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P.N.P.

POLICÍA NACIONAL DEL PERÚ

ESCUELA DE EDUCACIÓN

SUPERIOR TÉCNICO

PROFESIONAL

PNP-PUNO

ASIGNATURA:

DOCENTE:

ALUMNO: CALCINA ARENAS ROY RANDY

MACHACA CALCINA CESAR EDWIN

MAMANI CONDORI DENNIS V.

PAXI NAVARRO DAISIR YONATAN

FLORES GERONIMO WILMER

BATALLON: II SECCION: 4ta

PUNO-PERU

2018

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DEDICATORIA
El presente trabajo de investigación está
dedicado en especial a mis familiares en
general, quienes con su apoyo
desinteresado me impulsan a lograr
nuestras metas en nuestra vida
académica y a las personas que con su
conocimiento brindado me ayudaron a
lograr recaudar la mejor información
posible.

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ÍNDICE
DEDICATORIA ....................................................................................................... 2

INTRODUCCION ................................................................................................... 4

CAPITULO I ........................................................................................................... 5

DELITOS CONTRA LA SEGURIDAD PÚBLICA .................................................... 5

DELITOS DE PELIGRO COMUN ........................................................................... 5

1.1 DELITOS CONTRA LA SEGURIDAD PUBLICA .............................................. 5

1.1.1 CONCEPTO DE SEGURIDAD PÚBLICA...................................................... 5

1.1.2 CONCEPTO DE DELITOS DE PELIGRO COMÚN....................................... 6

1.2 DESARROLLO DEL TIPO................................................................................ 6

1.2.1 DELITO DE PRODUCCIÓN DE PELIGRO COMÚN CON MEDIOS

CATASTRÓFICOS ................................................................................................. 6

1.2.2 DELITO DE CONDUCCIÓN EN ESTADO DE EBRIEDAD O

DROGADICCIÓN. ................................................................................................ 11

1.2.3 DELITO DE ESTRAGOS ESPECIALES. .................................................... 15

1.2.4 DAÑOS DE OBRAS DESTINADAS A LA DEFENSA COMÚN. .................. 17

1.2.5 FABRICACIÓN, SUMINISTRO Y POSESIÓN ILEGÍTIMA DE BOMBAS,

ARMAS Y MUNICIONES. .................................................................................... 19

CONCLUSIONES................................................................................................. 26

BIBLIOGRAFIA .................................................................................................... 27

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INTRODUCCION

El delito de peligro común se encuentra contemplado dentro de los delitos contra


la Seguridad Pública, en donde se afecta la tranquilidad y normal
desenvolvimiento de la sociedad debido a actos que van a perturbar la
tranquilidad y poner en peligro tanto los bienes materiales como la integridad
física de las personas.

El peligro común es el que afronta la comunidad en un momento dado como es


el caso de producirse un incendio, explosión, liberación de cualquier clase de
energía, o cuando la paz y la tranquilidad se ve alterada por un hecho de tránsito
en estado de ebriedad, o cuando la sociedad se ve amenazada por la ilegalidad
de la fabricación, suministro y posesión ilegitima de bombas, armas y
municiones.

Por ello para la mayoría de los estudiosos resulta fundamental que el análisis
de estos tipos penales deba enmarcarse en el ámbito de los peligros
presentados en una sociedad moderna como la que actualmente vivimos y en
las manifestaciones sociales que en el futuro se presentaran.

La idea de peligro en estos tipos no se refiere desde luego a una relación


individual de interés personal, sino al amplio concepto del peligro general que la
doctrina ha entendido con la designación de peligro común. Basándose en
“una sociedad de riesgo” que se caracteriza principalmente por una carencia,
en la posibilidad de preveer externamente las situaciones de peligro, es decir,
peligro entendido como el de no poder evitar efectos dañinos de la producción.
Pero esto significa que las fuentes de peligro ya no están en la “ignorancia” sino
en el “saber”, ni en un dominio deficiente de la naturaleza, sino en el
perfeccionado, ni en la falta de acción humana, sino precisamente en el sistema
de decisiones y restricciones.

De manera que podemos decir, que la plataforma de un Estado Social y


Democrático de Derecho, al derecho penal le corresponde la tarea de prevenir
todos aquellos riesgos que amenazan a los bienes jurídicos protegidos.

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CAPITULO I

DELITOS CONTRA LA SEGURIDAD PÚBLICA

DELITOS DE PELIGRO COMUN

1.1 DELITOS CONTRA LA SEGURIDAD PUBLICA

Las legislaciones penales protegen la seguridad general y común ante la


amenaza de quien cuenta y tiene a su alcance y dominio el medio idóneo para
hacer efectivo un evento lesivo a esa seguridad, en tanto el Estado, que detenta
el monopolio de luso de la fuerza pública, debe evitar el acaecimiento de
cualquier acto contrario a la seguridad pública.
La seguridad pública se define desde una óptica dual: objetivamente, consiste
en el conjunto de condiciones garantizadas por el Derecho, con miras a la
protección de los bienes jurídicos; en tanto que desde una faz subjetiva es el
estado de un grupo social protegido por el orden jurídico

De allí que los delitos contra la seguridad pública son aquellos que generan una
situación de peligro respecto de otros bienes jurídicos respecto de cuya
integridad debe velar el Estado.

1.1.1 CONCEPTO DE SEGURIDAD PÚBLICA

La seguridad pública puede definirse desde el punto de vista objetivo y


subjetivo. Objetivo es el conjunto de condiciones garantizadas por el Derecho,
con fines de protección de los bienes jurídicos considerados in abstracta e
independientemente de la persona de su titular. Implica la protección de las
agresiones directas a los bienes indeterminados como la vida o la propiedad,
esto es, una amenaza un riesgo que crea un real circunstanciado peligro para
personas y bienes. Esta es la forma de seguridad, protegida en el presente
rubro.

