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VERSIÓN 1

Dieta de
eliminación

Guía integral
Índice

¿Por qué la dieta de eliminación? 3


Características de la dieta de eliminación 4
Un recorrido por el plan de alimentación 9
Proceso de reintroducción 16
Consejos útiles 19
Preguntas frecuentes 20
Recursos y herramientas para el éxito 23
¿Por qué la dieta de eliminación?

Algunos problemas médicos que no responden a otros tratamientos pueden


mejorar después de completar la dieta de eliminación del Instituto de Medicina
Funcional (IFM, por sus siglas en inglés). Ciertos alimentos pueden estar
relacionados con una larga lista de afecciones médicas, tales como problemas
digestivos, dolores de cabeza, secreción crónica de los senos paranasales, baja
energía, depresión, cambios de humor, eccema, irritaciones de la piel, dolores
articulares, asma, aumento de peso, entre otros.

Muchas personas presentan estos síntomas durante largos periodos de tiempo sin
darse cuenta del vínculo que tienen con la alimentación. No es hasta que eliminan
alimentos de la dieta que reconocen su conexión con los síntomas. La dieta de
eliminación del IFM primero elimina los detonantes alimentarios comunes y, luego,
ayuda a identificar alimentos específicos que pueden causar los síntomas presentes
mediante la reintroducción individual de alimentos.

Después del periodo de eliminación de tres semanas, el siguiente paso es volver


a introducir los alimentos de manera personalizada. La reintroducción consiste
en volver a incorporar un alimento a la vez para observar si ese alimento causa
síntomas. Los alimentos que continúan causando síntomas (físicos, mentales
o emocionales) se evitan durante otros tres a seis meses, y luego se intenta
reintroducirlos de nuevo. Una vez que el cuerpo sana, algunos alimentos que
inicialmente causaban síntomas pueden tolerarse e incluirse de nuevo como parte
de la alimentación.

La dieta de eliminación es un plan de alimentación a corto plazo. Los objetivos


principales de la dieta de eliminación son sanar el intestino y poder comer una
amplia variedad de alimentos integrales. La alimentación con una gran variedad de
alimentos integrales ayuda a asegurar que su cuerpo reciba todos los nutrientes
esenciales, y esto es especialmente importante para cualquier persona interesada
en mejorar su estado de salud general.

Su médico de medicina funcional le brindará asesoramiento en cuanto a la duración


de la dieta de eliminación. Por lo general, la dieta de eliminación se mantiene
durante tres semanas. Los periodos más cortos pueden no tener los mismos
resultados, ya que el cuerpo necesita tiempo para controlar la reactividad a los
alimentos que desencadenan los síntomas. Al principio, es posible que los síntomas
empeoren durante un plazo corto (pocas veces más de unos días) debido a la
abstinencia de alimentos que se consumen habitualmente. Los primeros cuatro a
siete días pueden aparecer reacciones transitorias a medida que el organismo se
adapta a los distintos alimentos. Estas reacciones pueden incluir cambios en los
patrones de sueño, fatiga, mareos, dolores de cabeza, rigidez articular o muscular y
cambios en la digestión. No es frecuente que estos síntomas duren más de unos
días y varían de una persona a la otra.

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Características de la dieta de eliminación

Identifica los desencadenantes alimentarios: las reacciones alimentarias se ignoran


con frecuencia como causa o factor contribuyente de problemas de salud crónicos.
Muchas personas no se dan cuenta de que los alimentos pueden estar relacionados
con su estado de salud hasta que se eliminan de la dieta "desencadenantes
alimentarios" frecuentes. Algunas reacciones se consideran alergias alimentarias.
Estas provocan síntomas graves inmediatamente después de ingerir un alimento
desencadenante. Hay reacciones que se retrasan horas o incluso días; este tipo de
reacción se denomina "sensibilidad alimentaria". Las sensibilidades alimentarias
suelen ser consecuencia de un desequilibrio del sistema digestivo que afecta
al sistema inmunitario. Las intolerancias alimentarias pueden presentarse por
reacciones a determinadas sustancias químicas que se encuentran en los alimentos
(p. ej., glutamato monosódico, níquel, histamina). Las intolerancias alimentarias
también se pueden producir cuando una persona carece de una enzima, como la
lactasa, que es necesaria para digerir la leche.

Algunas reacciones alimentarias aparecen cuando se consume el mismo alimento


con frecuencia. Si una persona sigue consumiendo alimentos a los que es sensible,
es posible que su digestión y absorción se vean afectadas. La dieta de eliminación
es una herramienta útil para identificar tanto los alimentos desencadenantes como
las verdaderas alergias, intolerancias o sensibilidades.

Reduce la inflamación: cualquier tipo de reacción alimentaria puede desencadenar


inflamación de bajo grado en el intestino, lo que tiene como consecuencia
la descomposición de la pared intestinal. Esto expone la sangre a partículas
alimentarias no digeridas (un síndrome conocido como "intestino permeable").
El intestino permeable permite el paso de otras sustancias, tales como bacterias,
sustancias químicas y levaduras, del intestino al torrente sanguíneo, lo que estimula
aún más el sistema inmunitario e induce una mayor inflamación. Así como las
reacciones alimentarias pueden causar intestino permeable, lo contrario también es
cierto. El intestino permeable puede aumentar significativamente la probabilidad
de sensibilidad alimentaria. Eliminar los desencadenantes alimentarios reduce la
inflamación y ayuda a calmar el sistema inmunitario.

El revestimiento del intestino está formado por células que se reemplazan


aproximadamente cada dos a cuatro días. En el transcurso de una semana, todas las
células del revestimiento intestinal se desintegran o desprenden y una nueva célula
crece para ocupar su lugar. Eliminar alimentos inflamatorios y desencadenantes, y
al mismo tiempo suministrar al organismo alimentos antiinflamatorios, contribuye
con el fortalecimiento y la salud del tejido intestinal recién formado. La dieta de
eliminación ayuda a reducir la inflamación con alimentos antiinflamatorios. Consumir
estos alimentos mientras se eliminan los desencadenantes alimentarios frecuentes
reduce la inflamación y ayuda a sanar el intestino.

