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Comunicación y funciones cognitivas en

trastorno cognitivo comunicativo


asociado a traumatismo encéfalo
craneal.

Integrantes:

- Dominique Flandez V

- Eduardo Navarro

1
- Camila Vergara

Índice

Introducción 3

Epidemiología 4-5

Fisiopatología 5-7

Biomecánica del TEC 5

Tipos de lesiones y repercusiones 5-6

Alteraciones en traumatismo abierto y cerrado 6

Destrucción tisular 6-7

Evaluación y clasificación 7-8

Clínica neurológica 8-9

Clínica fonoaudiológica 9-12

Trastorno cognitivo-comunicativo 13-14

Discusión 14-15

Conclusión 15

Bibliografía 16

2
Introducción

Un traumatismo encéfalo craneal en adultos es definido como “un intercambio brusco


de energía mecánica que genera deterioro físico y/o funcional del contenido craneal. Se
señala como alteración del contenido encefálico, el compromiso de conciencia, la
amnesia post-traumática, también pueden existir mareos persistentes” y además es
una de las patologías más importantes de secuelas neurológicas en pacientes de edad
productiva.1

Mediante el presente informe daremos a conocer conceptos relativos al traumatismo


encéfalo craneal y las alteraciones que se pueden producir a partir de un daño cerebral
de este tipo, nuestro enfoque será principalmente hacia la epidemiología, la
fisiopatología, la clínica neurológica y la clínica fonoaudiológica de este tipo de lesión.

El objetivo del informe es indagar sobre las alteraciones de la comunicación y cognición


que se presentan en pacientes con traumatismo encéfalo craneal y en qué áreas o
características de la comunicación podremos evidenciar más alteraciones o alteraciones
más severas.

La importancia que posee esta investigación, es el hecho de que en a lo largo de


nuestra carrera y más adelante nuestra inmersión en el ámbito laboral, podremos
tener un perfil preestablecido de las alteraciones que podremos encontrar en un
paciente con este tipo de alteración cerebral sin dejar de recordar que cada paciente es
un caso diferente e individual.

1
MINISTERIO DE SALUD. Guía clínica atención de urgencia al traumatismo craneoencefálico.
Santiago: Minsal, 2007.

3
Epidemiología

TEC es un trauma relevante en la salud pública no solo en chile, sino que también en
países desarrollados, el trauma encéfalo craneano es una de las mayores causas de
mortalidad, pero, además una gran mayoría queda incapacitada provocando un efecto
a nivel familiar, social y económico. La parte de la población que queda incapacitada
ira aumentando dependiendo del grado de lesión, leve, severa o grave, siendo la
severa la que, por lo general desemboca en más secuelas necesitando de
rehabilitación.

La mayor dificultad para establecer la incidencia del TEC proviene de diferentes


criterios utilizados para definir el grado mínimo de severidad necesario para
considerarse como una condición clínica y así entrar o categorizarse como un TEC.

Según la sociedad de Neurocirugía de Chile, la causa de muerte por un TEC ha


aumentado desde un 4% en 1950, hasta bordear el 12% en el año 2000,
considerándose como la tercera causa de deceso luego del cáncer y enfermedades
cardiovasculares. El porcentaje de muerte a causa de un accidente o politraumatismo
es de 25 % específicamente en TEC.

La hospitalización por un trauma encéfalo craneal es de 200 por 100 mil habitantes por
año. De los cuales un 50% correspondería a lesiones leves (el puntaje en la escala de
Glasgow se encontraría entre 13-15) y el 25% a lesiones moderadas (el puntaje en la
escala de Glasgow se encontraría entre 9-12) del cual un 2% a 3% se convierte en la
muerte del paciente. Y El porcentaje restante es de casos graves leves (el puntaje en
la escala de Glasgow se encontraría por debajo de 8) de los cuales un 36% también se
desencadena en la muerte.2

Por lo tanto, infiriendo, que el resto de las personas con un TEC quedan con vida, la
mayor parte desencadenaría secuelas y entre estas secuelas se encontraría un
trastorno cognitivo de la comunicación.

Además, de lo mencionado anteriormente debemos considerar que la epidemiología no


es independiente de factores sociales ni culturales, hecho que queda claro cuando se
comparan las estadísticas de diferentes áreas geográficas.

2
[Rev. Med. Clin. Condes - 2006; 17(3): 98 - 105]

4
Fisiopatología

Biomecánica del TEC.