Subjetivo es el estado de un grupo social protegido por el orden jurídico. Los


delitos que consideramos se caracterizan por lesionar preponderantemente la
seguridad pública, por lo general, a través de la puesta en peligro de otros

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bienes jurídico. Pachecoindica que viene a ser la protección que en sentido lago
brinda el derecho penal, a la sociedad en general. Todos los tipos de nuestro
código penal, cumplen esta función. Esta forma de seguridad considerada
como sentimiento, opinión o juicio es vulnerada por todos los delitos de manera
directa, pues cuandoquiera que se cometa un homicidio, un robo, una calumnia,
etc., la generalidad de los ciudadanos experimentan el temor de que el hecho
respectivo se repita en perjuicio de cualquiera de ellos o de las personas que
les son requeridas, si se les deja impune.

1.1.2 CONCEPTO DE DELITOS DE PELIGRO COMÚN

La idea de peligro en estos tipos no se refiere desde luego a una relación


individual de interés personal, sino al amplio concepto del peligro general que
la doctrina ha entendido con la designación de común peligro1.
El peligro común es el que afronta la comunidad en un momento dado como es
el caso de producirse un incendio, explosión o liberación de cualquier clase de
energía.
En esencia, el peligro constituye un juicio sobre una situación real, que debe
efectuarse en el momento de la ejecución. Este juicio de peligro es siempre un
juicio ex ante que prescinde, de los factores reales que no son reconocibles
desde un determinado momento en el tiempo. Si ex post todas las condiciones
resultan posibles de abarcar visualmente, la lesión es segura o queda excluida
totalmente.

1.2 DESARROLLO DEL TIPO

1.2.1 DELITO DE PRODUCCIÓN DE PELIGRO COMÚN CON MEDIOS


CATASTRÓFICOS

a) Descripción Típica
El Artículo 273 del Código Penal Dice:

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Bayardo Bengoa. Fernando. Derecho Penal Uruguayo, Tomo V Parte Especial, Volumen II, ED. M.B.A
Montevideo , 1966, p. 195

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“El que crea un peligro común para las personas o los bienes mediante
incendio, explosión o liberando cualquier clase de energía, será reprimido
con pena privativa de libertad no menor de tres ni mayor de diez años”.

En una sociedad moderna, caracterizada por innumerables riesgos, se


identifican ciertos elementos, sustancias y energías, que son peligrosos
en merito por su propia naturaleza, de modo que su empleo, utilización y
manipulación requieren de una extrema diligencia, sabedores que su uso
indebido puede provocar estragos de gran magnitud. Por eso se perfila
toda una normativa dirigida a regular el uso de sustancias y/o elementos
peligrosos, que quienes, por su oficio, cargo o función tienen que ver con
su aprovechamiento.
Hablamos entonces, de que el derecho positivo ha de encaminarse a
reglar, no solo la forma específica, a quienes realizan actividades de
riesgo, sino a todo individuo que en su quehacer cotidiano ha de manipular
estas clases de energías; que en tal sentido, las normas jurídico-penales
se orientan a prevenir aquellos “peligros” que tengan como origen un
incendio, explosión, o ante liberación de cualquier clase de energía.
El delito de peligro por medios de incendios o explosión ha sido
considerado por nuestro legislador como es, un típico” delito de peligro
común” a razón que se describen conductas que generan un riesgo de
afectación a determinados bienes materiales que pueden destruirse,
sobre todo a las personas.
Ahora bien, el delito de peligro por medios de incendios o explosión
contempla una situación de peligro objetivo, es decir de peligro concreto
y común en cuanto exista la exigencia de que los bienes deben haber
sufrido realmente un peligro, como por ejemplo en el caso de un incendio,
deberá distinguirse el fuego simple y aquel que potencialmente pueda
perjudicar a las personas, y a sus patrimonios. Diremos que la sola
creación de un peligro no resulta suficiente dato, a saber, para proceder
a la incriminación, al requerirse acreditar que algún bien y/o persona fue
colocada en una situación de alta probabilidad de lesión; de no será así,
la conducta no será abarcada por el radio de acción de la norma, por
términos de estricta imputación objetiva.

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Es Circunstancia Agravante Cuando en el Artículo 273º Concurre


Cualquiera de las Siguientes Circunstancias:
1. Si hay peligro de muerte para las personas.
2. Si el incendio provoca explosión o destruye bienes de valor científico,
histórico, cultural, religioso, asistencial, militar o de importancia
económica.
3. Si resultan lesiones graves o muertes y el agente pudo prever estos
resultados.
 La pena será privativa de libertad no menor de seis ni mayor de quince
años.

b) Modalidad Típica del Delito de Producción de Peligro Común con


Medios Catastróficos

El tipo penal describe que el comportamiento consiste en crear peligro


para las personas o bienes mediante los siguientes supuestos.

a) Incendio.- incendiar equivale a poner fuego a una cosa que no está


destinada a arder, con el resultado de la destrucción o menoscabo de
la misma; sin embargo, para los alcances del tipo pena, no es
necesario que la cosa se consuma entre llamas, bastara con que
comience a arder, con peligro de que el fuego se propague y pueda
alcanzar personas y otros bienes.
Dicho lo anterior, para que exista un incendio punible, resulta
indispensable que se haya producido una amenaza concreta y actual,
de que pueda alcanzar a bienes indeterminados con aptitud de lesión
y, que la misma haya sido agregada por la acción u omisión de un
individuo concreto, descartándose aquellos incendios que aparecen
por obra de la naturaleza.
Como ilustración, de la persona que quema papeles en la chimenea
de su casa, prende la cocina o incendia parvas en campo de su
propiedad, habitaciones suyas desocupadas, y aun cuando haga
explotar sustancias explosivas o queme combustible no comete el
delito porque usa objetos propios, y que por lo tanto no ocasionan
perjuicio, no daña a nadie ni pone en peligro a ninguna persona o bien.
El fuego constitutivo debe transcender un determinado espacio físico,
para poder cumplir con la exigencia normativa.

