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¡Reflexionemos!
Ahora que ya tienes algunas nociones sobre la definición de género, realiza el siguiente
ejercicio para que rescates tu experiencia personal en relación con los estereotipos de género
que aprendiste en tu niñez y, específicamente, en la escuela:
En la escuela aprendí que las diferencias entre las niñas y los niños eran:
______________________________________________________________________.
Después de haber completado las oraciones, reflexiona en torno a las siguientes preguntas:
A lo largo de la vida, las personas aprenden a reconocerse como hombres o como mujeres
según su contexto y de acuerdo con los referentes sociales que tienen (o también pueden no
reconocerse en ninguna de las dos categorías, como es el caso de las personas no binarias) y,
con base en dicha identificación, se comportan de manera particular: se visten de cierta forma,
se relacionan mediante diferentes estrategias, realizan diversas actividades sociales, políticas y
productivas, entre otras cuestiones.
Considerando lo anterior, revisa las siguientes oraciones que indican una serie de actividades o
comportamientos que deberían realizar hombres o mujeres, indica si estás de acuerdo o no
estás de acuerdo marcando la casilla correspondiente y, finalmente, justifica tu postura:
Estoy de No estoy
Actividad Porque…
acuerdo de acuerdo
1. Las mujeres son mejores en
carreras humanistas que en
carreras científicas.
sensibles y discretas.
Las actividades y comportamientos que acabas de analizar forman parte de lo que la psicóloga
Anne Wilson (1985) denomina como “Sistema del Macho” que puede entenderse como “el
régimen en que vivimos, donde el poder y la influencia son detentados por varones …
todos[as] nosotros[as] no sólo lo permitimos suceder, sino que participamos en su desarrollo”
(p.32-33). Según esta autora, este sistema machista constituye un tipo de sociedad que
concibe a los hombres como superiores, racionales y objetivos y a las mujeres como inferiores,
irracionales y sensibles. A está configuración de formas de ser habría que agregar la imposición
de la heterosexualidad como norma, excluyendo o rechazando a las personas con otras
orientaciones sexuales. Sin embargo, esta no es la única realidad social (aunque sí es
dominante), este sistema establece una serie de normas que pueden ser analizadas y
transformadas.