Lectura: Axline V., "Terapia de juego, México, Editorial Diana", (pags.18-77).

Luis Vázquez Sánchez

Maestría en Psicopedagogía Clínica Infantil.

Centro de Estudio, Clínica e Investigación Psicológica

Psicoterapia de Grupo en la Infancia

Dr. Karina Bravo

24 de Marzo de 2024
 Introducción

En su obra, “terapia de Juego” Axline describe los principios fundamentales de la

terapia del juego, que incluyen la creación de un ambiente terapéutico seguro y de
confianza, la aceptación incondicional del niño, la facilitación de la expresión emocional a
través del juego y el respeto por el ritmo y la autonomía del niño en el proceso terapéutico.
La terapia del juego se basa en la creencia de que los niños tienen recursos internos para
el crecimiento y la curación, y que el juego es el medio natural a través del cual pueden
acceder a estos recursos y desarrollar habilidades de afrontamiento y resolución de
problemas.

La terapia no directiva

La terapia no directiva en el juego, según Virginia M. Axline, es un enfoque

terapéutico que se centra en permitir al niño expresarse y explorar sus pensamientos,
sentimientos y experiencias a través del juego de manera libre y sin intervenciones
directivas por parte del terapeuta. La autora enfatiza la importancia de crear un ambiente
terapéutico seguro y de confianza donde el niño se sienta cómodo para expresarse de
manera auténtica.

La terapia no directiva aplicada en grupo

La terapia no directiva aplicada a la terapia de grupo se caracteriza por varios

aspectos fundamentales que fomentan un ambiente terapéutico centrado en los
participantes. Esta fomenta la autonomía de cada miembro del grupo para expresarse
libremente y compartir sus pensamientos, sentimientos y experiencias.
El terapeuta actúa como facilitador, brindando un espacio seguro y de apoyo donde los
participantes puedan explorar sus preocupaciones y trabajar en sus objetivos terapéuticos
de manera autónoma.

A lo largo de lectura, se presentan los casos de Tom y Ronny, dos experiencias que
ilustran de manera profunda los principios de la terapia no directiva tanto a nivel individual
como grupal.

Tom, un niño introvertido y retraído, encontró en la terapia no directiva un espacio

seguro para explorar sus emociones y desafíos internos a través del juego. Al adoptar una
postura de aceptación incondicional y proporcionarle un ambiente libre de juicios, pude
presenciar cómo Tom gradualmente comenzó a expresarse más abiertamente, revelando
sus miedos y preocupaciones más profundos. La terapia no directiva le permitió a Tom
tomar el liderazgo en su proceso terapéutico, explorando su mundo interno de manera
autónoma y encontrando sus propias respuestas a medida que avanzaba en su camino de
crecimiento personal.

Por otro lado, el caso de Ronny en el contexto de la terapia de grupo destacó el

poder transformador del juego y la interacción grupal en el proceso terapéutico. A través de
actividades de juego dirigidas por los intereses del grupo y facilitadas por un terapeuta no
directivo, Ronny y los demás miembros del grupo pudieron explorar dinámicas de relación,
conflictos internos y patrones de comportamiento de manera significativa. La terapia no
directiva en grupo promovió la colaboración, el apoyo mutuo y la comprensión entre los
participantes, generando un ambiente de confianza y crecimiento colectivo.

Estos casos nos muestran la importancia de confiar en el proceso terapéutico y en

el potencial de crecimiento de cada individuo, ya sea a nivel personal o grupal. La terapia
no directiva, basada en la aceptación incondicional, la escucha activa y el respeto por la
autonomía de cada persona, ha sido una herramienta fundamental en la práctica
terapéutica, permitiendo a las personas en su camino llegar al autodescubrimiento, el
empoderamiento y el bienestar emocional.

El terapeuta

El terapeuta en la terapia no directiva actúa como un facilitador empático, mostrando

comprensión y aceptación incondicional hacia el paciente. Esta actitud de empatía y
apertura crea un ambiente seguro y de confianza que permite en este caso, al niño,
expresarse libremente. El terapeuta no directivo busca fomentar la autonomía del paciente,
permitiéndole tomar decisiones y liderar su propio proceso terapéutico. El terapeuta brinda
apoyo y guía, pero respeta la capacidad del paciente, , para explorar y encontrar sus propias
respuestas.

El terapeuta no directivo tiene como objetivo principal promover el crecimiento

personal, facilitando su autoexploración, resolución de problemas y desarrollo de
habilidades emocionales.

El padre o padre sustituto

El padre o figura paterna juega un papel crucial como fuente de apoyo y

comprensión para el niño durante la terapia de juego. Su presencia afectuosa y empática
puede fortalecer la relación terapéutica y proporcionar al niño un sentido de seguridad
emocional.

El padre o padre sustituto puede servir como modelo de comportamiento positivo

para el niño, demostrando habilidades de comunicación efectiva, resolución de problemas
y manejo de emociones. Esto puede influir de manera significativa en el desarrollo
emocional y social del niño dentro y fuera de la terapia.

El terapeuta puede trabajar en colaboración con el padre o figura paterna para

establecer objetivos terapéuticos claros y desarrollar estrategias de apoyo en el entorno
familiar. La comunicación abierta y la colaboración mutua son fundamentales para el éxito
del proceso terapéutico.

Conclusión

En conclusión, el libro "Terapia de juego" de Virginia M. Axline enfatiza la relevancia

del papel del padre o padre sustituto como parte integral del proceso terapéutico del niño
en la terapia no directiva en juego. Su participación activa, apoyo emocional y colaboración
con el terapeuta son aspectos fundamentales para el éxito y beneficio del niño en la terapia
de juego.

A manera de cuestionamiento se proponen dos preguntas que se obtienen del de

análisis, de cómo esta lectura y sus métodos nos pueden ayudar en el proceso terapéutico
no directivo.

¿Cómo ha impactado el enfoque no directivo en la forma en que se abordan las sesiones

de terapia de juego con los pacientes, en este caso infantes?

¿En qué medida? La terapia no directiva en juego, tal como se describe en el libro ¿puede
ser efectiva en el tratamiento de diferentes problemas emocionales y de comportamiento
en niños y adolescentes?

Axline, V. M. (2004). Terapia de juego. México, D.F.: Editorial Diana. (Obra original publicada en 1947). a.
Edición, Julio de 1975, 19a. Impresión, Marzo de 2003