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GIRO MÁXIMO de Michael Phelps

Serpientes. Durante el tiempo que Michael Phelps puede recordar, que está serpientes odiaba. Como un niño pequeño, él
cogió una piedra en el patio delantero de sus padres y encontró un siseo, deslizándose serpiente. Él estaba tan
traumatizada que durante décadas la memoria podría jugar de nuevo en las pesadillas que lo dejó temblando, sudando y
no puede volver a dormirse. Amigos y familiares ni siquiera se les permitió decir la palabra "serpiente" en su presencia.

Sin embargo, en octubre de 2014, cuando se le indique en la terapia de arte para dibujar una imagen temible desde su
infancia, Phelps sacó ese momento que nunca podría escapar. Era un testimonio de lo lejos que había llegado en el
Meadows, un trauma y la adicción al centro de tratamiento psicológico alrededor de una hora al noroeste de Phoenix.

Phelps entró en el Meadows cinco días después de su segundo arresto por DUI, el 30 de septiembre,

2014. En esos cinco días, que apenas salió de su habitación, comieron o durmieron. Sin embargo, siguió bebiendo.

"Sonaba terrible", dice el entrenador de toda la vida, Bob Bowman. "Apenas coherente". A su llegada, Phelps envió un

mensaje a su madre, Debbie, y Bowman les decía que era la más miedo que jamás había sentido. Temblaba ante la idea

de compartir sus demonios internos con los extraños. Dos años antes, en Londres, se había cimentó su estatus como un

dios olímpico, pero ¿a qué costo?

cuestiones de Phelps se centraron en gran medida de sus complicadas relaciones con dos de los hombres más

influyentes en su vida - el que había estado allí para él y el que prácticamente no tenía. los padres de Phelps se

divorciaron cuando él tenía 9 años, y él había siempre sintieron abandonados por su padre, Fred. La piscina era

su fuga, y Bowman era una


padre sustituto de clases. En el agua, lo empujó a realizar. Fuera del agua, él le enseñó a conducir y el
nudo de una corbata.

Con el tiempo, Phelps se dio cuenta de que todas las medallas olímpicas en el mundo no pueden aliviar su dolor - y en

su lugar hizo la vida más complicada. Para el año 2014, que se acercaba

30, perdido, sin identidad más allá de la de un campeón de natación. Se auto-medicado y se preguntó si la suya era

una vida digna de ser vivida. "No me importa una s ---", dice Phelps. "No tenía la autoestima Sin autoestima Pensé

que el mundo sólo sería mejor sin mí que pensé que era la mejor cosa que hacer -.... Acaba de terminar con mi vida"

Pero después de su detención, la familia y los amigos persuadido a Phelps para obtener ayuda. Aquí era su oportunidad, le

dijeron, para hacer frente a los problemas que había evitado durante tanto tiempo. Ese primer día en el Meadows, que apenas

hablaba con nadie. Comía sola y lloró hasta quedarse dormido. Pero poco a poco, se abrió y comenzó a entender sus

pesadillas de serpientes.

En realidad, todo tenía sentido.

EN UNA despejados, bañado por el sol de la mañana de enero en el Complejo Mona Plummer Aquatic en la Universidad

del Estado de Arizona, Bowman se encuentra bajo un dosel, el vapor de su café desvaneciéndose en el aire por encima.

Nueve meses antes, Bowman dejó el North Baltimore Aquatic Club para tomar el trabajo de entrenador en jefe en ASU.

En esta mañana, Phelps y otros nueve aspirantes olímpicos se empujan hacia arriba y abajo de la piscina de 50 metros,

sus ojos puestos en las pruebas olímpicas de Estados Unidos (que comienzan el domingo en Omaha, Nebraska) y,

finalmente, Río de Janeiro.

Phelps es un bloqueo virtual para hacer que el equipo de Estados Unidos para Río y convertirse en el primer nadador varón

americano para competir en cinco Juegos Olímpicos. Si gana el oro a los 31 años (su cumpleaños es el 30 de junio), se

convertiría en el medallista de oro más antigua de la historia olímpica de natación. Ryan Lochte (32) y Matt Grevers (31)

podrían unirse a él en Río. Pero Río es mucho más que Phelps añadiendo a su legado. Es el siguiente paso para lograr la

misma paz y el equilibrio en la tierra como se ha tenido en el agua.