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Características de la dieta de eliminación

Favorece un microbioma sano: gran parte de la salud general de una persona viene
determinada por la salud de su intestino. Hasta el 70 % del sistema inmunitario
se concentra alrededor del tubo digestivo. El sistema inmunitario intestinal vigila
constantemente los alimentos que viajan por el tubo digestivo. La forma en que
responde el sistema inmunitario depende de la flora que habita en el intestino. La
flora normal, también conocida como microbioma, ayuda a regular la respuesta
inmunitaria.

Cuando hay inflamación en el intestino, puede cambiar la cantidad de bacterias


sanas y patógenas en el microbioma. Esto puede afectar al sistema inmunitario y
causar síntomas indeseados. Proporcionar los nutrientes esenciales necesarios
para su recuperación es un factor importante que contribuye a la formación de un
microbioma saludable y a una respuesta inmunitaria sana. Eliminar ciertos alimentos
disminuye la inflamación, lo que permite sanar el intestino y, en última instancia,
el sistema inmunitario. Además, se puede reconstruir un microbioma intestinal
sano comiendo alimentos integrales saludables, en especial los ricos en proteínas,
fitonutrientes, probióticos y prebióticos. Estos alimentos son la base de la dieta de
eliminación.

Sin lácteos ni gluten: el gluten y los productos lácteos se omiten en la dieta de


eliminación porque se asocian con frecuencia a reacciones alimentarias. El azúcar de
la leche (o lactosa) presente en la leche y en muchos otros productos lácteos puede
provocar gases dolorosos, distensión abdominal (hinchazón) y molestias digestivas,
sobre todo en quienes carecen de la lactasa apropiada, la enzima necesaria para
digerir correctamente la lactosa. La intolerancia a la lactosa es muy frecuente en
todo el mundo.

Los productos lácteos fermentados, como el yogur y la crema agria, pueden


ser naturalmente más bajos en lactosa; sin embargo, estos productos contienen
caseína, una proteína de la leche que también puede provocar reacciones adversas.
Hay diferentes tipos de caseína en la leche, dependiendo del tipo de vaca, y esto
también puede influir en la tolerancia. El papel de estas proteínas de caseína en las
alergias, las intolerancias y la permeabilidad intestinal está en investigación. Hasta
que la ciencia aclare el debate en torno a los distintos tipos de caseína, se deben
evitar todos los productos lácteos durante la dieta de eliminación.

El gluten es una familia de proteínas que se encuentran en cereales comunes


(cebada, centeno y trigo) y en productos elaborados con ellos (panes, cereales,
galletas, pastas, etc.). Las proteínas del gluten, denominadas gliadinas, pueden
descomponer las células que absorben nutrientes en el intestino delgado.
Esta descomposición puede causar intestino permeable y contribuir a la
sensibilidad alimentaria, la intolerancia alimentaria y otros trastornos digestivos
o autoinmunitarios. Algunas personas responden bien tras eliminar el gluten de
la dieta, incluso en ausencia de los síntomas digestivos habituales asociados a la
intolerancia al gluten.

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Características de la dieta de eliminación

Los productos lácteos y los cereales que se evitan en la dieta de eliminación se


muestran en la tabla siguiente. También se excluyen del plan todos los productos
que contengan estos alimentos como ingredientes.

Productos lácteos Cereales (que contienen gluten)


Mantequilla Cebada
Queso (todos) Bulgur
Crema para batir Avena*
Crema Centeno
Helados Seitán
Kéfir Triticale
Leche Trigo (farro, kamut, espelta y todas las
demás variedades)
Crema agria
Yogur

*La avena, incluso la que se etiqueta como libre de gluten, con frecuencia se procesa en las mismas
instalaciones que los cereales con gluten, por lo que puede contaminarse. Algunas personas con enfermedad
celíaca e intolerancia al gluten pueden presentar reacciones a la avena certificada como libre de gluten. Por
este motivo, debe seguir los consejos de su médico cuando reincorpore este cereal a la dieta.

Fitonutrientes que sanan el intestino: la dieta de eliminación contiene una gran


variedad de verduras, hortalizas y frutas de colores vistosos. Estos alimentos
de origen vegetal proporcionan muchos nutrientes importantes, llamados
fitonutrientes, que promueven la curación y la desintoxicación. Estos fitonutrientes
también brindan protección contra el daño celular y desempeñan un papel activo
en la reducción de la inflamación.

Reduce la carga tóxica: la dieta de eliminación fomenta el consumo de alimentos


orgánicos para disminuir la carga tóxica del organismo. También promueve
las fuentes de proteína animal alimentadas con hierba, criadas en pastos y
campos abiertos, ya que tienen más ácidos grasos omega-3 que sus homólogos
alimentados con maíz y enjaulados. Comer productos orgánicos reduce la
exposición a colorantes, saborizantes, edulcorantes, aditivos y conservantes
artificiales, así como también a pesticidas, insecticidas, herbicidas y otros productos
químicos.

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Características de la dieta de eliminación

Si bien este plan alimentario se fundamenta en disminuir la exposición a toxinas


de todo tipo, eliminar las toxinas que ya están presentes en el cuerpo es igual
de importante. Se necesitan muchos nutrientes diferentes para promover la
desintoxicación. La escasez de cualquiera de ellos podría tener como consecuencia
el aumento de la carga tóxica. Comer alimentos integrales de origen vegetal
ayudará a reducir la carga tóxica general del organismo y favorecerá el tránsito
intestinal. Beber bastante agua también es importante para eliminar toxinas.

La carga tóxica de una persona es el resultado de tres factores principales:

1. Genética: los genes influyen en la forma en que el organismo elimina las


toxinas.
2. Toxinas: la exposición de cada persona a las toxinas es diferente dependiendo
de su alimentación, estilo de vida, trabajo y el lugar donde vive.
3. Alimentación: los alimentos integrales y la fibra favorecerán la capacidad del
cuerpo para eliminar toxinas.

No hay restricción calórica: la pérdida de peso no es un objetivo de la dieta de


eliminación. La pérdida de peso puede (o no) ocurrir a medida que el cuerpo
comienza a sanar. Aunque el seguimiento de la ingesta alimentaria puede ser útil,
especialmente durante la fase de reintroducción, no es necesario contar las calorías
cuando se sigue este plan de alimentación. Sin embargo, es esencial consumir solo
los alimentos que aparecen en la lista de la dieta de eliminación.

