ADOLESCENCIA

INTERMEDIA
 EQUIPO 4
Ariana Esther
Sanchez Leonardo.
Licda. Educación Mención
Orientación Académica.
Labora para el ministerio de
educación.
ADOLESCENCIA
Es una etapa necesaria e importante para hacernos
adultos, Pero esencialmente con valor y riqueza en
sí misma, que brinda infinitas posibilidades para
el aprendizaje y el desarrollo de fortalezas. Es una
etapa desafiante, de muchos cambios e
interrogantes para los adolescentes, pero también
para sus padres y adultos cercanos.
La adolescencia intermedia inicia entre
los 14 y 16 años. Comienzan a
evidenciarse cambios a nivel psicológico y
en la construcción de su identidad, cómo
se ven y cómo quieren que los vean. La
independencia de sus padres es casi
obligatoria y es la etapa en la que pueden
caer fácilmente en situaciones de riesgo.
 CAMBIOS FÍSICOS

Durante esta etapa, los adolescentes

experimentan un rápido crecimiento,
desarrollo de características sexuales
secundarias y cambios en la voz
(especialmente en los varones).
 CAMBIOS EMOCIONALES

Los adolescentes pueden

experimentar fluctuaciones en el
estado de ánimo, desde la euforia
hasta la irritabilidad. Pueden
volverse más conscientes de sí
mismos y desarrollar una mayor
independencia emocional.
 BÚSQUEDA DE IDENTIDAD

Los adolescentes comienzan a

explorar quiénes son y qué valoran.
Pueden cuestionar las creencias y
valores familiares, y buscar su
propia identidad.
 MAYOR AUTONOMÍA

Los adolescentes desean más

independencia y responsabilidad.
Pueden empezar a tomar
decisiones por sí mismos y
buscar nuevas oportunidades y
experiencias.
 SIGNOS DE ALERTA
Es una conducta o una serie de síntomas que nos
indican que hay una o más áreas deficitarias en el
desarrollo del niño.
Cambios extremos de
comportamiento:
Si notas cambios drásticos en el
comportamiento de tu hijo, como
aislamiento social, agresividad, tristeza
profunda o cambios repentinos en el
rendimiento académico, podría ser un
signo de alerta.
 Problemas en la escuela:
Si hay una disminución significativa en
el rendimiento académico o un deterioro
en la actitud hacia la escuela, es
importante prestar atención y buscar
posibles problemas subyacentes.
 Conductas de riesgo:
Si tu hijo está participando en
comportamientos peligrosos como
consumo de drogas o alcohol, conductas
sexuales arriesgadas o conducción
temeraria, es fundamental intervenir y
buscar ayuda profesional.
Cambios en el estado de ánimo
persistente:
Si tu hijo muestra signos de depresión,
ansiedad o cambios de humor extremos
durante un período prolongado, es
importante buscar apoyo y orientación
de un profesional de la salud mental.
 Problemas familiares:
Conflictos familiares, divorcio,
violencia doméstica o falta de apoyo
familiar pueden afectar negativamente a
los adolescentes.
 Exposición a sustancias
peligrosas:
El consumo de drogas y alcohol puede
aumentar durante la adolescencia
intermedia, y los adolescentes pueden verse
tentados a experimentar o participar en
comportamientos peligrosos.
 Presión social:
Los adolescentes pueden sentir una fuerte
presión para encajar, lo que puede llevarlos
a tomar decisiones inapropiadas o
arriesgadas para obtener aceptación social.
 Acceso a tecnología y medios de
comunicación:
El acceso sin restricciones a internet y las
redes sociales puede exponer a los
adolescentes a riesgos como el ciberacoso,
la intimidación en línea, la adicción a los
videojuegos o el consumo de contenido
inapropiado.
SUGERENCIAS
PARA UNA
CRIANZA
POSITIVA
 La crianza positiva es una
aproximación que se centra en
fomentar el desarrollo saludable y el
bienestar emocional de los
adolescentes.
• Establecer una relación de respeto y comunicación
abierta: Escucha activamente a tu hijo adolescente y
valora su opinión.
• Fomentar la independencia y la toma de decisiones.
• Establecer límites claros y consistentes.
• Enfocarse en el refuerzo positivo.
• Enseñar habilidades de afrontamiento y resiliencia.
• Brindar apoyo emocional.
• Modelar comportamientos positivos.
• Promover la participación en actividades positivas.
• Establece límites y normas claras.
• Fomenta una buena salud física y mental.
• Sé un modelo a seguir positivo. Busca apoyo
profesional si es necesario.
¡GRACIAS!