] .
secundaria tienen una serología negativa o una elevación
El chancro blando se distingue por el antecedente de
tardía de los anticuerpos [53] . A veces, por el contrario, la
contagio en relación con una población expuesta (pros-
respuesta de los anticuerpos es mayor; según los estudios
titución, estancia en un país tropical), un período de
de Baltimore y de Nueva York, en los pacientes infecta-
incubación corto (<7 días), las características del chancro
dos por el VIH y que tienen una sífilis secundaria, los
(no indurado, sucio, múltiple, doloroso) y la asociación
índices de las pruebas no treponémicas son significativa-
a una adenopatía inguinal unilateral, muy inflamato-
mente más elevados, en comparación con los pacientes
ria, que se fistuliza hacia la piel por un solo orificio.
seronegativos para el VIH [35, 36, 78] . El título de la TPHA es
El chancro blando y la sífilis pueden asociarse (chancro
más elevado en los pacientes VIH positivos en las series de
mixto).
Farhi y de Hope-Rapp [23, 58] . En caso de VDRL negativa,
El herpes genital produce una exulceración dolorosa
debe considerarse la posibilidad de un fenómeno de zona.
posvesiculosa en ramillete; el antecedente de un brote
Este fenómeno podría ser más frecuente en la infección
anterior es un argumento diagnóstico complementario.
por el VIH [58] .
La presencia de vesículas permite descartar el diagnóstico
Los pacientes infectados por el VIH presentan con
de sífilis.
más frecuencia una falsa positividad de los anticuerpos
La donovanosis (o granuloma inguinal) se observa sobre
anticardiolipina, probablemente debido a la activación
todo en algunos países tropicales y puede afectar a viajeros
policlonal de los linfocitos B propia de la infección por
de otros países.
el VIH [79] . Esta reacción puede positivar las pruebas no
La ulceración de la enfermedad de Nicolas-Favre
treponémicas como la VDRL. Sin embargo, esta falsa posi-
(linfogranuloma venéreo) suele pasar inadvertida y el
tividad no es bastante frecuente como para poner en tela
diagnóstico se presume habitualmente por una adenopa-
de juicio la utilidad diagnóstica de estas pruebas (en com-
tía inguinal inflamatoria con fístula cutánea en «alcachofa
binación con las pruebas treponémicas) y el seguimiento
de regadera».
terapéutico. Otros estudios han demostrado una mayor
En la fase de erupción cutánea, el gran polimorfismo
tendencia a la pérdida de la reactividad treponémica
clínico de la sífilis secundaria explica la necesidad de pen-
(TPHA, MHA-TP, FTA-Abs) en los pacientes infectados por
sar en este diagnóstico de manera sistemática ante una
el VIH [79, 80, 81] . Esta pérdida no parece correlacionar con
erupción cutánea, sobre todo si la lesión elemental es una
el grado de inmunodepresión [78, 79] .
pápula. Los principales diagnósticos diferenciales de una
En los pacientes infectados por el VIH se ha señalado
erupción papulosa difusa son los exantemas virales, las
una frecuencia más alta de fracasos serológicos postera-
toxidermias, algunas formas de psoriasis, el liquen plano
péuticos (sin disminución en un factor 4 de las serologías
y las hematodermias e incluso el eritema multiforme. La
no treponémicas VDRL o RPR en 3, 6 o 12 meses). En
variabilidad de la imagen histológica debe hacer pensar en
realidad, sólo tres estudios, todos retrospectivos, van en
los diagnósticos histológicos de eczema, psoriasis, liquen
esta dirección [82, 83] . Otros 11 estudios, de los cuales cinco
plano, eritema multiforme, toxidermia y hematodermia
fueron prospectivos, no revelan ninguna diferencia en la [71]
. Las ampollas son posibles en la sífilis neonatal, pero
evolución de las serologías no treponémicas después del
la sífilis secundaria nunca es vesiculosa.
tratamiento [36, 79, 84–86] .
El polimorfismo clínico de la sífilis neurológica puede
hacer considerar numerosos diagnósticos, entre ellos
Serología treponémica positiva
todas las causas de demencia, de accidentes cerebro-
Esta situación es común en los países con endemia de vasculares y de mielitis. El signo de Argyll Robertson
treponematosis no venéreas; ninguna prueba (ni siquiera es inespecífico; corresponde a una lesión del núcleo de
la de Nelson) permite distinguir entre la sífilis y el pian, el Edinger-Westphal y puede encontrarse en afecciones tales
bejel o la pinta. Ante el hallazgo fortuito de una serología como la sarcoidosis, la esclerosis múltiple, la diabetes o la
treponémica positiva (positividad de la TPHA y/o la FTA) enfermedad de Lyme [87] .
y en ausencia de antecedentes indiscutibles, debe conside- En el plano biológico, las anomalías del LCR pueden
rarse la hipótesis más desfavorable para el paciente: sífilis llevar a considerar las meningitis virales, la esclero-
antes que una treponematosis no venérea, tardía antes sis múltiple, la sarcoidosis, la enfermedad de Behçet
que precoz. Sólo la certeza de un tratamiento eficaz y de en caso de plasmocitosis, las meningitis cefalorraquí-
un seguimiento serológico regular justifica la abstención deas virales, la panencefalitis esclerosante subaguda, la
terapéutica. La negatividad de la VDRL es otro argumento tripanosomiasis africana y algunos tumores malignos
muy sólido a favor de la curación. en caso de hipergammaglobulinorraquia de distribución
oligoclonal [40] .