Para entender un poco más las lesiones que son ocasionadas por el TEC, se analizar
desde el punto de la biomecánica. En este caso actúa la fuerza dinámica que
corresponde a fuerzas relacionadas con la inercia en conjunto con las fuerzas estáticas
(progresivas), ambas reaccionan como movimientos bruscos causando deformaciones
de distintas estructuras a nivel cefálico, cabe destacar que se deforma de manera
proporcional al área de contacto y a la energía aplicada.
Al mecanismo de acción con relación al impacto, con sus fenómenos de contacto
asociados como lo son contusiones o craneales o fracturas, se añaden fenómenos
aceleración y desaceleración y los movimientos cráneo-cervi-vascular cerebral, claro
que aunque se inicie en el momento del impacto, presenta su manifestación clínica
más tardía.

Tipos de lesiones y repercusiones.

Se debe hacer una diferencia entre los tipos de lesiones, las primarias no son
controlables por el médico, mientras que las secundarias serían potencialmente
evitables y por lo mismo se podrían tratar de forma precoz. Se ha demostrado a través
de estudios que la isquemia es la lesión secundaria que tiene mayor prevalencia en el
caso de TEC grave donde fallece por el traumatismo, la isquemia puede ser a causa
hipertensión intracraneal, reducción de presión cerebral (perfusión) o ser secundaria a
alternaciones sistémicas que ocurren en la fase pre hospitalaria como lo son la hipoxia,
hipotensión o anemia. Por otro lado la isquemia podría producir distintas reacciones
bioquímicas como liberación de aminoácidos, entrada masiva de calcio, producción de
radicales libres derivados del oxigeno entre otros, estas reacciones son nocivas para
las células del sistema nervioso y a su vez se ha comprobado que son de real
importancia fisiopatológica. A estas reacciones que algunos también las llaman
cascadas, se les da el nombre de lesiones terciarias afectando estructural y
funcionalmente el parénquima encefálico.

5
Alteraciones en traumatismo abierto y cerrado.

En el caso de un traumatismo cerrado, la alteración del lenguaje de una conmoción


cerebral, forma parte de un síndrome confusional o subconfusional que puede durar
pocas horas o días. Caracterizado por presentar cuadros de adimia o disfluencia verbal,
en otros casos parafasias esporádicas, mutismo o bien disartria. Estas irán
despareciendo mejorando de forma progresiva el lenguaje. En el caso de prolongarse
la sintomatología referida a lenguaje estaremos en presencia de una contusión cerebral
con laceraciones, focos hemorrágicos o edemas en zonas específicas que responden a
lesiones anatómicas del encéfalo, y los síntomas variarán según la zona afectada.

El traumatismo craneoencefálico abierto, nos mostrara usualmente síntomas de


alteraciones del lenguaje y de habla en relación con la zona afectada, así como otros
síntomas de alteraciones neurodinamicas asociados a las hemorragias, hematomas o
edemas.

Destrucción tisular.

Cuando ocurre una destrucción tisular existiría una compresión que afectaría
estructuras asociadas al lenguaje, como lo son el hematoma subdural e
intraparenquimatoso, al ser oportunamente evacuados, las alteraciones de lenguaje
serán transitorias y regresarían en pocas horas a la normalidad.

El hematoma subdural, que mayoritariamente se produce tardíamente puede ser


también inmediato. Hay una tendencia a comprimir la zona parietotemporal y rara vez
la zona de los lóbulos frontales, puede también el paciente manifestar sintomatología

6
afásica propia de la zona afectada, que serían remitidas a través de la evacuación
quirúrgica.

El hematoma epidural o extradural, puede afectar la zona parietotemporal, como


resultado de la ruptura de alguna rama de la arteria meníngea media, asociada al
traumatismo. Puede evolucionar rápidamente en cuestión de horas o pocos días desde
un estado inicial en el que hay una confusión traumática hasta una afasia.

Evaluación y clasificación

En la exploración neurológica de pacientes que han sufrido un TEC se debe incluir


estrictamente la valoración del estado de conciencia que se va a medir a través de la
Escala de Glasgow, la cual es una escala de uso general, en la cual van a ser evaluados
tres parámetros independientes: las respuesta motora, la respuesta verbal y la
abertura ocular.

La escala de Glasgow intenta evitar la interpretación de la observación clínica y se basa


en una descripción objetiva de las características que presenta el paciente. Al utilizar
un lenguaje objetivo disminuye el rango de error y permite encontrar un perfil
adecuado o cercano a los que podremos encontrar en la literatura.