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Prender fuego en un lugar abarrotado de personas (discoteca,


restaurantes, plazas, parques, lugares públicos,) donde la creación de
peligro concreto, pueda abarcar un riesgo para la integridad de un
número indeterminado de bienes y personas y, si las llamas producen
visibles afectaciones a la integridad física, habrá un concurso ideal,
siempre que el riesgo coloque en peligro la seguridad de otras
personas.

b) Explosión o liberación de energía.- la “explosión” es la acción de


reventar con estruendo, un cuerpo continente, por rebasar los límites
de las resistencias de sus paredes el esfuerzo producido por la
dilatación progresiva, unas veces, y otras, por la súbita
transformación en gases del cuerpo contenido.

Por su parte la liberación de energía debe entenderse como la


liberación súbita (instantánea) y violenta de energía, cualquiera que
fuere su fuente o mecánica: combustión (pólvora), comprensión
(vapor), percusión (nitroglicerina), transformación (mezcla de ácidos),
no puede entenderse energía desde una acepción formal, sino
jurídicamente, como todo elemento (químico, gaseoso, liquido),
susceptible de poder afectar el organismo humano.

Se expande deliberadamente sustancias toxicas, corrosivas, en


cantidad suficiente, para poder crear ese estado de peligro común,
que se requiere para configurar la realización típica.

En la explosión, la acción es la de crear un peligro común, para un


número indeterminado de bienes y/o personas, sino seda la dicha
condición, la conducta es sustraída del ámbito punición.

Aspecto importante a saber, es que la explosión debe ser de suficiente


magnitud como para crear un peligro común, si aquella solo denota
de manera tenue, no podría crearse situación de riesgo, que el
legislador establece como circunstancia determinante de tipicidad
penal.

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Una parte de la doctrina refiere que lo que caracteriza a la explosión


es la fuerza expansiva, asimismo, hay que distinguir el estallido que
produce un estruendo, sin peligro común, de la verdadera y propia
explosión. El ruido, en este cado puede tener por finalidad festejar o
conmemorar acontecimientos, como ser los festejos de fin de año u
algún acontecimiento patrio, con salvas de artillería, son las
finalidades así como el nivel de la detonación, que determina su
irrelevancia jurídico penal.

La consumación ocurre cuando se produce la explosión que ha


creado el peligro común; la explosión que se ha producido sin crear
ese peligro, detendría el hecho de tentativa, lo cual no resulta
admisible dada la naturaleza de estos injustos, que al ser de manera
activa, impiden valorar como delito tentado, actos muy anteriores, que
no cuentan con una peligrosidad objetiva suficiente.

Las detonaciones que toman lugar como consecuencia de


detonaciones de dinamita u otros materiales, es también un medio
empleado por las organizaciones terroristas, que para poder alcanzar
sus propósitos delictivos; de generar zozobra y pánico en la población,
destruyen propiedades y matan a personas inocentes. En tal
entendido, dichos hechos están consumidos en el delito de terrorismo
debiéndose descartar la figura del concurso delictivo.

Ejemplos del Delito de producción de peligro común con medios


catastróficos:

 Una explosión que dejo 7 heridos en un incidente ocurrido en una


pollería Huaracina, perteneciente a la región de Ancash, el incidente se
dio cuando un trabajador encendió el horno con ron (material altamente
inflamable), ocasionando la inmediata explosión al hacer contacto con
el fuego, provocando este hecho lamentable a los comensales.
 Una gran alarma se llevaron unos 30 clientes de un restaurante
ubicado en distrito de san Miguel, cuando se produjo un incendio al
parecer producto de una mala manipulación de una caldera de aceite,
cuando los comensales almorzaban, para lo cual fue necesaria la

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presencia de seis unidades de bomberos, cabe señalar también que


dicho local no contaba con licencia de funcionamiento, ni con los
elementos de seguridad respectivos (extintores), a causa del incendio
el flujo vehicular en la A.V. La Marina se vio afectado, pues la humareda
complico la libre visión de los conductores que circulaban por la ruta, lo
cual tuvieron que bajar la velocidad ya que el humo obstaculizaba la
visión.
 Otro caso es el la discoteca UTOPIA, que no contaba con licencia de
funcionamiento, ni con elementos de seguridad y evacuación. Motivos
por lo cual en un show de inauguración, se originó un incendio debido
a la mala manipulación de objetos y o material inflamable, el hecho se
inició cuando un discjockey del local inició un show lanzando fuego por
la boca. Al rato, el fuego llegó al techo, y las llamas comenzaron
propagarse por las cortinas y el piso del local, hechos de material
inflamable, causando un gran incendio que ocasiono la muerte de 24
jóvenes.

1.2.2 DELITO DE CONDUCCIÓN EN ESTADO DE EBRIEDAD O


DROGADICCIÓN.

a) Descripción Típica
El Artículo 274 del código Penal Peruano dice:

“El que encontrándose en estado de ebriedad, con presencia de alcohol


en la sangre mayor de 0.5 gramos-litro, o bajo el efecto de drogas
psicotrópicas o sintéticas, conduce, opera o maniobra un vehículo
motorizado, será reprimido con pena privativa de libertad no menor de 6
meses ni mayor de 2 años o con prestación de servicios comunitarios de
52 a 54 jornadas e inhabilitación conforme al art 36, inciso 7.
Cuando el agente presta servicios de transporte público de pasajeros,
mercancías o carga en general, encontrándose en estado de ebriedad,
con presencia de alcohol en la sangre en proporción superior de 0.25
gamos-litro, o bajo efecto de drogas toxicas, estupefacientes, sustancias
psicotrópicas o sintéticas, la pena privativa de libertad será no menor de

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1 ni mayor de 3 años con prestación de servicios comunitarios de 60 a


140 jornadas e inhabilitación conforme al artículo 36, inciso 7”.

