Es cada uno de los maderos o perfiles metálicos, según sea la
construcción, que de trecho en trecho atraviesan de babor a estribor los buques y sirven para aguantar los costados y sostener las cubiertas con todo el peso de la artillería, estructuras y demás efectos.
Se puede distinguir los siguientes:
Bao simple o maestro: es el mas largo de todos y por
consiguiente se coloca en la cuaderna maestra, que contribuye a la resistencia transversal del buque siendo elementos de soporte de las planchas de la cubiertas, transmitiendo los esfuerzos que se reciben a los costados a través de las cuadernas. Bao reforzadon: cumple misiones específicas con estructuras longitudinales de la cubierta, en las que será elemento eficaz de resistencia transversal y sujeción de los longitudinales de cubierta. Y además es un elemento de reforzamiento de las aberturas de las escotillas. En general el bao reforzado dispondrá de escotes para el paso de los longitudinales pudiendo ser intercostal entre las esloras y mamparos longitudinales. Bao de aire, en el aire o vacio: son cualquiera de los que sostienen el sollado cuando es levadizo, y pueden dividirse en dos mitades siempre que convenga. También, y aun más propiamente, se decía de los que se ponían en las bodegas de algunas embarcaciones mercantes de madera con el solo objeto de dar más apoyo a los costados; así es que no se formaba cubierta sobre ellos.
Longitudinales de cubierta.
El longitudinal de cubierta es el elemento de soporte de las cubiertas
cuando éstas tienen estructura longitudinal, contribuyendo eficazmente a la resistencia longitudinal del buque. Transmitiendo los esfuerzos que recibe la cubierta a los anillos transversales y mamparos. El longitudinal tiene características similares al bao en cuanto a tipo de elemento y separación, uniéndose a los refuerzos de los mamparos mediante consolas similares a la unión de baos y cuadernas, siendo sujetados entre estas uniones mediante los baos reforzados con o sin ayuda de consolas. En algunas ocasiones el tipo de perfil puede ser exclusivamente de llanta sin ala o tabla.
Aberturas de Escotilla.
Cualquier abertura que se realice en una estructura, origina una
discontinuidad que se refleja especialmente en una disminución de la resistencia y una distribución no uniforme de las líneas de fuerza que la recorren, siendo el origen de concentración de esfuerzos en determinadas zonas. Si se analiza gráficamente la cubierta, la cual es recorrida por una serie de líneas de fuerza, distribuidas uniformemente, a la que se ha practicado una discontinuidad.
Para evitar los problemas derivados de las aberturas de escotillas
han de tomarse en cuenta los siguientes principios:
a) Se deberán reforzar las planchas y elementos de soporte en
los laterales longitudinales de las escotillas. Con este reforzamiento se compensara en parte el acero eliminado por la abertura, al mismo tiempo que se harán más resistentes para la mayor concentración de esfuerzos. b) Las esquinas de la abertura se realizan redondeadas para facilitar la continuidad de las líneas de fuerza a la vez que evitar por la misma causa, fracturas en la plancha. c) Para compensar la perdida de resistencia y disponer de máximas resistencias contra esfuerzos en las esquinas, se colocaran planchas de diamantes o dobles en las misma, aumentando de esta forma el espesor y el reparto de esfuerzos por lo tanto será más adecuado. Estas planchas se soldaran con las adyacentes cuidando mantener una continuidad con los sistemas apropiados. d) Todo el reforzamiento en base a elementos de soporte se hará de tal modo que su resistencia sea máxima, basándose fundamentalmente en la colocación de esloras y baos reforzados en los laterales, tanto longitudinales como transversales de las aberturas, así como en el resto, tratando de transmitir al máximo los esfuerzos a las estructuras de costado y mamparos y al fondo a través de los puntales. e) Se tratara de dar resistencia a la cubierta con la colocación de elementos específicos, como son las brazolas y cierres metálicos de las escotillas. Cierre de Escotillas.
Los cierres de escotillas han evolucionado con el tiempo, tratando de
encontrar una solución optima a dos problemas básicos: la facilidad de colocación y quitado, y la aportación de resistencia a la abertura.
Tradicionalmente las tapas de escotilla estaban formadas por
elementos separados de dos tipos: las galeotas y los cuarteles. Las galeotas que se apoyan en las brazolas y sirven de soporte a los cuarteles o conjuntos de tablones a veces reforzados con flejes de acero, que hacen de cierre de la abertura.
En el sistema moderno de cierre de escotilla existen varios con
características exclusivas bajo patentes, que en líneas generales son estructuras metálicas de forma más o menos paralelepípeda, con rodillos laterales que ayudaran al desplazamiento, consiguiendo una perfecta estanqueidad en general, se pueden definir los cierres de dos formas: