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TEXTO: 2 SAMUEL 11:1-5

EL TIEMPO EN QUE LOS REYES SALEN A LA GUERRA


INTRODUCCION

Las diferentes traducciones, precisan el tiempo de la guerra en el


tiempo en que los reyes salen a la guerra como si hubieran salido
varios reyes a hacer guerra. Pero esto no es así, al leer el contexto
encontramos las razones por las cuales David se quedó en
Jerusalén. Por ejemplo la Biblia RV1960 dice “Aconteció al año
siguiente, en el tiempo que salen los reyes a la guerra...”.
Entendiendo que era una época en que todos estaban en guerra y
que Israel también. Pero esta ciudad, Amón de Rabá, era la única
que le faltaba conquistar. Mientras que la RV1977 especifica que
era una época del año: “Al año siguiente, en la época que salen
los reyes a campaña...” esto es, la época del año en que se hacia la
guerra. Es decir que en el año había una temporada, esta es la de
la primavera. La LBLA dice: “Aconteció que en la primavera, en
el tiempo cuando los reyes salen a la batalla...”. Y la Biblia
Textual dice: “Aconteció en la primavera del año, al tiempo que
los reyes suelen salir a campaña…”, es decir; era la primavera, el
mejor tiempo para hacer guerra, y el Rey David está en
“campaña” conquistando los últimos pueblos que faltan para
extender todos sus dominios.
No quiero excusar a David en esta aclaración de épocas y
temporadas. Pero no podemos juzgarlo de irresponsable al no ir a
la guerra contra Amón de Rabá y solamente enviar a su general.
Ya lo dije, Joab logró una vez más concretar los objetivos
trazados en la meza de palacio, acordados con su majestad el rey.
Pero la ciudad de Rabá ya había sido sitiada. El escritor del
segundo libro de Samuel, hace una introducción en el v. 1 del
capítulo 11, para luego dar pase a lo siguiente: los pecados de
David, que es el centro de estos dos capítulos, el 11 y el 12. David
entonces estaría en Jerusalén mientras que su ejército estaría
peleando. Él estaría esperando noticias de la guerra, esperando
que su ejército le haga ir para tomar en su nombre la ciudad (2
Samuel 12.27 y 28).
Concluimos que David, a sus 44 años de edad, con
aproximadamente catorce años de reinado (o más), ya se había
fortalecido grandemente. Por lo tanto, no era un irresponsable que
en lugar de estar peleando las guerras de Israel, estaba ocioso y
sin hacer nada en el palacio de Jerusalén. David pecó porque en sí
mismo era un tipo ordinario, quien también necesitaba de la
gracia de Dios para ser de agrado a Dios. Pecó como cualquier
otro hombre, porque tenía una naturaleza pecaminosa, la cual no
pudo sujetar, y nadie la puede sujetar sino hasta ser redimidos
totalmente o con la muerte (que es ganancia).
Pero, ¿cuándo era este tiempo de guerra? Pues, las guerras de la
antigüedad en Oriente Medio no se disputaban en los meses de
invierno, porque las lluvias y el clima frío dificultaban los viajes y
las campañas militares. También los veranos eran muy calurosos,
y el otoño estaba marcado por tormentas del Mediterráneo
imposibles de predecir (Nuevo Comentario Ilustrado de la Biblia,
Earl D. Radmacher)

Por tanto, los reyes encontraban que la primavera era la mejor


época para ir a la guerra, pues el clima era más cálido, y los
hombres podían acampar sin dificultad. Las lluvias invernales
habían calmado, y los caminos sin pantanos eran más favorables
para el paso de los carros con caballos y el rápido avance de las
tropas. También era la época de la cosecha de trigo y cebada. Los
ejércitos invasores podían vivir comiendo de la cosecha mientras
avanzaban por el territorio a conquistar.
Había entonces un periodo disponible de varios meses para la
guerra durante la primavera. Muchos de los anales reales asirios y
babilonios incluyen una nota que señala que una campaña militar
empezaba en el primer mes del año (entre marzo y abril)
(Comentario del Contexto Cultural de la Biblia AT (J.H. Walton –
V.H. Matthews – M.W. Chavalas)

La primavera, en tanto, marca el comienzo del año en Israel. Por


ello, el primer mes del año, “Nisan”, también es llamado
“Chodesh Ha-Aviv”, que significa el “mes de la primavera”, ya
que es el primero de los meses de primavera, y porque en este
mes se produjo el éxodo de Egipto (Éxodo 13:3-4; 23:15; 34:18;
Deuteronomio 16:1). Por tanto, los reyes de Israel salían a la
guerra en el mes de Nisán (entre Marzo y Abril).

Esto es proféticamente importante, pues señala al Mesías y el


cumplimiento de las Escrituras (ellerslie.com). Fue durante el mes
de Nisan, al que los judíos llamaban “la primavera”, cuando Jesús
entró humildemente en Jerusalén montado en un pollino como un
hombre de guerra. Tal como lo hacían los reyes de la antigüedad,
¡el Rey había salido a la guerra!

Tres autoridades
El Profeta
El Sacerdote
El Rey
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Abriendo ventanas en el TikTok o en navegador
La semana anterior reflexionamos basados en la vida de Ana la
madre de Samuel sobre las decisiones que producen bendiciones,
esta noche vamos a reflexionar en una parte de la vida del Rey
David para tomar enseñanzas sobre aquellas decisiones que
producen destrucción en la vida de un cristiano, en la vida de un
hijo o hija de Dios, y lo haremos basándonos en la muy conocida
historia de David y Betsabe.

Veamos las enseñanzas que podemos tomar para nuestra vida y


comprendamos cuales son esas decisiones que pueden traer
destrucción a nuestra vida, a nuestra familia, a nuestro
matrimonio, a nuestro ministerio, etc.
La caída de David comenzó cuando decidió abrir su mente a la
tentación, cuando el vio a esa mujer hermosa que se estaba
bañando, no se quedó ahí, quiso saber más de ella, y eso lo llevo
al pecado de adulterio (vs 3)
Hay una frase que dice: “No puedo evitar que los pájaros vuelen
sobre mi cabeza, pero si puedo evitar que hagan nido en ella”
Muchas veces nuestros fracasos comienzan con un pensamiento
que le dimos lugar en nuestra mente, cuando comenzamos a
indagar, cuando comenzamos a querer conocer más sobre algo
que puede ser dañino, cuando comenzamos a querer saber más
sobre alguien que no nos conviene relacionarnos.
Cuando comenzamos a interesarnos en negocios ilícitos que no
son agradables a nuestro Dios, sin importar cuanto podamos
llegar a ganar.
En los siguientes versículos (vs 4-5) podemos ver que David
decidió caer en la tentación, mando a llamar a Betsabe y se acostó
con ella, y luego ella le mando a decir que estaba embarazada, las
consecuencias de su decisión lo estaban alcanzando.
David decidio no buscar la puerta que Dios nos da siempre con la
tentación y cayo (vs 4)
Siempre en toda tentación hay una salida, hay un oportunidad
para decidir decir no, hay una oportunidad de apartarse (1
Corintios 10:13)
En toda situación hay un punto de no retorno, como en el caso de
las aeronaves, donde ya no hay remedio, donde las cosas se
enredan de tal forma que no hay salida humana, ESTE DIA
PUEDE SER ESE PUNTO, DECIDE HOY MISMO
APARTARTE, DECIDE HOY MISMO DECIR NO.

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