Promueve la conciencia corporal hacia los alimentos: al terminar la fase inicial


de la dieta de eliminación, se enfrentará a ciertos alimentos durante la fase
de reintroducción. Esto ayuda a identificar los desencadenantes alimentarios
específicos que continúan causando síntomas. Durante la fase de reintroducción,
muchas personas pueden empezar a identificar cómo les hacen sentir determinados
alimentos. Seguir la dieta de eliminación puede generar cambios en las papilas
gustativas y un mayor nivel de conciencia sobre los alimentos y su impacto en el
cuerpo. Es probable que los síntomas que actualmente son un problema mejoren
durante esta dieta, aunque puede haber un periodo inicial de empeoramiento del
cuadro clínico. A medida que se reincorporan cuidadosamente los alimentos en el
plan de alimentación, usted puede relacionar los síntomas experimentados antes de
la dieta de eliminación con alimentos específicos. Algunas personas señalan estar
más en contacto con las respuestas de su cuerpo a los alimentos después de la
dieta de eliminación.

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Características de la dieta de eliminación

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Un recorrido por el plan de alimentación

El plan de alimentación de la dieta de eliminación proporciona un panorama de los


alimentos que están disponibles para elegir cada día.

Para tener éxito con la dieta de eliminación, es muy importante saber qué
alimentos evitar y qué alimentos se pueden comer. La tabla a continuación
proporciona un resumen.

Alimentos para evitar Alimentos para comer


„ Alcohol „ Alternativas a los lácteos
„ Carne de res „ Pescado
„ Chocolate „ Frutas (solo las específicamente indicadas)
„ Café, bebidas carbonatadas, bebidas energéticas, té „ Carne de animales de caza
„ Maíz „ Cereales integrales sin gluten (amaranto, trigo sarraceno, mijo,
„ Productos lácteos quinoa, arroz, teff, etc.)
„ Huevos „ Aceites saludables
„ Cereales que contienen gluten (todas las variedades de cebada, „ Legumbres (excepto soya y maní)
centeno, espelta, trigo) „ Frutos secos (excepto maní)
„ Maní „ Aves de corral
„ Cerdo „ Semillas
„ Carnes procesadas „ Verduras
„ Mariscos
„ Soya y sus productos derivados
„ Azúcar (azúcar blanco, jarabe de maíz de alta fructosa, azúcar
moreno, sacarosa, etc.)

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Un recorrido por el plan de alimentación

Proteína
La proteína es una piedra angular fundamental de una nutrición óptima. Desempeña
múltiples funciones en el organismo, como ayudar a equilibrar el nivel de azúcar
en sangre. Para eliminar eficazmente las toxinas, el organismo necesita que los
aminoácidos (componentes básicos de las proteínas) se unan a las toxinas en el
hígado y faciliten su desecho. Por lo tanto, es extremadamente importante incluir
algo de proteína en cada comida o tentempié.

La dieta de eliminación ofrece diferentes fuentes de proteínas animales y vegetales.


Al igual que con las otras categorías de alimentos, la calidad es importante. Las
proteínas de alta calidad provienen de fuentes magras, orgánicas de animales
criados en campos y alimentados con pasto, y no modificados genéticamente
(OMG). Las opciones incluyen pescados bajos en mercurio como el fletán, el
arenque, la caballa, el salmón y las sardinas. Se prefieren los pescados sostenibles,
capturados en medios silvestres, ya que algunos especímenes de piscifactoría
contienen sustancias químicas nocivas. Otras opciones proteínicas se obtienen
de la cacería (búfalo, alce, cordero, venado) y aves de corral (pollo, codorniz de
Cornualles, pavo). Las opciones de proteínas vegetales comprenden la espirulina,
las legumbres, las lentejas, los guisantes y algunas proteínas en polvo (cáñamo,
guisantes y arroz).

Legumbres
Las legumbres, como los frijoles y las lentejas, son una fuente perfecta de proteínas
de calidad y carbohidratos complejos, que estimulan la sensación de saciedad y
regulan el azúcar en la sangre. Se recomienda consumir al menos una ración diaria
de legumbres en sopa o como frijoles cocidos, salsas o hummus.

Alternativas a los lácteos


Los productos lácteos no se incluyen en la dieta de eliminación, ya que a menudo
se asocian con síntomas digestivos. Además, muchos productos lácteos contienen
toxinas y hormonas. Hay varias alternativas a los lácteos disponibles en este plan de
alimentación, principalmente en forma de leches elaboradas con frutos secos. Los
sustitutos de los lácteos como la leche de coco (en caja), almendra, linaza o avellana
suelen contener edulcorantes o gomas, por lo que es importante leer las etiquetas
de los alimentos antes de comprarlos. El kéfir de coco sin azúcar se incluye en el
plan de alimentación por su potencial prebiótico y probiótico, que puede ayudar a
mejorar la salud intestinal y general.

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Un recorrido por el plan de alimentación

Frutos secos y semillas


La dieta de eliminación incluye varios frutos secos y semillas. Estos pueden añadirse
a las comidas para potenciar los nutrientes y el sabor (quizás espolvoreados
sobre ensaladas o verduras) y son una buena opción de refrigerio. Los estudios
demuestran que comer frutos secos con regularidad mejora los factores de riesgo
de enfermedades del corazón. Se recomienda comer al menos 1 o 2 raciones de
frutos secos al día. Son preferibles los frutos secos crudos y sin sal. Las semillas
de lino y cáñamo pueden molerse y mezclarse en batidos o espolvorearse en
ensaladas. Además, las mantequillas de frutos secos como la de almendras,
anacardos y el tahini (mantequilla de semillas de sésamo) pueden usarse como
condimento, untarse en frutas o esparcirse sobre verduras.
Muchas personas son alérgicas o sensibles a los frutos secos. Su médico de medicina funcional puede
recomendarle una versión modificada de este plan de alimentación si tiene o sospecha que tiene alergias o
sensibilidades a los frutos secos.

Grasas y aceites
Se puede utilizar una gran selección de grasas y aceites para aliñar ensaladas y
cocinar mientras sigue la dieta de eliminación. Entre las opciones se encuentran
grasas y aceites líquidos mínimamente refinados, prensados en frío, orgánicos,
sin OGM, ya que son los de mejor calidad. Se recomienda consumir estas grasas
de alta calidad a diario para reducir la inflamación, que es importante para la
salud intestinal. El aceite de oliva extra virgen es una opción excelente. Las
investigaciones han demostrado que el aceite de oliva extra virgen favorece la salud
del corazón y del hígado. Los beneficios para la salud del aceite de oliva también se
encuentran en las aceitunas enteras, por lo que se incluyen en esta categoría.

