Tras las
Abril , 2011
BOLETÍN DEL DEPARTAMENTO DE INVESTIGACIÓN Y EXTENSIÓN EDUCATIVA PEDRO POVEDA
La lateralidad en los
procesos de aprendizaje
¿A qué se refiere la laterali-
dad? ¿Qué importancia tiene la
lateralidad en el aprendizaje?
¿Hay diferencia en el desempe-
ño entre un niño que logra la
predominancia lateral y el que
no tiene lateralidad definida?
La etapa preescolar juega un
papel importante en la estimu-
lación de las funciones cogniti-
vas, psicomotrices y psicolin-
güísticas básicas las que permi-
tirán a los niños enfrentar los
diferentes procesos de aprendi-
zaje. Pero requieren del desa-
rrollo de algunos factores, que
deben ser estimulados desde
edades tempranas, como son el
desarrollo motor para que pue-
da realizar diferentes movi-
mientos de manera organizada
como respuesta a los diferentes
estímulos del medio, y el desa-
rrollo de la lateralidad, que
permite orientarnos en el espa-
cio y en el tiempo. Ambos fac-
tores influyen en los procesos
de aprendizaje en general como
son la escritura, lectura, ma-
temáticas, comprensión del
significado, agilidad para estu-
diar, lentitud y rapidez.
Como señalan las autoras
Condemarín, Chadwick y Mili-
cic, es importante tener en
cuenta que “la educación de las
matemáticas y el aprendizaje de
cifodieepp@gmail.com
la lengua materna o el conoci-
miento del mundo no comienza
en un determinado momento
de la vida, sino que se inicia en
forma espontánea a partir de las
primeras experiencias que cada
niño enfrenta dentro de su am-
biente”.
En tal sentido, la planifica-
ción de las diferentes activida-
des motoras permiten a los
niños tomar conciencia del
esquema corporal, es decir,
conocer las partes de su cuerpo
y del compañero, ubicar las
partes del cuerpo en sí mismo y
en el otro, ubicar los objetos
respecto al cuerpo y por ende,
tengan un mejor manejo del
espacio, de la lateralidad, de la
independización del movimien-
to, que favorecerá posterior-
mente la lectura y escritura.
La lateralidad no sólo se
refiere a la dominancia o prefe-
rencia lateral en la utilización de
la mano, sino también del ojo,
oído y pie. Y es necesario que el
niño logre tener una lateralidad
definida, ya que en caso contra-
rio, podría presentar dificulta-
des para orientarse en el espacio
(ej. uso del espacio de la hoja
para escribir, localizar las letras,
direccionalidad de las letras), en
el tiempo (ej. qué va antes y
después) y en sus procesos de
Volumen 2, Nº 1
de Poveda
aprendizajes, repercutiendo en su
desempeño académico.
Teniendo en cuenta la impor-
tancia que tiene el desarrollo de la
lateralidad, y que la lateralización
aparece entre los 3 y 6 años, aun-
que desde los 4 ó 5 años, mayor-
mente los niños dan muestras claras
de la dominancia diestra o zurda, se
hace necesario que en la educación
preescolar se tomen acciones o se
realicen trabajos orientados a refor-
zar los procesos de organización
espacial, temporal, lenguaje y di-
reccionalidad, para acompañar el
proceso hasta que consiga destreza
en el manejo de su lado dominante
con precisión, fuerza y habilidad.
Sabiendo el rol que juega nues-
tra labor en la prevención de las
dificultades en el aprendizaje de los
alumnos, los docentes estamos más
atentos al desarrollo de lateralidad
de los niños para apoyarlos. Sin
embargo, muchos años atrás esto
no era así, había mucha desinforma-
ción al respecto, a tal punto que la
zurdería se consideraba un proble-
ma y los niños zurdos eran obliga-
dos a utilizar la mano derecha.
Menos mal que eso ha cambiado,
pero no olvidemos que los zurdos
todavía tienen que adaptarse a vivir
en un mundo de diestros. Me pre-
gunto, ¿sabemos cuántos niños
zurdos tenemos en el salón?,
¿tenemos en cuenta la lateralidad
de los alumnos cuando los organiza-
mos en las carpetas para que no
tengan incomodidad al escribir?,
¿todos los alumnos se identifican
Participa con tus comentarios escribiéndonos a cifodieepp@gmail.com
con su lateralidad?, ¿cómo pode-
mos darnos cuenta de la prefe-
rencia lateral de un niño desde el
aula?
Para la lateralidad manual, se
tiene que observar qué mano
utiliza para comer, coger, sacar y
meter objetos, para pintar, dibu-
jar y/o escribir. A nivel pédico,
se tiene que observar con qué pie
patea o responde al recepcionar
una pelota, el pie que coloca en
el peldaño de la escalera para
subir o bajar, cuál apoya al saltar
en un pie. A nivel visual, en qué
ojo se coloca un tubo para ver. Y
a nivel auditivo, hacia qué lado
voltea cuando se le llama por
detrás, qué oído coloca cuando
se le pide que trate de escuchar a
través de la puerta, en qué oído
se coloca un reloj al querer escu-
char el sonido tic-tac, adivinar lo
que contiene un frasco observan-
do en qué oído se lo coloca.
No olvidemos propiciar am-
bientes enriquecedores para un
mejor desarrollo bio-psico-social
de los niños, y acompañar de
manera cercana y empática a
nuestros alumnos en todo su
proceso de aprendizaje, porque
sabemos que su desarrollo tam-
bién se favorecerá con los víncu-
los afectivos que establezcamos
con ellos.
“Si todavía no has realizado
acciones concretas para trabajar la
lateralidad con tus alumnos, es mo-
mento de empezar hacerlo ahora”.
Ps. Ingrid Jannet La Madrid Proaño
Especialidad en Audición,
Lenguaje y Aprendizaje
PARA REFLEXIONAR:
¿Te habías detenido a identi-
ficar cuántos alumnos zurdos y
diestros tienes?
¿Tomas en cuenta esta infor-
mación en el momento de rea-
lizar las tareas en clase, en
cuanto a la facilidad de acceso
de materiales y ubicación, así
como para la evaluación?
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