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PISCIGRANJAS

Es sólo por los años de 1920, que se comienzan a tomar acciones en el campo de la
acuicultura continental, y es así que en 1925 se realiza la introducción de la “trucha arco
iris” (Salmo gairdneri) con la importación de 50 000 ovas embrionadas procedentes de
los Estados Unidos, que eclosionaron en un criadero particular a orillas del río Mantaro,
en la Oroya, desde donde se realizaron las primeras siembras de esta especie en los
ríos andinos.

En 1934, por iniciativa privada, se instaló el primer criadero de truchas en Quichuay, y


posteriormente cerca a éste, el segundo, en Ingenio (Concepción-Junín). Este último
pasó a poder del Estado en 1940, convertiéndose en la estación de piscicultura de Junín,
que en la actualidad se ha desarrollado hasta constituir el centro piloto de la truchicultura
en la Sierra Central.

Entre 1939 y 1940 se estableció la estación de piscicultura del Lago Titicaca en


Chucuito, Puno, mediante un acuerdo entre los gobiernos de Bolivia y Perú, con el fin
de incrementar la producción piscícola de ese lago y su cuenca. Un resumen de las
primeras estaciones pesqueras establecidas para dedicarse a una política de
reproblamiento de salmónidos, pertenecientes en su mayoría a las especies “arco iris”
(Salmo gairdneri), y en menor proporción a la “trucha morena” (Salmo trutta fario) y a la
“trucha de arroyo” (Salvelinus fontinalis), se presenta en el Cuadro 1.
En resumen puede decirse que la acuicultura en la Sierra está fundamentalmente ligada
a la actividad truchícola, principalmente a la trucha “arco iris” (Salmo gairdneri), la
especie más difundida. El repoblamiento de ríos, lagunas y lagos, que encaja en una
técnica de manejo extensivo, se efectuó en base a siembras en muchos ambientes
naturales andinos con resultados generalmente positivos. Sin embargo, existen ciertas
limitaciones naturales y otras causadas por las actividades humanas como: ausencia de
campos suficientes para su reproducción; la actividad pesquera en algunos casos
sobredimensionada, especialmente cuando las truchas remontan los ríos para el
desove; la creciente contaminación por relaves mineros, etc.

El cultivo intensivo se hizo utilizando técnicas importadas, aprovechándose las


condiciones ambientales favorables de nuestra serranía. Entre los factores limitantes
para un mayor desarrollo se cuentan: la cantidad insuficiente de ovas y alevines para
satisfacer la demanda de las piscigranjas particulares, comunales, o aún estatales; y la
escasez de alimentos adecuados, en las cantidades deseadas y a precios bajos. Para
tratar de solucionar estos problemas, el Estado, por intermedio del Ministerio de
Pesquería y sus Direcciones Regionales, ha emprendido una serie de proyectos, cuyos
resultados deben conocerse en breve plazo.

Por otra parte, se han obtenido favorables logros en experimentos de cultivo de truchas
en el Lago Titicaca, que han permitido la conformación de una empresa binacional
(peruana-boliviana) bajo los auspicios del Sistema Económico Latino Americano (SELA)
y con aporte financiero de la Corporación Andina de Fomento.
1. 13.1.3 Cultivo de moluscos

En los últimos años se inciaron los primeros ensayos de cultivo de moluscos. En la zona
de Pisco se obtuvieron y sembraron semillas de choro (Aulacomya ater). Por otro lado,
recientemente en el Instituto del Mar, se han comenzado las experiencias para el cultivo
de la concha de abanico (Argopecten purpuratus); y en 1971, en la zona de los
manglares de Tumbes, se iniciaron las investigaciones para el cultivo de dos especies
de ostras: Crassostrea columbiensis y C. corteziensis.

Si bien, en los dos primeros casos, los resultados iniciales han sido algo halagadores,
quedan aún por resolver problemas de tipo económico de los cultivos frente a la
actividad de tipo netamente extractivo, sobre todo en el primer caso, en el que la
abundancia local de los choros hace practicable el uso de métodos tradicionales de
extracción para lograr un abastecimiento continuo. En el último caso, se observaron
limitaciones en la recolección de semilla, y problemas de crecimiento y predación.

2. 13.1.4 Cultivo de langostinos

A partir de 1981, en la zona de los manglares de Tumbes, investigadores del Instituto


del Mar hicieron los primeros ensayos para el cultivo de langostinos peneidos, con el
objeto de hallar un método rentable y ajustado a nuestras condiciones naturales. El
Ministerio de Pesquería, por su parte, realizó esfuerzos paralelos a fin de conseguir un
desarrollo de las empresas en explotación. El cultivo se basa en la recolección de
postlarvas de Penaeus vannamei y de P. stylirostris en ciertas épocas del año, y en
determinados esteros, aprovechando su tendencia natural de migrar hacia zonas más
ricas en nutrientes y de menor salinidad. Las postlarvas capturadas se siembran en
estanques construidos preferentemente en terrenos arcillosos y generalmente salinos,
que son impropios para la agricultura.

