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Dirección: Oscar Troncoso
Secretaría de redacci6n: Margarita 8, Pontieri
Asesoramiento artístico: Osear Diaz
Diagramación: Alberto Oneto, Silvia 8attistessa, Diego
Oviedo.
Coordinaci6n y producción: Natalio Lukawecki, Elis,
, l Rando, Fermín E; Márquez
I ,

l'
l
PRESENT ACION ,J
Este libro esta constituido por siete trabajos, escritos
entre los años 1980 y 1984, can referencia a aconteci-
mientos que han gravitado fuertemente en la vida argen-
tina alcanzando vasta resonancia y provocando reaccio-
nes 'encontradas en nuestra sociedad, aún durante el
tiempo presente. Su expresión más alta estuvo represen-
tada por la sanción y promu]gación de la ley Nro. 1420,
sobre educación común, cuyo centenario celebró jubilo-
samente la República el año pasado, a favor de la demo-
cracia restablecida. '
Como es obvio, la publícacíón conjunta de tales traba-
jos tiene' el significado de una adhesión juiciosa a ese
magno suceso. Pero su sentido hállase lejos de toda evo-
cación nostálgica, partiendo de u n propósito más alto:
exhibir la honda significación de una ley que constituyó
un monumento de sabiduría legislativa y contribuir al
reemplazo de la nefasta política de subsidiariedad 'del
estado en materia de educación -vigente en el país a
partir de 1930, con escasos intervalos- por el principio
opuesto, He aludido a la 'I>rincipalidad del estado derno-
© 1985 Centro Editor de América Latina S,A, . Junin 981 crático (Nación, provincias y comunas) en el área, furi-
Buenos Aires, damento político de la educación popular.
Hecho el depósito de ley, Libro de edición argentina, Impreso er el
En primero de' estos trabajos, El 'proy ectoeducatí-
juruo de 1985. Pliegos interiores; compuesto en Gráfica Integralva de 1880 -cuya autorra me corresponde- quedan de
Puey~redón 538, 40 'A', Buenos Aires; Impreso y encuadernadcresalto el medio, el tiempo y los protagonista's de esa ha-
en R.pan ~,A:, Juan G. Lemas 246, Buenos Aires, Oistribuidore'zaña de la libertad cultural que fue la ley 1420. Por cier-'
en la Republ.ca Argentma: Capftat Mateo Cancellaro e Hijo ' Ifi d '1 f ' .. ' d
Echeverr ia 2459 50 'C' Buenos Aire I t . 'O" ,to, el proyecto srgn ica o so o ue un proposíto, un e-
, ,
S.R.L., Azara 225, Capital. • s. n error : rstrrmacc 'd al' 1 t
sigruo e re izar a go por par e e uno d d 1 t
e os sec ores
dirigentes de la sociedad argentina, enra iz ad o en la mejor
ISBN 950 25 U1111 tradición nacional. Producto de una fuerte confronta-

7

destinado a los "principios generales sobre la enseñanza
pública de las escuelas primarias". Sobre los fines de la
educación elemental el ministro de justicia, culto e ins-.
trucción pública Eduardo Wilc;le,expresó que ella tiene
que ser integral, es decir, tomar al individuo íntegra_
mente, "desde su moral hasta sus pies, y educado en
todo, en sus ideas y en su cuerpo, para que sea fuerte
para que conoz.ca las cosas, para que se dé cuenta de lo;
principios, para que sea moral, vigoroso :ir honrado".
Sobre esta materia el Congreso sancionó lo siguien_
te: Artículo 10: La escuela primaria tiene por único
objeto favorecer y dirigir simultáneamente el desarrojj¿
moral, intelectual y físico de todo niño de seis a catorce
años de edad.
Acerca del establecimiento de la obligación 'de ins-
truirse, Leguízamon manifestó que se trata de un Prin-
cipio incuestionable, pues no existe ni puede admitirse
f:
'p' •••.
que exista el derecho a Ia ignorancia, ya que tal cosa
es un absurdo. "Si una nación tiene el deber de educar
u -dijo-, no puede existir en parte alguna el derecho de
"z:::c
,,- ser ignorante", y tal principio "es exacto, incuestionable
:ft y ax íornatico". El ministro Wilde manifestó que la edu-
" 'il l~"-
cación primaria tiene que ser obligatoría, para que el
.
I
,
'
·,t
Estado pueda cumplir sus fines de engrand ecím íento
del pueblo y de la República, y de fomento de su riqueza
. .'¡'
e y su bienestar. Aclaró que la obligación no consiste en
·11 t asistir a la escuela pública, oficial o privada, sino en
! i ~
I, ' 1", adquirir un mínimo de instrucción, dónde se pueda
y cómo se pueda.
',;JI Sobre este punto el Congreso aprobó lo siguiente:
Artículo 20: La instrucción primaria debe ser obligato-
ria, gratuita, gradual y dada conforme a los preceptos
de la higiene. Artículo 3°: La obligación escolarvcom.
prende a todos los padres, tutores o encargados de los
.niños, dentro-de la edad escolar establecida en el artícu-
lo primero.
, sociedad. Sin embargo, como tiene que haber uno que
Libertad de enseñanza'
\ Alrededor de la importante cuestión de establecer
quien o quienes tienen poder y facultades para impartir
la educación primaria hubo muchas e interesantes opi-
I
niones en el Congreso. Demaría expresó que debe con-
sagrarse la libertad de enseñanza, respetándose la volun-
tad de los padres, de manera de facultarlos para que
pu edan enviar sus hijos a las escuelas que ellos elijan,
[¡'¡
u 50
!
¡ y [os eduquen, por consiguiente, en la forma que entien-
t dan más conveniente, adaptándose, sin embargo, las
medidas necesarias para que el Estado pueda fiscalizar
¡¡ todo tipo de educación, con el fin de comprobar si se
imparte con acierto.
t¡. Leguizamón destacó que debido a la influencia sobre
la Sociedad entera que la educación otorga a quienes la
ejercen y dirigen, todos los poderes sociales han tratado
f de dominarla. Por eso, en los primeros siglos de nuestra
,. efa la Iglesia católica se abrogó el derecho exclusivo
de enseñar. Pero su exclusivismo levantó la resistencia
I del poder civil, es decir, del Estado, y éste luchó por
I conquistar el derecho de enseñar. Fue el rey francés
. Felipe el Hermoso, 'en lucha con la Santa Sede, el pri-
mero que dijo que "la educación corresponde al Esta-
do", produciéndose, con tal causa, la escisión inicial
por motivos educativos, entre la Iglesia católica y el
Estado. Sin embargo, corno este último no era el Estado
moderno, ya que su jefe se atribuía origen divino, en
tanto que en la actualidad tal jefatura deriva de la
soberanía popular, una nueva revolución en las ideas
hizo que la educación pasara a pertenecer al pueblo, y,
de allí, al individuo. Estas sucesivas transformaciones
-la educación pú blíca en manos de la Iglesía vcatólica,
el Estado, el pueblo y el individuo- crearon predominios
monopolistas, que hoy son desechados por los principios
modernos, los cuales establecen que la educación pública
pertenece a todos los poderes sociales, según su esfera
de acción y sus medios, pero bajo la dirección exclusiva
del Estado, que es el 6rgano de la Nación elegido por el
pueblo para dírigirla. La educación ha dejado, pues, de
ser un asunto puramente religioso, estatal o doméstico,
para convertirse en una cuestión relacionada directa- ¡
"
mente con la vida social y política de la entidad nacio-
nal. Se ha llegado a este resultado, completamente
lógico, para que ningún poder social use la educación
como una influencia y un medio de gobierno sobre la
disponga del derecho de legislar sobre la educación
pública, reglamentaria y prescribir sus derroteros, tal
poder no puede ser sino el que es responsable de los
destinos del pueblo, es decir, el Estado, que es el órgano
creado por el pueblo para perpetuar y vigorizar las ins-
tituciones que se ha dado la Nación. Este poder o facul-
tad del Estado se concilia perfectamente con el respeto
a la libertad de e-.eñanza, derecho natural del hombre,
que puede hacer cumplir la obligación legal de instruir 1.
y educar a sus hijos, en la escuela oficial, dotada .de
todos los medios de que dispone el Estado, o en la -escue-
I
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51
 '¡I,.
,'
i I
I ,1
¡ t'culo 5°: reconocimiento aIas provincias de la 1'acul-
(a~ Iy la obligación de atender la educación primaria; y
~culO 67°: concesión al Congreso de la facultad de
,1 di tar planes de instrucción general) parecen, a primera
leta contradecirse, Y lo único viable, ante esa circuns-
I v~cIa es atenerse al derecho existente, que reconoce
~e -fJla'nera expIícita a las provincias la facultad de legis-
lar sóbre ed uc ac iori primaria para sus respectivas Juns-
dicciones, a su manera y con sus p rop io s crrteríos, y
atender la educación elemental, mientras que. obliga a
la Nación a hacerlo donde ejerce unaJunSdlcCl0;t exclu-
siva e incuestIonable., "Las provincras -agrego-- han
entendido hasta ahora, de una manera unifo,rme, que
'tenían el derecho -de Iegislar so breIa ínstruccíorr prrm a-
11'
l'!' 11 .1
.~ , ria en SUS respectivas jurisdicciones, que podían organi-
zarla a su manera y con arreglo a sus propias conviccio-
nes; y la Nación, lejos de contradecir este derecho,
lejos de estorbarlo en su ejercicio, ni en 10 general ni
en lo particular, ha reconocido de una manera explíci-
ANALISIS DE LAS DISPOSICIONES ta Y por actos legislativos, que esa iniciativa corresponde
DE LA LEY 1420 ex'clusivamente a las provincias, y que debe ser respetada
en las provincias, Y es por eso que en las únicas leyes
José S. Campobassi sobre ínstrucc ión primaria que ha sancionado' el Con-
greso, se ha limitado en su alcance a subvenciones esco-
lares para ayudar a las provincias, exigiendo todavía,
como una prueba mas de la afirmación que antes he
J urisdicciories 'educativas hecho, que las provincias se acogiesen a las disposicio-
nes de esa ley, por un acto explícito de, su soberanía
Sobre el asunto a que se refiere el título, el diputado jocal." Manifestó que una ley que no se ajustara a esos
Mariano De marf a opinó que ciertas reglas generales principios comprometería demasiados intereses vitales
sobre la organización de la educación primaria ,-como de las provincias, "dejándoJas reducidas, en el meca-
la o bligación de instruirse y la gratuidad de la enseñanza nismo de la educación primaria, a simples comisiones de
elemental oficial- deben establecerse para todo el terrí la'inspección local", "¡
torio nacional, so bre la base de la facultad constitucional El pronunciamiento del Congreso fue favorable a la
•
que tiene el Congreso de dictar leyes, sobre planes gene, , opinión de Leguíz amon, pero no de una' manera dispo-
rales de instrucción pú blica, aplicables en toda la Nación, sitiva, pues la ley no contiene precepto alguno sobre la
sin perjuicio de dejar libradas a las provincias la dirección jurisdicción en que debe aplicarse, sino por el rechazo
y la administración de la educación primaria. del despacho de ley educativa de la comisión de justicia,
Oriésimo Legu iz arn ori, por el contrario, sostuvo que el culto e instrucción pública de la Cámara de Diputados,
Congreso debe limitarse a legislar, en materia de educa, del que fue miembro informante Demarí a, y que pro-
ción primaria, solamente para los territorios en que la ponía aplicar en todo el territorio de la Nación las reglas
Nación ejerce una jurisdicción exclusiva e incuestionable, generales incorporadas al proyecto de ley de educación
es decir, la capital de la República y los territorios y , común.
colonias nacionales, de acuerdo con la Constitución
Nacional y la jurisprudencia establecida sobre los p recep- Fines de la educación prímaria -
tos constitucionales acerca de la organización educativa, La obligación escolar
Alegó que los principios establecidos en la Constitución
La ley 1420 se ínícia con un capítulo -el primero-

