Está en la página 1de 12

Trastornos de personalidad:

Grupo C

Leslye Hernandez Ortega


Trastorno de la personalidad evasiva
Las personas este trastorno tienen sentimientos de insuficiencia y son muy sensibles a lo que los demás piensan
de ellos, estos sentimientos de inadecuación llevan a la persona a ser socialmente inhibida y a sentirse
socialmente inepta.
la persona tratará de evitar el trabajo, el colegio y las actividades que impliquen interactuar con los demás.
Los individuos con trastorno de la personalidad por evitación evalúan atentamente los movimientos y
expresiones de aquellos con quienes entran en contacto.
Su actitud temerosa y tensa puede provocar las burlas de los demás, lo que a su vez confirma sus propias
dudas. Están muy preocupados por la posibilidad de reaccionar a las críticas ruborizándose o llorando. Los
demás los perciben como «tímidos», «solitarios» y «aislados».
Criterios
Patrón dominante de inhibición social, sentimientos de incompetencia e hipersensibilidad a la evaluación negativa, que
comienza en las primeras etapas de la edad adulta y está presente en diversos contextos, y que se manifiesta por cuatro (o
más) de los hechos siguientes:
1. Evita las actividades laborales que implican un contacto interpersonal significativo por miedo a la crítica, la
desaprobación o el rechazo.
2. Se muestra poco dispuesto a establecer relación con los demás a no ser que esté seguro de ser apreciado.
3. Se muestra retraído en las relaciones estrechas porque teme que lo avergüencen o ridiculicen.
4. Le preocupa ser criticado o rechazado en situaciones sociales.
5. Se muestra inhibido en nuevas situaciones interpersonales debido al sentimiento de falta de adaptación.
6. Se ve a sí mismo como socialmente inepto, con poco atractivo personal o inferior a los demás.
7. Se muestra extremadamente reacio a asumir riesgos personales
o a implicarse en nuevas actividades porque le pueden resultar
embarazosas.
Caso clinico
Identificación del Paciente
El caso es de una paciente que se llama Laura, es una mujer de 26 años, que va en bachillerato
Motivo de consulta
Ella acude al área de psicología en compañía de su mama, la cual expresa que su hija presenta problemas para relacionarse con las
personas, se le dificulta tomar decisiones y baja capacidad a la hora de manejar sus emociones, teniendo en cuenta que esto le ha
causado conflictos con sus padres, hermanos, pareja y vecinos los cuales consideran que la paciente necesita ayuda.
Historia familiar
Es la tercera 4ta de tres hermanas y un hermano que falleció, expresa no tener una buena relación con su familia por cosas que han
pasado, como la separación de sus padres a muy temprana edad, cuando estaba muy pequeña a los 6 años sus padres se alejaron y se
quedó por un tiempo con su mama y su padrastro, el cual sufre de una enfermedad que unos días lo hace estar bien y otros días no,
esta enfermedad lo ha hecho intentar abusar de la paciente y por este motivo ella decide irse a vivir con su padre y sus otras hermanas,
pero tiene muchos problemas en el colegio por su dificultad para aprender, por este motivo años después regresa a casa de su mama,
pero desde esa llegada hasta hoy presenta conflictos.
Áreas problemáticas
Área escolar
Cuando estaba en el colegio, expresa no poder entender lo que los profesores explicaban, pero a pesar de esto ella pasaba de año y esta
situación le generaba ansiedad porque no sabía nada de lo que estaba estudiando, por este motivo sus padres decidieron cambiarla de
colegio a uno de niños con dificultades en el aprendizaje, el cual le fue de mucha ayuda para su proceso, aunque decidió no seguir con su
proceso.
Área social
Para entablar una comunicación y tener amigos, expresa que todo empezó cuando ingreso a hacer su primer año escolar, era la burla de
sus compañeros y su trato a la hora de presentar actividades o a la hora de expresarse la hacían sentir como una niña diferente, a partir de
esto Laura decidió crear una barrera y unos pensamientos que la hacen alejarse aún más de las personas y no querer relacionarse, expresa
que hace poco tenía una amiga pero que presentaron problemas porque la juzgaba y la invitaba a lugares que no eran de su agrado.
Área afectiva
Expresa no tener buenas relaciones interpersonales, afirma solo haber tenido un novio en lo que lleva de vida, con el cual tienen una hija,
y hace nueve meses están separados, ella refiere a ver presentados problemas en su relación desde el día que nació la niña y la cual fue
dejada a cargo de su padre él le hizo firmar la entrega voluntaria de la custodia, esta situación le genero a la paciente inconformidad y
culpa porque no puede tener a su hija todo el tiempo que desea, al contrario para poder estar con ella debe esperar los días o pagar para
verla, ella en las sesiones muestra deseo por cambia la situación y poder aceptar la separación con su pareja.
Trastorno de la personalidad dependiente
Se caracteriza por una necesidad generalizada y excesiva de ser atendido, lo que lleva a comportamientos de sumisión y aferramiento,
no creen que puedan cuidar de sí mismas y utilizan la sumisión para intentar que otras personas les cuiden.
Las personas con trastorno por personalidad dependiente quieren ser cuidadas y se muestran extremadamente ansiosas ante la idea de
tener que cuidar de sí mismas; para obtener la atención que desean, están dispuestas a renunciar a su independencia e intereses; de este
modo se vuelven excesivamente dependientes y sumisas.
Síntomas específicos son la necesidad de ser cuidado y el temor a tener que cuidarse.
Se caracterizan por patrones de pensamiento, percepción, reacción y relación duraderos y repetitivos que provocan una angustia
importante a la persona afectada y/o afectan su capacidad de desenvolverse.

