LA INAPLICACIÓN DEL INSTITUTO JURIDICO-PENAL DE LA «AUTO-

PUESTA EN PELIGRO» EN CASO DE LA DISCOTECA DE LOS OLIVOS

DEL 22 DE AGOSTO 2020

Por: Alonso R. Peña Cabrera Freyre

£ Se dice que la «auto-puesta» en peligro, importa aquella manifestación -

libre y voluntaria- de la víctima, de colocarse conscientemente en una
situación de franco riesgo (no permitido) para con sus bienes jurídicos
fundamentales (v. gr., la vida, el cuerpo y la salud), lo que incide en
exonerar de responsabilidad penal al agente que produjo de manera causal
el resultado lesivo. Se dice pues que nadie tiene porque responder por los
defectos de otros, a menos que tengas la calidad de "Garante".

Se diría por tanto, que estos jóvenes irresponsables que acudieron

deliberadamente a la fiesta tumultuosa ("RESTOBAR") del sábado 22 de
agosto del 2020, donde tuvo como saldo fatal la muerte de 13 personas, al
haber formado parte de una reunión de por sí -altamente riesgosa-
(contagio del "COVID - 19"), liberan de responsabilidad penal los
organizadores y promotores de esta fiesta "clandestina", por las evidentes
infracciones a las normas de cuidado sobre la materia-, ello inaceptable
desde todo puto de vista.

Estos jóvenes irresponsables (inmaduros) transgresores de la norma -

Decretos Supremos), asumieron libre y voluntariamente, la posibilidad de
contagiarse de esta letal enfermedad (han de responder por los delitos
contra la "Salud Pública" aplicables; no usaron mascarillas y no
respetaron el distanciamiento social), mas no asumieron libre y
responsablemente- la posibilidad de morir por asfixia (literalmente
aplastados), ante la ocurrencia de un suceso generador de tal resultado.

Por consiguiente, no se puede alegar válidamente en el presente caso, que

la realización (libre) de una libertad restringida por la pandemia, pueda ser
empleado como un argumento admisible (auto-puesta en peligro) de estos
individuos, para pretender liberar de responsabilidad penal por homicidio
y lesiones dolosas a los promotores (organizadores) de dicha reunión
social, máxime si ellos tienen la condición de "Garantes" sobre los bienes
jurídicos de los participantes; tampoco como fundamento para atenuar el
reproche de culpabilidad de estos agentes, tal como sucedió en el caso de
UTOPÍA en el año 2002. Esto importante, a fin de dar un mensaje de
dureza punitiva, a estos agentes inescrupulosos, que no dudan en poner
en riesgo la vida, el cuerpo y la salud de los ciudadanos, con tal de obtener
ganancias económicas, más reprobable en el contexto actual que vivimos.