.iR 49
 !
I la particular que él elija, o 'aun en el hogar doméstico
donde tiene el derecho y el deber de ser el prime;
l' maestro.
l. Pedro Goyena manifestó que confiar al Estado e xclu,
sivam érrte la formación del n.i.ño, es hacer de la escuela
pú blica una fábrica de individuos calcados sobre el
modelo que conviene al representante del mismo Estado
es decir, al gobernante; es, asimismo, quitar todo carác:
¡, ter de espontaneidad e independencia al ciudadano
fu turo y formar un conjunto de seres mecánicos, a
quienes faltan las altas inspiraciones que el padre de
familia quiere que reciban sus hijos.
Delfín Gallo dijo que la ley fundamental argentina
establece el principio de la libertad de enseñanza. Fun-
dándose en él, la Iglesia católica proclama 'que nadie
debe inmiscuirse' en la educación prrvada, que está,
casi toda ella, en manos de congregaciones religiosas.
I Pero la Iglesia usa esa libertad en los tiempos moder-
'1
~I
nos, cuando el avance de la vida política y social pone
en manos del Estado, cada vez más, la educación com-
0'2
pleta, en tanto que en épocas pasadas, fundándose en
~~ palabras del Evangelio, proclamó que la educación
~, corresponde exctu srvamen te al clero, considerado como
t'¡ el único depositario de la palabra de Cristo. La educa-
~j
z
ción, sostuvo, no es una cuestión doméstica o religiosa,
sino un asunto que se relaciona con la vida social y
e
n, política de la cornu nid ad nacional, y tiene, en conse-
. cuencia, que ser dirigida por el Estado, y cumplida por
todos los que puedan darla. Manifestó que no debe haber
vaguedades, índef'ínício nes, errores, confusiones e inter-
pretaciones diversas en esta materia, pues una Nación,
por el conducto de su Estado, que es su órgano direc-
tivo, no puede enajenar, de manera peligrosa, el poder
que tiene para defender, vigorizar y perpetuar sus insti-
tuciones, siendo la educación uno de los medios desti-
nados a ese fin. No puede haber, pues, enseñanza libre
absolu ta y la libertad de enseñar debe condicionarse a
-Ias exigencias de la nacionalidad. No puede haber liber-
tad, por ejemplo, para enseñar principios monárquicos
en una república o ideas despóticas en una democra-
\ cia. "La vieja teoría -afirmó- de que el padre de familia
tiene derecho de educar exclusivamente a sus hijos, ha
1,
I quedado relegada a los viejos libros, o como argumento
I
gastado en boca de algún egoísta." Sin embargo, sostuvo,
la ley tiene que resp etar la libertad de que el padre elija
:1. la escuela en que debe educarse e instruirse su hijo,
o edu carlo e instruirlo él mismo. Pero deben establecer-
11. se, asimismo, disposiciones que no dejen exenta y libre
r escuela pública gratuita al alcance de los niños en edad
I de toda vigilancia a las escuelas particulares, para que
52
:.·11' ,
. J1ellas no se defrauden los principios de la ley. No se
1 euede, afirmó, asegurar la enseñanza de la verdad en la
~scuela.oficIal y dejar en Iibertad para que se enseñe
la rnentlIa en la escuela particular; no se pu ed e p rescribir
corno alimento necesario una cantidad determinada de
conocimientos morales e intelectuales en la escuela ofi-
cial Y dejar completa libertad para que se suministre
el veneno en la escuela privada.
ACercade este asunto el Congreso sancionó lo siguien-
te: Artículo 4°: La obligación puede cumplirse en l as
escLlelaspú blicas, en las escuelas particulares o en el
hogar de los níñ os; puede comprobarse por medio de
certificados Y examen; y exigir su observancia por medio
de amonestaciones y multas progresivas, sin perjuicio
de .ernplear;' en caso extremo, la fu erz a pública para
conducir los niños ala escuela.
Gratuidad en la escuela oficial
I
Acerca de la gratuidad de la enseñ anz a primaria
oficial, Leguizamón sostuvo que no puede haber obli-
I gación escolar sin la correspondiente escuela elemental
gratuita al alcance de los niños. "La obligación escolar'
supone-afirmó-, como condición y explicación, la
existencia de la escuela gratuita al alcance de los niños
a quienes se obliga a ser educados". Declaró que si el
Estado imp one a todos los padres de familia, tutores o
encargados de los niños, dentro de las edades calificadas
como escolares, la obligación de instruirlos y educarlos,
es necesario que el Estado sea consecuente y ponga "la
escuela gratuita, sin cargas y sin gabelas, al alcance del \
niñ o, para que el niño vaya a la escuela."
Gallo sostuvo que la enseñanza primaria tiene que ser
gratuita, y criticó a la Iglesia porque sostiene que esa
gratuidad es un principio incomp atible con la libertad
de enseñanza: Sin embargo, dijo, desde el Evangelio
proclama "dad de comer al hambriento y de beber al
sedientó", y el libro sagrado no se refiere solamente
al cuerpo, sino, también, a la mente y al espíritu.
El ministro Wilde manifestó que el principio de la
gratuidad no debe discutirse siquiera, porque no todas
las familias pueden educar e instruir a sus niños, ya que
hay deficiencias de fortuna que lo impiden y hay causas
morales que lo hacen imposible. •
Sobre este punto el Congreso .aprobo lo siguiente:
Artículo 5°: La o bligación supone la existencia de la
53
 escolar. Con tal o bjeto, cada vecindario de mil a mil
q uiruentos h abitantes, en las ciu dades, o trescientos
. a quinientos habitantes en las colonias y territorios
nacionales, constituirá un distrito escolar, con derecho
por lo menos, a una escuela pública donde se dé e~
toda su ex tensión la enseñanza primaria que establece'
esta ley.
Plan mínimo de estudios
y graduación de la enseñanza
El ministro Wilde declaró que un programa de educa_o
ción primaria debe comprender solamente lo que es
universal en su carácter presente. "La obligación de ins-
, I
)·'~' truir, propia del Estado para los fines sociales, queda
llenada con enseñar lo que es verdad en todas partes y
í \) I
PZ.
,tQ:
r para todos los hombres, es decir, lectura, escritura
aritmética, idioma, historia, moral, física, química'
historia natural, artes manuales, etcétera.
Sobre esta materia el Congreso sancionó lo siguien.
]i ~
,e te: Artículo 6°: El mínimum de instrucción obligatoria
1;
c, ,1:
comprende las siguientes materias: lectura y escritura;
¡'¡'j I~~I'
aritmética (las cuatro primeras reglas de los números
,
.":~: '-1
enteros y el conocimiento del sistema métrico decimal
y la ley nacional de monedas, pesas y medidas); geogra-
¡ ~ !: 1;
, t
fía particular de la Repúblíca y nociones de historia
general; historia particular de la República y nociones de
¡
geografía universal; idioma nacional; moral y.urbanidad;
nociones de higiene; nociones de ciencias matemáticas,
I fí sicas y naturales; nociones de dibujo y música vocal;
lí, ,1. gimnástica; y conocimiento de la Constitución Nacional.
, ' Para las niñas será oblígatorío , además, el conocimiento
de labores de manos y nociones de economía domés-
! t' tica. Para los varones el conocimiento de los ejercicios
y evoluciones militares más sencillos; y en las campañas,
1'1' nociones de agricultura y ganadería. Artículo' 7°: En las
escuelas pú blicas se enseñarán todas las materias que
\! \' comprende el mínimum de instrucción Obligatoria, desa-
!II
l'
rroUándolas convenientemente según las necesidades del
país y la capacidad de los edificios escolares.
So bre el tema de la enseñ anza neutral, laica o religio-
sa en materia de creencias, en las escuelas públicas oficia-
1: les, el Congreso, que dedicó el noventa y cinco por
ciento del tiempo destinado al tratamiento y sanción
de la ley 1420, a los debates sobre este asunto, aprobó
I, lo siguiente: Artículo 8°: La enseñanza religiosa sólo
podrá ser dada en las escu elas pú blicas por los mírustros
li' 54
. OIutorizados de los diferentes cultos, a los niños de su
respectiva cornu nión, y antes o después de las horas
de clase.
Sobre la graduación de la enseñanza Legu izam ori
expresó que la educación primaria tiene que ser nece-
sariamente graduada, con arreglo a los preceptos deTa
naturaleza, pues de acuerdo con sus leyes debe pasarse,
en la adquisición de los conocimientos, de un orden
a otro, de lo conocido a lo desconocido, de lo simple
a lo compuesto, de la síntesis al análisis.
Acerca de esta cuestión el Congreso votó lo siguien-
te: Artículo 9°: La enseñanza primaria se dividiráen seis
o más 'agrupaciones graduales, y será dada sin alteración
.de grados, en escuelas infantiles, elementales y supe-
riores, dentro del mismo establecimiento o separada-
mente.
'
Coeducación - Enseñanzas especiales
La necesidad de establecer el prin cip ío de la educa-
ción de niños y niñas en clases mix tas, fue admitido por
los legisladores que actuaron en el período de 1881 a
1884, sin dar lugar a discusiones de ninguna naturaleza,
y se reconoció, al mismo tiempo, que su aplicación signi-
fica admitir la extraordinaria influencia educadora de la
mujer maestra. Sobre este particular, Leguizarn ón expre-
só que "la mujer es la maestra de la humanidad en la
infancia, por un derecho de la naturaleza misma", pues
"el ejercicio del magisterio es una continuación de las
funciones de la maternidad". Por eso, agregó, "nadie
puede ser mejor maestro que la madre, o la que es capaz r.
de serlo, y es por eso que todas las leyes de educación,
que todos los sistemas educativos, entregan de una ma-
nera preferente y necesaria, a la dirección inmediata de
la maestra mujer, la enseñanza infantil de los niños hasta
la edad de nueve O diez años".
Sobre esta materia el Congreso sancionó lo siguiente:
Artículo 10°: La enseñanza primaria para los niños de
.
seis a diez años de edad, se dará preferentemente en
clases mixtas, bajo la dirección exclusiva de maestras
autorizadas.
Acerca de enseñanzas y escuelas especiales el Congre-
so aprobó lo siguiente: Artículo 11°: A-demás de las'
escuelas comunes mencionadas, se establecerán las si-
guientes escuelas especiales de enseñanza primaria: uno
o más jardines de infantes, en las ciudades donde sea
posible dotarlos suficientemente; escuelas para adultos,
55
lo:

