LA VISIÓN

DE NAHÚM

SORAYA RODRÍGUEZ
PERDIGÓN
El presente documento titulado “La Visión de Nahúm”, es de carácter literario,
debido a que narra las profecías de Nahúm sobre la destrucción del Imperio Asirio
y de su capital. El texto es un documento secundario, debido a que solo aporta
determinados aspectos de los hechos históricos, otorgándoles un carácter religioso,
al ser uno de los libros que se encuentra en el Antiguo Testamento.
El contenido nos ha llegado de forma indirecta, debido a que se ha utilizado la
traducción de la Biblia, por lo tanto, el documento original podría no existir o se
ha perdido, o que la traducción del documento original sea muy compleja.
Sabemos que el autor del documento es el profeta Nahúm. Es el séptimo profeta,
según la lista tradicional de los doce profetas menores. Vivió en el siglo VII a.C.,
según la tradición judía, bajo el rey Manasés. Profetizó contra Nínive, capital del
reino asirio, su destrucción. Se convirtió en el consolador del pueblo judío, donde
ve la caída de Nínive como un símbolo de esperanza.
El libro de Nahúm augura la inminente destrucción del Imperio Asirio. El libro
podría estar fechado en torno al 663-612 a.C., ya que se narra la caída de Tebas en
el año 663 a.C. 1
Centrándonos en el contexto histórico, nos situaremos cuando la intervención
asiria es más intensa y se convierte en un peligro para Israel. Para Palestina, el
peligro asirio se concreta hasta el siglo VIII. Ante estas situaciones, Palestina toma
dos opciones: la política de sumisión ante la fuerza de otro estado, o la resistencia
armada, siendo la opción más rentable la sumisión, pero muchos optaron en alzar
las armas, lo que condujo al desastre.
Una vez que está bajo el dominio asirio, Palestina va perdiendo riquezas al tener
que hacer frente a los fuertes tributos que debían pagar. Esto provocó que la
población abandonase las ciudades, quedando los campos vacíos, llegando a un
momento de absoluta precariedad.
En tiempos de Tiglatpiléser III, quien subió al trono en el año 754 a.C., Asiria
había llegado a someter casi todos los pueblos del Oriente Próximo. Le sucedió
Salmanasar V, en cuyo reinado comenzaron las amenazas contra el reino de Israel,
el cual caería definitivamente en poder de su sucesor, Sargón II. Con la toma de
Samaria en el 722 a.C. se destruyó totalmente el reino de Israel, y el de Judá fue
sometido a tributo. Con el reinado de Sargón II, se dieron varios intentos de
revueltas de sus países vasallos, pero sin éxito.
Sanequerib, hijo del anterior monarca, mandó a construir la ciudad de Nínive, la
cual pasó a ser la capital del Imperio. Hacia el año 645 a.C., los medos, aliados con
los babilonios, intentaron la toma de la ciudad. Nínive cayó definitivamente en el
año 612 a.C., por un nuevo ataque de los medos con los babilonios.
Con respecto a la caída del Imperio Asirio, entre los años 626-623 a.C., se
reforzaron las rebeliones en las ciudades asirias. En el año 616 a.C., Nabopolassar

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https://www.ecured.cu/Nahum_(profeta)

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controla totalmente el sur, expulsando a las últimas guarniciones asirias. Empieza
a perder el control del Éufrates y Nabopolassar lo remonta para cercar a Asiria. La
directriz babilónica, remonta el Tigris, haciendo a los Asirios retroceder hasta el
Zab y luego atacar las ciudades asirias más meridionales. Junto a los babilonios,
luchan los medos. Hay que destacar que entre los manneos y los medos hay una
disputa por la hegemonía irania, provocando los manneos un colapso que afecta al
Imperio Asirio.
En el año 614 a.C., los medos atacan las ciudades asirias. Nabopolassar, llega a
Assur cuando la ciudad ya está tomada. Firma un pacto formal de alianza con el
rey de Media y regresa a Babilonia. Dos años después, los ejércitos unidos atacan
Nínive. Tras tres meses de asedio, la capital asiria es expugnada, saqueada y
destruida. Dos años más tarde, los ejércitos marchan a Kharran y lo toman. A partir
de ese momento, el Imperio Asirio deja de existir y desaparece la documentación.
La lucha se entabla ahora entre los estados herederos del imperio: los babilonios
se quedan con la llanura mesopotámica, y los medos las altas tierras iraníes. 2
El mensaje profético, no muestra la compasión de Dios por este pueblo, sino su
ira, aniquilando la ciudad. Nahúm ve en este acto de Dios, un elemento de justicia,
ya que castiga a los opresores y libera a su pueblo de las calamidades que estaban
pasando. Nahúm describe el desastre completo: “las fortalezas caen a la primera
sacudida y el ejército asirio es una partida de mujeres soldado, lo cual representa
un grave insulto para los soldados. De nada vale un nuevo esfuerzo de
reedificación; el fuego se encargará de arrasarlo todo.”
La Biblia de Jerusalén, divide la obra en dos grandes partes: el preludio de la obra
y la ruina de Nínive, con un versículo introductorio que habla del autor. Se divide
de la siguiente manera:
- Referencias al autor.
- Preludio.
- Salmo, la ira de Yahvé.
- Sentencias proféticas de Judá y Nínive.
- Ruina de Nínive.
- El asalto.
- Amenazas al León de Asur.
- Amenazas a Nínive por sus crímenes.
- El ejemplo de Tebas.
- Inutilidad de los preparativos de Nínive.
- El vuelo de las langostas.
- Lamentación fúnebre.
El objetivo era anunciar el juicio sobre Nínive. Jonás ya había profetizado acerca
de Nínive, pero él había vivido 150 años antes que Nahúm. En el libro de Jonás, la

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Liverani, Mario: El Antiguo Oriente: Historia, Sociedad y Economía, Barcelona, 1995.

