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Diarrea

Qué órganos afecta


Colon e intestino delgado

Anatomía del colon

El colon es la última porción del sistema digestivo, mide unos 1,5 m de longitud y
6,5 cm de diámetro, se extiende entre el íleon y el ano y su función principal es la de
extraer agua, almacenar residuos, mantener el equilibrio de hidratación y absorber
vitaminas, antes de que sean eliminados del cuerpo.
Se subdivide en 4 partes, el colon ascendente o derecho, el colon transverso, el
colon descendente o izquierdo y el colon sigmoide.

Estructura histológica
mucosa, submucosa, muscular de la mucosa y adventicia

Anatomía del intestino delgado


Componente largo del tubo digestivo, mide más de 6 m y se divide en tres
porciones: el duodeno, el yeyuno y el íleon.
Importante: El intestino delgado es el sitio principal para la digestión de alimentos y
la absorción de los productos de la digestión

El duodeno es la primera sección del intestino delgado. Se extiende desde el


esfínter pilórico del estómago, envuelve la cabeza del páncreas en forma de C, y
termina en la flexura duodenoyeyunal.
El yeyuno es la segunda parte del intestino delgado. Comienza en el ángulo
duodenoyeyunal y se encuentra en el cuadrante superior izquierdo del abdomen.
El íleon es la última y más larga parte del intestino delgado. Se encuentra en el
cuadrante inferior derecho del abdomen.

Definición de la diarrea
Se define como diarrea la presencia de tres o mas deposiciones liquidas en un
periodo de 24 horas.

Fisiopatología de la diarrea

Ruptura del equilibrio entre la absorción y la secreción intestinal

El aparato digestivo del adulto recibe alrededor de 10 litros de liquido por día. El
ingreso oral oscila entre oscilan entre 1 a 2 líquidos, y el resto alrededor de 8 litros lo
componen las secreciones salivales, gástricas, biliares, pancreáticas, y entéricas.
Alrededor de 9 litros se reabsorben en el yeyuno, y el íleon, y entre 800 y 850 mL,
en el colon derecho. La cantidad final de líquido de las heces excretadas es de
alrededor de 150 mL por día.
La mayoría de las condiciones que originan diarrea se debe a alteraciones del
liquido intestinal y del trasporte de electrolitos. El contenido liquido de las heces
puede aumentar por disminución de su absorción o incremento de su secrecion en
el intestino delgado o en el colon.
La absorción puede reducirse como resultado de:
1. Incapacidad del intestino para reabsorber solutos osmóticamente activos.
2. Ausencia de contacto entre la superficie absortiva intestinal y el contenido
intraluminal.
3. Inhibición del transporte activo de electrolitos en la pared del intestino.
El aumento de la secreción de liquido puede obedecer a un mecanismo pasivo o
activo:
1. Mecanismo pasivo: se produce por aumento de la presión hidrostática tisular
que origina una exudación paracelular hídrica.
2. Mecanismo activo: se produce por a) agentes que activan el AMP cíclico, b)
superficies aberrantes secretoras c) lesión de la mucosa intestinal que origina
un exudado inflamatorio.

Clasificación de la diarrea

La diarrea se puede clasificar por su duración en


1. Diarrea aguda: Es aquella que comienza bruscamente y dura menos de 2
semanas.
2. Diarrea persistente: Es aquella que dura entre 2 y 4 semanas
3. Diarrea crónica: es la que persiste más de 4 semanas

Diarrea aguda
La Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud
(OMS/OPS) definen la diarrea aguda como tres o más evacuaciones liquidas o
semilíquidas en 24 horas o de al menos una con presencia de elementos anormales
(moco, sangre o pus), durante un máximo de dos semanas.

Diarrea disentérica: Se define como diarrea de tipo inflamatoria aquella que se


caracteriza por la presencia de deposiciones frecuentes con mucus, pus y sangre.

Diarrea aguda

Etiología infecciosa

La causa frecuente de la diarrea aguda es la acción de agentes infecciosos que


se adquieren por ingestión de comidas o bebidas contaminadas. El agua, la leche, el
pollo, los huevos, y el pescado suelen ser fuentes de infección. También ocurre la
trasmisión de persona a persona por contaminación de las manos o por actividad
sexual.