La leche de coco enlatada se incluye en la categoría de "grasas y aceites" porque


la grasa predomina en su composición, a diferencia de la leche de coco en caja, que
es fundamentalmente fuente de proteínas e hidratos de carbono. Sin embargo, la
mayoría de las latas están recubiertas de una sustancia química llamada bisfenol
A (BPA, por sus siglas en inglés). Cuando compre leche de coco en lata, busque la
etiqueta que indica que son latas libres de BPA o compre la versión en caja.

Otra grasa de alta calidad que forma parte de la dieta de eliminación es el aceite
de aguacate. A diferencia de muchos otros aceites vegetales que se extraen de las
semillas de las plantas, el aceite de aguacate se extrae del propio fruto. Además de
ser una buena fuente de grasa saludable de alta calidad, los aguacates y sus aceites
son ricos en nutrientes y antioxidantes.

El ghee o mantequilla clarificada también se incluye en esta categoría. Aunque el


ghee es técnicamente un producto lácteo, en su proceso de elaboración se eliminan
todas las proteínas de la leche. La mantequilla utilizada para hacer ghee debe ser
orgánica y proceder de vacas alimentadas con pasto.

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Un recorrido por el plan de alimentación

El aceite de sésamo se incluye en la dieta de eliminación por su papel terapéutico


en la función hepática y sus efectos antiinflamatorios. Otras grasas que se incluyen
en esta categoría son el aceite de almendras, el aceite de linaza, el aceite de
cáñamo y el aceite de nuez.
Las grasas y los aceites líquidos se pueden dañar con la exposición al calor, la luz y el oxígeno. Los aceites
líquidos deben guardarse en recipientes de cristal tintado (no de plástico) cerrados herméticamente y en un
lugar fresco y oscuro. No deben guardarse cerca de los fogones y deben desecharse si huelen a rancio.

Verduras sin almidón y con almidón


La dieta de eliminación hace énfasis en comer muchas verduras de muchos colores
todos los días. Lo ideal es comer al menos nueve raciones de alimentos vegetales
coloridos y ricos en fitonutrientes al día, principalmente compuestas de verduras.

Las verduras crucíferas son una opción fantástica durante la dieta de eliminación.
Las verduras crucíferas, que incluyen el brócoli, la coliflor, la col, la col rizada,
la col china y la rúcula, contienen nutrientes que favorecen los sistemas de
desintoxicación del cuerpo.

Es importante consumir un "arco iris de colores" cada día. Las verduras de todos los
colores aportan una gran variedad de beneficios para la salud. Aunque las verduras
de color más oscuro suelen contener mayor cantidad de fitonutrientes, las de color
blanco y marrón ofrecen grandes beneficios para la salud.

Frutas
Las frutas ricas en fitonutrientes ayudan a reducir la inflamación y a proteger las
células. Comer una porción de fruta puede ser útil si tiene antojo de algo dulce.
Siempre es mejor comer fruta con un poco de proteína, como frutos secos o su
mantequilla, para compensar cualquier pico de azúcar en sangre. La fruta puede ser
fresca o congelada, pero evite las que contengan azúcares añadidos o edulcorantes.

La dieta de eliminación incluye frutas que ofrecen una amplia gama de beneficios
para la salud, como moras, arándanos, kiwi, semillas de granada, fresas y
frambuesas. Las bayas son antiinflamatorias y especialmente beneficiosas para
la salud del cerebro y el corazón. Se ha demostrado que el kiwi contribuye con
la digestión y promueve el tránsito intestinal saludable. Las semillas de granada
son antiinflamatorias y mejoran la salud del corazón. Se ha comprobado que los
fitonutrientes de las manzanas favorecen la salud de los vasos sanguíneos. Las
manzanas pueden comerse crudas o en estofado con canela para darles más sabor.
Solo en ocasiones se permite comer pequeñas cantidades de fruta desecada;
también puede preparar su propia fruta deshidratada sin azúcar. Al igual que con
las verduras, compre fruta orgánica siempre que sea posible.

Aunque la dieta de eliminación incluye cítricos, es posible que su profesional de


medicina funcional le recomiende evitar este tipo de fruta temporalmente en casos
de que exista sospecha o diagnóstico confirmado de sensibilidad.

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Un recorrido por el plan de alimentación

Cereales sin gluten


El gluten y los productos elaborados con cereales que contienen gluten (panes,
cereales, galletas, pastas, etc.) se omiten en la dieta de eliminación. La eliminación
de los cereales con gluten es solo el primer paso, ya que el gluten también se
encuentra en salsas preparadas, aliños, condimentos y muchos otros alimentos.

Los cereales integrales sin gluten, aquellos que tienen una capa exterior de
salvado intacta, están permitidos en la dieta de eliminación porque constituyen
una excelente fuente de fibra y fitonutrientes. Se ha demostrado que los cereales
integrales son antiinflamatorios. Entre ellos, se encuentran los siguientes: amaranto,
trigo sarraceno, kasha, mijo, avena, quinoa, arroz y teff.

La contaminación cruzada es un problema con la avena y potencialmente otros


cereales sin gluten cuando se cultivan cerca de trigo, centeno o cebada. También
es un problema cuando los cereales sin gluten y con gluten se procesan con la
misma maquinaria. Cuando compre avena, busque en el envase el sello que certifica
que no contiene gluten. Los celíacos deben asegurarse de suprimir el gluten por
completo de su alimentación diaria.

Bebidas
La hidratación favorece el tránsito intestinal, mejora el metabolismo y promueve la
saciedad. Beber agua a lo largo del día también se relaciona con un mejor estado
de ánimo, mayor energía y rendimiento cognitivo. Es importante beber abundante
agua limpia y filtrada a lo largo del día.

Además del agua filtrada, tiene otras opciones para consumir líquidos, como los
caldos (de vegetales y huesos), las sopas de carne y otras bebidas descafeinadas,
como los jugos de verduras frescas, crudas y prensadas en frío. En la dieta de
eliminación también se recomienda el té descafeinado.