Las pistas y carreteras del país presentan un panorama desgarrador,


producto de las víctimas que día a día cobran las impericias y/o
negligencias de los conductores, que en estado de ebriedad o bajo el
efecto de sustancias psicotrópicas, causan la muerte de miles de
peruanos, enlutando a numerosas familias, que acongojados, demandan
una respuesta enérgica por parte del estado.

Es preocupante ver como un gran número de conductores, conducen sus


vehículos automotores de forma temeraria, sea por manejar influenciados
por el alcohol o sustancias psicotrópicas, por conducir a gran velocidad o
sin tomar las medidas de precaución necesarias; no se toma conciencia
de que un vehículo automotor es un instrumento de riesgo para dichos
bienes jurídicos-fundamentales.

A esta “sociedad de riesgo”, como se ha denominado doctrinariamente,


importa una descripción del estado actual de las cosas, donde la
conducción en estado de ebriedad se ha convertido en algo latente para
los bienes jurídicos más apreciados, como la vida y salud, se ven
constantemente en peligro, ante estos focos visibles de riesgos, que
enrostran una sociedad determinada al fatalismo y al desprecio sobre
dichos bienes jurídicos.

Un estado de derecho supone que la actuación de los ciudadanos debe


someterse estrictamente a los roles que las normas imponen al respecto,
es decir los preceptos jurídicos contienen modelos valiosos de conducta,
cuya finalidad es de proteger preventivamente bienes jurídicos; cuando
los individuos desobedecen dichas normas, provocan una legitima
defraudación a todos los comunitarios, convalidando la reacción
inmediata de los medios de control social –formales-, entre estos, el
derecho penal ocupa el sitial privilegiado, no solo de sus efectos
preventivo-generales, sino también por el despliegue de efectos
sicopedagógicos en la población.

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Cada vez que se presentan hechos de sangre, luctuosos por general, se


desencadena una especie de “acción -reacción”, el primero representado
por actos que causan pavor a la sociedad y, el segundo, definido por la
actuación del legislador, quien perfila su rol promotor y sancionador de la
normatividad, a través de la reforma continua de la ley penal. Nadie tiene
duda, que el derecho penal haya de cumplir un rol fundamental, en aras a
intensificar la protección jurídica de los bienes jurídicos fundamentales,
nuestros reparos se conducen en otro sendero, en el sentido que no se
puede atribuir únicamente al iuspuniendi estatal, la misión de prevenir esta
clase de conductas disvaliosas, sabedores que estos comportamientos
(conducción en estado de ebriedad), obedecen a factores socio-
culturales, de idiosincrasia de la colectividad. Nada cuesta elegir
racionalmente, de que cuando se ingiere alcohol simplemente no se
conduce, más el arraigo de ciertas costumbres en la sociedad, determina
una conducción contraria.

Es de verse que los vehículos automotores son considerados como un


“bien riesgoso”, como una actividad jurídicamente-aprobada, siempre y
cuando se conduzca conforme a los parámetros normativos establecidos.
Fue así, que el legislador penalizo, en el artículo 274º del código penal la
conducta in examinie, sobre el pronóstico de generalidad, de que el
individuo, que consume una dosis significativa de alcohol, pierde de forma
notable sus facultades psicomotrices, debilitando sus posibilidades de
“controlabilidad” y de “dominabilidad”, de un riesgo presunto para los
bienes jurídicos “personalísimos”, sin necesidad de que haya de
verificarse una lesión o concreta puesta en peligro de dichos intereses
jurídicos, a diferencia de los tipos penales de homicidio y de lesiones.

b) Configuración Típica del Artículo 274 del Código Penal


La conducta típica está regulada por dos elementos concurrentes.

1. El sujeto activo,tendrá que encontrarse en estado de embriaguez-en


proporción mayor de 0.5 gramos-litro- o bajo los efectos de
estupefacientes, de ahí que se diga que ese delito sea considerado de
nano propia o de carácter especial.

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2. En dicho estado de embriagues debe estar conduciendo, operando o


maniobrando un vehículo motorizado, instrumento, herramienta u otro
análogo. Por “conducir” debe entenderse como el traslado de un
vehículo de un lugar a otro, manejando sus mecanismos de impulso y
dirección, y que el desplazamiento se produzca gracias al impulso de
un motor.
Ejemplos del delito de Conducción en Estado de Ebriedad o
Drogadicción:
 La ex Miss Perú María Jimena Elías Roca fue detenida luego de
chocar el auto que conducía en aparente estado de ebriedad contra
tres vehículos del Serenazgo de Surco, a la altura de la cuadra 39
de la avenida Aviación. Al parecer, la también modelo había salido
de una fiesta junto a una amiga.
 Un cuádruple choque se produjo esta madrugada en la intersección
de las avenidas primavera y El Polo, en Surco. El accidente fue
causado por una camioneta gris, cuyo conductor estaba
aparentemente en estado de ebriedad. Él no frenó cuando el
semáforo se encontraba en color rojo, por ello impactó por detrás a
otros dos autos que esperaban para cruzar y a un cuarto que, por la
fuerza del golpe, también resultó dañado.
Sin embargo, el chofer de la camioneta gris no era el único ebrio,
pues también lo habría estado su acompañante. Se trata de una
mujer que no quiso identificarse, pero además se negó a pasar el
dosaje etílico e incluso intentó agredir a un policía.
 Un chofer de moto taxi en estado de ebriedad atropelló en Comas a
una anciana identificada como Milagros Valdeón y en vez de
prestarle ayuda, decidió darse a la fuga. Pero el colmo de la
desfachatez, fue que el moto taxista negó luego haber atropellado
a la anciana. Pese de haber sido captado por una cámara de
televisión intentando huir, del lugar de los hechos.2
 Otro ejemplo del delito de conducción de vehículo en estado de
ebriedad seria el nuevo caso de la cantante vernacular Abencia

2
Diario el Comercio.

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Mesa, que fue captada por las cámaras de televisión manejando su


automóvil en estado etílico.