La clasificación del TEC según la escala Glasgow es la siguiente:

Un paciente estará en coma cuando tenga un puntaje final en la escala igual o menos a
ocho puntos, aunque en general cuando un paciente logra abrir los ojos se indica que
está fuera del coma, lo cual nos va permitir diferenciar el coma de un síndrome de
enclaustramiento u otro.

También se puede clasificar el TEC según la gravedad. Un TEC grave será cuando un
paciente presente una puntuación igual o menor a 8 dentro de las primeras 48 horas
de sufrido el accidente y después de la reanimación apropiada. Un TEC moderado
cuando un paciente presente una puntuación entre 9 y 12 y por último, se va
considerar un TEC leve cuando la puntuación del paciente sea 13, 14 ó 15.3

“Se ha demostrado que la severidad y duración de la disminución del nivel de


conciencia, es el signo neurológico asilado más importante en la determinación de la
alteración cerebral”4

3
Traumatic Coma Data Bank
4
[Rev. Med. Clin. Condes - 2006; 17(3): 98 - 105]

7
Clínica neurológica

En la clínica neurológica hablamos de la clasificación según el compromiso neurológico.


Este compromiso se revela según el puntaje dado por la escala de Glasgow, que mide
o evalúa apertura ocular, la respuesta verbal y la respuesta motora, también se
considera la duración de la perdida de la conciencia y la duración de la amnesia
postraumática, por lo tanto la severidad se determinara a partir de estos tres ejes y se
clasificara la severidad del TEC.

La severidad puede ser:

TEC leve: la valoración en la GCS es de 13 a 15 puntos. Alrededor del 80% de los


pacientes no incluyen pérdida de conciencia y su amnesia postraumática es de menos
de una hora.

TEC moderado: la valoración en la GCS es de 12 a 9 puntos. La duración de la perdida


de la conciencia oscila entre 20 minutos a 6 horas y la amnesia postraumática va
desde una hora a 24 horas.

TEC grave: la valoración según GCS es menor a 8 puntos. El paciente se encuentra


principalmente inconsciente y la amnesia postraumática que presenta es mayor a 24
horas.

A nivel cognitivo las posibles alteraciones o consecuencias que se desencadenarían al


presentar un TEC serian:

- Trastornos motores como debilidad o parálisis, ataxia, perdida de motricidad fina y


gruesa, disartria, disfagia, falta de equilibrio, apraxia, rigidez, etc.

- Trastornos sensoriales como déficits visuales y auditivos, déficit de sensaciones


táctiles y sensaciones gustativas, anosmia y agnosias.

- Trastornos neuropsicológicos (cognitivos, conductuales y emocionales) como


alteraciones de atención y concentración, alteraciones de memoria y de la velocidad
del procesar la información, alteraciones de las funciones ejecutivos, del lenguaje y
habla, trastornos emocionales y de comportamientos (desinhibición o exageración de
la experiencia y respuesta afectiva) y alteraciones de la percepción.

Clínica fonoaudiológica

8
Un paciente con un traumatismo encéfalo craneal va a presentar diferentes
alteraciones en la comunicación, las cuales pueden tener un origen motor como la
disfonía o la disartria y también un origen neuropsicológico, los cuales pueden coexistir
principalmente si la lesión es difusa o múltiple.

Esta alteración de la comunicación se puede presentar en uno o más niveles en un


mismo paciente, por ejemplo, en el caso de un traumatismo grave, en la fase de
despertar del coma puede existir mutismo que se puede prolongar en el tiempo y que
más adelante podrá evolucionar a una disartria probablemente severa.

Generalmente, los principales problemas de lenguaje y que se presenta con más


frecuencia luego de una lesión de este tipo se dan principalmente a la pragmática.

En el caso de que exista una lesión focal que comprometa las áreas del lenguaje,
pueden presentarse problemas de denominación, repetición, comprensión, expresión
entre otras.

En algunos casos y como fue mencionado, pueden predominar alteraciones de tipo


inhibitorio como dificultades de comprensión verbal y mutismo y en otras ocasiones
predominaran alteraciones como la logorrea.

Cuando existen lesiones focalizadas en el lóbulo temporal encontraremos alteraciones


como la Afasia de Wernicke y Afasia de conducción. Las lesiones del lóbulo frontal y
prefrontales van a desencadenar una Afasia transcortical o como mínimo alguna
alteración de la fluidez verbal. Cuando existe una lesión difusa o múltiple en el
hemisferio dominante del lenguaje podremos encontrar a un paciente con Afasia mixta
o global.

