EL DIFICIL ARTE DE LA COMUNICACION

UNA NECESIDAD COMPETITIVA DE LA PERSONAL DE MERCADEO,

VENTAS Y DE SERVICIO

Por: Jorge Enrique Vanegas Osorio

M.B.A. Instituto de Empresa, MADRID
ASOMERCADEO-COLOMBIA

Una faceta fundamental de la competitividad personal del: gerente, del

profesor, del político, del profesional, del instructor, del coordinador, del líder,
etc. es la de hablar con coherencia en público, uno de los más complejos retos
que debemos enfrentar en distintos escenarios y entornos, desde los más
amables, hostiles, turbulentos, desagradables, obligatorios, complejos y bajo
las más diferentes circunstancias. Es un tema que nos atañe a todos en
cualquier etapa del ciclo de la vida humana y con énfasis la gente de
mercadeo.

En el mundo de hoy quien tenga competencias y capacidades para hablar en

público tendrá notables ventajas diferenciales con los demás.
Permanentemente estamos en la actividad de hablar en público, pero nunca
medimos ni advertimos su real dimensión.
El participar y actuar en: una junta, una reunión del área de trabajo, una sesión
de clase, una conferencia, una presentación ante clientes, un informe a la
directiva, una reunión familiar, de amigos o gremial…, implican continuos retos
para los protagonistas. El saber abordar y enfrentar, integralmente, todas las
situaciones que se puedan presentar al dirigirse hacia distintos públicos, exige
unas importantes habilidades y destrezas para atender exitosamente los
desafíos que nos plantea el dirigirnos a otros.

Hablar en público no se trata, únicamente, de la expresión oral, se trata de los

gestos, la mirada, la presentación, el vestuario, y la manera de trascender de
un estado de ánimo y mental en nuestras manifestaciones. Todo es un
lenguaje, todo comunica; por lo tanto una gestión integral de nuestras actitudes
al hablar en público es la mejor carta de presentación personal para crear
impacto y despertar entusiasmo en interlocutores y auditorios a los cuales nos
debemos enfrentar, asunto definitivo en las negociaciones comerciales y en
cada visita ante el cliente.

El hacer esto bien nos lleva a vender mejor nuestras ideas, nuestra imagen,
nuestro tema, nuestros productos, y nuestra empresa. Muchas experiencias,
resultado de diferentes vivencias ante múltiples públicos y personas de
distintos niveles: sociales, profesionales y culturales, permiten plantear una
serie de recomendaciones para tan complejo arte:

 Llegar sin tensiones, serenos y positivos.

 Sonreír, generar sentimiento de empatía desde un comienzo.
 Presentarse, con el vestuario adecuado, bien combinado, con sobriedad
y distinción.
 Si hace calor, no soplar con un papel, o un abanico, porque esto acalora
más, al auditorio.
 Valorar el tema a tratar y su contenido.
 Mirar a los ojos de los interlocutores cuando les hablemos.
 Llevar un plan, por bloques, de la presentación a realizar.
 Abrir bien e impactar de entrada con lo más fuerte de nuestras ideas.
 Escuchar con atención las interpretaciones de los demás.
 No hablar mal del tema a tratar, ni del lugar donde estamos para no
condicionar negativamente al auditorio.
 Tener gestos amables, sin estridencias y que representen un refuerzo a
lo que expresamos oralmente.
 Hablar con el vocabulario apropiado, coordinar frases, vocalizar bien y en
un buen tono.
 Expresarse con un lenguaje selectivo y a la medida del auditorio. No es
lo mismo hablar a directivas y superiores que a un grupo de compañeros de
trabajo o a personas de menor nivel y desarrollo intelectual y educativo.
 Dominar y conocer el tema. Prepararse adecuadamente para lograr
persuadir a las otras personas.
 Sentir y hacer vivir el tema, el producto de nuestras ideas.
 Hablar pausadamente, con adecuada dicción y claridad.
 Callar cuando no se debe de hablar y hablar en el momento oportuno, en
el cual no se debe callar.

Es importante valorar la importancia de saberse comunicar en público y no

interponer barreras con vicios, malas costumbres, desinterés e incompetencia.
Para cualquier actividad de la vida hay que ser competitivos, y un aspecto que
mide la calidad personal es el de nuestra forma de comunicarnos. Debemos
dimensionar lo clave que es el hablar bien, presentarse bien y venderse bien.
Prosperar en este aspecto, y mejorarnos así mismos cada día, para
comunicarnos integral y coherentemente, son base de nuestro éxito y hará que
seamos mejor vistos por los demás

Nunca nuestra condición psicológica es óbice para no tratar de hacerlo o no

hacerlo bien. Es cuestión de voluntad, ganas y fortalecimiento constante de
nuestras debilidades y limitaciones. Hay que vencer el miedo y los nervios y no
ser presa de ellos. Todos podemos lograrlo, lo importante es al menos
intentarlo. En la vida profesional y, en especial, para quienes se mueven en el
mundo de los negocios, el marketing, lo comercial, la docencia, la dirección y
los servicios, es cada día más importante desarrollar la capacidad de hablar en
público, sin duda, uno de los más difíciles artes del complejo mundo de la
comunicación