El café, las bebidas energéticas, el alcohol, las bebidas carbonatadas y las


cremas no lácteas se omiten en la dieta de eliminación. Aunque no encabezan
la lista de alérgenos potenciales, el café y otras bebidas con cafeína pueden ser
desencadenantes alimentarios para algunas personas. Las bebidas con cafeína
pueden provocar reacciones adversas, como dolores de cabeza y molestias
digestivas. Sin embargo, eliminar la cafeína también puede causar dolores de
cabeza u otros síntomas. Como estrategia, se recomienda reducir lentamente la
ingesta de cafeína durante varios días para minimizar los dolores de cabeza, el
cansancio u otros síntomas a menudo asociados con la abstinencia de la cafeína.

El alcohol se excluye porque estimula la inflamación y tiene un efecto negativo


sobre la función hepática. No se deben consumir bebidas carbonatadas (normales y
con edulcorantes artificiales) durante la dieta de eliminación. Intente sustituirlas por
agua gasificada con rodajas de limón o lima, o con un chorrito de agua de coco.

Es importante evitar las cremas sin lácteos, ya que contienen azúcares refinados y
grasas poco saludables. En su lugar, utilice un sustituto no lácteo de la leche, como
la leche de almendras o de coco.

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Un recorrido por el plan de alimentación

Especias y condimentos
Todas las hierbas y especias son excelentes opciones en esta dieta, ya que
contienen muchos nutrientes beneficiosos y dan sabor a las comidas. Por
ejemplo, la cúrcuma también es conocida por sus propiedades antiinflamatorias y
analgésicas, y el jengibre se ha utilizado como medicamento tradicional en todo el
mundo gracias a sus efectos positivos sobre la digestión.

La mayoría de los condimentos disponibles en las tiendas no están permitidos


en la dieta de eliminación, ya que pueden contener edulcorantes y conservantes
añadidos. Sin embargo, se pueden preparar versiones caseras de muchos
condimentos, como la salsa de tomate y la salsa barbacoa, fácilmente con algunos
ingredientes permitidos.

Las mostazas compradas en la tienda (de Dijon, molidas a la piedra, etc.) y


elaboradas sin azúcares añadidos están permitidas, al igual que los vinagres (vinagre
de sidra de manzana, vinagre balsámico y vinagre blanco).

Nota: Los condimentos deben usarse con precaución. Información sobre los
edulcorantes
La dieta de eliminación acepta el uso de ciertos edulcorantes en cantidades muy
pequeñas: jarabe de arroz integral, melaza negra, jarabe de arce puro, miel virgen,
azúcar de coco, néctar de agave, fruto del monje, eritritol y estevia. La cantidad
total de edulcorantes permitidos no debe superar las 3 cucharaditas diarias. Tenga
en cuenta que la estevia es un edulcorante potente que no requiere más de una
pizca para obtener el máximo dulzor.

No consumir: edulcorantes artificiales, azúcar de mesa ni ningún otro edulcorante


procesado que no se recomiende en este plan. Muchos edulcorantes, como el
jarabe de maíz con alto contenido de fructosa (JMAF) y el jarabe de maíz, se
derivan del maíz, un grano no permitido en el plan. En general, los edulcorantes de
alta intensidad pueden aumentar el deseo de comer dulce e impiden disfrutar del
dulzor natural de la fruta y algunas verduras.

Información sobre el chocolate


Si bien el cacao tiene beneficios para la salud en una alimentación saludable, suelen
excluirse todos los productos derivados del cacao, como el cacao caliente y el
chocolate, de la dieta de eliminación porque contienen cafeína. El profesional de
medicina funcional le informará si el cacao es apropiado en su caso cuando siga este
plan de alimentación.

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Un recorrido por el plan de alimentación

A continuación, encontrará la lista de sustituciones de la dieta de


eliminación.
Cuando tenga antojo de esto... ...consuma esto.
Leche (para cereales o malteadas), yogur, Sustitutos de la leche: leche de arroz, avena,
queso cáñamo, almendras, girasol, avellanas y coco
sin endulzar; yogur de coco sin endulzar o
kéfir; lea las etiquetas para comprobar que
el sustituto no contiene lactosa o caseína
Cereales calientes, como cereal de trigo Copos de avena o avena tradicional, cereales
tostado (Wheatena) u otros cereales calientes de arroz, copos de quinoa o crema de avena
con amaranto, manzana y canela*
Cereal frío Arroz inflado y mijo, arroz integral crujiente,
cereales de amaranto; todos certificados
sin gluten (tenga en cuenta que suele haber
maíz en los alimentos etiquetados sin gluten)
Pan, galletas y pasta Panes, galletas o pasta sin gluten elaborados
con arroz integral, avena, teff, mijo, quinoa,
amaranto, tapioca, trigo sarraceno, sorgo,
harina de papa y harina de garbanzos;
fideos celofán a partir de hilos de judías;
compruebe la certificación sin gluten y los
edulcorantes permitidos
Panes rápidos Pudin de chías y compota de manzana*,
panquecas de avena y calabaza*
Rebozado Moler cualquier galleta de arroz o pan
permitidos, o utilizar harina de almendras
(cualquier harina de frutos secos), semillas de
chía molidas, coco o harina de coco
Huevos Sustituto de huevo comprado en tienda,
o mezclar 1 cucharada de linaza o chía en
la licuadora con ¼ de taza de agua y dejar
espesar durante unos minutos
Mantequilla de maní Mantequilla de almendras, anacardos,
macadamias, nueces, avellanas o semillas de
calabaza y sésamo (tahini)
Helados Varias marcas de postres congelados a base
de arroz o coco; lea atentamente las etiquetas
para identificar los edulcorantes permitidos
Bebidas carbonatadas Agua mineral o gasificada, mezclada con un
chorrito de limón o lima, o con una pequeña
cantidad de su jugo favorito (¾ de agua, ¼ de
jugo); agua filtrada o purificada con rodajas de
limón o lima; agua de coco sin endulzar
Café/té Té de hierbas
Mantequilla o margarina Aceite de coco o ghee (mantequilla clarificada)
Azúcar y edulcorantes Mantequilla de manzana sin endulzar, jarabe
de arroz integral, melaza negra, jarabe de arce
puro, miel virgen, azúcar de coco, néctar de
agave, fruto del monje, eritritol y estevia.
Condimentos Todos los tipos de vinagre y todas las
especias, como sal, pimienta, albahaca,
algarrobo, canela, comino, eneldo, ajo,
jengibre, mostaza, orégano, perejil, romero,
estragón, tomillo, cúrcuma, etc. ¡No olvide
leer las etiquetas! La mostaza, por ejemplo,
a veces contiene trigo.
*La receta se incluirá en otro folleto.

