Está en la página 1de 63

III.

ENFOQUES DE
TERAPIA GRUPAL.

3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.


3.2. Terapia grupal Adleriana

Laura Eguia Magaña


Mayo 2017
3.1. El enfoque
psicoanalítico de grupos.

3.2. Terapia grupal Adleriana

Laura Eguia Magaña


Mayo 2017
3.1. El enfoque
psicoanalítico de grupos.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Algunas disciplinas científicas y autores,


fuera del campo clínico, han dado valiosos
elementos al campo grupal, a la
aportación de Freud y a los pioneros de la
psicoterapia de grupo, para después
centrarme en la psicoterapia de grupo
psicoanalítica.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• La teoría psicoanalítica, que plantea que


en la estructuración psíquica del sujeto los
grupos fundantes son el vínculo madre -
hijo y la relación edípica, ambos claves
para la comprensión del aquí - ahora
grupal.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Su segundo modelo de personalidad


incluye la noción de superyó, la conciencia
moral del sujeto humano, heredera de la
cultura ética de los progenitores y de su
grupo social.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Esta idea de que lo social es


internalizable por el sujeto hasta constituir
su propia personalidad abre el camino a la
concepción del mundo interno de la
persona como sociedad mental en la que
viven todos los personajes y objetos que
tienen relevancia para el sujeto.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• La psicoterapia de grupo psicoanalítica


que es la metodología que nos ocupa
podemos es aplicable a grupos:
• Breves
• Intermedios y
• Prolongados.
• Esta técnica es reconocida con validez y
que promueve resultados terapéuticos.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

FREUD Y LOS PIONEROS DE LA


PSICOTERAPIA DE GRUPO:
• En el campo clínico, dentro de la teoría
psicoanalítica, es Freud, quien consigue integrar
aspectos fundamentales para dar cuenta de la
conducta del sujeto.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• La integración entre, la conducta normal y


patológica, los aspectos conscientes e
inconscientes, y lo psíquico y lo somático.
• En lo que se refiere a la relación entre individuo
y sociedad, aporta la trascendencia de la
historia infantil y familiar en la estructuración de
la personalidad del sujeto.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Descubre dos conceptos fundamentales, el


“superyo” y la “transferencia”; en el segundo
modelo de la personalidad incluye la noción de
“superyo” como una de las instancias del
aparato psíquico, constituido por la
internalización de las relaciones sociales más
significativas .
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• De esta forma, considera que la conciencia


moral del hombre es la heredera de la cultura
ética de sus progenitores y de su grupo social.
• La transferencia, muestra los aspectos
subjetivos de la relación a nivel inconsciente, el
sujeto, en el aquí-ahora actual, repite las
relaciones de su historia infantil.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Aunque Freud nunca trabajó con grupos, su


psicología psicoanalítica muestra en diversos
textos su interés por el fenómeno de los grupos,
desarrollando conceptos de gran utilidad para el
campo de lo grupal.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• En su trabajo "Psicología de las masas y


análisis del yo", “Totem y tabú”del año 1921,
discute los planteamientos de Tarde y Le Bon y
plantea que la psicología individual es, al
mismo tiempo y desde el principio,
psicología social.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Expresa textualmente que "en la vida anímica


individual aparece siempre integrado el otro
como modelo, objeto, auxiliar o adversario".
Adelanta la hipótesis de que “en la esencia del
alma colectiva hay relaciones amorosas”
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• “El individuo se une por lazos libidinosos al jefe


o a una idea y, por otro, a los otros miembros de
la comunidad, siendo los primeros más
significativos”. Para Freud, el vínculo social se
basa en la transformación de un sentimiento
primitivamente hostil en un apego positivo,
que en el fondo no es más que una
identificación, mantenida por el hecho de
compartir un mismo amor con el mismo
objeto.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Define el concepto central de “identificación”


como “la manifestación más temprana de enlace
afectivo a otra persona”. Recuerda que para
Mac Dougall la formación de una masa
precisaba que existiera entre los miembros
algo en común, un mismo interés que los
enlazara a un mismo objeto.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Refiere que los procesos de identificación y la