Con un adecuado manejo que incluye prácticas de fertilización inorgánica con fosfatos
y urea, y con una alimentación suplementaria, se pueden obtener buenas producciones
con cosechas cada 4 o 6 meses. Los costos de producción relativamente bajos, y el
elevado valor del producto en el mercado internacional, hacen atractiva esta actividad,
lo que se ha demostrado por el gran interés de los inversionistas privados quienes se
han reunido para constituir numerosas empresas langostineras particulares, que a la
fecha prácticamente han copado los terrenos inmediatamente utilizables en la zona
aledaña a los manglares.

Entendiéndose que esta forma de cultivo es arriesgada por depender en primer término
de la obtención de postlarvas en los esteros, quedan como problemas pendientes por
resolver la determinación del potencial migrante de aquellas, las causas de sus
variaciones en las épocas de migración, y principalmente, la reproducción y cría de las
larvas del langostino en condiciones controladas en el laboratorio, con el fin de obtener
- en esta forma - cantidades suficientes de postlarvas que abastezcan los requerimientos
de las empresas, independientemente de las variaciones aleatorias de tiempo y lugar
que se dan en la actualidad. Este último punto constituye uno de los programas de
investigación recientes del IMARPE en Tumbes.

3. 13.1.5 Cultivo del camarón de río

El camarón es considerado como el recurso de mayor importancia económica en los


ríos de la vertiente occidental de los Andes en el Perú, y ha sido objeto de estudios
aislados en múltiples ocasiones. La especie más importante, por su calidad y
abundancia es el Cryphiops caementarius, que habita en los ríos costeros del centro y
sur del país. Además se presenta el género Macrobrachium con cerca de 10 especies.

La importancia de C. caementarius como recurso pesquero motivó que desde la década


de los cincuenta se emprendieran una serie de estudios tendientes al conocimiento
biológico-pesquero del recurso. En cuanto a su crianza en cautividad, el Estado, algunas
universidades, y entidades particulares efectuaron experiencias con larvas y juveniles
en acuarios o en baterías de botellas tipo Ehrlinger, así como con juveniles y adultos en
estanques de concreto y semi-naturales. Las principales dificultades consistieron en
aspectos de reproducción masiva, supervivencia larval y velocidad de crecimiento.

De las experiencias realizadas hasta la fecha se puede concluir que aún no ha sido
posible establecer la factibilidad de la crianza de esta especie de camarón.

4. 13.1.6 Cultivo de microalgas

Mediante un Convenio de Cooperación Técnica Peruano-Alemán se inició, en 1971, un


proyecto para estudiar la posibilidad de una producción masiva de la microalga verde
de agua dulce Scenedesmus acutus var. alternans, siguiendo la tecnología desarrollada
en la ciudad de Dortmund, R.F. de Alemania, y con el propósito de contribuir a la solución
de los problemas alimentarios del país.

Los resultados obtenidos en la Planta Piloto de Casa Grande, cerca de Trujillo,


demostraron que esta microalga - bajo buenas condiciones de cultivo - puede dar
producciones dobles de las logradas en su país de origen. Estudios paralelos de
aplicación dietética y de aceptabilidad han comprobado su alto valor, sobre todo en la
terapia de estados graves de desnutrición en niños, y su buena aceptación.

Transcurrida la etapa experimental, se constituyó en 1978 en Sausal - también cercana


a la ciudad de Trujillo - y en una zona de excelentes condiciones ambientales y
lumínicas, la primera planta de producción semi-industrial de microalgas con un método
de cultivo basado en el original, pero con modificaciones notorias para adaptarlo a las
condiciones de la costa peruana.

El producto final - bajo la forma de polvo - puede usarse en el mercado interno, así como
en la exportación al exterior, donde puede comercializarse a precios bastante
interesantes.

5. 13.1.7 Cultivo de peces dulceacuícolas tropicales foráneos

Con el objeto de desarrollar la piscicultura intensiva y extensiva de aguas dulces en


zonas costeras y tropicales de la selva, y mientras se progresara con los estudios
básicos de la bioecología de las especies nativas, se procedió a la introducción de peces
foráneos, carpas y tilapias, de comprobadas ventajas en otros países como fácil manejo
y rápido crecimiento. La “carpa común” (Cyprinus carpio) parece que fue introducida en
1946 en los valles de ríos Chillón y Rímac, en el departamento de Lima. En sus inicios
ha sido cultivada en forma desordenada en diversas oportunidades y en estanques
reducidos. Sin embargo, en una experiencia realizada en las lagunas de oxidación de
San Juan de Miraflores (Lima) se obtuvieron resultados alentadores.

