Está en la página 1de 28

Evaluar nuestro mundo

social
Integrantes
- Gaona Muñoz Juana Jaqueline

- Lomelí Sánchez Itzel Jackeline

- Espinosa Mojica Horacio Alberto

- Vega Espino Omar Salvador


TEMA 3 Evaluar nuestro mundo social

3.1 Cómo se forman y mantienen las actitudes

3.2 Variables del mensaje


3.1 Cómo se forman y mantienen las actitudes

Las actitudes pueden desarrollarse a partir de creencias, sentimientos y


comportamiento, por separado o en combinación.

‘un estado de disposición mental y nerviosa, organizado mediante la


experiencia, que ejerce un influjo directivo dinámico en la respuesta del
individuo a toda clase de objetos y situaciones’ (Allport, 1935, en Martín-Baró,
1988).
Las teorías clásicas de la formación de
las actitudes postularon que éstas se
aprendían de la misma forma que otras
respuestas aprendidas.

Se consideraba que las respuestas


actitudinales se reforzaban por procesos
de condicionamiento clásico e
instrumental.
Clásicamente se ha planteado que las actitudes
cumplen funciones, es decir, llenan
necesidades psicológicas.

Función de conocimiento. Mediante las


actitudes los sujetos ordenan y categorizan el
mundo de manera coherente, satisfaciendo así
la necesidad de tener una imagen clara y
significativa del mundo

Función instrumental. Las actitudes permiten


maximizar las recompensas y minimizar los
castigos, satisfaciendo una necesidad
hedónica.
Función ego-defensiva. La actitud permite
afrontar las emociones negativas hacia sí
mismo, externalizando ciertos atributos o
denegándolos.

Función valórico-expresiva o de
expresión de valores. Las actitudes
permiten expresar valores importantes para
la identidad o el auto-concepto.

Función de adaptación o ajuste social.


Las actitudes permiten integrarse en ciertos
grupos y recibir aprobación social.
Las actitudes pueden formarse por medio de
condicionamiento clásico.
Aprendizaje por medio de asociación, cuando un estímulo neutral (estimulado o
condicionado) es emparejado con un estímulo que produce de manera natural
una respuesta emocional.
condicionamiento subliminal
condicionamiento clásico que ocurre en ausencia de
conciencia de los estímulos implicados.
Condicionamiento operante
un tipo de aprendizaje en el que el comportamiento es fortalecido si es seguido
por reforzamiento y debilitado si es seguido por castigo.
Debido a que el condicionamiento clásico y la simple exposición influyen en las
emociones, contribuyen en forma más directa a moldear el componente afectivo
de las actitudes.

Pero una de las formas más poderosas en las que el componente conductual
puede moldear actitudes es por medio del condicionamiento operante.

Cuando una acción hacia un objeto es recompensada o reforzada, es probable


que se repita en el futuro.

Por otra parte, si el comportamiento no es recompensado o es castigado, son


menos probables las acciones futuras similares.
La teoría de la autopercepción sostiene que el
comportamiento causa las actitudes.
Sostiene que en lugar que las actitudes
causen el comportamiento, es el
comportamiento el que causa las
actitudes.

La teoría de la autopercepción sostiene


que cuando formamos actitudes,
funcionamos como un observador,
viendo nuestro comportamiento y luego
atribuyendo a una fuente externa (la
situación) o interna (actitud).
Las actitudes son influenciadas por cambios en la
expresión facial, movimientos de cabeza y postura
corporal.
Se relaciona con la teoría de la
autopercepción la opinión que las
emociones de las personas, y por
tanto sus actitudes, pueden
manipularse al cambiar sus
expresiones faciales, postura
corporal u otras respuestas
motoras.
Variables del mensaje

Al tratar de reforzar los argumentos


persuasivos, podemos citar hechos o
podemos difundir nuestro mensaje
con historias vívidas, y coloridas que
atraerán y mantendrán la atención de
nuestra audiencia. (Green y Brock
2000).
Al tratar de reforzar los argumentos
persuasivos, podemos citar hechos o
podemos difundir nuestro mensaje
con historias vívidas, y coloridas que
atraerán y mantendrán la atención de
nuestra audiencia. (Green y Brock
2000).
Varios factores determinan la persuasión de la fuente:

Las fuentes muy creíbles son más persuasivas, al menos al principio, que las
fuentes menos creíbles.