relación con el líder como mecanismos básicos
para la comprensión de lo que sucede en "lo
colectivo". Freud en contraposición a la idea
de Le Bon acerca del hombre como animal
gregario, considera que es un animal de
horda, un elemento constitutivo de una
horda conducida por un jefe.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Menciona por lo anterior, que, la masa, la


identificación se da por la relación afectiva con
el caudillo; de ese modo, los individuos
reemplazan su ideal del yo por un mismo objeto
y como consecuencia hacen una identificación
recíproca de sus yoes.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Estos lazos afectivos explican la regresión de


los sujetos, la disminución de la intelectualidad y
la intensificación del afecto, con un paso al acto,
mecanismos que no se dan cuando la masa
está organizada.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Para Freud el primer elemento de unidad en un


grupo es la existencia de un líder, considerando
que el lazo entre los miembros se basa en la
relación que cada uno tiene con dicho líder,
vínculo de origen libidinoso.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Para Freud dos o más personas constituyen


un grupo, si han escogido el mismo objeto,
modelo o los mismos ideales en su superyo
y consiguientemente se han identificado
entre sí.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• La teoría freudiana del grupo ha influido mucho


sobre la terapia grupal y ha ayudado a la
comprensión de destacados fenómenos
grupales, pero es preciso seguir investigando
para conocer otros elementos, además de los
que se centran en la relación de dependencia
de los miembros respecto al líder.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Sucesivas investigaciones dentro del campo


psicoanalítico corresponden a: Devereux, 1977,
quien, desde el etnopsicoanálisis, señala la
importancia de la observación e investiga las
implicaciones del observador en lo
investigado así como la distorsión motivada
por los prejuicios.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• Searles, 1980, quien, desde la clínica, plantea


como el terapeuta se incluye en los
movimientos de simbiosis del grupo y, por
último, Bleger, 1971, quien se sitúa en la
frontera entre psicología social y grupal y
considera que hay dos tipos de sociabilidad,
dos modos de relación en los grupos:
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• “La interacción” y la “sincrética”, planteando


que el sincretismo es el vínculo más poderoso
entre los miembros de un grupo sin el cual la
interacción no sería posible.
3.1. El enfoque psicoanalítico de grupos.

• La noción de sociabilidad sincrética tiene


relación con la noción de serialidad de Sartre,
con ella Bleger trata de mostrar los aspectos
preverbales y de no relación en los grupos
planteando que se constituye a partir de los
estratos de la personalidad no discriminada
de los sujetos.
3.2. Terapia grupal
Adleriana
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Las primeras experiencias con grupo


dentro del campo clínico se realizan a
comienzos del siglo XX, los pioneros de la
psicoterapia de grupo utilizan el método
grupal con pacientes orgánicos y no con
enfermos psiconeuróticos, parece que es
Adler, discípulo de Freud,
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Adler, pone en marcha los primeros


grupos terapéuticos, de carácter público y
gratuito, en Europa, aunque su
intervención se centra más en los
aspectos racionales que en los
inconscientes.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Conceptos básicos de psicología


adleriana:
a) Concepción unitaria de la personalidad:
La Psicología Individual presenta la vida
psíquica como unidad. La expresión
“Psicología Individual”, precisamente,
deriva del término latino “in-dividuus”
(indivisible).
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Con ello, Adler se oponía a la concepción


filosófica elementarista y mecanicista,
presente en la obra de Freud, consistente
en analizar la psique en sus partes,
componentes y estructuras divididas.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Con su idea de totalidad, Adler recoge las


influencias de la filosofía de Dilthey,
Virchow, Stern, y Spranger .
• Contrario a la idea de Freud de las
instancias psíquicas (el Yo, Superyo, y
Ello) divididas y en constante lucha entre
sí, Adler concibe el ser humano como
unidad psicológica.
3.2. Terapia grupal Adleriana