 Diagnóstico diferencial
En la fase de chancro genital, hay que considerar las  Tratamiento
otras causas de ulceración genital: neoplásicas, cáusticas,
infecciosas y generales (enfermedad de Behçet, toxider- El objetivo del tratamiento es prevenir la transmisión
mias). Un estudio microbiológico, efectuado en París y evitar la aparición de las complicaciones tardías de la
entre noviembre de 1986 y junio de 1987 con 75 varones sífilis. Debido al tiempo de división del treponema (de
que consultaron por una ulceración genital, reveló que 33 horas en caso de sífilis precoz a varios días en las sífi-
ésta se debía al chancro blando en 18 pacientes (24%), lis tardías), los esquemas terapéuticos deben asegurar una
al herpes en 19 (25%) y a la sífilis en 19 (25%); en 19 concentración treponemicida durante 10 días (sífilis pre-
pacientes (25%) no se aisló ningún agente patógeno y coz) y hasta 30 días (sífilis tardía) para ofrecer todas las
en ningún caso se diagnosticó la enfermedad de Nicolas- garantías. Sólo las formas de liberación sostenida de la
Favre. La falta de correlación entre los signos clínicos y las penicilina en tratamiento corto o los tratamientos prolon-

14 EMC - Dermatología
Sífilis  E – 98-445-A-10

gados con ciclinas o macrólidos permiten obtener estos de penicilina benzatínica. Se han comunicado recaídas
[91]
índices durante un tiempo suficiente. El tratamiento de las , así como una mala respuesta serológica. Para Sch-
sífilis tardías es más difícil. Las razones son el bajo número roeter, el índice de un nuevo tratamiento, acumulando
de gérmenes, su división lenta, la moderada reacción infa- los fracasos terapéuticos y las reinfecciones es, con este
matoria, la índole más inmunitaria que infecciosa de las régimen, del 5,1% a 1 año y del 12% a 2 años [92] . Los
lesiones y la dificultad de la penicilina para alcanzar los fracasos serológicos comunicados tras una sola inyec-
órganos diana. ción explican la actitud de algunos autores al recomendar
Otro imperativo propio de las enfermedades de trans- dos inyecciones intramusculares con 1 semana de inter-
misión sexual es romper la cadena de contaminación. Esto valo en lugar de una sola inyección, aunque la doble
justifica la detección y el tratamiento de las parejas sexua- dosis no se recomienda en ninguna de las directrices
[30, 31, 33, 93]
les y la prescripción de un tratamiento rápido y eficaz. . En la práctica, la posibilidad de los fracasos
Ésta es la ventaja del tratamiento corto con la penicilina no justifica el abandono de la inyección única de penici-
benzatínica. lina benzatínica, sino solamente la necesidad de instaurar
una vigilancia. Ningún otro esquema terapéutico parece
estar justificado. Los tratamientos con penicilina durante
Tratamientos posibles 15 días, a modo de asociación de penicilina bene-
tamina y penicilina G, no han demostrado ser más
Como no se puede cultivar Treponema pallidum, la efi-
eficaces.
cacia de los antibióticos se evalúa en el conejo (orquitis
En caso de sífilis latente tardía o terciaria (aparte de la
experimental) y en el ser humano con base en la clínica
neurosífilis), la OMS y el CDC recomiendan tres inyec-
(ausencia de recaídas) y a la serología (serorreversión).
ciones de 2.400.000 unidades de penicilina G benzatínica
En todos los casos, es necesario instaurar un seguimiento
con 1 semana de intervalo (a pesar de la carencia de estu-
prolongado de los pacientes, teniendo en cuenta que
dios tan amplios como los de la sífilis reciente), pero las
las reinfestaciones pueden falsear los resultados. Sólo un
modalidades precisas de la administración de la penicilina
número limitado de estudios responde a estos criterios y
durante este período siguen siendo motivo de controver-
ha permitido evaluar la eficacia de los tratamientos. Los
sia (cf infra) [30, 31, 33] .
expertos de la OMS y los CDC suelen atenerse a los esque-
En caso de neurosífilis, el tratamiento con penicilina
mas clásicos, basados en la penicilina y, en segundo lugar,
benzatínica fue recomendado por el CDC hasta 1986. El
en las ciclinas [30, 31, 33] .
inconveniente principal es la falta de concentraciones tre-
ponemicidas en el LCR, aparte de haberse comunicado
Penicilina algunos fracasos clínicos [91] . El diagnóstico de neurosí-
Es el tratamiento de elección de la sífilis por ser fácil, filis sintomática rara vez se descarta por la realización
posible de aplicar en tratamiento corto, de bajo coste y sistemática de una punción lumbar en caso de sífilis tar-