Esta mañana, Bowman paga sólo la mitad atención a calentamientos mientras trata de explicar su relación con Phelps

en las dos décadas anteriores. Todo había sido un secreto durante tanto tiempo; ya no. La pareja se conoció en 1996,

cuando llegó a Bowman North Baltimore en su camino a la escuela veterinaria. Bowman planeado para dejar de

entrenar después de un par de promesas olímpicas le dejó antes de los Juegos de Atlanta, pero de North Baltimore

Murray Stephens le ofreció $ 30.000 a entrenar por una temporada más. Fue entonces cuando se encontró con un

niño de 11 años de edad, Phelps. Todo cambió.


Incluso en el comienzo, como entrenador Michael Phelps no fue fácil. Se le diagnosticó a los 9 años con
TDAH y puede ser terco, obstinado, aislado, implacable y despiadado. "Prefiero complejo", dice Bowman.
Pero esos son los mismos rasgos que pueden reproducirse grandeza. Bowman fue igualmente perseguido,
el raro individuo que se negó a retractarse de Phelps, incluso si el nadador estaba lanzando una botella de
agua en la cabeza o "MF" le -ing frente al resto del equipo. La dinámica era sencilla. Bowman empujó
Phelps. Phelps empujados hacia atrás. Bowman empujó aún más. Eventualmente, alguien se rompió.

los padres de Phelps se divorciaron cuando él tenía 9 años, y se sintieron abandonados por su padre durante muchos años.

"Ellos van en ella, y nada dejarían de ellos", dice Allison Schmitt, otro nadador North Baltimore. "No
había nada que hacer sino mirar. Era como una telenovela."

Las historias de sus muchas peleas son legendarias. Al Meadowbrook Aquatic & Fitness Center, donde Phelps

entrenó, todavía hay un hueco enorme en un marco de puerta, cortesía del pie derecho de Bowman después de uno

de sus argumentos. Un entrenador tiene el cronómetro agrietada Bowman vez tiraron en una pared con disgusto. Y

nadie se olvide pronto el tiempo de Bowman y Phelps pelados fuera de la zona de aparcamiento en un Meadowbrook

testosterona llenos de "Días de trueno" -como la rabia, el dedo medio completamente extendido.
"La forma en que se manejaron en ocasiones era embarazosa," dice Debbie Phelps.

En 2010, un partido gritando de recogida de equipajes en el Aeropuerto Internacional de


Baltimore-Washington terminó con Bowman implorando Phelps nadar en otro lugar. Bowman dice Phelps
no fue a practicar por día. "Pensé que se había ido", dice Bowman. "Entonces se presentó como si nada."

Bowman dice a menudo sesiones de entrenamiento fueron una de tres maneras: Phelps podría comportarse mal,

socavar las instrucciones de Bowman o estar tan centrado y dominante que iba a desmoralizar a todos los

demás. Y Dios no lo quiera Bowman muestran excesiva atención a cualquiera de sus otros nadadores. "Si hay

alguien que pensaba que me gustaba o podría tener una onza de atención lejos de él, que estaban en vigilia de

siempre", dice Bowman.

Bowman intentó llegar a la piscina antes de cualquiera de sus atletas, a menudo antes de las 5 de la mañana del fin de

semana, Phelps tratará de golpearlo. "Y si alguna vez se hizo, fue:" Bueno, yo estoy aquí antes? - ¿no sabes que el

entrenador debe estar aquí antes de que el atleta", dice Bowman. "Me gustaría ser como, 'Está bien, Michael. Eso es Bob

5028 y Michael 2. Cuando incluso hacia arriba, que me haga saber.'"