I
1:11 en los cuarteles, gu arrnc iones, buques de guerra, caree. ode cada niño en edad escolar existente en el distrito.
les, fábricas y otros establecimientos donde pueda en- Artículo 16°: El certificado de matrícula será expedido
contrarse ordinariamente reunido un número, cuando por el Consejo Escolar del distrito, en el tiempo, lugar
menos, de cuarenta adultos ineducados, escuelas arn bn, y forma que determine el reglamento de las escuelas,
lantes, en las campañas, donde, por hallarse muy disem], y presentado por el niño al tiempo de ingresar anual-
nada la población, no fuese posible establecer con venta- mente en la escuela o cuando le fuese exigido por la
ja escuelas fijas. Artículo 12°: El mínimum de ense_ autoridad escolar del distrito. Artículo 17°: Los padres,
ñ anz a para las escuelas ambulantes de adultos, compren, tutores o encargados de los niños que no cumplieren con
! 1: derá estos ramos: lectura, escritura, aritmética (las cu a, el deber de matricularse anualmente, incurrirán, por la
tro primeras reglas y el sistema métrico decimal), mora] primera vez, en el mínimum de la pena que establece
y urbanidad,. nociones de idioma nacional, de geo- el artículo 44°, inciso 8°, aumentándose ésta sucesiva-
I '1
, I grafía nacional y de historia nacional, explicación de la mente en caso de reincidencia. Artículo 18°: Los direc-
Constitución Nacional y enseñanza de los objetos más tores de escuelas pú blicas que recibíeren en ellas niños
comunes que se relacionen con la industria habitual de que no se hubiesen matriculado en ese año, incurrirán,
los alurn nos de la escuela. por cada·oomisión, en ola .rnu Ita .de cuatro pesos moneda
Acerca de la necesidad de dar la educación primaria
I en condiciones higiénicas, Legu íz am ón manifestó que
nacional. Artículo 19°: En cada escuela pública se abrirá
anualmente, bajo la vigilancia inmediata de SU director,
esta exigencia es una regla axíomátíca, pues la naturaleza
,1~~, un registro de asistencia escolar que contendrá las
o I impone que la educación debe darse de acuerdo con los indicaciones necesarias sobre cada alumno en lo relati- I
~i principios del desarrollo físico; y el rnin istro- Wilde vo al tiempo que concurra o que esté ausente de la
~0
: '- ~~ afirmó que el sostenimiento del cuerpo en buenas con- escuela. Artículo 20°: La falta inmotivada de un niño
.'Ho: diciones ayuda poderosamente a la ad qu isicion y for- a la escuela, constante del registro de asistencia por
e (~ mación de ideas buenas. mas de dos días, será comunicada a la persona encar-
l) l~
Sobre estos puntos el Congreso sancionó lo siguiente: gada del niño, para que explique la falta. Si ésta no fuese
a,''1'
o,,,"
Artículo J 3°0: En toda construcción de edificios escola- satisfactoriamente explicada, continuando la' falta, el
o~
res y de su mobiliario y útiles de eriseñ anz a, deben con- encargado del níñ o incurrirá en el mínimum de la pena
'.,"
su ltarse las prescripciones de la higiene. Es, además, pecuniaria establecida en el artículo 44°, inciso 8° aumen-
obligatoria para las escuelas la inspección médica e higié-
'\i'.
,Ii . J.:
nica y la vacunación
períodos determinados.
y revacu nacíon de los niños, en
Artículos 14°: Las clases diarias
tándose, en casó de reincidencia, hasta el máximum, sin
perju icio de hacer efectiva la asistencia del niño a la
escuela. Artículo 2 1°: En cada escuela pública se abrirá
en las escuelas públicas serán alternadas con intervalos de también cada año un libro de estadística de la escuela,
descanso, ejercicio físico y canto. destinado a consignar, con relación a ésta, las condicio-
, 1:' nes del edificio, monto del alquiler, reparaciones que
necesita, inventario y estado de los muebles, libros y
",
I "
I• I I Inscripción y asistencia de alumnos útiles de la escuela; y con relación a cada niño, el grado
!) 1
El capítulo segundo de la ley está destinado a las dis-
de su clase, aprovechamiento,
falta a cualquiera
conducta, etcétera. La
de estos deberes será penada con
11'1
!l
posiciones sobre matrícula
cia, estadística
escolar, registro de asisten-
de las escuelas y censo de la población
el mínimum de la multa que establece el artículo 44°,
inciso 8°, por primera vez, aumentándose en caso de
escolar, es decir, a todos los preceptos necesarios para reincidencia. Artículo 22°: Las penas pecuniarias esta-
\] . , organizar y materializar el cumplimiento de la obligación
de instruirse dentro de la edad escolar, y del deber de
blecidas en los artículos anteriores se harán efectivas
contra los maestros, por la autoridad escolar respecti-
los padres, tutores o encargados de los niños, de colabo- va; y contra los particulares, por vía de apremio, ante

I rar en la realización de esta finalidad social.

Sobre todos estos temas el Congreso aprobó lo si-
guiente: Artículo 15°: Anualmente se abrirá en cada
el juez respectivo del demandado, sirviendo de título
el certificado del director o Consejo Escolar del distri-
to, de no haberse cumplido la prescripción legal. Artícu-
Consejo Escolar de distrito un libro de matrícula desti- lo 23°: El censo de la población escolar se opracticará
nado a inscribir el nombre, edad, sexo, comunión de sus simultáneamente, cada dos años por lo menos, en todos
padres, domicilio y d emas indicaciones necesarias acerca los diversos distritos escolares, en la forma y por los
I1 1
I
56 ¡. 57
~I / i'
" o e
r

medios' que se creyeren
I la exactitud posible.
I Idoneidad y conducta
más adecuados para obtener direCtores y ayudantes de las escuelas públicas: 1°:
recibir emolumento alguno de 105 padres, tutores o en-
cargadoS de los niños que concurran a sus escuelas.
20: ejercer dentro de la escuela o fuera de ella cualquier
del magisterio oficio, profesión o comercio que lo inhabilite para cum-

l, I ,
El capítulo tercero está dedicado al personal docente.
Demaría sostuvo que las funciones docentes deben ser
plir asidua e imparcialmente
terio. 3°: imponer
o afrentas. 4°: acordar
las obligaciones del magis-
a los alumnos castigos corporales
a los alumnos premios O

¡ i
desempeñadas por personas competentes, "que gocen
de las aptitudes necesarias para desempeñar esos puestos
recompensas especiales, no au torizados de antemano por
el reglamento de las escuelas para casos determinados.
y observen y hayan observado durante su vida Una con- Artículo 29°: Toda infracción a cualquiera de las an-
i ducta moral que pueda servir de ejemplo a los alumnos". teriores prescripciones será penada, según los casos, con

I Acerca de este punto el Congreso sancionó lo si-

guiente: Artículo 24°: Nadie puede ser director, subdi-
rector o ayudante de' una escuela pública sin justificar
reprensión, multas, susp ensión temp oral o 'destitución.
con arreglo a las disposiciones que de antemano estable-
cerá el reglamento de las escuelas.
I previamente su capacidad técnica, moral y física para la Además, en el capítulo noveno de la ley, destinado a
enseñanza; en el primer caso con diplomas o certificados las disposiciones complementarias, el Congreso íncluy ó
I
1 expedidos por autoridad escolar competente del país; los siguientes artículos relacionados con las obligaciones
;'J t- en el segundo, con testimonio que abone su conducta; y prohibiciones para los maestros: Artículo 77°: Las
~ ¡ en el tercero, con un informe facultativo que acredite faltas de asistencia inju stificadas, a las clases, oficinas,
. ,t no tener el candidato enfermedad orgánica o contagiosa conferencias o sesiones, de cualquier funcionario o em-
, q~
,. capaz de inhabilitarlo para el magisterio. .Art cu lo 25°: pleado en la enseñanza, dirección o administración de las

"-
(, í

" ~'7,1::; Los diplomas de maestros de la enseñanza primaria, escuelas, producirán la necesaria pérdida de una parte
en cualquiera de sus grados, serán expedidos por las de la dotación mensual de empleado o funcionario, en
l'
,.¡l
l,1" II'l>,.
escuelas normales de la Nación o de las provincias, Los
maestros extranjeros no podrán ser empleados en las
escuelas públicas de enseñanza primaria sin haber revali-
dado sus títulos' ante una autoridad escolar de la Nación
proporción a los días de su asistencia obligatoria por los
reglamentos. Con tal objeto cada escuela, oficina o Con-
sejo Escolar de distrito, llevará un libro de presencia,
bajo la custodia del secretario o empleado que designen
,.ir ;~ los reglamentos, y en él firmarán los empleados o funcio-
y conocer su idioma. Artículo 26°: Mientras no exista
!I j' ~ en el país suficiente número de maestros con diploma narios que lo componen, al entrar en sus oficinas. El
\íI ' para la enseñanza de las escuelas públicas y demás contador general de las escuelas no procederá a formar
las planillas mensuales de cada repartición, sin tener a la
empleos que por esta ley requieren dicho título, el Con-
Ii sejo Nacional de Educación proveerá a la necesidad men- vista los estados de los libros de presencia. Artículo
¡I " cionada, autorizando a particulares para el ejercicio de 780: Los fondos resultantes de pérdida de dotación por
I 1, j aquellos cargos, previo examen y demás requisitos exi- faltas 'de asistencia, se reservarán como base del ,fondo
gidos por el artículo 24°. ," de pensiones. Artículo 80°: Las prescripciones conteni-
Sobre las obligaciones y prohibiciones para los m aes- das en esta ley con relación a los maestros, inspectores
,tras, el Congreso aprobó lo siguiente: Artículo 27°: Los y demás empleados de la instrucción primaria, son apli-
maestros encargados de la 'enseñanza en las escuelas cables, según el caso, a los dos sexos.
!1 públicas están especialmente obligados: 1°: a dar cum--
l' ¡ plimiento a la presente ley y a los programas y reglamen-
'[1: I tos que dicte para las escuelas la autoridad superior de Estabilidad, sueldo y jubilación docentes
1 las mismas, 2°: a dirigir personalmente la enseñanza
de los niños que estén a su cargo. 3°: a concurrir a las Leguizamón manifestó que es obligación de la socie-
!IiIi ¡ conferencias pedagógicas que, para el progreso del magis- dad moderna hacer estable la profesión del educador, y
I
terio, establezca el Consejo Nacional de Educación. si tal cosa es aún una aspiración general, agregó, tiene
que convertirse, al cabo de algún corto lapso, en un prin-
l' 4°: a llevar en debida forma los registros de asistencia,
l' ,
estadística e inventario- que prescriben los artículos 19° cipio inconmovible .. Desgraciadamente, manifestó, el
il ¡ y 21°, Artículo 28°: Es prohibido a los directores, sub- educador, que desempeña en la sociedad una función
:1.1
59
!
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58
,
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necesaria para su propio desarrollo, es considerado de 'ones por enfennedad, gozarán de una pensión vitalicia
una manera subalterna, y hasta inconsiderada, por el
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"