b) El sentimiento de inferioridad y su
compensación:
Según Adler, todo ser humano parte,
como niño, de una posición inicial de
inferioridad que le produce sentimientos
de imperfección, desamparo e
insignificancia, experimentados en los
primeros años de la vida.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Esta experiencia de inferioridad conlleva


la actitud del sujeto a la compensación, es
decir, sus intentos para procurar superar
esta posición adversa inicial.
• Todo niño parte de una posición, donde él
mismo se percibe como pequeño, incapaz
e indefenso.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Encuentra que los adultos que le rodean


están investidos de más capacidad, son
mayores, más fuertes y completos,
mientras que él es menos fuerte, menos
capaz y menos completo.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Esta primera percepción le predispone a


desarrollar su primer esquema mental de
la vida, “el estar abajo frente al estar
arriba”.
• A partir de esta percepción, el niño trata
de estar arriba, fijándose un objetivo
mediante una ficción o meta a seguir.
3.2. Terapia grupal Adleriana

c) El concepto de finalidad:
Para Adler, la conducta y toda la actividad
psicológica están dirigidas de manera
unitaria hacia los objetivos que la persona
persigue.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• La psicología de Adler no es retrospectiva


ni casualista, como la freudiana, sino
finalista y prospectiva (también llamada
teleológica, del griego “telos”, fin).
• Se dirige más hacia el futuro que hacia el
pasado. La cuestión fundamental para
entender el comportamiento de una
persona.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• No es preguntar “¿de dónde?” o “¿por


qué?” sino “¿hacia dónde?” o “¿para
qué?”.
• La conducta humana solo puede ser
comprendida por el objetivo final que
persigue el individuo.
3.2. Terapia grupal Adleriana

d) Ficcionalismo:
El ser humano se construye ficciones,
formas idiosincrásicas de percibirse a sí
mismo y al mundo, que le son necesarias
para orientarse en su entorno, para guiar
sus sentimientos y actitudes, para
planificar y llevar a cabo sus actos.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Pero sus ficciones pueden ser mejores o


peores, más o menos útiles (cómo
diríamos hoy).
• A lo largo del desarrollo de su teoría, Adler
admite que todos construimos ficciones,
pero distingue entre ficciones “útiles” y
ficciones “no-útiles”.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Una ficción útil nos permite orientarnos


mejor, es decir, encontrar soluciones para
los problemas que nos presentan la vida,
para llevarnos mejor con los demás; una
ficción es útil, cuando contribuye al bien
de la comunidad y no cuando es útil
exclusivamente para la mayor gloria del
individuo.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Con esto, Adler se aleja de la idea


puramente pragmatista de las ficciones
(“sirven o no sirven”) al imponer un criterio
ético a los propósitos de la persona.
• El ficcionalismo adleriano se mueve en el
ámbito del constructivismo social en
psicología.
3.2. Terapia grupal Adleriana

e) El Sentimiento de Comunidad:
Llamado también Interés Social. Adler
entiende la tendencia afectiva y cognitiva
de las personas a orientar su conducta
hacia la convivencia, la cooperación y la
realización de las exigencias sociales, las
tareas de la vida.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Un aspecto importante del Sentimiento de


Comunidad es el concepto de
cooperación; la cooperación es un
requisito indispensable para el desarrollo y
progreso de la humanidad.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Adler describe al ser humano como ser


social, que puede orientarse mediante su
decisión personal a la cooperación e
interés por sus semejantes.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Aunque el Sentimiento de Comunidad y la


cooperación son potencialidades innatas
(en cierto modo Adler se adelanta a la
teoría del apego de Bowlby), deben ser
preparadas y ejercitadas mediante la
educación.
3.2. Terapia grupal Adleriana

f) Estilo de Vida: La personalidad orientada


a metas:
El estilo personal de vida conlleva las
metas, las estrategias y métodos para
conseguir los fines o propósitos
personales, tanto conscientes como
inconscientes.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Por motivos de más claridad, la parte del


