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UNIVERSIDAD VERACRUZANA

FACULTAD DE DERECHO

Derecho Fiscal

Eduardo García Hernández

Docente: Barradas Hernández


César Robert

LA OBLIGACIÓN
FISCAL
Definición.

Como punto de inicio, la obligación fiscal pertenece al Derecho Público, por lo que
para satisfacerla será necesario que se regule bajo las normas del Derecho.
Tomando como referencia la tipología de las obligaciones en el derecho civil, la
obligación tributaria se compone de la misma manera, es decir, dos sujetos donde
uno funge como sujeto pasivo (contribuyente), un sujeto pasivo (el Estado), un
vínculo jurídico y un objeto (dar) el cual debe ser de un apercibimiento pecuniario.

La obligación fiscal consiste en el deber que tiene las personas que son
contribuyentes de cumplir con las disposiciones establecidas por la autoridad fiscal
dentro de un territorio.

Algunos de los aspectos que caracterizan a la obligación fiscal son:

1. El sujeto activo o acreedor siempre será el Estado y el sujeto pasivo o


deudor siempre será el Contribuyente;
2. Tiene su fuente solo en la ley;
3. Su objetivo es recaudar los recursos necesarios para sufragar el gasto
público de un ejercicio fiscal;
4. Surge con la actividad o hechos realizados por el sujeto pasivo;

Relación Tributaria

La relación tributaria en el Derecho Fiscal se refiere a la conexión jurídica que se


establece entre los dos sujetos que interviene en la obligación en virtud de un
tributo.

Para el nacimiento de una relación tributaria entre el Estado y el contribuyente es


necesario atender ciertos elementos de existencia, por ejemplo;

 Existencia de un hecho imponible;


 La capacidad contributiva del sujeto pasivo;
 Determinación de la obligación tributaria;
 Nacimiento de la deuda fiscal.

Dentro del mismo contexto, la relación tributaria es aquella sobre la que cual se
fundamenta el cumplimiento de las obligaciones fiscales por parte de los
contribuyentes.

Algunos estudiosos del Derecho Fiscal como lo es Margáin definen a la relación


tributaria como: “la relación tributaria que constituye el conjunto de obligaciones
que se deben el sujeto pasivo y el sujeto activo y se extinguen al cesar el primero
en las actividades reguladas por la ley tributaria.”

Objeto del Tributo

Toda legislación fiscal debe de hacer mención sobre qué es lo que se gravará. El
tributo hace referencia a aquello sobre lo que recaerá la obligación de contribuir y
que constituye la base imponible para la determinación y cálculo del impuesto. El
objeto del tributo es lo que desencadena la obligación tributaria.

Un ejemplo claro de esto es el caso del impuesto sobre la renta (ISR), en el cual el
objeto del tributo es la obtención de ingresos por parte del contribuyente en un
periodo. Por otro lado, tenemos el Impuesto al Valor Agregado (IVA) en el cual su
objeto es el consumo de productos, bienes o servicios.

El objeto del tributo siempre quedará precisado a través del hecho imponible que
son las leyes fiscales y reglamentos correspondientes.

La Fuente del Tributo


Se refiere al origen, móvil o motivo que da lugar a la obligación de contribuir a
través de un impuesto. Dicho con otras palabras, la fuente consiste en el hecho
generador que da lugar al nacimiento de la obligación tributaria.
Esta fuente puede ser una actividad económica, una transacción, la posesión de
ciertos bienes, o cualquier otro evento siempre que este contemplado dentro de
las legislaciones tributarias.

Algunos se refieren a la fuente del tributo como aquella actividad económica


gravada por el legislador, en al cual se pueden precisar diversos objetos y hechos
imponible, tomando en cuenta la actividad industrial como fuente de tributo
podemos obtener, entre otros, los siguientes: la producción, distribución, la compra
venta de primera mano, otras compraventas ulteriores, el consumo general, etc.,
de bienes materiales.