Incluso hoy en día, sigue siendo la maña nervioso. En una sesión de entrenamiento de enero de Phelps pide Bowman

por su tiempo después de completar un conjunto. Bowman no lo tiene. "Ver las s --- Tengo que tratar?" Phelps dice,

sonriendo. Unos días antes, Bowman se perdió una sesión de entrenamiento - una rara ocurrencia - porque estaba

enfermo. Dice Phelps le envió un mensaje: "Si yo hubiera sabido que no me iba a entrenar me hubiera quedado solo

en Baltimore." Bowman no lo tomó como una broma.

"Sólo que iba a hacer eso", dice Bowman. "Todo el mundo está preocupado, 'Oh, Dios mío, Bob nunca se pierde una

práctica. Y ese es su mensaje a mí. Y lo dice en serio. Es una especie de esta cosa egocéntrica."

No hasta Bowman llegó a Ann Arbor en 2005 para entrenar a la Universidad de Michigan equipo de natación no se

entiende completamente la dinámica. Phelps inscribieron allí poco después llegó Bowman, y Greg Harden, director de

asesoramiento deportivo de Michigan, se reunió con los dos hombres con regularidad. Fue el constructor de paz, una

vez que sugiere que tal vez a Bowman cuando Michael estaba recogiendo peleas con su entrenador que

inconscientemente estaba luchando con su padre. "Así que cada vez que se sentía amenazado o frustrado o lo que sea,

él me convierta en Fred y me grite", dice Bowman. "Me tomó un rato para darse cuenta de eso."

Cuanto más entiende Bowman, el más comprensivo que sentía. Para Phelps, el éxito trajo aislamiento. No tenía

compañeros, no hay lugar donde podría encajar y actuar como todos los demás de su edad. Creció mirando a una

línea de negro en la piscina, maduración más lenta que sus pares y, finalmente, buscando refugio de los globos

oculares que se pegaron a él dondequiera que iba. Pero la naturaleza del entrenamiento para los Juegos Olímpicos no

permite mucha planificación de las consecuencias emocionales. E incluso si lo hiciera, nadie podría haber preparado

Phelps por su nivel de éxito.

"Tal vez fue un error empujarlo tan duro para hacer estas cosas", dice Bowman. "Pero yo no lo creo. Él mira
hacia atrás en eso con orgullo. Pero me siento como en el camino, es probable que no pasamos suficiente
atención a los otros lados de él."

Después de ganar ocho medallas de oro en Beijing en 2008, Phelps fue en una gira mundial de entrevistas,
conocer y saludar y alfombras rojas. En su primer día lejos de todo eso, fue fotografiado fumando de una
pipa de agua en una fiesta en Carolina del Sur. La fotografía fue viral. Fue suspendido por EE.UU. Natación
durante tres meses. Después de los campeonatos del mundo en 2009, la bebida de Phelps, fiestas y formas
de rebelión empeoraron. Cada día en Meadowbrook, los ojos de Bowman rebotaría desde el reloj de la
puerta delantera y trasera, preguntándose si Phelps mostraría.
"Fue horrible", dice Bowman. "Me grito a él, manejarlo mal. Y él sólo iba a perder más. Él iría a Las Vegas. Lo

haría esto o aquello. A continuación, se sentiría culpable, volver y entrenar muy duro. nos mantenían haciendo

este baile ".

Phelps querían dejar de fumar, pero sentía que no podía porque las obligaciones de patrocinio. "Tenía que ir
otros cuatro años. No había otra opción", dice. "Pensé que podría fingir. Solo hacer un poco y fingir mi camino a
través de él. Y casi lo hice."

Phelps y Bowman, que compartió un agente, fueron atados juntos como entrenador y el atleta a través de
patrocinios y endosos así. Sin embargo, su relación se había deteriorado hasta el punto de que Phelps iba a
cambiar su asiento del avión cada vez que su reserva fue reservado junto a Bowman. Comunicación de la
piscina se llevó a cabo a través de palabras con los amigos. Cuando Phelps participó, Bowman sabía que
estaban en un buen lugar. Cuando no lo hizo, él sabía que no eran.

"Fue como Goldman Sachs, demasiado grandes para caer, ¿verdad?" dice Bowman. "Yo quería darle una lección y

dejarlo sufrir. Pero ahora no puedo porque él es como un tesoro nacional, así que tenemos que seguir haciendo esto."