➢ Viral: rotavirus, adenovirus y astrovirus.


➢ Bacterias: E. coli enterohemorragica, salmonella, chlamydia, campylobacter
y shigella.
➢ Parasitaria: entamoeba histolytica, giardia lamblia, cryptosporidium y
cyclospora.
➢ Enterotoxinas: actuan sobre el intestino delgado y generan cambios en la
absorción de electrolitos y un movimiento de líquidos hacia la luz intestinal.
Colera, E.coli enterotoxigenica y bacilus cereus.
➢ Neurotoxinas: actuan sobre el sistema nervioso autónomo, producen
aumento del peristaltismo intestinal y es acompañada por vómitos.
Staphylococcus aureus.
➢ Citotoxinas: causan daño directo a la mucosa intestinal. Salmonella,
shigella, compylobacter y clostridium difficile.

Etiología no infecciosa
Uso de medicamentos: inhibe la absorción de sodio y estimulan la secrecion de
cloro.

Cualquier antimicrobiano (antibióticos) puede producir diarrea; los mas frecuentes


son las ampicilinas, las cefalosporinas y la clindamicina.
La mayoría de los antibióticos pueden causar diarrea porque alteran el equilibrio de
las bacterias que normalmente se encuentran en los intestinos, lo que permite que
prosperen ciertos tipos de microorganismos, como una bacteria llamada C.difficile.

La diarrea del viajero: falta de agua potable, refrigeración inadecuada,


promiscuidad y pobreza. Son provocados por trasmisión fecal-oral, a través de
aguas o alimentos contaminados con residuos humanos.

Diarrea crónica
Sus etiologías son variables e incluyen enfermedades inflamatorias intestinales,
tumores, patologías que evolucionan con síndrome de malabsorción, infecciones
crónicas y enfermedades que alteran la motilidad intestinal. Estas causas tienden a
agruparse en según el mecanismo fisiopatológico que produce la diarrea.

Diarreas inflamatorias: Daño del epitelio, se produce cuando la mucosa del


intestino grueso se inflama, se ulcera o se dilata, y libera proteínas, sangre, moco
y otros líquidos, lo que incrementa el volumen y el contenido líquido de las
heces. Este tipo de diarrea puede tener su origen en muchas enfermedades, como
la colitis ulcerosa, la enfermedad de Crohn, la tuberculosis y diversos tipos de
cáncer, como el linfoma y el adenocarcinoma.
Diarrea osmótica: Ocurren cuando algunos solutos ingeridos oralmente no se
absorben o no se digieren en el intestino delgado. Estos ejercen una fuerza
osmótica que atrae líquido a luz intestinal.

Las diarreas secretorias: También llamada diarrea acuosa sucede cuando los
intestinos delgado y grueso secretan sales (especialmente cloruro de sodio) y
agua a las heces. Ciertas toxinas, como la producida por el cólera o durante
algunas infecciones víricas, pueden causar estas secreciones. Las infecciones
debidas a determinadas bacterias (por ejemplo, Campylobacter) y parásitos
(como Cryptosporidium) también estimulan las secreciones.

Diarrea malabsortiva: Se producen por alteraciones en el proceso de trasporte, la


mayoría de las veces por enfermedades de la mucosa del intestino delgado.
Clínicamente, estas diarreas se caracterizan por marcada perdida de peso y déficit
nutricional. Es frecuente que estos pacientes presenten anemia, hipoalbuminemia
e hipocalcemia.
La lista de enfermedades causantes de malabsorción es extensa e incluye:
enfermedad celiaca, giardiasis, enfermedad de Crohn, gastroenteritis eosinofílica,
malabsorción de azúcares como lactosa, fructosa o sorbitol, malabsorción de ácidos
biliares secundaria a colecistectomía y más.

Alteración de la motilidad intestinal: presencia de enfermedades sistémicas


modificaran el tránsito intestinal, sea aumentándolo o provocando su
enlentecimiento o su detención, con sobrecrecimiento bacteriano, y a su vez
malabsorción y diarrea. Entres las enfermedades esta la diabetes, el
hipertiroidismo, la esclerodermia y las cirugías como gastrectomías y vagotomías.