Hecho Imponible.

Las legislaciones fiscales mexicanas establecen una serie de presupuestos de


hechos o hipótesis a cuya realización asocia el nacimiento de una obligación
fiscal.

El hecho imponible se refiere al acontecimiento o situación que da origen a la


obligación tributaria, es decir, es el evento que activa la obligación de pagar un
impuesto. Dicho de otra manera, es la circunstancia que la ley considera como
generadora de la obligación de contribuir a través de un tributo.

Siguiendo con la tendencia del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y el Impuesto al


Valor Agregado (IVA), en el primero el hecho imponible puede ser la obtención de
ingresos por parte del contribuyente, mientras que en el segundo, el hecho
imponible puede ser la realización de una venta de bines o prestación de servicios
gravados. El hecho imponible es importante que sea identificado ya que es una
parte fundamental para aquellas personas que son obligadas a contribuir
fiscalmente.

Es importante hacer mención sobre la definición hecha por el propio Sainz de


Bujanda al respecto del hecho imponible y, es que para él, se trata del hecho
hipotéticamente previsto en la norma, que genera al realizarse, la obligación
tributaria, o bien, el conjunto de circunstancias, hipotéticamente previstas cuya
realización provoca el nacimiento de una obligación tributaria concreta.

Al principio se hizo alusión sobre la tipología de las obligaciones civiles, si bien, la


obligación tributaria específicamente tratándose de esta no es del orden privado,
toma algo de la tipología ya mencionada, ya que, de lo mencionado por el autor, la
obligación tributaria es una especie de obligación condicional.

Los hechos punibles en materia fiscal se pueden clasificar de dos maneras, dentro
de las cuales encontramos:

1. Materiales, dentro de los cuales se encuentra una segunda clasificación;


 Acontecimiento materia o económico tipificado por las normas
tributarias;
 Acto o negocio jurídico del derecho privado y transformado en hecho
imponible en la ley tributaria;
 Estado, situación o calidad de la persona;
 La actividad no comprendida de la persona;
 Percepción de un ingreso o una renta;
2. Económicos.

En algunos impuestos el hecho imponible es periódico, al periodo de tiempo


necesario para que se consume el hecho generador se le llama ejercicio fiscal el
que por regla general es de un ano y coincide con el año de calendario que
comprende del 1° de enero al 31 de diciembre, solo en casos excepcionales este
periodo puede ser mayor o menor.

Nacimiento de la Obligación Fiscal.

Mientras que en el hecho imponible se habla de una hipótesis que se mantiene


estática, al activarse se le asocia el nacimiento de la obligación y el hecho
generador es el hecho materia que se realiza en la actividad cotidiana que
actualiza la hipótesis normativa, por lo tanto, actualiza y nace la obligación fiscal
en el momento en que se lleva a cabo el hecho imponible.

La obligación fiscal nace en el momento en el que se actualiza el hecho imponible


establecido por la legislación tributaria. En otras palabras, la obligación fiscal surge
cuando se materializa el evento o situación que la legislación fiscal considera
como generador de la obligación de contribuir a través del impuesto.

Por ejemplo, en nuestra tendencia del Impuesto Sobre la Renta, si una persona
que percibe un ingreso sea el régimen o su actividad económica que se encuentre,
la obligación fiscal nace en el momento en que esos ingresos son percibidos o
generados.

De manera muy similar ocurre en el Impuesto al Valor Agregado, la obligación


fiscal nace en el momento en que se realiza una operación gravada por dicho
impuesto, como una venta de bienes o prestación de servicios.

De la Garza, alentado por Sainz de Bujanda, hace mención y énfasis en que es


importante reconocer el momento el cual nace la obligación fiscal, ya que permite
determinar lo siguiente:

 Distinguir el momento en que se origina la deuda impositiva y otros deberes


tributarios;
 Determinar la ley aplicable;
 Practicar la evaluación de las rentas o de los bienes gravados;
 Determinar el domicilio fiscal del contribuyente;
 Conocer la capacidad de obrar de los sujetos de la imposición;
 Determinar la época de pago y la exigibilidad;
 Determinar las sanciones aplicables.

