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26 - 01 - 2016 - Penal
26 - 01 - 2016 - Penal
346-2015
“Usted VICENTE CISNEROS MARROQUIN, el día veintisiete de junio del año dos mil trece,
aproximadamente a las ocho horas con treinta minutos, cuando se hacía acompañar de otras
personas de sexo masculino, aún no individualizadas, llegaron al terreno ubicado en el lugar
conocido como Las Guayabitas, ubicado en la aldea San José Carrizal del municipio de Jalapa,
departamento de Jalapa, en el cual se encontraba EFRAIN MARROQUIN DE LA CRUZ, de
diecisiete años de edad, fumigando una siembra de café, y usted sin mediar provocación alguna,
utilizando un arma de fuego que portaba, dispara en contra de Efraín Marroquín de la Cruz,
impactando el disparo en cráneo y posteriormente sale huyendo del lugar, juntamente con sus
acompañantes; el anterior hecho fue presenciado por los hermanos de EFRAIN MARROQUIN DE
LA CRUZ, de nombres JUAN ANTONIO y DANILO, de apellidos MARROQUIN DE LA CRUZ,
quienes se encontraban a pocos metros del lugar sembrando fríjol, y luego de lo sucedido se
acercaron a auxiliar a su hermano y al ver que éste se encontraba grave, fueron a solicitar ayuda
para trasladar a EFRAIN MARROQUIN DE LA CRUZ, al hospital de Jalapa, quien
posteriormente, por la gravedad de la herida sufrida, fue trasladado al Hospital Roosevelt de la
ciudad de Guatemala, lugar en donde falleció el día veintinueve de junio del año dos mil trece.”
PARTE RESOLUTIVA DEL FALLO IMPUGNADO:
“I) VICENTE CISNEROS MARROQUIN, es autor penalmente responsable del delito consumado
de HOMICIDIO, cometido en contra de la vida de las personas, y en agravio específico de
EFRAIN MARROQUIN DE LA CRUZ;
II). Que por el delito cometido se le impone a VICENTE CISNEROS MARROQUIN, la pena de
QUINCE AÑOS DE PRISION de carácter inconmutable, la que deberá cumplir en el centro de
cumplimiento de condena que fije el juez de ejecución, con abono del tiempo de prisión
efectivamente que él ya hubiere padecido de forma efectiva;
III). Al advertir que el acusado está padeciendo prisión preventiva en el Centro Carcelario para
Hombres de ésta cabecera departamental, se ordena que continúe bajo la misma situación
jurídica en dicho centro, hasta que la presente sentencia esté firme y el Juez de Ejecución
disponga lo contrario;
IV). Como pena accesoria, se suspende al condenado en el ejercicio de sus derechos políticos
durante el tiempo que dure la condena;
VI). Se condena al procesado del pago de los gastos y costas procesales por la tramitación del
proceso, al advertir que fue asistido en su defensa técnica por abogada en ejercicio particular de
la profesión, y no existir ningún motivo alguno para eximirle de dicho pago;
VIII). Léase la presente sentencia en la sala de debates del Tribunal, quedando así notificadas las
partes, y entregándose copia a la parte que lo solicite.”
RECEPCIÓN DEL PROCESO EN ESTA SALA:
Con fecha cuatro de noviembre de dos mil quince, fue recibido en esta Sala el proceso penal
supra identificado, en el cual obra el recurso de apelación especial planteado y que fuera
debidamente descrito al inicio de la presente sentencia. Por lo que habiéndose cumplido con los
requisitos de tiempo, argumentación, fundamentación y protesta se admitió para su trámite el
mismo, poniendo las actuaciones en la secretaría del tribunal para su examen por los
interesados.
Se señaló audiencia para el día martes doce de enero de dos mil dieciséis a las catorce horas, a
la cual asistió el Abogado Josué Lemus Navas y el procesado Vicente Cisneros Marroquín
quienes hicieron las argumentaciones respectivas y constan en el acta de debate respectiva.
El Ministerio Público reemplazó su participación a través del memorial respectivo el cual fue
recibido en esta Sala dentro del plazo y con las formalidades que la ley establece, en el cual se
expresó con relación al recurso planteado y el mismo corre agregado a los autos.