I I
público, cuando su profesión debiera constituir una espe_
cie de aristocracia social. Sin embargo, el Estado tiene
.',1, el deber de no hacerse partícipe de esa injusticia vulgar
c~uala la mitad del sueldo que perciban; si los servicios
hubiesen alcanzado a quince años, tendrán de pensión
tres cu artas p artes de un sueldo. Pasando de veinte
años el precep tor o subpreceptor que qu isiere retirarse
"

y es su obligación crear, por lo menos, la garantía de la por 'cualquier causa, tendrá derecho al sueldo íntegro,
1: subsistencia y la estabilidad en medio de la sociedad como pensión de retiro. Artículo 32°: Estas pensiones
"'1 en que vive el ec o cador. Ha de establecerse, plJes, en serán pagadas de la renta del fondo escolar de pensiones,
, forma estable y p erm anen te , el principio de que 'mien- el cual será fonnado con las sumas que la Nación, los
I, tras el maestro conserve sus aptitudes para la enseñanza particU[ares o las asociaciones destinen a ese objeto
y las necesarias condiciones de moralidad que le han sido y con el dos por ciento del sueldo que corresponda a
exigidas al entrar en la escuela, tiene derecho a que sea [os preceptores y a los subpreceptores, que será descon-
inviolable la dotación de que goza". tado mensualmente. Artículo 33°: El fondo escolar de
En lo referente a este asunto, el Congreso sancionó pensiones de que habla el artículo anterior seraadminis-
lo siguiente: Art ícu ló 30°: Los maestros ocupados en' la trado separadamente del tesoro COml1I1de las escuelas,
enseñanza de las escuelas públicas, tendrán derecho a por el Consejo Nacional de Educación. Artículo 34°:
que no sea dism inu id a la dotación de que gozan según Estas pensiones no podrán ser acord ad as antes de dos
~J,I, su empleo, mientras conserve su buena conducta y
demás aptitudes para el cargo, salvo el caso de que la
añoSde dictada esta ley.
H
?Z,
disminución fuese sancionada por ley, como medida
G'
general para los empleados del ramo. El reglamento de Inspección técnica de la enseñanza
~e < ¡~
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o \:"
la escuelas de term inar á, en previsión del caso, los hechos
o circunstancias que imp o rteri para el muestro la pérdida El capítulo cuarto de la ley se ocupa de la inspcc-
de sus ap ti tu des, por abandono, vicios, enf'crm edad, :ión técnica y administrativa de las escuelas. So bre la
',! I 1J:
,i;
-n- etcétera. primera parte -inspección técnica-, Dern ari a destacó
\ Id' Demaría declaró que después de veinte años de traba- su importancia para el adelanto de la educación primaria
I "if,
¡' ,-
jo, un maestro no pu ede continuar prestando servicios,
porque está fatigado, es ineficien te para la docencia y
\ y sostuvo que el éxito de la labor docente depende,
en gran parte, de la inspección técnica, sin la cual aquélla
¡1 '¡i
1: 1-

I
I
perjudica a la enseñanza. Tras ese período de labor, cIecaey se-atrasa.
'1' ,e•
1
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manifestó, es imposible que un maestro goce de buena
salud, se halle todavía COl" disp osiciones para enseñar
So bre . esta ',materia el Congreso votó lo siguiente:
Art ículo 35°:, Las escuelas primarias de cada distrito
I, ' como se debe, ni se encuentre a la altura, en conoci- escolar. serán inspeccionadas dos veces, por lo menos,
mientos pedagógicos, de los que hubiesen sido norn- en el año, por inspectores maestros. Créase, con tal obje-
brados después de él, y debe retirarse, por lo tanto, to, el cargo de inspector de las escuelas primarias, que
'de sus funciones., Legu iz amó n manifestó que puede será desempeñado por maestros o maestras normales,
demostrarse,' de una manera fisiológica, que el magisterio en la forma que determine la autoridad escolar re spec-
"es una de las profesiones que m as agotan los elementos tiva. Artículo 36°: Corresponde a los inspectores de las
constitutivos de la personalidad humana, pues exige ins- escuelas primarias: l°: vigilar personalmente la enseñan-

I! trucción, fortaleza física, buen temple de espíritu.

arte, paciencia y moderación." En el curso del debate se
dijo que un horn bre que ha servido veinte años al país,
en la educación pública, tiene el derecho de pasar el
resto de su vida en su casa, para consagrarse a su fami-
J lia, y se agregó que el retiro del maestro es un premio
a su dedicación, moralidad y ciencia.
Sobre esta materia el Congreso aprobó lo siguiente:
Artículo 31 0: Los preceptores y su bpreceptores que
después de diez años de servicios consecutivos se víeren
en la imposibilidad de continuar ejerciendo sus fu n-
60
za de las escuelas, a fin de que sea dada con arreglo a
.Ias disposiciones de esta ley y a los reglamentos, pro-
gramas y métodos establecidos por el Consejo Nacional
de Educación. 2°: corregir los errores introducidos en la
'enseñanza. 3°: comprobar la fiel adopción de textos,
formularios Y sistemas de registros, estadísticas e inven-
tarios establecidos por la autoridad superior de las escue-
las. 4°: informar al Consejo Nacional de Educación
sobre el resultado de su inspección, indicando el estado
de la enseñanza de las escuelas inspeccionadas Y los
¡ defectos o inconvenientes que sea necesario corregir.
61
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 -,
1:

¡~
"
¡ ,5°: informar sobre el estado de los edificios de prOpie_',-
dad pú bIica en sus respectivas jurisdicciones, así cama
elecClon popular es el sistema genuino, el que responde
de una manera directa a la esencia misma de la institu-
i sobre el estado y clase del mobiliario que tenga. 60. ción del consejo escolar de distrito, que tiene que ser la
pasar al presidente del Consejo Nacional de Educació~ ' representación auténtica del vecindario, que es quien
1"! un informe mensual. Artículo 37°: Los inspectores de debe decir qué personas han de componerlo. Pero ·1
"

'1 ' escuelas pr im ar ias podrán penetrar en cualquier eSCuela' este sistema, agregó, no ha dado aún, donde ha sido prac-
durante las horas de clase, y examinar personalmente los ticado, resultados satisfactorios y se halla, desgraciada-
'1' 1)',: diferentes cursos que comprende la enseñanza prilnaria. mente, desacreditado, aparte que, tratándose de funcio-
I,¡j nes que son verdaderas cargas, sin ninguno de los bene-
I ! il ficios, ni de influencia ni de lucro, que tienen las demás
, 1
I I Consejos escolares de distrito posiciones que se obtienen por medio de una elección,
I ,1 ' Legu izarno n expresó que la inspección administrativa
son muchas las personas competentes
sentarse como candidatos,
que rehusan pre-
de modo que los elegidos
I i! ' de las escuelas, en lo referente a higiene, moral 'y discí, resultan ser, a veces, frutos de la ambición personal
I •. 1 I
p liria, debe estar 'entregada completamente, con arreglo' y no 'deL amor a la e nseñ anz a.y a las escuelas primarias.
, : i a nociones sociales comunes en materia de educación La elección directa por las autoridades centrales tampo-
1 ,1
I I I pú blic a, al pueblo mismo del lugar donde ellas funcio_ co es satisfactoria, porque los elegidos vendrían a ser
I l' n an. "Las escuelas del distrito, la escuela local, que empleados de la administración escolar, de la que depen-

¡',~!+'
'1 ,q; ,o,"
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I
coricurre- a sostener el vecindario, por medio de la contri-
bución que paga, en la forma de matrícula, para todos,
los niños que se encuentran dentro de la edad escolar
derían directamente,
cumplimiento
desde su designación hasta el
de su cometido. A su juicio, el mejor
sistema consistía en formular una lista de candidatos
, . ':í ~:i pertenece, según los ·buenos sist ernas, en cierto modo' y elegir después por sorteo., El éxito consiste, desde
al ve c in d ar io m ismo." Es natural, agregó, conceder, pues: luego, dijo, en la designación de los primeros, que deben
¡ '1'·;'0~·
, •..
, ' al vecindario, a las personas mas caracterizadas del ser padres de familia, realmente morales, inteligentes,
i I ~I; mismo, la inspección y, hasta cierto punto, el gobierno con vocación conocida por todo lo que se refiere a la
I "1 .,1,
Il,~·¡ q" educación pú blica y que tengan una posición desahoga-
de la escuela. Explicó que ese gobierno escolar vecinal
¡~~:¡,.'1;
¡

¡ :'1'I ~. debe hacerse por intermedio de personas destacadas y da, de manera que no necesiten vivir de su empleo o
;.i
l~I¡'¡-
II','~ honorables, constituidas en consejo escolar de distrito. su trabajo. Tienen que ser listas, dijo, de posibles buenos
!~.J, J:I "¿Quiénes son -se preguntó- en un vecindario, las colaboradores, de gentes sin compromisos, elegidas de
it 1,' ~: personas mas caracterizadas, por su posición y por todo, manera impersonal, sin mediar el interés directo de quie-
l 1, ~ para poder ejercer mejor ese cargo?", y respondió: "Son, nes las designen.
sin duda, los padres de familia; aquellos que no sólo Otros législadores sostuvieron la necesidad de hacer
¡"
.¡J,1' \ por su edad, por su estado, tal vez por su posición las designaciones de los consejeros en f'orm a directa,
social misma, tienen un mayor interés en el progreso por las au toridades centrales, de modo de poder elegir,

fli~ de la escuela; aquellos que son doblemente contribuyen-

tes: que pagan por el niño y que concurren a la asistencia
sin sorteo, a personas de buena posición económ-ica, que
puedan dedicar su tiempo a las escuelas primarias, y

¡I1:'
I
de la escuela con el niño mismo". Agregó que los padres que sean competentes, activas, de carácter, patriotas,
de familia, es decir, los representantes auténticos y legí- ilustradas, honorables y preocupadas de su misión y
1 .tírn os del vecindario, son los que' tienen derecho a in ter- I sus deberes.
!ti venir en el gobierno local de las escuelas prím arías, f
:1 1: donde tienen a sus hijos, y donde el maestro desempeña, .
¡
como en el seno de la misma familia, una misión de Funciones de los Consejos Escolares
confianza. "La inspección local, la inspección de barrio,
la inspección de distrito -finalizó diciendo-, tiene que So bre este punto el 'Congreso sancionó lo siguiente:
¡ l' estar completamente entregada a los padres de familia." Artículo 38°: En cada distrito escolar funcionará ade-
I¡ Señaló que existen tres medios para elegir a los conse-
jeros: la elección popular, la designación directa por
más, permanentemente, una comisión inspectora con el
título de Consejo Escolar de distrito, compuesta de
'1 ,r
,

las autoridades centrales, y la elección por sorteo, sobre cinco padres de familia, elegidos por el Consejo Nacio-
~,I·
la base de una lista previa de candidatos. Dijo que la nal de Educación. Artículo 39°: Los miembros que corn-
['~1:
! ,1;' 62 63
~
 mente cuenta al Consejo Nacional de Educación, de los
I ponen el Consejo Escolar de distrito durarán dos años en
sus funciones. El cargo de consejero de distrito será fondoS escolares que h u bieren administrado, y le infor-
gratuito y considerado como una carga pública. El marán sobre el estado de las escuelas de su distrito.