Es importante detener en cuenta y no perder de vista que el momento en que nace


la obligación fiscal puede variar dependiendo del tipo de impuesto y de las
disposiciones específicas establecidas en la legislación fiscal correspondiente.
Determinación de la Obligación

Para la realización de este acto, determinación de la obligación fiscal se realiza en


el momento en que se cuantifica y establece el monto que debe ser pagado como
consecuencia del hecho imponible que ha ocurrido. Este proceso de
determinación implica calcular la base gravable, aplicar las tasas impositivas
correspondientes y considerar cualquier deducción, exención o estímulo fiscal que
pudiera ser aplicable según la legislación tributaria vigente.

Dentro de nuestro ejemplo, en el Impuesto Sobre la Renta una vez que se ha


generado el ingreso sujeto a gravamen, se procede a determinar la obligación
fiscal mediante el cálculo del impuesto a pagar sobre dicho ingreso, considerando
las disposiciones fiscales aplicables. De manera similar ocurre con el Impuesto al
Valor Agregado, la determinación fiscal implica calcular el monto del impuesto a
pagar sobre las operaciones gravadas realizadas por el contribuyente.

La determinación de la obligación fiscal consiste en la constatación de la


realización del hecho imponible o existencia del hecho generador y la precisión de
la deuda en cantidad líquida.

Emilio Margáin señala dos reglas que deben tenerse presentes al momento de
hablar de la determinación de la obligación tributaria:

 La determinación del crédito fiscal no origina el nacimiento de la obligación


fiscal;
 Las normas para la determinación del crédito fiscal y las bases para su
liquidación deben estar incorporadas en la ley y no en reglamentos.

Por palabras del propio Margáin, toda ley tributaria debe de consignar el
método apropiado para determinar el crédito fiscal a pagar, el mismo debe de
satisfacer los siguientes requisitos:
 Sencillez: el propio contribuyente lo puede entender y de esta manera
aplicarlo;
 Economía: no ha de obligar al contribuyente a erogar honorarios
elevados para su atención;
 Comodidad: se habla de comodidad cuando evita molestias
innecesarias e inútiles al contribuyente;
 Limpieza: se habla de que el método es limpio cuando evita el
contubernio entre el obligado y el personal hacendario. Si en el
transcurso de la determinación del impuesto se requiere un constante
contacto entre el causante y el fisco, el método corre peligro.

En el caso mexicano, queda a responsabilidad del contribuyente hacer


aplicación y la determinación de los créditos fiscales que están a su cargo
en determinado periodo fiscal.

Es importante destacar que la determinación de la obligación fiscal debe


realizarse de acuerdo a las normativas fiscales vigentes y siguiendo los
procedimientos establecidos por la autoridad tributaria competente.

Tarifas

Hablar de tarifas es hablar de porcentajes o cantidades fijas que se aplican para


determinar la cantidad de impuestos que una persona física o moral debe de
pagar a la autoridad tributaria representada por el Estado. Estas tarifas varían
dependiendo del tipo de impuesto, ya sea Impuesto sobre la renta, Impuesto al
Valor Agregado, 3% sobre la nómina, Impuesto Sobre Hospedaje, Impuestos
locales, entre otros.