En el verano de 2012, nadie odiaba a nadar más de Michael Phelps. Y nadie despreciaba entrenar más de Bob
Bowman. De alguna manera, se las arreglaron para mantener todo el exterior del círculo más íntimo secreto de
Phelps. "Entramos en [Londres] al igual que todo estaba bajo control. Sí, claro. Era todo giro. O PR", dice
Bowman. "Estamos muy buena, bien entrenados en la PR. Y, honestamente, para su futuro, esa es la forma
que tenía que ser."

Con Debbie y sus hermanas en las gradas, Phelps de alguna manera todavía ganó seis medallas en Londres,

incluyendo cuatro de oro. Londres terminó con un abrazo y un "buen trabajo", y luego los dos hombres se

separaron. Phelps se retiraron. Bowman dejó entrenar. Sin embargo, un año después, Phelps dijo Bowman

quería volver. "Yo no quería saber nada", dice Bowman. "Yo no quiero pasar por eso otra vez."

Phelps convencidos de Bowman que esta vez sería diferente. El entrenador también pensó un retorno a la

piscina podría ayudar al nadador mantenerse fuera de problemas. Pero esa caída, Phelps fue detenido y

acusado de DUI. "Cuando eso sucedió, yo estaba como, 'Eso es todo -Usted nunca va a cambiar'", dice

Bowman. "Y yo estaba muerta de miedo lo que el resto de su vida iba a ser similar."
El entrenador Bob Bowman se convirtió en un padre sustituto de las clases para Phelps.

FRED PHELPS No podía creer lo que estaba oyendo. Como las palabras vinieron a través del teléfono que mañana

de septiembre, un escalofrío se apoderó de él. Un amigo había llamado para decirle que su hijo había sido

arrestado bajo sospecha de DUI. Los detalles eran horrible: la conducción 84 mph en el estrecho, 45 mph, de no

rebasar-permitido Fort McHenry túnel; registrarse 0,14 en una prueba de alcohol en sangre, casi el doble del límite

legal de 0,08 en Maryland. Michael se declaró culpable y fue condenado a 18 meses de libertad condicional, que

completó el domingo. Fue su segundo DUI en 10 años; también los primeros en

2004.
"Se asustó vida fuera de mí", dice Fred. "Podría haber estado muerto."

Después de la llamada telefónica, Fred envió un mensaje a Michael. "No fue bien recibido", dice Fred. "Eso le molestó. Así

que se retiró."

Esta había sido la historia de Michael y Fred por todos estos años. Un padre tratando de volver a conectar con
su hijo y un hijo que simplemente no estaba interesado. Ellos eran más similares que sea eligieron a admitir -
ambos terco, obstinado e implacable. Fred era un ex jugador de fútbol americano universitario y un policía
estatal de Maryland durante 28 años antes de pasar a una función administrativa. Vivía en un mundo en
blanco y negro del bien y el mal. Antes de la subida de Michael a la fama, su relación, incluso después del
divorcio, era bastante típico de un padre y un hijo. Habían peces en Maryland
embalses y asisten a los juegos de los Orioles, con Fred usando sus conexiones para conseguir Michael en la
sede del club donde alguna vez se reunió Cal Ripken Jr. "Había salido de allí con bates y pulseras
autografiadas y fotos", dice Fred. "Esas eran las cosas que pude hacer por él, cosas que la figura de un padre
debería estar haciendo."

Los dos hermanas mayores de Michael se había mantenido en contacto con su padre, pero a medida que la popularidad

de Michael creció, quería menos que ver con su padre. Debbie creyó que era el camino de su hijo de protegerla. A día

de hoy, Michael no va a decir nada malo de su madre, que regresó a la escuela después del divorcio y se convirtió en un

administrador académico para ayudar a mantener a la familia. Ella nunca se volvió a casar. "Mi ex esposo amaba a sus

hijos. Ama a sus hijos", dice Debbie. "Le molestaba. Pero no creo que él sabía cómo solucionarlo. Así que Michael

simplemente siguió la escalada y la escalada y las cosas iban bien, por lo que no se sentía que necesitaba su padre."