¡¡.l."
Consejo Nacional resolverá sobre las excu saciories que se Artículo 43°: Los miembros de los consejos escolares
presenten. El Consejo Escolar de distrito podrá tener Un de distrito responderán personalmente, ante la justicia
secretario rentado. Artículo 40°: El Consejo Escolar de respectiva, de la malversación de los fondos escolares,
I '. distrito dependerá inmediatamente del Consejo Nacional ocasionada por actos en que hubieren intervenido.
IIi" de Educación y funcionará en el local de una de las Además, en el capítulo noveno de la ley, destinado
escuelas pú blicas del distrito, si fuese posible, reunién_ a las disposiciones complementarias, el Congreso incluyó
I
:
;1
do se una vez por semana, a lo, m enos. Artículo 41°: El los siguientes artículos relacionados con los distritos
Consejo Escolar de distrito nombrará su presidente y escolares: Artículo 73°: Mientras no se practique un
tesorero, y dictará su propio reglamento" el cual debe ser nueva censo nacional, cl distrito escolar creado por esta
aprobado por el Consejo Nacional de Educación. Artícu_ ley se estable~erá" Fara I.. a.s ciudades, ,con arregro al, cálcu-
lo 42°:" Corresponde al Consejo. Escolar de distrito: lo de po blac ion de' censo vigerrteo a las d ivisio.nes admi-
1o: cuidar de la higiene, de la d iscip lina- y de la m orajj, nistrativas existentes, Y en los territorios y colonias
dad de las escuelas pú blicas de su distrito, a cuyo efecto nacionales, con arreglo al cálculo de población o su b di-
éstas les serán franqueadas en cualquier momento. visiones vecinales establecidas por sus respectivas admi-
~·1, 2°: estimular por todos los medios a su alcance la con-
currencia de los niños a las escuelas, proporcionando
nistraciones. Artículo 74°: El Consejo Nacional de Edu-
cación procederá brevemente a establecer, para los fines

~l'i ~;.~.:
.;
U·
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para este objeto, vestidos a los ind igentes. 3°:, establecer
en las escuelas o fuera de ellas cursos nocturnos o domi-
n ic ale s para adultos .. 4°: promover, por los medios que
de esta ley, la división de la población
distritoS', numerándolos sucesivamente,
nacional en
y ubicando
dentro de e llo s , a medida que sea posible, la e scu ela o
.e ,...
'It
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:(j :~
e•
.~
"Tea conveniente,

escolar y recaudar
la fundación de soc ie d ade s coopera-
tivas de la educación y de las bibliotecas populares del
distrito. 5°: abrir anualmente el libro de la matrícula
las rentas del distrito, procedentes
escuelas públicas a que cada vecindario tiene derecho.

Finanzas escolares
r 't~t de m atrícula, multas y donaciones o su bvenciones par-
rIr· ~~
!é..
ticulares, dando cuenta de su percibo al Consejo Nacío- El capítulo quinto está dedicado al tesoro común de
- Ij o nal de Educación, y emplear dichas rentas en los objetos las escuelas y al fondo escolar permanente. Sobre estas
1, l': .",e que éste detert!line,.6°':castigar la falta de cumplimiento materias casi todas las opiniones estuvieron de acuerdo
[. ¡j de los padres, tu tores, encargados de los niños y maes- . en la necesidad de incorporar a la ley los principios más

¡: \~ tros, a la obligación escolar, matrícula anual, asistencia

o a cualquier otra ley o reglamento [referente a las escue-
las del distrito. De su resolución' podrá reclam arse al
en boga en esa época.
Torcuato Gilbert propuso que los gastos escolares fue-
sen satisfechos con las rentas del lugar en que funcionan

tI' :\ Consejo Nacional de Educación en el término de tres

días y lo que éste decidiere se efectuará inmediatamente.
7°: proponer al Consejo Nacional de Educación, los
las escuelas pr irn ar ias, como aplicación de una buena
regla de la administración pública. También opinó que
los impuestos a las herencias equivalían a arrebatar una
su bdirectore s o ayudantes parte de la propiedad privada a sus dueños, no obstante
II 1
'directores, necesarios
las escuelas de su distrito, elevando, con tal objeto; en
para
el precepto constitucional de respetar y garantizar su
caso de vacante, una terna d e candidatos con los docu- uso en la forma que se crea mas conveniente.
mentos justificativos de su capacidad legal para el magis- Carlos Bouquet Y Pedro L. Funes dijeron que no era
terio. 8°: proponer igualmente al Consejo Nacional de necesario crear fondos especiales para la educación públi-
Educación el nombramiento de su secretario y nombrar ca, cuando lo mas lógico y razonable debía ser pagar
por sí mismo escribientes y personal de servicio. 9°: este servicio pú blico en la forma corriente de gastos del
presidir en cuerpo o por medio de uno o más de sus presupuesto general y de acuerdo con las posibilidades
miembros, los exámenes públicos de las escuelas de su de la hacienda pública.
distrito. 10°: nombrar comisiones de señores para visitar Legu izamo n manifestó que los impuestos a las suce-
y examinar las escuelas de niñas o mixtas del distrito. siones no afectan el derecho (le propiedad, ya que se
]'10: los consejos escolares de distrito rendirán mensual- trata de gravámenes legítimos, como cualquier o TO, sin

64 65
l
 "
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,
lill. que ellos puedan ser calificados de despoj os, aparte de [a Capital Federal, ,territorios Y colonias nacionales.
130: Las donaciones en dinero, bienes muebles o raíces
que se trata de los impuestos más fáciles de pagar y qUe
1;11,1 revisten la característica de ser perfectamente justos títulOS que se n ícíeren a favor de la educación común
En lo referente a la creación del fondo escolar propio' ~e la Capital Federal, territorios Y colonias nacionales_
1):1'1' hizo saber que con tal principio están conformes tOdo~ )4°: LoS fondos que actualmente posee la administra-
, .;¡ I 1 los pueblos cíviliz ad os del mundo. Ese fondo asegura SUs ción de las escuelas públicas de la Capital Federal.
Las sumas que el Congreso destine anualmente
15°:
en el
J
¡
, 1 11
i 1: '
recursos a las escuelas primarias, de modo que no queden
a merced de la buena o mala disposición de la adminis_
tración pú blica general y de la situación económica y
presupuesto general para pago de sueldos y'. gastos
del Consejo Nacional de Educación, Y especialmente
! 11: financiera del país. para el sostén de las escu elas pú blicas de la Capital
Federal, territorios Y colonias nacionales, costo de edi-
, ficioS, mobiliario, útiles y libros.
Tesoro común de las escuelas

, So bre estas materias el Congreso 'Sancionó 1'0 siguien- Fondo permanente de educación
te: Artículo 44°: Constituirán el tesoro común de las
I Sobre creación del fondo permanente de eq.ucaciÓn,

,
escuelas: 1°: El veinte por ciento de la venta de tierras
el Congreso aprobó lo siguiente: Artículo' 45°: De los
~~,. nacionales en los territorios
siempre que no exceda el producido
y colonias de la N ación
de doscientos mil fondos mencionados se reservará anualmente un quince
~ :
por ciento con destino a la formación de un fondo
:' '2, pesos moneda nacional. 2°: El cincuenta por ciento
, 'P. de los intereses de los depósitos judiciales de la Capital permanente de educación, que será administrado con
federal. 3°: El cuarenta por ciento de la contribución independencia del tesoro común de las escuelas, y cuyo
i~~),
,'"
!.,1
I:J...
'~.J directa de la Capital federal, territorios y colonias nacio- capital no podrá ser distraído en objetos ajenos a la
J-.
, ;i:;;.
nales. 4°·: El quince por ciento del impuesto de patentes educación. Artículo 46°: El capital del fondo perma-
de la Capital federal, territorios y colonias nacionales. nente será depositado en el Banco Nacional y gozará
1 z:
1 ~" 5°: El quince por ciento de las entradas y rentas muni- d~l interés acordado a los depósitos particulares. La
,..
t~ \
cipales. 6°' El interés que produzca el fondo permanen- renta que produzca dicho fondo se capitalizará durante
'. it te de escuelas que se establece por esta ley y el que ya dos años, después de cuyo término podrá aplicarse
r 'D
, existe. 7°: El importe del derecho de matrícula escolar la renta sucesiva al sostén de la educación común. Ar-
) 'e!
, o establecida por el artículo 16°, a razón de un peso tículo 47°: El tesoro nacional costeará las becas y demás
1
, - moneda nacional anual por cada niño en edad escolar, gastos de enseñanza de los alumnos que se dediquen
"e con excepción de los indigentes. 8°: El importe de las a la carrera del magisterio' en las escuelas normales de la
" multas que imponga la autoridad escolar en los casos Capital Federal o de las que se establecieran en los terri-
de los art icu los 17°, 18°, 20° Y 210, las cu ales en ningún torios nacionales. Artículo 48°: Las municipalidades de
caso podrán exceder de cien pesos moneda nacional, la Capital Federal, colonias y territorios nacionales pro-
ni ser menores de cinco pesos de igual moneda por cada porcionarán los terrenos necesarios para los edificios
falta. 9': El importe de las penas pecuniarias y multas de las escu.elas primarias, y en caso de carecer de ellos
impuestas por cualquier autoridad en la Capital federal, o de no poseerlos en sitios convenientes, contribuirán
territorios y colonias nacionales, gue no tuviesen diversa a su adquisición con una tercera parte de SU valor.
aplicación por algu na ley especial. ¡0°: Los bienes Artículo 49°: La recaudación de los inlpuestos y rentas
que por falta de herederos correspondiesen al fisco escolares que no tuviese una forma determinada en esta
nacional en la capital federal, territorios y colonias ley, se hará por los recaudadores de la Nación en la
nacionales. 11°: El cinco por ciento de toda sucesión misma forma establecida para las rentas de ésta, pasando
entre colaterales, con excepción de hermanos. 12°: el producto de aquéllos, en depósito, al Banco Nacio-
El diez por ciento de toda herencia o legado entre nal, a la orden del Consejo Nacional de Educac ión,
ex trañ os, como de toda institución a favor del alma o dando inmediato aviso a éste. Artículo 50°: La obliga-
de establecimientos religiosos, siempre que en los dos ción impuesta a los recaudadores de la Nación en el
in c iso s anteriores la sucesión exceda de mil, pesos artículo anterior', es extensiva a las municipalidades,
moneda nacional y sea abierta en la jurisdicción de por, lo relativo a la parte de renta con que deben corrcu-