eficaz. Ningún otro antibiótico ha demostrado una efica- día (cf supra). El tratamiento de la neurosífilis consiste
cia similar ni ha sido evaluado mediante el estudio de un en 4.000.000 de unidades intravenosas de penicilina G
número tan elevado de pacientes. acuosa cada 4 horas y durante 14 días [39] . La respuesta
El análisis del genoma de Treponema pallidum demuestra clínica suele ser favorable, pues la curación se obtiene
que la bacteria carece de elementos genéticos (plásmidos, en el 50-98% de los casos en función de la gravedad de
bacteriófagos y transposones) asociados a los mecanismos la lesión neurológica inicial. El CDC y la IUSTI [30, 33]
de transferencia genética horizontal (transformación, también recomiendan la asociación de 2-4 millones de
transducción y conjugación). La falta de resistencia de Tre- penicilina procaínica intramuscular con 2 g de probenecid
ponema pallidum a la penicilina después de 60 años indica oral, en administración diaria durante 14 días; a pesar de
que la aparición de una resistencia necesitaría un proceso los resultados recientes, según los cuales este tratamiento
de múltiples fases y sería muy poco probable [3] . no permite obtener concentraciones treponemicidas en
En los modelos animales, las concentraciones séricas el LCR, hasta ahora no se ha comunicado ningún fracaso.
treponemicidas son de 0,1 ␮g/ml, pero concentraciones La falta de disponibilidad en algunos entornos de peni-
inferiores también son eficaces, con la condición de que cilina procaína y de probenecid impiden recurrir a este
se mantengan durante largos períodos. Así, el tratamiento tratamiento, que por otra parte tiene poco interés por ser
de la sífilis precoz se apoya en dosis bajas de penicilina complicado y doloroso [31, 32] .
que aseguren una concentración sérica superior a 0,018
␮g/ml durante 7-10 días, sin interrupción del tratamiento
Otros antibióticos
durante más de 24 horas. La misma concentración sería
necesaria en el LCR en el caso de la neurosífilis. La peni- Ciclinas
cilina G acuosa produce índices séricos superiores a 0,018 Son la alternativa de elección en caso de alergia a la
␮g/ml durante pocas horas, la penicilina G procaínica o la penicilina. El clorhidrato de tetraciclina (tetraciclina base)
penicilina benetamina durante 24 horas y la bencilpeni- es la forma de ciclina en la que mejor se ha estudiado
cilina benzatínica (BPB) durante 3 semanas. Estos índices la eficacia para el tratamiento de la sífilis precoz [94] . Los
están lejos de ser alcanzados en el LCR con la penicilina índices de repetición del tratamiento a 1 y 2 años son,
benzatínica, ni siquiera repitiendo las inyecciones [88] . respectivamente, de alrededor del 9 y el 12%, compara-
Sin embargo, el uso sistemático de la penicilina está bles a los de la penicilina benzatínica, previa corrección
limitado por sus contraindicaciones de orden alérgico. La de las reinfecciones. La dosis que se recomienda es de 2
más frecuente es la urticaria (5/1.000 pacientes) [89] . El g/d en cuatro tomas diarias de 500 mg durante 15 días
51% de las reacciones de intolerancia se produce en las (dosis acumulada: 30 g) en la sífilis precoz y durante 30
primeras 24 horas. En realidad, los accidentes mortales días (dosis acumulada: 60 g) en la sífilis tardía. Las cicli-
son excepcionales (1/100.000) [90] y, en caso de alergia nas de 2.a generación, entre ellas la doxiciclina, quizá
a la penicilina, un nuevo accidente alérgico a ésta sólo sean tan eficaces como la tetraciclina; aunque esta efi-
se produciría en el 10% de los casos [89] . La alergia a la cacia no ha sido validada por el estudio controlado de
penicilina, que se observa en el 6,6% de los pacientes numerosos pacientes, los comités de expertos recomien-
[90]
, obliga a recurrir a otro tratamiento antibiótico o a dan la doxiciclina con el mismo título que la tetraciclina.
una desensibilización a la penicilina con protocolos bien Otra ventaja de la doxiciclina, junto a sus propiedades
establecidos. Esta desensibilización es, en realidad, una farmacocinéticas clásicas, es la de penetrar en muy baja
inducción transitoria de tolerancia. cantidad en el LCR. Algunos autores aconsejan, por tanto,
En la sífilis reciente, la OMS y el CDC recomiendan la doxiciclina en dosis altas (400 mg/d) y de manera
una inyección intramuscular única de 2.400.000 unidades prolongada (21 días) para el tratamiento de la neurosí-