Fred había servido como oficial en la cubierta para muchos de Michael de cumple. En un momento en el año 2008, Michael

accedió a reunirse con su padre, pero luego lo sopló fuera. "Yo simplemente no quiero", dice Phelps. "A veces, yo estaba

como, 'Esta es una muy buena idea.' Y nos gustaría texto y luego me acaba de dejar de enviar mensajes de texto y

preguntando a mí mismo, '¿Qué estoy haciendo? ¿Por qué? No quiero eso. No necesito eso'". En otra ocasión, hermanas de

Michael lo llevaron a almuerzo con su padre. Se sentó a través de la comida sin decir una palabra. "Seguía intentando e

intentando, pero siempre había algo que hacer," dice Fred.

Fred está compartiendo su versión de los hechos en el vestíbulo de un hotel a las afueras del aeropuerto BWI. Rara

vez concede entrevistas y accedió a hablar en este caso sólo porque Michael le pidió que, a petición de ESPN. Pero

hay nervios, ansiedad. Fred no quiere que sus palabras se volvieron torcidos o de cualquier manera para complicar

aún más la relación con su hijo. "No es sólo algo que voy a tolerar", explica Fred. "Hemos llegado muy lejos."

La erosión de una relación padre-hijo nunca es tan simple como uno o dos incidentes. Sin embargo, hay dos momentos

en particular, que molestó a Michael. En 2003, Michael dice, Fred se comprometió a presentarse a una reunión en la

Academia Naval en Annapolis, Maryland, pero nunca lo hizo. Ese día, Phelps estableció su primera corta duración

récord de US. Tres años antes, en Sydney, en los primeros Juegos Olímpicos de Michael, Fred profundamente molesto

cuando Michael en el primer día después de la competición, tiró de Michael a un lado para presentarle a su nueva

esposa. Nadie en la familia sabía que Fred había vuelto a casar.


"El chico acaba de hacer los Juegos Olímpicos", dice Bowman. "Se hizo bastante bien. Aquí es el primer día en

que él sólo puede disfrutar de estar allí y que ha este vierten en él? Michael era un caso perdido. No podía tratar

con él."

Phelps y su padre no hablaba mucho después de Sydney. Pero Fred continuó siguiendo la carrera de Michael. En Atenas en

2004, dio voces desde 30 pies de distancia cuando Michael recibió su primera medalla de oro olímpica. Cuatro años más

tarde, se observó la mayor parte de asombrosa actuación de su hijo en Pekín de un hospital de Maryland, donde su

segunda esposa estaba luchando contra el cáncer. (Ella murió más tarde.) "En cualquier lugar o en cualquier momento en

que era, estaba viendo", dice Fred. "Realmente, esa era la única manera de que pudiera ver."

Mientras Debbie se convirtió en un imán para las cámaras de televisión con sus reacciones emocionales a las
victorias de Michael, Fred se quedó en el fondo. Los reporteros llamaron y llamó a su puerta. Él los apartó. Él
y Michael tenía el mismo nombre - Michael Fred Phelps. Extraños verían tarjeta de identificación o de crédito
de Fred y preguntarle si estaba relacionado con el campeón olímpico. A veces, admitió que era su hijo - hasta
que empezaron a pedir autógrafos. "Fue - tienes que ser s --- estaño mí", dice Fred.

En el segundo día de su llegada a Los Prados, Phelps comenzó a descongelarse. Los pacientes que lo
invitaron a jugar al voleibol, y comenzó a hacer amigos que sigue refiriéndose a la actualidad. Esa
segunda noche, mientras se ve lunes por la noche, leyó en la parte inferior de la pantalla que EE.UU.
Natación le había suspendido de la competencia durante seis meses y se había llevado a su oportunidad
de competir en el campeonato mundial. Algunos de los pacientes miraron. Nadie sabía cómo reaccionar.
Phelps rompió la tensión. "Sí", dijo. "Ese soy yo." Empezó a hablar de lo sucedido. Y esa noche hizo una
promesa de que el mundo lo vería de quién era, no lo que ellos querían que fuera. "La gente como que me
construyen como el niño allAmerican", dice ahora. "perfecto, sin errores, esto y aquello. Pero eso no era
yo, ¿ya sabes? Quería que la gente para llegar a conocer el verdadero yo ".