66 67
 rrír anualmente ·a ia fonnación del tesoro de las eSCUe
/i¡
las, y a cualquier otra au torid ad, por lo toCante
,I 0"
l'
I
importe de las multas o penas pecuniarias que llnpu.
sieren y cuyo destino por esta ley corresponde a] Sostén
de Ia educación común. Artículo 5 1°: Las can tidades
/
I I que destine el presupuesto de la Nación para el SOstén
y fomento de la instrucción primaria dentro de la Capital
i Federal, colonias y territorios nacionales serán entre.
gadas mensualmente por la Tesorería de la Nación
al Consejo Nacional de Educación.
, Además, en el capítulo noveno de la ley, destinado a
¡ las disposiciones complementarias, el Congreso incluyó
los siguientes artículos relacionados con las finanzas
escolares: Artículo 76°: Los jueces darán participación
i
a] Consejo Nacional de. Educación' en todo asu n tr, qus
por cualquier motivo; afectase al tesoro. de las escuelas:
I A' los. efectos de esta prescripción y de la pro bable
necesidad de gestionar ante los jueces o funcionarios
ri" administrativos, los intereses de las escuelas, el Consejo
I~t, Nacional' de Educación podrá nombrar procuradores y
't' G;~.
. (.
~()
r» I~
abogados, pagados del tesoro de las escuelas, por mes o
por año. Artículo 79°: La Contaduría Genera] de la
l\ t) Nación revisará anualmentc los libros de la contaduría
.1,"; y tesorería de las escuelas, pudiendo hacerla antes
'f,,:
, ~l.., de ese tiempo, cuando las necesidades del servicio n ac ío,
nallo exigiesen.
¡, ~l'
,.,
1 ,<
1: O
" Consejo Nacional de Educación
J ~
~~ El capítulo sexto se ocupa de la dirección y adminis-
"
U
<
tración de las escuelas primarias, Leguizamón se manifes-
/ tó partidario de la dirección nica, a cargo de un supe-
ú
"
rintendente, por creer que un consejo de educación, con
facultades de organismo colegiado y ·autónomo, seria
un ministerio más, cuya creación' no 'se' ajustaría a lo
dispuesto por la Constitución Nacional, que manda
colocar el gobierno de la educación pública a cargo del
ministerio correspondiente, dependiente del Poder Ej e-
cu tívo de la Nación, Pero puesto ante la posibilidad de
tener que aceptar la fundación de dicho consejo, opinó
que sus miembros, o algunos de ellos, debían reunir
cierto número de cualidades técnicas y especiales, vin-
culadas can la educación pública, "no sólo como una
necesidad del desempeño de las funciones, sino hasta
como una razón de estímulo para los maestros distin-
guidos", Asimismo sostuvo que el nombramiento de los
empleados escolares oficiales correspondía única y exclu-
sivamente al Poder Ejecutivo, por ser la educación
68
ai rimaria una rama de la administración pública, y por
haber establecido la Constitución que esas designacio-
nes corresponden hacerlas al presidente de la Nación.
El ministro Wilde sostuvo algunas de esas opiniones
y disintió con otras. Man~festó que no e,ra indispensable
exigir CIertas cualidades tecrucas y especiales a los rruern-
brOSdel consejo de educación, porque hay personas ver-
sadas en asuntos educativos, con manifiestas condiciones
de competencia, há hiles en el manejo de las escuelas
prilnarias, que carecen, d esgraciadam errte, de títulos.
Declaró que no .podía admitirse que los empleados de
las escuelas primarias' oficiales no fuesen designados
por el Poder Ejecutivo de la Nación, p'ues éste ,tiene esa
facultad' 'en VIrtud de una' prescr ipcion constitucional,
que se la concede por ser el jefe de la administración
nacional, de la que es una rama la educación pública,
sin estar indicado en ninguna parte que ella sea una
excepción a esa regla ni que deba serlo. ,El Consejo,
de Educación, agregó, no puede ser un poder aparte
ni debe tener atribuciones que la Constitución acuerda
al Poder Ejecutivo. Como una transacción, admitió
que las designaciones las hiciera el oresidente de la
Nación a propuesta del Consejo de Educación .
Luis Lagos Garcí a defendió la creación del Consejo
de Educación y sus facultades autónomas amplias y
restriccio nes. "No es de esperar -dijo- ningún peligro
con esta independencia que queremos dar al consejo,
Y.que es necesario darle"; porque sin ella esta institución
no llenará los fines para que es creada, Y al referirse al'
uso de esa autonomía para designar al personal de su
dependencia, manifestó que rro comprendía la existencia
de' un Consejo de Educación, con vida un poco indepen-
diente, como la que necesita si debe actuar con ef icíeri-
cia, en tanto el Poder Ejecutivo conserve la facultad de
designar a su personal. "Es imposible -afirmó- Que el
Consejo de Educacíón tenga buena administración, es
imposible' que pueda vigilar a los empleados, es imposi-
ble que pueda fiscalizar el manejo de los caudales que se
emplean, si no tiene la facultad de nombrar y remover
por sí a estos empleados." Es imposible, agregó, que
cuando se trata de dar a la administración escolar una
existencia semi-independiente, para llenar los fines a que
está destinada, pueda soportar en todos sus detalles la
intromisión del Poder Ejecutivo, que ha de chocar al fin, '
por más buena voluntad que tenga, con los hombres que
componen el Consejo de Educación, viniendo en seguida"
como consecuencia, las resistencias, la falta de armonía
y aún el descuido en un importante ramo de la educa-
ción pública, cuya estabilidad y orden es indispensable
en
 D

conservar. Finalmente expresó que el Consejo de Educ . Funciones del Consejo Nacional de Educación
c ió n, sin autonomía, se exponía a ser una instituCió~
inú til e ineficaz. Sobre esta materia el Congreso sancionó lo siguiente:

j
l' Demaría expresó que la dirección y administración
de las escuelas primarias debían estar a cargo de Un Con.
sejo de Educación. con todas las facultades para qUe
pu diera proceder con acíerto y Iibre de influencias ex.
trañ as. Se trata -dijo- "de independizar la educación
de todos los otros poderes públicos", pues "por más
,
h onra dos que sean los hombres que desempefien esos
altos puestos; hay momentos en los pueblos en que los
"
Artículo 52°: La dirección facultativa y la administra-
ión general de las escuelas estarán a cargo de un Consejo
Nacional de Educación, . que funcionará en la capital
de la República, bajo la dependencia del Ministerio
de Justicia, Culto e Instrucción Pública. Artículo 53°:
El Consejo Nacional 'de Educación se compondré. de un
residente Y cuatro vocales. Artículo 54°: El nombra-
~iento de los consejeros será hecho por el Poder Ejecu ti-

, gobiernos pretenden servirse de estos hombres para
influir en la sociedad con todos los medios a su alcan.
oe'". Opinó qu e el Consejo de Educación tenía que ser
completamente autónomo, sin dejar, por eso, de cOnsi;
derarse a la educación "pú blica como u ria rama de la
adnlinistración nacíonaí. Debía estimarse, en cambio
'"""i' que la facultad constitucional conferida al Poder Ejecu:
vo por sí solo, y el de presidente con acuerdo del Sena-
do. Los miembros del Consejo Nacional de Educación
podrán ser reelectos. Artículo 55°: Todos los miembros
del Consejo conservarán su empleo durante cinco años,
mientras dure su buena conducta y aptitud física e inte-
lectual para el desempeño de su cargo. Artículo 56°:
El cargo de miembro del Consejo Nacional de Educación

,.,
i. e,

J
D '
, '2,

L'IJ
l~
~
....!I";l
,ti r;
tivo de nombrar a los empleados de esa administración
se podía por una ley reglamentaria de ese precepto'
conceder o transferir a una entidad autónoma. En el
caso de la educación pú blica consideró que lo más can.
veniente y acertado era dejar las designaciones a cargo
'exclusivo del Consejo de Educación, "que es el que tiene
es considerado como empleo de magisterio para todos
los beneficios y responsabilidades que establece la ley.
Artículo 57°: Son atribuciones y deberes del Consejo
Nacional de Educación: 1°: Dirigir la instrucción dada
en todas las escuelas primarias con arreglo a las prescrip-
ciones de esta ley y demás reglamentos que en prose-
¡'j 'Z. '.' más competencia y está en inmediato contacto con las
I \g'- personas de su profesión". "Si se quiere -agregó- OTear
cución de ellas dictare, según la respectiva enseñanza.
"l!', V 2°: Vigilar la enseñanza de las escuelas normales de la
(( ~ Un poder, si no absolutamente independiente, por 10
.,it : Capital Federal, colbnias y territorios nacionales. pro-
, .10 menos que goce de alguna independencia para que pueda poner el nornbram íento o renovación de SU personal
administrar debidamente bien, para que pueda establecer y concesión o caducidad de becas al Ministerio de Jus-
e la base de la verdadera educación, es necesario que las
"- ticia, Culto e Instrucción Pública. 3°: Administrar todos
designaciones las haga el Consejo de Educación.'~. "De los fondos que de cualquier origen fuesen consagrados
l1.· . !:<; otra manera -agregó-, no se conseguirá que la educa.
1 \~
al sostén y fomento de la educación común. 4°: Organi-
cíó n marche como debe marchar en la República; habría zar la inspección de las escuelas y la contabilidad y cus-
de estar siempre su bord inada a la acción. del Poder todia de los fondos destinados al sostén de aquéllas.
í l' Ejecutivo." Agregó, por otra 'parte, que en los países
más civilizados se había dado toda la independencia
posible a la administración escolar,
5°: Vigilar a los inspectores de las escuelas, reglamentar
sus funciones y dirigir sus actos. 6°: Ejecutar puntual-
mente las leyes que respecto de la educación común
. I,
j ,
José M. Olmedo se manifestó contrario a un Consejo
de Educación muy numeroso, al que consideró ineficaz ..
sancionar e el Congreso y los decretos que sobre el mismo
asunto exp idiere el Poder Ejecu tivo, pudiendo requerir,
,I pues resulta difícil poner de acuerdo, sobre materias edu-. con tal objeto, cuando le fuere preciso, el auxilio de la
11, cativas, a muchas personas reunidas. Pero también se autoridad respectiva por medio de un procedimiento
, opuso a 'la creación de una dirección u nipersorial, porque breve y sumario. 7°: Formar en enero de cada año el
. 1: las pasiones, los errores y las tendencias individuales, que presupuesto general de los gastos de la educación común
1, I pueden ser buenas o malas, no deben prevalecer, de una y el cálculo de los recursos propios con que cuenta, ele-
•• manera absoluta, en la dirección y administración es- vando ambos documentos al Congreso por intermedio
colares. del Ministerio de Ju sticia, Culto e Instrucción Pública.
I
1.
8°: Tener tres sesiones semanales, por lo menos. 9°:
Dictar su reglamento interno para todos los objetos de
'1 ,
que le encarga esta ley, distribuyendo entre sus m íern-
U 70 71
••