EMC - Dermatología 15
E – 98-445-A-10  Sífilis

filis en las personas realmente alérgicas a la penicilina. experimental en el conejo descartan a los fenicoles como
La mayoría de los autores no recomienda esta opción. un tratamiento potencial para la sífilis [94] . Las fluoroqui-
Las ciclinas están contraindicadas en el embarazo. En la nolonas son ineficaces.
sífilis de la mujer embarazada, la ventaja de las ciclinas Ninguna de las alternativas a la penicilina ha sido eva-
reside en que atraviesan la barrera placentaria (al contra- luada en comparación con ésta, mucho menos a gran
rio que la eritromicina), con el inconveniente de inducir escala de pacientes, por lo cual no se recomienda su pres-
una discromía dental, sobre todo en caso de tratamiento cripción como primera elección.
después de las 25 semanas de amenorrea. Los comités de
expertos recomiendan, por tanto, la desensibilización a la
penicilina. Estrategia terapéutica
Aunque no se haya descrito ninguna cepa de Treponema
pallidum resistente a las tetraciclinas, el riesgo de que apa- El tratamiento de la sífilis depende del tiempo de evo-
rezca con sólo una mutación puntual es posible e incluso lución de la enfermedad (sífilis precoz, sífilis tardía), de
probable. Los tratamientos con ciclinas deben, por tanto, la presencia de una lesión neurológica e incluso de una
limitarse al máximo y es indispensable una perfecta obser- contraindicación a la penicilina, que siempre es el trata-
vancia terapéutica para minimizar este riesgo [3] . miento de primera elección.
El tratamiento de la sífilis varía según la fase evolutiva.
Macrólidos La clasificación que hoy se recomienda es la siguiente:
No ofrecen las mismas garantías que las ciclinas o la • sífilis precoz: sífilis primaria y secundaria, sífilis latente
penicilina [94] . de menos de 1 año de evolución para el CDC y 2 años
Desde 1964 se han aislado cepas de Treponema pallidum para la OMS;
resistentes a la eritromicina, sobre todo la cepa Street 14 en • sífilis tardía: sífilis terciaria, neurosífilis excluida, sífilis
un paciente con tratamientos múltiples con macrólidos. latente de más de 1 año de evolución para el CDC y 2
Esta cepa resultó ser resistente a la azitromicina. La resis- años para la OMS o indeterminada;
tencia a los macrólidos (anillo lactona 14 y 15 C) se debe a • neurosífilis.
una mutación (adenina → guanina) en posición 2058 en
el gen del ARN ribosomal 23S. Obedece a una presión de
selección demostrada en Treponema denticola [3] . En el año
Sífilis en incubación
2009 se descubrió otra mutación en 2059 (anillo lactona Las personas sexualmente expuestas a un paciente
14, 15 y 16 C) [3] . Esta mutación confiere una resistencia afectado por una sífilis precoz deben someterse a un sero-
de adquisición rápida y epidémica a la azitromicina, lo diagnóstico. Si el contacto se produjo en los 90 días
que explica las discordancias entre los primeros ensayos precedentes, antes de la seroconversión esperada, deben
alentadores de los tratamientos con este antibiótico, sobre ser tratados como una sífilis precoz. Después de los 90
todo en África (Rakai, Uganda 1994-1998, Mbeya, Tanza- días, este tratamiento se indica a los pacientes con sero-
nia 2000-2003) [95, 96] y los múltiples fracasos más recientes logía positiva o no disponible. Cualquier enfermedad de
[97–99]
. Aun cuando 2 g de azitromicina eran tan eficaces transmisión sexual debe conducir a la realización de un
como la BPB (aunque peor tolerados), en un ensayo mul- serodiagnóstico de treponematosis. El tratamiento corto
ticéntrico aleatorizado de Estados Unidos y Madagascar de la gonococia con ceftriaxona se considera eficaz contra
(517 casos de sífilis precoz no VIH) sin detección de cepas la sífilis en incubación si va seguido por un tratamiento
resistentes en una muestra de 141 individuos malgaches largo con doxiciclina, lo que en la práctica no se ajusta a la
[100]
, prescribir este antibiótico no es razonable a menos realidad. En Estados Unidos se han comunicado fracasos
que se presente una necesidad absoluta (falta de dispo- con azitromicina en casos de sífilis en incubación.
nibilidad o inseguridad de las inyecciones de BPB, países
en los que las resistencias son infrecuentes [algunos de Sífilis precoz
África], seguimiento de los pacientes y de las resistencias,
conjunto de recomendaciones poco compatibles con la Todos los expertos recomiendan una sola inyección de
realidad) [3] . 2.400.000 unidades de penicilina G benzatínica por vía
intramuscular; debido al volumen de la solución que hay
Otras opciones que inyectar, la mitad de la dosis puede administrarse en
El interés de un tratamiento doble para sífilis-gonococia cada nalga con xilocaína para limitar el dolor local. La
explica el hecho de que los antibióticos que usualmente se repetición de las inyecciones, que algunos recomiendan,
recomiendan para el tratamiento de la gonococia, es decir, no se apoya en ningún dato sólido.
la espectinomicina y la ceftriaxona, hayan sido objeto del Las alternativas que se recomiendan en caso de alergia
mayor número de estudios. a la penicilina o ante la imposibilidad de administrarla
La actividad treponemicida de la espectinomicina es por vía intramuscular (trastorno de la hemostasia), son la
probable pero débil. Clark et al han estudiado el efecto de doxiciclina (200 mg/d) o la tetraciclina (2 g/d) durante 2
la espectinomicina en la sífilis experimental del conejo semanas. En caso de alergia a la penicilina y de contrain-
con una dosis comparable a la administrada en el ser dicación a las ciclinas, se recomienda la desensibilización
humano para la gonococia, en una dosis única de a la penicilina.
20 mg/kg, retrasa la aparición de la lesión primaria o La punción lumbar sólo se recomienda en caso de
enmascara los síntomas de la sífilis precoz. Incluso un manifestaciones neurológicas u oftálmicas, incluso en los
tratamiento largo con dosis acumuladas de 16-32 gramos pacientes infectados por el VIH.
fracasa en el 30% de los casos [94] .
La ceftriaxona no despierta mucho interés. No hay
Sífilis tardía (con exclusión de la
ningún estudio comparativo entre este antibiótico y los
esquemas clásicos en la sífilis precoz ni en la sífilis tardía. neurosífilis)
El antibiótico es activo, pero la dosis y la duración del tra- Todos los expertos recomiendan tres inyecciones intra-
tamiento no están definidas. Las desventajas con relación musculares de 2,4 millones de unidades de penicilina
a la BPB son el precio y la necesidad de efectuar inyeccio- G benzatínica con una semana de intervalo y, en caso
nes múltiples. Además, no puede presentarse como una de alergia a la penicilina, una inducción de tolerancia
alternativa prudente en caso de antecedente alérgico a la a la penicilina. Dos alternativas mal validadas son la
penicilina [30, 31, 33] . Todavía falta demostrar su utilidad en doxiciclina (200 mg/d) o la tetraciclina (2 g/d) durante
la neurosífilis. 4 semanas. La vigilancia clínica y serológica debe ser
El cloranfenicol se usó en India (Roy, 1963), pero su constante. Las indicaciones de la punción lumbar son
toxicidad y los fracasos de este tratamiento en la sífilis controvertidas y ya se han comentado.

