VICIOS DEL CONCENTIMIENTO Y SUS CONCECUENCIAS JURIDICAS

Los vicios del consentimiento son aspectos fundamentales en el derecho, ya que afectan la validez
de los contratos y otros actos jurídicos. En México, al igual que en muchos sistemas jurídicos, se
reconocen varios vicios del consentimiento, entre los que se encuentran el error, el dolo, la
intimidación y la violencia.

De acuerdo a la Tesis Aislada en Materia Civil con Registro digital 241836 de la Suprema Corte de
la Justicia de la Nación nos dice que:

“El error, el dolo, la intimidación o la violencia, son instituciones del derecho que pueden
viciar el consentimiento, o más ampliamente, la voluntad. En todos estos casos el
consentimiento existe, sólo que se encuentra viciado, por no haberse emitido
inteligentemente. El error es una creencia no conforme con la verdad, y el dolo, en rigor,
es tan sólo el error que sufre un contratante, por artes del otro o de un tercero, en
connivencia con este, quienes pueden concretarse, además a mantenerlo en el que aquél
por sí mismo incurrió.”

Con esto se puede entender que los vicios del consentimiento es la expresión de la voluntad
expresa o tacita para:

Crear

Modificar Algún tipo de Derecho u Obligación

Extinguir

Así que son aquellos que, de forma dolosa o culposa, logran obtener el consentimiento para crear,
modificar o extinguir un derecho u obligación, sin que el consentimiento se conceda de forma
plena.

En el Código Civil Federal se establece que los vicios del consentimiento son:

ERROR Es una percepción inexacta por una de las partes en relación al acto jurídico
realizado, esta idea inexacta puede recaer sobre la naturaleza del acto, objeto o su identidad.

También se considera error de derecho relacionado a la legislación aplicable o su interpretación.

Por ejemplo, si una de las partes firma un contrato creyendo que está celebrando un acuerdo
sobre una cosa o situación diferente a la que realmente está siendo objeto del contrato, se puede
argumentar que existe un error en el consentimiento. Este error puede ser tanto sobre hechos
presentes como sobre hechos futuros.

El error conlleva a la NULIDAD DEL CONTRATO, sin embargo, dependerá del tipo de error si esta
nulidad será relativa o absoluta. Si el error recae sobre el objeto del contrato puede conllevar a la
NULIDAD ABSOLUTA, pero si el error recae sobre una porción o parte del contrato, puede surgir
sus efectos y llevar una NULIDAD RELATIVA lo que no invalidaría del todo el acto jurídico.

DOLO implica engaño por parte de una de las partes. Puede manifestarse de diversas
formas, como la ocultación de información relevante, la emisión de afirmaciones falsas o la
manipulación de la otra parte para inducirla a realizar un acto jurídico que, de no mediar el dolo,
no habría realizado.

Este vicio de la voluntad conlleva también a la nulidad atendiendo del grado de error al que se
induce y algo primordial es que el dolo no solo se contempla entre las partes sino también de
algún tercero que lo haya inducido a obtener el consentimiento como por ejemplo “asesores
inmobiliarios”.

LA INTIMIDACIÓN Y LA VIOLENCIA el consentimiento obtenido de estas maneras es NULO

ABSOLUTAMENTE ya que implican la perdida de la vida, honra, libertad o salud ya sea propia del
contratante o de uno de sus familiares; son vicios del consentimiento que involucran coacción
física o psicológica sobre una de las partes para que consienta en un contrato o acto jurídico. La
diferencia principal entre ambas radica en la naturaleza de la coerción: la intimidación implica
amenazas o presiones psicológicas que hacen temer un mal futuro, mientras que la violencia
implica el uso de fuerza física o amenazas inmediatas.

Cuando se reclama una NULIDAD POR VIOLENCIA se cuenta con un plazo de prescripción
de 6 meses desde que a cesado el vicio del consentimiento.