En el tratamiento, Phelps ganó el apodo Predicador Mike porque cada día se inició con un capítulo de "Una
vida con propósito", un libro que le dio el ex apoyador de los Baltimore Ravens y buen amigo Ray Lewis.
Phelps compartieron las lecciones de la lectura de cada día con otros pacientes. Se abrió a su terapeuta y
otros pacientes sobre sus luchas con su padre, sus peleas viciosas con Bowman y los retos del manejo de la
fama. Un día, él confesó que había visto por mucho tiempo a sí mismo como el bebé "traer a la familia de
nuevo juntos". La respuesta de su terapeuta:. "Bueno, usted no pudo Cómo funciona
se siente?" Con el tiempo, Phelps se dio cuenta de que todas esas pesadillas de serpientes siguieron algún tipo de conflicto,

conversación o pensaban que involucró a su padre.

"Ya sea que estaba discutiendo con mi padre o si nada de mi padre vendría, tendría un sueño sobre una
serpiente que semana", dijo. "Me siento como que es por lo que siempre tenía miedo de ellos. Yo no
quiero volver a eso. No sabía si habría un conflicto entre nosotros, así que le rígido-armado y se fue. "

Había psicodramas en la que Phelps podría ver los próximos seis meses, 12 meses y cinco años con su
adicción y por fuera. "Por un camino, usted y su familia reciben cada vez más cerca", dice. "Y por el otro
camino, se obtiene más y más separados. Al ver ellos fue bastante loco. Me ayudó a la cabeza clara. Se
ha quedado atascado en el culo durante tanto tiempo."

Entre las sesiones de terapia, Phelps formados en una pequeña piscina, que trabajan en patadas taladros y vueltas rápidas

que otros pacientes observados. Cada mañana, se levantó en el gimnasio de las instalaciones y un ciclo de 20 millas por

día. Hablando con él por teléfono, Bowman sintió un cambio. Pero no hasta que visitó Phelps se dio cuenta en qué grado.

"Soy la persona más escéptica nunca", dice Bowman. "No creo que nada de eso 'Él nunca cambia, siempre va a ser de

esa manera.' Pero era completamente diferente en una manera que nunca había imaginado. Era honesto,

comprometido. Salí de allí ese día pensando que tal vez hay una posibilidad de que esto le ayudaría ".

COMO SEMANA DE LA FAMILIA abordado en el Meadows, Phelps se preguntó si se debe incluir a su padre en

la lista de personas a invitar. "Yo no quería otro momento decepción en mi vida", dice. "No quiero poner toda la

energía en algo que pensé que era un callejón sin salida." Sin embargo, los terapeutas y otros pacientes anima

a Phelps a mantener una mente abierta. Así que incluía el nombre Fred Phelps.

En el día de Fred recibió su invitar, él no lo pensó dos veces en ir. Michael era su hijo. Necesitaba ayuda. Pero
eso no hizo que caminar a través de las puertas en el Meadows más fácil. Michael se sorprendió cuando Fred
llegó. Extendió la mano y los dos se dieron la mano. Entonces Michael tiró de él en un abrazo. Ninguno de los
dos podía recordar la última vez que se habían abrazado. "Eso sólo me dijo que estaba contento de que yo
estaba allí", dice Fred.

Debbie y novia de Michael, Nicole, estaban allí esa semana también. Durante los siguientes días, Michael y
su padre se abrieron. Algunas de las palabras se sentía bien. Otros
no lo hizo. Ambos trataron de no tomarlo como algo personal. "Había cosas como que falta que se encuentran que no tenía ni

idea de que significaba mucho para él," dice Fred.

Phelps está ahora trabajando para encontrar el mismo equilibrio y la paz que encontró en el agua en la tierra seca.