Síntomas
El principal síntoma de la diarrea es la evacuación intestinal de heces flojas y
líquidas tres o más veces al día.
Las personas con diarrea también pueden tener uno o más de los siguientes
síntomas:
➢ una necesidad urgente de ir al baño
➢ cólicos o dolor en el abdomen
➢ pérdida de control de las evacuaciones intestinales
➢ náuseas
➢ dolor en el abdomen

Las personas con diarrea causada por ciertas infecciones también pueden tener uno
o más de los siguientes síntomas:
➢ sangre en las heces
➢ fiebre y escalofrío
➢ mareo y vértigo
➢ vómito
La diarrea puede causar deshidratación y malabsorción

Complicaciones de la gastritis
La amenaza más grave de las enfermedades diarreicas es la deshidratación.
Durante un episodio de diarrea, se pierde agua y electrolitos (sodio, cloruro, potasio
y bicarbonato) en las heces líquidas, los vómitos, el sudor, la orina y la respiración.
Cuando estas pérdidas no se restituyen, se produce deshidratación.
La diarrea es la segunda causa de mortalidad en el mundo. Los niños menores de 5
años y los adultos mayores que viven en países en desarrollo son los grupos etarios
con mayor mortalidad.

¿Cómo hidratar a una persona con diarrea?


Tomar agua es el primer paso para rehidratarse. También se puede preparar una
solución de rehidratación oral (SRO) mezclando 1 litro de agua con media
cucharadita de sal y 6 cucharaditas de azúcar.

Consumir azúcar y sal con agua ayuda a los intestinos a absorber los líquidos de
forma más eficiente. Esta solución rehidrata el cuerpo con más efectividad después
de un episodio de diarrea que el agua sola.

Enfoque diagnostico
Anamnesis
determinar la duración y gravedad de la diarrea, las circunstancias de comienzo (p.
ej., viaje reciente, alimentos ingeridos, fuente de agua), el uso de fármacos (p. ej.,
antibióticos dentro de los 3 meses previos), si hay dolor abdominal o vómitos, tomar
nota de la frecuencia y cronología de las deposiciones, los cambios en las
características de las heces (p. ej., presencia de sangre, pus o moco; cambios de
color o consistencia; evidencia de esteatorrea), los cambios de peso o apetito
asociados y la urgencia defecatoria o el tenesmo rectal. Debe investigarse la
aparición simultánea de diarrea en los contactos cercanos. Los médicos deben
preguntar específicamente sobre cualquier cambio en los medicamentos que pueda
causar diarrea.

Diarreas agudas
Conocer la duración de los síntomas,
Antecedentes epidemiológicos
Investigar sospechad de deshidratación, como mareos o debilidad.
Preguntar sobre la edad.
Los pacientes con diarrea aguda infecciosa suelen tener dolor abdominal y fiebre; las
disposiciones pueden ser acuosas, de color marrón o sanguinolentas.
Los vómitos sugieren ingestión de comida con toxinas, como las que tienen
Staphylococcus aureus.
Diarreas crónicas
Es fundamental conocer el medio epidemiológico y el estado inmunitario del paciente.
Se debe intentar distinguir entre el origen orgánico y el funcional.
Es necesario interrogar sobre uso de fármacos (laxantes, antidepresivos, metmorfina)
y sobre viajes recientes.
La intolerancia a ciertos alimentos puede ser relacionada con la diarrea (lactosa,
gluten).
Por último, debe interrogarse sobre cirugías digestivas previas y radioterapia.

Examen físico
Durante un examen físico, el médico puede:
➢ tomarle la presión arterial y el pulso para ver si tiene señales de
deshidratación
➢ examinarle el cuerpo para ver si usted tiene señales de fiebre o
deshidratación.
➢ usar un estetoscopio para escuchar los sonidos en su abdomen
➢ tocarle el abdomen para ver si está sensible o le duele

A veces, los médicos hacen un examen rectal digital. El médico le pedirá que se
agache sobre una mesa o se acueste de costado con las rodillas dobladas hacia el
pecho. Después de colocarse un guante, el médico deslizará un dedo lubricado en
su ano para ver si hay sangre en las heces.