La afectación de la cognición en pacientes con traumatismo cráneo encefálico influye


de manera directa sobre las alteraciones del lenguaje. Se ha descrito una relación de
alteraciones cognitivas que pueden afectar al lenguaje como las dificultades de
atención, percepción, pensamiento, memoria, impulsividad, entre otras, las cuales
influyen en la conducta verbal.5

Alteraciones del habla

5
Rehabilitación (Madr) 2002;36(6):379-387

9
Como fue mencionado, en el habla podremos encontrar alteraciones como la disartria,
la disprosodia y la apraxia, las que en la fase aguda se pueden presentar como
mutismo. Generalmente la alteración del habla se debe a una lesión de los sistemas
motores subcorticales como el área motora primaria y la vía cortico bulbar la que va a
determinar un componente de disartria espástica. En el caso de que la lesión sea
cerebelosa se producirá una disartria atáxica. Si el daño se produce en los ganglios de
la base el paciente podría presentar una disartria hipocinética o hipercinética. También
puede haber una lesión en uno o varios núcleos motores de los pares craneales que
tienen participación en el habla y en este caso el paciente presentaría una disartria
flácida, además de presentar parálisis velopalatina, parálisis laríngea, etc.

En el traumatismo encéfalo craneal podremos encontrar en numerosas ocasiones


disartrias mixtas donde se afectaran los 5 procesos motores básicos.

Alteraciones de la voz

La voz se puede ver alterada cuando ocurre un traumatismo de este tipo en algunos
parámetros (intensidad, tono, timbre) que puede ser consecuencia del cuadro de
disartria ya que la alteración será a nivel neuromuscular.

La clínica fonoaudiológica de un traumatismo encéfalo craneal no es fácil de


determinar, ya que va a depender del área de la lesión, si es focal o difusa y además si
es múltiple.

No obstante Snow y Ponsford en 1995 realizaron una investigación en la cual se


relacionan los resultados de test formales con los del análisis de la conversación
espontanea, con parámetros a considerar como los silencios, la iniciación, la lapsos, las
aclaraciones, entre otras.

En este estudio se identifican dificultades principalmente en:

- Encontrar la palabra
- Logorrea
- Mantención del tema
- Turnos de intervención
- Generar o mantener una conversación a través de preguntas o comentarios
- Mantener una conversación en lugares ruidosos
- Comprender el lenguaje figurado
- Repetición
- Recordar detalles de conversaciones
- Modificar tono de voz en relación al contexto
- Estructurar el discurso de forma lógica y secuencial

10
- Reconocer indicios no verbales

Snow y otros investigadores han estudiado las características de pacientes con


traumatismo encéfalo craneal (26), a los 3-6 meses y luego a los 2 años de ocurrida la
lesión mediante el análisis de la conversación de Damico.

En el estudio realizado entre los 3 y 6 meses de ocurrida la lesión todos los pacientes
presentaron errores en:

- Información insuficiente
- Redundancia
- Estructuración del discurso
- Lenguaje inapropiado al contexto
- Imprecisión

En el estudio realizado luego de 2 años ocurrido el accidente encontraron grupos de


pacientes que no mejoraba y un grupo de 8 pacientes que tuvieron un tratamiento
fonoaudiológico por 6 meses –como mínimo- que empeoraba.

En otro estudio realizado en el instituto Guttmann el año 1998 y 1999 había 27


pacientes que habían sufrido un traumatismo encéfalo craneal la mayoría de ellos
grave. Trece de estos pacientes presentaban disartria y ocho afasia. Algunos
presentaron mutismo al momento del inicio del tratamiento (6), ausencia de fonación
en ventilación mecánica (1) e hipoacusia (1).

De los pacientes que presentaron afasia había: afasia global (1), afasia mixta (2),
afasia anómica (1), de expresión (1) y síndrome psicolingüístico (1), los cuales
coexistían con alteraciones cognitivas y conductuales, éstos últimos menos frecuentes.

De los pacientes que presentaron disartria la mayoría coexistía con alteraciones


neuropsicológicas y alteraciones de la conducta –más frecuentes que en los pacientes
afásicos-.

La disartria presentada era de tipo espástica o espástica-atáxica y el paciente con


traumatismo encéfalo craneal y disartria presenta alteración de la postura, hipertonía,
coordinación fonorespiratoria alterada, movimientos articulatorios lentos y alteraciones
de la resonancia y prosodia de la voz.