,i' .bros, como 10 estime más conveniente, las funciones q donaciones que con el objeto de ,educación hiciesen
tiene a su cargo. 10°: Distribuir para todas las escue~e [os particulares, p od er es públic<:s o asociaciones. 24°
I
I pú bhcas y particulares formularios destinados a la mas Autorizar la c0nstrucclon,de edif~clOS para las esc:"elas
tr ícu Ia escolar, registro de asistencia, estadística y censa- u oficinas de la eoucacíon comun Y comprar bienes
l· de la población escolar, y dirigir estas operaciones comO raíces con dicho objeto, de acuerdo a los requisitos esta-
I lo crea más conveniente. 11°: Dictar los programas dO blecid OS por la ley de contabilidad Y con aprobación del
I, la enseñ anz a de las escu elas pú blicas, con arreglo a la~
prescripciones de esta ley y necesidades del adelanto pro,
poder Ej,ecu tiv o. 25°: Hacer las gestiones necesarias para
obtener los terrenos que necesitasen las escuelas públi-
gresivo de la educación común.' 12°: Expedir títulos de cas. 26°': Atender Y proveer, por lo relativo a las pr ovin-
I maestros, previo examen y demás justificativos de capa_ cias, a la ejecución de las leyes del 23 de setiembre de
!I ,
cidad legal, a los particulares que de seareri dedicarse a 1870, sobre bibliotecas populares, y de 25 de se tiern bre
de 1871 sobre subvenciones a la educación común, soli-
la e.nseñ anza prim aria en las escu elas pú blicas y/o par-
11 ticulares. 13°: Revalidar, en iguales circunstancias ,los citando del Poder Ejecu tiv o los recursos necesar'ios para
diplomas de maestros extranjeros. 14°: Anular un~s u tal,objeto y dictando las medidas que creyese convenien-
'otros por las causas que determinará el reglamento de las 'res para asegurar el empleo de dichos recursos.
escuelas. 15°: Prescribir y adoptar los libros de texto
más adecuados para las escuelas públicas, favoreciendo
.J., su edición y mejora por medio de concursos u otros Disposiciones sobre el
~ ¡- estímulos, y asegurando su adopción uniforme y perrna, Consejo Nacional de Educación
.. ~ ,J'"'l nenle a precios m d icos, por un término no menor de
~ s:
ó

dos años. 16°: Suspender o destituir a los maestros Otras disposiciories sobre las funciones del Consejo
; ']<'
inspectores o empleados por cau sa de ínconducta o :mai Nacional de Educación fueron las siguientes: Articulo
580: El Consejo Nacional de Educación presentará al
:
I\St~
,:;
dese mp cñ o de sus deberes, comprobados
que previamente
por los medios
establezca el reglamento general de las principio de cada año un informe de todos sus trabaio.s
I!~~ escuelas y dando, conocimiento al Ministerio de .Justicia , al Ministerio respectivo, Y lo imprimirá en número sufi-
ciente de ejemplares con destino a hacerlo circular en
I, 1-~ e".•,
Culto e Instrucción Pública. 17°: Establecer conferencias
, \iI
de maestros en los términos y condiciones que creyere el país y en el extranjero. Este mform e contendrá una
j convenientes, .o reuniones de educacronistas. 18°: Pro- estadística completa de las escuelas. Artí culo 59°: El
'\'- ,
1,,0 :
1: .0(
O
mover' y auxiliar la f'or m ación de bibliotecas populares
y de maestros, lo mismo que la de asociaciones y pu bli-
nombramiento de todos los empleados de la dirección
y adm.inistración de las escuelas primarias se hará por
" -•~ caciones cooperativas de la educación común, 19°: el C;Ó~~,\l>. Nacional.?e Educación, con excepción de
Dirigir una publicación mensual de educación. 20°: aq\;rellps cuya p rovasron estuViese d eterrninada de una
"'~~ Contratar dentro y fuera ,del país los maestros espe- manera diversa por esta ley. Articulo 60°: Todos los
!' .n í! miembros del Consejo Nacional de Educación son perso-
ciales que a su juicio fuesen necesarios" con aprobación
del Ministerio de Justicia, Culto e Instrucción Pública. nalmente responsables de la mala' administración de los
21": Proyectar, a la brevedad posible, la organiz ación fúndos 'correspondi€mtes a la educación común, proce-
del fondo de pensiones para maestros, condiciones de dente de actos en que hubiesen intervenido o tuviesen
su administración, y el modo y forma en que ha de el deber de intervenir. .La acción que procede en tajes
hacerse efectivo el derecho a pensión establecido en el casos será pública y durara hasta un año después de
artículo 31°. Este proyecto, acompañado de un informe haber cesado en sus funciones cada uno de los míern-

fl de los' antecedentes
Congreso
que le sirvan de base, será elevado al
por intermedio del Ministerio de Justicia,
bros del Consejo. Artículo 61 0: Toda autoridad nacional
está en el deber de cooperar en su esfera al desempeño

r Culto e Instrucción Pública 22°: Administrar las propie-

dades inmuebles pertenecientes
al tesoro de las escuelas,
de las funciones del Consejo Nacional de Educación,
de las personas que obren a su nombre, sea en la ejecu-
ción de las medidas escolares dictadas por el Consej 0,
o

necesitando de autorización judicial para venderlas,

cederías o gravarlas, cuando su conservación fuese dis- sea en lo referente a datos o informes que aquél pudiere
pendiosa o hubiere manifiesta utilidad en la cesión o necesitar para los fines del cargo. Art ícu lo 62°: Las
gravamen. 23°: Recibir con beneficio de inventario actuaciones públicas que el Consejo Nacional de Educa-
herencias y legados; y en la forma ordinaria, todas las ción o sus empleados oficiales tuviesen necesidad, de
73
72
 producir ante cualquier autoridad para fines de la direc_
'-'í'
, :'

680: Para obtener la subvención establecida'en el artícu-

I ción y administración de las escuelas, serán libres de lo anterior, el director de la biblioteca presentará al
, ¡ costas y se extenderán en papel común. Artículo 630: consejo Nacional de Educación una relación del edificio
l. Todos los bienes y valores pertenecientes al tesoro de las
escuelas quedarán exonerados de todo impuesto nacional
destinado para la biblioteca, con indicación de calle y
número, y el certificado de depósito en un banco, de
I o provinciaL Artículo' 64°: EH presidente del Consejo
Nacional de Educación es el representante necesario del
Consejo en todos los actos públicos y relaciones oficia-
la suma que se propone emplear en libros. Artículo 69°:
La subvención acordada cesará inmediatamente, toda vez
.qUe los libros de la biblioteca se enajenen sin reponerlos,
¡ /'! les de la dirección y administración de las escuelas, sin pet:iuicio de las penas y responsabilidades que pueda
establecer el Consejo Nacional de Educación para el
! ! Artículo 65°: El presidente 'cid Consejo Nacion al de
I
,¡ i¡
I1
_Educación tiene además, las siguientes atribuciones y caso de engaño manifiesto. "
deberes especiales: 1°: Preside las sesiones del Consejo
I ~'j
1

\ "1
'
y decide con su voto las deliberaciones en caso d~
empate, 2°: Ejecu ta 1M resolu cíories del Consejo .. 3°:
Dirige inmediatamente por sí solo las oficinas de su
I .-Escuelas particulares -
dependencia, provee a sus necesidades y at.iende en casos 'El capítulo octavo de la ley trata de las escuelas y
I urgentes, no estando reunido el Consejo, todo lo relativo colegios particulares dedicados a la educación primaria

· "1
' U
· ~ ,
,'7

Al 1 (.1
W e"" ,
'~_l~(~
"~"" al gobierno y administración general de las escuelas
con cargo de darle cuenta. En caso de disconformidad:
el Consejo no podrá desaprobar los actos de su presi-
dente sino con el voto de dos tercios de los consejeros.
4°: Subscribe todas las comunicaciones y órdenes de
cualquier género que sean, con la autorización del secre-
en jurisdicción nacional. Demaría expresó que fa ley
tenía que consagrar la libertad de enseñanza, respetan-
do la voluntad de los padres en cuanto a la elección
de la escuela en que deben educarse e instruirse sus
hijos, sea oficial o particular, pero' estableciendo para
estas últimas las medidas destinadas a que el Estado

¡Ij'~~'
tario del Consejo. pueda fiscalizarlas, con el fin de comprobar que la ense
, ;z, ñanza que se imparte es acertada.
· e- Leguizamón sostuvo que toda la educación pública,
1,1' ~~; Bibliotecas populares ya sea impartida por el Estado o por los particulares,
tiene que ser dirigida por el Estado, que es el órgano
IH, "o";: El capítulo séptimo de la ley está dedicado a las de la Nación establecido por la soberanía popular para
f'" ' orientarla y conducirla. Así tíene que ser, porque.la !;d,,l-
~J~\
:!" ;,
bibliotecas populares, y sobre tal materia el Congreso
11
aprobó lo siguiente: Artículo 66°; El Consejo Nacional cación pública es un asunto que se relaciona directa-
1:;·,. - ~I
de Educación esta blecerá en la capital federal una biblio-
-teca pública para maestros. Artículo 67°:.Toda biblia,'
mente con la vida social y política de la entidad nacio-
nal. Por lo tanto, las escuelas particulares tienen que ser
1,1' ,¡ fiscalizadas y. vigiladas por el Este d o, por intermedio
rl:: teca popular fundada en la capital federal; territorios y
colonias nacionales, por particulares o asociaciones,
sobre bases permanentes, tendrá derecho a recibir del
de los órganos creados al efecto, porque no se puede
admitir que' en ellas se atente, por ejemplo, contra. las
I tesoro de las escuelas la quinta parte del valor que sus instituciones del país, ya que una nación cometería
directores comprobasen necesitar o haber empleado en un acto contrario a sus própios intereses si dejara que
la adquisición de libros morales y útiles, con tal que se fuesen enseñadas con entera libertad doctrinas Y prin-
obliguen a observar las prescripciones siguientes; l°:. cipios tendientes a derribar aquéllas o desnaturalizar las.
A instalar la biblioteca en un paraje central y en edifi- Las escuelas privadas t ieneni que ser, pues, agregó,
cio con capacidad suficiente para cincuenta lectores, por vigiladas y fiscalizadas, porque no es tolerable que
lo menos. 2°; A prestar gratuitamente los libros al vecin- puedan, so pretexto de respeto absoluto a la libertad
dario, mediante garantías suficientes, o facilitar su adqui- de enseñanza, defraudarse en ellas todos los principios
1,/ sición a precios razonables. 3°: A llevar en debida forma constitucionales e institucionales Y enseñarse "como
$US catálogos y los registros de estadística necesarios,
se quiera, por quien se quiera, y en las condiciones que
,, proporcionando en períodos determinados, a la se quiera". No puede admitirse, dijo, que se pretenda