La evaluación cuidadosa del estado de hidratación es importante, ya que la


deshidratación es la mayor causa de morbimortalidad de la diarrea aguda infecciosa.
El aumento de la frecuencia cardiaca y la presencia de hipotensión arterial ortostática
indican una perdida sustancial del volumen. La fiebre alta sugiere infección por un
microrganismo invasor. La disminución de la motilidad intestinal con ausencia de
ruidos hidroaéreos es un signo de gravedad.

Exámenes complementarios

¿Qué pruebas médicas usan los médicos para encontrar la causa de la diarrea?

El médico puede usar los siguientes exámenes o pruebas para ayudar a encontrar
la causa de su diarrea.

Examen de heces
Los exámenes de heces pueden mostrar la presencia de sangre, bacterias o
parásitos, o señales de enfermedades y trastornos. Un profesional de atención
médica le dará un recipiente para recoger y guardar las heces con instrucciones
sobre dónde enviar o llevar el recipiente para el análisis.

Análisis de sangre
Un profesional de atención médica puede sacarle una muestra de sangre para ver si
tiene ciertas enfermedades o trastornos que pueden causar diarrea.

Examen de hidrógeno en el aliento


Este examen se usa para diagnosticar la intolerancia a la lactosa mediante la
medición de la cantidad de hidrógeno en el aliento. Normalmente, en el aliento se
detecta poco hidrógeno. Cuando hay intolerancia a la lactosa, la lactosa que no se
digiere produce altos niveles de hidrógeno en el aliento. Para este examen, usted
toma una bebida que contiene una cantidad conocida de lactosa. Luego, respirará
en un recipiente tipo globo que mide el nivel de hidrógeno en el aliento. Si el nivel de
hidrógeno es alto, el médico le diagnosticará intolerancia a la lactosa.

Exámenes en ayuno
Para saber si alguna intolerancia o alergia a los alimentos está causando la diarrea,
el médico puede pedirle que evite los alimentos con lactosa, los carbohidratos, el
trigo u otros ingredientes para ver si su diarrea responde a un cambio de dieta.
Endoscopia
El médico puede utilizar una endoscopia para mirarle dentro del cuerpo y ver si
encuentra la causa de su diarrea.

Tratamiento de la diarrea
El tratamiento depende del diagnóstico y de la severidad de la diarrea. Si es leve,
basta con administrar abundantes líquidos en el propio domicilio del paciente.
También puede ser útil una dieta astringente. En algunos casos, se requieren
antibióticos.
Si la diarrea es severa y se acompaña de deshidratación, es necesario tratar al
paciente en el hospital para administrar líquidos por vía venosa.
Las diarreas de causa no infecciosa, habitualmente, requieren tratamientos
específicos según el tipo de enfermedad.
Como norma general, no es aconsejable utilizar fármacos antidiarreicos sin indicación
del médico, ya que pueden complicar la evolución de la diarrea.

Tratamiento de deshidratación
Las soluciones orales de rehidratación que contienen una cantidad adecuada de
electrólitos están disponibles sin receta médica. Estas soluciones son eficaces para
tratar la deshidratación, sobre todo cuando se debe a vómitos o a diarrea en los niños.
Las bebidas isotónicas no necesariamente contienen la cantidad de electrólitos
adecuada para reemplazar a estas soluciones.
Las personas que vomitan pueden ser incapaces de retener suficiente líquido para
tratar la deshidratación. Si la deshidratación es más grave, debe administrarse un
tratamiento con soluciones intravenosas. Para la deshidratación por diarreas (y
también para otras situaciones) se usa la solución salina al 0,45 % y al 0,2 %, ambas
con base de dextrosa al 5 % (D5 SN 0,45% y D5 SN 0,2 % respectivamente). A estas
soluciones se les añade KCL o gluconato de potasio a razón de 20 mEq/L.

Para evitar las enfermedades diarreicas, se recomienda a la población:

➢ Promover la lactancia materna durante los primeros 6 meses de vida.


➢ Desinfección, manejo y conservación del agua.
➢ Cocer los alimentos, sobre todo pescados y mariscos.
➢ Lavar frutas y verduras con agua y jabón; utilizar agua potable.
➢ Lavarse las manos antes de la preparación e ingesta de alimentos, después
de ir al baño, cambiar pañales o manejo de basura.

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