1.2.3 DELITO DE ESTRAGOS ESPECIALES.

a) Descripción Típica

El Artículo 276 del Código penal Peruano dice:

“El que causa estragos por medio de inundación, desmoronamiento, o por


cualquier otro medio análogo, será reprimido conforme a la pena señalada
en los artículos 273º y 275º según el caso”.

El legislador ha extendido toda la red de punición, a cuatro conductas que,


por su disvalor puede generar un peligro común hacia las personas o las
cosas o ante determinado resultado cuyos efectos perjudiciales pueden
provocar riesgos inminentes hacia los intereses jurídicos mencionados.

¿Qué debemos entender por “estragos”? Importa la acusación de daños


destrucción de viviendas, puentes, pistas, así como toda afectación
visible, cuya intensidad determina una situación de real peligro para los
intereses jurídicos fundamentales. Desde el punto de vista legal MANZINI,
lo define como un resultado dañoso que afecta colectivamente con efectos
extraordinariamente graves o complejos y amplios, las cosas y personas
amparadas por la ley, produciendo conmoción pública. Quiere también
decir, ruina, daño, asolamiento.

El “estrago” tiene que haberse producido como consecuencia de


inundación, desmoronamiento, derrumbe o cualquier otro medio análogo,
cualquier medio susceptible de provocar el estado de cosas, que recoge
el legislador como condición de punición, de manera que el análisis a de
tomar lugar en concreto.
La “inundación” supone un evento, que por lo general toma el lugar como
producto de lluvias intensas permanentes o torrentes intensos de agua,
que inundan los suelos y todos aquellos espacios físicos adyacentes, que
en cierta magnitud puede generar daños de escala insospechada.

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Es diferente, anota FONTAN BALESTRA, que el agua provenga de


causes naturales o artificiales, como también que se extienda en forma
rápida, violenta o lentamente; lo que importa para configurar el delito, es
que las aguas crean un peligro común para las personas o los bienes.
Debe descartarse toda inundación que se genera por obra sola de la
naturaleza, en este caso, PARA PODER ESTAR ANTE EL INJUSTO,
AQUELLA DEBE HABER SIDO PRODUCIDA POR OBRA DEL HOMBRE
INTENCIONALMENTE.
El “desmoronamiento” significa deshacer algo, la caída súbita de ciertos
objetos, el desmoronamiento de piedras de un cerro, así como ciertas
piezas de una construcción.

El “derrumbe”, por su parte, implica la ruina de una construcción. Debe


tratarse de un edificio, de una construcción solida de materiales, de
madera, de hierro, etc. Es indiferente que el edificio este destinado a
vivienda, oficina, depósito, etc. O como que este habitado o deshabitado
porque la tutela es la seguridad común, y no a la de un número más o
menos determinado de personas. No es necesario que el derrumbamiento
sea total basta que sea parcial, siempre que coloquen en peligro los
bienes o las personas.

Es preciso distinguir el caso del sujeto, que sin peligro para nadie
derrumba su propia casa aislada de toda vecindad, como aquellos
derrumbes que ocasionados mediando los medios, que aíslan al colectivo
de todo peligro.

En lo concerniente a las formas de imperfecta ejecución, es de verse que


la perfección delictiva se alcanza-en estos casos-, cuando la inundación,
desmoronamiento y/o derrumbamiento ocasionan estragos, es decir,
daños destructivos que a su vez genere un peligro común hacia las
personas o cosas. Si acontecen lesiones, y/o muertes, como
consecuencia directa del estrago, habrá un concurso delictivo con los
tipos penales delictivos de lesiones y homicidio.

La tipicidad subjetiva del injusto, es exclusivamente dolosa, conciencia y


voluntad de realización típica; quien se presenta el riesgo creado por su

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conducta, al provocar una inundación y/o derrumbe, susceptible de causar


estragos, por ende, colocando en peligro intereses jurídicos importantes.

Finalmente, es de verse, que el legislador a equiparado la punición de


este injusto, conforme a las escalas penales, contempladas en los
artículos 273º y 275º del código penal, es decir, según el delito de incendio
y de formas agravadas; marco penal, que deberá ser tomada en cuenta
por el juzgador en lo que respecta a la graduación punitiva.

1.2.4 DAÑOS DE OBRAS DESTINADAS A LA DEFENSA COMÚN.

a) Descripción Tipica.

El Artículo 277 del Código Penal Peruano Dice:

“El que daña o inutiliza diques u obras destinadas a la defensa común


contra desastres perjudicando su función preventiva o el que para
impedir o dificultar las tareas de defensa sustrae oculta, destruye o
inutiliza materiales instrumentos u otros medios destinados a la defensa
común, será reprimido con pena privativa de libertad no menor de tres ni
mayor de ocho años”

Los diques, puentes, carreteras, vías de transeúnte, sistemas energéticos,


etc., constituyen obras de primer orden que permiten al Estado ejecutar
su labor preventiva, cuando toman lugar desastres naturales.
La tarea preventiva importa adoptar mecanismos de seguridad, de control
y otros, que permitan neutralizar posibles daños, de aminorar los
existentes y de proteger a la población frente a las amenazas que
aparecen con los fenómenos de la naturaleza; de ahí que se ponga en
marcha todo un plan de ejecución y de prevención, a cargo de las
autoridades estatales competentes.