"
':/ autoridad escolar respectiva, los datos que le fueren soli- "asegurar la enseñanza de la verdad en la escuela públi-
ca", y se deje en libertad a la escuela particular para que
citados sobre el movimiento de la biblioteca. Artículo

di'¡ 74 75
 ,~

"enseñe la m en tíra'", que en la primera se dé como ali_

agregó, es contraria a la Con.stitución, que establece el
mento "una cantidad determinada de conocimientos
i morales e intelectuales", y se deje en completa libertad
derecha de aprender y ensenar libremente. La escuela
articular tiene que ser, pues, sagrada para el Estado.
" a la segunda para que asunlinistre el veneno", en vez
del, alimento. No puede tolerarse, añadió que en las
P.El Estado -sostuvo- no tiene el derecho de ir a ella
a cerrar sus puertas so pretexto de que allí se enseña
/ escuelas particulares domine el empirismo más grOsera
la bondad del sistema unitario, cuando en la Constitu-
11 r e ignorante, en Un sentido general, y su magisterio sea
ción se establece el sistema federal; no tiene el derecho
1I el refugio de todos los h otgaz anes e ineficientes, sin
de entrometerse en la escuela privada para proscribir su
I competencia técnica para enseñar los ramos obligato-
programa de enseñanza, so pretexto de que en ella
rios. El Estado no puede perro anec er indiferente, so
!¡ pretexto de que hay que respetar la Iibertad de ense_
se suministra a los alumnos lo que el Estado considera
o llama veneno contra las inst itu c ion e's democráticas,
ñ anz a, ante educadores que carecen de salud física'y
1 Tal í.ntromisión es el medio más poderoso de llegar al
I1 san un peligro para sus alumnos, o que carezcan de
despotismo. De ahí que sea necesario salvar la escuela
r ~,I moralidad, tengan malas costumbres y sirvan de piedra
de escándalo en la escuela, o que hablen mai el idioma libre".
1 del país" desconozcan su literatura y sus instituciones,
' 1 su historia y su geografía. Todo lo que se exige al maes-

!~~r
Enseñanza privada
tro oficial, sostuvo, debe ser exigido al de las eSCuelas
particulares, porque, de no ser así, la ley dejaría abierta
El ministro Wilde dijo que no es cierto que el Estado
. , :' ''Zg' una puerta muy grande para violar todas sus otras dis-
nO tenga derecho alguno sobre los hijos, au-n en contra
,/ ~ J posiciones. Así como se exigen condiciones de idonei_
de los deseos de los padres. El Estado tiene derechos
'f:lf(~, dad'y otras conex as para vender medicamentos,
tierras, defender encausados,
medir
extender escrituras, dili-
en virtud de las leyes de protección de los menores'

(1;1,'I',r
que impiden los abusos d el a.p atria potestad; de las leyes
genciar escritos judiciales, trazar p1an0~ etcétera, tam-
de
de herencias, que impiden a los padres desheredar a los'
bién es indispensable exigir condiciones a quienes
hijos; de las disposiciones del Código Civil, que impiden
quieren enseñar. Esta es la verdadera libertad de ense-
/,\"\ ¡¡'":
i!¡1 ~!; ñanza, y no la que pretende que en las escuelas oficiales
que los padres dejen morir de hambre y de frío a sus
niros; de Tas Leyes de e nrofám ierrto y servício militar
¡ í
11 '<
debe enseñarse la verdad, y en las particulares cualquier
cosa, inclusive la adulteración de nuestros prinCipios
obligatorio, que impiden que los retengan en sus hogares
t. J e'
,,1 constitucionales, ni la que desea que el Estado no inter-
cuando el deber de servir a la patria los reclama en los
cuarteles; de las leyes de la guerra, que impiden que los
1" " venga en ellas para nada, ni se entere con qué programas
"'~: enseñan, qué libros usan, qué métodos emplean,
sustr a ígan al cumplimiento
peligra la nacionalidad.
de sus obligaciones cuando
Los deberes y los derechos del

I
'\":
1'
Tristán Achával, ROdríguez comentó el principio
según el cual la educación primaria puede ser dada por
todos los poderes sociales: el hogar, el pueblo, el ele-
Estado para con los hijos, y los de éstos para con la
Nación, existen, pues, y no es correcto, por lo tanto,
¡ afirmar que el primero no puede, limitar los derechos de
mento religioso y. los poderes políticos, pero solamente
'los padres para con los hijos, ni restringir su' carácter

Ii I queda reservada su dirección a los últimos, en forma

exclusiva, so pretexto que el Estado tiene el derecho
de legislar sobre la materia, como representante de la
absolu to. En materia de educación pública,' esos dere-
chos no llegan hasta permitir a los padres d arle a sus
hijos cualqu ier clase de educación e instrucción, porque
soberanía popular, negó validez a ese realidad y sostuvo
la .forrna ció n de ellos no solamente interesa a sus pro-
que se trata de Un fruto de la doctrina de Bismarck,
que impone el absolu tismo oficial en materia de educa- genitores, a la familia y al hogar, sino, también, a la
ción pública, al establecer que el Estado es quien debe sociedad y a la Nación. De ahí que si los padres quieren,
dirigirla, única y exclusivamente, y quien debe preparar 'usando la' libertad de aprender y enseñar, enviarlos a
la inteligencia del individuo, de donde se deduce que escuelas privadas, para que en ellas se eduquen e 'instru-
tiene derechos de intervención en la enseñanza privada yan, el Estado, usando la suy a de adoptar todas las
Y en la domestica, lo que significa establecer la censura medidas necesarias para defender la nacionalidad, puede
previa, ya abolid a d e la prensa y los libros. Esto es, y debe in tervenir en estos establecimientos educativos
afirmó, "la esclavitud del pensamiento". Tal doctrina, para vigilarlos y f'íscalízarlo s.
76
77
 I
!
Lagos García manifestó que aun cuando la interv
ción del Estado en las escuelas p articulares es una conen-
cuencia de la facultad estatal de reglamentar las libese.
-P~T
-l
, enada con una multa de veinte' a cien pesos
sefa e~a nacional según los casos Y las reglas que previa-
rnonte establezca'el reglamento de las escuelas.
rnen
l. I

tades públicas no debe extenderse demasiado esa vi r-

1"l j

lancia y fiscalización oficiales, para no trabar la difus~-

,I 1,,': de la educación pública. n Pisposiciones complementarias de la ley 1420
,111
El capítulo noveno de la ley está destinado a una serie
,'¡I1' Normas sobre establecimientos particulares de disposiciones complementarias, que el Congreso san-
I 1 . 11

i -1
l' cionÓ con el fin, de aclarar y completar algunos de sus
I
•
,1
'j Sobre las materias mencionadas el Congreso sancionó preceptoS. Por eso, muchas de ellas están mencionadas
¡".¡ ¡j
lo siguiente: Artículo 70°: Los directores o maestros en los lugares correspondientes (los artículos 77°,
id
,i,
l 1 de escuelas o colegios particulares tienen los siguientes 780 Y 80°, junto a los artículos 27° Y 28°, sobre obliga-
deberes: 1.0: Manifestar al-respectivo Consejo ESColar ciones Y prohibiciones para los maestros; los artículos
1: I
j
de distrito su propósito de establecer o mantener una 730',y 740, junto a los artículos 38° al 43°, sobre corise-
escuela o colegio de enseñanza primaria, indicando el jos escolares de distrito; los artículos 76° Y 79°, junto a
I 1
sitio de la escuela, condiciones del edificio elegido los artículos 4.4° al 51°, sobre finanzas escolares). Res-
I '1 ¡ para tal objeto y clase de enseñanza que se proponen tan, pues, los siguientes:, Artículo 75°: Las escuelas nor-
dar. 2°: Acompañar a la manifestación anterior los títu- males de la Capital Federal serán sostenidas por el tesoro
11;','.~,;r
1:' In,
los de capacidad legal para ejercer el magisterio que nacional Y continuarán rigiéndose por los reglamentos
posea la persona destinada a dirigir la escuela. 3°: y planes de estudios dictados por el Congreso Y Minis-
'¡( " Comunicar a la autoridad escolar respectiva los datos rerío de Justicia, Culto e Instrucción Pública; pero en
i
¡I~'¡'oL,~ ,
L' j"','
estadísticos que le fueren solicitados, y llevar con tal
objeto, en debida forma, los registros establecidos por
'cuanto a su régimen interno, disciplina, administración
e higiene, dependerán exclusivamente del Consejo
, ,1 "¡1:, ,1

1 ~ 1 ;z: I l los artículos 19° y 21 0, según los formularios de que Nacional de Educación, quedando sujetas por lo tocante
serán gratuitamente provistos por la autoridad escolar a su personal y funciones, a las disposiciones de esta ley
11' ,¡! ~:f,. .~
'í: respectiva. 4° : Observar las disposiciones del artículo y reglamentos que el Consejo Nacional de Educación
díctare. Artículo 81°: El Poder Ejecutivo reglamentará
¡,,' fE~¡ 'I,I o 16°, acerca de la matrícula escolar. 5°: Someterse a la
-_11
'''_ lo!
I
I inspección que en interés de la enseñanza o oligatoria la presente ley en todo aquello que no ha sido espe-
de la moralidad y de la higiene, pueden practicar, cuando cialmente encomendado al Consejo Nacional de Edu-

1, ~,
ct. ,,1:,:1 lo crean conveniente, los inspectores de las escuelas cación,
primarias y el Consejo Escolar de distrito. 6°: Dar en el
~¡
;;: establecimiento el mínimum de enseñanza obligatoria
t b
.,·¡;~i establecida por el artículo 6°. Artículo 7JO: El Consejo
~
~ -
Escolar de distrito podrá negar a los particulares o aso-
,11",' • ciaciones la autorización necesaria para establecer una
escuela o colegio, siempre que no se hubiesen llenado los

I!; ¡ i
- ' 1
! ¡
'requisitos anteriores o que su establecimiento
contrario a la moralidad pública, o a la salud de los
alumnos, En iguales condiciones podrá clausurar, siem-
fuese

1 pre que lo juzgue conveniente, cualquier escuela o

1j, : l' colegio particular. En ambos casos, los perju dicad os
, ~'l
podrán reclamar en el término de ocho días de la reso-
lución del Consejo Escolar de distrito, para ante el
Consejo Nacional de Educación, y lo que éste decidiere
i1 se ejecutará inmediatamente, Artículo 72°: La falta
• I
de observancia por 'parte de los directores de las escuelas
'd o colegios particulares a las prescripciones anteriores,
l'" ,1 , 79
'.11' I 78
!!! I