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Proceso de reintroducción

Proceso de reintroducción de los alimentos


Para identificar los posibles desencadenantes alimentarios, se deben reincorporar a
la dieta los alimentos que parecían estar relacionados con los síntomas ("alimentos
de provocación"), uno por uno en intervalos de cada dos días.

1. El primer día de la fase de reintroducción, seleccione el alimento que


más extrañó o se le antojó, o que comía más a menudo. La secuencia de
reintroducción de los alimentos no es crucial. Es libre de elegir el orden en el
que desea reincorporar los alimentos.
2. Coma una cantidad generosa de ese alimento a lo largo del día 1 (dos o tres
porciones de tamaño promedio), sin dejar de comer los alimentos de la dieta
de eliminación. Durante ese día y el siguiente (día 2), anote cualquier síntoma
en el Registro de síntomas de reintroducción de alimentos (que podrá obtener
de su profesional de medicina funcional).
3. Si no presenta ninguna reacción al alimento durante este periodo de dos días,
mantenga ese alimento en el plan de alimentación y reintroduzca un segundo
alimento el día 3. Esté atento a cualquier síntoma en los días 3 y 4. Si no hay
reacción, conserve ese alimento en la dieta y añada el tercer alimento de
provocación, y así sucesivamente.

Si algún alimento provoca síntomas, deje de comerlo inmediatamente, espere hasta


que desaparezcan los síntomas y reincorpore el siguiente alimento. Después de
probar todos los alimentos de provocación, vuelva a probar el alimento siguiendo el
mismo procedimiento (un día coma el alimento y observe si presenta síntomas los
próximos dos días).

Alimentos para reintroducir


En la dieta de eliminación se excluye el trigo, los lácteos, la soya, el maíz, el maní,
los huevos, la carne de res, el cerdo y los mariscos. Después de probar estos
alimentos, comience a reincorporar el resto de alimentos que se excluyen, tales
como cebada, centeno, café/té, alcohol, chocolate y cualquier otro alimento que su
médico le haya sugerido evitar.

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Proceso de reintroducción

Identifique y consuma cada alimento en su forma pura, es decir, sin aditivos ni


ingredientes que hayan sido eliminados, como el azúcar o los conservantes. Los
siguientes son ejemplos de alimentos en su forma pura según su categoría.

Alimentos/grupos Alimentos de provocación (ejemplos) y promedio del tamaño de la porción


Trigo/gluten 100 % cereal integral (p. ej., Wheatena®): ½ taza
100 % fideos de trigo integral: 1 taza
Lácteos Leche (descremada, 1 %, 2 %, o leche entera): 1 taza
Queso (cualquier queso de leche entera, sin aditivos): 1 onza
Maíz Granos de maíz frescos o congelados: ½ taza o 1 mazorca pequeña
Cerdo Carne cocida, excepto en cacerola: 3-6 onzas
Huevos Hervidos duros o blandos o escalfados: 2 huevos
Maní Maní crudo o tostado en seco: ¼ taza de frutos secos
Mantequilla de maní hecha 100 % solo con maní: 2 cucharadas de mantequilla de maní
Soya Edamame: ½ taza
Leche de soya: 1 taza
Tofu, tempeh: ½ taza
Mariscos Pruebe de manera individual los mariscos*: 3-6 onzas
Cebada, centeno Cereales cocidos de cebada o centeno: ½ taza
100 % galletas de centeno: 2-3 galletas

Consejos para seleccionar los alimentos de provocación


Reincorpore alimentos sencillos en lugar de alimentos complejos con múltiples
ingredientes. Cuando reintroduzca café o bebidas con cafeína, chocolate, aditivos
alimentarios o alcohol, asegúrese de comer solo ese alimento. Esto puede ser
complicado, ya que a menudo están mezclados con otros alimentos excluidos.

Ejemplos:

⋅ Los bombones de chocolate también contienen azúcares, así que tenga


cuidado con cualquier reacción a un bombón, ya que no estará claro si se trata
de una reacción al chocolate o al azúcar, o quizás a otros aditivos.
⋅ No incorpore una bebida de moca que contenga café Y chocolate, o una
bebida de café que contenga lácteos (leche o crema). Otra clase de alimentos
de provocación que pueden causar confusión son la pizza o la lasaña, que
contienen lácteos y trigo/gluten. Tampoco es inusual reaccionar al trigo pero
no a otros cereales que contienen gluten (centeno y cebada).

Reacciones a alimentos de provocación


Deje de comer cualquier alimento que le produzca una reacción negativa
evidente. Haga un seguimiento de los síntomas en el Registro de síntomas en la
reintroducción de alimentos. Esta tabla y las instrucciones sobre cómo utilizarla será
proporcionada por su profesional de medicina funcional.

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Proceso de reintroducción

Las reacciones potenciales son diarrea o estreñimiento, fatiga, depresión, ansiedad,


gases, distensión y dolor abdominal, dolor de cabeza, dolor muscular o articular,
irritaciones o erupciones cutáneas, insomnio, congestión nasal o secreción nasal,
prurito o sofocos.

Cuando aparezcan síntomas después de introducir un alimento, deje de comer


ese alimento de inmediato. Espere hasta que los síntomas desaparezcan por
completo antes de reintroducir el siguiente alimento. El alimento que causó
inicialmente los síntomas puede volver a probarse después de haber probado el
resto de los alimentos de provocación.

Evitar los alimentos asociados con síntomas


Evite los alimentos que le provoquen síntomas durante otros tres a seis meses.
Durante este tiempo, su médico puede recomendarle alimentos medicinales o
suplementos nutricionales que ayuden a recuperar su salud.

Después de completar la prueba inicial de todos los alimentos que se excluyeron


durante la dieta de eliminación, también puede ser útil probar alimentos
individuales dentro de un grupo de alimentos para identificar si hay sensibilidad a
ciertas formas del alimento.