Las alteraciones pragmáticas presentes en estos pacientes fueron:

- Enlentecimiento comprensivo
- Tono de voz inadecuado

11
- Problemas en la evocación
- Falta de expresión facial
- Distancia corporal inadecuada

Entre otros ya mencionados anteriormente.6

Existen diferencias en la clínica fonoaudiológica de un hemisferio u otro:

Hemisferio izquierdo Hemisferio derecho

• Alteración en la prosodia. • Afasias.

• Procesamiento semántico. • Alexia.

• Habilidades discursivas • Agrafia

• Alteraciones en la pragmática. • Disartria.

• Abandono. • Apraxia del habla.

• Inatención • Disfagia

• Trastorno cognitivo comunicativo

Trastorno cognitivo-comunicativo

Según la ASHA un trastorno cognitivo-comunicativo es “un trastorno que abarca


dificultades en cualquier aspecto de la comunicación debido a una alteración de los
procesos cognitivos. Funcionalmente, estas alteraciones afectan el diario vivir, la
interacción social y la regulación conductual de la persona”.

Existen alteraciones cognitivas tras una lesión de este tipo que van a tener efectos
sobre el comportamiento del paciente y además de su lenguaje:

Atención: La característica principal de una alteración en este proceso será un nivel


bajo de atención, incluyendo facilidad para distracción y concentración débil. Esto
provocará que se disminuya la comprensión auditiva, existirá un lenguaje confuso o
inapropiado, baja comprensión lectora y dificultades para el seguimiento de objetivos o
instrucciones planteadas.

6
Alteraciones de la comunicación en el TCE, Montserrat Martinell, Instituto Guttmain.

12
Percepción: En este ámbito, la percepción de las características relevantes se ve
debilitada y existe desorganización espacial, lo cual influirá en las dificultades del
paciente en la lectura y escritura, una mala comprensión de datos faciales y de la
entonación del habla.

Memoria y aprendizaje: En esta área existirá una afección en la capacidad y la


eficiencia de aprendizaje, lo que provocará dificultades para el seguimiento de
diferentes direcciones, problemas de evocación, dificultad en la compresión lectora. La
información reciente y/o antigua no se integrará de manera adecuada, el lenguaje será
ilógico, fragmentado y carente de orden y precisión.

Procesos de organización: Existirá una organización inadecuada de las tareas y el


tiempo, principalmente iniciación, mantención, resolución de problemas y
razonamiento social, lo que coexistirá con un lenguaje desorganizado, escaza habilidad
conversacional y dificultad para definir el material a estudiar.

Razonamiento: El comportamiento se verá afectado, presentándose impulsividad y


abstracción; el paciente podrá ser persuadido muy fácilmente, tendrá dificultades para
discernir las causas, efectos y consecuencias del comportamiento y escaso
razonamiento social.

Resolución de problemas y decisión: El paciente presentará rasgos impulsivos, utilizara


el ensayo y error como estrategia, tendrá dificultades para predecir consecuencias del
comportamiento y posee un razonamiento superficial. Su consecuencia en el lenguaje
serán las dificultades que presentara el paciente para comprender y expresar los pasos
que se necesitan para resolver un problema con un objetivo concreto, dificultades con
el cálculo aritmético y con tareas académicas complejas, el comportamiento social será
inapropiado, falta de tacto, dificultades para comprender explicaciones referentes al
comportamiento.

Discusión

Luego de indagar sobre las alteraciones de la comunicación y cognición que se


presentan en pacientes con traumatismo encéfalo craneal y sabiendo que el TEC en la
actualidad es una de las principales causas de incapacidad en la población, debido a sus
secuelas y posteriores trastornos asociados a este TEC, se esclarecieron los tipos de
alteraciones que se pueden desencadenar, estas alteraciones generan una disminución
en las habilidades intelectuales del sujeto que sobrevivió al TEC, esto es lo que

13
conocemos o identificamos como secuelas, pero no solo encontramos alteración en las
habilidades intelectuales, sino que a nivel motor, emocional y conductual también se ven
removidos por este traumatismo encéfalo craneal vivido el cual se encuentra
amenazando y afectando por completo la integridad de la persona y del entorno donde
se encuentra.