CONSIDERANDO
El recurso de apelación especial está previsto en nuestro ordenamiento procesal penal como un
medio para impugnar bajo ciertos presupuestos las sentencias de los tribunales de juicio,
limitándolo a la cuestión puramente jurídica, es decir que el mismo tiene por objeto la revisión
por parte del tribunal de apelación de la interpretación y aplicación que de la ley hagan los
tribunales correspondientes, definiendo y valorando jurídicamente los elementos de convicción
establecidos en la sentencia, poniéndolos en congruencia con la norma, por lo que este
recurso sólo procede para corregir el derecho, ya sea sustantivo o procesal, escapando al
control jurisdiccional las cuestiones de hecho. Como consecuencia de lo anterior, en esta
instancia no se puede hacer mérito de la prueba puesto que el tribunal de alzada no participa en
el debate que es el acto procesal en el que se genera la misma. Así mismo la legislación
procesal penal preceptúa que el tribunal de apelación se pronunciará únicamente sobre los
puntos expresamente impugnados y básicamente sobre el análisis de las normas ya sea
sustantivas o procesales que denuncien infringidas por quien recurre, por lo que de
proceder el recurso por motivos de fondo, anulará la sentencia recurrida y dictará la que
corresponda y si se tratare de motivos de forma y de proceder el mismo, anulará la sentencia y el
acto procesal impugnados y enviará el expediente al tribunal respectivo para que emita nueva
sentencia corrigiendo los errores señalados.
CONSIDERANDO:
PRIMER MOTIVO DE FORMA: Se inobservó el artículo 388 del Código Procesal Penal, la
sentencia impugnada provoca agravio toda vez que se viola el principio de congruencia, al
acreditar circunstancias que no son propias de la acusación y establecer el juzgador que el
mismo acusado, no obstante ir enmascarado absurdamente se quita la máscara por un minuto y
que es así como ejecutó el hecho. El agravio se robustece al agregar circunstancias en perjuicio
del acusado que son inconsistentes con la realidad y con la acusación que motivó la sentencia.
CONSIDERANDO:
respecto al primer motivo de forma, referente a la inobservancia del artículo 388 del Código
Procesal Penal, el cual refiere el principio de congruencia, e indica que: “La sentencia no podrá
dar por acreditados otros hechos u otras circunstancias que los descritos en la acusación y en el
auto de apertura del juicio o, en su caso, en la ampliación de la acusación, salvo cuando
favorezca al acusado.” Al revisar la acusación establecemos que la misma señala “…llegaron
al terreno ubicado en el lugar conocido como Las Guayabitas, ubicado en la aldea San José
Carrizal del municipio de Jalapa, departamento de Jalapa, en el cual se encontraba EFRAIN
MARROQUIN DE LA CRUZ, de diecisiete años de edad, fumigando una siembra de café, y usted
sin mediar provocación alguna, utilizando un arma de fuego que portaba, dispara en contra de
Efraín Marroquín de la Cruz, impactando el disparo en cráneo y posteriormente sale huyendo del
lugar, juntamente con sus acompañantes; el anterior hecho fue presenciado por los hermanos de
EFRAIN MARROQUIN DE LA CRUZ, de nombres JUAN ANTONIO y DANILO, de apellidos
MARROQUIN DE LA CRUZ, quienes se encontraban a pocos metros del lugar sembrando fríjol, y
luego de lo sucedido se acercaron a auxiliar a su hermano y al ver que éste se encontraba grave,
fueron a solicitar ayuda para trasladar a EFRAIN MARROQUIN DE LA CRUZ, al hospital de
Jalapa, quien posteriormente, por la gravedad de la herida sufrida, fue trasladado al Hospital
Roosevelt de la ciudad de Guatemala, lugar en donde falleció el día veintinueve de junio del año
dos mil trece”,
se comprueba por parte de la Sala que este hecho no fue modificado ni en apertura a juicio ni por
ampliación de acusación, por lo que ante el agravio señalado se debe comparar con el hecho
tenido por acreditado, pudiendo esta Sala establecer que:
Del segundo motivo de forma, referido a la inobservancia del artículo 385 y 181 del Código
Procesal Penal, los cuales se refieren a la Sana Critica Razonada y señala como motivo
esencial la falta de motivación del fallo que hoy se recurre, inobservar un artículo es no
aplicarlo, omitirlo cuando es obligación hacerlo, de ahí que la falta de fundamentación como un
elemento esencial de una sentencia, puede hacer que la sentencia venida en apelación sea
anulable, esta Sala procede a establecer si existe o no una fundamentación en la misma.
Es necesario recordar que si bien la Apelación Especial no es una instancia donde se efectúe
regularmente una nueva valoración de la prueba (como era en la segunda instancia
penal en el Procedimiento inquisitivo) es sí un juicio de la existencia de la motivación de
la sentencia apelada. Junto a los temas antes apuntados, están los vinculados a las
deficiencias en la motivación o en la fundamentación de las sentencias, que se dan en
numerosas ocasiones, y por los que se filtra, como a través de la subsunción ya estudiada, la
posibilidad de cierto reexamen de cuestiones fácticas. Hay exigencias genéricas de
fundamentación y exigencias como las previstas para la sentencia que sigue al juicio oral, pero
que cabe extender a todas las sentencias la exigencia de la motivación.
Urias Eliazar Bautista Orozco, Magistrado Presidente, Romeo Monterrosa Orellana, Magistrado
Vocal Primero; Neslie Guisela Cárdenas Bautista, Magistrada Vocal Segundo. Luz Marleny
Castañaza López de Hernández. Secretaria.