Aquí la conducta se divide en dos apartados: El primer apartado del injusto


típico hace alusión a la acción de destruir o inutilizar diques u obras
destinadas a la defensa común contra desastres, perjudicando su función
preventiva; importa que dichos bienes ya no puedan ser empleados como

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mecanismos de contención o ante una merma significativa de sus


propiedades funcionales. Pero, dice GÓMEZ que no es necesario que a
consecuencia de la destrucción o inutilización se produzca el desastre.
Basta para la incriminación, que los referidos actos hayan hecho surgir el
peligro de que el desastre se produzca. Debe recordarse que las figuras
delictivas glosadas en la presente capitulación, son de peligro y no de
resultado, porque lo que interesa es la idoneidad de la acción para poder
generar el estado de riesgo, que el legislador sanciona con pena.
Si la destrucción o inutilización de las obras se efectúa sin saber que están
destinadas a la «defensa común», con la sola intención de destruirlas,
será constitutivo de un delito de Daño.
Están fuera del ámbito de protección de la norma aquellas obras, cuya
inutilización obedece a su deficiente construcción o como consecuencia
del desastre natural; la imputación que interesa es aquella que proviene
de una conducta humana generadora del daño y a su vez del peligro.
Segunda modalidad del injusto, se construye a partir de la siguiente
acción: «impedir o dificultar las tareas de defensa, sustrayendo,
ocultando, destruyendo o inutilizando materiales, instrumentos u otros
medios destina- dos a la defensa común»; dicho supuesto, cobra vigencia
fáctica cuando al agente ejecuta ciertas acciones tendientes a evitar el
normal desarrollo de las tareas de defensa, sea impidiendo el
desplazamiento de las maquinarias que se dirigen a reconstruir las áreas
destruidas, coaccionando a los trabajadores encargados de las obras, sea
amenazándolos o mediando violencia. También se presenta esta variante
delictiva cuando el agente sustrae los materiales, sea llevándolos a otro
lugar, destruyéndolos o inutilizándolos, nótese que si se advierte un
apoderamiento de un bien cuantificable en el mercado, es constitutivo
también del delito de hurto (concurso) y la destrucción de un bien, es un
delito de daños.
No sólo materiales, sino también instrumentos u otros medios pueden ser
objeto material del delito, siempre que cumplan con la finalidad: destina-
dos a la defensa común.
Las formas de imperfecta ejecución requieren de la destrucción y/o
inutilización de diques u otras obras destinadas a la defensa común, de

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que éstas pierdan su funcionalidad -total o parcial- y que ello represente


un peli- gro común; del mismo modo, que se dificulten las tareas de
defensa, ocultan- do o destruyendo materiales o instrumentos destinados
al mismo fin.

1.2.5 FABRICACIÓN, SUMINISTRO Y POSESIÓN ILEGÍTIMA DE BOMBAS,


ARMAS Y MUNICIONES.

a) Descripción Tipica.

El Artículo279 del Código Penal peruano dice:


“EL que, ilegítimamente, fabrica, almacena, suministra o tiene en su poder
bombas, armas, municiones o materiales explosivos, inflamables,
asfixiantes o tóxicos o sustancias o materiales destinados para su
preparación, será reprimido con pena privativa de libertad no menor de
seis ni mayor de quince años”.

Si vemos, por tanto, que las armas, han sido creadas para destruir al ser
humano, para aniquilarlo, su posesión, tenencia, comercialización y
elaboración, han de estar reservado a las instituciones tutelares de la
patria, a los miembros de la PNP y de las Fuerzas Armadas, así también
a los particulares, siempre que cumplan con rigor, con las exigencias
previstas en la Ley de la materia.
Debe convenirse que las «bombas, armas, municiones o materiales
explosivos, inflamables, asfixiantes o tóxicos», constituyen de por si
instrumentos riesgosos, pues su empleo puede provocar la muerte y/o
lesiones, de una o varias personas; de forma, que el Estado ha de
procurar que su posesión, almacenamiento y/o comercialización esté de
estar reservada a ciertos ciudadanos e Instituciones, como una vía
adecuada para controlar y fiscalizar su uso y empleo; evitando que
personas no autorizadas las por- ten, puesto que su posesión ilegal
implica de por sí, peligro, abstractamente considerado.
En definitiva, las armas de· fuego, bombas y otros materiales explosivos,
son susceptibles de provocar la lesión y/o la muerte de ciudadanos y, si
esto sucede, la administración de justicia ha de sancionar a los sujetos
infractores, mediante los tipos penales de Lesiones y Homicidio. No
Pág. 19
P.N.P.

obstante, advertimos que la ley penal no tiene porque esperar que


sucedan dichos resultados de disvalor, por lo que ante la procura de
reforzar la tutela jurídica de los bienes jurídicos fundamentales, es que
construye bienes jurídicos de corte supraindividual, como la «Seguridad
Pública», de cuyo cuño se protege la coexistencia pacífica de los
ciudadanos, desprovistos de toda amenaza que tienda a desestabilizar
dicha percepción socio-cognitiva.
Su fabricación y tenencia se encuentra restringida a un círculo de
personas y de instituciones, de esta forma se procura que no sean
utilizados para otros fines, que pueden poner en peligro los bienes
jurídicos fundamentales. De tal modo, que cuando se fabrica, almacena,
pro- duce o se detenta armas u otros materiales bélicos, se constituyen
en conductas típicas pues crean un estado de riesgo jurídicamente
desaprobado.

b) Verbos Típicos y Objeto Material del Delito

1. Fabricar.- Con respecto a este elemento de la cadena de delictiva


debemos precisar que la Convención lnteramericana Contra la
Fabricación y el Tráfico Ilícito de Armas de Fuego, Municiones,
Explosivos u Otros Materiales Relacionados de 1997, define en su
artículo 1 que se entenderá por fabricación ilegal "la fabricación o el
ensamblaje de armas de fuego, municiones, explosivos y otros
materiales relaciona- dos: i) a partir de componentes o partes
ilícitamente traficados; o ii) sin licencia de una autoridad
gubernamental competente del Estado Partedonde se fabriquen o
ensamblen; o iii) cuando las armas de fuego quelo requieran no sean
marcadas en el momento de fabricación”.