16 EMC - Dermatología
Sífilis  E – 98-445-A-10

Neurosífilis Si la exploración física es normal, con una prueba no


treponémica inferior o igual a 4 veces el título materno,
Es clínica o puramente biológica (neurosífilis latente).
las pruebas biológicas y el tratamiento ya mencionados
En caso de neurosífilis clínica, el CDC recomienda
sólo se efectúan si la madre ha recibido un tratamiento
la penicilina G en dosis de 12-24 millones de unida-
correcto durante el embarazo. Si es así, no se indica nin-
des/día por vía intravenosa durante 10-14 días. Simon
guna prueba complementaria y el tratamiento se basa en
recomienda la penicilina G en dosis de 24 millones de
una sola inyección intramuscular de BPB (50.000 UI/kg).
unidades/día durante 15 días [39] . Sólo la penicilina G
Por último, si se trata de una sífilis materna de larga
intravenosa asegura con certeza una concentración tre-
data y tratada antes del embarazo, una simple vigilancia
ponemicida en el LCR y ha sido objeto de numerosos
serológica al niño es suficiente [30] .
estudios. Como alternativa, el CDC y la IUSTI recomien-
En caso de alergia a la penicilina, es necesaria la desen-
dan [30, 33] la penicilina procaínica intramuscular (2-4
sibilización.
millones de unidades) asociada al probenecid oral (2 g/d).
Este esquema no se aplica en países como Francia. En caso
de alergia a la penicilina, no hay ningún tratamiento alter- Sífilis del niño
nativo ideal. Primero hay que verificar que la alergia a la Los niños de mayor edad con una exploración neu-
penicilina sea real. Si es así, se debe indicar una desen- rológica normal se pueden tratar con bencilpenicilina
sibilización. La curación se evalúa por la disminución y benzatínica por vía intramuscular en dosis de 50.000
la desaparición de la pleiocitosis a los 6 meses y a los UI/kg y hasta 2,4 millones de UI. En caso de alergia a la
2 años. penicilina, la desensibilización es preferible.

