Señor Director,

Hay una adicción fantasma que cada segundo crece exponencialmente a través del
mundo y en todas las edades, pero en especial en los jóvenes, causando diferentes tipos de
problemas psicológicos, físicos, sociales y emocionales: la adicción a las redes sociales. Según
Influencer Marketing Hub, quienes estudian el impacto global de las redes sociales, alrededor
de 330 millones de personas sufren de la adicción a las redes sociales y que el 90% de los
usuarios de estas redes son jóvenes de 18 a 29 años. Es por esto que debemos crear
conciencia de que esto es un problema serio y no subestimar el impacto negativo que está
teniendo en la sociedad. La gente debe reflexionar sobre los efectos peligrosos productos del
uso excesivo de las redes sociales y todo el daño que hacen sin que la gente se de cuenta.

La manipulación de los receptores de dopamina durante el uso de redes sociales es una

de las cosas más notables de esta adicción, posiblemente siendo una de las causas
principales. Muchas de las redes sociales usadas por los jóvenes como Instagram, Tiktok,
Youtube y Facebook están diseñadas y perfeccionadas para que ciertos comportamientos se
repitan a través de la manipulación de los niveles de dopamina, el neurotransmisor responsable
de la felicidad. Por ejemplo, acciones como los “likes” están diseñadas para elevar los niveles
de dopamina y así hacer que los usuarios se encuentren felices de usar las redes, creando
dependencias. Cuando dejan de usar las redes, los niveles de dopamina caen, lo que puede
resultar en depresión, ansiedad y un sentido de monotonía diaria, haciéndolos más propensos
a volver a las redes sociales en busca de elevar la dopamina a niveles tan altos como aquellos
causados por el uso de la cocaína. Con esto el ciclo simplemente continúa, haciendo que los
jóvenes cada vez tengan que consumir más el uso de estas plataformas y creando en ellos
comportamientos dañinos.

Esta adicción no solo afecta en el presente, sino que puede llevar a futuros miserables.
El uso excesivo de redes sociales está ligado a hacer que los jóvenes tengan todo tipo de
problemas. Por ejemplo, segun estadísticas del National Public Radio, 7 de cada 10 jóvenes
que usan redes sociales por más de 5 horas al día corren un riesgo elevado de suicidio. Esta
adicción irónicamente también trae problemas como ansiedad social al igual que aislamiento.
Los jóvenes se encuentran frente a mundos ficticios creados por otros miembros de las redes,
por lo que pueden llegar a considerar sus vidas como inferiores y así llegar a tener problemas
masivos de baja autoestima. Otros problemas como el gasto excesivo del tiempo al igual que
horarios y comportamientos de dormir deficientes también son producto de esta adicción, la
cual mucha gente tiene sin darse cuenta.

Para combatir y superar un obstáculo hay que verlo y aceptar que se encuentra frente a
nosotros. La adicción a las redes sociales muchas veces es ignorada y cuando por fin se
reconoce, se subestima el gran daño que está haciendo. Por esto se debe correr la voz al igual
que reflexionar sobre el tiempo que se gasta en estas plataformas, tiempo que se podría usar
en cosas sanas y productivas como socializar genuinamente en presencia con personas y
participar en actividades que nos hagan sentir bien. El comportamiento humano es bastante
moldeable, por lo que tenemos que asegurarnos de construirlo para el bien de una forma sana
y no dejar que fuerzas exteriores lo manipulen para sus propios usos perversos.

Fernando Aguilera Croasdaile

Estudiante universitario