En el caso del impuesto sobre la renta, por ejemplo, las tarifas fiscales determinan
que porcentaje de los ingresos debe pagarse como impuesto, y en el caso del
Impuesto al Valor Agregado, determinan el porcentaje que se debe agregar al
precio de venta de los bienes o servicios.
Basándonos en la teoría de Raúl Rodríguez Lobato, existen diversos tipos de
tarifas, sin embargo, las más utilizadas son;

 Derrama: cuando la cantidad que pretende obtenerse como rendimiento del


tributo se distribuye entre los sujetos afectos al mismo;
 Fija: está señalada en la ley exactamente la cantidad que debe pagarse por
unidad tributaria;
 Proporcional: es cuando se señala un tanto por ciento fijo, cualquiera que
sea el valor de la base, este tipo de Tarifa aplica en el Impuesto al Valor
Agregado, ya que dicho impuesto contempla tarifas del 16%, 0% y en
algunos caso se exenta de este impuesto.
 Progresiva: este tipo de tarifas aumentan al aumentar la base, de tal
manera que a aumentos sucesivos corresponden aumentos proporcionales.

Época de Pago de la Obligación Fiscal

La época de pago de una obligación fiscal se refiere al periodo de tiempo durante


el cual un contribuyente esta obligado a realizar el pago de impuesto u otras
obligaciones fiscales establecidas por las autoridades correspondientes. Esta
época de pago está determinada por las leyes fiscales y los reglamentos, y varía
dependiendo del tipo de impuesto u obligación de que se trate.

Por regla general, las autoridades fiscales establecen fechas límites para el
cumplimiento de las obligaciones fiscales, ya sea de forma mensual, bimestral o
anual, según el caso específico. El incumplimiento en la época de pago puede
acarrear sanciones e intereses moratorios, por lo que es de vital importancia para
los contribuyentes cumplir con los plazos establecidos para que de esta manera se
eviten consecuencias negativas.

La época de pago de la obligación fiscal es el plazo o el momento establecido por


la ley para que se satisfaga la obligación, con lo señalado con anterioridad, el
pago debe de ser realizado dentro del plazo estipulado.
Emilio Margáin y López Velarde hablan sobre distinguir los siguientes casos entre
el nacimiento de la obligación y el pago de la misma:

 El gravamen se paga antes de que nazca la obligación fiscal, pues se paga


el futuro crédito fiscal y después se realizan los actos generadores del
mismo;
 El gravamen se paga al momento en que nace la obligación fiscal. El
momento de causación y pago surgen en un mismo momento.
 El gravamen se paga después de que nace la obligación fiscal. Primero se
realizan los actos que dan origen a la obligación fiscal y después se paga
dicha obligación.

A petición del contribuyente, el Código Fiscal de la Federación prevé la


posibilidad de hacer una prorroga en la época de pago de la obligación fiscal,
la autorización podrá consistir en un pago a plazo diferido o parcialidades
siempre que no exceda de un término de 36 meses. De la misma manera,
cesará la autorización del pago diferido o en parcialidades cuando:

 Desaparezca o resulte insuficiente la garantía del interés fiscal;


 El contribuyente sea declarado en quiebra;
 El contribuyente no pague alguna de las parcialidades a más tardar
dentro de 15 días después.

Exigibilidad de la Obligación Fiscal

La exigibilidad de la obligación es la posibilidad de hacer efectiva dicha obligación


fiscal, aún en contra de la voluntad del obligado, en virtud de que no se cumplió
durante la época de pago. Mientras la época de pago no se venza, la obligación
aun no puede ser exigible.

También podemos referirnos a la exigibilidad al momento a partir del cual la


autoridad fiscal tiene el derecho de requerir el cumplimiento de la obligación por
parte del contribuyente. Es el momento en que la autoridad puede exigir el pago
de los impuestos u otras obligaciones fiscales de acuerdo con lo establecido en la
ley.

La exigibilidad de una obligación fiscal está determinada por las disposiciones


legales y los plazos establecidos para el cumplimiento de dichas obligaciones. Por
ejemplo, en el caso del Impuesto Sobre la Renta, la exigibilidad de la obligación
puede estar relacionada con la presentación de declaraciones fiscales o con los
plazos para el pago de impuestos.

Es importante para los contribuyentes prever la exigibilidad de sus obligaciones


fiscales ya que el incumplimiento puede acarrear sanciones y recargos por parte
de la autoridad fiscal.

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