Por ejemplo, dentro del grupo de los lácteos, pruebe el queso de leche de vaca,
de oveja y de cabra. El yogur y la mantequilla pueden tolerarse a menudo, pero
la leche no. En el grupo del trigo, pruebe los productos de trigo germinado, la
espelta, el farro, el escaña y otras formas antiguas de trigo o a base de masa madre.

Siga el mismo proceso utilizado con los alimentos de provocación durante la


reintroducción inicial: introducir solo un alimento a la vez durante un día, seguido de
un periodo de observación de 24 horas. Si no se produce ninguna reacción, pase al
siguiente alimento de ese grupo. Si aparecen síntomas, espere a que desaparezcan
y pruebe el siguiente alimento del grupo.

Consulte a su profesional de medicina funcional si tiene dudas para reincorporar


alimentos.

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Consejos útiles

Planificar para tener éxito: antes de empezar la dieta de eliminación, es importante


tener todo lo necesario en casa, la planificación previa mejorará en gran medida
su éxito. Compre los alimentos con antelación y asegúrese de comprar solo los
alimentos indicados en la lista.

Leer todas las etiquetas de los alimentos: revise la lista de "Alimentos ocultos"
para evitar consumir comidas e ingredientes no permitidos. Es necesario comer solo
los alimentos que están en la lista de alimentos. Si un alimento no está en la lista, no
lo coma. Si no está seguro, pregunte a su profesional de medicina funcional.

No pasar hambre: añada las verduras y frutas que necesite. El menú es básico y
necesita que lo personalice según sus preferencias. Si se siente abrumado con la
elección de alimentos o la planificación de las comidas, solicite la asesoría de su médico.

Comer con regularidad: comer con regularidad a lo largo del día le ayudará a
mantener estable la glucemia (su azúcar en sangre). Coma los tentempiés sugeridos
cuando tenga hambre o antojos. Tenga a mano aderezos y tentempiés para comer
rápido entre comidas o aderezar una ensalada en el almuerzo. En general, no
se recomienda comer fuera, ya que es imposible conocer todos los ingredientes
que contiene una comida. Por las mismas razones, también es mejor evitar los
viajes durante este periodo. Puede ser problemático comer en la carretera o en
un aeropuerto. Si viaja o visita a amigos o familiares, planifique las comidas y
lleve sus alimentos. Lleve frutos secos, frutas y verduras con los que pueda viajar
adecuadamente.

Seleccionar alimentos orgánicos: siempre que sea posible, escoja alimentos


frescos y frutas y verduras orgánicas para reducir la ingesta de residuos químicos y
pesticidas. Lave muy bien las frutas y verduras.

Seleccionar aceites prensados en frío: los aceites prensados en frío no se calientan


en el proceso de elaboración y suelen ser más sanos que los aceites que se
calientan. Siempre que sea posible, prefiera aceites orgánicos.

Eliminar la cafeína: las bebidas que contienen cafeína no forman parte de esta
dieta. Si consume estas bebidas de forma habitual, reduzca gradualmente su
consumo antes de empezar la dieta de eliminación para prevenir o reducir los
síntomas de abstinencia. Pruebe tomar la mitad de café descafeinado y la mitad
de café normal durante unos días, y luego reduzca lentamente la ingesta total de
cafeína. Es una buena idea pasar primero al café descafeinado antes de eliminar
todo el café o té.

Beber suficiente agua: no olvide beber mucha agua filtrada al día. Añada jugo de
limón o lima recién exprimido para darle más sabor.

Descansar: su profesional de medicina funcional puede recomendarle que limite el


ejercicio de alta intensidad en parte o durante todo el plan de alimentación, para
permitir que el cuerpo se cure más eficazmente sin la carga adicional del ejercicio.
El descanso adecuado y la reducción del estrés también son importantes para el
éxito de este programa. Un ligero paseo diario puede ser el ejercicio perfecto
durante este tiempo.

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Preguntas frecuentes

¿Cuál es la diferencia entre alergia, intolerancia y sensibilidad alimentaria?


Las alergias alimentarias provocan síntomas graves inmediatamente después
de ingerir un alimento. La respuesta alérgica permite que el sistema inmunitario
identifique el alimento como extraño y provocará síntomas alérgicos (edema,
picor, dificultad respiratoria, etc.). Las sensibilidades alimentarias suelen deberse
a un desequilibrio en el sistema digestivo que afecta al sistema inmunitario. A
menudo, las sensibilidades alimentarias causan síntomas retardados difíciles de
interpretar. Las intolerancias alimentarias son reacciones a determinados químicos
en los alimentos (p. ej., lactosa, glutamato monosódico, histaminas, etc.) cuando
una persona carece de una enzima o nutriente necesario para descomponer
esa sustancia química. El resultado es que el organismo no puede procesar
adecuadamente ciertos alimentos. Su profesional de medicina funcional le ayudará
a determinar si se trata de una alergia o intolerancia alimentaria.

¿Hay otros alimentos que deba evitar?


Además de los principales alérgenos contenidos en los alimentos que se excluyen
en la dieta de eliminación, existen compuestos en determinadas verduras y
frutas que pueden causar intolerancias alimentarias en ciertos individuos. Estos
compuestos incluyen histaminas, oxalatos, salicilatos, níquel y solanáceas. Su
profesional de medicina funcional puede indicarle que evite los alimentos que
contienen estos compuestos si hay razón para pensar que le están causando
síntomas. El IFM cuenta con folletos detallados que contienen estas listas de
alimentos si su médico recomienda eliminarlos.

¿Puedo hacerme un análisis de sangre en lugar de seguir la dieta de


eliminación?
Los análisis de sangre para identificar reacciones alimentarias no han demostrado
ser confiables ni precisos para identificar sensibilidades e intolerancias alimentarias.
El deseo de ver una "prueba" de la sensibilidad alimentaria es comprensible,
sin embargo, los resultados de los análisis de sangre no son lo suficientemente
confiables como eliminar y reintroducir alimentos. Además, es posible que las
intolerancias alimentarias no aparezcan en los análisis de sangre, porque no siempre
generan una respuesta inmunitaria.

¿Qué pasa si la dieta de eliminación no soluciona mis síntomas?