En el laboratorio de Huachipa del IMARPE se han realizado algunas pocas experiencias


con C. carpio en cultivos asociados a la cría de cerdos y de patos. Sin embargo, debido
a la edad de los especímenes, a la contaminación del agua, y al tipo de alimento usado,
no se lograron buenos resultados. En 1980, procedentes de la República de Panamá,
se introdujeron ejemplares de “carpa herbívora” Ctenopharyngodon idella y de “carpa
plateada” Hypophtalmichthys molitrix, que actualmente se mantienen en dicho
laboratorio, no habiéndose podido realizar cultivos por limitaciones presupuestales.

En cuanto a la tilapia, la especie Tilapia rendalli (T. melanopleura) fue introducida del
Brasil en 1966, por el Servicio de Pesquería a la estación de Quistococha, cerca de
Iquitos, en el Departamento de Loreto. Posteriormente, en 1968, se transplantaron al
embalse de Tinajones (Dep. de Lambayeque) y a los lagos Sauce y Mashuyacu (Dep.
de San Martín). En 1969 se sembró en un criadero particular en el Departamento de
Tumbes, y en 1970 en el embalse de San Lorenzo en el Dep. de Piura. Posteriormente
se distribuyó a otros lugares. Si bien su distribución progresó, su rendimiento no tuvo
igual suerte debido a un manejo no ordenado.

En 1978, también de Brasil se introdujeron 2 especies más interesantes: Tilapia


nilotica (o Sarotherodon niloticus) y T. hornorum (S. hornorum), que están siendo
estudiadas en policultivos con carpas, cerdos y patos en el laboratorio de Huachipa del
IMARPE, en el IVITA de Pucallpa, y en otros lugares. Igualmente se recibió, en 1980 y
procedente de Panamá un lote de Tilapia mossambica (S. mossambicus) para la
producción de híbridos con la segunda especie antes mencionada. Los objetivos de
estos estudios son el logro de rendimientos económicos mediante el cultivo intensivo,
así como determinar la mejor metodología para la modalidad extensiva.

Actualmente se cultivan tilapias en algunas piscigranjas particulares de la zona de Pisco


(Dep. de Ica), Pucallpa (Dep. de Ucayali), y Tarapoto (Dep. de San Martín), aunque con
resultados variables.

Las espectativas del cultivo de estas especies se centran en la posibilidad de aprovechar


integramente los sub-productos y desechos de la actividad agropecuaria,
convirtiéndolos en proteínas animales capaces de mejorar la alimentación y el nivel de
vida del campesino.

6. 13.1.8 Cultivo de peces dulceacuícolas tropicales nativos

La actividad dirigida hacia la acuicultura en la amazonía peruana se inició en la década


de 1940 con el paiche, Arapaima gigas. La incidencia de captura de este pez,
perseguido por su gran rendimiento en carne de primera calidad, motivó una visible
disminución de su población, lo que indujo al Estado a crear zonas reservadas, para su
protección y estudio con fines de explotación racional y de cultivo extensivo. La primera
de estas zonas fue el sistema hidrográfico del río Pacaya en el que la pesca de esta
especie quedó en manos del Estados, efectuándose algunos transplantes dentro del
mismo sistema hidrográfico y a otros lugares para facilitar las observaciones sobre la
biología del pez. Posteriormente fueron creadas otras zonas reservadas con propósitos
similares, como las de los ríos Samiria, Tamaya y Mazán, y los lagos Rimachi y
Quistococha. Los principales lugares a los que se transplantó el paiche han sido los
lagos Sandoval (Dep. de Madre de Díos) en 1970, Sauce y Mashuyacu (Dpto. de San
Martín) en 1964 y 1968 respectivamente, estanques semi-naturales de la colonización
de Nazareth (Depto. de Amazonas) en 1967, y la represa de San Lorenzo (Dpto. de
Piura) entre 1969 y 1970.

Los ensayos de cultivos se han llevado a cabo también con otras especies amazónicas
tales como: el “sábalo cola roja” Brycon erythropterum, “sábalo colá negra” B.
melanopterum, “gamitana” Colossoma macropomum, “paco” C. brachypomum,
“acarahuazú” Astronotus ocellatus, “tucunaré” Cichla ocellaris, entre otros. Estos
estudios desarrollados por el Estado a través del IMARPE, estaciones piscícolas del
Ministerio de Pesquería y universidades, se hallan en etapa de experimentación,
buscándose fundamentalmente su reproducción en cautividad y la obtención de fuentes
de alimento provenientes preferencialmente de la misma selva, así como de derivados
de actividades pecuarias.

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