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Universidad Nacional de Tucumán

Facultad de Filosofía y Letras.


Licenciatura y Profesorado en Letras 1° Año - Ciclo Lectivo 2023
Espacio curricular:Introducción a los estudios Literarios
Jefe de trabajos Prácticos:De los Rios, Pilar.
Comisión: Martes 14:30
Estudiante: Garbin Debora, Judit
D.N.I: 36441234
Tema:ficha de lectura: Dostoievski

Fiódor Mijáilovich Dostoievski (Moscú, 11 de noviembre de 1821 – San Petersburgo, 9 de


febrero de 1881) Fue uno de los principales escritores de la Rusia zarista, cuya literatura
explora la psicología humana en el complejo contexto político, social y espiritual de la
sociedad rusa del siglo XIX.
Es considerado uno de los más grandes escritores de Occidente y de la literatura universal.

Sinopsis: En Los hermanos Karamázov, última obra y síntesis monumental de su


pensamiento y de su arte, desarrolla su íntimo convencimiento de la necesidad de un cambio
radical en los destinos sociales y morales de la humanidad. El autor plasma un trágico cuadro
de la sociedad de su tiempo y denuncia la corrupción engendrada por el poder del dinero, las
pasiones incontroladas, el egoísmo y la ignominia espiritual.

Esta novela -la última obra del gran escritor- expone un cuadro acabado de la sociedad rusa
de mediados del siglo XIX. Dostoievski es el maestro por excelencia en pintar con palabras
cómo las personas establecen relaciones perversas, se manipulan y corrompen por dinero, y
manifiestan pasiones bestiales. La muerte de Karamázov -un terrateniente cruel y cínico-
hace recaer la sospecha sobre dos de sus hijos, que tienen más de un motivo para odiar a su
padre.

El tercer hijo, Aliosha, bondadoso y puro, está libre de todo cargo y se proyecta hacia el
futuro. En esta novela se resume la preocupación filosófica y religiosa de Dostoievski: la
hermandad universal, la salida de una Rusia "bárbara" y la recuperación de un verdadero
sentimiento religioso.

Introducción: A partir del fragmento de la obra “Los Hermanos Karamazov”, Capítulo III-
Los Hermanos se conocen, de Fiodor Dostoievski, se abordarán algunos conceptos cuya
intención será reflejar los procesos literarios que pueden reconocerse en la obra y de qué
manera inciden en la percepción y en el enfoque predominante de la época.

Las teorías propuestas para la ficha de lectura y su posterior análisis, se relacionarán con
diferentes autores y se tratará de conceptualizar lo siguiente:

Bajtín y los géneros discursivos. La actividad humana como praxis.

La actividad humana es diversa e inagotable. Parte de esto, puede trasladarse al ámbito


literario, artístico y estético ya que los mismos forman parte de una de las más grandes
concepciones que giran en torno a toda recepción social y cultural. La comunicación va a
conformarse entre dos actores: el que escribe (transmite) y el que lee (recibe). Sin embargo,
Bajtín presenta un camino que se bifurca, se transforma y se traduce de diferentes maneras; y
esto sucede a través de los géneros discursivos. También, afirma que el lenguaje participa
en la vida a través de los enunciados concretos que lo realizan, así como la vida
participa del lenguaje a través de los enunciados.

Dentro de la intención discursiva, las relaciones establecidas entre un contexto en particular


son las que van a ocupar una determinada posición en la esfera de la praxis humana. Por eso,
las libres intenciones discursivas del hablante no van a desviarse de las formas obligatorias de
cualquier lengua como así tampoco de las formas obligatorias discursivas. De esta manera,
Bajtín ubica a los géneros discursivos dentro de las formas normativas de enunciados.

En el caso del fragmento de “Los hermanos…”, Dostoievski introduce, denominado por


Bajtín, un género primario. Éste, es concebido como tal porque puede asociarse con lo que
se entiende como aquella “comunicación inmediata”, como la comunicación discursiva que
posee estructuras y costumbres familiares e íntimas que son los principios básicos en donde
pueden interactuar diferentes ideologías de un determinado grupo social y a su vez, otorgan
identidad cultural e histórica. Fuera del acto verbal (diálogo) representado en la obra, aquí es
importante destacar la injerencia de lo que Bajtín denomina un género secundario: resalta su
complejidad, ya que surgen de situaciones culturales que así se presentan; ya sea desde su
desarrollo y organización como de su proceso de escritura. Entonces, cabe resaltar otro
concepto importante: Bajtín dice que los géneros secundarios adquieren un carácter especial,
ya que pierden su relación inmediata con la realidad y con los enunciados reales de otros.
Esto resulta ambiguo, porque la realidad del lector (como receptor) provoca siempre una
respuesta respecto a la participación de la realidad dentro de la novela de Dostoievski; sin
embargo, puede entenderlo como un acontecimiento artístico, porque no puede apartar
completamente la totalidad del enunciado como ajeno a la vida cotidiana.

La obra de Dostoievski refleja lo que afirma Bajtín: “Toda comprensión de un discurso


vivo, de un enunciado viviente, tiene un carácter de respuesta (…) toda comprensión
está preñada de respuesta y de una u otra manera la genera: el oyente se convierte en
hablante.”

Dostoievski encuentra en la literatura una respuesta crítica a las crisis filosóficas y de


pensamiento, que luego refleja en sus obras y que fueron vividas en su propio tiempo.
Algunas cuestiones que se relacionan con las distintas obras de este autor y que atañen lo
religioso son el cristianismo Ortodoxo ruso y su vínculo con la “salvación”: para Dostoievski,
la religión está estrechamente ligada con el arte y la literatura, todos son partes constituyentes
de la búsqueda de Dios.