2. Almacenar. - Consiste en la facilitación de un espacio para el depósito


de los materiales peligrosos restringidos por Ley. Este significa que el
sujeto activo brinda un ambiente para resguardar los objetos ilícita-
mente elaborados, obtenidos o recepcionados.

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P.N.P.

3. Suministrar. - Dicho verbo rector consiste en proporcionar materia-


les peligrosos a terceros sin estar autorizado o facultado para hacer-
lo, comportamiento que hace que sea considerado como ilegal y por
ende sancionable con la rigurosidad establecida en el Código Penal.

4. Poseer. - La posesión exige un dominio o posesión permanente de


los materiales peligrosos, excluyéndose por exigencias de
razonabilidad, el uso momentáneo y necesario para conjurar un
peligro (circunstancia de necesidad apremiante). Como se puede
apreciar en cuanto a la relación que debe mediar entre los materiales
peligrosos y el sujeto activo del delito, el propio término típico poseer"
implica que el autor no ha de ser necesariamente el propietario de los
materiales peligrosos sino que basta que éstas se posean por
cualquier otro título.

Asimismo, hay que tener en cuenta los objetos calificados como


peligrosos por la ley penal, los cuales son:

1. Bombas. - En palabras de CREUS, las bombas son los continentes


de explosivos o gases que estallan por medios mecánicos
(percusión), químicos (mezcla) o térmicos (ignición por mecha);
puede tratarse de aparatos formados por la misma mezcla de las
sustancias explosivas (p.ej., bombas plásticas).

2. Armas de fuego.- La Convención lnteramericana Contra la


Fabricación y el Tráfico Ilícito de Armas de Fuego, Municiones,
Explosivos u Otros Materiales Relacionados de 1997 define por arma
de fuego en dos vertientes: i) cualquier arma que conste de por lo
menos un cañón por el cual una bala o proyectil puede ser descargado
por la acción de un explosivo y que haya sido diseñada para ello o
pueda convertirse fácilmente para tal efecto, excepto las armas
antiguas fabricadas antes del siglo XX o sus réplicas; o ii) cualquier
otra arma o dispositivo destructivo tal como bomba explosiva,

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P.N.P.

incendiaria o de gas, granada, cohete, lanzacohetes, misil, sistema de


misiles y minas.

3. Municiones.- Comprenden el cartucho completo o sus componentes,


incluyendo cápsula, fulminante, carga propulsora, proyectil o bala que
se utilizan en las armas de fuego.

4. Explosivos, inflamables, asfixiantes, tóxicos y sustancias y


materiales de producción.- Materias explosivas son las que, sin
estar contenidas en bombas, pueden hacerse estallar por cualquier
procedimiento; inflamables son las capaces de producir fuego súbito
y vio- lento; asfixiantes las que actúan letalmente sobre el aparato
respiratorio de personas o animales; tóxicas las que producen
envenenamientos de cualquier especie en ellos.

c) Derivaciones de la Tipificación del Delito de Tráfico, Tenencia y


Comercialización Ilegal de Armas en la Legislación Penal

Art. 279-A.- Fabricación, Comercialización Tenencia de Armas


Químicas.
El que produce, desarrolla, comercializa, almacena, vende, adquiere,
usa o posee armas químicas contraviniendo las prohibiciones
establecidas en la Convención sobre Armas Químicas adoptada por las
Naciones Unidas en 1992- o las transfiere a otro, o el que promueve,
favorece o facilita que se realicen dichos actos será reprimido con pena
privativa de libertad no menor de cinco ni mayor de veinte años.
Punto a saber importante, es que la contravención que se requiere, para
la configuración del presente injusto, no se refiere a la legislación
administrativa nacional sino a las prohibiciones establecidas en la
Convención sobre Armas Químicas, aprobada por las Naciones Unidas
en 1992. En principio, se sanciona a quien participa en cualquier etapa
de la cadena delictiva (produce, desarrolla, comercializa, almacena,
vende, adquiere, usa o posee) establecida por la norma penal

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P.N.P.

contraviniendo la convención sobre armas químicas adoptadas por las


nociones unidas.

Art. 279-B.- Arrebato o Sustracción de Armas de Fuego


El que sustrae o arrebate armas de fuego en general, o municiones y
granadas de guerra o explosivos a miembros de las Fuerzas Armadas o
de la Policía Nacional o de Servicios de Seguridad, será reprimido con
pena privativa de libertad no menor de diez ni mayor de veinte años.
La pena será de cadena perpetua si a consecuencia del arrebato o
sustracción del arma o municiones a que se refiere el párrafo
precedente, se causare la muerte o lesiones graves de la víctima o de
terceras personas.
El artículo 279°-B del CP, emplea en su redacción normativa, términos
propios de los delitos que atentan contra el Patrimonio, específicamente
el delito de Hurto, conforme es de verse del artículo 185° del CP.
Empero, en este caso no se protege la propiedad del Estado, puesto que
las armas, armamento y otros, pertenecen a las instituciones tutelares
de las Fuerzas Armadas y a la Policía Nacional, sino el peligro público
que toma lugar, cuando particulares y otros, despojan a los efectivos
militares y/o policiales, del arma reglamentaria. Al poseer dicho
armamento pueden acometer delitos muy graves, como terrorismo,
asaltos, secuestros, extorsiones, etc.; es decir, no es en si la sustracción
lo que determina el contenido del injusto, sino el peligro que importa
dicha tenencia ilegal, en tanto lo primero estaría abarcado por el artículo
185° del CP, a menos que concurran alguna de las circunstancias
contenidas en el artículo 186°, configurando un Concurso delictivo 3.

Art. 279-C.- Fabricación y Comercialización de productos


Pirotécnicos

El que ilegítimamente fabrica; importa; exporta, deposita, transporta,


comercializa o usa productos pirotécnicos de cualquier tipo, o los que
vendan estos productos a menores de edad, serán reprimidos con pena

3
Peña Cabrera Freyre, Alonso Raúl, Derecho Penal Parte Especial pp. 590

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P.N.P.

privativa de libertad no menor de cuatro ni mayor de ocho años y


trescientos sesenta y cinco días multa.