Causas del trastorno


• Factores culturales
• Experiencias tempranas negativas
• Una tendencia innata a la ansiedad
• Rasgos hereditarios (como la sumisión, la inseguridad y el comportamiento discreto)
Criterios
Necesidad dominante y excesiva de que le cuiden, lo que conlleva un comportamiento sumiso y de apego exagerado, y miedo a la
separación, que comienza en las primeras etapas de la edad adulta y está presente en diversos contextos, y que se manifiesta por
cinco (o más) de los hechos siguientes:
1. Le cuesta tomar decisiones cotidianas sin el consejo y la tranquilización excesiva de otras personas.
2. Necesita a los demás para asumir responsabilidades en la mayoría de los ámbitos importantes de su vida.
3. Tiene dificultad para expresar el desacuerdo con los demás por miedo a perder su apoyo o aprobación. (Nota: No incluir los
miedos realistas de castigo.)
4. Tiene dificultad para iniciar proyectos o hacer cosas por sí mismo (debido a la falta de confianza en el propio juicio o capacidad
y no por falta de motivación o energía).
5. Va demasiado lejos para obtener la aceptación y apoyo de los demás, hasta el punto de hacer voluntariamente cosas que le
desagradan.
6. Se siente incómodo o indefenso cuando está solo por miedo exagerado a ser incapaz de cuidarse a sí mismo.
7. Cuando termina una relación estrecha, busca con urgencia otra relación para que le cuiden y apoyen.
8. Siente una preocupación no realista por miedo a que lo abandonen y tenga que cuidar de sí mismo.
Caso clinico
Varón de 34 años que acude al servicio de urgencias psiquiátricas, acompañado de su pareja, tras intento autolítico por medio de una
sobre ingesta farmacológica a base de benzodiacepinas y alcohol. Historia de ingresos previos en la unidad de hospitalización breve
por otros intentos autolíticos y crisis de ansiedad de difícil control. Diagnosticado de trastorno de la personalidad Cluster C hace 8
años y en seguimiento por consultas externas de salud mental hasta hace año y medio que dejo de asistir. Dejó de tomar la medicación
hace 6 meses, según cuenta la pareja, el paciente refiere no necesitarla ya que no está enfermo. Como antecedentes personales destacar
fallecimiento del padre cuando tenía 4 años y abandono de la madre a los 18 años.
Durante la entrevista, la pareja de este narra la discusión que se ha producido entre ambos con motivo de la situación en la que se
encuentra el paciente: No trabaja, mantiene un estilo de vida sedentario y evita contacto social no permitiendo que su pareja lo tenga.
Recibe llamadas continuas por parte del paciente con la finalidad de saber qué hace en cada momento o para que le diga que tiene que
hacer ante la toma de decisiones cotidianas. Continuas crisis de ansiedad y de agitación cuando no sabe de ella o no hace lo que él
quiere, incluso ha llegado a fingir enfermedades para llamar su atención. La pareja menciona haber amenazado con finalizar la
relación. Por otra parte, el paciente refiere no saber explicar lo ocurrido, lo define como una “pérdida de control”, verbaliza tener
miedo a que ocurra algo y que no pueda enfrentarse a ello, y a que su pareja le abandone.
En la exploración psicopatológica se objetiva síntomas de ansiedad con discurso interrumpido por dificultad para poder respirar
correctamente. Afirma los datos mencionados por la pareja y añade nueva información, aunque se ven claras intenciones de querer
normalizar los acontecimientos manifestando “lo hace todo el mundo”. No realiza critica del intento autolítico y mantiene ideación
autolítica parcialmente estructurada. Como pruebas complementarias se realiza analítica sanguínea completa, análisis de orina y toma
de constantes vitales, todas dentro de los parámetros normales.
Trastorno de la personalidad obsesivo-compulsiva
Se caracteriza por una preocupación generalizada por el orden, el perfeccionismo y el control (sin espacio para la flexibilidad o la
eficiencia) que acaba afectando a la finalización de una tarea.
Tienen la necesidad de tener el control y hacer las cosas de una forma determinada en su búsqueda del perfeccionismo.
Entre sus síntomas están la preocupación:
• Los detalles
• Las reglas
• Los horarios
• La organización
• Las listas