Para que esta integridad se vuelva, de alguna u otra manera, a ‘’restaurar’’ se debe
hacer imprescindible comprender al paciente de una manera medica multidisciplinaria y
de una manera humana, para atacar las alteraciones que se presenten y así ir, poco a
poco, reinsertando a la persona en los distintos ámbitos que fueron remecidos por el
traumatismo encéfalo craneal, otorgando el tiempo necesario para que hagas las tareas
que ayudan a su rehabilitación, y a la vez integrando a la familia del paciente en esta
labor de rehabilitación y reinserción.

Antes de comenzar a tratar al paciente se debe plantear como objetivo la rehabilitación,


mejorar y prevenir el deterioro de la función que quiero tratar, además hay que
fomentar y desarrollar estrategias para conseguir la máxima independencia funcional de
la persona.

A nivel fonoaudiológica se vuelve indispensable evaluar y rehabilitar, pues desde un


comienzo debemos enfocarnos en deglución que es realmente importante para la
vitalidad y supervivencia de la persona, y posteriormente en lenguaje y comunicación. El
lenguaje y la comunicación son realmente esenciales para lograr una reinserción social,
laboral y una ayuda en la relación familiar y es por esto que debemos poner el mayor
esfuerzo como terapeutas en ayudar al paciente, pues en su gran mayoría y en conjunto
con la motivación y constancia del paciente y su familia, se lograran obtener buenos
resultados.

Si bien la rehabilitación es una excelente manera de ayudar al paciente, también


debemos tener en cuenta e informar a nuestro paciente sobre los avances y que estos
pueden que no sean muy rápidos de obtener; todos estos aspectos debemos
comunicarlo para que el paciente y la familia comiencen a desarrollar su paciencia y a
tomar una buena postura ante la rehabilitación, y así, de esta forma controlar una
posible frustración.

Por lo tanto, nuestro rol será fundamental en la intervención, la rehabilitación y la


inclusión fonoaudiológica en este tipo de lesión cerebral, donde tendremos que ser

14
profesionales capacitados para reconocer diferencias que son relevantes en la
individualidad de cada paciente y que nos guiará a un plan terapéutico exitoso.

Conclusión

El traumatismo encéfalo-craneano puede desencadenar una gran variedad de


mecanismos, es por esto que cualquier persona puede verse afectada, sin importar
género, edad o clase social. Esta es una patología cerebral de creciente importancia en
chile y en países desarrollados. Aunque muchos de ellos desencadenan la muerte de
quien la padeció, hay un porcentaje de ellos que sobrevive y obtiene como
consecuencias neuropsicológicas y motoras, es por esta razón que es de real
importancia conocer la fisiopatología y anatomía de donde se genera, pues nos ayuda
a comprender mucho más las consecuencias ‘’especificas’’ que generara como lo son
alteraciones en el lenguaje que es lo que nos involucra directamente con respecto a
nuestro rol profesional y es un área donde podemos intervenir obteniendo resultados
satisfactorios tanto para el paciente como en lo personal. También a su vez nos
ayudará como terapeutas para elaborar de manera eficaz un plan de evaluación e
intervención y en como orientar la rehabilitación, aunque debemos seguir explorando y
siempre tener en cuenta que todo paciente es diferente de otro.

Bibliografía

1. JULIAN CARVAJAL-CASTRILLON; JUAN SUAREZ; ALEJANDRA ARBOLEDA,


Rehabilitación neuropsicológica de pacientes hospitalizados con trauma
encefalocraneano en fase subaguda, Revista Chilena de Neuropsicología, vol. 6,
núm. 2, 2011, pp. 85-90

2. E. L. GARCÍA Y GARCÍA, H. BASCUÑANA AMBRÓS y I. VILLARREAL SALCEDO,


Trastornos de la comunicación por traumatismo Craneoencefálico,
Rehabilitación (Madr), 2002.

3. ERNESTO MEDINA L., ANA M. KAEMPFFER R. Consideraciones epidemiológicas


sobre los traumatismos en Chile, Revista chilena de cirugía, Vol 59 – N° 3, Junio
2007.

4. MARÍA C. QUIJANO MARTÍNEZ, MARÍA T. CUERVO CUESTA, Alteraciones


cognoscitivas después de un trauma craneoencefálico, Pontificia Universidad
Javeriana Cali, 2010.

15
5. MINISTERIO DE SALUD. Guía Clínica Atención de urgencia del traumatismo
craneoencefálico. Santiago: Minsal, 2007.

6. MONTSERRAT MARTINELL, Alteraciones de la comunicación en el TCE, Instituto


Guttmann. Badalona. España.

7. WANDA G. WEBB, RICHARD K. ADLER, Neurología para el logopeda, 2010.

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