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Para recolectar las materias primas que necesitan para fabricar miel

y otros productos, las abejas recurren al pecoreo. Es decir, a una


técnica muy particular de recolección. Sólo las abejas que han
cumplido 21 días están preparadas para pecorear. Para que se
produzca la polinización, toda abeja pecoreadota sólo visita flores
de la misma especie en cada viaje. Aunque no suele alejarse más de
un par de kilómetros, en caso de escasez de flores pueden
distanciarse de la colmena hasta 14 kilómetros. Las abejas
pecoreadoras también se encargan de recolectar agua y polen. Este
último producto lo almacenan en una bolsita que tiene en las patas
traseras, denominada corbícula.
La colmena es un organismo vivo que bascula al ritmo de las
estaciones. En primavera, se vive una situación delicada, pues hay
muchas flores pero la colonia, después del invierno, cuenta con
pocas abejas para recolectar. Por ello, la reina incrementa su
postura de huevos en esta época. Por el contrario, a finales de
verano y en otoño, las floraciones escasean y la reina disminuye su
puesta. Sin embargo, en este periodo hay mucho alimento
almacenado, imprescindible para que la colonia pueda superar el
invierno. Como es lógico, ante la imposibilidad de pecoreo, la reina
deja de poner en época invernal y las abejas esperan dentro de la
colmena la llegada de una nueva primavera.
La trashumancia es bastante común en apicultura. la mayoría de apicultores
profesionales la practican. El apicultor va trasladando sus apiarios de una
zona a otra según el ritmo de las estaciones y la mayor abundancia de
floraciones. Otra ventaja de la trashumancia es que las diferentes floraciones
permiten obtener variedades específicas de miel. Por ejemplo, en primavera
se puede obtener miel de aguacate al colocar las colmenas cerca de los
cultivos tropicales, o de azahar y romero en las zonas bajas de nuestras
sierras y valles. Ya a mediados del verano, los apiarios viajan a un piso
bioclimático más elevado, en la Alpujarra, donde se obtiene miel de castaño,
por ejemplo. En verano, sólo en las cumbres de Sierra Nevada es posible
encontrar flores, de las que se extrae finalmente una espléndida miel de
sierra.
Una vez trasladadas las alzas mielarias a un almacén, se procede a su vaciado
mediante métodos mecánicos. Esta operación se realiza en la llamada “zona
limpia” de la fábrica. El primer paso es el desoperculado de los panales, es
decir a la apertura de las celdillas, retirando el opérculo, o capa de cera con
las que están selladas. Para realizar esta tarea, se utilizan cuchillos calentados
a una temperatura específica, 63 grados centígrados, bien mediante agua
caliente, bien por vapor o electricidad. Las grandes fábricas usan máquinas
desoperculadoras. Un buen desoperculador no corta más que los opérculos,
evitando segar parte de la celdilla, para que no se pierda miel en la
operación.
Para preparar miel lista para su consumo, el siguiente paso al
desoperculado es la extracción del producto mediante
centrifugación en frío de los panales. Actualmente, esta tarea se
realiza gracias a una máquina centrifugadora, dotada con un
bastidor para colocar los cuadros. La centrifugación consigue que la
miel vaya desprendiéndose poco a poco de las cedillas, choque en
las paredes de la máquina y se escurra en dirección a un
receptáculo situado en el fondo de la máquina. Pero antes, pasa
por un tamiz inoxidable para limpiarla de impurezas, burbujas de
aire o restos de cera.
Antes de envasar la miel, es necesario dejar que el producto madure en
tanques decantadores, donde igualmente se termina de limpiar. En estos
recipientes especiales, la miel debe permanecer al menos 48 horas y nunca
más de 5 días. En dicha fase, también se suele someter a la miel a un proceso
para evitar que se cristalice o, en su caso, para descristalizarla. Para ello, se
emplean tanques especiales de doble pared, donde la miel queda en el
centro, rodeada de una pared exterior con agua o aceite caliente. El paso
final de la producción de miel es el transporte por bombas mediante cañerías
a la zona de envasado y etiquetado. Y ya está lista para ser comercializada.

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