Así como el hecho de centrarse en hacer las tareas con tanta perfección que acaba afectando a su finalización.
Las personas con este trastorno necesitan tener el control, por tanto tienden a hacer las cosas solas y a desconfiar de la ayuda de los
demás, se cree que ciertos rasgos que se presentan en las familias (la compulsividad, un rango limitado de emociones y el
perfeccionismo) contribuyen a este trastorno.
A diferencia de un trastorno obsesivo compulsivo (TOC), el trastorno de personalidad obsesivo-compulsiva no implica verdaderas
obsesiones (pensamientos recurrentes, no deseados e intrusivos que provocan una gran ansiedad) ni compulsiones (rituales que la
persona se siente impulsada a hacer para controlar sus obsesiones), tales como el lavado de manos excesivo o el hecho de comprobar
repetidamente si una puerta está cerrada.
Además, las personas con TOC a menudo se sienten angustiadas por su falta de control sobre las compulsiones, en cambio, las personas
con trastorno de personalidad obsesivo-compulsiva se sienten cómodas con su comportamiento obsesivo-compulsivo porque creen que
es necesario para lograr sus objetivos de orden, perfeccionismo y control.
Criterios
Patrón dominante de preocupación por el orden, el perfeccionismo y el control mental e interpersonal, a expensas de la
flexibilidad, la franqueza y la eficiencia, que comienza en las primeras etapas de la vida adulta y está presente en diversos
contextos, y que se manifiesta por cuatro (o más) de los siguientes hechos:
1. Se preocupa por los detalles, las normas, las listas, el orden, la organización o los programas hasta el punto de que descuida el
objetivo principal de la actividad.
2. Muestra un perfeccionismo que interfiere con la terminación de las tareas (p. ej., es incapaz de completar un proyecto porque
no se cumplen sus propios estándares demasiado estrictos).
3. Muestra una dedicación excesiva al trabajo y la productividad que excluye las actividades de ocio y los amigos (que no se
explica por una necesidad económica manifiesta).
4. Es demasiado consciente, escrupuloso e inflexible en materia de moralidad, ética o valores (que no se explica por una
identificación cultural o religiosa).
5. Es incapaz de deshacerse de objetos deteriorados o inútiles aunque no tengan un valor sentimental.
6. Está poco dispuesto a delegar tareas o trabajo a menos que los demás se sometan exactamente a su manera de hacer las cosas.
7. Es avaro hacia sí mismo y hacia los demás; considera el dinero como algo que se ha de acumular para catástrofes futuras.
8. Muestra rigidez y obstinación.
Caso clinico
Es una joven de 20 años, hija única, originaria de Acapulco, Guerrero.
Actualmente estudia quinto semestre de Mercadotecnia, en universidad privada en la ciudad de Puebla, llega al Opta
refiriendo: “Últimamente me he sentido mal en automático” en el aspecto académico es sobresaliente por lo que ingresa
con beca de excelencia, en la primaria, secundaria y preparatoria ha tenido un buen desempeño académico, recuerda que
siendo niña es diagnosticada con déficit de atención, no tuvo ningún tratamiento, desde muy pequeña asiste a diferentes
actividades, como danza, ballet, deportes, pintura etc.
En la dinámica de familia se observa apego con la figura materna, tienen un negocio familiar, el cual era atendido por los
padres de M.G, pero hace aproximadamente tres años, se hace cargo la madre, debido a que el padre fallece en un
accidente, siendo ese mismo año, cuando la paciente cambia de lugar de residencia por estudiar la universidad, la paciente
se define como una persona inteligente, sensible, responsable, amorosa, confiable, de carácter fuerte, comprometida con lo
que hace, pero en ocasiones los demás la llegan a percibir enojona, ya que se pone irritable si algo no sale como ella lo
planea, como parte de su rutina lleva un registro de actividades del día y cuando esto sale de control se molesta mucho.
En la actualidad pertenece al grupo de comunidad cristiana, donde es líder, también lleva a su cargo la mercadotecnia de
un proyecto de su escuela, el cual sido aprobado, la paciente se siente controlada por la madre, pues quiere intervenir en la
decisiones y actividades que realiza.

También podría gustarte