La pena será no menor de cinco ni mayor de diez años, si a causa de la


fabricación, importación, depósito, transporte, comercialización y uso de
productos pirotécnicos, se produjesen lesiones graves o muerte de
personas.

Art. 279-D.- Empleo, Producción y Transferencia de Minas


antipersonales
El que emplee, desarrolle, produzca, adquiera, almacene, conserve o
transfiera a una persona natural o jurídica, minas antipersonales, será
reprimido con pena privativa de libertad no menor de cinco ni mayor de
ocho años.

Art. 279-E.- Ensamblado, comercialización y utilización en el


servicio público de transporte de omnibuses sobre chasis de
camión.
El que sin cumplir con la normatividad vigente y/o sin contar con la
autorización expresa, que para el efecto expida la autoridad competente,
realice u ordene realizar a sus subordinados la actividad de ensamblado
de ómnibus sobre chasis originalmente diseñado y fabricado para el
transporte de mercancías con corte o alargamiento del chasis, será
reprimido con pena privativa de la libertad no menor de cinco (5) ni mayor
de diez (1O) años.

Si el agente comercializa los vehículos referidos en el primer párrafo o


utiliza éstos en el servicio público de transporte de pasajeros, corno
transportista o conductor; la pena privativa de la libertad será no menor
de cuatro (4) ni mayor de ocho (8) años y, según corresponda,
inhabilitación para prestar el servicio de transporte o conducir vehículos
del servicio de transporte por el mismo tiempo de la pena principal.

Si como consecuencia de las conductas a que se refieren el primer y


segundo párrafos, se produce un accidente de tránsito con

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P.N.P.

consecuencias de muerte o lesiones graves para los pasajeros o


tripulantes del vehículo, la pena privativa de la libertad será no menor de
diez (1O) ni mayor de veinte (20) años, además de las penas accesorias
que correspondan.

Art. 279-F.- Uso de Armas en Estado de Ebriedad o Drogadicción


El que, en lugar público o poniendo en riesgo bienes jurídicos de terceros
y teniendo licencia para portar arma de fuego, hace uso, maniobra o de
cualquier forma manipula la misma en estado de ebriedad, con presencia
de alcohol en la sangre en proporción mayor de O.5 gramos litro o bajo
el efecto de estupefacientes, drogas tóxicas, sustancias psicotrópicas o
sintéticas será sancionado con pena privativa de libertad no menor de
un año ni mayor de tres años e inhabilitación conforme al artículo 36,
inciso 6.

Observamos un detalle importante, según la estructuración típica, sólo


podrá ser autor de este delito, quien cuente con una licencia para
portar armas de fuego, es decir, quien no contando con dicha
autorización jurídico- administrativa, manipula un arma de fuego en
estado de ebriedad, estará fuera del radio de la norma. De forma que
este último sólo podrá ser incriminado bajo la figura delictiva, contenida
en el artículo 279° del CP.

Punto importante a saber, es que la manipulación y/o maniobra de


armas de fuego, en estado de ebriedad o bajo los efectos de drogas
tóxicas, debe tomar lugar en un «lugar público», es decir, las conductas
que se realicen en ámbitos privados, particulares, como una casa, una
oficina, etc., están fuera del ámbito de punición.

Segundo importante a saber, es que la conducta típica, debe poner en


riesgo «bienes jurídicos de terceros», si coloca en riesgo su propia
vida, el comportamiento resulta atípico, elementos de valoración que
debió ser incluido en el artículo 274°-A del CP

Pág. 25
P.N.P.

CONCLUSIONES

1. El delito de peligro común es aquella situación en la que se produce un acto


de peligro general o estado de alerta en la que se pone en riesgo una
diversidad de bienes jurídicos protegidos de una o varias posibilidades de
daño a la colectividad en general, como la integridad física de la persona la
perdida de los bienes, (que pueden ser de sus casa, establecimientos
comerciales, de asistencia, u otros) o daños de los mismos.

2. Se debe incrementar la sanción establecida en el Reglamento de Tránsito,


a fin de que, además de la inhabilitación de la licencia de conducir del
responsable, se implementen sanciones que podrían ir desde una multa o la
internación del vehículo, por un periodo de tiempo.

3. Que el delito por ser reprimido con una pena mínima, de un año, fácilmente
cae en prescripción, ya que no existe un impulso regular, al haber una
sobrecarga procesal, por lo que en muchos casos el mismo órgano
jurisdiccional que abre instrucción por dicho delitos, los prescribe de oficio.
No logrando su finalidad de represión, quedando en muchos casos impune
dicha conducta, al no condenarse dicha figura.

4. Durante el periodo 2004 y el presente año, las autoridades especiales como


la Policía Nacional y el Ministerio publico han registrado que los delitos de
peligro común prevalecen sobre la comisión de otros delitos; situación que
ha puesto a las autoridades políticas y civiles a desarrollar programas de
prevención como lo es Seguridad Ciudadana.

5. Se debería reforzar más los programas de educación en los Colegios,


Institutos, Universidades y por los medios de comunicación con relación a
los temas de Peligro Común, como son la conducción en estado de ebriedad,
uso indebido de armas para evitar que personas irresponsables porten
armas de fuego de fuego de uso militar o policial, así como conduzcan
vehículos en estado de ebriedad o efectos de drogas, creando conciencia en
las personas sobre su prevención y seguridad.

Pág. 26
P.N.P.

BIBLIOGRAFIA

1. Reátegui Sánchez, James: Manual de Derecho Penal – Parte Especial

2. Peña Cabrera Freyre, Alonso Raúl, Derecho Penal – Parte Especial, Tomo
III Lima – Perú IDEMSA 2010

3. Fontan Balestra , C. y Millan, A. Las Reformas Del Código Penal

4. Diario La Republica

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