Cuando El orador cuando se encuentra realizando un discurso o

una ponencia requiere de ciertos métodos, como lo es el contacto

visual esta es una manera de persuadir al auditorio de forma que,

desde el momento del inicio del tema estos tengan total atención

sobre el orador.

Ahora bien, a todos nos ha pasado que durante una ponencia o

exposición nos da miedo escénico y que no podemos utilizar el

contacto visual por temor al qué dirán si me equivoco y por ello

tenemos otra técnica para aplicar que son los apoyos visuales,

estos no son más que instrumentos de ayuda para el orador,

Son medios que se emplean en la oratoria para expresar

“visualmente” un concepto o una idea y sirven para estimular la

imaginación de los oyentes o para poner de relieve una idea

básica en nuestro discurso.

Como regla primordial el apoyo visual debe ser de un tamaño

acorde de modo que todo el público lo alcance a ver. Debemos

Asegurar el empleo de colores que hagan contraste en fin de

lograr un efecto impactante así como Enumerar los pasos o

etapas de un proceso.
El utilizar una presentación en power point o cualquier otro software
similar, va a ayudarnos siempre en la presentación de un discurso; el
hablar en público no solo consiste en ponerse a hablar sin un rumbo
fijo. Al utilizar este recurso visual vamos a captar más rápidamente la
atención del público y al mismo tiempo vamos a sentirnos más seguro
sobre el tema que se está desarrollando.

Utiliza esta herramienta para hacer un buen discurso; pero no la

utilices de mala manera; no sobrecargues las diapositivas con
demasiada información, pensando que si se te olvida algo, allí lo vas a
tener.

No lo hagas así porque esto provocará que las personas se aburran

de ver tantas letras que a veces ni se va a entender lo que pusiste en
tu presentación.

Pon ideas generales que te sirvan de apoyo únicamente; recuerda que

tampoco debes de leer la presentación. Utiliza gráficos, imágenes y
texto no sobrecargado; verás que esta es una de las mejores tecnicas
para hablar en publico porque aumentará tu seguridad y hará que
hagas un mejor discurso.

Dentro de los usos que se le pueden dar a estas técnicas visuales

encontramos que:

1. Sirven para captar la atención del público (rompen la

monotonía).

2. Facilitan la comprensión.

3. Enriquecen la presentación.

4. Ayudan a transmitir una imagen de profesionalidad.

5. Dan seguridad al orador (cuenta con material de apoyo).

Este material de apoyo debe ser eso, un apoyo al discurso, y no

convertirse en la base de la presentación.
No pueden restar protagonismo al orador.

Si se va a utilizar material de apoyo, hay que emplearlo ya en los

ensayos.

En los ensayos hay que recrear las condiciones en las que se va a

desarrollar la intervención.

El uso de este material de apoyo requiere una práctica que sólo con el
ensayo se consigue.

Puede ocurrir que al contar el orador con material de apoyo se sienta

más tranquilo y le lleve a desatender el ensayo: no se puede caer en
este error.

Hay que tener prevista la posibilidad de que en el momento de la

intervención no funcione el proyector.

Para evitar una situación tan difícil como ésta (por remota que
parezca) el orador, además de preparar el discurso contando con
estos elementos de apoyo, debe ensayarlo también sin la ayuda de los
mismos.

- Tipos Estas ayudas visuales pueden ser: el pizarrón, los

rotafolios, las diapositivas, las películas, los mapas, los

diagramas, los planos, los dibujos y hasta las maquetas

reducidas a escala. Sirven de complemento a las formas

verbales y contribuyen a presentar el tema en forma más clara y

más convincente.

En cuanto a las técnicas aplicadas y el efecto que tienen tanto

para el orador como para el auditorio podemos decir que en el

 orador proporciona seguridad a la hora de realizar su exposición

y la del público la ayuda de comprensión del tema.

En general se puede decir que estas técnicas son de mucha ayuda,

y que deben ser imprescindibles a la hora de realizar una ponencia

o discurso más que todo para aquel orador primerizo, aquel que

comienza a incursionar en el mundo de la oratoria puesto que le

ayuda a perder un poco el miedo y estar seguro de aquello que

expondrá pues cuenta con un respaldo de información puesto que

la oratoria es el arte de hablar en público con elegancia para

persuadir, convencer, educar o informar a un auditorio. El orador

debe tratar de acercar el discurso a la audiencia, de romper distancias. Tiene que intentar

ganarse al público, con independencia de que éste coincida o no con las tesis defendidas. Esto

ayuda a captar su atención y a predisponerle favorablemente hacia los puntos de vista del

orador.Al público se le gana con amabilidad y simpatía. Saludar al público tan sólo subir al

estrado, mirándole, agradeciéndole sinceramente su presencia. Agradecer públicamente la

presencia de alguna persona o grupo que se haya desplazado desde lejos. Mostrar una

imagen amable (en la expresión, en la voz).

Mirar al público (permite fortalecer la comunicación).

Contar anécdotas que resulten cercanas (que afecten a gente que el público conoce, que hayan
tenido lugar en dicho localidad, etc.).

Introducir en el discurso toques finos de humor (humaniza el discurso, lo acerca al público); tienen
cabida aunque se esté tratando un tema serio (ayuda a quitarle dramatismo).

Si hay un intermedio aprovecharlo para departir con el público asistente.

Al final de la intervención volver a dar las gracias por la atención prestada.