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gracia de Yahvé triunfa, mientras que en el de Nahúm solo se anuncia la justa ira
de Dios y la inevitable destrucción de esta ciudad impía.
Es muy sorprendente que no se mencione nada acerca de los pecados de Israel y
de Judá. Efectivamente, al tiempo que es anunciada la santa y justa ira de Dios
contra los enemigos, el pueblo de Dios recibe palabras reconfortantes. En el
capítulo 1, hay un Dios celoso y vengador en toda su majestad. Los dos capítulos
siguientes profetizan con exactitud la caída y destrucción de Nínive, que simboliza
la liberación de todas las esclavitudes. 3
Analizando el texto, podemos ver que en el Libro número 2, en “El asalto”, en los
versículos 2 y 4, apreciamos como Nahúm, profetiza la llegada del enemigo al
Imperio. Les sugiere que vigilen desde sus murallas para prevenir su llegada.
Asimismo, podemos ver claramente, como el testimonio se sitúa en la Edad del
Hierro, puntualizados en sus armaduras y en el material de los carros.
Los versículos 5, 6 y 7, podemos ver cómo el ejercito contrario se adentra en la
ciudad, con armas y probablemente, prendiendo fuego a las edificaciones, mientras
que los asirios no tienen tiempo de preparase por la sorpresa del ataque.
En los versículos 8, 9, 10 y 11, apreciamos las consecuencias del ataque, las
riquezas son saqueadas, los palacios y templos destruidos, la población sometida
a la fuerza. La última frase del versículo 11, ¡“…y todos los rostros que mudan de
color!”, puede ser una referencia a la población fallecida, cambiando su color al
rojo de la sangre.
En “Amenazas al león de Asur”, en los versículos del 12 al 14, podemos observar
las alusiones a la ciudad de Assur, que la compara con un león. Es como si el
profeta hiciese una burla de la ciudad, de ver lo fuerte que ha sido durante años
como para someter a estados, pero ahora es débil, y los enemigos acabarán con
ella.
En el libro 3, en “Amenazas a Nínive por sus crímenes”, apreciamos en los
versículos 1, 2 y 3, la entrada de los enemigos hacia la capital, y la destrucción y
muerte que van dejando, pero a su vez, podría estar haciendo referencia también,
a las desgracias que causó el Imperio Asirio a otros estados. En el versículo 4, el
profeta castiga la acción de los estados, lo pone con el ejemplo de la prostitución,
que podría hacer referencia a la utilización de mujeres para pactar con aliados o
sonsacar al enemigo, o como una metáfora de cómo las naciones, cuando se ven
en peligro, abandonan sus estados, dejando al pueblo a la voluntad del enemigo.
Sea cual sea el significado que el autor le está otorgando, en los otros tres
versículos, Nahúm, como profeta de Yahveh, manifestará a todos los reinos la
destrucción de Asiria, empequeñeciéndola, haciéndoles sentir vergüenza a los
supervivientes que quedan, al tener que buscar refugio y compasión en otros
estados, siendo posible que Asiria nunca la hubiese tenido.

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https://www.religionenlibertad.com/blog/43599/el-profeta-nahum-y-la-caida-de-ninive.html

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Los siguientes versículos, del 8 al 11, en “El Ejemplo de Tebas”, el profeta Nahúm
hace referencia a Tebas y su caída. Afirma que el Imperio Asirio no es mejor que
Egipto, y de la misma manera, cayó su capital, a pesar de contar con aliados
externos, como los tienen los asirios, en este caso, Egipto. Este ejemplo, lo que
pretende mostrar, es el mismo, sino que tendrá Asiria, la destrucción, la muerte y
finalmente el olvido, siendo la triste sombra de lo que un día fue.
En la “Inutilidad de los preparativos de Nínive”, podemos ver que la preparación
para la guerra sería absurda, puesto que, al ser el enemigo más fuerte, caerían
enseguida. Vuelve a hacer referencia a la utilización del fuego como método de
destrucción. En los versículos 14 y 15, podríamos entender, que, aunque la ciudad
se preparase para el asedio, los recursos no serían suficientes para autoabastecerse
por mucho tiempo, terminando por caer la ciudad ante el enemigo.

BIBLIOGRAFIA.

Liverani, Mario: El Antiguo Oriente: Historia, Sociedad y Economía, Barcelona, 1995.

BIBLIOGRAFIA ONLINE.

https://www.ecured.cu/Nahum_(profeta)
https://www.religionenlibertad.com/blog/43599/el-profeta-nahum-y-la-caida-de-ninive.html