La construcción de las voces. La libertad a través de las palabras.

Entre todos los géneros existentes para Bajtín, la novela es el género que representa la mayor
complejidad en la construcción de ideas y va a desmitificar la idea de una sola voz (la del
autor). Las voces erigen varios mundos y cada una se hace escuchar dentro del texto y cada
una de ellas representan, para Bajtín, diferentes voluntades. Cada ser, representado en una
voz, comete el acto de comunicar. Es decir, existe una relación especial del autor con las
palabras de los personajes. Bajtín sostiene que las voces de los personajes son independientes
de este autor (que se ausenta) y a la vez, son equitativas; porque ninguna voz prevalece sobre
otra; son parte un “nuevo mundo de sujetos autónomos.”

En esta libertad de creación, también se liberan las voces y se construyen distintas


conciencias (que es ajena a la otra) y se apartan de la imagen objetual normal de la novela
tradicional a la que refiere Bajtín. En estas características, radican las principales diferencias
en el mundo polifónico que fuera creado por Dostoievski. La conciencia ajena se concibe
como la esencia del sujeto que se representa, en su concepto de sujeto pleno y no como un
sujeto cargado de rasgos específicos postulados por el autor. Es el sujeto con su propia voz el
que define su propia esencia y así, es la única manera de ser comprendido por el autor. Por
otro lado, Bajtín incluye un personaje más: el observador. La justificación de esta teoría es su
característica dialógica; esto refiere a la carencia de una conciencia objetiva que opaca otras
conciencias y da paso a la interacción entre ellas sin interpelar a la elección objetiva del
observador, sino a su participación. Bajtín concluye con esto que el resultado es una nueva
posición que supera a la novela monológica.

La comprensión es una de las virtudes que cada esfera desarrolla y la única puerta de acceso
hacia la libertad. La polifonía de Dostoievski representa esta libertad. La lucha de opiniones e
ideologías apelan a lo contemporáneo, pero jamás “la palabra propia” va a significar la última
palabra; porque desde aquí es donde parte la libertad y la cocreación. Las estimaciones más
importantes por las que son juzgadas las obras de Dostoievski son la comprensión y
valoración. En este sentido, Bajtín va a proponer distintos puntos de vista: la comprensión es
activa y por lo tanto, se nutre de la creación, la continúa y multiplica la riqueza artística de la
humanidad. El que comprende, sigue creando. Este acto es completo, porque las diferentes
visiones del mundo que cada cocreador carga en sí mismo, van a influir en la valoración de
las obras, en sus variantes en el tiempo y debe someterse a los cambios, los rechazos y las
discusiones; porque en el acto de aportar siempre algo nuevo, deben predominar los cambios
que generan un enriquecimiento mutuo.

Conclusión.

La Literatura siempre es un diálogo. No se debe adoptar el pensamiento que sitúa a la


Literatura como un simple hecho de definiciones y posturas preestablecidas por parte del
autor. En el caso de la obra de Dostoievski, la creación/crítica desaparece y se produce el
encuentro entre las distintas voces que otorgan un significado pleno que emerge del texto.
El acto de la comunicación lingüística, muchas veces rechaza, niega y reelabora aquellos
enunciados que intentan superar el dualismo sujeto-objeto, ya que todo enunciado es un
eslabón en la cadena, muy complejamente organizada, de otros enunciados. Entonces,
para entender a la Literatura como diálogo, es necesario para Bajtín, conocer todo aquello que
se mueve alrededor de toda comunicación lingüística. Esto es, entender que no sólo es activo
aquel que está hablando, sino que el receptor es capaz de comprender cada mensaje que se
desprende del hablante. Dostoievski convierte este acto en una sustancia viva y las visibiliza;
las voces hablan, generan interés y provocan respuestas. Los roles de activo-pasivo
representan una comunicación lingüística que pregunta y responde. Para Bajtín, escuchar y
comprender, ya es considerado como una respuesta.

El arte en sí mismo, habla. No sólo porque se le otorgan significados que rodean cualquier
esfera comunicativa, sino también porque habla a través de lo que la sociedad calla. Este
rasgo presente en la naturaleza discursiva y en toda teoría estética, es un contrato de
comunicación y también de intercambio verbal, es decir, cada sujeto discursivo porta un
campo inacabado de sentidos y significados sociales que reflejan el sentido real de cada clase
y de cada época.-

Otro aporte que realiza Bajtin acerca de la novela polifónica de Dostoievski tiene que ver
con la conformación del héroe:

Mijael Bajtin en esta ocasión, hace referencia a la presentación de la crítica sobre la novela
polifónica de Dostoievski. para ello, despliega la teoría de distintos autores a los que irá
nombrando a lo largo del texto para luego refutarlos y dar su argumento. Estas teorías giran
en torno a la problemática que se presenta a la hora de definir la pluralidad de voces en los
textos en Dostoievski en tanto discursos ideológicos propios de cada personaje. La mayoría
de estos críticos tienen una pequeña proximidad pero siempre concluyen en la estructura
típica de la novela común. sin tener en cuenta la otredad y su conciencia.
Varios teóricos encuentran que en la novela de Dostoievski coexisten un conjunto de
construcciones filosóficas incluidos los pensamientos del mismo autor. De manera que en sus
obras la voz del autor se funde con la voz de algunos de sus héroes.
Para otros críticos, esa voz representa una síntesis de todas las voces ideológicas y para otros
la voz del autor se pierde en las voces ideológicas.
Bajtin, postula que el héroe en Dostoievski posee una autoridad ideológica independiente. Es
decir, que el héroe en las novelas de este autor, es también un autor que plasma sus
sentimientos e ideologías.

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