Estilo de Vida que se refiere a los
métodos o conductas inconscientes para
alcanzar esos fines lo podemos llamar
"plan inconsciente de vida".
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Los procesos mentales dominantes en el


funcionamiento del Estilo de Vida están en
torno a la "apercepción tendenciosa“
(atención selectiva): estos mecanismos
inconscientes seleccionan los criterios de
intereses y relevancia de la percepción
subjetiva y la gama de experiencias a las
que atiende el sujeto.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Adler cree que los primeros recuerdos que


tiene el sujeto de su vida reflejan el ámbito
selectivo del Estilo de Vida, ya que éste
guía la actividad de la misma memoria.
Por ello pedía a sus pacientes el relato de
los mismos.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Entre el consciente y el inconsciente no


hay contradicción, ya que ambos son
expresiones del mismo Estilo de Vida.
Para Adler, la divergencia entre actitudes
conscientes y propósitos inconscientes es
sólo aparente, y afirma que el ser humano
hace lo que (inconscientemente) quiere.
3.2. Terapia grupal Adleriana

g) Salud y trastorno mental:


Al enfocar los problemas mentales o
emocionales los adlerianos damos
prioridad al interés por la individualidad del
paciente más que la especificidad del
trastorno.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Aunque los síntomas deben considerarse


en la intervención terapéutica, interesa
mucho más el carácter, la personalidad o
el Estilo de Vida de la persona en
cuestión.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• La psicología adleriana presenta una


Concepción Unitaria de la Psicopatología:
La normalidad, las neurosis y las psicosis
no son entidades totalmente separadas y
dicotómicas, sino que existen en un
continuo cuyos polos son El Sentimiento
de Comunidad y el Afán de Superioridad.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Tanto en la persona normal, la neurótica,


como la psicótica, todas sus acciones
normales y "patológicas" están vinculadas
a su Estilo de Vida (rasgos de
personalidad orientados finalistamente).
3.2. Terapia grupal Adleriana

• En la génesis y mantenimiento de los


trastornos mentales influyen varios
factores (modelo general de
psicopatología): las deficiencias reales o
percibidas de tipo físico-psíquicosocial (las
llamadas inferioridades).
3.2. Terapia grupal Adleriana

• El aprendizaje y recuerdo (relacionado


con la finalidad a menudo inconsciente de
los síntomas o conductas problemáticas) y
los esquemas aperceptivos del estilo de
vida (ideas o esquemas del sujeto de sí
mismo, los otros y la vida que sirve a sus
propósitos inconscientes).
3.2. Terapia grupal Adleriana

• La Psicología Adleriana mantiene que una


persona psíquicamente sana posee un
alto grado de Sentimiento de Comunidad.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Adler va más allá de esto todavía, ya que


al introducir la noción del Sentimiento de
Comunidad en su teoría, establece un
criterio ético de salud mental: el grado de
sentimiento social a veces llamado
simplemente “valor”, que posee un
individuo determina su adaptación a la
comunidad y con esto, el grado de su
salud mental.
3.2. Terapia grupal Adleriana

• Entendemos por salud mental no sólo la


ausencia de psicopatología, sino en un
sentido amplio el bienestar psicológico en
general, la capacidad al desarrollo
personal, al desenvolvimiento adecuado
en las tareas de la vida – amor, trabajo y
amistad - y la capacidad de afrontar y
resolver problemas de manera adecuada.
Bibliografía
• Bleger, L. N. y Pasik, N. (1997). Psicoanálisis
grupal. Buenos Aires: Tekné.
• Alonso, A. y Swiller H. (1995) Grupo de proceso para
entrenamiento de residentes psiquiátricos. En A. Alonso
y H. Swiller (1995). Psicoterapia de grupo en la práctica
clínica. México: Manual Moderno.
• -Úrsula E. Oberst and Alan E. Stewart: Adlerian
Psychotherapy: An Advanced Approach to Individual
Psychology. Routledge, 2002
• Asociación Española de Psicología Adleriana:
https://www.facebook.com/asociacionadleriana?fref=nf

También podría gustarte