Sífilis en la mujer embarazada Sífilis adquirida durante la infección por el


El cribado de la sífilis debe ser lo más precoz posible en VIH
el embarazo y hay que repetirlo durante su curso en las El tratamiento es el mismo que en los pacientes serone-
poblaciones de riesgo. El tratamiento se basa en la penici- gativos para el VIH.
lina, en una dosis adaptada a la fase de la sífilis. Muchos El refuerzo del esquema clásico (una inyección intra-
médicos tienen la costumbre de aumentar el número de muscular de penicilina benzatínica) mediante la asocia-
inyecciones de BPB, pero esto no se apoya en ningún ción amoxicilina-probenecid (10 días) no ha demostrado
estudio controlado [101] . Las ciclinas están contraindica- ser superior en la sífilis precoz del VIH [36] .
das, salvo al principio del embarazo. No hay que usar
eritromicina y la azitromicina debe evitarse sin excep- Respuesta terapéutica
ción; además de las mutaciones de resistencia crecientes,
atraviesa parcialmente la barrera placentaria. En caso de En ausencia de criterios formales de curación, la res-
alergia a la penicilina, hay que considerar una desensibi- puesta terapéutica se aprecia clínica y serológicamente.
lización. En la segunda mitad del embarazo, una reacción Respuesta clínica
de Jarisch-Herxheimer puede precipitar un parto prema- Con tratamiento, las lesiones de la sífilis primaria y
turo o el sufrimiento fetal, con relación a lo cual se debe secundaria desaparecen con suma rapidez (por lo general,
prevenir a las mujeres. en menos de 8 días), a veces con secuelas leucomelanodér-
micas o anetodérmicas, de forma excepcional una cicatriz
Sífilis congénita de chancro si éste era muy profundo o estaba infectado.
Las lesiones de la sífilis terciaria experimentan una regre-
Un niño corre el riesgo de sufrir una sífilis congénita si sión mucho más lenta e incompleta (en particular, tabes
nace de una madre cuya serología para la sífilis (pruebas y parálisis general permanentes).
treponémicas y no treponémicas) es positiva y si la madre
reúne los criterios siguientes: Respuesta serológica
• falta de tratamiento; La vigilancia se centra en las pruebas de detección de
• tratamiento de menos de 1 mes con anterioridad al los anticuerpos anticardiolipinas (VDRL, RPR, etc.). Los
parto; títulos deben descender de un factor 4 en 3 meses [92] o
• tratamiento que no incluye penicilina; en 6 meses y hacerse negativos en 1 año (sífilis primaria),
• sin disminución significativa del título de las pruebas 2 años (sífilis secundaria) o 4 años (sífilis latente precoz)
[79, 93]
no treponémicas después del tratamiento; . En realidad, el descenso de los títulos es mucho
• desconocimiento del protocolo exacto del tratamiento; más lento y la serorreversión (negativización de la VDRL)
• seguimiento serológico insuficiente después del trata- es más infrecuente, sin que por esto se trate de fracasos
miento. terapéuticos evidentes. En diversos estudios, la negativi-
La exploración de un niño nacido de una madre de zación de la VDRL no supera el 60% varios años después
riesgo debe incluir: del tratamiento [79] .
• exploración física completa en búsqueda de algún signo La evolución de los títulos de la VDRL en la sífilis tardía
de sífilis congénita; no se conoce bien; el descenso es más lento cuando los
• una prueba no treponémica cuantitativa; títulos iniciales son bajos y la serorreversión sería infre-
• si es posible, estudio con microscopio de fondo negro cuente [79] . Una VDRL negativa es un excelente criterio
en caso de lesiones cutaneomucosas. de curación de la sífilis.
En presencia de anomalías clínicas, de una prueba no Respecto a las serologías treponémicas (TPHA y FTA),
treponémica con un título 4 veces superior al de la madre rara vez se negativizan después del tratamiento de una
o de un estudio con fondo negro positivo, el niño debe sífilis precoz (el 10-70% de los casos según los estudios),
ser tratado de forma sistemática tras haberle efectuado: la precocidad del tratamiento, el tiempo de seguimiento y
• un hemograma; la prueba empleada (la FTA desciende más fácilmente que
• un análisis del LCR; la TPHA) [79, 92] . No hay ningún dato fiable disponible con
• una exploración radiológica de los huesos largos. relación a las sífilis tardías y las serologías treponémicas
El tratamiento consiste en bencilpenicilina cristalizada se mantendrían indefinidamente positivas [79] .
acuosa (100.000-150.000 UI/kg/d, repartidas en dos o tres En la sífilis precoz, el seguimiento serológico que reco-
perfusiones diarias de 50.000 UI) o penicilina procaínica mienda el CDC incluye pruebas a 3 y 6 meses. La falta
(50.000 UI/kg/d en una inyección intramuscular) durante de descenso del título de la VDRL o incluso su aumento
10-14 días. La interrupción de un solo día de tratamiento o la persistencia de los síntomas, deben conducir a una
obliga a iniciarlo de nuevo. punción lumbar y a un nuevo tratamiento. En la sífilis