Una tarde, mientras que Michael estaba en una reunión con un consejero, Fred encontró su camino a la sala de la

comunidad y trabajó en un rompecabezas durante aproximadamente una hora. Al día siguiente, Fred notó el

rompecabezas se terminó. Michael le dijo a su padre que después de haber salido esa noche, los pacientes terminaron el

rompecabezas. "Sólo recuerdo que me pega que aquí estaba este momento que él y todos los demás tenían una

interacción positiva de algo que empecé", dice Fred. "Fue muy bien. No creo que ni siquiera sabía que me gustaba hacer

rompecabezas."

Al día siguiente, Fred comenzó otro rompecabezas. Luego otro. En el transcurso de la semana, padre e
hijo creció más y más. Cuando llegó la hora de Fred de regresar a Baltimore, clamó. "Sólo quería
quedarse allí con él," dice Fred. "Aquí estaba este lado de Michael que nunca había visto antes de que
se cambia la vida -.. Para los dos Tenemos todo lo que hay Me dio una idea de todo lo que había tenido
que pasar, cómo podría ser de apoyo.".

En los días y meses después de la semana de la familia, Michael sería coger el teléfono y llamar a Fred texto o sólo

para decir hola. A veces hablarían durante media hora o 45 minutos. Otras veces era un hola rápido. Se sentía

diferente. "Al igual que un padre y un hijo," Fred dice, "pero


más que eso, como amigos." En junio siguiente, Fred se unió a Debbie y otros a una fiesta sorpresa de

cumpleaños número 30 de Michael y Nicole en Colorado Springs. Unos meses más tarde, Fred estaba fuera

recogiendo una pizza una noche cuando Michael llamada con noticias . Nicole estaba embarazada. Michael iba a

ser papá.

TEMPRANO La mañana del 5 de mayo de Phelps estaba cepillando los dientes cuando recibió la llamada. Había

estado entrenando en Colorado Springs durante dos semanas y envió un mensaje a Nicole cuando se despertó,

ganador que-puede-decir-yo-amor-que-más juego que el día de la primera. Pero falló llamada de retorno de Nicole.

Llamó Schmitt, que entregó el teléfono Phelps. "Yo sabía lo que estaba pasando", dice. "Me di cuenta que

probablemente estamos teniendo un niño hoy en día." El bebé no fue hasta dentro de tres semanas, y Phelps se

suponía que volar a Baltimore al día siguiente para la boda de su hermana. En lugar de ello, pronto se vio que iba y

venía como el único pasajero en un avión privado rumbo a Arizona. Durante el tiempo que podía recordar, Phelps

había decidido que nunca se llevaría a cabo el bebé de otra persona. Familia, amigos, que no importaba. Las

personas tratarían de entregar a su bebé y pedir una autofoto, pero él siempre dijo que no. Él quería que el primer

bebé apretó contra su piel para ser su propia.

Alrededor de 7:20 de la noche, Phelps finalmente tuvo esa oportunidad. Había visto con asombro como Nicole

había dado a luz a un niño pequeño, Boomer Robert Phelps (el segundo nombre era como un tributo a Bowman).

Se había cortado el cordón umbilical del niño. Y luego Boomer, envuelto en una manta caliente, fue entregado a su

padre. Las lágrimas corrían por el rostro de Phelps. "Sólo tipo de pie allí", dice Phelps. "No pensé que estaría

emocional, pero todo sólo una especie de pegarme. Ese es nuestro hijo. Y de repente tiene esta nueva apreciación

de lo que es realmente el amor."

Esa noche, Phelps se quedó en el hospital con Nicole y Boomer. El sábado, su nueva familia regresó a su casa.

Michael y Nicole habían fecha de forma intermitente desde Michigan. Se separaron antes de que Londres y otra

vez antes de Beijing, pero en 2014 Phelps persuadieron Nicole a darle una oportunidad más. En 2015, Michael

preguntó Nicole a ser su esposa - la boda vendrá después de Río.