Las fuentes atractivas son más persuasivas que las fuentes poco atractivas.
Numerosos estudios han investigado las características de un mensaje
persuasivo, incluyendo cosas como la efectividad de usar hechos frente a
imágenes gráficas; miedo y humor; el uso de argumentos unilaterales frente a
bilaterales; el orden en que se presentan los argumentos; y el número de veces
que es repetido el mensaje.
Los publicistas usan tanto llamamientos
basados en la evidencia como
mensajes gráficos y vividos al tratar de
convencer a los espectadores de seguir
un cierto curso de acción.

Ejemplo el de disminuir accidentes por


manejar en estado de ebriedad.
Apelar al miedo facilita la persuasión si se cumplen ciertas condiciones.

Ejemplo un anuncio en contra del tabaquismo le dice como su hábito con la


nicotina acortará su esperanza de vida.

No hay duda que las apelaciones al miedo se usan con bastante frecuencia en la
persuasión

Pero funcionan?
Apelar al miedo puede persuadir de manera
efectiva bajo las siguientes cuatro condiciones.

1.- El blanco del mensaje en convencido que


los peligros mencionados son graves.

2.- El blanco es convencido que los peligros


son bastante probables

3.- El blanco es convencido que las


recomendaciones para evitar los peligros son
bastantes probables.

4.- El blanco cree que puede emprender de


manera competente la acción recomendada.
Las primeras dos condiciones en este proceso de persuasión convencen a las
personas que deberían cambiar su comportamiento, y la tercera y cuarta
condiciones les aseguran que son capaces en lo personal de cambiar el
comportamiento necesario a fin de evitar el peligro.
A veces un llamamiento alto al miedo induce tanta ansiedad que la audiencia es
incapaz de procesar con eficiencia información posterior en el llamamiento sobre
la forma de peligro.
Sugieren estudios de Christopher Jepson y Chaiken (1990). Que si un mensaje
inductor de miedo inmoviliza a su audiencia con ansiedad, pueden ser incapaces
de procesar con cuidado el contenido del mensaje concerniente a cómo evitar el
peligro.
En vez de promover un cambio saludable, el mensaje puede en cambio inducir un
sentimiento de desamparo, pueden ocurrir y ocurren cambios conductuales
importantes.

Cuando nos sentimos muy vulnerables ante alguna amenaza, con frecuencia no
analizamos de manera crítica las acciones recomendadas para evitar el peligro
(Das y De Wit, 2003).
El humor aumenta la atención al mensaje, pero
puede interferir con su procesamiento.
La investigación muestra con claridad
que usar el humor en mensajes
persuasivos incrementa la atención de
las personas al mensaje más que los
intentos de comunicación serios.
(Duncan y Nelson, 1985).

Las personas tan solo tienen más


probabilidad de escuchar a alguien que
está tratando de hacerlas reír, o al
menos sonreír, mientras trata de
persuadirnos sobre un punto de vista
particular.
Ejemplo el consumo de alcohol responsable, o tan solo alentar la elección de una
bebida alcohólica sobre otra.

Uno de los problemas con el uso del humor, sin embargo, es que puede interferir
con la compresión del mensaje por parte del oyente, al desviar la atención del
contenido persuasivo (Cantor y Venus, 1983).
Repetir un mensaje incrementa su poder persuasivo.

La repetición tiende a incrementar el grado por el producto debido al efecto de la


simple exposición.
Bibliografía

Stephen L. Franzoi. Psicología social. 4ª edición 2007.Mc Graw Gill


Interamericana. México

También podría gustarte