Si la dieta de eliminación no mejora los síntomas, será necesario analizar
nuevamente su caso con el profesional de medicina funcional. En primer lugar, se
debe evaluar si la dieta de eliminación se ha seguido de forma consistente, y si se
llevó a cabo la reintroducción de los alimentos de provocación correctamente, ya
que es fácil cometer errores al seguir este plan. Para obtener buenos resultados, es
necesario seguir la dieta el 100 % del tiempo. Si la dieta se siguió correctamente, el
profesional de medicina funcional puede recomendarle otro enfoque.

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Preguntas frecuentes

¿Qué puedo comer en lugar de pan?


Los pasteles y las tortillas hechas de arroz o cáñamo pueden ser un sustituto
aceptable para un sándwich. También puede ser una buena idea comer menos
carbohidratos a base de cereales durante este periodo de tres semanas. Utilice una
hoja grande de lechuga para "envolver" las verduras o las carnes.

¿Qué especias o saborizantes adicionales se pueden utilizar?


Se recomienda el uso de todas las especias y hierbas, ya que no solo realzan
los sabores naturales de los alimentos, sino que contienen fitonutrientes muy
beneficiosos para la salud. Experimente con hierbas y especias; e incluya nuevas.
Las hierbas frescas deben añadirse cerca del final de la cocción, mientras que las
secas deben añadirse al comienzo de la cocción.

¿Qué condimentos deben utilizarse?


Todos los tipos de vinagre están permitidos (balsámico, albaricoque japonés, de
arroz sin sabor, de sidra de manzana, con hierbas) y ayudan a realzar el sabor de las
verduras. Evite los siguientes condimentos: chocolate, salsa de tomate (ketchup),
salsa de pepinillos, chutney, salsa de soya, tamari, salsa barbacoa, teriyaki y
encurtidos agridulces.

¿Qué hacer si las legumbres suelen provocar gases y distensión abdominal?


Las legumbres son ricas en proteínas, fibra, vitaminas y minerales. Intente aumentar
su consumo de a poco en el transcurso de una a tres semanas. Remojar las
legumbres de 30 minutos a 6 horas (o toda la noche) y cambiar el agua antes de
cocinarlas también puede disminuir los gases que experimentan muchas personas.
También es útil escurrir y enjuagar las legumbres enlatadas. Algunas personas
toleran mejor las lentejas y los guisantes. Si hay dificultad para digerir estos
alimentos, el profesional de medicina funcional puede ayudarle a determinar si
existe sensibilidad alimentaria.

¿Se pueden utilizar verduras enlatadas en lugar de verduras frescas con esta
dieta?
Se prefieren las verduras frescas y congeladas porque conservan más vitaminas y
generalmente tienen menos sal añadida. Se permiten las legumbres (garbanzos,
frijoles negros y rojos, etc.) y los tomates en lata, pero enjuague bien las legumbres
antes de utilizarlas. Escurrir y enjuagar los frijoles enlatados facilitará la digestión.
No olvide comprar solo verduras y legumbres enlatadas sin BPA.

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Preguntas frecuentes

¿Qué hago si no estoy seguro de que se haya producido una reacción


alimentaria?
Cuando no esté seguro de si se ha producido una reacción alimentaria, lo mejor
es volver a probar ese alimento. Verifique que el día de la prueba no existan
circunstancias inusuales (p. ej., un día de mucho estrés o de viaje). Si tiene algún
síntoma, como dolor de cabeza, es mejor retrasar la reintroducción del alimento.
Asegúrese de ingerir una cantidad suficiente del alimento para inducir una buena
reacción. Si no se produce ninguna reacción la segunda vez, lo más probable es que
no sea un alimento desencadenante.

Si se evitan todos los alimentos desencadenantes durante 3 meses, ¿cómo


puedo saber cuándo está bien volver a comerlos?
Transcurridos los tres meses, pruebe de nuevo los alimentos. Si se produce
una reacción, vuelva a intentarlo en tres o seis meses. Algunas reacciones no
desaparecen nunca. No importa cuánto tiempo evite ese alimento, las reacciones
seguirán apareciendo.

Si un alimento se vuelve a probar y se considera aceptable, ¿con qué


frecuencia puedo comerlo?
La respuesta varía de un individuo a otro. Aunque no experimente ninguna reacción
al volver a probarlo, puede ser recomendable esperar al menos cuatro días antes
de volver a hacerlo. Es probable que sea mejor comer el alimento solo un par de
veces a la semana. Si experimenta una reacción leve, espere una semana entre cada
exposición (cada vez que lo coma). Cada persona responde de manera diferente,
por lo que es importante cultivar la conciencia corporal.

Hay muchos tipos diferentes de dietas de eliminación. ¿En qué se diferencia


la dieta del IFM?
Hay muchos tipos de dietas de eliminación, desde las muy restrictivas (comer
solo un alimento o unos pocos alimentos al día) a las menos restrictivas (eliminar
solo un alimento o grupo de alimentos durante un periodo de tiempo). La dieta
de eliminación del IFM se desarrolló como una manera de identificar alimentos
problemáticos, sobre todo cuando se desconoce qué alimentos pueden
relacionarse con síntomas crónicos. Este plan de alimentación se enfoca en la
eliminación del gluten y los productos lácteos, junto con la carne de cerdo, carne de
res, maíz, huevos, soya, maní, mariscos, cafeína, alcohol y azúcares refinados.

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Recursos y herramientas para el éxito

Aunque se trata de un proceso a corto plazo, completar una dieta de eliminación


puede ser un proceso complejo y a veces confuso. En este plan de alimentación
se incluyen recetas, sugerencias de refrigerios, una lista de compra y demás
información para que sea mucho más fácil de seguir. Revise detenidamente esta
información. Si tiene alguna pregunta o duda sobre este plan de alimentación,
póngase en contacto con su profesional de medicina funcional.

Los siguientes folletos están disponibles en la consulta de medicina funcional para


ayudarle a seguir la dieta de eliminación del IFM:

1. Plan de alimentación de la dieta de eliminación (Elimination Diet Food Plan)


2. Reintroducción de alimentos – Registro de síntomas (Food Reintroduction
Symptoms Tracker)
3. Alimentos ocultos (Hidden Foods)

La imagen de la página 7 es propiedad del IFM; todas las demás se reproducen por cortesía de 123rf.

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