EMC - Dermatología 17
E – 98-445-A-10  Sífilis

terciaria, el CDC recomienda controlar la serología a los 6 al comienzo del tratamiento y los 3 días siguientes. Los
y 12 meses y tratar como una neurosífilis en ausencia de tratamientos en dosis progresivas carecen de efecto y retra-
una respuesta clínica o serológica adecuada. san el tratamiento activo. Esta reacción consiste en una
En la sífilis congénita, el seguimiento serológico de los exacerbación febril de las manifestaciones de la sífilis,
niños con pruebas serológicas positivas se verifica a 1, 2, a menudo asociada a cefaleas, malestar general, escalo-
3, 6 y 12 meses. Si no hay infección, todos los anticuer- fríos y mialgias. Aunque el agravamiento de los signos
pos no treponémicos transmitidos por la madre al niño cutaneomucosos es frecuente, rara vez se ha descrito una
tienen que haber disminuido en 3 meses y desaparecido erupción cutánea vesiculosa. La elevación de los títulos de
en 6 meses. Si los títulos de las pruebas no treponémicas manera transitoria e incluso la positivación de las prue-
se mantienen estables, hay que evaluar al niño y tratarlo bas serológicas son posibles, así como un incremento de
como si tuviera una sífilis congénita. Con relación a las las anomalías citológicas y bioquímicas del LCR. La cor-
pruebas treponémicas, pueden ser positivas hasta el pri- ticoterapia sistémica disminuiría más la intensidad de la
mer año de vida sin infección; sólo la positividad después reacción febril que su frecuencia.
del primer año debe conducir al tratamiento. En caso de
tratamiento por sífilis congénita, la respuesta serológica se
evalúa por el descenso del título de las pruebas no trepo-
némicas, que deben negativizarse en 6 meses. Las pruebas
 Conclusión
treponémicas pueden mantenerse positivas. En caso de Aun cuando el diagnóstico de la sífilis y su tratamiento
lesión neurológica, el LCR debe evaluarse cada 6 meses se han vuelto más simples y fiables en las últimas décadas,
hasta su normalización antes de los 2 años. persisten sin embargo numerosos interrogantes respecto
En los pacientes seropositivos para el VIH, los resultados al diagnóstico y tratamiento de la neurosífilis asintomá-
de las serologías sifilíticas serían algo distintos después del tica, así como a la inmunidad inducida por la sífilis. La
tratamiento. En especial, la serorreversión de las pruebas coexistencia de la sífilis y de la infección por el VIH no
treponémicas (TPHA, MHA-TP y FTA) es más frecuente. ha tenido, finalmente, grandes consecuencias clínicas o
Haas [80] observó la serorreversión en 13/90 pacientes biológicas.
VIH+, frente a 0/19 VIH−, con más frecuencia en caso de
déficit inmunitario patente (estudio retrospectivo de sífilis
de antigüedad indeterminada). Johnson [81] sólo observó  Bibliografia
una tendencia más frecuente a la negativización de las
pruebas treponémicas. Para Gourevitch [78] , la negativiza- [1] Quetel C. Le mal de Naples. Histoire de la syphilis. Médecine
ción de la FTA o MHA-TP se relacionaba solamente con un et Histoire. Paris: Editions-Seghers; 1986.
título inicial bajo de la VDRL, pero no con el estado VIH, la [2] Janier M, Saada V. De la vénéréologie aux maladies sexuelle-
fase de la sífilis ni la concentración de CD4. En el mismo ment transmissibles. Ann Dermatol Venereol 1989;116:957–64.
estudio, la evolución de la VDRL también era indepen- [3] Stamm L, Bergen H. Global challenge of antibiotic – resis-
diente del estado VIH. La única diferencia observada por tant Treponema pallidum. Antimicrob Agents Chemother
Rolfs [36] en la sífilis precoz fue un título más alto de la RPR 2010;54:583–9.
y un descenso posterapéutico más bajo (comprobado en [4] Savage E. ESSTI network. Syphilis Eurosurveillance
la sífilis primaria pero no en la secundaria) en los pacien- 2009;14:1–7.
tes VIH+. Por último, según Janier [79] , la serorreversión [5] CDC (Centers for Disease control and Prevention)
Sexually Transmitted diseases Surveillance 2008.
de la TPHA era más frecuente en los pacientes VIH+ (sin
http://www.cdc.gov/std/stats08/syphilis.htm.
correlación con el estadio de la sífilis ni la concentración
[6] http//www.who.int/topics/sexually transmitted infections.