Esa primera noche después de volver a casa desde el hospital, todo lo que podía pensar era en sus nuevas
funciones como padres. Phelps saltó a cada ruido, apenas dormir durante horas. "No le gustaría recoger o
nada. Yo simplemente mirar y verlo dormir", dice. "Todo era tan surrealista."
Al final del día siguiente, día de la madre, Phelps regresó a Colorado para continuar con el entrenamiento.
Cuando el avión despegó, se puso a llorar. Durante muchos años, la piscina había proporcionado el escape de
su vida familiar. Ahora el agua lo mantenía a la familia que finalmente había construido para sí mismo. "Tan
pronto como despegamos, fue brutal", dice. "Como algo había sido tomado de mí. Era la despedida más dura
que he tenido."

Un amigo recordado Phelps que tiene tres meses más de trabajo, y luego se puede pasar todo el tiempo con
su hijo como él quiere. "Eso es lo que sigo recordando a mí mismo", dice.

En otro ENTRENAMIENTO ASU en la primavera, Phelps estaba terminando un conjunto patadas cuando
agarró la línea de carril para tirar a sí mismo a la pared. Bowman, frustrado, negó con la cabeza. "Eso es ---
me vuelve loco", dijo. "Pero he decidido dejarlo ir. He aprendido que no vale la pena."

En algún momento la noche del 13 de agosto, todo habrá terminado. No habrá más paredes para tocar. No hay más relojes

de raza. No hay más entrenadores para el paladar. En cambio, un niño se esperaba en las gradas. Así, también, será la

madre del niño, deseoso de casarse con Phelps en una pequeña ceremonia no mucho después de la conclusión de los

Juegos.

Phelps dice que no ha tenido una bebida desde el 5 de octubre de 2014, su último día en Baltimore antes de partir hacia los

prados. Sin embargo, poco después de la Río-posterior gira ha terminado, ¿cómo planificar para mantener su nuevo, vida

centrada a tierra?

"¿Quieres decir, ¿cómo sé que no voy a salir y seguir haciendo estúpidos s ---?" Phelps dice, riendo. "Eso es
básicamente lo que estás preguntando, ¿verdad?"

Phelps dice que quiere entrar en el negocio y pasar más tiempo trabajando con su fundación, que ayuda a los

niños a aprender la seguridad del agua. Hay planes para ayudar a Bowman como asistente en ASU y viajar con

Boomer y Nicole. Pero la verdadera respuesta viene en la evolución de sus papeles en este mundo.

"La piscina está muy bien - Me alegro por la natación", dice Bowman. "Pero francamente, si se detiene en este momento y

nunca nada nuevo, pero se queda en este lugar como una persona, estaría encantada."
Agrega Fred Phelps: "Estoy orgulloso del hecho de que él se encontró y sabe quién es ahora ve ahora
que hay una manera de mañana en el camino es la vida real Va a ser un ser humano a un padre.... . un
marido. un amigo. Él va a ser un hijo ".

Fred no está seguro si va a ir a Río. Michael no sabe qué será de su relación con Fred a largo plazo.
Pero sabe que está en un mejor lugar que lo ha sido en años. "¿Me gustaría tener un padre? Claro",
dice. "¿Es posible que en este momento de mi vida que sabe que se habían ido durante tanto tiempo;??.
Lo siento, no vas a caminar en ahora y continuar donde lo dejó, pero es bueno tener finalmente la
amistad que siempre quise ".

La paternidad ya ha comenzado a cambiar la forma de Phelps mira a sus relaciones con Fred y Bowman. Se
ha dado cuenta de que no quiere perderse nada. Por eso, mientras que él está lejos de Boomer, Phelps y
Nicole están constantemente FaceTiming, y ella siempre lo está el envío de fotos y videos. "Creo que vamos
a quedar sin datos", dice Phelps. Por ahora, él ha aceptado su pasado y siguió adelante, y que está ansioso
por seguir creciendo junto a su nueva familia.

"Me he dado cuenta de que era lo mejor que mi padre podría haber hecho", dice. "Es un asco. Pero lo entiendo.

Ahora lo entiendo. He aprendido mucho en el camino que he andado que me hará un mejor padre y me ayude a no

hacer algunos de los mismos errores.


"Este es un nuevo viaje. Yo realmente no puedo esperar al siguiente capítulo de mi vida. Y no sé la última vez que

he dicho eso."

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