de CD4), lo mismo que para la FTA (que correlaciona con [7] Xu JJ, Zhang M, Brown K, Reilly K, Wang H, Hu Q, et al. Syp-
una baja concentración de CD4). En cambio, el descenso hilis and HIVseroconversion among a 12- month prospective
de la VDRL era idéntico en los pacientes VIH+ y VIH−, cohort of men who have sex with men in Shenyang, China. Sex
como lo han confirmado 11 de otros 14 estudios (cinco Transm Dis 2010;37:432–9.
de ellos prospectivos). De estos estudios se desprende que [8] Lewis D. Modern management of genital ulcer disease. Sex
la VDRL es una prueba excelente para la vigilancia de una Transm Dis 2010;37:494–6.
sífilis tratada, incluso en los pacientes seropositivos para [9] Farhi D, Dupin N. Syphilis dix ans après son retour. Ann Der-
el VIH; la negatividad de la VDRL es el mejor criterio de matol Venereol 2009;136:859–60.
curación. [10] Velicko I, Arneborn M, Blaxhult A. Syphilis Epidemio-
logy in Sweden: re-emergence since 2000 primarily due to
Evolución de las serologías sifilíticas en el LCR spread among men who have sex with men. Eurosurveillance
En este caso, la vigilancia también se centra en la VDRL. 2008;13:1–5.
La punción lumbar de control se efectúa después de 6 [11] Cabié A, Rollin B, Pierre-François S, Abel S, Desbois N,
Richard P, et al. Reemergence of syphilis in Martinique 2001-
semanas y luego cada 6 meses, hasta la normalización del
2008. Emerg Infect Dis 2010;16:106–9.
LCR. La negativización de la VDRL se considera como un
[12] Kamb M, Newman LM, Riley P, Mark J, Hawkes SJ, Broutet
criterio de curación. Debe producirse como muy tarde en N. A road map to the global elimination of congenital syphilis.
2 años y el título tiene que haber disminuido al menos en Obstet Gynecol Int 2010;2010:312798.
un factor 4 a los 6 meses [74] . La normalización sería más [13] Liu JB, Hong FC, Pan P, Zhou H, Yang F, Cai YM, et al. A
lenta en los pacientes VIH+, en particular cuando los CD4 risk model for congenital syphilis in infants born to mothers
son inferiores o iguales a 200/mm3 [76] . with syphilis treated in gestation: a prospective cohort study.
Sex Transm Infect 2010;86:292–6.
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Esta reacción consiste en un agravamiento de las mani- [15] Fraser CM, Norris SJ, Weinstock GM, White O, Sutton GG,
Dodson R, et al. Complete genome sequence of Treponema
festaciones clínicas con cefaleas, mialgias y fiebre elevada,
pallidum, the syphilis spirochete. Science 1998;281:375–88.
con independencia de la dosis. La fisiopatología se desco-
[16] Clark EG, Danbolt N. The Oslo study of the natural course of
noce, pero influiría el factor de necrosis tumoral. Es más untreated syphilis; an epidemiologic investigation based on a
frecuente en caso de sífilis precoz. Es benigna, salvo en restudy of the Boeck-Bruusgaard material; a review and apprai-
la mujer embarazada y en el lactante y, de forma excep- sal. J Chronic Dis 1955;2:311–4.
cional, en la fase terciaria (sordera, ruptura de aneurisma [17] Schuman SH, Olansky S. Untreated syphilis in the male negro,
aórtico). Puede prevenirse en parte con la administración background and current status of patients in the Tuskegee story.
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M. Janier, Professeur au Collège de Médecine, médecin des Hôpitaux.


Centre clinique et biologique des maladies sexuellement transmissibles, Hôpital Saint-Louis, AP-HP, 42, rue Bichat, 75010 Paris, France.
Fondation-Hôpital Saint-Joseph, 1, avenue Raymond-Losserand, 75014 Paris, France.
E. Caumes, Professeur des Universités, médecin des Hôpitaux.
Département des maladies infectieuses, parasitaires, tropicales et santé publique, Groupe hospitalier Pitié-Salpêtrière, AP-HP, 47, boulevard
de l’Hôpital, 75013 Paris, France.

Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Janier M, Caumes E. Sífilis. EMC - Dermatología 2012;46(3):1-20
[Artículo E – 98-445-A-10].

Disponibles en www.em-consulte.com/es
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complementarias Animaciones legales al paciente complementarias evaluación clinico

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